IV Semana Machadiana - Antonio Machado y Baeza
IV Semana Machadiana - Antonio Machado y Baeza
IV Semana Machadiana - Antonio Machado y Baeza
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
6<br />
crónica exigía que cobrara cuerpo, y aquí<br />
no caben parangones con Mairena y Abel<br />
Martín, ya que afirma taxativamente:<br />
Todo poeta tiene dos musas:<br />
lo ético y lo patológico.<br />
Cuidado con dar al espíritu la voz del<br />
cuerpo. No se confundan hondas<br />
resonancias.<br />
Siempre en palabras de Moreiro,<br />
añade: De entre las diversas opciones<br />
apuntadas, solo cabe inclinarse por la<br />
más plausible: fue un amor que acaso<br />
quiso ser más pero que formalmente se<br />
quedó en algo poético:<br />
Todo amor es fantasía:<br />
él inventa el año, el día,<br />
la hora y su melodía;<br />
inventa el amante y, más,<br />
la amada. No prueba nada<br />
contra el amor, que la amada<br />
no haya existido jamás.<br />
“<strong>Machado</strong> idealizó un amor, espiritual<br />
y poético, después de que el de Leonor se<br />
transformara en una inmensa piedad<br />
hacia la mujer-niña soriana.”<br />
Guiomar, Guiomar,<br />
mirarme en ti castigado:<br />
reo de haberte creado,<br />
ya no te puedo olvidar.<br />
Quizá <strong>Machado</strong> amó a Guiomar, pero<br />
no fue correspondido.<br />
Son más reales los paseos por los<br />
páramos sorianos evocando a Leonor:<br />
Soñé que tú me llevabas<br />
por una blanca vereda,<br />
en medio del campo verde,<br />
hacía el azul de la sierras,<br />
hacía los montes azules,<br />
una mañana serena.<br />
Sentí tu mano en la mía,<br />
tu mano de compañera,<br />
tu voz de niña en mi oído<br />
como una campana nueva,<br />
como una campana virgen<br />
de un alba de primavera.<br />
¡Eran tu voz y tu mano,<br />
en sueños, tan verdaderas!...<br />
Vive, esperanza, ¿quién sabe<br />
lo que se traga la tierra!