También el toro lleva capa Diccionario de las capas de los toros ...

También el toro
lleva capa
FRENTE
al capote torero, la capa, pinta o pelaje del toro.
Policromo mosaico de colores, predominantemente en negro, que ofrece la
res de lidia al exhibir sobre el mágico círculo del ruedo su amenazante incógnita.
Joselito - paradigma de afición y de torero largo- gustaba de platicar,
entre mechero de yesca y liado de petaca, con vaqueros y gañanes para
extraer información sobre esas cosillas que siempre encastillaban al uno en
el silencio, logrando así que no se levantara un pitón en todo el campo
bravo sin que él lo supiera y, además, conocer a ciencia cierta qué pelos
eran los buenos en cada casa y cuáles la macana; aspecto este digno de
interés para la coletería, pues, si bien toros a modo salen de cualquier
pelaje, no todas las pintas de cada ganadería ofrecen las mismas garantías
de triunfo. Sin embargo, no todos los toreros piensan igual que José, pues
os hay totalmente desentendidos de tales detalles; verbigracia, y para no Ir
más lejos, su hermano Rafael-gallo de igual gallina, pero distinto
kikiriqueo, al que no sólo traían al fresco las pintas de los toros, sino que
jamás se metió en eso de elegir ganaderías.
A mí no me dan miedo las divisas -decía-. Al toro que me embiste por
derecho lo toreo a mi gusto, y al que embiste torcío no paro a mirarle el
hierro pá juí.
Los toros de la misma capa dícense apelados, y variopintos los de
distinto tinto color. Colores básicos en el ganado de lidia son el negro, el
rojo y el blanco, terna a la que añadiremos los tonos pajizos por estar
compuestos de pelos simples que varían de tonalidad de la raíz a la punta.
Después podrán presentarse en capas monocromáticas, o en compuestas
de dos o incluso tres colores uniformemente ligados o a manchas, según
el caprichoso dictado de la genética, ya que también el pelaje de los toros
es hereditario.
Si picando espuelas a imaginaria jaca de finos cabos y enhiestas orejas
nos situáramos en un repecho desde el que se divisa una no menos ficticia
tropa de 1.000 cabezas de ganado de lidia, representativa de la frecuencia
con que aparecen las distintas capas en la actual cabaña brava española,
veríamos que 775 serían negras -consecuencia no solo de su dominancia
genética, sino de la acusada incidencia que las líneas Murube-Urquijo e