Discurso Dr. Eduardo Espinoza

a 300 mil estudiantes más, lo que a su vez ha generado trabajo en el campo de la
ganadería.
Estos logros, me parece deben de aquilatarse en todo su valor y a ellos quería
yo agregar los logros que hemos tenido en el ámbito de la salud, es importante
visualizar, como decíamos al inicio, la necesidad de independizarnos de lacras
que todavía nos someten como es el caso del hambre y la ignorancia. Porque es
necesario que sepamos por ejemplo, que la mortalidad infantil es 5 veces mayor
en los niños de las madres que no tienen ningún nivel educativo comparado con
las madres que tienen 6 o más años de escolaridad y es también 3 veces más
alta en las personas que residen en el área rural del país con respecto a los que
residen en el área metropolitana. No podemos seguir viviendo con estas
inequidades.
También, la mortalidad infantil es 5 veces más alta en las personas de extracción
más pobre que en las personas que tienen mejores niveles de vida. Igualmente
las condiciones de vida y el nivel de pobreza de la población tienen una relación
directa con enfermedades endémicas como las diarreas, el dengue, el
parasitismo intestinal y la desnutrición. Por eso me llena de mucha alegría lo
comunicado por el señor presidente cuando habla con merecido orgullo del
suministro a nuestros niños en las escuelas del vaso de leche fluida y también del
suministro de los paquetes escolares, porque indudablemente el lograr que
nuestra niñez, especialmente nuestras niñas, permanezcan más tiempo en la
escuela va a reducir indudablemente la mortalidad infantil y la mortalidad
materna. Y así tendremos una población más sana y más independiente, como la
querían Santiago José Celis, José Cecilio del Valle, Feliciano Ama y Farabundo
Martí. Como la quería Anastasio Aquino.
Ya nosotros con las actividades que hicimos en salud nos adelantamos 4 años,
porque en 2011 se logró, nos adelantamos 4 años a la meta del Objetivo de
Desarrollo del Milenio de reducir en sus 2 terceras partes la mortalidad materna,
no fue una tarea fácil y quiero hacer énfasis en dos hechos que contribuyeron
particularmente en esto: el hecho de que se haya terminado con los cobros en el
sistema público de salud es un paso importante en este camino hacia la
independencia de la insalubridad. Con la supresión de los cobros en el sistema
público, 1 millón y medio de salvadoreños pudieron tener acceso a los servicios
de salud, condición que antes les estaba completamente vedada porque no
tenían para pagar las onerosas cuotas voluntarias, que así se llamaban, pero que
como sabemos, de voluntarias no tenían nada, porque quien no las pagaba no
tenía acceso a los servicios.
Igualmente el desplazamiento de los equipos comunitarios de salud, 450 equipos
comunitarios de salud en los 100 municipios más pobres del país y luego en otros
53 municipios más, acercaron los servicios de salud a la población, a un millón
600 mil habitantes, y permitieron un mejor control prenatal.
Resultado inmediato de esto fue que de los 120 mil niños que nacen anualmente
en el país el número de partos institucionales se incrementó, de cerca de un 45%
que se tenían en el sistema público en la administración anterior al 88%, es decir
de esos 120,000 nacimientos anuales del país, de 55,000 partos que nacían