26.06.2013 Views

Biblioteca Digital | FCEN-UBA | Holmbergia Nº 4 Revista del Centro ...

Biblioteca Digital | FCEN-UBA | Holmbergia Nº 4 Revista del Centro ...

Biblioteca Digital | FCEN-UBA | Holmbergia Nº 4 Revista del Centro ...

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

J. YEPES. Distrib, geográf. de algunos mamijeroe 35<br />

gue en su comportamiento dentro de las asociaciones. Tampoco<br />

es posible abordar en este trabajo el estudio y significación de<br />

una distribución muy restringida, como es el caso <strong>del</strong> pequeño<br />

roedor histrícomorfo Aconaemus [uscu« localizado en la falda<br />

oriental <strong>del</strong> volcán Peteroa (Mendoza), (9), no teniendo relación<br />

sino con otra especie <strong>del</strong> mismo género (A. porteri) , localizada<br />

a su vez en Osorno (Chile S.). Las opiniones expresadas por<br />

Beddard (lO) y otros autores sobre este carácter de distribución,<br />

'abr ier on desde hace tiempo nuevos campos para comprobaciones<br />

a realizarse.<br />

Por el contrario, aquellas especies íntimamente relacionadas<br />

por las localidades comprobadas, tanto entre sus formas geográficas<br />

como con las especies afines que habitan zonas contiguas,<br />

permiten una apreciación general en favor de un factible criterio<br />

ecológico como el que tácitamente trato de esbozar en estas páginas.<br />

Má'3 ad elante, cuando las localidades documentadas para una<br />

mayoría de las especies conocidas sean numerosas y podamos decir<br />

al mismo tiempo que el conocimiento integral de nuestra fauna<br />

está próximo a ser alcanzado, nos hallaremos en condiciones de<br />

emprender estudios a base de asociaciones animales que aportarán<br />

seguramente excelentes comprobaciones de orden biológico,<br />

así como también valiosos aportes para la Ecología.<br />

T omo por ahora com o únicos elementos de juicio los datos<br />

de investigadores autorizados en la materia, en unión de las observaciones<br />

y comprobaciones realizadas por mí durante los viajes<br />

efectuados al interior <strong>del</strong> País en cumplimiento de gestiones<br />

tanto <strong>del</strong> Museo Argentino de Ciencias Naturales, como de la Misión<br />

de Patología Regional Argentina y de la Sociedad Argentina<br />

de Estudios Geográficos.<br />

Agradezco al Dr. Alberto Castellanos, sus valiosas informaciones<br />

botánicas, as í como al Dr. Eduardo Riggi los mapas de<br />

suelo y precipitaciones que me conf ió para algunas disquisiciones<br />

relacionadas con mi tema.<br />

AMBIENTES INFLUENCIADOS POR MÉDANOS. - Lárn. I, Il Y III<br />

Las distintas zonas que caracterizo como medanosas, no corresponden<br />

en forma alguna a determinado conjunto homogéneo<br />

en cuanto a composición <strong>del</strong> suelo, pues en unos casos se trata de lo<br />

que ciertos autores distinguen como estepa (11), ya loésica, ya<br />

arenosa y en otros de 'Suelos rojizos (zonas bajas de La Ri oja,<br />

Catamarca y Salta), pudiendo exte nderse estos ambientes, no solamente<br />

por las llanuras, s ino también por los faldeos y pequeñas<br />

ondulaciones, a través de Buenos Aires S., Río Negro N.,<br />

- - ---<br />

(9 ) YEPES, J . - R ev. Chilena de H ist. N a t., XXXIV, (1 930), pág. 325.<br />

(1 0) BEDDARD, F . E. - Cambridg e N at. Se . Mann. (18 95), págs. '12-13 .<br />

( 11 ) R o v ERET o , G. - Trat. Geol. Morí., rr, (1 924 ), p ágs. 932-934) .

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!