1 RUBEN DARIO EN AGUSTIN LARA Hace como ... - Roger Araica

Ángelus…); “y hacer brillar al sol tus divinas banderas” (Canto de Esperanza), “Alma mía,
perdura en tu idea divina” (Alma mía); “Escucha la retórica divina / del pájaro del aire y la
nocturna / irradiación geométrica adivina” (Ama tu ritmo); “Lirio divino, lirio de las
Anunciaciones” (El poeta pregunta por Stella).
A contrapunto con la cualidad “divina”, usa Lara los términos “filtros”, “hechizo”, “magia”,
“milagro”, “idolatría”, “embrujo” para caracterizar a la mujer, o las mujeres, que lo tienen
“hechizado” o “embrujado”; es decir, que juega un poco a la magia blanca con vocabulario de
magia negra: “Sabes de los filtros / que hay en el amor / tienes el hechizo de la liviandad”
(Mujer); “Y cuando ese milagro realiza el prodigio de amarse” (Solamente una vez); “Y júrame
que no mientes / porque te sientes idolatrada” (María Bonita); “Mujer que conserva el embrujo
de los ojos moros” (Granada); “Rosa palpitante / que un instante mi alma cautivó” (Rosa);
“Canta guitarra hechicera” (Guitarra Guajira).
Es sabido que Rubén Darío era mujeriego, pero no parece que se haya dejado atrapar por
ninguna de ellas, a nivel de “embrujo”. Más bien advierte que ese es un estado transitorio:
“Gozad de la carne, ese bien / que hoy nos hechiza, / y después se tornará en polvo y ceniza”
(Poema del Otoño). Lara, por el contrario, aún diciendo que “Solamente una vez se entrega el
alma” (Solamente una vez), parece que con cada uno de sus amores y desamores, se acerca a las
fronteras de la muerte: “Dile que la quiero / dile que me muero / de tanto esperar” (Noche de
ronda). Reconoce Lara que las razones de su inconstancia están dentro de él mismo. “Mi rival es
mi propio corazón por traicionero” (Mi Rival).
Una característica dariana que se repite en Lara, es su vocación por el concepto del ritmo y su
variante, la vibración. Dice Darío. “Ama tu ritmo y ritma tus acciones / bajo su ley, así como tus
versos / eres un universo de universos / y tu alma una fuente de canciones” (Ama tu ritmo); “Y
sueña. Y ama, y vibra; y es la hija del sol” (A Roosevelt); “La agitación combativa de nuestro
globo vibrante” (Salutación al águila). Y Lara: “Eres vibración de sonatina / pasional” (Mujer);
“Tienes en el ritmo de tu ser / todo el palpitar de una canción” (Mujer); “En la cadencia / de tu
voz divina / la rima de amor” (Palmera); “Vibración de cocuyos que con su luz / bordan de
lentejuelas la oscuridad” (Noche criolla), “Veracruz /vibra en mi ser” (Veracruz).
Guardando las debidas proporciones entre Darío y Lara, y sabiendo que cada uno de ellos escribe
para públicos diferentes, encuentro en el canta-autor veracruzano 2 , algunos versos de muy
delicada inspiración poética: “Noche que se desmaya sobre la arena / mientras canta la playa su
inútil pena” (Noche criolla); “Tus ojos / se duermen en mi alma” (Te quiero); “Rival de mi
cariño / el viento que te besa / rival de mi tristeza / mi propia soledad” (Mi Rival); “Cuna de
plata de la mañana / que en la montaña se hace canción” (Arroyito).
La producción, arreglos y dirección musical del CD que les platico, están a cargo de Bebu
Silvetti. ¿Y que podría yo añadir a la interpretación de Plácido Domingo? Nada. No tengo
capacidad de comentarla. Sólo de disfrutarla. Una verdadera obra maestra.
R@S 14 de Julio de 2006
2 Algunos biógrafos señalan que A. Lara nació en la ciudad de México, pero él afirmaba que había nacido en el
pueblo de Tlacopalpán, Estado de Veracruz.
3