LA CUNICULTURA: CRIANZA DE CONEJOS - La Semilla

exactitud en que día de la fetación se encuentran los embriones. Esto no es utópico; claro que se
requieren meses, quizás años de practica; depende del numero de hembras con que se haga el
aprendizaje. A continuación se explica el procedimiento: Se toma a la coneja con la mano izquierda
(si es diestro) por la piel de la paleta, tratando que se relaje. La mano derecha, con los dedos
abiertos en actitud normal, se introducen por debajo del animal presionando hacia arriba hasta
lograr la horizontalidad del cuerpo. En esa posición se mueven selectivamente los dedos hasta
ubicar el útero que se encuentra en la zona inginoabdominal, donde finalmente se verifica el
resultado de la inseminación con la presencia o ausencia de embriones. No se debe temer
exageradamente por la integridad de estos al efectuar la exploración, aunque hay que actuar con la
debida prudencia. Si esta operación se realiza en el 9º día luego de la cubrición, los embriones
presentan una textura algo elástica y resbaladiza, y son de un tamaño apenas mayor que el tamaño
de los cuerpos fecales, con similar forma. Pero unos días después los embriones son mucho más
grandes. Cuando recién se comienza a practicar la palpación cuesta diferenciar entre la materia que
se halla en el intestino y los embriones. Es común que la persona falta de practica tropiece en la
palpación con algunos inconvenientes propios de su inexperiencia, tal es el caso de la repleción del
vientre con que reaccionan algunas hembras, o de la grasa abdominal que puede dificultar el tacto,
como así también las glándulas mamarias muy turgentes, o la vejiga, aunque en este caso se puede
propiciar la micción mediante un suave masaje, etc. El momento más seguro para determinar la
gestación, el 11º día luego de la cubrición. La técnica de la palpación se puede mediante un simple
ejercicio, consiste en realizar la palpación a conejas en sus últimos días de gestación, donde no
presentan ninguna duda al respecto. Una vez que se domina la operación se va acortando la
diferencia hasta llegar al 11º día.
PARICIÓN
Deberá desarrollarse en calma y en buenas condiciones de higiene. La coneja no necesita la
asistencia del cunicultor durante el parto, en posición sentada va depositando uno a uno los
productos de su unión con el macho. En la medida que los gazapos tienen contacto con el exterior,
la madre los va limpiando, ingiriendo muchas veces las membranas fetales. Luego hubo acabado,
les da de mamar, los cubre con su pelo y se retira para proceder a su propia higiene. El tiempo que
le demanda esta función es de 20 a 30 minutos. El control de los nidos debe hacerse tan pronto
como sea posible después del parto. Esta operación, sencilla y sin riesgo para los gazapos, puede
practicarse después del parto a condición de alejar a la madre durante la misma. El criador retira los
muertos y las envolturas fetales que la madre no haya consumido. Los nidos deben hallarse en
perfectas condiciones de higiene y desinfección para recibir a la nueva prole. Hay conejas que se
niegan a parir en los nidos cuando no reúnen las condiciones adecuadas, pretendiendo armarlo en
otro lugar de la jaula, con las consabidas perdidas que esta actitud entraña. Tres o cuatro días antes
de la parición (la gestación dura alrededor de 30 a 32 -33 días) se acondicionan los nidos con un
material confortable. Hay que ser cuidadoso en la elección de este material no solo por la integridad
de la prole sino por las tetillas de la madre. Muchos de los casos de Mastitis provienen de las camas
inadecuadas que se emplean en los nidos. Los materiales más usados son el pasto seco, la paja,
viruta de madera y cáscaras de avena, arroz, soja y girasol. Los primeros tienen el inconveniente de
producir heridas en las mamas, que son muy susceptibles cuando están cargadas de leche, y causan
accidentes en las crías. El pasto y la paja suelen ser ingeridos por la coneja, debiéndose reponer a
diario, y aun así, muchas veces los gazapos nacen carentes de cama. Los mejores nidos se arman
con las cáscaras y son los que requieren menos atención en su mantenimiento. El alumbramiento se
produce normalmente en horas próximas al amanecer, durante este ocurre las madres no deben ser
molestadas, porque de lo contrario podría llegar a frustrarse el acto de la parición. Las voces fuera
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de tono, los ruidos, la presencia de extraños, la presencia de otros animales (ratas, perros, gatos,
comadrejas, etc.). Tan pronto como se compruebe el parto, la coneja se alimentará a discreción,
porque necesita nutrirse mucho. El agua potable es muy importante en los días que preceden y que
siguen al parto. La coneja da de mamar a sus gazapos una vez al día, generalmente por la mañana