El Corredor Mediterráneo - Municipalidad de Rio Cuarto

Viene de tapa
ALMENDRA
(Una fruta original)
Hacia 1965, en el Instituto
San Román del barrio de
Belgrano, dos alumnos de ese
colegio, editaban cada uno por
separado una revista. Luis Alberto
Spinetta tenía a su cargo “La costra”.
Como los dos estaban en la
misma división, surgió la idea de
unir ambas revistas. Nació así “La
costra degenerada”. Mientras
tanto, otro alumno del Instituto,
Edelmiro Molinari, estaba dos
años más adelantado que Luis
Spinetta y Emilio Del Güercio, y
su único interés pasaba por tocar la
guitarra.
Rodolfo García, en cambio,
aunque vivía a sólo tres cuadras de la casa de
Luis, no cursaba en el San Román sino en el
Industrial Manuel Belgrano de Floresta, y tocaba
la batería en un grupo que se llamaba Los
Larkins. Por esa época le presentaron a Luis,
quien al poco tiempo se integró al conjunto.
Conocieron luego a Guido Meda que tocaba el
bajo y lideraba Los Masters. Rodolfo y Luis
entraron a ese grupo, que llegó a tener varios
nombres: Los Beadniks, Los Beatniks y finalmente,
Los Mods. Por su parte Emilio había
conocido a Edelmiro, y juntos habían formado
otro conjunto, Los Sbirros, en donde también
estaban Ángel -el hermano mayor de Emilio- en
batería y Chago Novoa en teclados. Edelmiro
asistía bastante seguido a los ensayos de Los
Mods y fue así como surgió la idea de fusionar
los dos grupos con Guido (bajo), Luis (voz),
Rodolfo (batería), Edelmiro (guitarra) y Chago
(teclados). Pero Meda luego se abrió del proyecto
y entonces entró Emilio.
Esto ocurrió en 1966. Ensayaron
durante todo el año, pero en 1967 tuvieron que
parar debido a que Rodolfo (que era el mayor de
todos) debió hacer la conscripción en Río
Gallegos, Santa Cruz.
Cuando en marzo de 1968 fue dado de
baja, el grupo siguió ensayando pero ya sin el
tecladista y, luego de varias sugerencias desechadas,
con el nombre de Almendra (a todos ellos
les gustaba ese fruto). Nacía, de esta forma, uno
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de los grupos más originales que dio el rock
argentino en toda su historia.
A mediados de 1968 Ricardo Kleiman,
el famoso productor de RCA y del programa de
radio “Modart en la noche”, se presentó en uno
de los ensayos de Almendra junto al cantante del
Los In, Amadeo Alvarez. Contó Rodolfo García
sobre ese encuentro: “Eso se dio casi mágicamente,
porque nosotros fuimos a un ciclo de conciertos
que en ese momento se hacía en el Payró.
Actuaban desde Jaime Dávalos y Les Luthiers
hasta el “Mono” Villegas y la Porteña Jazz
Band. Y había un concierto de Los Gatos y después
un debate sobre la música. Y estaba
Ricardo Kleiman que en esa época hacía
“Modart en la noche”, que era el programa de
radio más escuchado, y productor de varios grupos.
Cuando terminó el debate nos acercamos a
Kleiman y le dijimos que teníamos un grupo y
que nos gustaría que fuera a un ensayo. Dijo que
iba a ir pero en el fondo no pensamos que pasara
de ahí la cosa. Pero vino a escuchar un ensayo,
y cuando terminó, dijo: ‘Bueno, ustedes van
a grabar en RCA, así que vamos a elegir un par
de temas, me tienen que decir si quieren agregar
algo, si los arreglos los hacen ustedes o quieren
que los haga otra persona. Díganme si quieren
que venga Malvicino o Alchourrón o el que ustedes
elijan’. Era el sueño del pibe. Te ofrecían
todo. Y entonces dije:¡Alchourrón! Que venga
¡Alchourrón!. También le preguntamos si no se
podían conseguir equipos para grabar porque
con los que teníamos no se podía hacer nada. Y
nos consiguió Los Fenders que habían sido de
The Tremeloes. Grabamos con esos equipos que
no sabíamos cómo manejarlos, para nosotros
era marciano eso, y así empezó todo”.
Y así, sin haber dado ningún show
hasta ese momento, Almendra entró a los estudios
de grabación. Almendra editó su primer
simple en octubre de 1968, con “Tema de
Pototo” en la cara A y “El Mundo entre las
manos” en el lado B. Fue difundido por
“Modart en la noche” y llegó al puesto número
15 en el ranking de la revista Pinap.
“Tema de Pototo” fue también grabado
por Leonardo Favio en su primer LP con el
título “Para saber cómo es la soledad”, hecho
que ayudó para que el conjunto trascendiera y se
hiciera más conocido en un circuito diferente del
de rock: “Lo escuchó mientras nosotros estábamos
en el estudio y al tiempo lo grabó. Lo que
pasó fue que el disco de él salió antes que el
nuestro”, recordó Luis.
Comenzaron entonces los shows para el
grupo: “La primera vez que salimos -dijo
Rodolfo- nos contrató un tipo de Rosario, esos
tipos que te compran cuatro salidas y te recorrés
mil kilómetros en una noche. Fuimos a tocar a
unos bailes que no te puedo explicar. Nosotros
íbamos con la candidez de Almendra, de tocar
“Figuración” con la flauta dulce y ese tipo de
cosas. Y nos tiraban de todo. Eran bailes donde
antes de nosotros tocaban grupos de ahí, del
pueblo, esos que tocan lo que venga y la pista se
llena de gente bailando. Pero para nosotros era
así la cosa: el hecho de ir a tocar a un baile no
significaba transformarnos en un grupo de baile,
subíamos a tocar lo nuestro y la gente no entendía
nada, no esperaba eso. Fue una experiencia
muy frustrante. Algo parecido pasó en nuestro
primer trabajo, que fue en Mar del Plata en
Matoko’s y también fuimos a hacer eso. Toda esa
experiencia fue bastante dura”.
Inclusive, para Spinetta esa experiencia
en Mar del Plata en enero de 1969 fue el
comienzo de su entrada en el “Clan Mandioca”:
“Todos mis proyectos, que se venían dando de
una manera contundente… se empezaron a ir al
diablo cuando Jorge Álvarez empezó a invitarme
para que me fuera de donde estaba e ingresara
al círculo Mandioca”.
En febrero de 1969 se editó el segundo
simple con “Hoy todo el hielo de la ciudad” y
“Campos verdes”, este último cantado por
García. Y en marzo viajaron a Perú, al Festival
de Ancón, donde se presentaron fuera del concurso,
actuando también en un especial para le
televisión limeña.
EL debut en Capital Federal fue el
lunes 24 de marzo de 1969 en el Instituto Di
Tella. Contó Rodolfo: “Nuestro primer concierto
fue en el Di Tella. Fue bárbaro. Hasta ese
momento nosotros éramos un grupo del cual sólo
se hablaba. Era hasta ahí la cosa. No nos habíamos
enfrentado con la gente de verdad. Fuimos
al Di Tella en la mañana a probar sonido.
Cuando nos vamos, de pasada miré la boletería
y estaba todo lleno, no se había vendido nada.
En esa época nos habíamos peleado con
Kleiman y cuando volvimos a la tarde a hacer la
función, paso por boletería y no había más
entradas. (Tendría trescientas localidades).
Tuvimos, por un lado, una cuestión de alegría.
Dijimos: “se vendió todo. No puede ser”. Pero,
por otro lado, empezamos a ponernos paranoicos.
Llegamos a pensar que las entradas las
había comprado Kleiman para boicotear el concierto.
Bueno, llegó la hora de la función y
estaba la sala llenísima e hicimos un concierto
bárbaro. Y después, a los quince días hicimos
otra función en el Teatro del Globo. De eso hay
un cassette dando vueltas” .El concierto en el
Teatro del Globo se hizo el lunes 7 de abril de
1969, y fue Amadeo Álvarez (de Los In) quien
puso un grabador de cinta abierta a un costado
del escenario. Por mucho tiempo, esa cinta estuvo
en poder de Litto Nebbia, que luego se la pasó
a Rodolfo García. Esta es la única grabación de
un recital de Almendra (de su primera época) que
se conoce. En ese recital, tocaron los temas de
los simples, “Gabinetes espaciales”, que saldría
en ese mismo abril de un LP de recopilación de
varios intérpretes (“mis conjuntos preferidos”),
algunos temas estarían en el primer LP, más otras
canciones que no grabarían nunca: “Hombre de
luz”, “Para que me sigas” (cantada por
Rodolfo), “Continuación del hielo en la ciudad”,
“Chocolate” (con la letra de Cristina
Bustamante, la novia de Luis), “Mosca Muerta”
de Edelmiro y “Vine al planeta”. El concierto se
cerraba con una versión del vals peruano de
Rosita Melo “Desde el alma”, fruto evidente de
su paso por Perú.
En junio de 1969, participaron del ciclo
“Beat Baires” en el teatro Coliseo, realizado los
domingos a la mañana junto a otros conjuntos y
solistas. Almendra tocó el domingo 22 junto a
“Engranaje” y “Los Abuelos de la Nada”. Se
editó un tercer simple con “Tema de Pototo”
otra vez pero con una novedad en el lado B:
“Final” (donde en la letra se nombraba a
Fermín); filmaron un corto en 35 mm. en blanco
y negro con los temas “El mundo entre las
manos” y “Campos verdes” para ser pasado en
cine y se presentaron en televisión en varios programas
de la época. Mientras esto ocurría,
Almendra comenzó a grabar, a mediados de
1969, su primer LP. Un volante distribuido a
principios de 1970, decía:
“A lo largo de seis meses de intenso
trabajo, de proposición total hacia lo que es
nuestro, hemos comprendido que lo que en un