11.05.2013 Views

Bon Temps - Fundación Villas del Cantábrico

Bon Temps - Fundación Villas del Cantábrico

Bon Temps - Fundación Villas del Cantábrico

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Cuaderno de Bitácora de la Asociación <strong>Villas</strong> <strong>del</strong> <strong>Cantábrico</strong><br />

Patrocinadores:<br />

Nº 1 · 2º trimestre de 2004<br />

Los estatutos <strong>del</strong><br />

Consorcio Cabo Mayor,<br />

en el BOC<br />

Antonio Longarela,<br />

presidente de STA España<br />

Todas las imágenes<br />

<strong>del</strong> fondeo <strong>del</strong> muerto<br />

El <strong>Bon</strong> <strong>Temps</strong>,<br />

protagonista en el<br />

Museo Marítimo de Bilbao<br />

y además:<br />

METEOROLOGÍA - VIAJES - LITERATURA - PASATIEMPOS - RECETAS


SUMARIO<br />

EDITORIAL ............................3<br />

EL ASTILLERO ......................4<br />

NOTICIAS ..............................5<br />

EN IMAGEN ............................................................................8<br />

HISTORIA: EL DROMEDARIO LLEVÓ EL CAFÉ A AMÉRICA ......10<br />

EL FONDEO DEL MUERTO: LAS DOS JORNADAS PASO A PASO....11<br />

METEOROLOGÍA ....................................................................12<br />

VIAJES: RETORNO AL<br />

2 Barlovento nº1<br />

MAR ROJO ............13<br />

LITERATURA ..........................................................................14<br />

GASTRONOMÍA Y PASATIEMPOS..............................................15<br />

Imagen de portada: Paz Martín Ruiz de Temiño<br />

El ‘<strong>Bon</strong> <strong>Temps</strong>’, de vuelta a Astillero un domingo de invierno.<br />

Asociación<br />

<strong>Villas</strong> <strong>del</strong> <strong>Cantábrico</strong><br />

Fundada en 2000<br />

BARLOVENTO Nº 1<br />

2º TRIMESTRE 2004<br />

Edita: ASOCIACIÓN VILLAS<br />

DEL CANTÁBRICO<br />

Colaboran en este número:<br />

Paz M. Ruiz de Temiño<br />

Eduardo Sánchez Polidura<br />

José Ramón Esquiaga<br />

Antonio Longarela<br />

Jesús Barros<br />

Pablo Gómez Agüero<br />

César Rodríguez González<br />

José Luis Gamboa<br />

Antonio <strong>del</strong> Canto<br />

Ramón Mandado<br />

Diseño y maquetación:<br />

Virginia Arraiza<br />

Imprime: AKL<br />

C/ Florida, 1. 1º izda. Santander<br />

Depósito legal:<br />

SA-524-2004<br />

El contenido de los artículos<br />

publicados en este Boletín<br />

es responsabilidad exclusiva<br />

de los autores de los mismos.<br />

Sede Social: Juan José Pérez <strong>del</strong> Molino 28A Bajo.<br />

39006 SANTANDER<br />

Dirección postal: 5025 - 39080 SANTANDER<br />

Dirección electrónica: villas@villas<strong>del</strong>cantabrico.org<br />

Internet: www.villas<strong>del</strong>cantabrico.org<br />

Teléfono: 686 765 993<br />

C.I.F.: G-39.492.897<br />

Cuota anual de socio: 72 euros (Estudiantes y jubilados 36 euros)<br />

Reuniones: jueves no festivos, de 20 a 22 h.


OPINIÓN<br />

Ganando Barlovento<br />

EDUARDO SÁNCHEZ POLIDURA<br />

Barlovento: la parte de donde viene el viento.<br />

Barloventear: arte de navegar avanzando<br />

contra el viento, o sea, ganando barlovento.<br />

Al nacer nuestra revista<br />

hemos querido dotarle de<br />

un nombre evocador <strong>del</strong><br />

espíritu de lucha que ha prevalecido en<br />

nuestra asociación, ya que desde el<br />

primer día ha navegado contra el viento,<br />

salvo contadas rachas favorables.<br />

Barlovento. Cuaderno de bitácora<br />

de la Asociación <strong>Villas</strong> <strong>del</strong> <strong>Cantábrico</strong><br />

es un nombre rotundo y simboliza ese<br />

esfuerzo realizado para que en cada<br />

singladura hayamos ido ganando barlovento<br />

para alcanzar el fin que nos<br />

hemos propuesto: el barco escuela<br />

para todos los cántabros con el que<br />

revitalizar la vocación marinera de esta<br />

tierra, pese a algunas mentes estrechas,<br />

o raquíticas, que no hacen y pretenden<br />

no dejar hacer.<br />

Para afianzar la maniobra, para<br />

alcanzar cuanto antes la meta, hemos<br />

largado una vela más -Barlovento- que<br />

además de portavoz será nuestro<br />

gallardete a todos los vientos, mascarón<br />

en el tajamar abriendo brecha a<br />

todos los rumbos, serviola de nuestro<br />

futuro y testimonio de nuestra pequeña<br />

pero brava ejecutoria. Algún día llegará<br />

en que las velas de la Sotileza se<br />

hinchen pletóricas de viento en popa,<br />

rumbo a todos los destinos <strong>del</strong> mundo;<br />

pero entre tanto hay mucho que ceñir,<br />

y tener firme en nuestras manos la<br />

rueda <strong>del</strong> timón, y culminar la orzada y<br />

llegar al fondo <strong>del</strong> éxito, que es nuestro<br />

único destino.<br />

Barlovento nº1<br />

3


OPINIÓN<br />

Astillero, puerto base<br />

Camino de los 80 años de historia, y ejerciendo cada día como<br />

buque escuela de Cantabria, el <strong>Bon</strong> <strong>Temps</strong> ha encontrado su<br />

punto de amarre en Astillero. Hay mucho de justicia histórica en<br />

ese encuentro entre uno de los últimos veleros de época y un lugar que se<br />

labró nombre y fama construyendo los mejores navíos durante la edad de oro<br />

de la navegación a vela. Quienes hoy reciben su bautismo de mar en el <strong>Bon</strong><br />

<strong>Temps</strong> buscan mar abierto dejando a popa la sombra de Peña Cabarga,<br />

siguiendo el primer rumbo <strong>del</strong> Real Felipe, <strong>del</strong> San Juan Nepomuceno y de<br />

las decenas de buques que a lo largo de trescientos años han sido botados<br />

en Guarnizo. Cada viaje de nuestro barco tiene así algo de ceremonia, de<br />

homenaje a una auténtica tierra de marinerías y, sobre todo, de agradecimiento<br />

a nuestro puerto base. Sirvan también para ello los versos que Gerardo<br />

Diego dedicó a Astillero en su libro Santander, mi cuna, mi palabra, que<br />

ponen un toque de gran literatura a este primer número de Barlovento.<br />

4 Barlovento nº1<br />

El Astillero<br />

Verde y roja la marisma.<br />

Cómo huele a mar y a hierba.<br />

Cuando la marea sube,<br />

tapias de la huerta besa<br />

Toda la melancolía<br />

de mi bahía materna<br />

se filtra entre los sillares<br />

y grietas de la escollera.<br />

Viene remando en el bote<br />

por la canal entre arenas<br />

y sosegando el compás<br />

cuando el repunte me lleva.<br />

Ya dejaba atrás dos pinos<br />

en el cielo de Muriedas<br />

y a babor me iba Cabarga<br />

ensombreciendo la estela.<br />

Al fin, hijo anfibio y ágil<br />

de atarazanas remeras,<br />

salté a la astillera rampa,<br />

calafate de leyenda.<br />

(Entre la mies y la mina,<br />

la bahía hinca una raba.<br />

Astillero de Guarnizo<br />

Botaduras de Ensenada.)<br />

Se encendía el poniente rosa.<br />

yo miro desde la huerta<br />

cómo pasa el tren torciendo<br />

su cubierta de madera.<br />

Agua malva, basa roja,<br />

corazón de la marea,<br />

que llegue siempre tu sangre<br />

hasta tus últimas venas.<br />

GERARDO DIEGO


El ‘<strong>Bon</strong> <strong>Temps</strong>’ viaja a Bilbao<br />

Los estatutos <strong>del</strong> Consorcio<br />

Cabomayor, en el BOC<br />

NOTICIAS<br />

El barco de <strong>Villas</strong> <strong>del</strong> <strong>Cantábrico</strong> se expuso en el Museo Marítimo de la capital vizcaína<br />

El <strong>Bon</strong> <strong>Temps</strong> viajó en<br />

marzo a Bilbao invitado<br />

por el Museo Marítimo de<br />

la capital vizcaína, que expuso el velero<br />

de la Asociación <strong>Villas</strong> <strong>del</strong> <strong>Cantábrico</strong><br />

junto al Saltillo, propiedad de la<br />

Escuela de Marina Civil de la Universidad<br />

<strong>del</strong> País Vasco. La presencia <strong>del</strong><br />

<strong>Bon</strong> <strong>Temps</strong> en la ría <strong>del</strong> Nervión se<br />

enmarcaba dentro de los actos programados<br />

por el propio museo y la<br />

Universidad para acompañar la firma<br />

de un convenio que vinculaba a<br />

ambas instituciones. Abarloado al Saltillo,<br />

el <strong>Bon</strong> <strong>Temps</strong> estuvo expuesto<br />

dos días -viernes 19 y sábado 20 de<br />

marzo- durante los cuales recibió la<br />

visita de todos aquellos interesados<br />

en conocer de cerca a uno de los diez<br />

veleros más antiguos<br />

de España.<br />

Durante ambas<br />

jornadas la asistencia<br />

de público<br />

fue masiva.<br />

El <strong>Bon</strong> <strong>Temps</strong><br />

había llegado a<br />

Bilbao una semana<br />

antes, después<br />

de una travesía<br />

marcada por el buen tiempo, la<br />

ausencia de viento y cierto mar de<br />

fondo. Condiciones todas ellas que<br />

echaron en falta quienes trajeron el<br />

barco de vuelta a Santander la tardenoche<br />

<strong>del</strong> mismo día 20 de marzo.<br />

Cielo encapotado, viento en contra y<br />

olas de hasta tres metros para un viaje<br />

que se hizo muy largo. Con<br />

todo, ida y vuelta sirvieron para<br />

que el buque escuela no dejara<br />

pasar el invierno sin acometer<br />

una travesía de cierta entidad,<br />

rindiendo visita a una de<br />

las villas <strong>del</strong> <strong>Cantábrico</strong> que<br />

dan nombre a la asociación. El<br />

interés que los bilbaínos mostraron<br />

por el barco durante el<br />

Pocas novedades relativas al Consorcio Cabomayor a lo<br />

largo de los últimos meses, aunque el proyecto va cubriendo las<br />

obligadas etapas burocráticas. Los primeros días <strong>del</strong> mes de<br />

abril se completarán los treinta días de plazo desde la publicación<br />

de los estatutos <strong>del</strong> organismo en el BOC, el plazo prescrito<br />

para que puedan hacerse alegaciones al mismo. Una vez<br />

cubierto ese periodo, se firmará la constitución <strong>del</strong> Consorcio<br />

Cabomayor, que estará listo para comenzar a funcionar.<br />

tiempo que estuvo atracado en los<br />

viejos muelles de Euskalduna hace<br />

pensar que serán unos cuantos quienes<br />

en próximos meses se conviertan<br />

en tripulantes de sail training a bordo<br />

<strong>del</strong> <strong>Bon</strong> <strong>Temps</strong>.<br />

Semana Cultural<br />

de Medicina<br />

<strong>Villas</strong> <strong>del</strong> <strong>Cantábrico</strong> tuvo una significativa<br />

presencia en la Semana Cultural de la<br />

Facultad de Medicina de la Universidad de<br />

Cantabria, un evento ya tradicional en el centro<br />

académico. Un taller de nudos y una salida<br />

en el <strong>Bon</strong> <strong>Temps</strong> constituyeron el núcleo<br />

de una colaboración por la que la asociación<br />

fue obsequiada con una bonita placa.<br />

Barlovento nº1<br />

5


NOTICIAS<br />

Longarela elegido por unanimidad<br />

presidente de la STA España<br />

Antonio Longarela tendrá<br />

que compaginar a partir<br />

de ahora la presidencia<br />

aquellas con minusvalías.<br />

La STI se articula en cada uno<br />

de los países miembros a través<br />

de la Asociación <strong>Villas</strong> <strong>del</strong> Cantá- de asociaciones de carácter<br />

brico con idéntico cargo en la Sail nacional, todas ellas con la deno-<br />

Training Asociation (STA) España, minación STA (Sail Training Aso-<br />

después de que la candidatura de ciation) junto al nombre de la gar a la redacción de unos estatu-<br />

consenso que encabezaba lograra nación: STA Francia, STA Austratos que han logrado su objetivo de<br />

el respaldo unánime de los asislia, STA Canadá, etc... Estas aso- unificación.<br />

tentes a la primera asamblea geneciaciones, a diferencia de una El encuentro definitivo se<br />

ral <strong>del</strong> organismo encargado de federación deportiva, incluyen produjo el pasado 30 de enero<br />

gestionar la vela<br />

en la sede de la<br />

de instruc-<br />

Real Federación<br />

ción en España.<br />

Española de<br />

Con la elección<br />

Vela, en Madrid,<br />

de la junta<br />

en el marco<br />

directiva presi-<br />

de la primera<br />

dida por Longa-<br />

Asamblea Generela<br />

se ponía fin<br />

ral de la STA<br />

a un bloqueo<br />

España, en una<br />

que mantenía a<br />

reunión que se<br />

nuestro país sin<br />

prolongó a lo<br />

la correspon- Miembros de la Junta Directiva en la recién creada STA-España<br />

largo de toda la<br />

diente<strong>del</strong>ega- jornada y que<br />

ción de la Sail Training Internatio- entre sus socios no solamente a culminó con la tradicional foto de<br />

nal, el organismo internacional que los barcos-escuela dedicados a la familia de la flamante junta directi-<br />

organiza todos los eventos depor- enseñanza de la navegación a va. En ella, además de a Antonio<br />

tivos y culturales relacionados con vela, sino que también forman Longarela, encontramos a Paz<br />

los grandes veleros y los buques- parte aquellas instituciones y enti- Martín, que también tendrá que<br />

escuela. Las grandes regatas, dades -como puertos, ciudades, compatibilizar los cargos de<br />

como la Cutty Sark o las concen- gobiernos, universidades, etc...- secretario de <strong>Villas</strong> <strong>del</strong> <strong>Cantábrico</strong><br />

traciones de veleros, son dirigidas sin cuyo apoyo sería imposible y de la STA España. En la directi-<br />

desde su sede en Inglaterra. desarrollar este deporte-cultura. va de consenso están representa-<br />

Además de su faceta organizativa, España era hasta ahora uno de los das varias ciudades y autoridades<br />

la STI promueve y difunde en todo pocos países que, a pesar de la portuarias, y también la Armada<br />

el mundo el deporte <strong>del</strong> sail trai- insistencia desde la STI, no conta- Española y la Real Federación<br />

ning o, dicho en castellano, la vela ba con su asociación nacional de Española de Vela, esta última pre-<br />

de enseñanza e instrucción: la vela de enseñanza e instrucción. A sidida por el también cántabro<br />

navegación a vela de altura abierta través de múltiples reuniones cele- Gerardo Pombo García, quien ha<br />

a todas las personas sin necesidad bradas en España a lo largo de los ofrecido a la naciente asociación<br />

de ninguna titulación, incluidas últimos años se ha conseguido lle- todo su apoyo.<br />

6 Barlovento nº1


El arte <strong>del</strong> buque escuela<br />

El futuro logotipo <strong>del</strong><br />

Consorcio Cabomayor<br />

saldrá de una de las<br />

propuestas recogidas en estas<br />

páginas, obras todas ellas <strong>del</strong> pintor<br />

José Ramón Sánchez, todo un<br />

lujo como asesor artístico <strong>del</strong> proyecto<br />

de buque escuela para Cantabria.<br />

Como no podía ser de otro<br />

modo, los cinco bocetos presentados<br />

por el pintor cántabro se alejan<br />

de la habitual enseña comercial<br />

para presentarse como auténticas<br />

obras de arte, emparentadas<br />

con la pintura mucho antes que<br />

con el diseño gráfico. El logotipo<br />

que identificará al buque escuela<br />

es la primero de los trabajos que<br />

José Ramón Sánchez vincula a un<br />

proyecto <strong>del</strong> que se declara ferviente<br />

defensor. Ilustrador de El<br />

Quijote, de La Biblia o de Moby<br />

Dick, José Ramón Sánchez quiere<br />

hacer <strong>del</strong> futuro velero un auténtico<br />

museo flotante, decorado con<br />

cuadros alusivos a los más grandes<br />

marinos de la historia y de la<br />

ficción, una galería en la que convivirán<br />

Cook y Ahab, Colón y John<br />

Silver. Los devotos de José Ramón<br />

Sánchez, entre<br />

los que nos contamos<br />

quienes<br />

crecimos viéndole<br />

dibujar en<br />

televisión a los<br />

más grandes<br />

héroes <strong>del</strong> cine<br />

NOTICIAS<br />

y la literatura, no podemos evitar<br />

detenernos ante el mural en el que<br />

el pintor ha recogido su interpretación<br />

de la perediana Sotileza, en la<br />

no menos perediana Calle Alta de<br />

Santander. Algo de eso nos va a<br />

pasar cuando, a bordo <strong>del</strong> buque<br />

escuela, pasemos frente a uno de<br />

los cuadros de José Ramón. Aunque<br />

alguien llame a gritos a<br />

cubierta.<br />

Barlovento nº1<br />

7


La cena con la que cerramos el pasado año, imagen obligada para el<br />

primer número de ‘Barlovento’<br />

8 Barlovento nº1<br />

El ‘<strong>Bon</strong> temps’, el ‘<strong>Villas</strong>’ y la asociación,<br />

en los sobres <strong>del</strong> Dromedario<br />

Limpieza general <strong>del</strong> local,<br />

en febrero.<br />

28 de febrero: una granizada permite<br />

hacer un muñeco de nieve frente al local.<br />

E<br />

d


Las comidas a bordo, cada<br />

vez más copiosas.<br />

l ‘<strong>Bon</strong> <strong>Temps</strong>’ remolca a una pequeña flota<br />

e ‘optimist’.<br />

Salida con la Obra San Martín, el 7 de febrero,<br />

unos habituales a bordo <strong>del</strong> <strong>Bon</strong> <strong>Temps</strong>.<br />

EN IMAGEN<br />

La mascota Leonardo,<br />

todo un lobo de mar.<br />

Antonio sostiene el timón de respeto después de<br />

verse obligado a utilizarlo el 3 de enero.<br />

Barlovento nº1<br />

9


HISTORIA<br />

‘El Dromedario’ llevó el café a América<br />

Hacia<br />

1720<br />

el<br />

naturalista<br />

francés doctor<br />

Chirac sucede<br />

en la dirección<br />

<strong>del</strong> Jardín <strong>del</strong><br />

plantes de París<br />

a Antoine de<br />

Jussie. Preocupado<br />

por cómo obtener cultivos de<br />

café partiendo de plantas que conserva<br />

en París, convence a un<br />

capital de infantería de marina, el<br />

normando Gabriel Mathieu de<br />

Clieum a la sazón destinado en la<br />

isla de la Martinica y casualmente<br />

de permiso en Francia, para que<br />

lleve plantas de café a la isla caribeña<br />

y trate de conseguir cultivos<br />

rentables en aquellas latitudes.<br />

Corría el año 1723<br />

cuando el capitán De<br />

Clieu, llevando consigo<br />

macetas con plantas de<br />

cafeto, que cuidará al<br />

extremo durante la larga<br />

travesía, embarca en el<br />

puerto de El Havre en el buque Le<br />

Dromedarie rumbo a la Martinica.<br />

He aquí cómo gracias a aquel<br />

navío, de nombre El Dromedario,<br />

el café pudo atravesar el Atlántico<br />

para recalar primero en una isla<br />

para pasar luego a las tierras continentales<br />

que se convertirían con<br />

el tiempo en las mayores cultivadoras<br />

<strong>del</strong> mundo.<br />

Resultó que los cafetos arraigaron<br />

con fortuna en La Martinica,<br />

hasta el punto de convertirse en un<br />

saneado negocio. Animado por el<br />

10 Barlovento nº1<br />

éxito obtenido en la isla, el gobernador<br />

de la Guayana francesa<br />

decidió emprender el cultivo <strong>del</strong><br />

café en su territorio. Tuvieron tanta<br />

fortuna las plantaciones en aquella<br />

zona <strong>del</strong> nuevo continente que el<br />

gobernador trató por todos los<br />

medios e mantener el monopolio<br />

<strong>del</strong> cultivo de café, prohibiendo la<br />

exportación de plantas o semillas a<br />

territorios limítrofes. La aventura el<br />

café en América, en la<br />

que tanto tuvo que<br />

ver El Dromedario,<br />

vio interrumpida su<br />

expansión por el celo<br />

y la visión comercial<br />

<strong>del</strong> gobernador galo.<br />

Pero el amor iba a entrar en escena<br />

para remediar la situación.<br />

Don Juan V, Rey de Portugal y<br />

emperador de Brasil, gran amante<br />

<strong>del</strong> café, deseaba desarrollar el<br />

cultivo en tierras brasileñas. Tras<br />

muchos intentos por conseguir<br />

semillas de la Guayana, frustrados<br />

por la cerrazón <strong>del</strong> gobernador<br />

francés, encomendó una última<br />

gestión a su embajador Francisco<br />

de Melho Palheta. Don Francisco<br />

trató de convencer a los franceses<br />

para que le vendieran plantas o<br />

semillas de café, pero el gobernador<br />

mantuvo una vez más su postura<br />

inflexible. Cuando se disponía<br />

a embarcar rumbo a Río de Janeiro,<br />

desmoralizado por no haber<br />

conseguido su propósito, recibió<br />

un inesperado regalo de la esposa<br />

<strong>del</strong> gobernador: un hermoso ramo<br />

de flores en el que se encontraban<br />

pequeñas plantas de café. Parece<br />

evidente que durante la estancia<br />

en la Guayana, el apuesto embajador<br />

brasileño tuvo más éxitos con<br />

la gobernadora que con el marido<br />

de ésta. De este modo llegó el café<br />

a Brasil, actualmente el primer productor<br />

<strong>del</strong> mundo.<br />

Una vez roto el monopolio<br />

francés, el café se extendió por<br />

toda la zona intertropical americana,<br />

desde México hasta el valle de<br />

Paral <strong>del</strong> Sur, en Brasil. Quienes<br />

más interés pusieron en extender<br />

el cultivo fueron los misioneros<br />

españoles, deseosos de convertir<br />

en agricultores sedentarios a los<br />

indígenas cazadores nómadas.<br />

Según cuentan en aquellas latitudes,<br />

el método empleado por los<br />

misioneros era muy original:<br />

imponían como penitencia la obligación<br />

e plantar determinado<br />

número de cafetos, según la gravedad<br />

<strong>del</strong> pecado. Viendo la extensión<br />

de los cafetales en América,<br />

uno se inclina a creer en la excesiva<br />

severidad de los misioneros.


El fondeo <strong>del</strong> muerto:<br />

las 2 jornadas paso a paso<br />

VIERNES, 5 MARZO 2004<br />

17:30h. - En la rampa de varada de<br />

Equipos Nucleares, empezamos a<br />

pintar el muerto y su boya… ¡qué horterada!<br />

20:00h.- Llegados a la Playa de la<br />

Magdalena procedemos a fondear<br />

el muerto.<br />

SÁBADO, 6 MARZO 2004<br />

16:00h - Llenado de la boya con<br />

agua… que no os imagináis cuánta<br />

cabe…<br />

18:00h. - Acabando de pintar… el<br />

muerto (260 kg de hormigón HA-25<br />

con doble armadura…. Y mucho<br />

salero)<br />

20:15h. - Rompiendo los últimos<br />

cabos y dando fondo al muerto…<br />

peligrosa operación desarrollada por<br />

buzos "profesionales" de HABITAT AZUL.<br />

17:00 h. - Bendición <strong>del</strong> muerto… ¿A<br />

que no sabes quién fue la "prota" de<br />

este episodio litúrgico-gamberro?<br />

ACTUALIDAD<br />

PAZ MARTÍN<br />

19:00h. - Antonio Del Canto y José<br />

Luis Gamboa proceden a flotar el<br />

muerto atado a su boya y otro bidón.<br />

20:45h. - Atando la boya al extremo<br />

<strong>del</strong> cabo <strong>del</strong> fondeo… último paso<br />

antes de irnos a casa… congelados.<br />

Todo este proceso… terminó a las<br />

22:00h.<br />

17:30h. - Estrenamos nuestro fondeo…<br />

al fin ¡plaza garantizada!<br />

¡Hurra!<br />

Barlovento nº1<br />

11


METEOROLOGÍA<br />

El mensaje de este artículo sería: escucha las predicciones meteorológicas,<br />

anota lo que dicen, y utiliza tus propios conocimientos para deducir los<br />

detalles relativos a nuestra propia zona.<br />

Hay miles de personas<br />

como nosotros en todo el<br />

mundo que, por una u<br />

otra razón, suelen pensar que la<br />

predicción meteorológica no les<br />

afecta porque "a menudo se equivocan"<br />

o "no dan una". A veces esto se<br />

debe a la orografía <strong>del</strong> terreno<br />

donde viven, otras a la imposibilidad<br />

de proporcionar descripciones lo<br />

bastante "detalladas" sobre el tiempo<br />

que va a hacer en un determinado<br />

lugar, sobre todo por el breve<br />

espacio que los medios de comunicación<br />

destinan a la predicción<br />

meteorológica en las televisiones.<br />

Los datos hoy en día son tratados<br />

y masticados por ordenadores<br />

de todo el mundo que vomitan montones<br />

de mapas que muestran el<br />

aspecto que tendrán las isobaras e<br />

isohipsas mañana, pasado y quizás<br />

durante los próximos días. Todo<br />

esto, junto con fotos tomadas en<br />

color por satélites, con luz natural y<br />

con infrarrojos, los gráficos obtenidos<br />

por radar de los lugares donde<br />

llueve, nos muestran una predicción<br />

cada vez mejor de los procesos<br />

meteorológicos.<br />

Pero, si no fuera por los héroes<br />

anónimos, cuya misión principal es<br />

observar el tiempo por todo el<br />

mundo, y a veces en lugares lejanos<br />

e inhóspitos, no existirían las predicciones<br />

meteorológicas en una zona<br />

concreta. Los ordenadores aunque<br />

sean de la última tecnología, necesitan<br />

información, pero no saben<br />

interpretarla. Estas máquinas tienen<br />

sus limitaciones. No saben nada de<br />

12 Barlovento nº1<br />

nubes, lluvia o niebla. Sólo trazan<br />

isobaras. Ni siquiera son capaces<br />

de encontrar los frentes. Todo eso lo<br />

tiene que hacer el meteorólogo, por<br />

eso no nos puede sorprender que<br />

mientras en un momento dado, la<br />

tendencia general <strong>del</strong> boletín meteorológico<br />

está muy bien detallada<br />

por la máquina, el tiempo real dominante<br />

en una zona tiene que ser adivinado<br />

por el hombre <strong>del</strong> tiempo<br />

desde su mesa. Por este motivo<br />

todavía hay sitio para que el meteorólogo<br />

perfeccione la "historia oficial"<br />

y quizás sea más exacto en su<br />

trabajo que cualquiera de ellas.<br />

Hay muchas razones por las que<br />

normalmente nos fiamos de la predicción<br />

meteorológica que nos proporciona<br />

la televisión, pero insisto<br />

que el saber descifrar un mensaje<br />

tan general, debe ser hecho por una<br />

persona que conozca cuáles son<br />

los fenómenos con los que podemos<br />

encontrarnos al día siguiente<br />

en cuanto salgamos de casa.<br />

Los partes que nos "tragamos"<br />

cuando estamos frente al televisor,<br />

no suelen cometer muchas equivocaciones<br />

en relación con la situación<br />

atmosférica general, sino con el<br />

momento, y aquí es donde nosotros,<br />

con la ayuda de algunos conocimientos<br />

meteorológicos, podemos<br />

hacer mucho por nosotros mismos.<br />

PABLO GÓMEZ<br />

El tiempo dominante, en lo que<br />

respecta a los servicios meteorológicos,<br />

es el tiempo que afecta realmente<br />

a la gente a la que van dirigidos.<br />

Para los pilotos de aviones que<br />

cruzan el Atlántico, es la alta velocidad<br />

de los vientos en altura y las<br />

nubes de tormentas. Para el hombre<br />

de la calle es la lluvia y vientos fuertes,<br />

el granizo o la nieve en las<br />

carreteras. Para nosotros, que nos<br />

gusta navegar, lo importante es la<br />

fuerza <strong>del</strong> viento y su dirección, y si<br />

la visibilidad va a ser buena o mala.<br />

Todos estos aspectos no pueden<br />

abarcarlos los partes de la televisión,<br />

y gracias a Dios tenemos los<br />

boletines meteorológicos marítimos<br />

que en la asociación solemos consultar.<br />

Pero a pesar de todo esto,<br />

una cosa es cierta, y es que el conocimiento<br />

de los sistemas meteorológicos,<br />

nos ayuda a interpretar toda<br />

esta información que nos proporcionan<br />

los medios de comunicación.<br />

Todo esto se consigue con tiempo<br />

dedicado al aprendizaje y cometiendo<br />

muchos errores al realizar<br />

nuestras propias predicciones, pero<br />

sólo así conseguiremos entender el<br />

mensaje apasionante <strong>del</strong> movimiento<br />

continuo de las masas de aire<br />

que a pesar de estar sobre nuestras<br />

cabezas, muy pocas veces nos<br />

paramos a descifrar su lenguaje.


Retorno al Mar Rojo<br />

La primera vez que visité el<br />

Mar Rojo fue en mis años de<br />

marino, me encontraba a<br />

bordo <strong>del</strong> New Venture, un buque<br />

tanque de 37.000 toneladas de peso<br />

muerto dedicado al transporte de<br />

productos petrolíferos. Veníamos de<br />

un puerto al norte de la India en el<br />

golfo de Katch, en lastre, y recorrimos<br />

el mar desde su extremo más<br />

meridional, el estrecho de Bab el<br />

Mandeb, hasta el golfo de Suez en<br />

su tramo más septentrional, dispuestos<br />

a tomar un cargamento de<br />

gasolina en el puerto <strong>del</strong> mismo<br />

nombre. Me llamó la atención la<br />

denominación de este mar, dado<br />

que desde el puente de navegación,<br />

donde me encontraba desempeñando<br />

mi labor de oficial de<br />

derrota, observaba que era <strong>del</strong><br />

mismo color que los que había<br />

conocido hasta ese momento. Poco<br />

imaginaba yo que varios años después<br />

obtendría dos razonamientos<br />

distintos que explican el motivo de<br />

tal nombre.<br />

Thomas Reef, un islote de coral<br />

que forma parte <strong>del</strong> conjunto de<br />

arrecifes que velan a la entrada <strong>del</strong><br />

estrecho de Tirán, único acceso al<br />

golfo de Acqaba, tiene una forma<br />

circular en la carta de navegación.<br />

Nos disponemos a realizar la primera<br />

inmersión <strong>del</strong> día en una mañana<br />

soleada <strong>del</strong> pasado mes de febrero;<br />

David, el guía de buceo, natural de<br />

Santander y con varios años de<br />

experiencia en el buceo deportivo<br />

en este lugar <strong>del</strong> mundo, nos explica<br />

los pormenores de la inmersión. Se<br />

trata de descender por la pared vertical<br />

<strong>del</strong> arrecife hasta los 56 metros<br />

de profundidad, donde encontraremos<br />

un arco de roca a través <strong>del</strong><br />

cual habremos de pasar para posteriormente<br />

ir ascendiendo progresivamente,<br />

observando la fauna y la<br />

flora de la zona: gorgonias, anémonas,<br />

morenas, peces napoleón,<br />

peces loro, peces payaso, peces de<br />

cristal y un sinfín de pequeños<br />

peces de colores que hacen <strong>del</strong><br />

buceo en el Mar Rojo una de las<br />

actividades más fascinantes que<br />

VIAJES<br />

JOSÉ LUIS GAMBOA<br />

imaginarse puede.<br />

Aprovecho para preguntarle<br />

sobre la razón de que se llame rojo<br />

a este mar que a simple vista es tan<br />

azul como el Mar <strong>Cantábrico</strong> los<br />

días soleados de verano. Me contesta<br />

diciendo que es debido a unas<br />

algas que le dan esta tonalidad tan<br />

característica en algunos momentos<br />

<strong>del</strong> día. Esta explicación contrasta<br />

con la ofrecida por nuestro acompañante,<br />

Mahmoud, en nuestro viaje<br />

de retorno desde Sharm el Sheikh,<br />

donde hemos desembarcado tras<br />

un periplo de cinco días en el que<br />

realizamos no menos de veinte<br />

inmersiones en la zona sur de la<br />

península <strong>del</strong> Sinaí: “La tonalidad<br />

rojiza es producto <strong>del</strong> reflejo en el<br />

mar <strong>del</strong> rojo de las montañas que lo<br />

bordean".<br />

Tanto si es por una razón como<br />

si es por la otra, de lo que sí estoy<br />

seguro es de que nunca olvidaré<br />

los colores de este mar tan lleno de<br />

vida y en el que tanto he disfrutado<br />

en mi retorno después de mucho<br />

tiempo.<br />

Barlovento nº1<br />

13


LITERATURA<br />

Escrito sobre el agua<br />

Bernard Moitessier<br />

CÉSAR RODRÍGUEZ GONZÁLEZ<br />

Este gran marino nació en 1925 en lo que entonces se<br />

llamaba Indochina. Recorrió las costas <strong>del</strong> Golfo de<br />

Siam a bordo de juncos de amigos pescadores, de<br />

los que recogió un ilimitado<br />

amor por el mar y<br />

la navegación tradicional<br />

que le marcaron de<br />

por vida, creando en él<br />

el gusto por las soluciones<br />

sencillas e imaginativas.<br />

A principios de los<br />

50 zarpó en solitario a<br />

bordo de su junco<br />

Marie-Therese rumbo al<br />

Indico y más allá. Varios<br />

años y miles de millas<br />

más tarde se convirtió<br />

en uno de los grandes divulgadores de una nueva clase de<br />

marinos errantes que recorren los mares con pocos medios y<br />

mucha ilusión.<br />

SU OBRA:<br />

Un vagabundo de los mares <strong>del</strong> sur: Monzones, alisios,<br />

paradisíacas escalas y naufragios os esperan en este libro enriquecedor<br />

y ameno en el que Moitessier demuestra ser tan diestro<br />

ante el papel en blanco como sobre la cubierta de su barco.<br />

Cabo de Hornos a vela: Si la primera parte es un hermoso<br />

viaje ofrecido a su flamante esposa, con paradisíacas escalas<br />

a lo largo <strong>del</strong> Caribe, las Galápagos y Tahití, la vuelta desde el<br />

Pacífico a Alicante por el Cabo de Hornos (14.000 millas sin<br />

escala) hacen de este viaje una de las grandes hazañas de la<br />

navegación en pequeños veleros.<br />

El largo viaje: Diez meses por las altas latitudes. La mayor<br />

distancia (37.455 millas) recorrida en solitario y sin escalas. Un<br />

poema a la mar, donde hombre, barco y elementos se funden<br />

y vibran al unísono.<br />

Tamata y la Alianza: Último libro en el que Moitessier vierte<br />

toda su experiencia y la filosofía de una vida dedicada por<br />

entero a la mar y la navegación.<br />

Los cuatro libros están editados por Editorial Juventud. S.A.<br />

14 Barlovento nº1<br />

Cuento nigeriano<br />

El mar, el sol y la luna<br />

Hace mucho tiempo, el Sol y la Luna se<br />

conocieron y decidieron vivir juntos.<br />

Construyeron una casa hermosa en tierra seca.<br />

Después de algunos meses decidieron invitar a<br />

su amigo el Mar a su casa. Son muy amables al<br />

pensar en mí, dijo el Mar, pero me temo que no<br />

podré aceptar su oferta. Lo sabía, dijo la Luna,<br />

usted ya no nos quiere. El Mar respondió: claro<br />

que sí, pero pienso que no cabría en su casa. El<br />

Sol pensó que esto significaba que el Mar creía<br />

que su casa no era lo suficientemente grandiosa.<br />

Por supuesto que no es eso lo que pienso, respondió<br />

el Mar, estoy seguro de que su casa es<br />

igual de brillante que ustedes pero... entonces<br />

pase, por favor, dijo la Luna al mismo tiempo que<br />

abría las puertas de par en par. La casa era muy<br />

grande, y se extendía hasta donde la vista alcanzaba.<br />

El Mar se filtró tímidamente a través <strong>del</strong><br />

umbral. Pase, pase, hay suficiente lugar para<br />

usted, dijo el Sol mientras reía. Entonces, el Mar<br />

comenzó a fluir hacia adentro más rápidamente.<br />

Pronto el suelo entero se cubrió<br />

de agua. Ve, no había nada por qué<br />

preocuparse, dijo la Luna. En realidad<br />

apenas estoy comenzando a<br />

entrar, respondió el Mar. Y al decir<br />

esto, una ola enorme se precipitó a<br />

través <strong>del</strong> cuarto y salpicó las paredes. El Sol y la<br />

Luna se elevaron más y más para evitar mojarse.<br />

Pronto los pescados y las otras criaturas <strong>del</strong> mar<br />

comenzaron a nadar dentro de la casa. Mil disculpas,<br />

pidió el Mar. Pero el Sol dijo: no se preocupe,<br />

hay lugar para todos.<br />

A medida que el Mar continuaba inundando<br />

la casa, el Sol y la Luna tuvieron que subir más y<br />

más arriba hasta llegar al cielo. Su magnífica<br />

casa flotaba al revés abajo, en el agua. Fue así<br />

como el Sol y la Luna se establecieron en el cielo<br />

y encontraron armonía con la Tierra y el Mar. Y<br />

aunque se turnan para mirar hacia abajo, con<br />

curiosidad, desde entonces nunca han vuelto a<br />

tocar la tierra.


La empanada<br />

de A<strong>del</strong>ita<br />

INGREDIENTES<br />

Para la masa:<br />

½ vaso (de agua) de aceite de oliva,<br />

½ vaso de leche,<br />

1 huevo, 1 sobre de Royal y harina.<br />

Para el relleno:<br />

1 Cebolla,<br />

2 latas de atún en aceite pequeñas,<br />

1 huevo cocido,<br />

1 lata pequeña de pimientos rojos,<br />

aceitunas, 2 quesitos,<br />

salsa de tomate (preferiblemente casera),<br />

1 cucharada sopera de mayonesa,<br />

un poquito de Ketchup.<br />

Los siete errores<br />

Sopa de letras<br />

Por ANTONIO DEL CANTO<br />

Localizar 11 palabras<br />

relacionadas con<br />

el <strong>Bon</strong> <strong>Temps</strong><br />

Por NOEMÍ MORENO<br />

GASTRONOMÍA Y PASATIEMPOS<br />

PREPARACIÓN<br />

La masa<br />

Se mezclan con la batidora el agua, el aceite, la<br />

leche, el huevo y el Royal. Cuando están bien ligados<br />

los ingredientes, se añade el harina hasta formar<br />

una masa compacta y que no se pegue a los<br />

dedos. Es importante amasar muy bien y, aunque dé<br />

pereza, durante un buen rato. Dejar en reposo al<br />

menos dos horas.<br />

El relleno<br />

Se sofríe la cebolla, hasta que quede pochada. Se saca de la<br />

sartén y en un bol aparte se añade el resto de los ingredientes,<br />

revolviendo hasta que quede jugoso.<br />

A continuación se divide la masa en dos partes iguales (reservando<br />

un poquito, para adornar la empanada).<br />

Con el rodillo se extiende bien una de ellas y se coloca el relleno;<br />

encima, se cubre todo con el resto de la masa, cerrando los bordes,<br />

y se adorna.<br />

Para que tenga mejor aspecto y antes de meterla en el horno, con<br />

un pincel se unta con yema de huevo y aceite de oliva (ya mezclado).<br />

Seguidamente y con el horno calentado previamente, a<br />

temperatura media, se mete hasta que esté dorada.<br />

(El horno sólo debe calentar por abajo, no es necesario usar el grill.)<br />

Solución:<br />

sables, garrucho.<br />

mata, burda, botalón, queche, penol,<br />

Campana, farolera, foque, mesana, casa-<br />

T E S C A D O L L E F U<br />

U M E N A F P O B A C M<br />

E A N A O S A L R A K A<br />

N V I Q B Q A O I N O T<br />

O M U R U A L B J A S A<br />

L E R O D E Z U L S C M<br />

A G A R R U C H O E A A<br />

T R U A Q Z I H N M S S<br />

O B G U D O E B E L L A<br />

B A T E S A N A P M A C<br />

Barlovento nº1<br />

15


Mareantes de Santander<br />

Habanera para la tripulación de la corbeta “<strong>Villas</strong> <strong>del</strong> <strong>Cantábrico</strong>”<br />

1 Li - to - ral de las que - bran - tas Can - tá - bri - co gris a - zul<br />

los o - jos que me mi - ra - ban la mar sa - la - dae - ras tú - u.<br />

Siem - pre los hom - bres mar - cha - ron des - tea - re - nal des - ta luz<br />

por las ga - ler - nas <strong>del</strong> nor - te a los co - ra - les <strong>del</strong> su - ur.<br />

A la ve - la y al com - pás, na - ve - ga - ron por la mar A la ve - la y al com - pás más y más y<br />

más y más a la ve - la y al com - pás más y más y más y más.<br />

L y M : RAMÓN E. MANDADO GUTIÉRREZ<br />

2. Is - la de Mou - ro y bo - ca - na, Ba - hí - a de San - tan - der,<br />

3. So - mos ma - ri - nos - de - ve - la, ma - rean - tes de San - tan - der,<br />

có - mo po - drí - a - mos ma - dre de - jar - de vol - ver - tea ve - er.<br />

hi - jos deu - na ciu - dad be - lla y deu - na be - lla mu - je - er.<br />

Sien o - tros puer - tos que - da - ron nues - tram - bi - ción, nues - tra fe<br />

Con el nor - des - te ce - ñi - mos na - ve - ga - mos de tra - vés<br />

en el tu - yo re - co - bra - mos el go - zo de la ni - ñez.<br />

y vi - ra - mos ¡por a - van - te! o tras - lu - cha - mos des - pués.<br />

( exclamado)<br />

A la ve la y al com - pás na - ve - ga - mos por la mar. A la ve - la y al com -<br />

A la ve la y al com - pás na - ve - ga - re - mos la mar.<br />

pás más y más y más y más. A la ve - la y al com - pás más y más y más y más. A la ve la y al com<br />

pás más y más y más y más. A la ve la yal com pás... ¡Más! ¡Jesús y adentro!<br />

www.villas<strong>del</strong>cantabrico.org

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!