Revista "Nuevo Rumbo" (1993-1997) - Archivo de la Ciudad de ...

© MENINAS, PLATANOS, UVAS,
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DEMONIOS Y TODA CLASE
DE MONSTRUOS EN LOS -
CARNAVALES ARGANDENOS
Dijeron los hombres del tiempo que una ola de
frío polar atravesó la península en la semana
en que se celebraban Carnavales en numerosas
ciudades de nuestro país, pero ni los fríos, ni los amagos
de nevada caídas en Arganda evitaron que tanto
mayores eO!110 pequeños disfrutaran de esta fiesta. Unos
días que no han estado exentos de leyendas y con llictos.
por aquello de que el disfraz oculta la personalidad
y por tanto uno muestra su lado más oscuro y vil. tal y
corno se pensaba en tiempos de dictadura. como la franquista,
donde los Carnavales estuvieron prohibidos. En
Río de Janeiro, en Brasi 1. la ciudad de los carnavales
por excelencia, ha habido este año como en muchos
anteriores, más de una treintena de homicidios amparados
en el ocultamiento de rostros que ofrecen los disfraces
y trajes carnavaleros, Se han dado muchas teorías
sobre la celebración de estos días y se ha extendido
la creencia de que en estas fechas uno se muestra tal y
como es, sin miedos ni vergüenzas, donde la máscara
posibilita las más atrevidas insinuaciones y excesos.
Casi todos celebramos los Carnavales, unos por tradición
y otros por aquello de llevar la corriente a la
masa y en la mayoría de los casos se desconoce el origen
de la Fiesta. Los Carnavales se celebran tres días
antes del miércoles de ceniza, jornada en la que se inicia
el periodo de Cuaresma y por ésta se entiende el tiempo
litúrgico que precede a la festividad de la Resurrección
de Jesucristo. Es un tiempo que la Iglcsi'l en
memoria de los cuarenta días que ayuno el Señor en el
desierto.
En Arganda. la algarabía comenzó el sabudo diecisiete
en el Polidcporti vo Municipal, con una baile de
Carnaval y la actuación (k una orquesta. y aunq ue los
asistentes se lo pasaron bien. no dejaron de echar en
Ialt« los premios a los mejores disfraces que en otros
años se han otorgado y hubo quienes acusaron al escaso
público asistente, la ausencia de galardones a los mejores
disfraces. Hubo trajes coloristas y animosos como
el de un conjunto de chinas vestidas de un fucsia rclumbrón
que bailaban al son de la música, pero quizá la
falta de embozos con los que ocultarse hicieron la fiesta
un tanto aburrida. Y es que huho más gente sin disfrazar
que ataviada con trajes fcxt ivos.
In l.a Povcdu el desfile de caruaval diO comienzo
el d('mlngo a l.r-. cinco de Id t:nlc. IJesde el ln-tituto v
hasta la Plaza, le" nsas. gritos , de,filaron
al son de la música de la charanga. Pero el cam.ival
infantil del martes el mas numeroso \j divcrudo de este
año. Con un frío que se te metla en lo, huesos. niños y
padres dcxfilaban desde la Plaza de LI Constitución
hasLi el Polidc portivo. entre gritos. C,IITuas y torta/os
de lus cabezudos. unos monstruos un tanto desgastados.
que no lograha nadie identificar y que ni siquiera los
hombres que se ocultaban tras los vestidos desgarrados