Los Rios. 238 - Misiones Diocesanas Vascas

Cáritas con los ODM
DECLARACIÓN DEL MILENIO:
LA MAYOR PROMESA DE LA HISTORIA
Con motivo de la llegada del nuevo milenio
y de las grandes diferencias que había entre
las personas del planeta, se celebró, en Nueva
York, la Cumbre del Milenio. Mientras que millones
de personas pasaban necesidad otras vivían
en la abundancia. En septiembre del 2000 se
reunieron 189 jefes de Estado de todo el mundo
y aprobaron una Declaración en la que se comprometían
a trabajar para reducir la pobreza en
el mundo en el año 2015.
Dicho compromiso se resume en el logro
de ocho objetivos, con sus metas e indicadores.
En realidad se trata de unos mínimos que
deben servir para, poco a poco, erradicar la pobreza
extrema, promover la dignidad humana y
la igualdad, alcanzar la paz, la democracia y la
sostenibilidad ambiental. Es un compromiso de
todos el defender y lograr que todas las personas
tengan garantizados sus derechos.
A pesar de los problemas mundiales, el mundo
cuenta con los conocimientos, la tecnología
❚país vasco
Más de una década después de la Declaración del Milenio todo apunta a que
los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) no se cumplirán en el plazo fi jado.
Sin embargo, las circunstancias indican que estamos en un momento decisivo.
En este momento la determinación fi rme y perseverante de la Iglesia para la
construcción de un mundo más justo y solidario es rotunda.
Nuestra Iglesia apuesta por la construcción de un mundo más acorde a los
designios de Dios. Cáritas expresa su disponibilidad a ser referencia en este
esfuerzo compartido de la Iglesia por acabar con el escándalo de la pobreza y
las estructuras injustas que la sustentan.
Cartel de la estrategia para el cumplimiento de los ODM.
Cáritas
El mundo cuenta con los
conocimientos, la tecnología y
los recursos para terminar con
la pobreza mundial.
y los recursos para terminar con la pobreza
mundial. Sin embargo, falta compromiso real y
voluntad política.
Es nuestra responsabilidad reclamar y vigilar
las medidas que se adoptan en los organismos
internacionales y en los estados pero además
debemos participar activamente para promover
los cambios necesarios tanto en nuestras propias
vidas como en las políticas.
El horizonte temporal es de cuatro años,
hasta el 2015. Como Iglesia, queremos aunar
esfuerzos con otros y trabajar con ahínco para
transformar modos de pensar, aportando una
conciencia crítica y propuestas de construcción
de un mundo más cercano al Reino de paz y justicia.
Para ello es fundamental la sensibilización
ciudadana, su movilización e incidencia.
Cristina GONZALO y Mavi LAISECA
CARITAS de BIZKAIA
Caritasek
bere
bitartekotasuna
adierazten
du Elizak
pobreziaren
eskandalua
deusestatzeko
bultzatzen
duen
eginkizuneanerreferentzia
izateko.
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