11.05.2013 Views

Creciendo en Sabriduria-PDF - Bible-lessons.org

Creciendo en Sabriduria-PDF - Bible-lessons.org

Creciendo en Sabriduria-PDF - Bible-lessons.org

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

<strong>Creci<strong>en</strong>do</strong> <strong>en</strong> sabiduría serie de estudio bíblico<br />

SIN MISERICORDIA, Y REHU-<br />

SAR PERDONAR A CADA HER-<br />

MANO SUS FALTAS?<br />

Mateo 6:15<br />

En la parábola, el Señor hizo comparecer<br />

ante sí al despiadado deudor y le<br />

dijo: "Siervo malvado, toda aquella deuda<br />

te perdoné, porque me rogaste: ¿No te<br />

conv<strong>en</strong>ía también a ti t<strong>en</strong>er misericordia<br />

de tu consiervo como también yo tuve<br />

misericordia de ti? Entonces su señor,<br />

<strong>en</strong>ojado, le <strong>en</strong>tregó a los verdugos, hasta<br />

que pagase todo lo que debía". "Así<br />

también -dijo Jesús- hará con vosotros<br />

mi Padre celestial, si no perdonarais de<br />

vuestros corazones cada uno a su hermano<br />

sus of<strong>en</strong>sas". El que rehúsa perdonar<br />

está desechando por este hecho su propia<br />

esperanza de perdón.<br />

(11) ¿QUÉ PRINCIPIO BÍBLICO<br />

DEBEMOS APLICAR CUANDO<br />

TRATAMOS A OTROS?<br />

Marcos 12:31<br />

Pero no se deb<strong>en</strong> aplicar mal las <strong>en</strong>señanzas<br />

de esta parábola. El perdón de<br />

Dios hacia nosotros no disminuye <strong>en</strong><br />

lo más mínimo nuestro deber de obedecerle.<br />

Así también el espíritu de perdón<br />

hacia nuestros prójimos no disminuye la<br />

demanda de las obligaciones justas. En<br />

la oración que Jesús <strong>en</strong>señó a sus discípulos,<br />

dijo: "Perdónanos nuestras deudas,<br />

como también nosotros perdonamos<br />

a nuestros deudores". Mateo 6:12. Con<br />

esto no quiso decir que para que se nos<br />

perdon<strong>en</strong> nuestros pecados no debemos<br />

requerir las deudas justas de nuestros<br />

71<br />

deudores. Si no pued<strong>en</strong> pagar, aunque<br />

sea por su administración imprud<strong>en</strong>te,<br />

no han de ser echados <strong>en</strong> prisión, oprimidos,<br />

o tratados ásperam<strong>en</strong>te; pero la<br />

parábola no nos <strong>en</strong>seña que fom<strong>en</strong>temos<br />

la indol<strong>en</strong>cia. La Palabra de Dios declara<br />

que si un hombre no trabaja, que tampoco<br />

coma. (2 Tess. 3:10). El Señor no exige<br />

que el trabajador sost<strong>en</strong>ga a otros <strong>en</strong><br />

la ociosidad. Hay muchos que llegan a la<br />

pobreza y a la necesidad porque malgastan<br />

el tiempo o no se esfuerzan. Si esas<br />

faltas no son corregidas por los que las<br />

abrigan, todo lo que se haga <strong>en</strong> su favor<br />

será como poner un tesoro <strong>en</strong> una bolsa<br />

agujereada. Sin embargo, hay cierta clase<br />

de pobreza que es inevitable, y hemos de<br />

manifestar ternura y compasión hacia los<br />

infortunados. Deberíamos tratar a otros<br />

así como a nosotros nos gustaría ser tratados<br />

<strong>en</strong> circunstancias semejantes.<br />

(12) ¿CÓMO NOS DICE EL ESPÍ-<br />

RITU SANTO A TRAVÉS DE PA-<br />

BLO QUE DEBEMOS ESTIMAR A<br />

OTROS?<br />

Filip<strong>en</strong>ses 2:3<br />

El Espíritu Santo, mediante el apóstol<br />

Pablo, nos da la ord<strong>en</strong>: "Si hay alguna<br />

consolación <strong>en</strong> Cristo; si algún refrigerio<br />

de amor; si alguna comunión del Espíritu;<br />

si algunas <strong>en</strong>trañas y misericordias,<br />

cumplid mi gozo; que sintáis lo mismo,<br />

t<strong>en</strong>i<strong>en</strong>do el mismo amor, unánimes, sinti<strong>en</strong>do<br />

una misma cosa. Nada hagáis por<br />

conti<strong>en</strong>da o por vanagloria; antes bi<strong>en</strong><br />

<strong>en</strong> humildad, estimándoos inferiores los<br />

unos a los otros. Haya, pues, <strong>en</strong> vosotros<br />

este s<strong>en</strong>tir que hubo también <strong>en</strong> Cristo Jesús".<br />

Filip<strong>en</strong>ses 2:1-5<br />

(13) CON EL ESPÍRITU DE AMOR<br />

EN NUESTROS CORAZONES,

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!