Mariscal de Campo de la Armada Invencible de Cristo

sois juntamente edificados para morada de Dios en el espíritu.”
La enseñanza y doctrina en la iglesia debe provenir de las mismas escrituras,
debe ser enseñanza apostólica, profética y cristológicamente. Todo lo que está
escrito está para nuestra edificación. Allí está la doctrina que la iglesia necesita
conocer, vivir y defender.
La congregación cristiana bíblica debe ser columna y baluarte de la Verdad de
la sana doctrina, que es Cristo mismo: 1 a Timoteo 3:15 «para que si tardo,
sepas cómo debes conducirte en la casa de Dios, que es la iglesia del Dios
viviente, columna y baluarte de la verdad».
Bíblicamente Dios ha decidido que su iglesia sea: «Una Columna que sostenga
fuertemente la Verdad, la sana doctrina» aún a costa de la propia vida.
Las iglesias auténticas de Jesucristo deben ser un bastión que defiende la
Verdad, que encara y pelea a muerte en contra de los vientos heréticos que
soplan con fuerza arrastrando ministerios y congregaciones.
Es deber de la Armada Invencible de Cristo edificar la iglesia con las doctrinas
fundamentales del Cristianismo para que esté protegida de tanta enseñanza
herética heredadas a las sectas del SIA por su madre la Gran Ramera que día
a día sacude los cimientos mismos de pequeñas congregaciones que brotan a
diario. Efesios 4:14«para que ya no seamos niños fluctuantes, llevados por
doquiera de todo “viento de doctrina”, por estratagema de hombres que para
engañar emplean con astucia las artimañas del error. El ministro y la iglesia
deben preservar, enseñar y defender la doctrina. ¿Pero cuál doctrina?
Pues aquella que las escrituras muy bien definen como: Sana doctrina, es decir
una doctrina que no está contaminada, que es pura, que es santa, que tiene
poder, que es auténtica, y legitima. Que no ha sido mezclada con nada. Toda
iglesia, y todo ministro que no acepta, conoce, y profundiza en la sana doctrina
Dios no están de ninguna manera comprometidos con él. Dios no avala ni
cubre a ninguna iglesia que hace las cosas a su manera, Satanás es quién la
promueve, pero Dios nunca, ya que pasan por alto esta orden de Dios de
guardar la pureza de la doctrina que enseñaron Jesucristo y sus Apóstoles. Es
decir, cuando un pastor, o una iglesia deciden irse por la calle ancha haciendo
uso de métodos de mega crecimiento “humanos”, pragmáticos, o
ecuménicos. Clara y llanamente están desobedeciendo y rebelándose contra
Dios. Cuando un pastor decide ser: De prosperidad, milagrero, o pseudo
profético, esta renegando, y rechazando lo que Dios ya ha decidido para él.
Quiero terminar esta corta enseñanza añadiendo una lista de evidencias de
hermanos, iglesias y pastores que no son de sana doctrina. Lo hacemos para
que nuestros hermanos de las Congregaciones Cristianas Bíblicas afirmemos
más nuestra fe y nuestro amor hacia la Verdad que contiene la sana doctrina
que enseñó Cristo y para aquellos hermanos y pastores del las sectas del SIA
que se postulan como de sana doctrina, y también para los millones de
hermanos y ministros que piensan que ellos están enseñando sana doctrina.
La mayoría de la cristiandad apóstata hoy en día piensa que cuando un
ministro tiene evidencia y denuncia por ejemplo la doctrina herética del G-12, o
19