Descargar Vox Populi N 9 (3MB) - Fundación Universitaria San Martín

38
Diana Patricia Aristizabal Ferreira
Reformas electorales y transformación del sistema de partidos colombianos:
Pistas para explicar la emergencia de partidos nuevos.
dos últimas década, sus instituciones democráticas y en especial los partidos políticos se han
visto erosionadas y deslegitimadas; el sistema de partidos se ha transformado y
desinstitucionalizado; las organizaciones partidistas tradicionales se han visto disminuidas y la
aparición de las candidaturas independientes ha sido recurrente, así como, el surgimiento de
partidos nuevos, tal como ha sucedido en la mayoría de los países de la región. Siendo este
último, un fenómeno recurrente que altera el clima político y modifica la estabilidad de los
sistemas políticos y al cual todavía no se le ha prestado suficiente atención (Katz y Mair, 1992;
Medina, 2006; Przeworski, 2006; Linz, 2007 y Montero, 2007).
La presente disertación tiene el firme propósito de ofrecer información actualizada y veraz
sobre el devenir del Sistema de Partidos de Colombia después del desmonte del Frente Nacional
a partir de las reformas institucionales implementadas; así como de aportar elementos, a partir del
estudio del caso colombiano, para comprender y explicar el fenómeno de la emergencia de
partidos nuevos.
Para ello, he decidido observar el Sistema de Partidos a partir del nivel de
institucionalización, en función de la fragmentación y la estabilidad del sistema. Para ello he
calculado el Número Efectivo de Partidos, el porcentaje de Concentración y el índice de Volatilidad
Electoral. Los dos primeros proporcionan información sobre el formato o el grado de
fragmentación del sistema de partidos, y el segundo, provee información adicional sobre el
arraigo de los partidos en la sociedad, sobre la estabilidad del sistema y sobre los patrones de
interacción y de competición entre partidos.
Junto con el número de partidos y sus tamaños relativos, hay otro factor que puede dar
cuenta del grado en que el poder político está disperso o concentrado, una dimensión relevante
para la estabilidad institucional. Se trata de la concentración que se registra en el sistema de
partidos, cuyo índice viene dado por el porcentaje de votos o de escaños (concentración electoral
y parlamentaria respectivamente) que suman entre los dos primeros partidos. Las pautas de
competición electoral y de gobernabilidad, así como, de estabilidad institucional, no serán las
mismas en un sistema en el que los dos partidos sumen más del 80% de los voto o de los
escaños que en aquél en el que no alcancen el 40% (Oñate y Ocaña; 1999: 39-40).
La estabilidad del Sistema de Partidos es un factor relevante porque, como sostiene
Mainwaring (1999), cuando existe un alto grado de inestabilidad en la competición partidista hay
menos probabilidades de que los partidos cuenten con una base electoral estable. Por lo tanto,
los resultados electorales son menos predecibles, lo cual incentiva la aparición de partidos nuevos
en la escena electoral, y a su vez, estas nuevas apariciones producen fragmentación e
inestabilidad, dos condiciones que implican una baja institucionalización del sistema de partidos.
Los altos niveles de volatilidad también tienen consecuencias en el ejercicio democrático, puesto
que aumentan la incertidumbre política, cambian la distribución de escaños y poder, e incluso,
generan una mayor dificultad en los ciudadanos para reconocer etiquetas partidistas e identificar
lo que los distintos competidores representan.
En síntesis, he calculado en primer lugar, el Número Efectivo de Partidos (NEP) en votos y en
escaños en las elecciones celebradas en Colombia desde 1974 hasta 2010, lo cual he
complementado con la evolución en la presentación de candidaturas por partido en las elecciones
legislativas durante el mismo periodo, y el porcentaje de votos mínimo requerido para la
asignación de escaños, para observar la variabilidad en la competencia partidaria entre periodos
electorales y reparar en el grado de fragmentación del sistema y de faccionalismo de los partidos.
A continuación, he calculado los porcentajes de concentración de escaños en las últimas once
legislaturas, para identificar la continuidad y el grado de estabilidad de los partidos
tradicionalmente establecidos, así como el éxito de partidos nuevos, y por último, la volatilidad
electoral para determinar el grado de elasticidad de los votantes y de arraigo de los partidos en la
sociedad. Tres indicadores, que al analizarlos simultáneamente, permiten determinar el nivel de
estabilidad del sistema de partidos y el grado de institucionalización.
Posteriormente, he analizado las correlaciones entre los cambios en el nivel de
institucionalización del Sistema de Partidos y las reformas institucionales (reglas electorales y de
partidos) implementadas en el periodo de estudio. Intentando comprender cuál de las reformas
Revista Vox Populi No. 9 - ISSN 1794-6298
Páginas 37 - 54