Untitled - iglesia bautista getsemani de montreal
Untitled - iglesia bautista getsemani de montreal
Untitled - iglesia bautista getsemani de montreal
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
<strong>de</strong> Tiatira.» Cuando Pablo predicó en Filipos, éstas eran,<br />
probablemente, las dos personas en que Pablo habría<br />
pensado menos; y, sin embargo, estas dos fueron las<br />
traídas a Cristo. Lidia era una forastera en la ciudad <strong>de</strong><br />
Filipos; quizá si hubiera permanecido en Tiatira habría<br />
sido<br />
seducida por esta mujer jezabel, pero Dios la llevo allí,<br />
Dios siempre hace las cosas a su manera; se fija en los<br />
extraños; tiene el hilo <strong>de</strong> toda alma en su mano, y guía<br />
al alma, y la lleva al mismo lugar en que el Sol <strong>de</strong><br />
justicia va a brillar sobre ella. ¿Ha hecho esto Dios<br />
contigo? ¿No ha recogido a algunos <strong>de</strong> vosotros que<br />
erais extraños? Dios, a veces, convierte a un alma en el<br />
seno <strong>de</strong> su propia familia, y a veces en un lugar extraño;<br />
y siempre es un lugar dulce aquel en que el alma vio a<br />
Cristo por primera vez- Éfeso había <strong>de</strong>jado su primer<br />
amor; Esmirna era pobre "y, peses a todo rica; Pérgamo<br />
estaba don<strong>de</strong> Sata-nás tenia su trono; y ahora llegamos a<br />
Tiatira. Todo lo que sabemos <strong>de</strong> ella es por los libros; no<br />
se dice nada <strong>de</strong> Tiatira en ningún otro lugar en la Biblia.<br />
Sabemos muy poco <strong>de</strong> ella, excepto a través <strong>de</strong> Cristo;<br />
sabemos que Él conoce la historia <strong>de</strong> todo lugar, y su<br />
historia es siempre la verda<strong>de</strong>ra. Hay ahora cinco mil<br />
habitantes en Tiatira; las casas son casi todas <strong>de</strong> barro;<br />
la población fue tomada por los turcos y sigue bajo su<br />
posesión. Ya no se la llama con el nombre Tiatira, sino<br />
otro turco; pero hay todavía algunos cristianos allí. El<br />
último misionero que había, Mr. Parsons, dice: «Hay<br />
todavía alguna forma <strong>de</strong> piedad; hay dos <strong>iglesia</strong>s, dos<br />
escuelas, y<br />
34<br />
hay algunos cristianos armenios y griegos que se<br />
reúnen el día <strong>de</strong>l Señor.»<br />
1. Pero veamos el carácter que adopta Cristo aquí.<br />
«El Hijo <strong>de</strong> Dios... dice esto.» A los que sois creyentes<br />
esto es lo que os da paz, el saber que Jesús es divino, el<br />
saber que es el Hijo <strong>de</strong> Dios; porque entonces sabéis<br />
que Él tiene toda la fuerza y todo el po<strong>de</strong>r. «Su nombre<br />
será llamado Admirable, Consejero, Dios fuerte. Padre<br />
eterno, Príncipe <strong>de</strong> Paz.» Mantente adherido a tu Divino<br />
Salvador. Pero también es ésta una palabra <strong>de</strong>,<br />
tremendo po<strong>de</strong>r para los no convertidos: el que Él sea el<br />
Hijo <strong>de</strong> Dios; el que sea infinito, inconmovible, divino,<br />
una roca eterna.<br />
Y luego los «ojos <strong>de</strong> Cristo son como llama <strong>de</strong><br />
fuego». Si se pone leña en un fuego, éste pronto lo<br />
atraviesa; si se pone piedra, incluso a ésta quiebra; si se<br />
pone metal, lo fun<strong>de</strong>: no hay nada que pueda resistir el<br />
fuego. Lo mismo los ojos <strong>de</strong> Cristo; lo penetran y<br />
atraviesan todo. Os dije esto antes <strong>de</strong> la Cena <strong>de</strong>l Señor,<br />
que os probarais y os abstuvierais los que estáis sin<br />
Cristo; y ahora Dios me ha traído para <strong>de</strong>ciros, una vez<br />
más, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> la Cena <strong>de</strong>l Señor, lo mismo, por una<br />
razón diferente. Quisiera <strong>de</strong>cir a los que sabéis que<br />
estáis sin Cristo: Recordad que los hombres miran sólo<br />
la apariencia externa, pero 'Cristo mira el corazón: Él no<br />
sólo mira el corazón, sino penetra el corazón, lo<br />
escudriña. Sabe cuáles son vuestros <strong>de</strong>seos y <strong>de</strong>signios.<br />
Dice en el versículo 23 <strong>de</strong> este capítulo: «Y escudriño la<br />
conciencia y el corazón.» Y hay algunos que os<br />
mantenéis unidos a Cristo, pero que, al parecer, ya os<br />
habéis mezclado con el mundo. Los ojos <strong>de</strong><br />
35