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UN QUINTETO CON SOLERA
AGACHEROS 60 años de folclore
También existieron en la Comarca otros movimientos folclórico musicales, tal
es el caso del conjunto denominado Los Cinco de Agache, compuesto por doña Mª. Luz
Díaz Palenzuela (Adita), su esposo, don Vicente Díaz Marrero, don Bernardo Rodríguez
Díaz (el cojo de Facundo), don Fortunato Gómez Cubas (Nato) y don Juan Rodríguez Pérez
(Juanillo).
Surgió este grupo en 1981 al abrigo del pueblo de El Escobonal como consecuencia
de la disgregación de sus componentes de la Agrupación Folclórica Axaentemir, por
desavenencias con algunos miembros de esta rondalla y la forma que tenían de administrar
los fondos de la misma, ya que ellos consideraban que su trabajo debía ser remunerado
en cada actuación, pidiendo por esto que se les abonasen 500 ptas. en cada salida y que el
resto del dinero lo repartieran entre los demás componentes como lo creyesen conveniente;
propuesta con la que el resto del grupo no estuvo de acuerdo. Este fue el motivo por el cual
decidieron marcharse y formar un quinteto independiente. Sus deseos y decisión posterior
fueron duramente criticados.
Desde el principio su intención fue la de que el grupo resultase lo más profesional
posible. Para ello contrataron actuaciones de carácter fijo en algunos restaurantes de Ten-
Bel, adonde asistieron durante dos temporadas completas. Además, realizaron múltiples
intervenciones en fiestas y certámenes folclóricos por toda la isla, incluso las emisoras de
radio transmitieron sus voces en dos ocasiones a través de las ondas. En El Escobonal, su
pueblo, sólo llegaron a tocar una vez con motivo de la celebración de un Festival Folclórico
durante el transcurso de las fiestas patronales, donde obtuvieron un gran éxito con la canción
“El Campesino”, compuesta por uno de sus integrantes, Fortunato Gómez Cubas (Nato).
Llevaban durante esta nueva andadura una vestimenta bastante personal, ya que la
ropa de la mujer consistía en una mezcla de prendas del traje típico de la Comarca y de
Santa Cruz; mientras que la del hombre mantenía el pantalón negro bajo con camisa blanca,
chaleco de paño negro y fajín rojo a la cintura.
A su repertorio, tradicionalmente folclórico, añadieron canciones de Los Huaracheros,
tales como “Blanca Gaviota”, “Santacrucera”, “7 islas”, etc. Música sudamericana y las
melodías compuestas por Nato: “El Campesino”, “Taganana” y “Mujer isleña”, entre otras.
Investigando la trayectoria musical de los miembros de este grupo, nos encontramos
con cinco personas que a lo largo de su vida han dedicado multitud de horas y esfuerzo a la
música de nuestra tierra. Son cinco ejemplos vivos de los folcloristas, casi anónimos, cuyo
trabajo nos ha permitido seguir sintiendo el orgullo de tener un folclore tan rico y variado,
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