"Más que ocio", especial turismo. - Comunidad de Madrid

gastronomía selecta
No se puede entender Navalcarnero sin
conocer su faceta culinaria. Esta entrañable
Villa Real cuenta con una rica gastronomía
que hunde sus raíces en la más pura
cocina castellana y aprovecha la calidad de
las materias primas que da la tierra. Prueba de
todo ello es el importante abanico de restaurantes
que conforman la oferta gastronómica
de esta localidad madrileña, enclave de la cultura
de Castilla.
La cocina de Navalcarnero se especializa
en saber tratar las materias primas extraídas
del campo. Particular mención merecen los
garbanzos, cuya peculiaridad por las características
fisico-químicas de los suelos en los
que se obtiene, le hace ingrediente imprescindible
para llevar a buen fin su afamada
Olla del Segador, variedad del genuino cocido
madrileño que no se puede dejar sin probar
al pasar por Navalcarnero.
Las huertas proporcionan productos fres-
cos de gran calidad, especialmente la variedad
de Lechuga Romana, que el consumidor
madrileño prefiere tanto por su sabor como
por su textura y frescura.
Muy destacados son los asados, sabia conjunción
del arte de los hornos y la calidad de
los corderos locales. En general, la forma más
frecuente de asar los lechazos era con el aditamento
de manteca de cerdo.
La gallina en pepitoria, que antiguamente
era un plato típico para celebrar los nacimientos,
ha ido cayendo en desuso, aunque se
puede degustar ocasionalmente en algunos de
los restaurantes más típicos de Navalcarnero.
Para postre o para merendar son típicos
los bollitos de aceite y manteca, espolvoreados
con azúcar. Tradicionalmente se elaboraba
el mostillo (zumo de uva, mezclado con
harina y adornado con almendras), el membrillo
y el arrope (mosto, calabaza, higos y
melón duro).