13.05.2013 Views

L E E N D A N I K - D E S D E E L P R I N C I P I O - Trinity a Tierra

L E E N D A N I K - D E S D E E L P R I N C I P I O - Trinity a Tierra

L E E N D A N I K - D E S D E E L P R I N C I P I O - Trinity a Tierra

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

L E E N D A N I K - D E S D E E L P R I N C I P I O<br />

nos pusiéramos más y más, apoyando la mano encima<br />

de la empuñadura de su espalda les preguntó a donde<br />

querían llegar... Los Paios tuvieron entonces la extrema<br />

osadía de vocearle para que se apeara y tirase también<br />

de uno de los cabos, invitando igualmente a los Capitanes<br />

a desmontar para unirse a los cosacos.<br />

167 Fue en ese momento cuando Alexandre, no pudiendo<br />

contenerse más, se adelantó con su caballo, desenvainó<br />

su espada y gritando a los cosacos mantuvieran las<br />

cuerdas bien tensas, de un certero y fuertísimo golpe<br />

partió el nudo por el medio, haciendo que se abriera<br />

inmediatamente y cayeran los dos cabos al suelo.<br />

168 Como parecía que todavía los Paios seguían burlándose<br />

de nosotros por no haber podido deshacer el nudo<br />

como ellos nos indicaron, el Gran Alexandre se acercó<br />

a esos fulanos y poniendo la punta de su espada sobre<br />

el pecho del que parecía el más importante de todos,<br />

pronunció estas palabras las cuales quedaron muy famosas:<br />

-Lo que un Bere no puede hacer con la mano lo<br />

hace con el filo de su espada...”<br />

169 Alexandre, después de acabar de decir esto levantó su<br />

espada e hizo señal para cargar contra aquellos osados<br />

que habían pretendido burlarse de ellos. Estos echaron<br />

a correr hacía el interior de la ciudad. Alexandre, los<br />

capitanes y todos los cosacos entraron en Kaide de este<br />

modo, persiguiendo a un puñado de Paios que habían<br />

salido corriendo para guarecerse en sus madrigueras<br />

como conejos asustados.<br />

170 Ya dentro de la ciudad, Alexandre y los suyos pudieron<br />

gritar “¡Por fin!” habían conseguido realidad el sueño<br />

de entrar victoriosamente en la más odiada ciudad del<br />

Imperio. Los cosacos consiguieron alcanzar a casi todos<br />

los Paios habiendo querido burlarse de ellos siendo<br />

todos ellos decapitados y sus cabezas empaladas en<br />

lugar bien visible de la ciudad.<br />

122

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!