Cultura y política del espacio público | Juan Carlos Lobato Valdespino
Cultura y política del espacio público | Juan Carlos Lobato Valdespino
Cultura y política del espacio público | Juan Carlos Lobato Valdespino
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
XC Aniversario de la Fundación de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo<br />
<strong>Cultura</strong> y <strong>política</strong> <strong>del</strong> <strong>espacio</strong> <strong>público</strong> | <strong>Juan</strong> <strong>Carlos</strong> <strong>Lobato</strong> <strong>Valdespino</strong> | Páginas 2 y 3<br />
Psicoanálisis y Arquitectura | Rosario Herrera Guido | Páginas 6 y 7<br />
Joaquín Fernández de Córdoba. Historiador y bibliógrafo nicolaita | Gerardo Sánchez Díaz | Páginas 8 a 10<br />
Vista de un <strong>espacio</strong> <strong>público</strong> en la ciudad de Morelia | Fotografía de Irena Medina Sapovalova | ver páginas 2 y 3<br />
LA VOZ DE MICHOACAN<br />
Año 2 Número 60<br />
Morelia, Michoacán<br />
a 13 de agosto de 2008
Artículo<br />
Una solución<br />
se deriva <strong>del</strong><br />
ciudadano… en<br />
la manera de<br />
apropiarse de ese<br />
<strong>espacio</strong> común,<br />
y que con la<br />
colectividad dará<br />
origen a la idea de<br />
cultura…<br />
<strong>del</strong> <strong>espacio</strong> <strong>público</strong><br />
¿Es que algún día podremos disfrutar la ciudad en lugar de<br />
sufrirla?<br />
De 0.5 a 50 metros cuadrados…<br />
El mundo moderno trajo nuevas ideas<br />
acerca de cómo organizar la ciudad,<br />
es así como Le Corbusier considerado<br />
por algunos el padre de la arquitectura<br />
moderna, propuso ordenar las actividades<br />
básicas que se desarrollan dentro de la misma,<br />
como pueden ser el habitar, el trabajar, el recrearse<br />
y el circular, algo que parece elemental<br />
y de sentido común, pero que tal vez en el escenario<br />
cotidiano pareciera una idea utópica.<br />
Los planificadores invierten mucho tiempo y<br />
conocimientos para proponer como se deben<br />
organizar las ciudades con la finalidad de que<br />
todo funcione bien y en armonía, pero se debe<br />
reconocer que en la práctica sucede algo muy<br />
distinto.<br />
Editado los miércoles por LA VOZ DE MICHOACAN<br />
Asentamientos humanos deplorables, falta<br />
de áreas verdes, tránsitos demorados sobre las<br />
vías de comunicación, son solo algunos de los<br />
aspectos que denotan que aun con buenas propuestas<br />
e intenciones sufrimos en gran medida<br />
los problemas <strong>del</strong> <strong>espacio</strong> urbano, es ahí donde<br />
surgen precisamente las preguntas: ¿Son las<br />
propuestas de los planificadores urbanos soluciones<br />
utópicas?, ¿Es que algún día podremos<br />
disfrutar la ciudad en lugar de sufrirla?, bueno<br />
creo que de manera objetiva podemos mencionar<br />
que existen buenos ejemplos para demostrar<br />
que tener una mejor calidad de vida en<br />
el <strong>espacio</strong> publico es posible, y que además esto<br />
no se limita por pertenecer a un sistema económico<br />
de los que han dado por denominar <strong>del</strong><br />
tercer mundo.<br />
En Brasil, un país con un esquema social<br />
similar al nuestro, y que a su vez experimenta<br />
las consecuencias de un deterioro económico<br />
<strong>Juan</strong> <strong>Carlos</strong> <strong>Lobato</strong> <strong>Valdespino</strong> <strong>Cultura</strong> y <strong>política</strong><br />
Arq. <strong>Juan</strong> <strong>Carlos</strong> <strong>Lobato</strong> <strong>Valdespino</strong><br />
jlobato@zeus.umich.mx<br />
Una mejor calidad de vida en el <strong>espacio</strong> <strong>público</strong> es posible y… esto no se limita por pertenecer a un<br />
sistema económico de los que han dado por denominar <strong>del</strong> tercer mundo.<br />
muy marcado, se da el ejemplo de la ciudad<br />
de Curitiva, que con una población considerada<br />
en alrededor de 2 millones de habitantes,<br />
los embotellamientos de transito en el centro<br />
de la ciudad han sido eliminados, la extensión<br />
de <strong>espacio</strong>s verdes ha pasado de 0,5 metros<br />
cuadrados por habitante en 1970, a 50 metros<br />
cuadrados al día de hoy y la calidad de vida de<br />
todos los habitantes es bastante buena, es entonces<br />
cuando surge otra pregunta: ¿Por qué<br />
en nuestra ciudad no es posible solucionar los<br />
problemas que tienen que ver con el <strong>espacio</strong><br />
<strong>público</strong>? .<br />
Ciudadanos y gobierno<br />
Fotografías<br />
Irena Medina Sapovalova<br />
En primer lugar se debe señalar que este al<br />
igual que muchos problemas donde interviene<br />
la participación <strong>del</strong> factor humano junto con<br />
los fenómenos naturales, es verdaderamente<br />
imposible predecir y controlar totalmente lo<br />
Director General Miguel Medina Robles | Editor Fernando Covián Mendoza<br />
Asistentes de edición Alejandra Romano, Cristina Fonseca Ramírez, Claudia Aguilar | Fotografía Irena Medina Sapovalova | Coeditor gráfico Ernesto López Ruiz<br />
Finlandia No. 286 Valle Quieto Morelia, Mich. Tel. 2-99-31-47 E-mail: suplementoidentidad@yahoo.com.mx<br />
Identidad no se hace responsable de originales y/o materiales gráficos no solicitados. Las opiniones e informaciones contenidas en los artículos firmados son responsabilidad de sus autores y no reflejan necesariamente el punto de vista de los editores.<br />
2 LA Identidad VOZ DE MICHOACAN, Miércoles 13 de agosto Av. Periodismo de 2008 José Tocaven Lavín 1270, Col. Arriaga Rivera, C.P. 58190, Morelia, Michoacán, México Tels. (4) 327-37-12 al 25, Fax (4) 327-37-28
Artículo<br />
que va a suceder, mas no obstante gran parte<br />
de la solución proviene de dos factores que<br />
son determinantes; uno que se deriva estrictamente<br />
<strong>del</strong> ciudadano, particularmente en la<br />
manera de apropiarse de ese <strong>espacio</strong> común, y<br />
que con la participación de la colectividad dará<br />
origen a la idea de cultura, y otro que proviene<br />
de la intervención de carácter jurisdiccional de<br />
la autoridad, marcada especialmente por la decisión<br />
<strong>del</strong> gobierno en función, la cual define el<br />
uso y destino de este patrimonio común y con<br />
ello la <strong>política</strong> sobre el mismo.<br />
<strong>Cultura</strong> y <strong>política</strong>, es entonces un binomio<br />
que da lugar a solucionar o empeorar cualquier<br />
problema social, siendo por tal que el <strong>espacio</strong><br />
publico no escapa a esta condición, por un<br />
lado el urbanita lo vive sin ninguna intencionalidad;<br />
sobrevive el ir y venir cotidiano, trazado<br />
por el tránsito obligado para llegar a la cita con<br />
las actividades de todos los días, y por otro<br />
lado las decisiones municipales asumidas en el<br />
mejor de los casos, en base a estudios técniconormativos,<br />
que comúnmente no pretenden<br />
trascender más allá de la búsqueda de una organización<br />
espacial.<br />
Idealistamente se podría…<br />
La apropiación y disfrute <strong>del</strong> <strong>espacio</strong> <strong>público</strong>,<br />
es con toda certeza el principio individual que<br />
en lo colectivo da el sustento para orientar el diseño<br />
y la construcción <strong>del</strong> mismo, es así como<br />
en nuestra ciudad toda acción <strong>del</strong> sujeto repercute<br />
en el conjunto de la sociedad, señalando<br />
que cualquier acto que atente sobre el uso <strong>del</strong><br />
<strong>espacio</strong> <strong>del</strong> otro, suma factores que alteran de<br />
manera negativa el entorno urbano; idealistamente<br />
el efecto podría ser favorable, cuando<br />
individualmente y de manera grupal cada uno<br />
de nosotros realicemos una acción en pro <strong>del</strong><br />
<strong>espacio</strong> de todos, cuando en lugar de grafitear<br />
los muros y fachadas de nuestros edificios, las<br />
limpiemos y las pintemos; cuando en lugar de<br />
tirar basura barramos el frente de nuestra casa;<br />
cuando transitando por la calle respetemos un<br />
principio de orden, automovilistas obedeciendo<br />
señalamientos de tránsito, transportistas<br />
deteniéndose en los lugares dispuestos para<br />
el ascenso y descenso de pasajeros, ciclistas y<br />
motociclistas circulando por los sentidos de<br />
las calles, peatones atravesando por los lugares<br />
indicados las calles y avenidas.<br />
Creo que a nivel individual y colectivo las<br />
acciones que contribuyan a seguir un orden<br />
son fundamentales para incrementar la calidad<br />
<strong>del</strong> <strong>espacio</strong> <strong>público</strong>, mas sin embargo no<br />
lo es todo, el habitante además de atender los<br />
principios de una co-habitabilidad, debe entender<br />
y adquirir el compromiso de participar<br />
con propuestas para que el <strong>espacio</strong> <strong>público</strong> sea<br />
más interesante; definitivamente en nuestras<br />
ciudades hay muestra de que alguna vez existió<br />
esta condición, es por ello que hoy podemos<br />
disfrutar de los centros históricos como el de<br />
nuestra ciudad de Morelia, que denota una<br />
preocupación <strong>del</strong> habitante por hacer una ciudad<br />
armónica donde sincronizadamente se<br />
adoptan una serie de características morfológicas<br />
que expresan un gran sentido de identidad<br />
y gusto por la belleza arquitectónica.<br />
Proyectos y realidad social<br />
En lo que corresponde a la decisión de la<br />
autoridad, es cierto que los instrumentos de<br />
ordenamiento, como lo son los programas<br />
de desarrollo, tienen la intención de orientar<br />
el crecimiento de las ciudades, a veces acertadamente<br />
desde el punto de vista técnico y en<br />
otras, direccionadas con intereses económicos<br />
de ciertos grupos de poder; para el caso es lo<br />
mismo, mientras no exista una idea de desarrollo<br />
económico que fortalezca al sector de<br />
la sociedad más desprotegido, habrá quienes<br />
seguirán arriesgándose a tener un pedazo de<br />
techo y terreno, aun a costa <strong>del</strong> riesgo que implica<br />
actuar en contra de la ley.<br />
Es así que los programas y proyectos desvinculados<br />
de una realidad social, no serán útiles<br />
en tanto no integren las estrategias <strong>política</strong>s<br />
que lleven al individuo y a su familia a una po-<br />
sición que les de la dignidad que requieren<br />
como participante de una sociedad.<br />
Bajo la premisa de que el <strong>espacio</strong> <strong>público</strong><br />
debe ser agradable, todos nos imaginamos<br />
una calle, un jardín, una plaza o un parque, con<br />
la cualidad de la belleza, aunque <strong>del</strong> mismo<br />
modo nadie o casi nadie se imagina que detrás<br />
de esto, están dos factores importantes que le<br />
dan origen, uno que tiene que ver con el diseño<br />
de un <strong>espacio</strong> <strong>público</strong>, con todo lo que esto<br />
implica, vegetación, mobiliario, alumbrado,<br />
etc., y otro que tienen que ver con el mantenimiento<br />
<strong>del</strong> mismo <strong>espacio</strong>. Así pues es común<br />
que por simple intuición imaginemos que una<br />
ciudad llena de árboles llegara a ser agradable<br />
y bella, pero de manera objetiva podemos señalar<br />
que no se trata de colmar de elementos<br />
el escenario urbano, sino de saberlos conjugar<br />
pertinentemente, para que en armonía nos den<br />
un ambiente agradable. Así mismo el mantener<br />
un <strong>espacio</strong> <strong>público</strong> además de la atención <strong>del</strong><br />
personal municipal, requiere de una estrategia<br />
de participación ciudadana y tal vez <strong>del</strong> sector<br />
privado, donde se puedan originar apoyos extraordinarios<br />
para conservar en buen estado<br />
estas áreas.<br />
Es por tanto el <strong>espacio</strong> <strong>público</strong>, el <strong>espacio</strong><br />
de todos, donde se da la expresión más ejemplar<br />
<strong>del</strong> concepto de democracia e igualdad,<br />
por que no importando el nivel económico, ni<br />
clase social, ni ideología, absolutamente todos,<br />
sufrimos o gozamos con equidad <strong>del</strong> <strong>espacio</strong><br />
urbano que la ciudad nos ofrece para vivir.<br />
Otra solución<br />
proviene de la<br />
autoridad…por<br />
la decisión <strong>del</strong><br />
gobierno en función,<br />
la cual define el<br />
uso y destino de este<br />
patrimonio común<br />
y con ello la <strong>política</strong><br />
sobre el mismo.<br />
Miércoles 13 de agosto de 2008 Identidad 3
Escolar<br />
El concepto <strong>del</strong><br />
autocuidado abarca:<br />
• Higiene (general y<br />
personal).<br />
• Nutrición (tipo y<br />
calidad de la comida).<br />
• Tipo de vida (deporte,<br />
recreación…).<br />
• Factores ambientales.<br />
• Factores socioeconómicos<br />
• Automedicación.<br />
Conductas de autocuidado<br />
relacionado con la salud*<br />
*Adecuaciones al<br />
texto elaborado por<br />
estudiantes de la Facultad<br />
de Enfermería de la<br />
Universidad Michoacana<br />
que están realizando<br />
investigaciones como<br />
parte de la carrera que<br />
están cursando. En este<br />
caso, participó un equipo<br />
asesorado por la Dra. Enf.<br />
María Leticia Rubí García<br />
Valenzuela.<br />
Fernando Covián Mendoza<br />
4 Identidad Miércoles 13 de agosto de 2008<br />
El autocuidado es lo que la gente hace por su cuenta para mantener su salud, prever y hacer frente a<br />
las enfermedades: Organización Mundial de la Salud.<br />
Expresan la intención de mejorar su conducta respecto <strong>del</strong><br />
autocuidado de su salud.<br />
Entre estudiantes de Enfermería<br />
Esta investigación se realiza por estudiantes<br />
con el fin de analizar las conductas<br />
de autocuidado que aplican<br />
también estudiantes, en este caso <strong>del</strong><br />
tercer grado de la Facultad de Enfermería de la<br />
Universidad Michoacana. En su búsqueda de<br />
información, el equipo estudiantil que realizó<br />
este trabajo encontró que:<br />
En la práctica, la definición y comprensión<br />
<strong>del</strong> autocuidado ha evolucionado significati-<br />
vamente en los últimos años, y es de suponerse<br />
que continúe haciéndolo en el futuro cercano.<br />
La concepción inicial <strong>del</strong> autocuidado lo ubicaba<br />
sencillamente como la respuesta de la<br />
gente que está conciente.<br />
Luego, en los años 80 fue conceptualizado<br />
como parte de un estilo de vida, en tanto que<br />
en la década de los 90 fue identificado como<br />
una de las tendencias más importantes en el<br />
sector <strong>del</strong> cuidado de la salud. En atención a<br />
esta postura, la Organización Mundial de la<br />
Salud manifestó, en 1998, que “el autocuidado<br />
es lo que la gente hace por su cuenta para<br />
mantener su salud, prever y hacer frente a las<br />
enfermedades”.<br />
El autocuidado es un concepto muy amplio<br />
que abarca la higiene (general y personal),<br />
nutrición (tipo y calidad de la comida que se<br />
ingiere), tipo de vida (actividades deportivas,<br />
recreación, etc.), factores ambientales (condiciones<br />
de vida, hábitos sociales, etc.), factores<br />
socioeconómicos (nivel de ingresos, beneficios<br />
culturales, etc.), y automedicación.<br />
Así como la incapacidad para cumplir con<br />
las indicaciones médicas de autocuidado, y <strong>del</strong><br />
cumplimiento al tratamiento medicamentoso.<br />
La investigación estuvo enfocada a alumnos<br />
que estaban por concluir sus estudios de<br />
nivel superior y, por lo mismo se consideró que<br />
debían ser ya muy concientes <strong>del</strong> autocuidado<br />
para tener una mejor salud, además considerando<br />
que debido a esta carrera específica que<br />
eligieron deberán comportarse como promotores<br />
de la salud.<br />
La investigación tuvo como objetivo conocer<br />
cuáles son las conductas de autocuidado<br />
que aplican esos alumnos, quienes ya durante<br />
su vida profesional diariamente tendrán que<br />
dar consejos a sus pacientes y orientar a la población<br />
en general respecto de la importancia<br />
de adoptar y mantener buenas conductas enfocadas<br />
hacia su salud.<br />
Una vez realizado el estudio y el trabajo de<br />
campo correspondiente a la metodología de<br />
investigación propuesta, el equipo llegó a las<br />
conclusiones siguientes:<br />
Conclusiones<br />
Fernando Covián Mendoza<br />
Periodista y promotor cultural.<br />
Editor de Identidad<br />
Fotografía<br />
Irena Medina Sapovalova<br />
Se encontraron más resultados negativos respecto<br />
de lo que se esperaba, pues teniendo<br />
como base el plan de estudios y la teoría <strong>del</strong><br />
autocuidado de Dorotea Orem, además de<br />
que esos alumnos habían ya cursado el 75%<br />
de la carrera, era de esperarse que, debido a la<br />
información y formación recibida, fueran muy<br />
conscientes y aplicaran eficientemente el autocuidado<br />
de su salud.<br />
Se identificó que los alumnos <strong>del</strong> tercer<br />
grado expresan la intención de mejorar sus<br />
conductas respecto <strong>del</strong> autocuidado de su salud,<br />
pero que se queda en eso, solo intención,<br />
ya que no se esfuerzan para corregir y mejorar,<br />
y que son otras sus prioridades, relegando en<br />
importancia a su bienestar físico.<br />
Fue observado también que la mayoría de<br />
los estudiantes presentan un alto índice de<br />
baja autoestima; no se aceptan como son, y<br />
que aún cuando identifican y saben lo qué les<br />
molesta o deben de cambiar, no hacen nada<br />
para transformar situaciones, y se mantienen<br />
en una misma rutina.<br />
Es importante señalar que la mayoría de los<br />
estudiantes considerados para esta investigación<br />
no cuentan con un programa de descanso y ejercicio,<br />
por lo que tienen problemas en cuanto a<br />
su salud física y psicológica. Esto lo reflejan en<br />
sus actividades académicas en forma de obtención<br />
de calificaciones bajas, en desinterés ante<br />
las materias, ausentismo de clases; en resumen,<br />
bajo rendimiento escolar. Y si se encuentran<br />
en práctica hospitalaria, su rendimiento puede<br />
ser menor respecto de la aplicación de conocimiento<br />
y <strong>del</strong> seguimiento de los procesos.<br />
En la mayoría se presenta además el problema<br />
de no alimentarse adecuadamente. En lo general<br />
se dan lapsos grandes entre comidas y es<br />
baja la calidad de los alimentos que consumen.<br />
Estos resultados llevan a considerar que<br />
estos estudiantes pueden en su futuro llegar a<br />
padecer alteraciones en el estado de su salud, lo<br />
que incidiría en el cumplimiento de sus necesidades<br />
y cargas académicas y, en un segundo<br />
plano, problemas para poder brindar adecuada<br />
y eficazmente orientaciones a la población respecto<br />
de conductas de autocuidado relacionado<br />
a la salud.
Hetero-Doxias<br />
Pueblo bicicletero<br />
Marco Antonio Landavazo<br />
Como cualquier mexicano<br />
sabe, “pueblo bicicletero” es<br />
una expresión que tiene, en<br />
nuestro país, una carga peyorativa.<br />
Se utiliza para referirse a aquellas<br />
localidades provincianas, atrasadas, tradicionales,<br />
alejadas <strong>del</strong> progreso, y que se<br />
singularizan precisamente porque, a falta<br />
de coches u otros medios de transporte<br />
modernos, sus habitantes se desplazan<br />
en bicicletas. Pues quisiera contarle, ama-<br />
ble lector, que gracias a la generosidad de<br />
la Westfälische Wilhelms-Universität<br />
Münster pude estar a principios de julio<br />
en un pueblo “bicicletero” de Alemania:<br />
Münster.<br />
Un auténtico pueblo (ciudad, en<br />
realidad) bicicletero, pues muchísimos<br />
de quienes ahí viven, una mayoría quizá,<br />
se desplazan en ella en bicicleta. Pude<br />
ver con mis propios ojos las calles de la<br />
ciudad atestadas de ciclistas yendo de<br />
aquí para allá, jóvenes y viejos, elegantes<br />
e informales, con prisa o sin ella, y con<br />
muy poca consideración para el peatón<br />
es cierto. Los diez días que estuve en<br />
Münster observé el mismo espectáculo,<br />
que me fascinó a pesar de que ya había<br />
estado antes en Ámsterdam, ciudad<br />
también amigable con el ciclista. Así que<br />
me causó poco asombro cuando me<br />
enteré que en la ciudad hay poco más<br />
de 100 mil habitantes y poco más de 200<br />
mil bicicletas.<br />
Así que al regresar a mi sufrida Morelia<br />
y ver la cantidad de coches y la furia<br />
con la que los conducen algunos impacientes<br />
y groseros conductores recordé<br />
Münster y me eché a llorar, preguntándome<br />
¿por qué no puede Morelia ser<br />
un moderno pueblo bicicletero como<br />
Münster? Luego, para consolarme, me<br />
respondí que no podía comparar a<br />
nuestra ciudad, latinoamericana, pobre<br />
y asiento de un millón de habitantes,<br />
con aquella idílica ciudad europea, rica<br />
Marco Antonio Landavazo<br />
*Profesor-investigador <strong>del</strong><br />
Instituto de Investigaciones<br />
Históricas de la UMSNH<br />
y habitada apenas por cien mil personas.<br />
No tenemos, me dije, ni la tradición ni<br />
el dinero para idear y poner en marcha<br />
<strong>política</strong>s urbanas tendientes a favorecer<br />
el uso de la bicicleta.<br />
Pero he ahí que al día siguiente cojo el<br />
periódico y leo una pequeña nota sobre<br />
Bogotá, la capital colombiana, y sobre<br />
los once años de vida de un programa<br />
destinado a rescatar los <strong>espacio</strong>s <strong>público</strong>s<br />
para la población, que incluye el fomento<br />
<strong>del</strong> uso de la bicicleta, construyendo<br />
para ello una red de ciclovías, a la<br />
que se han destinado ya 121 kilómetros.<br />
Todos los domingos y días festivos, de las<br />
7 a las 14 horas, patinadores y ciclistas toman<br />
por asalto las principales calles de la<br />
ciudad, volviéndolas suyas. Eso ocurre<br />
en Bogotá, ciudad latinoamericana, no<br />
precisamente rica, en donde viven casi<br />
7 millones de personas, sin contar el área<br />
metropolitana. Y pienso en mi sufrida<br />
Morelia y vuelvo a llorar.<br />
Citas y comentarios<br />
La ética<br />
como forma de vida<br />
Tercera y última parte<br />
Rocío Miriam García Barrera*<br />
“El hombre es un ser “utópico” por naturaleza; es<br />
decir, tiende siempre a soñar en un futuro mejor<br />
ya sea para sí mismo, o para los que le rodean.<br />
De ahí que filósofos como Sócrates llegaron a<br />
considerar que el bien es un conocimiento y que<br />
tal conocimiento conduce al hombre directamente<br />
a realizar un acto bueno. El mal es producto de la<br />
ignorancia humana acerca de lo que es realmente<br />
el bien”. (Rodríguez, et. al. op. cit. pág.33).<br />
Sin embargo, al definir el sentido moral como<br />
el conjunto de esquemas, normas y reglas que<br />
hemos adquirido a través de nuestra educación,<br />
familia y medio ambiente, y que mantenemos en<br />
el momento de emitir un juicio moral, no podemos<br />
olvidarnos de nuestra propia biografía, es decir,<br />
de nuestra historia individual; efectivamente,<br />
podremos recordar, con facilidad, que a lo largo de<br />
ella se nos ha transmitido un conjunto de reglas o<br />
normas morales. ¿Quién nos las ha transmitido?: En<br />
primer lugar nuestra familia, luego las instituciones<br />
educativas en las que hemos estado, también<br />
la propia sociedad en la que vivimos y de la que<br />
dependemos.” Esto explica el por qué Sócrates<br />
se dirigía en el Ágora a los atenienses cuando<br />
éstos se quejaban: “No critiquen a los jóvenes,<br />
más bien pregúntense que hemos sembrado en<br />
sus corazones para que estén dando estos frutos.”<br />
(David, 1999).<br />
“…cuando el ser humano emplea sus valores<br />
morales lo hace pensando en los demás pero a<br />
partir de sí mismo. Si somos generosos, seremos<br />
felices porque al dar estamos satisfaciendo nuestra<br />
necesidad de dar y compartir…”(Montes de Oca, M.<br />
E. 2006. Inédito).<br />
De acuerdo a Fromm (1985) “La afirmación de la<br />
vida, felicidad, crecimiento y libertad propios, está<br />
determinada por la propia capacidad de amar.”<br />
“…en un mundo sin valores nadie podría intentar<br />
ningún tipo de relación con alguien más. El hombre<br />
no podría ser llamado Homo sapiens puesto que no<br />
estaría utilizando su inteligencia ni desarrollando su<br />
capacidad de amar…” “…En la vida necesitamos la<br />
existencia de valores como el respeto, la tolerancia,<br />
la amistad, generosidad y solidaridad para poder<br />
subsistir dentro de una sociedad; ya que éstos<br />
nos dan esas ganas de vivir que se requieren para<br />
poder apreciar la vida.”(Soria, V. O. 2006. Inédito)<br />
*Rocío Miriam García Barrera<br />
Bióloga, egresada de la UMSNH<br />
Profesora <strong>del</strong> C.E.B. 6/10 de Queréndaro, Mich.<br />
Miércoles 13 de agosto de 2008 Identidad 5
Artículos<br />
Tres de 6 interrogantes:<br />
• ¿Por qué alguien estudia<br />
arquitectura?<br />
• ¿Cuándo se siente<br />
realizado un<br />
arquitecto?<br />
• ¿Para quién construye el<br />
arquitecto?<br />
*La doctora Rosario<br />
Herrera Guido, es autora,<br />
coordinadora y coautora de<br />
varios libros y más de 200<br />
ensayos de investigación y<br />
divulgación. Conferencista<br />
magistral y Ponente en<br />
Congresos Nacionales e<br />
Internacionales. Docente<br />
invitada por universidades<br />
nacionales y extranjeras.<br />
Miembro <strong>del</strong> Sistema<br />
Nacional de Investigadores.<br />
Rosario Herrera Guido<br />
6 Identidad Miércoles 13 de agosto de 2008<br />
Psicoanálisis y arquitectura<br />
El niño, tan pronto como dibuja la figura humana también<br />
bosqueja la casa.<br />
Diálogos y conflictos<br />
Este texto es un resumen de los pensamientos<br />
a que me condujo una<br />
investigación realizada con alumnos<br />
y profesores de la Facultad de Arquitectura<br />
de la Universidad Autónoma <strong>del</strong> Estado<br />
de Morelos, bajo la coordinación <strong>del</strong> doctor<br />
Horacio Foladori.*<br />
Una investigación que muestra la conocida<br />
relación imaginaria que existe entre el cuerpo y<br />
la casa. El cuerpo como primer asiento <strong>del</strong> yosujeto,<br />
que conforma un <strong>espacio</strong>, que logra mayor<br />
especificidad y complejidad a lo largo de la<br />
vida. El niño, tan pronto como dibuja la figura<br />
humana también bosqueja la casa, como piensa<br />
la psicoanalista argentina Arminda Aberastury,<br />
en El juego de construir casas, editado<br />
por Paidós.<br />
Es posible pensar la arquitectura desde el<br />
discurso psicoanálítico, pero en diálogo con la<br />
antropología social, pues el imaginario colectivo<br />
se recrea a partir <strong>del</strong> <strong>espacio</strong> social, como<br />
sostiene el antropólogo francés Marc Augé,<br />
en su libro Los no lugares, <strong>espacio</strong>s <strong>del</strong> anonimato,<br />
publicado por Gedisa. O desde la<br />
lectura de los conflictos políticos que gesta el<br />
<strong>espacio</strong> a través de las reflexiones <strong>del</strong> filósofo<br />
francés Henri Lefebvre, Espacio y <strong>política</strong>,<br />
de la editorial Península. Recordando la importancia<br />
que tienen relaciones entre estética<br />
y arquitectura que desarrolla el filósofo español<br />
Josep Muntañola, en Poética y arquitectura,<br />
publicado por Anagrama. Sin olvidar el imaginario<br />
espacial, pensado a través de un creativo<br />
diálogo entre el psicoanálisis y la fenomenología<br />
realizado por el filósofo francés Gaston<br />
Bachelard en su espléndido libro Poética <strong>del</strong><br />
<strong>espacio</strong>, editado por el Fondo de <strong>Cultura</strong> Económica.<br />
Las relaciones con el cliente<br />
Con estos antecedentes, es posible pensar la<br />
problemática que surge frente a la demanda<br />
a un arquitecto o constructora de construir<br />
una casa-habitación por parte de un particular.<br />
Por un lado, la queja unánime que presentaron<br />
los alumnos de arquitectura fue que el cliente<br />
Rosario Herrera Guido<br />
Filósofa y Psicoanalista. Doctora en Filosofía<br />
(UNED, España). Doctora en Psicoanálisis (CIEP,<br />
México). Profesora e Investigadora <strong>del</strong> Instituto<br />
de Investigaciones Filosóficas de la UMSNH.<br />
El arquitecto, gracias a su sensibilidad e inteligencia, tiene grandes posibilidades de superar los conflictos<br />
en la relación arquitecto-cliente, sólo si es capaz de conjugar las necesidades y deseos de sus<br />
clientes con las propias.<br />
aprueba un proyecto diseñado por un arquitecto,<br />
y en plena fase de la construcción, se percata<br />
de la necesidad de realizar “algunas pequeñas<br />
modificaciones”, pues no había entendido muy<br />
bien el proyecto, o cambió de idea, porque no<br />
era exactamente lo que quería, etc. Los alumnos<br />
señalaron el inconveniente de que el cliente<br />
no estaba capacitado para entender la reducción<br />
de las tres dimensiones a las coordenadas<br />
de un plano, motivo por el cual pidiera una<br />
maqueta de lo que sería la casa. Por otro lado,<br />
en las circunstancias en que el cliente tiene<br />
muy claro cuáles son sus necesidades, al punto<br />
de presentar un croquis de lo que desea al arquitecto,<br />
el profesionista se siente relegado en<br />
la realización <strong>del</strong> proyecto, ya que sólo le toca<br />
realizar el croquis a escala y dirigir la obra, sin<br />
la posibilidad de tener para sí un poco <strong>del</strong> goce<br />
estético que produce la creación <strong>del</strong> proyecto<br />
arquitectónico.<br />
En otros casos, tanto los estudiantes como<br />
los profesores, señalaron que había una gran<br />
incomunicación, al punto de tener que hacer<br />
un sin fin de proyectos, sin lograr satisfacer al<br />
cliente, lo que produce una gran frustración
Artículos<br />
para el arquitecto. Pues el profesional se percata<br />
de que el cliente no sabe lo que desea, lo que<br />
no sólo encarece el proyecto, sino que agudiza<br />
las relaciones en el contrato profesional.<br />
Finalmente, el arquitecto está convencido<br />
de que sabe manejar el <strong>espacio</strong>, las formas, el<br />
color y la distribución funcional, dado que es<br />
capaz de solucionar los problemas que la construcción<br />
plantea. Pero a menudo el cliente desea<br />
un manejo absurdo <strong>del</strong> <strong>espacio</strong>, y el arquitecto<br />
entra en un diálogo de sordos para hacer<br />
comprender al cliente las ventajas de su diseño.<br />
En este marco, puede suceder que el arquitecto<br />
crea saberlo todo, de manera que el cliente se<br />
debe someter a sus consejos técnicos, o bien<br />
que el cliente pretenda someter al arquitecto a<br />
su deseo, con lo que surge, como en toda relación<br />
humana, un problema de poder.<br />
Psicohigiene en arquitectura<br />
Todas estas situaciones fueron el punto de partida<br />
para trabajar sobre estos problemas, para<br />
esclarecerlos, ampliar el conocimiento, con<br />
el fin de que el arquitecto pudiera actuar de<br />
manera realista y manejar los conflictos en la<br />
relación arquitecto-cliente. Una tarea de psicohigiene<br />
en arquitectura que permitiera esclarecer<br />
situaciones conflictivas en este ámbito<br />
profesional. Todo ello, para poder llevar a cabo<br />
una orientación profesional, que no consiste<br />
en dar soluciones o recomendaciones, sino<br />
en esclarecer los problemas para optimizar su<br />
comprensión y su ejecución.<br />
Así, las mesas de trabajo se propusieron obtener<br />
un primer material de análisis, a partir de<br />
preguntas claves: 1) ¿Por qué alguien estudia<br />
arquitectura? 2) ¿Cuándo se siente realizado<br />
un arquitecto? 3) ¿Para quién construye el arquitecto?<br />
4) ¿Qué relación hay entre la organización<br />
de la familia y el diseño de la casa-habitación<br />
proyectada? 5) ¿De qué manera influye<br />
en el proyecto <strong>del</strong> arquitecto, su propia casa<br />
(actual, soñada o futura)? 6) ¿Qué es lo que el<br />
arquitecto intenta estructurar al construir una<br />
casa-habitación?<br />
El arquitecto debe construir algo funcional<br />
y bello. Esta fue una respuesta unánime de los<br />
arquitectos, estudiantes y profesores. Ellos ocupan<br />
el lugar social de diseñar los <strong>espacio</strong>s que<br />
cumplan estas funciones. Lo funcional implica<br />
comodidad, fácil desplazamiento, usos múltiples<br />
que responden a necesidades. Lo bello<br />
crea valores estéticos, enriquece el pensamiento<br />
y la sensibilidad. La arquitectura trasciende<br />
la mera eficacia y la solidez de la construcción,<br />
pues tiene una tarea valorativa.<br />
Pero cuando se afirma que el arquitecto<br />
debe construir algo funcional y bello, el único<br />
que se supone que sabe lo que implican<br />
estos dos factores es el profesional, mientras<br />
el cliente los desconoce o no los tiene claros.<br />
El problema ahora es con el saber universitario,<br />
que es decir con verdades y valores a veces<br />
entendidos como absolutos, sólo conocidos<br />
por el profesionista. Tal vez por ello se habla<br />
de proyecto, porque el arquitecto puede tener<br />
la tentación de proyectar su subjetividad en su<br />
proyecto: ¿Reparar lo disfuncional y desagradable?<br />
¿Crear nuevas realidades? ¿Dejar huella<br />
y trascender la muerte, su propia muerte? ¿Por<br />
eso lo firma?<br />
Armonía que puede promoverse<br />
La casa permite que la familia funcione mejor.<br />
He aquí la funcionalidad. El arquitecto supone<br />
una; gracias a su proyecto funcional y bello, los<br />
habitantes podrían ser felices, libres de conflictos,<br />
etc. La disfuncionalidad es generadora de<br />
tensiones. Pero parece muy ambicioso que el<br />
arquitecto pueda solucionar conflictos familiares,<br />
y menos si son de larga data. El arquitecto<br />
no está obligado a ser omnipotente. No se trata<br />
de un tipo de vivienda, sino de la vivencia, es<br />
decir, de la respuesta al nivel <strong>del</strong> pensamiento<br />
y el afecto que cada cual da, justo cuando es<br />
introducido en un <strong>espacio</strong> determinado. Tal<br />
vez una vivencia que alimenta el interés por el<br />
estudio <strong>del</strong> <strong>espacio</strong> y sus soluciones: ¿estudiar<br />
arquitectura?<br />
El arquitecto, señalaron los alumnos y los maestros,<br />
siente satisfacción de dar al cliente lo que necesita<br />
y desea. La primera satisfacción es la <strong>del</strong> arquitecto:<br />
verse reflejado en el proyecto como en<br />
un espejo, situación en la que se autoafirma como<br />
capaz y creativo, pues no sólo ha podido reparar<br />
algo externo que parece destruido, sino que ha<br />
creado una nueva realidad. Y si además el cliente<br />
reconoce que el proyecto es adecuado, con ello<br />
reafirma el quehacer <strong>del</strong> arquitecto.<br />
Ante los deseos y los proyectos de ambos<br />
actores, resulta impensable desconocer los<br />
deseos inconscientes tanto de los arquitectos<br />
como el de sus clientes, como el deseo de crear<br />
y reparar, y en consecuencia proyectar sus propios<br />
deseos. Sin olvidar que existe un obstáculo<br />
importante: la imposibilidad de escucharse<br />
mutuamente, que se presenta casi como un<br />
síntoma, que es preciso superar, en función de<br />
la adecuada consecución de todo proyecto arquitectónico.<br />
En el manejo creativo de los <strong>espacio</strong>s, el arquitecto,<br />
gracias a su sensibilidad e inteligencia,<br />
tiene grandes posibilidades de superar los conflictos<br />
en la relación arquitecto-cliente, sólo si<br />
es capaz de conjugar las necesidades y deseos<br />
de sus clientes con las propias.<br />
Fotografía<br />
Irena Medina Sapovalova<br />
El cliente aprueba<br />
un proyecto diseñado<br />
por un arquitecto, y<br />
en plena fase de<br />
la construcción,<br />
se percata de la<br />
necesidad de realizar<br />
“algunas pequeñas<br />
modificaciones”…<br />
Miércoles 13 de agosto de 2008 Identidad 7
Artículos<br />
Temas de sus<br />
investigaciones:<br />
• Obras escritas en<br />
lengua tarasca.<br />
• Las bibliotecas y los<br />
impresos michoacanos.<br />
• La historia de<br />
la imprenta en<br />
Michoacán.<br />
• El arte de la<br />
encuadernación.<br />
8 Identidad Miércoles 13 de agosto de 2008<br />
Historiador y bibliógrafo nicolaita<br />
La historia y las vicisitudes <strong>del</strong> éxodo de nuestros impresos y<br />
manuscritos.<br />
Rigurosos métodos de estudio<br />
A nadie<br />
debe tanto la cultura historiográfica<br />
y bibliográfica de Michoacán<br />
en el siglo XX, como al<br />
licenciado Joaquín Fernández de<br />
Córdoba, notable estudioso de los impresos<br />
mexicanos y autor de numerosos estudios acerca<br />
de imprentas y bibliotecas. Nació en Morelia<br />
en 1913 y falleció en la ciudad de México el<br />
18 de octubre de 1977. Su verdadero nombre<br />
fue Joaquín Morán, pero adoptó los apellidos<br />
Fernández de Córdoba con los cuales fue más<br />
conocido. Hizo sus primeros estudios en la capital<br />
michoacana y luego emigró a la ciudad de<br />
México en donde prosiguió con los correspondientes<br />
al bachillerato y los profesionales que<br />
cursó en la Facultad de Derecho y Ciencias<br />
Sociales de la UNAM. En la Escuela de Altos<br />
Estudios, hoy Facultad de Filosofía y Letras de<br />
la misma Casa de Estudios asistió a las cátedras<br />
de Geografía, Antropología, Arqueología,<br />
Etnología, Historia y Ciencias Auxiliares. Por<br />
ese tiempo, de su maestro el Dr. Nicolás León,<br />
aprendió los rigurosos métodos aplicados a los<br />
estudios bibliográficos, que más tarde emplearía<br />
en buena parte de sus escritos.<br />
A finales de la década de los años treinta, a<br />
su regreso a Michoacán organizó la Sociedad<br />
de Geografía e Historia de Michoacán, para lo<br />
que contó con el respaldo <strong>del</strong> general Gildardo<br />
Magaña, en ese tiempo gobernador <strong>del</strong> Estado<br />
y <strong>del</strong> licenciado Natalio Vázquez Pallares, rector<br />
de la Universidad Michoacana. Esta agrupación<br />
cultural, tenía como propósito promover<br />
y difundir estudios académicos acerca de la<br />
geografía, la historia y la cultura de Michoacán.<br />
Un primer resultado de los trabajos de la Sociedad<br />
de Geografía e Historia de Michoacán fue<br />
la publicación de un cuaderno de Fernández<br />
de Córdoba publicado en 1939 con el título<br />
La <strong>Cultura</strong> tarasca, que posteriormente<br />
tuvo una segunda edición.<br />
En su idea de formar un catálogo de obras<br />
escritas en lengua tarasca, en 1940 inició su<br />
más grande aventura intelectual, misma que en<br />
las décadas siguientes dio abundantes frutos.<br />
Sobre ello, su amigo José Castañón Rodríguez<br />
escribió: “En el año de 1940, el Lic. Joaquín Fernández<br />
de Córdoba, historiador y bibliógrafo<br />
mexicano que a la sazón daba los pasos preliminares<br />
para confeccionar una Bibliografía de<br />
la lengua tarasca y catálogo de manuscritos,<br />
tropezó con la dificultad de que la mayor<br />
parte <strong>del</strong> copioso material existente sobre esa<br />
lengua no se encontraba en México, por lo que<br />
Dr. Gerardo Sánchez Díaz<br />
Instituto de Investigaciones Históricas<br />
A nadie debe tanto la cultura historiográfica y bibliográfica de Michoacán en el siglo XX, como al licenciado<br />
Joaquín Fernández de Córdoba, notable estudioso de los impresos mexicanos y autor de numerosos<br />
estudios acerca de imprentas y bibliotecas.<br />
tuvo que trasladarse a Norteamérica, en cuyas<br />
bibliotecas examinó y copió más de ocho mil<br />
páginas de impresos y manuscritos y aun pudo<br />
completar su exhaustivo trabajo con fuentes<br />
que se conservan en bibliotecas y archivos al<br />
otro lado <strong>del</strong> Atlántico.<br />
Paciente búsqueda en bibliotecas<br />
Durante su peregrinación por los principales<br />
repositorios estadounidenses y merced al trato<br />
frecuente con los fondos mexicanos que custodiaban,<br />
Fernández de Córdoba se dedicó a<br />
realizar, simultáneamente, una tarea digna de<br />
encomio: estudiar el origen, la naturaleza y extensión<br />
de esos ricos emporios bibliográficos<br />
y documentales, para ofrecernos más tarde la<br />
historia y las vicisitudes <strong>del</strong> éxodo de nuestros<br />
impresos y manuscritos, que se remonta a los<br />
primeros años de la Conquista y todavía prosigue,<br />
así como su descripción y actual paradero<br />
en los depósitos norteamericanos”.<br />
El paciente trabajo de búsqueda emprendido<br />
por Fernández de Córdoba en las bibliotecas<br />
de la Hispanic Society of America, de<br />
Nueva York; la Newberry, de Chicago; la John<br />
Carter Brawn, de Providence Rhode Island; las<br />
de las universidades de Pennsylvania, Tulane<br />
Yale y Michigan; así como la Sutra Branch Library<br />
de San Francisco California; la Bancroft,<br />
Gerardo Sánchez Díaz Joaquín Fernández de Córdoba
Artículos<br />
de Berkeley California y la Henry E. Huntington<br />
de San Marino California, arrojó sorprendentes<br />
resultados que quedaron plasmados en<br />
dos artículos que con el nombre de Nuestros<br />
tesoros bibliográficos en los Estados Unidos,<br />
se publicaron en la Historia Mexicana, de El<br />
Colegio de México en 1955 y 1957. El interés y<br />
los elogiosos comentarios a estos artículos por<br />
destacados especialistas lo llevaron a preparar<br />
su famoso libro Tesoros bibliográficos de<br />
México en Estados Unidos, que acompañado<br />
de numerosas ilustraciones de portadas de<br />
impresos y manuscritos dio a conocer la Editorial<br />
<strong>Cultura</strong> en 1959.<br />
Por otro lado, la historia de la imprenta y los<br />
impresos michoacanos <strong>del</strong> siglo XIX fueron<br />
algunos de los temas que más llamaron su atención<br />
dentro de la labor investigativa, además de<br />
que llegó a reunir una de las colecciones más<br />
importantes, tanto de impresos sueltos como<br />
de libros y folletos acerca de numerosos temas,<br />
entre religión, <strong>política</strong>, literatura, geografía, estadística<br />
y lingüística.<br />
Las primeras imprentas<br />
Fue autor de los estudios más importantes<br />
que se hicieron en el siglo XX sobre la historia<br />
de la imprenta en Michoacán, especialmente<br />
en Morelia. En 1943, con el patrocinio de la<br />
Biblioteca Benjamín Franklin de la ciudad de<br />
México, dio a conocer en inglés y español su<br />
estudio crítico sobre Nuevos documentos<br />
para la historia de la imprenta en Morelia.<br />
Impresores e impresos morelianos <strong>del</strong><br />
siglo XIX, acompañado de numerosos facsímiles<br />
tanto de documentos como de portadas<br />
de libros y folletos que salieron de las prensas<br />
de las primeras imprentas establecidas en la<br />
capital michoacana. Unos años más tarde, en<br />
1949, en una pulcra edición hecha en los Talleres<br />
Gráficos de la Nación se publicó su libro<br />
Verdadero origen de la imprenta en Morelia,<br />
en el que corrigió errores de otros estudiosos<br />
<strong>del</strong> tema y aportó nuevos y novedosos<br />
datos referentes a los primeros talleres gráficos<br />
y a sus propietarios. Sobre este estudio el destacado<br />
escritor mexicano Emilio Abreu Gómez<br />
escribió: “El trabajo de Fernández de Córdoba<br />
aborda la tarea ímproba y necesaria de borrar<br />
los errores cometidos antes por otros hombres<br />
de estudio, aunque de menos paciencia organizada.<br />
Después discute lo que llamaríamos<br />
el viaje geográfico que siguió esta imprenta.<br />
Enseguida, por medio de documentos, fija de<br />
manera irrefutable el sitio y la fecha de su establecimiento.<br />
Todo lo cual contribuye de ma-<br />
nera clara, de modo elocuente, para que nos<br />
formemos idea de cual era el estado de ánimo<br />
que prevalecía en aquella región en los tiempos<br />
de la lucha a favor de nuestra independencia. El<br />
rendimiento cultural que dicha imprenta brindó<br />
no necesita ser esclarecido ni ponderado,<br />
basta con decir que de aquella cuna humilde<br />
ha nacido un frondoso árbol de publicaciones<br />
cuyo conjunto apenas si empieza a ser estudiado.<br />
Hombres de la calidad moral y de la calidad<br />
espiritual como Joaquín Fernández de Córdoba<br />
honran la tierra que los vio nacer; dan más<br />
fruto <strong>del</strong> que es común esperar. Su amor por la<br />
patria chica supone, con lógica natural, cual es<br />
su amor por la nación a la cual pertenecemos”.<br />
Estudió la cultura tarasca<br />
Ese amor profundo a la cultura historiográfica,<br />
de su tierra, Michoacán, lo llevó a emprender<br />
y dar a conocer otros estudios referentes a la<br />
cultura tarasca. En 1944, en un opúsculo dio<br />
a conocer Tres impresos en lengua tarasca,<br />
cuya autoría corresponde al Pbro. Sebastián<br />
Olivares, cura de Cherán que los mandó editar<br />
a fines <strong>del</strong> siglo XIX en una imprenta de Zamora.<br />
En ese año y como parte de las labores<br />
editoriales de la Sociedad de Geografía e Historia<br />
de Michoacán, de la que seguía siendo su<br />
presidente, dio a conocer una edición crítica<br />
de la Gramática de la lengua tarasca, escrita<br />
en la cuarta década <strong>del</strong> siglo XIX por el<br />
destacado religioso carmelita michoacano fray<br />
Manuel de San <strong>Juan</strong> Crisóstomo Nájera. Unos<br />
años después, en las páginas de la revista literaria<br />
mexicana El Hijo Pródigo, que editaban<br />
en la ciudad de México Octavio G. Barreda,<br />
Xavier Villaurrutia, Octavio Paz, Alí Chumacero<br />
y Antonio Sánchez Barbado, publicó sus<br />
documentados ensayos titulados “Pipas prehispánicas<br />
de la cultura tarasca”, “Máscaras tarascas<br />
prehispánicas” y “Los perros precolombinos de<br />
América” y una nota bibliográfica <strong>del</strong> “Diccionario<br />
de la lengua tarasca de Gilberti”.<br />
El interés por el estudio de las bibliotecas y<br />
los impresos michoacanos se mantuvo como<br />
eje de la actividad de investigación bibliográfica<br />
y documental <strong>del</strong> licenciado Fernández de<br />
Córdoba durante casi cuatro décadas. Ejemplo<br />
de ello, son sus documentados trabajos<br />
Michoacán la historia y sus instrumentos<br />
y Sumaria relación de bibliotecas, publicados<br />
en la revista Historia Mexicana, de El<br />
Colegio de México en 1952 y 1953, respectivamente.<br />
Sus Fichas inéditas para la bibliografía<br />
de la imprenta en Morelia, que<br />
recogió el Boletín, de la Sociedad Mexicana<br />
de Geografía y Estadística, en 1947, además de<br />
una colección de más de trescientos artículos<br />
Fotografía<br />
Irena Medina Sapovalova<br />
A finales de la<br />
década de los<br />
años treinta, a<br />
su regreso a<br />
Michoacán<br />
organizó la<br />
Sociedad de<br />
Geografía e<br />
Historia de<br />
Michoacán…<br />
Miércoles 13 de agosto de 2008 Identidad 9
Artículos<br />
Títulos de varios de<br />
sus libros:<br />
• Tesoros bibliográficos<br />
de México en Estados<br />
Unidos.<br />
• Verdadero origen<br />
de la imprenta en<br />
Morelia.<br />
• Gramática de la<br />
lengua tarasca<br />
(edición crítica).<br />
• Encuadernaciones<br />
artísticas de<br />
Michoacán.<br />
10 Identidad Miércoles 13 de agosto de 2008<br />
descriptivos de impresos coloniales y <strong>del</strong> siglo<br />
XIX referentes a Michoacán que formaron<br />
parte de su columna semanal en el suplemento<br />
cultural <strong>del</strong> periódico El Nacional, entre<br />
1964 y 1968. Sus aportes a la historia <strong>del</strong> arte tipográfico<br />
y <strong>del</strong> periodismo michoacano quedaron<br />
plasmadas en sus ensayos La litografía<br />
moreliana <strong>del</strong> siglo XIX y El periodismo<br />
en Michoacán, en 1953 en México en la<br />
<strong>Cultura</strong>, suplemento dominical <strong>del</strong> periódico<br />
capitalino Novedades. También se ocupó<br />
de la historia <strong>del</strong> arte de la encuadernación, en<br />
su documentado libro Encuadernaciones<br />
artísticas de Michoacán, publicado por la<br />
Editorial Arana de la ciudad de México en<br />
1970, en el que además de un detallado seguimiento<br />
de los talleres que funcionaron en la<br />
capital michoacana en el siglo XIX en el que<br />
determina los estilos y las especialidades que<br />
los caracterizaron, incluyó más de una docena<br />
de descripciones de empastados artísticos<br />
acompañadas de sus respectivas ilustraciones<br />
fotográficas.<br />
Entre sus últimos trabajos destaca también<br />
un documentado Ensayo biobibliográfico<br />
de <strong>Juan</strong> José Martínez de Lejarza, que<br />
sirvió de estudio introductorio al Análisis<br />
estadístico de la Provincia de Michoacán<br />
en 1822, que se publicó en 1975 como parte<br />
de un número especial de los Anales <strong>del</strong> Museo<br />
Michoacano. Su Aporte a la historia<br />
de la imprenta, se publicó en 1979, dos años<br />
después de su fallecimiento en una edición<br />
limitada y se sabe que quedó inédita una obra<br />
titulada Bibliografía de la lengua tarasca<br />
y catálogo de manuscritos sobre la misma,<br />
misma que esperamos algún día se rescate y<br />
pueda ser publicada.<br />
Su obra periodística<br />
Su labor periodística, casi siempre sobre temas<br />
históricos y bibliográficos se encuentra<br />
dispersa en diversas publicaciones periódicas<br />
mexicanas como El Hijo Pródigo, Historia<br />
Mexicana, el Boletín de la Sociedad Mexicana<br />
de Geografía y Estadística, Viñetas de Literatura<br />
Michoacana, Boletín Bibliográfico<br />
de la Secretaría de Hacienda, México en<br />
la <strong>Cultura</strong>, suplemento <strong>del</strong> periódico Novedades;<br />
Letras Mexicanas, la Revista de la<br />
Academia Nacional de Ciencias, Revista<br />
Mexicana de <strong>Cultura</strong>, suplemento cultural<br />
de El Nacional, Estampa, Memorias de la<br />
Academia de Ciencias Históricas de Monterrey<br />
y los Anales <strong>del</strong> Museo Michoacano.<br />
Además de la investigación y el trabajo periodístico,<br />
el licenciado Joaquín Fernández de<br />
Córdoba desempeñó diversos cargos tanto en<br />
la administración estatal como a nivel federal.<br />
Durante muchos años se ocupó como bibliógrafo<br />
consultor de la Secretaría de Hacienda y<br />
formó parte de la Junta Cívica Conmemora-<br />
tiva de las Efemérides 1964-1965, creada por<br />
el gobierno de Michoacán para conmemorar<br />
el Sesquicentenario de la Promulgación de la<br />
Constitución de Apatzingán y el Bicentenario<br />
<strong>del</strong> Nacimiento de José María Morelos y Pavón,<br />
en la que desempeñó el cargo de director<br />
de publicaciones y como tal diseñó y coordinó<br />
la colección bibliográfica denominada Biblioteca<br />
Michoacana, integrada por seis volúmenes<br />
dedicados a la Constitución de Apatzingán, el<br />
proceso instruido en contra <strong>del</strong> prócer Mariano<br />
Matamoros y una recopilación documental<br />
relativa a Morelos, formada por los licenciados<br />
Antonio Arriaga Ochoa y Manuel Arellano Z.<br />
También participó en programas editoriales de<br />
las casas editoras Editorial Arana y Editorial<br />
<strong>Cultura</strong> de la ciudad de México.<br />
En 1979, su rica biblioteca formada especialmente<br />
por colecciones de impresos michoacanos<br />
y temas relativos a la historia de México,<br />
arqueología, antropología, literatura y geografía<br />
fue adquirida por el gobierno <strong>del</strong> Estado de<br />
Michoacán, pero desgraciadamente se disgregó<br />
para formar la biblioteca “Eduardo Ruiz” <strong>del</strong><br />
Congreso <strong>del</strong> Estado y los primeros fondos de<br />
la biblioteca de El Colegio de Michoacán, perdiéndose<br />
así la unidad en que la había formado<br />
el licenciado Fernández de Córdoba, aun así,<br />
estos dos repositorios han sido de gran utilidad<br />
para la integración de nuevos estudios sobre la<br />
historia de México y Michoacán.
Artículos<br />
Recordar a este<br />
promotor de<br />
la educación<br />
tecnológica<br />
en Michoacán,<br />
es revivir un<br />
periodo de<br />
mayor convicción,<br />
optimismo y<br />
entrega al trabajo<br />
educativo…<br />
Heber Soto Fierro<br />
Con respeto y admiración para la señora Luisa Arriaga Pierres<br />
de Soto e hijos.<br />
Su obra y pensamiento<br />
En el pasar de esta vida, de pronto tenemos<br />
la fortuna de conocer a personas<br />
que, por algún motivo, despiertan<br />
nuestra admiración y nos parecen extraordinarias.<br />
Aunque, muchas veces, este acercamiento<br />
no sea físico, por ejemplo, a través de<br />
sus ideas y trabajo que dejan tras de sí. Este es<br />
el caso <strong>del</strong> Ingeniero Heber Soto Fierro, fundador<br />
<strong>del</strong> Instituto Tecnológico de Morelia<br />
(ITM) en 1964.<br />
Recordar a este promotor de la educación<br />
tecnológica en Michoacán, es revivir un periodo<br />
de mayor convicción, optimismo y entrega<br />
al trabajo educativo, como una característica<br />
<strong>del</strong> contexto sociocultural que le tocó vivir a él,<br />
a sus amigos y compañeros.<br />
El propio ITM, se preocupó por preservar<br />
el legado de tan distinguido maestro, a través de<br />
la edición <strong>del</strong> libro de Miguel Angel Martínez<br />
Ruiz, titulado: “Heber Soto Fierro. Testimonios<br />
de una vida” (1995). En ella se sintetiza<br />
la vida, obra y pensamiento de un ser humano<br />
Glafira Espino Garcilazo Recordando a<br />
sensible a la inequidad social. También incluye<br />
algunas publicaciones y testimonios periodísticos,<br />
aparecidos por motivo de su muy lamentable<br />
accidente en julio de 1983.<br />
Heber fue de esas pocas personas, cuya<br />
vida fue consecuente con su pensamiento. Se<br />
podría argüir al respecto, que ello se entiende<br />
por la solidez en la educación y los valores<br />
que recibió y trasmitió tanto en el seno<br />
familiar como en el educativo-profesional,<br />
es decir como hijo, padre, profesionista y<br />
maestro. Pero, bien sabemos que no siempre<br />
es así. Las personas, por muy condicionadas<br />
que estén en su época, son impredecibles y,<br />
en un momento dado, hacen uso de su libre<br />
albedrío de distintas maneras, optando por<br />
construir diversos proyectos de vida y caminos<br />
para lograrlo. Y el maestro Heber decidió,<br />
porque así lo sintió, comprometerse con<br />
los demás y sobre todo, con los que menos<br />
tienen, apostando por completo al trabajo<br />
educativo como un medio importante para<br />
lograrlo. Testimonios de quienes lo conocieron,<br />
coinciden en que el Ingeniero Heber<br />
Soto, transmitía la emoción que sentía por su<br />
vocación.<br />
Mtra. Glafira Espino Garcilazo<br />
UMSNH-UPN<br />
“Ningún sistema educativo puede ser útil si se estructura de espaldas a la realidad <strong>del</strong> pueblo y hace<br />
caso omiso de sus condiciones de desarrollo material y espiritual”: Ingeniero Heber Soto Fierro.<br />
Fue un maestro humanista<br />
Esto puede explicar hasta cierto punto, que, a<br />
pesar de tener una educación más enfocada<br />
hacia la ciencias exactas, la tecnología y la formación-capacitación<br />
para el trabajo, que a las<br />
disciplinas humanísticas y sociales, Heber fue<br />
un maestro humanista, con conciencia social,<br />
que no restringió -como lamentablemente<br />
hacen muchos ahora- la labor educativa sólo<br />
hacia la especialización para el trabajo, por muy<br />
importante que ésta sea. El maestro otorgó un<br />
papel más ambicioso a la educación, concibiéndola<br />
como un proceso constante que habría de<br />
contribuir a formar seres integrales capaces de<br />
construir una sociedad equitativa donde prive<br />
tanto el bienestar material como el espiritual,<br />
consciente de que los seres humanos somos<br />
ambas cosas: materia y espíritu, que vienen obviamente<br />
a conformar un solo ser capaz de vivir<br />
en armonía con los demás.<br />
Lo asumió como una misión<br />
El maestro no solo tuvo claro el concepto de<br />
educación, el objetivo de la misma y sus características,<br />
sino también el hecho de que dicha<br />
tarea, para poder cumplir con su verdadero<br />
cometido, debía estar a cargo <strong>del</strong> Estado. Estas<br />
ideas y al mismo tiempo preocupaciones, están<br />
presentes en todo tipo de tribuna a la que<br />
el Ingeniero Heber Soto tuvo acceso -cátedra,<br />
escritos, discursos, etc.<br />
Con esa filosofía que se asemeja a la de los<br />
maestros misioneros de la gloriosa década de los<br />
veinte <strong>del</strong> siglo pasado, en que el gran maestro y<br />
filósofo mexicano, José Vasconcelos fuera el líder<br />
de la educación en México, Heber Soto, consecuente<br />
con su pensamiento, asumió el trabajo<br />
educativo y formativo, no sólo como una responsabilidad,<br />
sino también y sobre todo, como una<br />
misión a la que se entregó con cariño, convicción<br />
y optimismo. Pensaba que educando y capacitando<br />
a nuestra juventud se podría construir un gran<br />
país en donde la población alcanzaría la mejoría<br />
económica y con ella, la prosperidad nacional y a<br />
la elevación cultural de la población.<br />
Sin duda alguna, por la consecuencia de su<br />
obra y pensamiento humanístico, Heber Soto<br />
ha trascendido a la historia; forma parte de esa<br />
pequeña pero, grandiosa y admirable pléyade<br />
de seres humanos –aunque de muchos de ellos<br />
no sepamos nada-, que asumieron un compromiso<br />
con su sociedad y trabajaron para que ésta<br />
diera iguales oportunidades de desarrollo material<br />
y espiritual, que cobijara e hiciera felices a<br />
todos y no sólo a unos cuantos.<br />
Miércoles 13 de agosto de 2008 Identidad 11
Invitaciones<br />
Actividades<br />
Artísticas<br />
<strong>del</strong> 13 al 19 de agosto de 2008<br />
12 Identidad Miércoles 13 de agosto de 2008<br />
Primer ciclo de cine en video<br />
Sueños, <strong>del</strong> realizador japonés Akira<br />
Kurosawa, será la segunda cinta <strong>del</strong><br />
primer ciclo de cine en video que,<br />
con el título de “El lenguaje de un<br />
sueño. Universos oníricos cinematográficos”,<br />
han iniciado en esfuerzo conjunto la UMS-<br />
NH y la Cineteca de Michoacán, A. C.<br />
La sede permanente será el Teatro Universitario<br />
“José Rubén Romero” (miércoles, 18:00<br />
Miércoles 13<br />
Sueños<br />
de Akira Kurosawa<br />
Cine en video: Ciclo El lenguaje de un<br />
sueño: universos oníricos cinematográficos<br />
TeaTro “José rubén romero”, 18:00 horas.<br />
Jueves 14<br />
Grupo Esquina Blues<br />
Música blues y jazz<br />
TeaTro “José rubén romero”, 19:00 horas<br />
Viernes 15<br />
Una mirada a la oscuridad<br />
Dir. Richard Linklater<br />
Presenta: Édgar Omar Avilés<br />
CineClub de la FaCulTad de FilosoFía<br />
el espeJo humeanTe<br />
audiTorio de la FaCulTad de FilosoFía<br />
(ediFiCio C-4, Cu), 19:00 hrs.<br />
Sábado 16<br />
Templo de Capuchinas<br />
Visita guiada por Ramón Sánchez Reyna<br />
Morelia ciudad con historia<br />
punTo de reunión: aTrio <strong>del</strong> Templo,<br />
18:00 horas<br />
horas). No obstante, al interior de la Universidad<br />
Michoacana se está conformando una “red”<br />
compuesta por las escuelas y facultades que se<br />
sumen al proyecto.<br />
Este ciclo, inició el miércoles 6 de agosto<br />
con Brasil; continuará con Sueños, de Akira<br />
Kurosawa (el 13), La ciudad de los niños perdidos,<br />
de Jean-Pierre Jeunet y Marc Caro (el<br />
día 20) y La ciencia de los sueños, de Michel<br />
Exposiciones:<br />
Jueves 14<br />
Percepción<br />
Obra escultórica de<br />
Felipe Cuauhtémoc Castañeda<br />
inauguraCión: CenTro CulTural universiTario,<br />
19:00 horas<br />
Paisajes Sin Mundo<br />
Exposición pictórica de Estela López Solís<br />
CenTro CulTural universiTario:<br />
de lunes a viernes de<br />
10:00 a 14:00 y de 16:00 a 20:00 horas<br />
Vector Monarca<br />
Obra pública <strong>del</strong> artista canadiense<br />
Patrick Beaulieu<br />
Jardines <strong>del</strong> museo de hisToria naTural<br />
Encuentros:<br />
Fenomenología cultural<br />
Curso: 27-29 de agosto<br />
Impartido por: Lester Embree (Florida<br />
Atlantic University)<br />
audiTorio <strong>del</strong> insTiTuTo de invesTigaCiones<br />
Gondry (el miércoles 27).<br />
Sueños, penúltima película <strong>del</strong> legendario<br />
realizador japonés, está compuesta por una<br />
serie de viñetas en donde se recrean algunos<br />
de los sueños que a través de su prolífica vida<br />
tuvo el genial director nipón. Es una impresionante<br />
obra que logra imágenes sobrecogedoramente<br />
poéticas, llenas de un lirismo<br />
metafísico.<br />
FilosóFiCas, de 10:30 a 13:30 hrs.<br />
inFormes: división de esTudios de posgrado,<br />
FaCulTad de FilosoFía “dr. samuel ramos”<br />
umsnh<br />
hTTp://ramos.Filos.umiCh.mx<br />
Radio:<br />
Tiempo y Espacio<br />
Informativo <strong>Cultura</strong>l con<br />
Marisol <strong>del</strong> Toro y Rafael Orozco Flores<br />
los lunes por radio niColaiTa (1370 de a. m.),<br />
10:00 horas<br />
Próximos eventos:<br />
Jueves 21<br />
Ópera en la Universidad<br />
esCuela popular de bellas arTes<br />
Rondalla Romanza Moreliana<br />
TeaTro José rubén romero, 19:00 hrs.