Primarias particulares - Profeco

¿Están satisfechos los padres de familia con las escuelas?
Como se observa en el siguiente cuadro, a pesar de que el Acuerdo no se cumple a
cabalidad, los padres manifestaron un alto nivel de satisfacción con las escuelas.
Nivel de satisfacción de los entrevistados con la escuela a la que asisten sus hijos y porcentaje del total de respuestas
Tema
◗ Costos en general
◗ Incremento en
colegiaturas
◗ Profesores
◗ Método de
enseñanza
◗ Instalaciones
22 Consumidor
Opinión de los padres de familia
√ 72.1% los consideró adecuados
√ 71.3% señaló que sí aumentaron
respecto al año anterior.
De los que señalaron un incremento:
• 59.5% dijeron que fue adecuado
• 30.9% excesivo
• 8.9% bajo
√ 69.0% los consideró buenos
√ 17.5% excelentes
√ 8.4% regulares
√ 4% malos
√ 69.6% opinó que era buena
√ 19.7% excelente
√ 6.8% regular
√ 3.6% mala
En general fueron catalogadas como buenas:
√ Aulas: 69.6%.
√ Biblioteca: 52.4%
√ Talleres: 59.4%
√ Laboratorios: 49.3%
√ Instalaciones deportivas: 60.0%
√ Áreas de esparcimiento: 64.5%
√ Cafetería: 46.8%
√ Sanitarios: 75.1%
Comentarios
Los costos fueron considerados adecuados con mayor frecuencia por
los entrevistados que pagan colegiaturas bajas y medias.
Fue considerado excesivo con más frecuencia por los padres de familia
que pagaban colegiaturas más altas.
La distinción de profesores buenos fue otorgada de manera menos
frecuente a medida que el nivel educativo de los padres era más alto.
La metodología de la escuela también fue catalogada como buena de
manera menos frecuente a medida que el nivel educativo de los padres
era más alto.
Llama la atención que, a excepción de las aulas, las instalaciones que
se pueden considerar estrictamente educativas (biblioteca, talleres
y laboratorios) son catalogadas como buenas por un porcentaje de padres
relativamente bajo.
Conclusiones
Los datos de la encuesta sugieren que aunque hay una relación entre el costo de la escuela y la calidad de
sus intalaciones, esto no garantiza la satisfacción de los padres, lo que, a su vez, permite suponer que un
costo elevado no necesariamente implica una mayor calidad educativa.
Es claro que los padres con mayores niveles educativos suelen tener mayores espectativas respecto de
las escuelas de sus hijos, y ser más críticos en sus juicios sobre la calidad de los profesores.
Aunque esto resulta difícil de medir, es responsabilidad de los padres exigir una educación de buena
calidad. Además, es importante un cambio de actitud que se refleje en los criterios de selección de las
escuelas. Por ejemplo, la cercanía de la escuela ocupó el segundo lugar en este sentido, y si bien puede
resultar muy conveniente que sus hijos no pierdan demasiado tiempo en el desplazamiento, habría que
reflexionar si ello es verdaderamente lo esencial.
El “Acuerdo del 10 de marzo de 1992” existe para proteger a los padres de familia, por lo que le
conviene conocerlo y participar activamente para evitar cobros excesivos y prácticas que limiten el máximo
aprovechamiento de sus hijos.