Julio César: enseñanzas para el liderazgo - TopTen Management ...
Julio César: enseñanzas para el liderazgo - TopTen Management ...
Julio César: enseñanzas para el liderazgo - TopTen Management ...
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
Introducción<br />
Vengo proponiendo desde hace años que los<br />
fundamentos d<strong>el</strong> <strong>Management</strong> hay que<br />
buscarlos en la cultura griega y romana. Esa<br />
fue la causa d<strong>el</strong> libro “<strong>Management</strong>: la enseñanza<br />
de los clásicos”, en <strong>el</strong> que mostraba cómo los<br />
grandes temas que hoy en día se proponen<br />
como novedosos en <strong>el</strong> área d<strong>el</strong> gobierno de<br />
personas y organizaciones fueron abordados<br />
de manera muy satisfactoria por los pensadores<br />
y actores d<strong>el</strong> mundo griego, fundamentalmente<br />
durante las guerras púnicas: entre <strong>el</strong> siglo IV y <strong>el</strong><br />
siglo II antes de Cristo.<br />
Posteriormente, Roma asumió mucho de lo<br />
vivido en la cultura griega (no olvidemos que<br />
durante siglos fue signo de distinción entre la<br />
nobleza romana <strong>el</strong> dominio d<strong>el</strong> idioma<br />
griego) y macedonia, impregnándolo d<strong>el</strong><br />
espíritu pragmático que tanto marcó la vida<br />
de ese imperio comenzado en <strong>el</strong> 754 a.d.C. y<br />
que habría de durar, en Occidente, hasta <strong>el</strong><br />
476 d.C., y en Oriente –con innumerables<br />
modificaciones- hasta <strong>el</strong> 1453.<br />
Quisiera hoy detenerme en algunas<br />
reflexiones sobre uno de los personajes más<br />
conocidos: Gaius Iulius Caesar. Al igual que<br />
tantos otros dirigentes a lo largo de la<br />
historia, es mucho lo que tiene que<br />
enseñarnos. En algunos aspectos <strong>para</strong><br />
procurar imitarle. En otros, <strong>para</strong> proponerse<br />
no repetir las equivocaciones que <strong>el</strong>los<br />
cometieron.<br />
Como en <strong>el</strong> caso de otros personajes que he<br />
analizado con cierto detalle desde <strong>el</strong> punto<br />
de vista d<strong>el</strong> <strong>liderazgo</strong> –Napoleón, Lenin,<br />
Hitler, Aníbal...- con <strong>Julio</strong> <strong>César</strong> mostraré<br />
cuáles fueron sus cualidades, pero también<br />
aqu<strong>el</strong>las carencias que debería haber suplido<br />
<strong>para</strong> consolidarse como un líder en sentido<br />
pleno.<br />
Pinc<strong>el</strong>adas de una vida<br />
Cayo <strong>Julio</strong> <strong>César</strong> nació en Roma <strong>el</strong> 13 de julio<br />
100 a. C. y –como es bien sabido- fue<br />
asesinado en esa misma ciudad <strong>el</strong> 15 de<br />
marzo 44 a. C.<br />
Vino al mundo en <strong>el</strong> seno de una gens d<strong>el</strong><br />
ámbito de los patricios, en una familia sin<br />
recursos patrimoniales. Era sobrino –<strong>para</strong><br />
bien y <strong>para</strong> mal, como enseguida veremosde<br />
uno de los políticos más influyentes d<strong>el</strong><br />
momento: Cayo Mario.<br />
De temperamento intrépido, desafió a Sila,<br />
una vez éste tomó <strong>el</strong> poder. Sin embargo, <strong>el</strong><br />
dictador le perdonó la vida por intercesión de<br />
unos parientes de la madre de <strong>César</strong>. Luego,<br />
le llegó <strong>el</strong> momento, pues fue nombrado<br />
cuestor en Hispania y también edil curul en<br />
Roma. Aprendió entonces que la<br />
benevolencia de la gente es tornadiza. Y <strong>para</strong><br />
que se inclinaran a su favor se endeudó <strong>para</strong><br />
ofrecer juegos como nunca se habían visto.<br />
Volvería a utilizar <strong>el</strong> populismo en otras<br />
ocasiones.<br />
En 63 a. C. tras ser <strong>el</strong>egido praetor urbanus y<br />
por la casual coincidencia de que falleciera<br />
Quinto Cecilio Met<strong>el</strong>o Pío, fue también<br />
nombrado Pontifex Maximus. <strong>Julio</strong> <strong>César</strong><br />
sabía aprovechar cualquier oportunidad...<br />
Al concluir <strong>el</strong> periodo de pretura sirvió como<br />
propretor en Hispania, donde lideró una<br />
breve guerra contra los lusitanos. En 59 a. C.,<br />
contando con la influencia de sus aliados<br />
políticos d<strong>el</strong> momento -Pompeyo y Craso-,<br />
accedió al consulado. Su colega, Bíbulo, hizo<br />
todo lo que pudo <strong>para</strong> entorpecer la labor de<br />
<strong>César</strong>. Sin embargo, nuestro hombre sacó<br />
ad<strong>el</strong>ante diversas leyes, fundamentalmente<br />
una agraria que reglamentaba la partición de<br />
granjas entre los legionarios retirados.<br />
Designado procónsul de las Galia Transalpina,<br />
Iliria y Galia Cisalpina, gobernó de forma<br />
agresiva, sometiendo a las diversas tribus,<br />
también a algunas que habían quedado fuera<br />
de la jurisdicción que le había sido concedida.<br />
Toda esta etapa, parcialmente concluida al<br />
vencer en Alexia a Vercingétorix, jefe de los<br />
avernos, la narró –<strong>para</strong> su mayor gloria- en<br />
la Guerra de las Galias.<br />
La envidia, mala consejera también en<br />
aqu<strong>el</strong>los tiempos, llevó a sus enemigos<br />
políticos a intentar despojarle de su ejército.<br />
Intentó que aceptaran su presencia en <strong>el</strong><br />
Senado mediante la triquiñu<strong>el</strong>a jurídica d<strong>el</strong> in<br />
absentia, pero le fue negada esa posibilidad.<br />
Comenzó así, tras atravesar <strong>el</strong> Rubicón con<br />
su ejército, la Segunda Guerra Civil de la<br />
República de Roma. Su victoria, en Farsalia,<br />
Tapso y Munda, le convirtieron en <strong>el</strong> nuevo<br />
dirigente indiscutible d<strong>el</strong> Imperio.<br />
Diversos senadores juzgaron a <strong>César</strong> como un<br />
dictador ambicioso, deseoso de volver a<br />
instaurar la monarquía. Bruto (su hijo<br />
adoptivo) y Cayo Casio, junto a diversos<br />
lugartenientes (Trebonio, Décimo Bruto<br />
Albino...), y otros como Lucio Minucio Basilio,<br />
Tulio Cimber, Servilio Galba, Quinto Ligario,<br />
Domicio, los hermanos Casca, Tebonio...<br />
asesinaron a <strong>César</strong> en <strong>el</strong> Senado.<br />
La figura de Bruto, hijo adoptivo de <strong>César</strong>, es<br />
la que más interés ha concitado. Vanidoso, de<br />
escasa int<strong>el</strong>igencia, se dejó engatusar por<br />
Cayo Casio, quien utilizó básicamente <strong>el</strong><br />
siguiente e insistente mensaje:<br />
“¿Duermes, Bruto? ¡Oh, tú no eres Bruto!<br />
¡Si estuviese despierto, oh Bruto, no habría<br />
tiranos!<br />
¡Faltan hombres como Bruto!<br />
Ese crimen fue <strong>el</strong> detonante de una nueva<br />
guerra civil. Al cabo, los partidarios de <strong>César</strong><br />
Manager<br />
· 7