11.10.2013 Views

Que Dios tenga piedad de todos nosotros

Que Dios tenga piedad de todos nosotros

Que Dios tenga piedad de todos nosotros

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

“<strong>Dios</strong> va a castigar el mundo, y será <strong>de</strong> una manera terrible.”<br />

1<br />

…Sor Lucía <strong>de</strong> Fátima<br />

<strong>Que</strong> <strong>Dios</strong> <strong>tenga</strong> <strong>piedad</strong> <strong>de</strong> <strong>todos</strong> <strong>nosotros</strong><br />

por el Padre Nicholas Gruner, S.T.L., S.T.D. (Cand.)<br />

Lo que está a suce<strong>de</strong>r sobre los escándalos <strong>de</strong> pedofilia en los Estados Unidos y<br />

en Canadá es un aviso para <strong>todos</strong> <strong>nosotros</strong>:<br />

Esta crisis es claramente un castigo <strong>de</strong> nuestra sociedad.<br />

Esta crisis es una <strong>de</strong> las últimas llamadas a la penitencia, antes <strong>de</strong> ser<br />

aniquilados o esclavizados, o peor aun.<br />

Esta crisis está predicha en el Mensaje <strong>de</strong> Fátima, en la parte aun ocultada por<br />

los funcionarios <strong>de</strong>l Vaticano sirviendo bajo ór<strong>de</strong>nes <strong>de</strong>l Car<strong>de</strong>nal Sodano.<br />

Estamos hoy a vivir el terrible castigo profetizado en Fátima. El problema es que –<br />

la mayor parte <strong>de</strong> las personas aun no lo reconocen como <strong>de</strong> hecho es – y el peor aún está<br />

por llegar. Nuestra tarea es <strong>de</strong>cirle, con base en la autoridad <strong>de</strong> Nuestra Señora, que Ella<br />

vino a avisarnos y que intentó impedir lo que ha sucedido. Pero el mundo y gran parte <strong>de</strong> la<br />

Iglesia, hasta el vértice <strong>de</strong> la jerarquía, no prestaron atención. Mismo así, como Madre<br />

amantísima que es, Ella sigue dándonos la mano para ayudarnos, para ayudar a evitar el<br />

castigo final, y más horrible, que finalmente caerá sobre <strong>nosotros</strong>.<br />

Antes que continuemos, necesitamos dar alguna información fundacional: sobre<br />

Fátima, sobre el mundo antes <strong>de</strong> Fátima, y sobre el mundo y la Iglesia <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> Fátima.<br />

1 El contexto <strong>de</strong> la crisis actual<br />

Para compren<strong>de</strong>r don<strong>de</strong> estamos hoy, en el año 2002, necesitamos compren<strong>de</strong>r<br />

primero don<strong>de</strong> el mundo y la Iglesia estaban antes <strong>de</strong> 1917.<br />

Necesitamos compren<strong>de</strong>r que, ya en 1917, el mundo estaba en mucha mal situación.<br />

El Papa San Pio X dijo, en el inicio <strong>de</strong> su pontificado (cerca <strong>de</strong> 1905), que los tiempos<br />

estaban tan malos que hasta pensaba que el Anticristo ya estaba en la tierra. La 1ª Guerra<br />

Mundial estalló sobre la humanidad como un castigo. Nuestra Señora nos dijo en Fátima<br />

que “la guerra es un castigo <strong>de</strong>l pecado”.<br />

Los buenos viejos tiempos <strong>de</strong>l inicio <strong>de</strong>l Siglo XX no eran realmente así tan buenos.<br />

La 1ª Guerra Mundial fue la peor guerra a ser hecha a la faz <strong>de</strong> la tierra durante toda la<br />

historia hasta ese tiempo.<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf


Necesitamos compren<strong>de</strong>r que, ya en 1917, el mundo estaba muy mal, si quisiéramos<br />

adquirir una buena perspectiva que nos permita mejorar nuestros padrones morales. Esto es,<br />

las personas generalmente juzgan el bien y el mal por los ejemplos que ven en los vecinos –<br />

o en sus antepasados. Necesitamos encontrar los mo<strong>de</strong>los ciertos. En otra manera, seguimos<br />

un mal ejemplo – hasta al infierno.<br />

Nuestra Señora, viendo la situación en la Iglesia y en el mundo, vio que los hombres<br />

estaban en el mal camino y necesitaban orientación. Comprendió que estábamos en una<br />

necesidad extrema, y, <strong>de</strong>bido a Su amor y cuidado maternales, vino a mostrarnos el único<br />

camino para salir <strong>de</strong>l atolla<strong>de</strong>ro en que nos encontrábamos.<br />

Para la mayor parte <strong>de</strong> <strong>nosotros</strong> (nacidos <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> 1917, hace ochenta y cinco<br />

años), es evi<strong>de</strong>nte que no elegimos los males <strong>de</strong> 1917 y no po<strong>de</strong>mos ser culpabilizados por<br />

ellos.<br />

Pero somos culpables <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> 1917, si ignoramos Fátima. Las reglas para juzgar<br />

nuestra generación cambiaron <strong>de</strong>s<strong>de</strong> 13 <strong>de</strong> octubre <strong>de</strong> 1917, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong>l Milagro <strong>de</strong>l Sol.<br />

Setenta mil personas fueron testigos oculares <strong>de</strong> su estupendo po<strong>de</strong>r y gloria. Este<br />

testimonio llegó hasta nuestro tiempo. Porque es irrefutable e imposible <strong>de</strong> negar, este<br />

milagro y el Mensaje <strong>de</strong> Fátima imponen una obligación solemne a <strong>todos</strong> y cada uno <strong>de</strong><br />

<strong>nosotros</strong>.<br />

La Iglesia y el mundo, en general, <strong>de</strong>sprecian la Santísima Virgen y Su Mensaje <strong>de</strong><br />

Fátima. Esto es un pecado grave, porque es contra la Madre <strong>de</strong> Cristo, y Jesús, como buen<br />

Hijo, no lo pue<strong>de</strong> tolerar. Es también un pecado grave contra el Espíritu Santo, porque, al<br />

<strong>de</strong>spreciar el Milagro público <strong>de</strong>l Sol, nos oponemos la verdad conocida.<br />

Sor Lucía explica:<br />

“Cuando <strong>Dios</strong> va a castigar al mundo, agota antes <strong>todos</strong> los <strong>de</strong>más medios; y<br />

cuando ha visto que el mundo no le ha hecho caso a ninguno <strong>de</strong> ellos, entonces, como si<br />

dijéramos a nuestro modo imperfecto <strong>de</strong> hablar, nos presenta con cierto temor el último<br />

medio <strong>de</strong> salvación, su Santísima Madre.<br />

“Porque si <strong>de</strong>spreciamos y rechazamos este último medio, ya no tendremos perdón<br />

<strong>de</strong>l cielo; porque hemos cometido un pecado, que en el Evangelio suele llamarse pecado<br />

contra el Espíritu Santo; que consiste en rechazar abiertamente, con todo conocimiento y<br />

voluntad, la salvación que se presenta en las manos; y también porque Nuestro Señor es<br />

muy buen hijo; y no permite que ofendamos y <strong>de</strong>spreciemos a su Santísima Madre,<br />

teniendo como testimonio patente la historia <strong>de</strong> varios siglos <strong>de</strong> la Iglesia que con ejemplos<br />

terribles nos indica cómo Nuestro Señor siempre ha salido en <strong>de</strong>fensa <strong>de</strong>l honor <strong>de</strong> su<br />

Santísima Madre.<br />

<strong>Dios</strong> es siempre justo, y las reglas fundamentales son las mismas. Hay, sin embargo,<br />

una nueva circunstancia: <strong>Dios</strong> dio un signo inconfundible, cuya gran<strong>de</strong>za, y el gran número<br />

<strong>de</strong> personas que lo testimoniaron, no tiene términos <strong>de</strong> comparación en la historia anterior<br />

<strong>de</strong> la humanidad.<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

2


Resulta que somos más culpables por no prestar atención a este mensaje <strong>de</strong> que en<br />

cualquier otro período <strong>de</strong> la historia humana, exceptuando la generación que vio a Cristo<br />

caminar por la faz <strong>de</strong> la tierra. Y, con la excepción <strong>de</strong> la Resurrección, ningún milagro que<br />

<strong>Dios</strong> concedió a la humanidad fue más gran<strong>de</strong> que el Milagro <strong>de</strong>l Sol.<br />

Esta nueva circunstancia impone una obligación mayor a nuestra generación <strong>de</strong> que<br />

cualquier otro período <strong>de</strong> la historia, exceptuando la generación que crucificó a Cristo.<br />

Una vez que compren<strong>de</strong>mos esto, po<strong>de</strong>mos, con este articulo, compren<strong>de</strong>r el<br />

escándalo <strong>de</strong> la pedofilia y la corrupción <strong>de</strong> varios miembros <strong>de</strong>l clero y la actual crisis <strong>de</strong><br />

la Iglesia. No solo compren<strong>de</strong>mos, si aceptamos las lecciones aquí enseñadas, como<br />

también tendremos al nuestro alcance las soluciones para los problemas, que no son<br />

difíciles <strong>de</strong> poner en práctica.<br />

Muchos entre nuestro 1.000.000 <strong>de</strong> lectores regulares <strong>de</strong> The Fatima Crusa<strong>de</strong>r<br />

conocen estas soluciones y las siguen. Hay muchos millones <strong>de</strong> almas que no conocen el<br />

Mensaje <strong>de</strong> Fátima, otras se olvi<strong>de</strong>n <strong>de</strong> él, otras hasta lo <strong>de</strong>sprecian, otras que no se <strong>de</strong>ci<strong>de</strong>n<br />

y no creen en Nuestra Señora, otras que creen pero no Le obe<strong>de</strong>cen. Hay hasta quien<br />

<strong>de</strong>clare amarlo, pero que, en la práctica, impi<strong>de</strong>n otras personas <strong>de</strong> creer y obe<strong>de</strong>cer.<br />

Este <strong>de</strong>sprecio <strong>de</strong> la profecía - incredulidad, <strong>de</strong>sobediencia, obstrucción <strong>de</strong> Fátima<br />

– no es sin pecado, y ya está siendo castigado en varias partes <strong>de</strong>l mundo, incluyendo,<br />

actualmente, Norteamérica – y va a mal en peor.<br />

2 ¿Por qué castiga <strong>Dios</strong>, y por qué en nuestro tiempo?<br />

<strong>Dios</strong> no castiga como los hombres castigan. No lo hace por cólera o <strong>de</strong>bilidad, y no<br />

castiga si pue<strong>de</strong> evitarlo. Pero si no nos arrepentimos, si no nos enmendamos, si no nos<br />

corregimos, entonces <strong>Dios</strong> castigará, porque es necesario.<br />

Cuando nada más resulta, <strong>Dios</strong> no sería fiel a Sí mismo, no sería el Bien, si<br />

continuase a permitir que estos pecados continuasen para siempre en la faz <strong>de</strong> la tierra.<br />

Antes que <strong>Dios</strong> castigue, sin embargo, nos aconseja y hasta nos amenaza, para que<br />

<strong>tenga</strong>mos otra oportunidad <strong>de</strong> enmendarnos. Cuando empieza a castigar, quiere que<br />

reconozcamos el castigo; que por lo menos escuchamos y empezamos a enmendarnos, para<br />

que Él no <strong>tenga</strong> que proseguir con el castigo. “<strong>Dios</strong> amenaza, nos castiga para librarnos<br />

<strong>de</strong>l castigo”.<br />

San Alfonso <strong>de</strong> Ligorio, Doctor <strong>de</strong> la Iglesia, nos da una i<strong>de</strong>a más profunda <strong>de</strong>l<br />

castigo <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>:<br />

“¡Ay cómo tomaré satisfacción <strong>de</strong> mis contrarios, y venganza <strong>de</strong> mis enemigos”!<br />

(Isa. 1:24)<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

3


“Esto es el lenguaje <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>, al hablar <strong>de</strong> castigo y venganza. Dice que es obligado<br />

por Su justicia a vengarse <strong>de</strong> Sus enemigos. Pero, fíjese, comienza con la palabra Heu,<br />

“¡Ah!” Esta palabra es una exclamación <strong>de</strong> disgusto, por la cual Él nos hace compren<strong>de</strong>r<br />

que, si Él fuese capaz <strong>de</strong> llorar cuando está listo a castigar, lloraría amargamente al ser<br />

obligado a castigarnos, a <strong>nosotros</strong>, Sus criaturas, que Él tanto amó que dio Su vida por<br />

<strong>nosotros</strong>, por amor…<strong>Dios</strong>, <strong>Que</strong> es el Padre <strong>de</strong> Misericordia y nos ama tanto, no está<br />

dispuesto a castigar y afligir, sino a perdonar y a consolarnos. ‘Porque Yo sé los <strong>de</strong>signios<br />

que tengo sobre vosotros, dice el Señor, <strong>de</strong>signios <strong>de</strong> paz, y no <strong>de</strong> aflicción…’<br />

(Jer.29:11)…Comprendamos entonces, mis hermanos, como el Señor aparece ahora irado,<br />

no con vista a castigarnos, sino para que nos limpiemos <strong>de</strong> nuestros pecados, y entonces<br />

hagamos con que Él nos perdone”.<br />

San Alfonso explica:<br />

“San Basílio nos dice que <strong>Dios</strong> muchas veces parece encolerizado porque <strong>de</strong>sea<br />

tratarnos con misericordia, no con la intención <strong>de</strong> castigar, sino para librarnos <strong>de</strong>l castigo.<br />

Sus amenazas no <strong>de</strong>rivan <strong>de</strong> Su imposibilidad <strong>de</strong> castigar, porque Él pue<strong>de</strong> ser vengado<br />

cuando quiere; sino es paciente con <strong>nosotros</strong> para vernos penitentes y, <strong>de</strong> este modo,<br />

exentos <strong>de</strong> castigo… Y no amenaza por odio, para atormentarnos con miedo; <strong>Dios</strong> amenaza<br />

por amor, para que nos convirtamos a Él y así escapamos al castigo. Amenaza, para no nos<br />

ver perdidos…Amenaza; pero a pesar <strong>de</strong> eso es paciente para con <strong>nosotros</strong> y atrasa el<br />

castigo, porque <strong>de</strong>sea vernos convertidos, y no perdidos. ‘el Señor espera con paciencia<br />

por amor <strong>de</strong> vosotros no queriendo que ninguno perezca, sino que <strong>todos</strong> se conviertan a<br />

penitencia.’ (2 Ped. 3:9)<br />

San Alfonso continúa:<br />

“Muchos pecadores no creen en las amenazas<br />

divinas hasta que el castigo venga sobre ellos”.<br />

“Si vosotros no hiciereis penitencia, <strong>todos</strong> pereceréis (Lc. 13:5). <strong>Dios</strong> amenaza:<br />

Pecadores, paren y hagan penitencia, porque, caso contrario, vos per<strong>de</strong>réis, como sucedió a<br />

tantos otros.<br />

“San Procopio nos dice que <strong>Dios</strong> ‘nos inspira por el miedo, y el <strong>de</strong>monio lo retira’.<br />

<strong>Dios</strong> sólo <strong>de</strong>sea hacernos miedo con Sus amenazas, para apartarnos <strong>de</strong>l pecado y así<br />

seremos salvados. El <strong>de</strong>monio quiere <strong>de</strong>struir ese miedo, para perseverarnos en el pecado y<br />

así nos per<strong>de</strong>mos. Muchos son los infelices que creen en el <strong>de</strong>monio, <strong>de</strong> preferencia a <strong>Dios</strong>,<br />

y así se con<strong>de</strong>nan miserablemente.<br />

San Alfonso enseña a<strong>de</strong>más:<br />

“Si no nos enmendamos, vendrá el castigo; si no ponemos fin a nuestros crímenes,<br />

<strong>Dios</strong> lo hará. Cuando Lot fue avisado por el Señor <strong>de</strong> que fuese a <strong>de</strong>struir Sodoma, Lot<br />

informó los yernos inmediatamente: ‘Levantaos, y salid <strong>de</strong> este lugar; porque va el Señor a<br />

asolar esta ciudad’ (Gen. 19:14).<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

4


Pero ellos no creyeron en él; les parecía que <strong>Dios</strong> les había hablado en una tontería.<br />

Imaginaron que Él quería divertirse al verlos con miedo, al aterrorizarlos con esa amenaza.<br />

Pero el castigo cayó sobre ellos, y ellos quedaron a ser el divertimiento <strong>de</strong> las llamas. Mis<br />

hermanos, ¿qué esperamos? <strong>Dios</strong> nos avisa que el castigo nos amenaza; pongamos fin a<br />

nuestros pecados, ¿o esperaremos hasta que <strong>Dios</strong> lo haga?<br />

“Escucha, oh pecador, lo que San Pablo te dice: ‘Consi<strong>de</strong>ra, pues, la bondad y la<br />

severidad <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>; la severidad para con aquellos que cayeron, y la bondad <strong>de</strong> <strong>Dios</strong> para<br />

contigo, si perseverares en el estado <strong>de</strong> que su bondad te ha puesto <strong>de</strong> los contrario, tú<br />

también será cortado’ (Rom. 11:22).<br />

San Alfonso aña<strong>de</strong>:<br />

“Consi<strong>de</strong>ra, dice el Apóstol, la justicia que el Señor aplicó a tantos que Él castigó y<br />

con<strong>de</strong>nó al infierno; <strong>de</strong> hecho, para eses que cayeron, la severidad. Consi<strong>de</strong>ra la<br />

misericordia con que El te trató; pero para que <strong>tenga</strong>s la bondad <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>, <strong>de</strong>bes abandonar<br />

el pecado; se cambias <strong>de</strong> vida, evitas las ocasiones <strong>de</strong>l pecado, frecuentas los Sacramentos<br />

y continuas a tener una vida cristiana, el Señor te librará <strong>de</strong>l castigo, si te mantienes en el<br />

bien; si no, perecerás, porque en ese caso serás aislado. <strong>Dios</strong> ya te ha suportado <strong>de</strong>masiado<br />

tiempo, ya no pue<strong>de</strong> continuar a ser paciente. <strong>Dios</strong> es misericordioso, pero también es justo;<br />

trata con misericordia los que Lo teman, pero no pue<strong>de</strong> hacer el mismo con los<br />

obstinados”. 1<br />

¿<strong>Dios</strong> nos avisó?<br />

¿<strong>Dios</strong> nos aconsejó?<br />

Sí, <strong>Dios</strong> nos avisó y nos aconsejó, a través <strong>de</strong> Su Santa Madre:<br />

“Si atendieran mis peticiones, Rusia se convertirá y habrá paz; si no esparcirá sus<br />

errores por el mundo, promoviendo guerras y persecuciones a la Iglesia. Los buenos serán<br />

martirizados, el Santo Padre tendrá que sufrir mucho, varias naciones serán<br />

aniquiladas”. 1a<br />

Sor Lucía dijo al Padre Fuentes:<br />

“La Santísima Virgen, repetidas veces, tanto a mis primos Francisco y Jacinta,<br />

como a mí, nos dijo; <strong>Que</strong> muchas naciones <strong>de</strong> la tierra <strong>de</strong>saparecerán sobre la faz <strong>de</strong> la<br />

misma, que Rusia sería el instrumento <strong>de</strong>l castigo <strong>de</strong>l Cielo para todo el mundo, si antes no<br />

alcanzábamos la conversión <strong>de</strong> ese pobrecita Nación”. 1b<br />

<strong>Dios</strong> también nos dice, a través <strong>de</strong>l Mensaje <strong>de</strong> Fátima, que Él castigará el mundo<br />

<strong>de</strong> cuatro maneras – guerra, hambre, persecución <strong>de</strong> la Iglesia y persecución <strong>de</strong>l Santo<br />

Padre.<br />

Lo que la mayor parte <strong>de</strong> las personas, incluyendo en la Iglesia, no saben es que lo<br />

que estamos sufriendo ahora es la persecución <strong>de</strong> la Iglesia. Esto es el terrible castigo. La<br />

Santa Madre Iglesia está ahora a ser perseguida, <strong>de</strong>bido a la infiltración <strong>de</strong> hombres<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

5


perversos; herejes; apóstatas, como los masones y los comunistas; y especialmente por la<br />

red <strong>de</strong> pedofilia y homosexualidad.<br />

La persecución <strong>de</strong> la Iglesia es un castigo espiritual que es más peor que <strong>todos</strong> los<br />

castigos materiales. Es este castigo espiritual que está en la base <strong>de</strong>l actual escándalo <strong>de</strong><br />

pedofilia en la Iglesia.<br />

Dentro <strong>de</strong> este contexto, po<strong>de</strong>mos ahora comprehen<strong>de</strong>r porque esto está sucediendo.<br />

Po<strong>de</strong>mos también comprehen<strong>de</strong>r lo que po<strong>de</strong>mos hacer a este respecto. Este escándalo es<br />

una cosa terrible, ultrajante, y <strong>de</strong>bemos protestar contra él a <strong>todos</strong> los niveles; en la Iglesia,<br />

en público y en particular.<br />

Debemos también reconocer que este escándalo es un signo claro <strong>de</strong> que <strong>todos</strong><br />

estamos siendo castigados. Porque <strong>Dios</strong> está irado para con Su pueblo, permitió que<br />

existiesen entre <strong>nosotros</strong> estos malos padres.<br />

Por lo tanto, <strong>de</strong>bemos <strong>todos</strong> hacer penitencia. “si vosotros no hiciereis penitencia,<br />

<strong>todos</strong> pereceréis igualmente” (Lc. 13:3).<br />

Nosotros <strong>todos</strong> hemos <strong>de</strong>satendido los sacrificios necesarios <strong>de</strong> penitencia. Muy<br />

pocos católicos compren<strong>de</strong>n bien, o aun conocen, el efecto que el <strong>de</strong>scuido en hacer<br />

penitencia ha tenido en los escándalos <strong>de</strong>l clero y en la negligencia <strong>de</strong> los sacerdotes.<br />

Como no estamos haciendo penitencia públicamente (esta obligación está explicada<br />

en el fin <strong>de</strong> este artículo; ver páginas 46 y siguientes), muchos padres no están recibiendo<br />

las gracias necesarias para guiar su rebaño. Los fieles no están haciendo penitencia – los<br />

padres no están recibiendo las gracias suficientes – y por consecuencia, los fieles no son<br />

dirigidos como <strong>de</strong>berían ser.<br />

Tenemos el resultado <strong>de</strong> la hipocresía <strong>de</strong> algunos padres y legos, que pretendiendo<br />

servir a <strong>Dios</strong> pero cuyos corazones están lejos <strong>de</strong> Él; y así las profecías bíblicas están<br />

sucediendo ante nuestros ojos.<br />

San Pablo, hablando a los Obispos y padres reunidos en Éfeso, dijo:<br />

“Después <strong>de</strong> mi partida os han <strong>de</strong> asaltar lobos voraces, que <strong>de</strong>strocen el rebaño. Y<br />

<strong>de</strong> entre vosotros mismos se levantarán hombres que sembrarán doctrinas perversas con el<br />

fin <strong>de</strong> atraerse a sí discípulos” (Actos 20: 29-30).<br />

El capítulo 12 <strong>de</strong>l Apocalipsis <strong>de</strong>scribe la visión <strong>de</strong> la Mujer vestida <strong>de</strong> sol, y <strong>de</strong>l<br />

gran dragón, Su persecutor:<br />

“Y su cola traía arrastrando la tercera parte <strong>de</strong> las estrellas <strong>de</strong>l cielo, y arrojólas a<br />

la tierra; este dragón se puso <strong>de</strong>lante <strong>de</strong> la mujer, que estaba para parir a fin <strong>de</strong> tragarse<br />

al hijo, luego que ella lo hubiese dado a luz” (Apoc. 12:4).<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

6


Las estrellas <strong>de</strong>l Cielo a que se refiere este pasaje son los Car<strong>de</strong>nales, Obispos y<br />

padres católicos. Vea el libro <strong>de</strong>l Padre Bernand Kramer, The Book of Destiny, para una<br />

explicación muy razonable, <strong>de</strong> parte <strong>de</strong> un erudito católico, <strong>de</strong> este pasaje bíblico (ver las<br />

páginas 275-284).<br />

Y San Juan Eu<strong>de</strong>s aña<strong>de</strong>:<br />

“La marca más evi<strong>de</strong>nte <strong>de</strong> la cólera <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>, y el castigo más terrible que Él pue<strong>de</strong><br />

enviar al mundo, se manifiesta cuando Él permite que Su pueblo cae en las manos <strong>de</strong><br />

padres que son más en nombre que en realidad, padres que practican la crueldad <strong>de</strong> lobos<br />

en vez <strong>de</strong> la caridad y <strong>de</strong>l afecto <strong>de</strong> pastores <strong>de</strong>dicados…<br />

“Cuando <strong>Dios</strong> permite estas cosas, eso es una prueba muy positiva en cómo está<br />

muy irado con Su pueblo, y <strong>de</strong>ja caer sobre él Su cólera más temible. Es por eso que clama<br />

sin cesar a los cristianos: “Convertíos a mí, oh hijos rebel<strong>de</strong>s…Y os daré pastores según mi<br />

corazón” (Jer. 3:14-15). Así las irregularida<strong>de</strong>s en las vidas <strong>de</strong> los padres constituyen un<br />

flagelo que cae sobre las personas en consecuencia <strong>de</strong>l pecado”. 2<br />

Tenemos infiltraciones <strong>de</strong> todo tipo en el sacerdocio porque, entre otras razones,<br />

mucha gente en la Iglesia <strong>de</strong>jó <strong>de</strong> hacer penitencia social. Pero eso también se <strong>de</strong>be a<br />

nuestros pecados colectivos. No rezamos y nos sacrificamos lo bastante por ellos. Este<br />

escándalo es un toque <strong>de</strong> alerta para <strong>todos</strong> y cada uno <strong>de</strong> <strong>nosotros</strong>, hasta los buenos, a<br />

hacer penitencia.<br />

3 Los “buenos” que piensan que sirven a <strong>Dios</strong><br />

sino antes sirven al <strong>de</strong>monio<br />

Hasta los “buenos” pue<strong>de</strong>n fallar. Nadie se <strong>de</strong>be consi<strong>de</strong>rar exento <strong>de</strong> culpa. Son los<br />

“buenos” que <strong>de</strong>masiadas veces ignoran el Mensaje <strong>de</strong> Fátima y que, en la realidad,<br />

<strong>de</strong>sprecian la profecía. “No apaguéis el Espíritu. No <strong>de</strong>spreciéis las profecías. Examinad,<br />

sí, todas las cosas y ateneos a lo bueno” (1Tess. 5:19-21).<br />

En el tiempo <strong>de</strong> Jesús: No eran los que <strong>de</strong>spreciaban y burlaban <strong>de</strong> la religión; no<br />

eran los agnósticos; no eran los paganos; no eran las personas que creían en falsas<br />

religiones o en religión ninguna en el tiempo <strong>de</strong> Jesús, que gritaban: “¡Crucifícalo”!<br />

Eran las personas “religiosas”, que profesaban creer en el Antiguo Testamento;<br />

personas <strong>de</strong> la religión verda<strong>de</strong>ra <strong>de</strong> aquel tiempo, que, al mismo tiempo que pensaban<br />

servir a <strong>Dios</strong>, servían en verdad al <strong>de</strong>monio cuando gritaban por la muerte <strong>de</strong> Jesús.<br />

Confiaban <strong>de</strong>masiado en sus dirigentes religiosos, en vez <strong>de</strong> pensar por sí propios; en vez<br />

<strong>de</strong> reconocer los milagros y signos claros y evi<strong>de</strong>ntes que <strong>Dios</strong> les había dado – que Jesús<br />

era en verdad, un profeta y que <strong>de</strong>bía seguirlo en vez <strong>de</strong> los dirigentes religiosos corruptos.<br />

En nuestro tiempo: No son los protestantes, los judíos, los ateos, los comunistas,<br />

los masones, los paganos o los musulmanes; no son las falsas religiones; son los católicos<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

7


que siguen sus jefes religiosos y confían más en ellos <strong>de</strong> que en las palabras <strong>de</strong> la Madre <strong>de</strong><br />

<strong>Dios</strong>; que confían más en ellos <strong>de</strong> que en los signos y milagros evi<strong>de</strong>ntes que <strong>Dios</strong> nos dio,<br />

en apoyo <strong>de</strong>l Mensaje <strong>de</strong> Fátima.<br />

En resultado <strong>de</strong> esto, siguen los Car<strong>de</strong>nales Ratzingers (esto es explicado en el libro<br />

La última batalla <strong>de</strong>l diablo) <strong>de</strong>l mundo, los “piadosos <strong>de</strong>votos” que dicen erradamente:<br />

“No tiene que creer en el Mensaje <strong>de</strong> Fátima. Es una cosa muy hermosa y piadosa <strong>de</strong> hacer,<br />

pero no tiene que obe<strong>de</strong>cer al Mensaje <strong>de</strong> Fátima, y <strong>nosotros</strong>, dirigentes <strong>de</strong> la Iglesia, no<br />

tenemos que creer, no tenemos que obe<strong>de</strong>cer”. Tal como los dirigentes en el tiempo <strong>de</strong><br />

Jesús dijeron: “No tenemos que creer en Jesús o obe<strong>de</strong>cerle”.<br />

Y las personas <strong>de</strong> nuestro tiempo <strong>de</strong>jan andar esta manera <strong>de</strong> pensar. ¿Cómo?<br />

Dejaron <strong>de</strong> hacer donaciones al apostolado integral <strong>de</strong>l Mensaje <strong>de</strong> Fátima. No protestan<br />

cuando padres católicos que difun<strong>de</strong>n el Mensaje <strong>de</strong> Fátima son expulsos o excluidos <strong>de</strong> los<br />

llamados periódicos católicos.<br />

No protestan cuando el Mensaje <strong>de</strong> Fátima es excluido <strong>de</strong> la televisión. Dicen a los<br />

amigos y vecinos: “No oigan el Padre Gruner; fue suspendido”, cuando esto es claramente<br />

una mentira. No exigen la publicación <strong>de</strong> los 22 volúmenes suprimidos <strong>de</strong> la<br />

documentación sobre Fátima, compilados por el Padre Alonso. Este resultado <strong>de</strong> las<br />

investigaciones <strong>de</strong>l Padre Alonso disiparía muchas falseda<strong>de</strong>s que han sido diseminados<br />

sobre Fátima.<br />

No firman peticiones al Papa, hasta las <strong>de</strong>cenas <strong>de</strong> millones <strong>de</strong> firmas, pidiendo la<br />

divulgación <strong>de</strong>l Tercer Secreto en su totalidad; no pi<strong>de</strong>n al Papa la Consagración <strong>de</strong> Rusia.<br />

Están tan interesados en los juegos <strong>de</strong> fútbol y en agra<strong>de</strong>cer al Obispo y al Car<strong>de</strong>nal que los<br />

están conduciendo al infierno, cuando les dicen: ‘La profecías <strong>de</strong> Fátima pertenecen todas<br />

al pasado’, ‘pue<strong>de</strong>n ignorar Fátima sin problemas’.<br />

4 El pecado <strong>de</strong> nuestro tiempo: Fátima es ignorada<br />

El pecado principal <strong>de</strong> nuestro tiempo, especialmente <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> la Iglesia católica,<br />

es la falta <strong>de</strong> creencia en las apariciones <strong>de</strong> Nuestra Señora en Fátima y la <strong>de</strong>sobediencia a<br />

Sus pedidos.<br />

El pecado en el tiempo <strong>de</strong> Jesús era que las personas no creían que Jesús era el Hijo<br />

<strong>de</strong> <strong>Dios</strong>, y no creía aun <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> Él hubiese hecho milagros. El propio Jesús dijo, en<br />

sustancia, el siguiente: “Si Yo no hubiese venido y no hubiese hecho estos milagros, ellos<br />

estarían sin pecado. Pero porque vine y hice estos milagros, y ellos se rechazaron a<br />

aceptarlos, el pecado es enteramente suyo”.<br />

Nuestro Señor lloró por Jerusalén, porque el pueblo no reconocía el tiempo <strong>de</strong> Su<br />

visitación, y en vez <strong>de</strong> aceptarlo, continuaron a hacer lo que sus antepasados habían hecho;<br />

mataron los profetas que aparecieron antes <strong>de</strong> Cristo. El pueblo <strong>de</strong>l tiempo <strong>de</strong> Jesús mató al<br />

Rey <strong>de</strong> <strong>todos</strong> los profetas.<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

8


Hicieron esto por ser instigados por los miembros más <strong>de</strong>stacados <strong>de</strong>l clero <strong>de</strong> aquel<br />

tiempo: los Fariseos, los sumos sacerdotes, los escribas.<br />

El pecado en nuestro tiempo es muy parecido con el pecado <strong>de</strong>l tiempo en que<br />

Cristo caminaba sobre la tierra.<br />

En nuestro tiempo, no reconocieron la hora <strong>de</strong> visitación, este momento <strong>de</strong> gracia<br />

que <strong>Dios</strong> nos dio con el Mensaje <strong>de</strong> Fátima.<br />

Así como los sabios <strong>de</strong> nuestro tiempo, los escribas <strong>de</strong> nuestro tiempo, llenos <strong>de</strong><br />

orgullo – los doctores <strong>de</strong> la ley, los profesores universitarios, los gran<strong>de</strong>s eclesiásticos – los<br />

Car<strong>de</strong>nales Ratzinger y Sodano (como está explicado en el libro La última batalla <strong>de</strong>l<br />

diablo) enseñaron el pueblo a <strong>de</strong>spreciar la Reina <strong>de</strong> los profetas y Su mensaje, y no<br />

reconocer la hora <strong>de</strong> la visitación. Creen en los jefes <strong>de</strong>l clero en vez <strong>de</strong> creer en la Reina<br />

<strong>de</strong>l Cielo; y en resultado, así como hubo la <strong>de</strong>strucción <strong>de</strong> Jerusalén en el año 70, habrá la<br />

<strong>de</strong>strucción <strong>de</strong> nuestra sociedad a través <strong>de</strong> la aniquilación <strong>de</strong> naciones que Nuestra Señora<br />

<strong>de</strong> Fátima predijo.<br />

El Tercer Secreto en su totalidad (cuyo texto el Vaticano se niega a darnos) predice<br />

un castigo aún más terrible, la apostasía en la Iglesia. Los escándalos <strong>de</strong>l clero son un<br />

castigo <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>, tal como es la Apostasía fomentada por la corrupción <strong>de</strong>l clero. Esto<br />

también está bien explicada en el libro La última batalla <strong>de</strong>l diablo.<br />

La prueba – los pedidos <strong>de</strong> Fátima no fueron cumplidos<br />

En la segunda Epístola <strong>de</strong> San Pablo a los Tesalonicenses, el Apóstol los amonesta<br />

para que fuesen constantes en la fe <strong>de</strong> Cristo y no se aterrorizasen con las insinuaciones <strong>de</strong><br />

los falsos maestros. Los exhortó a que fuesen firmes en la tradición que habían recibido<br />

verbalmente o por epístolas. Nos dijo que el maligno, o sea, el Anticristo, será revelado:<br />

“a aquel inicuo que vendrá con el po<strong>de</strong>r <strong>de</strong> Satanás, con toda suerte <strong>de</strong> milagros, <strong>de</strong><br />

señales y <strong>de</strong> prodigios falsos, y con todas las ilusiones que pue<strong>de</strong>n conducir a la iniquidad<br />

a aquellos que se per<strong>de</strong>rán, por no haber recibido y amado la verdad a fin <strong>de</strong> salvarse. Por<br />

eso <strong>Dios</strong> les enviará el artificio <strong>de</strong>l error, con que crean a la mentira, para que sean<br />

con<strong>de</strong>nados <strong>todos</strong> los que no creyeron a la verdad, sino que se complacieron en la<br />

maldad” (2 Tes. 2:9-11).<br />

Si hay quien no entienda la enseñanza que <strong>Dios</strong> enviaría entre <strong>nosotros</strong> “el artificio<br />

<strong>de</strong>l error, con que crean a la mentira,” para los que no creen en la verdad, voy a explicar.<br />

El salmo 17 3 <strong>de</strong>scribe así a <strong>Dios</strong>:<br />

“Con el santo te ostentarás santo, y inocente con el inocente. Con el selecto serás<br />

selecto y con el perverso serás como él merece”.<br />

Si alguien procura engañar a <strong>Dios</strong>, intentado ser más experto que Él, sabrá que <strong>Dios</strong><br />

no Se <strong>de</strong>ja engañar. Los que profesan públicamente, y para sí propios, que aman mucho a<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

9


<strong>Dios</strong>, mas en sus corazones están lejos <strong>de</strong> Él; los que <strong>de</strong>testan la verdad, mientras profesan<br />

amar la verdad, serán engañados por las mentiras <strong>de</strong> gente impía, los precursores <strong>de</strong>l<br />

Anticristo.<br />

Ya mencionamos que la apostasía en la Iglesia católica es un castigo, <strong>de</strong>bido a las<br />

faltas <strong>de</strong> <strong>de</strong>masiados miembros <strong>de</strong> la alta jerarquía: por no creer, no dar atención y no<br />

obe<strong>de</strong>cer a Fátima. Y es también un castigo para legos y sacerdotes, por no obe<strong>de</strong>cer<br />

personalmente a Nuestra Señora, o sea, porque muchos <strong>de</strong> <strong>nosotros</strong> NO rezan el Rosario,<br />

NO usan el Escapulario; NO son <strong>de</strong>votos <strong>de</strong> Nuestra Señora.<br />

Sabemos que el Mensaje urgente <strong>de</strong> Fátima ha sido ignorado a través <strong>de</strong> los<br />

siguientes indicadores:<br />

Rusia no fue consagrada según el pedido preciso que Nuestra Señora <strong>de</strong> Fátima nos<br />

hizo. Nuestra Señora pidió que Rusia fuese consagrada específicamente. Como<br />

sabemos, un Obispo no consagra específicamente una iglesia parroquial o un<br />

cementerio católico al servicio <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>, consagrando simplemente su diócesis, o<br />

hasta consagrando la parroquia don<strong>de</strong> está la Iglesia o el cementerio. No, el Obispo<br />

<strong>de</strong>be indicar claramente, por signos exteriores, lo que él preten<strong>de</strong> consagrar<br />

específicamente. Así, va al local don<strong>de</strong> está la dicha iglesia, se le refiere por<br />

nombre, hace el Señal <strong>de</strong> la Cruz sobre ella, etc. De la misma manera, una<br />

consagración <strong>de</strong>l mundo no consagra específicamente a Rusia. Las palabras <strong>de</strong><br />

Nuestra Señora <strong>de</strong>ben ser seguidas exactamente, para obtener el efecto prometido.<br />

Al fin, la gracia <strong>de</strong> la paz mundial no es cosa pequeña. Ciertamente que no es pedir<br />

<strong>de</strong>masiado que hagamos exactamente lo que Ella especificó. Hasta ahora, la<br />

consagración no se hizo a<strong>de</strong>cuadamente. El Papa, unido con <strong>todos</strong> los Obispos<br />

católicos <strong>de</strong>l mundo y en el mismo día, <strong>de</strong>be consagrar específicamente a Rusia,<br />

refiriéndose por su nombre, al Inmaculado Corazón <strong>de</strong> María.<br />

Rusia no se convirtió. Los errores <strong>de</strong> Rusia continúan a difundirse en medio <strong>de</strong><br />

<strong>nosotros</strong>, como Nuestra Señora profetizó que suce<strong>de</strong>ría si no obe<strong>de</strong>ciésemos a Sus<br />

pedidos. El uso generalizado <strong>de</strong> drogas, la legalización <strong>de</strong>l aborto y ahora la<br />

eutanasia, todo esto y más aun expone a humanidad a un aumento <strong>de</strong> la inmoralidad<br />

y un alejamiento <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>. Esto no es una conversión, que es un retorno a <strong>Dios</strong> y a la<br />

única Iglesia verda<strong>de</strong>ra <strong>de</strong> Cristo.<br />

No tenemos la paz mundial que fue prometida. Continúa a haber guerras crecientes<br />

y rumores <strong>de</strong> guerras que se aproximan cada vez más <strong>de</strong> nuestra tierra, como<br />

sucedió con las Torres Gemelas en Nueva York; para no hablar <strong>de</strong> la amenaza<br />

creciente <strong>de</strong> una guerra nuclear.<br />

Sor Lucía preguntó a Nuestro Señor porque Él no convertiría a Rusia, sin que fuese<br />

necesario el Santo Padre consagrar específicamente a Rusia al Inmaculado Corazón<br />

<strong>de</strong> María. Jesús respondió:<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

10


“Porque quiero que toda Mi Iglesia reconozca esa consagración<br />

como un triunfo <strong>de</strong>l Inmaculado Corazón <strong>de</strong> María, para <strong>de</strong>spués exten<strong>de</strong>r<br />

su culto y poner, al lado <strong>de</strong> la <strong>de</strong>voción a Mi Sagrado Corazón, la <strong>de</strong>voción a<br />

este Corazón Inmaculado”. 4<br />

En 1943, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> el Papa Pio XII consagró el mundo (pero no a Rusia<br />

específicamente) al Inmaculado Corazón <strong>de</strong> María, Jesús habló a Sor Lucía y le dijo que<br />

ese acto Le había complacido, y en resultado <strong>de</strong> esto, los días <strong>de</strong> la “aflicción actual”,<br />

refiriéndose a la 2ª Guerra Mundial, serían abreviados, pero que la paz mundial no<br />

resultaría <strong>de</strong> esto. Esto era así claramente porque a Rusia, según el Mensaje <strong>de</strong> Fátima,<br />

<strong>de</strong>be ser consagrada específicamente.<br />

En varias ocasiones, Sor Lucía dijo claramente que Nuestra Señora <strong>de</strong> Fátima no<br />

había pedido la consagración <strong>de</strong>l mundo a Su Inmaculado Corazón. Por ejemplo, al<br />

Profesor William Thomas Walsh “más que una vez y con énfasis <strong>de</strong>liberado”, Sor Lucía<br />

dijo:<br />

“Lo que Nuestra Señora quiere es que el Papa y <strong>todos</strong> los obispos <strong>de</strong>l<br />

mundo consagren Rusia a Su Inmaculado Corazón en un día especial. Si esto<br />

se hace, Ella convertirá a Rusia y habrá paz. Si esto no se hace, los errores<br />

<strong>de</strong> Rusia se propagarán a <strong>todos</strong> los países <strong>de</strong>l mundo” 5<br />

Los errores <strong>de</strong> Rusia se difundieron entre <strong>nosotros</strong>, y bien claramente; uno <strong>de</strong> los<br />

peores es el aborto legalizado, que mata 50.000.000 <strong>de</strong> niños por año.<br />

Es evi<strong>de</strong>nte que no es sólo este apostolado, no es sólo Sor Lucía, no es sólo la<br />

Santísima Virgen María, sino <strong>Dios</strong> Mismo que nos dice por qué la Consagración <strong>de</strong> Rusia<br />

<strong>de</strong>be ser hecha explícitamente y sin alteraciones. Sin embargo, aun <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> una<br />

confirmación <strong>de</strong>l Cielo, los pedidos espirituales que Nuestra Señora hizo en Fátima<br />

continúan a ser ignorados.<br />

“Nuestra Señora está triste porque nadie le hace caso”<br />

El Mensaje urgente que Nuestra Señora nos dio en Fátima ha sido ignorado. Sor<br />

Lucía señaló la angustia <strong>de</strong> Nuestra Señora en una entrevista con el Padre Fuentes:<br />

“Padre, la Santísima Virgen está muy triste, porque nadie hace caso a su Mensaje, ni<br />

los buenos ni los malos. Los buenos, porque prosiguen su camino <strong>de</strong> bondad; pero sin hacer<br />

caso a este mensaje. Los malos, porque no viendo el castigo <strong>de</strong> <strong>Dios</strong> actualmente sobre<br />

ellos, a causa <strong>de</strong> sus pecados, prosiguen también su camino <strong>de</strong> maldad, sin hacer caso a este<br />

Mensaje. Pero, créame, Padre, <strong>Dios</strong> va a castigar al mundo, y lo va a castigar <strong>de</strong> una<br />

manera tremenda. El castigo <strong>de</strong>l cielo es inminente” .6<br />

“Dígales también, Padre, que mis primos Francisco y Jacinta se sacrificaron porque<br />

vieron siempre a la Santísima Virgen muy triste en todas sus apariciones. Nunca se sonrió<br />

con <strong>nosotros</strong>, y esa tristeza y angustia que notábamos en la Santísima Virgen, a causa <strong>de</strong> las<br />

ofensas a <strong>Dios</strong> y <strong>de</strong> los castigos que amenazaban a los pecadores, nos llegaban al alma; y<br />

no sabíamos qué i<strong>de</strong>ar para encontrar en nuestra imaginación infantil medios para hacer<br />

oración y sacrificio”. 7<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

11


“Padre, no esperemos que venga <strong>de</strong> Roma una llamada a la penitencia, <strong>de</strong> parte <strong>de</strong>l<br />

Santo Padre, para todo el mundo; ni esperemos tampoco que venga <strong>de</strong> parte <strong>de</strong> los señores<br />

Obispos para cada una <strong>de</strong> sus diócesis; ni siquiera tampoco <strong>de</strong> parte <strong>de</strong> las Congregaciones<br />

Religiosas. No; ya Nuestro Señor usó muchas veces estos medios, y el mundo no le ha<br />

hecho caso. Por eso, ahora, ahora que cada uno <strong>de</strong> <strong>nosotros</strong> comience por sí mismo su<br />

reforma espiritual; que tiene que salvar no sólo su alma, sino salvar a todas las almas que<br />

<strong>Dios</strong> ha puesto en su camino. “El <strong>de</strong>monio hace todo lo que está en su po<strong>de</strong>r para<br />

distraernos y retirarnos el amor a la oración; seremos <strong>todos</strong> salvados o seremos <strong>todos</strong><br />

con<strong>de</strong>nados”. 8<br />

Esta entrevista se realizó en 1957. En 1982, el Papa Juan Pablo II dijo en Fátima:<br />

“El mundo fue en la dirección opuesta a la indicada por Nuestra Señora <strong>de</strong> Fátima”. El<br />

mundo, y muchos <strong>de</strong> la jerarquía <strong>de</strong> la Iglesia católica, apenas ignoran Nuestra Señora <strong>de</strong><br />

Fátima aun más <strong>de</strong>s<strong>de</strong> ese día.<br />

5 Nosotros sufrimos las consecuencias<br />

En el tiempo <strong>de</strong> Jesús: Nuestro Señor avisó el pueblo con antece<strong>de</strong>ncia que<br />

Jerusalén sería <strong>de</strong>struida. Lloró sobre la ciudad <strong>de</strong> Jerusalén porque ellos no reconocieron<br />

su hora <strong>de</strong> visitación, que el momento <strong>de</strong> la Gracia y <strong>de</strong> la Misericordia había venido sobre<br />

ellos, y lo recusaron. Como dijo Nuestro Señor:<br />

“¿Cuántas veces quise recoger a tus hijos como la gallina recoge a sus pollitos<br />

bajo las alas, y tú no lo has querido”? (Mt. 23:37)<br />

En resultado <strong>de</strong> haber recusado la ayuda que <strong>Dios</strong> les ofreció en aquel tiempo, la<br />

<strong>de</strong>strucción <strong>de</strong> Jerusalén fue sin prece<strong>de</strong>ntes, como aun hoy se pue<strong>de</strong> ver. Nuestro Señor<br />

dijo que vendría en una hora en que los enemigos la cercarían, y lanzarían asaltos contra<br />

sus muros y <strong>de</strong>struirían la ciudad, <strong>de</strong> modo que “no quedará piedra sobre piedra”. (Mc.<br />

13:2)<br />

Todavía hoy, Jerusalén no fue reconstruida don<strong>de</strong> la antigua ciudad <strong>de</strong> Jerusalén<br />

estaba, y hay un monumento a aquella <strong>de</strong>strucción <strong>de</strong> Jerusalén: es el muro <strong>de</strong> las<br />

lamentaciones. Hay un muro don<strong>de</strong> quedaron algunas piedras sobrepuestas, que es la única<br />

cosa que resta <strong>de</strong> la Jerusalén <strong>de</strong>struida.<br />

Y los habitantes fueron llevados a la esclavitud. Los que sobrevivieron la<br />

<strong>de</strong>strucción <strong>de</strong> Jerusalén fueron llevados a la cautividad, a centenas <strong>de</strong> kilómetros <strong>de</strong> sus<br />

casas, en otro país, con una lengua diferente. Pasaron el resto <strong>de</strong> sus vidas en la esclavitud,<br />

y sus hijos <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> ellos, durante siglos.<br />

Fue esto que sucedió a aquella gente, porque siguieron sus dirigentes corruptos y no<br />

quisieron oír el profeta que <strong>Dios</strong> les envió. Sin embargo pensaron que estaban sirviendo a<br />

<strong>Dios</strong>, estaban sirviendo el <strong>de</strong>monio. Y eran personas que siguieron la religión verda<strong>de</strong>ra <strong>de</strong><br />

su tiempo.<br />

Es muy posible que se llenasen con orgullo <strong>de</strong> seguir la religión verda<strong>de</strong>ra y que<br />

dijesen para sí mismos lo que dijeron en el tiempo <strong>de</strong> Jeremía: “Jerusalén es la ciudad<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

12


santa <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>. Nunca será <strong>de</strong>struida”. Así como los católicos <strong>de</strong> nuestro tiempo estaban<br />

orgullosos <strong>de</strong> pertenecer a la verda<strong>de</strong>ra fe, y dijeron: “Como <strong>Dios</strong> prometió que las puertas<br />

<strong>de</strong>l infierno no prevalecerán contra ella, nada nos pue<strong>de</strong> suce<strong>de</strong>r (Mateo 16:18)<br />

Se equivocaron al pensar así, porque, aunque la promesa <strong>de</strong> que las puertas <strong>de</strong>l<br />

infierno no prevalecerán contra la Iglesia sea verda<strong>de</strong>ra, ellos no tienen una garantía<br />

personal <strong>de</strong> que permanecerán en la Iglesia. Una persona <strong>de</strong>ja la Iglesia por la apostasía,<br />

por la herejía, por el cisma, y a partir <strong>de</strong> ese momento la promesa ya no le aplica.<br />

En nuestro tiempo: Las consecuencias ya fueron la esclavitud <strong>de</strong> los pueblos en<br />

Europa oriental, <strong>de</strong> Rusia, <strong>de</strong> China, y <strong>de</strong> Cuba; la imposición <strong>de</strong> tiranías ateas militantes, el<br />

sistema conocido por el nombre <strong>de</strong> comunismo.<br />

Estos regímenes, aunque algunos han cambiado su apariencia externa, aun controlan<br />

eses países. Y no fueron sólo los países comunistas que sufrieron esta tiranía, porque los<br />

errores <strong>de</strong> Rusia comunista se difundieron por el Occi<strong>de</strong>nte. Incluso en los llamados países<br />

libres y <strong>de</strong>mocráticos, como Canadá y los Estados Unidos, los padres proclaman su libertad<br />

<strong>de</strong> matar aquello que tiene más valor para ellos, sus propios hijos, y agra<strong>de</strong>cen al Gobierno<br />

por les facilitar los medios para hacerlo.<br />

Piensan que una acción tan drástica como matar sus propios hijos es necesaria,<br />

porque no tienen condiciones económicas para tener hijo en ese entonces. Pero no parecen<br />

darse cuenta <strong>de</strong> que el Gobierno les lleva hasta 40% <strong>de</strong> sus ingresos, lo que es más que lo<br />

suficiente <strong>de</strong> que necesitan para alimentar los hijos.<br />

No se oye una voz <strong>de</strong> protesto contra esto. Por el contrario, gritan: “<strong>Que</strong>remos el<br />

aborto libre, queremos que el <strong>de</strong>recho a matar nuestros bebés sea consignado en las leyes <strong>de</strong><br />

nuestro país”. ¡Cómo son ciegos! Esto es uno <strong>de</strong> los errores que Rusia difundió con suceso<br />

por todo el mundo, en resultado <strong>de</strong> la gente <strong>de</strong> nuestro tiempo ignorando el mensaje <strong>de</strong><br />

Nuestra Señora <strong>de</strong> Fátima.<br />

En nuestro tiempo, el castigo <strong>de</strong> nuestro pueblo aun no acabó. Tenemos las<br />

profecías <strong>de</strong> Nuestra Señora <strong>de</strong> Fátima garantiendo que, si continuaremos a ignorarla, la<br />

Iglesia será perseguida (aun más <strong>de</strong> que ya está a ser), los buenos serán martirizados (aun<br />

más <strong>de</strong> que ya están a ser), el Santo Padre tendrá mucho que sufrir (aun más <strong>de</strong> que ya está<br />

sufriendo), y varias naciones serán aniquiladas, o sea, reducidas a nada.<br />

Esto aun no sucedió, pero no está lejos. Como dijo Sor Lucía:<br />

“…No es mi misión indicarle al mundo los castigos materiales que ciertamente<br />

vendrán sobre la tierra si el mundo antes no hace oración y penitencia. No! Mi misión es<br />

indicarles a <strong>todos</strong> el inminente peligro en que estamos <strong>de</strong> per<strong>de</strong>r para siempre nuestra<br />

alma si seguimos aferrados al pecado”. 8a<br />

Sor Lucía también dijo (en 1957) que <strong>Dios</strong> castigaría el mundo <strong>de</strong> manera terrible.<br />

Ya en 1957 había la esclavitud <strong>de</strong> Polonia, <strong>de</strong> Hungría, <strong>de</strong> Rusia, y <strong>de</strong> China – mil millones<br />

<strong>de</strong> personas, la tercera parte <strong>de</strong> la populación mundial. Pero aunque eso ya fuese terrible,<br />

Sor Lucía dijo que <strong>Dios</strong> castigaría <strong>de</strong> manera terrible, aun peor que la esclavitud <strong>de</strong><br />

naciones por los tiranos comunistas.<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

13


6 Signos <strong>de</strong> apostasía<br />

¿Cuál es el castigo terrible que Sor Lucía se estaba refiriendo – peor <strong>de</strong> que la<br />

aniquilación <strong>de</strong> naciones? Ese castigo es un castigo espiritual. Ese castigo está predicho en<br />

las Sagradas Escrituras. Ese castigo tiene un nombre. Se llama Apostasía. El Tercer Secreto<br />

<strong>de</strong> Fátima predice la Apostasía <strong>de</strong> naciones enteras, y posiblemente <strong>de</strong> continentes, que se<br />

apartarán <strong>de</strong> la Fe en nuestro tiempo (Esto también se explica en el libro La última batalla<br />

<strong>de</strong>l diablo).<br />

Este castigo es peor <strong>de</strong> que cualquier castigo material porque, mientras que las<br />

personas piensan servir a <strong>Dios</strong>, sirven al <strong>de</strong>monio. Mientras piensan que están construyendo<br />

una recompensa en el Cielo, están construyendo un lugar en las profundida<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l infierno.<br />

Esta apostasía es la consecuencia <strong>de</strong> la personas ignorando, <strong>de</strong>screyendo y no activamente<br />

difundiendo el Mensaje <strong>de</strong> Fátima en su totalidad.<br />

Este pecado no es apenas para los malos – los ladrones, los asesinos, los abortistas y<br />

otros pecadores públicos. Este pecado <strong>de</strong> <strong>de</strong>spreciar Nuestra Señora <strong>de</strong> Fátima y Su<br />

Mensaje profético <strong>de</strong> Fátima también será cometido por los buenos.<br />

En el tiempo <strong>de</strong> Jesús: Tenían un rey que, para pagar el precio <strong>de</strong> un baile erótico,<br />

mandó cortar la cabeza <strong>de</strong> San Juan Baptista. Hizo esto durante un banquete, en que las<br />

personas se divertían a la refección. Esto les da una i<strong>de</strong>a <strong>de</strong> <strong>de</strong>pravación <strong>de</strong> aquel jefe civil,<br />

que tenía usurpado el po<strong>de</strong>r y era totalmente inmoral.<br />

El pueblo no reconoce que este género <strong>de</strong> jefe, que ejercía autoridad sobre sus<br />

asuntos temporales, ya era un signo <strong>de</strong> cómo aquellos tiempos ya eran malos, y <strong>de</strong> la gran<br />

necesidad que ellos propios tenían <strong>de</strong> hacer penitencia. Continuaron a actuar <strong>de</strong> la misma<br />

manera, comiendo y divirtiéndose, en vez <strong>de</strong> hacer penitencia vestidos <strong>de</strong> sayal y cubiertos<br />

con cenizas, como hizo el pueblo <strong>de</strong> Nínive al saber que <strong>Dios</strong> estaba irado con ellos.<br />

Es importante comprehen<strong>de</strong>r que la apostasía no suce<strong>de</strong> totalmente <strong>de</strong> repente.<br />

Empieza y crece sutil y subrepticiamente y si no reaccionamos vigorosamente cuando<br />

recibimos los signos <strong>de</strong> que estamos en el camino errado y vamos por la la<strong>de</strong>ra abajo hasta<br />

al infierno, continuamos a acelerar.<br />

De la misma manear, en el tiempo <strong>de</strong> Jesús, aquellos sumos sacerdotes asesinos,<br />

cuyo único interés era su ambición y sus posiciones <strong>de</strong> autoridad y prestigio, aquellos<br />

hombres que conspiraron para crucificar a Jesucristo, no se hicieron malvados <strong>de</strong> un día a<br />

otro.<br />

Debería haber sido evi<strong>de</strong>nte. Jesús les señaló su hipocresía pero ellos se recusaron a<br />

arrepentirse. Una tal maldad no pue<strong>de</strong> <strong>de</strong>jar <strong>de</strong> manifestarse a los que quieren ver. Aquel<br />

género <strong>de</strong> li<strong>de</strong>razgo en su Iglesia <strong>de</strong> aquel tiempo también era un signo para el pueblo ver la<br />

gran necesidad que tenían <strong>de</strong> hacer penitencia. Hubo hombres malos en posiciones <strong>de</strong><br />

li<strong>de</strong>razgo en la Iglesia, tal como en el Estado, es uno <strong>de</strong> los castigos que <strong>Dios</strong> usa para<br />

<strong>de</strong>spertar el pueblo, pero in lugar <strong>de</strong> eso, el pueblo continuó durmiendo y tolerando la<br />

situación.<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

14


En nuestro tiempo: Sin hacer comentarios sobre los gobernantes civiles que siguen<br />

el ejemplo <strong>de</strong> Hero<strong>de</strong>s, que mandó asesinar a los Santos Inocentes, tenemos gobernadores<br />

parecidos en nuestro tiempo que asesinan los inocentes no nacidos a los cientos <strong>de</strong><br />

millones.<br />

Sólo <strong>de</strong>s<strong>de</strong> 1984, se calcula, por <strong>de</strong>fecto, que más <strong>de</strong> 800.000.000 bebés se mataron<br />

en todo el mundo, tanto directamente por los Gobiernos como a través <strong>de</strong> la convivencia,<br />

fomento y aprobación <strong>de</strong> los Gobiernos semejantes a Hero<strong>de</strong>s. Este tipo <strong>de</strong> Gobierno en<br />

nuestro tiempo es ciertamente un castigo.<br />

Pero la mayor parte <strong>de</strong> las personas, incluyendo la mayor parte <strong>de</strong> los católicos, no<br />

lo reconocen y no reaccionan, al menos haciendo penitencia, al menos prestando atención<br />

al pedido <strong>de</strong> Nuestra Señora <strong>de</strong> Fátima para rezar el Rosario <strong>todos</strong> los días. Esta falta <strong>de</strong><br />

una reacción vigorosa que nos lleve a volver a <strong>Dios</strong> en penitencia, arrepentimiento y<br />

súplica es culpable <strong>de</strong> nuestra parte.<br />

“En el Tercer Secreto se predice, entre otras cosas, que la gran apostasía en la<br />

Iglesia comenzará <strong>de</strong> su vértice”.<br />

Estas son las palabras <strong>de</strong> Car<strong>de</strong>nal Ciappi (el Teólogo Pontificio personal <strong>de</strong>l Papa<br />

Juan Pablo II). El resultado <strong>de</strong> la “gran Apostasía” que comenzará “<strong>de</strong> su vértice” es la<br />

corrupción <strong>de</strong>l clero y <strong>de</strong> los legos en cuestiones <strong>de</strong> doctrina, <strong>de</strong> moral y <strong>de</strong> la liturgia.<br />

Hoy, la Iglesia está en una gran crisis. Sus propios dirigentes – padres, Obispos, y<br />

hasta Car<strong>de</strong>nales – causan escándalo <strong>de</strong>ntro y fuera <strong>de</strong> la Iglesia; se hacen <strong>de</strong>claraciones<br />

heréticas y se practica la inmoralidad – como la homosexualidad, la pedofilia, el aborto, la<br />

anticoncepción y el divorcio, para mencionar algunos casos.<br />

El hecho <strong>de</strong> que malos padres son un castigo es testimoniado por San Juan Eu<strong>de</strong>s.<br />

Nos recor<strong>de</strong>mos que él nos dijo que <strong>Dios</strong> enviaría malos padres cuando está irado. <strong>Dios</strong><br />

está muy irado con Su pueblo, porque no sólo nos envía malos padres, como también,<br />

aparentemente, nos envía también malos Obispos y malos Car<strong>de</strong>nales.<br />

El 13 <strong>de</strong> mayo <strong>de</strong> 2000, el Papa Juan Pablo II nos dijo en Fátima que<br />

“El Mensaje <strong>de</strong> Fátima es un llamamiento a la conversión, y alerta a la Humanidad<br />

a que no haga el juego <strong>de</strong>l “dragón”, cuya “cola arrastraba la tercera parte <strong>de</strong> las<br />

estrellas <strong>de</strong>l Cielo y las lanzó a la Tierra” (Apoc. 12:4)<br />

Clarifiquemos esta <strong>de</strong>claración. El Papa Juan Pablo II dijo el siguiente: No sigan la<br />

tercera parte <strong>de</strong> los Car<strong>de</strong>nales, la tercera parte <strong>de</strong> los Obispos católicos, y la tercera parte<br />

<strong>de</strong> los padres católicos que fueron arrastrados por el <strong>de</strong>monio afuera <strong>de</strong> su posición exaltada<br />

<strong>de</strong> conducir los fieles al Cielo. 8b<br />

En otros términos, el Santo Padre nos dice el aviso que el Mensaje <strong>de</strong> Fátima nos<br />

hace para los días <strong>de</strong> hoy. O sea, que la tercera parte <strong>de</strong>l clero (que son las estrellas <strong>de</strong>l<br />

Cielo) fue arrastrado por el <strong>de</strong>monio y sus secuaces – los masones, los comunistas, las<br />

organizaciones <strong>de</strong> homosexuales – y están ahora a trabajar para el <strong>de</strong>monio mismo; no para<br />

<strong>Dios</strong>, no para la Iglesia <strong>de</strong> Cristo, sino para el <strong>de</strong>monio.<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

15


Es esto, claramente, lo que está en el Tercer Secreto que no fue revelado por or<strong>de</strong>n<br />

<strong>de</strong>l Car<strong>de</strong>nal Sodano y con la convivencia <strong>de</strong>l Car<strong>de</strong>nal Ratzinger. Esta última afirmación<br />

está explicada en el libro que necesitan leer, La última batalla <strong>de</strong>l diablo (para verlo online<br />

vea www.<strong>de</strong>vilsfinalbattle.com).<br />

Como no estamos haciendo penitencia socialmente, públicamente, muchos<br />

sacerdotes no reciban las gracias para conducir sus rebaños. Muchos fieles no están<br />

haciendo penitencia, muchos sacerdotes no están recibiendo gracias suficientes para ser tan<br />

santos e informados como necesitan ser, y por lo tanto, muchos fieles no están<br />

<strong>de</strong>bidamente conducidos.<br />

¿Cómo <strong>de</strong>berá ser nuestra actitud, a luz <strong>de</strong> estos escándalos? ¿Qué nos dice el<br />

Mensaje <strong>de</strong> Fátima sobre estas cosas? ¿Qué <strong>de</strong>bemos hacer?<br />

Sería fácil, y hasta parecería justificado para algunos – los mundanos, los que están<br />

fuera <strong>de</strong> la Iglesia, los débiles en la fe, los enemigos <strong>de</strong> la Iglesia – concluir: “Ya les<br />

habíamos dicho. Desistan <strong>de</strong>l celibato, <strong>de</strong>sistan <strong>de</strong> la vida religiosa, <strong>de</strong>sistan en su tentativa<br />

<strong>de</strong> influenciar el li<strong>de</strong>razgo <strong>de</strong> la Iglesia. Desistan y sean iguales a los mundanos. Sean como<br />

<strong>nosotros</strong>, que no procuramos servir a <strong>Dios</strong>. Necesitamos anticlericalismo.<br />

Ni el anticlericalismo ni el clericalismo son la respuesta<br />

El Anticlericalismo – aparece en varias partes <strong>de</strong> la Iglesia. Empezó<br />

aun antes <strong>de</strong> este escándalo había estallado. Los tibios, los débiles, los<br />

envidiosos dijeron: “No necesitamos el clero. Los obispos sí, pero los<br />

sacerdotes son apenas funcionarios que po<strong>de</strong>mos mandar por un lado al otro,<br />

a nuestro pedido. Sólo es necesario hacer queja <strong>de</strong> ellos, si no hiciesen lo que<br />

queremos”.<br />

Se enfadan con un sacerdote obediente al Magisterio porque él no obe<strong>de</strong>ce a “su<br />

Magisterio”. Este anticlericalismo está activo en varios niveles, en medio <strong>de</strong> los católicos<br />

conservadores, <strong>de</strong> los liberales, <strong>de</strong> los mo<strong>de</strong>rnos, y <strong>de</strong> los que piensan que el “Vaticano II<br />

fue un super-Concilio”.<br />

El Clericalismo – es el error que nos lleva a <strong>de</strong>cir que se <strong>de</strong>be hacer<br />

lo que quiere que el Padre X diga – sea lo que sea – aun cuando dice que el<br />

divorcio está bien, que la Comunión en la mano está bien, que poner el<br />

tabernáculo <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> un armario <strong>de</strong> barreras está bien “Seguimos el Padre X<br />

porque, en la confesión, el me dice que puedo usar preservativos con mi<br />

mujer, aunque la Iglesia siempre enseñó pública y consistentemente que y<br />

aun hasta hoy que <strong>todos</strong> los actos <strong>de</strong> anticoncepción son pecados mortales.<br />

Seguir el clericalismo en esta manera alivia nuestra conciencia y nos hace<br />

sentir que tenemos una disculpa para el Día <strong>de</strong> Juicio y que <strong>Dios</strong> tendrá que<br />

perdonarnos”.<br />

Esta auto-ilusión, que se disfraza en humildad, con respecto al clero no llegará para<br />

salvar millones <strong>de</strong> almas. Incluyendo hasta, quien sabe, alguien que Usted conoce muy<br />

bien.<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

16


El asunto más serio <strong>de</strong> la vida, la salvación <strong>de</strong> nuestra alma individual <strong>de</strong> fuego <strong>de</strong>l<br />

infierno por toda la eternidad requiere un esfuerzo más consciente. No es suficiente para<br />

<strong>nosotros</strong> pensar que estamos informados, sólo con la lectura <strong>de</strong> los titulares <strong>de</strong> los<br />

periódicos o recibiendo la última línea <strong>de</strong>l partido <strong>de</strong>l Car<strong>de</strong>nal Sodano (Cf. “The Party<br />

Line”, The Fatima Crusa<strong>de</strong>r, nº 69, pág. 10) o <strong>de</strong> los Obispos o sacerdotes locales. La<br />

Línea <strong>de</strong>l Partido, sin duda, no llegará para salvar el alma.<br />

Esta crisis en la Iglesia es una señal <strong>de</strong> alarma para <strong>todos</strong> y cada uno <strong>de</strong> <strong>nosotros</strong>.<br />

Esta crisis es uno <strong>de</strong> los signos <strong>de</strong>l último combate <strong>de</strong>l <strong>de</strong>monio, para ganar nuestra alma y<br />

el alma <strong>de</strong> <strong>todos</strong> los católicos que hoy viven.<br />

Sor Lucía, en una entrevista con el Padre Fuentes en 1957 tuvo esto a <strong>de</strong>cir:<br />

Padre, el <strong>de</strong>monio está librando una batalla <strong>de</strong>cisiva con la Virgen; y<br />

como sabe qué es lo que más ofen<strong>de</strong> a <strong>Dios</strong> y lo que, en menos tiempo, le<br />

hará ganar mayor número <strong>de</strong> almas, está tratando <strong>de</strong> ganar a las almas<br />

consagradas a <strong>Dios</strong>, ya que <strong>de</strong> esta manera también <strong>de</strong>ja el campo <strong>de</strong> las<br />

almas <strong>de</strong>samparado, y más fácilmente se apo<strong>de</strong>ra <strong>de</strong> ellas.<br />

Lo que más les aflige al Corazón Inmaculado <strong>de</strong> María y al Sagrado<br />

Corazón <strong>de</strong> Jesús es la pérdida <strong>de</strong> las almas <strong>de</strong> los Religiosos y <strong>de</strong> los<br />

Sacerdotes. El <strong>de</strong>monio sabe que los Religiosos y los Sacerdotes que fracasan<br />

en su sublime vocación arrastran consigo al infierno numerosas almas. El<br />

<strong>de</strong>monio quiere apo<strong>de</strong>rarse <strong>de</strong> las almas consagradas. Intenta corromperlas a<br />

fin <strong>de</strong> adormecer las almas <strong>de</strong> los laicos y <strong>de</strong> ese modo llevarlas a la<br />

impenitencia final. Utiliza <strong>todos</strong> los trucos, llegando al punto <strong>de</strong> sugerir un<br />

retraso en la entrada en la vida religiosa. Lo que resulta <strong>de</strong> esto es la<br />

esterilidad <strong>de</strong> la vida interior, y entre los legos una frialdad (falta <strong>de</strong><br />

entusiasmo) cuanto a renunciar los placeres y <strong>de</strong>dicarse totalmente a <strong>Dios</strong>”. 8c<br />

Recordamos a las almas generosas que pue<strong>de</strong>n ayudar a salvar muchas almas.<br />

Nuestra Señora <strong>de</strong> Fátima dijo:<br />

“Van muchas almas al infierno, por no tener quien se sacrifique y pida por ellas”. 8d<br />

Alma generosa, pue<strong>de</strong>s rezar y hacer muchos sacrificios, y en este modo salvar<br />

muchas almas.´<br />

7 Como el clero reaccionó a los profetas.<br />

En el tiempo <strong>de</strong> Jesús: Los Fariseos y los principales sacerdotes conspiraron para<br />

asesinar a Jesús, lo que hicieron con la apariencia <strong>de</strong> justificación legal. El resultado final<br />

fue que mataron Jesús a través <strong>de</strong> los Romanos, que accionaron bajo presión <strong>de</strong> la multitud<br />

(manipulada, controlada y excitada por los principales sacerdotes y por los Fariseos). Fue<br />

planeado por ellos, que hicieron la conspiración y la llevaron a cabo. Y esto incluye<br />

también la entrega <strong>de</strong> Judas, uno <strong>de</strong> los discípulos <strong>de</strong> Jesús, por 30 monedas <strong>de</strong> plata.<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

17


En nuestro tiempo: El silenciamiento <strong>de</strong> Sor Lucía: Los sacerdotes principales <strong>de</strong><br />

hoy llevan a cabo el “asesinato” <strong>de</strong> Sor Lucía, silenciándola, lo que ya hicieron más que<br />

hace 42 años, limitándola con restricciones imposibles para que ella no podría contar al<br />

público el Mensaje <strong>de</strong> Fátima en su totalidad, aunque ella hubiese sido confiada <strong>de</strong><br />

entregarlo al pueblo. Esto es para ella como una muerte en vida: tener este secreto en el<br />

corazón, en la mente, mientras ellos fingen que ya fue revelado y ella sabe que es una<br />

mentira.<br />

Ella está paralizada por la apariencia <strong>de</strong> la ley, o sea, por la “santa obediencia”, para<br />

mantener el silencio, y esta mentira es ejecutada por los Judas en el clero, y para el mismo<br />

fin <strong>de</strong> que los Fariseos hicieron en el tiempo <strong>de</strong> Nuestro Señor, para ganar los favores <strong>de</strong> los<br />

jefes seculares <strong>de</strong> aquel tiempo. Hoy procuran agradar a los masones y a los comunistas y a<br />

los humanistas seculares y a los Gobiernos mundanos <strong>de</strong> nuestro tiempo.<br />

La <strong>de</strong>claración <strong>de</strong>l Padre Gruner como una no-persona<br />

Como no pue<strong>de</strong>n silenciar el Padre Gruner, que comprehendió lo que estaba por<br />

<strong>de</strong>trás <strong>de</strong> aquellos raciocinios falsos y <strong>de</strong> las falsas leyes, lo <strong>de</strong>clararon una no-persona, tal<br />

como Estalín hacía a los disi<strong>de</strong>ntes en la Unión Soviética. Aparecen con <strong>de</strong>claraciones<br />

falsas sobre el estatuto eclesiástico <strong>de</strong>l Padre Gruner. Una vez más, es un asesinato <strong>de</strong><br />

carácter llevado a cabo por los gran<strong>de</strong>s sacerdotes en el Vaticano, para silenciar la voz <strong>de</strong> la<br />

profecía. Para más <strong>de</strong>talles, vea la Cronología <strong>de</strong> un encubrimiento en nuestra página <strong>de</strong><br />

Internet, o llámenos (al 1-905-871-8041, o gratuitamente en Norteamérica a 1-800-263-<br />

8160) para recibir un ejemplar gratuito. Vea también lo que el libro La última batalla <strong>de</strong>l<br />

diablo dice sobre este punto.<br />

8 “El pecado se institucionalizó”<br />

Hay más pecado en la Iglesia y en el mundo <strong>de</strong> que en cualquier otro período <strong>de</strong> la<br />

historia. Como dijo el Papa Juan Pablo II en Fátima en 1982: “El pecado se<br />

institucionalizó”.<br />

El aborto generalizado, anticoncepción, divorcio, infi<strong>de</strong>lidad entre los legos<br />

católicos, que continúan recibiendo la Sagrada Comunión sin arrepentimiento, sin<br />

Confesión, atrae la cólera <strong>de</strong> <strong>Dios</strong> sobre <strong>nosotros</strong>.<br />

Cuando el pecado aumenta y no hay arrepentimiento, es entonces que <strong>Dios</strong> castiga.<br />

<strong>Dios</strong> es la suma bondad. Las generaciones futuras tienen que ver que tan malos ejemplos no<br />

agradan a <strong>Dios</strong>, y que Él tiene que hacer un ejemplo <strong>de</strong> una generación tan pecadora, así<br />

como Él hizo con Sodoma y Gomorra.<br />

Damos a la continuación algunos ejemplos <strong>de</strong>l pecado generalizado, en resultado <strong>de</strong><br />

los fieles siendo iludidos por el silencio y por la ignorancia <strong>de</strong>l clero. Elegimos estos<br />

ejemplos porque son fáciles <strong>de</strong> comprehen<strong>de</strong>r, fáciles <strong>de</strong> documentar, fáciles <strong>de</strong> probar. Los<br />

que tienen más <strong>de</strong> 45 años pue<strong>de</strong>n recordarse <strong>de</strong> lo que les enseñaron era exactamente el<br />

opuesto <strong>de</strong> que hoy se pasa. Quien tiene menos <strong>de</strong> 45 años pue<strong>de</strong>n preguntar a los padres y<br />

a personas más viejas, y ellos les confirmarán todo esto.<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

18


Pue<strong>de</strong> parecer que estos ejemplos son criticones y <strong>de</strong> importancia insignificante.<br />

Confío que, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> leerlos, los reconocerán <strong>de</strong> otra manera. En las Sagradas Escrituras,<br />

el Espíritu Santo nos avisa: “Poco a poco se arruinará el que <strong>de</strong>sprecia las coas pequeñas”<br />

(Ecl. 19:1).<br />

A. Abstinencia <strong>de</strong> carne en los viernes.<br />

Al contrario <strong>de</strong> lo que han querido que creyesen, al contrario <strong>de</strong> lo que fue dicho en<br />

el Concilio Vaticano II, al contrario <strong>de</strong> cualquier impresión o <strong>de</strong>claración que les había<br />

llegado <strong>de</strong> algún Car<strong>de</strong>nal, Obispo, sacerdote o <strong>de</strong>l Concilio en total – la verdad es que aun<br />

hoy son obligados, bajo pena <strong>de</strong> pecado mortal, a abstenerse <strong>de</strong> comer carne a las viernes a<br />

partir <strong>de</strong> los 14 años <strong>de</strong> edad. La única concesión es para los enfermos que fueron<br />

excusados <strong>de</strong> esta observancia.<br />

La ley <strong>de</strong> la Iglesia es:<br />

(1) No <strong>de</strong>bemos comer carne en los viernes. Esto se basa en el precepto divino, en<br />

un or<strong>de</strong>n divino viniendo <strong>de</strong> Cristo mismo, <strong>de</strong> que tenemos que hacer penitencia. Citemos<br />

Nuestro Señor directamente: El dijo que: “Si no hacéis penitencia, <strong>todos</strong> pereceréis”. Y<br />

como es nuestra obligación intentar salvar a nuestra alma, tenemos la obligación <strong>de</strong> hacer<br />

penitencia.<br />

(2) Debemos, en estricta justicia y gratitud, reconocer siempre y continuamente la<br />

<strong>de</strong>uda que tenemos para con Nuestro Señor, por haber muerto en la Cruz para salvarnos <strong>de</strong><br />

nuestros pecados personales. Este reconocimiento no es simplemente privado, entre<br />

<strong>nosotros</strong> y <strong>Dios</strong> (aunque esto sea importante); <strong>de</strong>be también ser público, esto es,<br />

reconociendo ante los otros hombres, por lo menos los católicos, que tienen la misma casa,<br />

es <strong>de</strong>cir, la Iglesia, y la misma Fe.<br />

La Iglesia, en su sabiduría a través <strong>de</strong> los siglos, comprimió estas dos obligaciones<br />

solemnes, que cada uno <strong>de</strong> <strong>nosotros</strong> tiene personalmente, en una simple ley que la Iglesia<br />

tiene la autoridad <strong>de</strong> imponer a cada miembro. O sea, que nos abstenemos <strong>de</strong> carne en los<br />

viernes, como penitencia y en reconocimiento <strong>de</strong>l sufrimiento y muerte que Cristo suportó<br />

por nuestra salvación en el Viernes Santo. Esta ley <strong>de</strong> la Iglesia continua válida hasta hoy.<br />

Tengo la certeza <strong>de</strong> que algunos están protestando: “Esto no es verdad, fue<br />

cambiado en el Concilio”. Bueno, voy a <strong>de</strong>cirles lo que cambió. El 17 <strong>de</strong> febrero <strong>de</strong> 1966,<br />

el Papa Pablo VI promulgó una Constitución Apostólico intitulado Paenitemini, que dice<br />

que la ley <strong>de</strong> la Iglesia continúa a mandar la abstención <strong>de</strong> carne en <strong>todos</strong> los viernes <strong>de</strong>l<br />

año.<br />

Sin embargo, dio permiso a que se fuese contra la letra <strong>de</strong> la ley si la Conferencia<br />

Episcopal <strong>de</strong> un <strong>de</strong>terminado país hiciese una petición a la Santa Sé, al Papa, para que los<br />

fieles pudiesen hacer otra penitencia en el viernes en vez <strong>de</strong> no comer carne. Por lo tanto,<br />

en los países cuyos Obispos hicieron una petición al Papa para hacer otra penitencia que no<br />

fuese abstenerse <strong>de</strong> carne a los viernes, los fieles <strong>de</strong> eses países pue<strong>de</strong>n hacer otra<br />

penitencia.<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

19


Pero lo que les dijeron, y que nadie parece saber, es que continúan con la obligación<br />

<strong>de</strong> hacer otra penitencia a los viernes, y aun bajo pena <strong>de</strong> pecado mortal.<br />

Por lo tanto, si piensa que pue<strong>de</strong> continuar a comer carne en los viernes porque un<br />

vecino hace eso – aun si va a la Iglesia <strong>todos</strong> los días, aun que sea su párroco o su Obispo –<br />

y no hace otra penitencia en lugar <strong>de</strong> la penitencia <strong>de</strong> la abstinencia los viernes, estará<br />

cometiendo un pecado mortal (a menos que <strong>tenga</strong> una dispensa legítima) e irá al infierno<br />

por causa <strong>de</strong> esto, si no se arrepentirse y confesar su pecado, o, no teniendo posibilidad <strong>de</strong><br />

ir al Sacramento <strong>de</strong> la Confesión antes <strong>de</strong> la hora <strong>de</strong> la muerte, si haga un Acto <strong>de</strong> Perfecta<br />

Contrición. Caso contrario, irá al infierno. E ir al infierno no es una cosa <strong>de</strong> poca<br />

consecuencia, como sin duda estará <strong>de</strong> acuerdo.<br />

Po<strong>de</strong>mos ver que muchos miembros <strong>de</strong> la grey han sido iludidos por la tercera parte<br />

<strong>de</strong>l clero <strong>de</strong> que habla el Apocalipsis. ¿Qué po<strong>de</strong>mos hacer?<br />

Estamos viviendo en los tiempos profetizados <strong>de</strong> confusión. Por eso, no nos<br />

<strong>de</strong>bemos enfadar contra nuestro clero. Es nuestra obligación apuntarles los errores, facilitar<br />

buena literatura católica y las verda<strong>de</strong>s bíblicas a quien busca la verdad. Debemos<br />

explicarles lo que apren<strong>de</strong>mos aquí. Y recuér<strong>de</strong>nse que no estarán citando, en primer lugar,<br />

el Padre Gruner o The Fatima Crusa<strong>de</strong>r – estarán recordándoles las verda<strong>de</strong>s contenidas en<br />

la doctrina <strong>de</strong> la Iglesia católica en la Biblia sagrada. Así como Nuestra Señora <strong>de</strong> Fátima<br />

no vino a darnos doctrina nueva, sino recordarnos <strong>de</strong> la doctrina ya contenida en las<br />

Sagradas Escrituras y en el Magisterio perene <strong>de</strong> la Iglesia católica.<br />

Debemos también corregir nuestras propias acciones, dar un buen ejemplo.<br />

Debemos rezar y mantener nuestros corazones y nuestras mentes abiertas al que el Espíritu<br />

Santo nos dice para hacer. Debemos evitar aquella tercera parte <strong>de</strong>l clero que no quiere oír<br />

ni arrepentirse, y, encima <strong>de</strong> todo, no <strong>de</strong>bemos seguir su camino, que lleva al infierno.<br />

Debemos rezar el Rosario para encontrarnos por lo menos un sacerdote santo <strong>de</strong> las<br />

dos terceras <strong>de</strong>l clero que todavía son fieles a <strong>Dios</strong>, para que nos guie como <strong>de</strong>be ser.<br />

B. Comunión en la mano<br />

La ley <strong>de</strong> la Iglesia actual, en 2002, aún es que <strong>de</strong>bemos recibir la Comunión en la<br />

boca. Esta práctica viene ya <strong>de</strong>l tiempo <strong>de</strong> Cristo y <strong>de</strong> los Apóstoles. Cristo la enseñó a los<br />

Apóstoles, y el Concilio <strong>de</strong> Trento enseñó que la práctica <strong>de</strong> la Comunión en la lengua es<br />

<strong>de</strong> origen apostólica.<br />

Hay muchas razones doctrinales que podría invocar para les <strong>de</strong>cir como esto es tan<br />

importante, pero vamos hablar <strong>de</strong> la ley <strong>de</strong> la Iglesia, que se basa en esa doctrina y origen<br />

histórica.<br />

La ley dice, muy simplemente, que en el Rito Latino, esto es, para <strong>todos</strong> los que no<br />

siguen los Ritos Orientales, la manera <strong>de</strong> recibir el Santísimo Sacramento es el sacerdote<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

20


colocar la Hostia consagrada en la lengua <strong>de</strong>l comulgante. Esta ley no cambió durante el<br />

Vaticano II, no cambió <strong>de</strong>spués <strong>de</strong>l Vaticano II, y sigue siendo la ley <strong>de</strong> Iglesia hasta hoy.<br />

Voy a <strong>de</strong>cirles lo que fue promulgado, sobre esta materia, por el Papa Pablo VI en<br />

1969, en las Acta Apostolicae Sedis, páginas 546 y 547 (A.A.S. 1969). El Papa Pablo VI<br />

dice que la Comunión en la lengua continúa a ser la ley <strong>de</strong> la Iglesia.<br />

Sin embargo, permite que se vaya contra la letra <strong>de</strong> la ley si se sigan dos principios<br />

y siete reglas. Si cualquier <strong>de</strong> estos principios no es seguido, o si alguna <strong>de</strong> las siete reglas<br />

no es seguida, la Comunión sólo podrá ser dada en la lengua y no en la mano. Estas<br />

condiciones se publicaron en varios lugares, incluyendo el Apéndice V <strong>de</strong> Fatima Priest, 1ª<br />

y 2ª ediciones, y en los Nºs 7 y 28 <strong>de</strong> The Fatima Crusa<strong>de</strong>r. Pero he aquí un sumario.<br />

Principio 1: Los fieles no <strong>de</strong>ben escandalizarse por la práctica <strong>de</strong> la Comunión en<br />

la mano.<br />

Principio 2: No <strong>de</strong>be haber risco <strong>de</strong> irreverencia o sacrilegio a la Hostia consagrada<br />

y a las Partículas si la Comunión sea dada en la mano. Ni siquiera <strong>de</strong>be haber una<br />

apariencia <strong>de</strong> irreverencia.<br />

Veamos ahora la regla nº 3. La práctica <strong>de</strong> la Comunión en la mano <strong>de</strong>be aumentar<br />

la fe <strong>de</strong>l comulgante, que procura recibir la Comunión en la mano, en la Presencia Real.<br />

Caso contrario, el comulgante no pue<strong>de</strong> recibir la Comunión en la mano. Ligado a esta<br />

regla es que el ministro que da la comunión <strong>de</strong>be <strong>de</strong>cidir en este preciso momento, si esta<br />

práctica aumenta la fe <strong>de</strong> la persona que recibe la Sagrada Comunión.<br />

Para ser explicito, no es el Papa, el Obispo, el funcionario <strong>de</strong> la Curia o el Párroco,<br />

sino solo y exclusivamente el sacerdote que ministra la Comunión, que pue<strong>de</strong> hacer ese<br />

juicio y que, evi<strong>de</strong>ntemente, es personalmente responsable ante <strong>Dios</strong>. El sacerdote que da la<br />

Comunión respon<strong>de</strong> directamente ante <strong>Dios</strong>. Cometería un pecado mortal si diese la<br />

Comunión en la mano a una persona que fuese indigna.<br />

Otra cosa sobre la Comunión en la mano es que es enteramente a la elección <strong>de</strong>l<br />

ministro. El ministro no pue<strong>de</strong> dar la Comunión en la mano si no se siguen las reglas y<br />

principios. Aun si sean seguidos, el ministro continúa a ser libre <strong>de</strong> no dar la Comunión en<br />

la mano. Esta libertad no le pue<strong>de</strong> ser retirada por nadie, ni siquiera por el Papa, y esto<br />

simplemente porque el ministro tiene la obligación <strong>de</strong> respon<strong>de</strong>r ante <strong>Dios</strong> por toda y cada<br />

una <strong>de</strong> las Hostias que distribuye.<br />

Hay siete reglas para ser seguidas<br />

¿Cuánta gente sabe que hay siete reglas que <strong>de</strong>ben ser seguidas? Pregunten a su<br />

párroco, su Obispo, su Car<strong>de</strong>nal. Calculo que ninguno <strong>de</strong> ellos sabe.<br />

¿Cómo pue<strong>de</strong>n seguir las reglas si ni siquiera saben que las reglas existen? Es muy<br />

probable que muchas almas están recibiendo la Comunión en la mano y transgrediendo la<br />

ley <strong>de</strong> la Iglesia, y ni siquiera saben <strong>de</strong> esto.<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

21


Una <strong>de</strong> las siete reglas es simplemente ésta: Cuando se recibe la Comunión en la<br />

mano, se <strong>de</strong>be tener cuidado para que no se <strong>de</strong>je caer algún fragmento <strong>de</strong> la Hostia en el<br />

suelo. Sabía que, si recibir la Sagrada Comunión en la mano, tiene la obligación <strong>de</strong> mirar a<br />

la mano cada vez que lo hace, y certificarse <strong>de</strong> que no <strong>de</strong>ja caer una partícula <strong>de</strong> la Hostia<br />

en el suelo.<br />

Si <strong>de</strong>ja que esto acontece, comete un sacrilegio. Y habrá cometido un sacrilegio aun<br />

que no haya tenido la intención. ¿Quiere que ese sacrilegio pese en su alma, y sea juzgado<br />

por <strong>Dios</strong> en el Día <strong>de</strong>l Juicio? Podrá consi<strong>de</strong>rarse con suerte si apenas fue enviado al<br />

Purgatorio, porque su ignorancia pasada podrá disculparlo. Pero ahora ya no lo disculpará.<br />

No es cosa sin importancia estar entregado a las manos <strong>de</strong>l <strong>Dios</strong> vivo.<br />

Le recomiendo que lea el <strong>de</strong>creto <strong>de</strong>l Papa Pablo VI sobre este asunto; tiene la fecha<br />

<strong>de</strong> mayo <strong>de</strong> 1969 y se llama Memorabile Domini. Pue<strong>de</strong> encontrar el texto en nuestra<br />

página internet: www.fatima.org o pue<strong>de</strong> llamarnos por teléfono o escribir a The Fatima<br />

Center (vea el número <strong>de</strong> teléfono y las direcciones en “¡Ayú<strong>de</strong>nos a difundir el Mensaje <strong>de</strong><br />

Fátima!”) para obtener un ejemplar.<br />

C. Falta <strong>de</strong> mo<strong>de</strong>stia y respecto<br />

Es una instrucción divina, contenida en las Sagradas Escrituras en dos sitios<br />

diferentes, que las mujeres cubran la cabeza en la iglesia o cuando asistan al Santo<br />

Sacrificio <strong>de</strong> la Misa, Esta or<strong>de</strong>n, este precepto, no pue<strong>de</strong> ser cambiado, suspenso,<br />

cancelado o excusado por el Papa, por el Obispo, por su párroco o por su confesor personal,<br />

porque no tienen la jurisdicción para cambiar esta ley.<br />

Esto parece no tener importancia, pero si <strong>Dios</strong> manda, ya es una buena razón para<br />

esto. Todavía, San Pablo dio dos razones, y voy a referirme a apenas una. Es generalmente<br />

aceptado por la mayoría <strong>de</strong> los hombres y <strong>de</strong> las mujeres que <strong>Dios</strong> crió la mujer como, en<br />

regla, más atrayente y más bonita <strong>de</strong> que el hombre.<br />

San Pablo, al comentar sobre la belleza <strong>de</strong> la mujer, dice que el cabello es su corona<br />

<strong>de</strong> gloria. En resultado <strong>de</strong> este don <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>, las mujeres tienen la obligación <strong>de</strong> cubrir la<br />

cabeza en la iglesia, porque la belleza <strong>de</strong> su cabello es tal que podría llevar algunos<br />

hombres a mirar a su cabello en vez <strong>de</strong> compenetraren a dar su atención total a Jesús<br />

durante el Santo Sacrificio <strong>de</strong> la Misa y a Su Presencia en el Santísimo Sacramento.<br />

Fue por eso que San Pablo, inspirado por el Espíritu Santo, escribió en las Sagradas<br />

Escrituras que pertenece a las mujeres la obligación <strong>de</strong> cubrir la cabeza, su cabello, en la<br />

Misa y en la iglesia, y durante las oraciones públicas. Dijo aun que, si una mujer no hace<br />

esto, si no cubre la cabeza en la Misa, se <strong>de</strong>shonra a causa <strong>de</strong> esto.<br />

Más o menos en los últimos 30 años, no oí un único sacerdote diciendo a las<br />

mujeres <strong>de</strong> su parroquia que cubran la cabeza durante la Misa. Algunos <strong>de</strong> ellas, sin duda,<br />

piensan que esto cambió con el Vaticano II o en los años que se siguieron al Vaticano II. La<br />

realidad es que, en una conferencia <strong>de</strong> prensa en el Vaticano en 1969, un periodista<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

22


preguntó al portavoz <strong>de</strong>l Vaticano si habría algún cambio en la ley sobre mujeres cubriendo<br />

la cabeza en la iglesia, y respondió que no había sido cambios; lo que era una respuesta<br />

perfectamente legítima y correcta.<br />

Sin embargo, los periodistas, al escribir para los periódicos <strong>de</strong> todo el mundo,<br />

interpretaron la respuesta como ya no había la obligación <strong>de</strong> cubrirse la cabeza en la iglesia.<br />

Publicaron esta falsedad en todo el mundo, en las primeras páginas, con gran<strong>de</strong>s titulares en<br />

los llamados periódicos católicos. En la semana siguiente, en otra conferencia <strong>de</strong> prensa, el<br />

portavoz <strong>de</strong>l Vaticano corrigió los periodistas <strong>de</strong> todo el mundo, y algunos periódicos<br />

publicaron una pequeña negación, con dos centímetros <strong>de</strong> largura o dos centímetros <strong>de</strong><br />

altura, en alguna parte sin importancia en una página.<br />

Muchos sacerdotes, Obispos y periódicos católicos no nos sirvieron bien y dijeron la<br />

verdad. En vez <strong>de</strong> eso, o por ignorancia, o por miedo, o por voluntad <strong>de</strong> cambiar la ley, no<br />

dijeron nada. El hecho es que fuimos iludidos en los últimos 30 y tal años.<br />

Fíjese, quien <strong>de</strong>sprecia las cosas pequeñas, cae poco a poco. Señoras, no recibirán<br />

<strong>todos</strong> los beneficios <strong>de</strong> las oraciones y obras piadosas cuando van a los Domingos a Misa,<br />

si no cubren la cabeza en la iglesia. A pesar <strong>de</strong> <strong>todos</strong> los esfuerzos <strong>de</strong> <strong>de</strong> toda la buena<br />

voluntad, no recibirán los beneficios que <strong>de</strong>berían porque no les dijeron que eso <strong>de</strong>sagrada<br />

a <strong>Dios</strong>.<br />

Así es importante que recemos por nuestros sacerdotes, Obispos, Car<strong>de</strong>nales y el<br />

Papa, para que hagan bien sus obligaciones; que nos cuenten toda la verdad que<br />

necesitamos saber, para alegrarnos <strong>todos</strong> unidos en el Cielo, en vez <strong>de</strong> encontrarnos<br />

<strong>de</strong>slizando cada vez más al infierno. Como Sor Lucía dijo, “Seremos salvados juntos o<br />

seremos con<strong>de</strong>nados juntos”.<br />

Si es verdad que <strong>Dios</strong> se preocupa tanto con la mo<strong>de</strong>stia, al punto <strong>de</strong> manda cubrir<br />

la cabeza en la iglesia para que los sacerdotes y los hombres en la congregación no se<br />

distraen con la belleza natural <strong>de</strong>l cabello <strong>de</strong> una mujer, entonces ¿qué es lo que diremos <strong>de</strong><br />

una mujer exponiéndose en cualquier local público, pero mucho más en una iglesia, usando<br />

pantalones estrechos, o pantalones cortos, o camisetas sin mangas, o mini-faldas, o<br />

escotados que no son tan pequeños como <strong>de</strong>berían, o cualquier uno <strong>de</strong> las centenas <strong>de</strong><br />

truques que el <strong>de</strong>monio facultó para ayudar un hombre a pecar en su corazón con esta o<br />

aquella mujer?<br />

Nuestro Señor dijo que si un hombre mira a una mujer con la intención <strong>de</strong> codiciar<br />

en su corazón, ya pecó y mereció el fuego <strong>de</strong>l infierno. San Juan Crisóstomo señaló:<br />

“¿Quién es el mayor culpado <strong>de</strong> un asesinato, el hombre que bebe el veneno y se mata o la<br />

persona que le preparó el veneno para él beber”?<br />

El veneno <strong>de</strong> ver mujeres vestidas sin mo<strong>de</strong>stia, que, a través <strong>de</strong> los <strong>de</strong>seos<br />

consentidos <strong>de</strong> lujuria, mata las almas <strong>de</strong> los hombres que mira a ellas es suficiente para un<br />

hombre ser culpable <strong>de</strong> pecar mortalmente. Pero la mujer que prepara el veneno que va a<br />

matar el alma <strong>de</strong> aquel hombre es más culpable <strong>de</strong> asesinato que él. Es esto que la<br />

inmo<strong>de</strong>stia en el vestir hace. Mata las almas <strong>de</strong> los hombres y mata la propia alma <strong>de</strong> la<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

23


mujer. Y es un sacrilegio cuando suce<strong>de</strong> en la iglesia y en la Misa, más allá <strong>de</strong> ser pecada<br />

<strong>de</strong> impureza.<br />

Para quien piensa que usar pantalones es más mo<strong>de</strong>sto <strong>de</strong> que usar vestidos u otras<br />

ropas que exponen la piel, y por lo tanto libra <strong>de</strong>l pecado, se <strong>de</strong>be explicar que no es sólo la<br />

cantidad <strong>de</strong> piel expuesta que cuenta; es también la cantidad <strong>de</strong> la forma <strong>de</strong>l cuerpo <strong>de</strong> la<br />

mujer que se ve que pue<strong>de</strong> causar pensamientos y <strong>de</strong>seos lujuriosos. Porque casi <strong>todos</strong> los<br />

pantalones, si no <strong>todos</strong>, exponen <strong>de</strong>masiado la forma <strong>de</strong> la mujer. El resultado es que una<br />

mujer que usa pantalones con frecuencia se torna ocasión <strong>de</strong> pecado para el espíritu<br />

saludable, normal e sin tacha. Si un hombre no peca, es a causa <strong>de</strong> la gracia que lo hace<br />

<strong>de</strong>sviar los ojos, pero esto no perdona la mujer.<br />

D. Desviarse <strong>de</strong> la finalidad <strong>de</strong>l matrimonio<br />

Muchos católicos no conocen la totalidad <strong>de</strong> las enseñanzas <strong>de</strong> la Iglesia sobre el<br />

matrimonio y el uso <strong>de</strong> la sagrada facultad <strong>de</strong> la procreación por hombres y mujeres. La<br />

sagrada facultad <strong>de</strong> la procreación es lo que generalmente se llama sexo.<br />

Las Sagradas Escrituras, así como la Santa Tradición y el Magisterio <strong>de</strong> la Iglesia<br />

católica, enseñan que el po<strong>de</strong>r sagrado que un hombre y una mujer <strong>de</strong>senvuelven juntos<br />

para traer una nueva vida humana al mundo pertenece a <strong>Dios</strong>.<br />

Esta doctrina se basa en la verdad fundamental <strong>de</strong> que <strong>Dios</strong> es el Criador <strong>de</strong> <strong>todos</strong><br />

los seres humanos. Esta verdad es la piedra angular <strong>de</strong> la doctrina católica y <strong>de</strong> la moral<br />

católica. De hecho, todas las religiones que afirman que la Biblia es la palabra inspirada <strong>de</strong><br />

<strong>Dios</strong> enseñan la misma cosa.<br />

Si <strong>Dios</strong> no hubiera creado cada uno <strong>de</strong> <strong>nosotros</strong>, no seríamos Sus criaturas. Así<br />

como reconocemos el <strong>de</strong>recho que un trabajador tiene a los frutos <strong>de</strong> su trabajo, y<br />

reconocemos el <strong>de</strong>recho <strong>de</strong> un propietario al que es extraído <strong>de</strong> su pro<strong>piedad</strong>, como el oro<br />

extraído <strong>de</strong> una mina, <strong>de</strong>bemos reconocer, <strong>de</strong> la misma manera, que <strong>Dios</strong>, el Creador, que<br />

ha creado el mundo <strong>de</strong> la nada y ha creado a <strong>todos</strong> y cada uno <strong>de</strong> <strong>nosotros</strong>, también tiene<br />

<strong>de</strong>rechos <strong>de</strong> pro<strong>piedad</strong>.<br />

Efectivamente, los <strong>de</strong>rechos <strong>de</strong> pro<strong>piedad</strong> <strong>de</strong> <strong>Dios</strong> son absolutos. Los <strong>de</strong>rechos <strong>de</strong><br />

una propietario humano son apenas relativos. Los <strong>de</strong>rechos <strong>de</strong> unan propietario humano no<br />

pue<strong>de</strong> exigir mayor jurisdicción <strong>de</strong> pro<strong>piedad</strong> <strong>de</strong> que el Criador.<br />

Para usar un ejemplo: la mano en la extremidad <strong>de</strong> mi brazo es, en cierto sentido,<br />

mía. Pertenece a mí, y no al vecino. Pero en otro sentido no es mía. No he creado esta<br />

mano. No la hice. No he creado los materiales necesarios para ella. No he creado los padres<br />

<strong>de</strong> quien la heredé. Pertenece a <strong>Dios</strong>. Pero <strong>Dios</strong> me hizo responsable por ella.<br />

Soy apenas la persona responsable por ella en representación <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>, y por eso<br />

<strong>de</strong>bo usar mi mano según las leyes <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>. Debo usarla para hacer el bien. No <strong>de</strong>bo usarla<br />

para hacer mal. Por lo tanto, así como mi mano pertenece a <strong>Dios</strong> en el sentido absoluto,<br />

porque Él es el Criador, también el restante <strong>de</strong> mí pertenece a <strong>Dios</strong>.<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

24


Pero esto no se aplica sólo a mí, sino a <strong>todos</strong> los hombres, mujeres y niños que<br />

vivieron, viven y vivirán en la faz <strong>de</strong> la tierra, y hasta a quien pueda estar en un navío en el<br />

espacio exterior.<br />

Así como la capacidad <strong>de</strong> levantar cosas, agarrar cosas en la mano, es una capacidad<br />

que <strong>Dios</strong> me dio, que <strong>de</strong>bo usar <strong>de</strong> acuerdo con Sus leyes, la capacidad que Él me dio para<br />

traer vida humana al mundo pertenece también a <strong>Dios</strong>. Es una responsabilidad sagrada que<br />

<strong>de</strong>be ser usada <strong>de</strong> acuerdo con la ley <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>.<br />

<strong>Dios</strong> enseñó claramente en las Sagradas Escrituras, en la Santa Tradición y en las<br />

santas enseñanzas sólidas <strong>de</strong>l Papa y <strong>de</strong>l Magisterio sólido <strong>de</strong> la Iglesia al largo <strong>de</strong> los<br />

últimos 2000 años, como esta capacidad sagrada <strong>de</strong> procrear <strong>de</strong>be y no <strong>de</strong>be ser usada.<br />

Para hablar claramente en un breve párrafo, po<strong>de</strong>mos sumariar esta capacidad o<br />

po<strong>de</strong>r que <strong>Dios</strong> nos dio y como <strong>de</strong>be ser usado <strong>de</strong> la siguiente manera:<br />

<strong>Dios</strong> sólo permite el uso y el gozo <strong>de</strong> la procreación (sexo) en circunstancias muy<br />

limitadas y restrictas. O sea, sólo pue<strong>de</strong> ser usado entre un hombre una mujer para traer al<br />

mundo una nueva vida humana y <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> los santos lazos <strong>de</strong>l matrimonio. Si uno u otro<br />

cónyuge no es fértil, esto no los prohíbe <strong>de</strong> usar esta capacidad sagrada mientras <strong>de</strong>jan a<br />

<strong>Dios</strong> la oportunidad <strong>de</strong> aprovechar <strong>de</strong> la unión y por eso no <strong>de</strong>ben hacer nada que impi<strong>de</strong><br />

que <strong>Dios</strong> envíe un hijo como fruto <strong>de</strong> esa unión.<br />

Esta capacidad no es un <strong>de</strong>recho para ser usado, no es un instrumento <strong>de</strong> placer que<br />

podamos insistir que es nuestro y que po<strong>de</strong>mos hacer con ella lo que quisiéramos. Sólo<br />

pue<strong>de</strong> ser usado <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l matrimonio <strong>de</strong> un hombre y una mujer que casaron uno con<br />

otro.<br />

Pero esto no es todo. Hasta en el matrimonio, esta capacidad pue<strong>de</strong> ser abusada,<br />

cuando un <strong>de</strong> los esposos tiene relaciones con otra persona que no es su cónyuge o si<br />

divorcia su cónyuge y casa con otra persona mientras la primera está viva, o si abusa <strong>de</strong> la<br />

capacidad <strong>de</strong> procreación, usando medios mecánicos, químicos o quirúrgicos para impedir<br />

que <strong>Dios</strong> envíe un hijo <strong>de</strong> esa unión. Este último pecado se llama anticoncepción.<br />

Hasta el uso <strong>de</strong> la Planificación Familiar Natural (PFN) para evitar tener más hijos,<br />

si no haber una razón suficiente para usar el PFN, es también un pecado grave. Como dijo<br />

un sacerdote, para resumir las obligaciones <strong>de</strong> un matrimonio: “Así como las personas<br />

individuales tienen una vocación ante <strong>Dios</strong>, así también suce<strong>de</strong> con los matrimonios, que<br />

tienen una vocación ante <strong>Dios</strong>”. “Ay <strong>de</strong> vosotros”, dijo, “si en el Día <strong>de</strong>l Juicio no hubieses<br />

tenido <strong>todos</strong> los hijos que <strong>Dios</strong> quería que tuvieses”, refiriéndose obviamente a las personas<br />

que viven en estado <strong>de</strong> matrimonio, gozan <strong>de</strong> los privilegios <strong>de</strong>l matrimonio, pero se<br />

recusan a aceptar <strong>todos</strong> los hijos que <strong>Dios</strong> les quiere enviar.<br />

San Rafael explicó al joven Tobías, en las Sagradas Escrituras, que el <strong>de</strong>monio tiene<br />

po<strong>de</strong>r sobre ciertos matrimonios <strong>de</strong> personas casadas.<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

25


Díjole entonces el ángel Rafael: Escúchame, que yo te ensenaré cuáles son aquellos<br />

sobre quienes tiene potestad el <strong>de</strong>monio.<br />

Los que abrazan con tal disposición el matrimonio, que apartan <strong>de</strong> sí y <strong>de</strong> su mente<br />

a <strong>Dios</strong>, entregándose a su pasión, como el caballo y el mulo que tienen entendimiento; esos<br />

son sobre quienes tiene po<strong>de</strong>r el <strong>de</strong>monio. (Tobías 6: 16, 17)<br />

Cuando el Arcángel Rafael dice: “entregándose a su pasión, como el caballo y el<br />

mulo”, está refiriéndose a quien usa el privilegio <strong>de</strong>l matrimonio sin intención <strong>de</strong> tener<br />

hijos, o con intención <strong>de</strong> limitar seriamente su capacidad <strong>de</strong> concebir hijos. Esto es claro,<br />

<strong>de</strong>bido al hecho <strong>de</strong> que el caballo no pue<strong>de</strong> tener <strong>de</strong>scen<strong>de</strong>ncia con la mula.<br />

Es así el pecado <strong>de</strong> la esterilización <strong>de</strong>l hombre o <strong>de</strong> la mujer. El matrimonio que<br />

tiene un cónyuge esterilizado ha intentado privar <strong>Dios</strong> <strong>de</strong> Su <strong>de</strong>recho. De la misma manera<br />

que somos obligados a restituir a una persona lo que le robamos, una persona que<br />

aprovecha <strong>de</strong> uso <strong>de</strong>l matrimonio pero que es esterilizada tiene la obligación <strong>de</strong> restituir a<br />

<strong>Dios</strong> lo que Le robó.<br />

En otros términos, si una persona roba mil dólares al patrón o a alguien, <strong>de</strong>be<br />

<strong>de</strong>volver eses mil dólares. Si no pue<strong>de</strong> <strong>de</strong>volver todo <strong>de</strong> una vez, <strong>de</strong>be <strong>de</strong>volverlo por<br />

plazos, según sus posibilida<strong>de</strong>s. Si es indigente y totalmente incapaz <strong>de</strong> hacer la restitución,<br />

<strong>Dios</strong> le perdonará la obligación <strong>de</strong> restituir. Pero mientras <strong>tenga</strong> posibilidad <strong>de</strong> <strong>de</strong>volver lo<br />

que robó, tiene la obligación <strong>de</strong> restituir.<br />

Si un hombre robó a <strong>Dios</strong>, haciendo una operación <strong>de</strong> esterilización para no po<strong>de</strong>r<br />

concebir hijos, y sigue usando esta capacidad <strong>de</strong> procrear, tiene la obligación <strong>de</strong> restituir a<br />

<strong>Dios</strong> esa capacidad, reparando los efectos <strong>de</strong> esa operación. Si esa intervención lo matase,<br />

<strong>Dios</strong> no esperaría que él la hiciese bajo tales circunstancias.<br />

De la misma manera, el uso <strong>de</strong> la capacidad <strong>de</strong> procrear antes <strong>de</strong>l matrimonio es<br />

también prohibido, porque <strong>Dios</strong> quiere que <strong>todos</strong> los niños sean concebidos y nazcan <strong>de</strong><br />

padres casados, <strong>de</strong> modo que a cada pueda ser criada en un ambiente estable, para su<br />

bienestar temporal y también espiritual.<br />

Por eso, cualquier uso <strong>de</strong> la capacidad <strong>de</strong> procrear antes <strong>de</strong>l matrimonio está<br />

estrictamente prohibido, bajo pena <strong>de</strong> pecado mortal. A<strong>de</strong>más, como la capacidad <strong>de</strong><br />

procrear es una fuerza muy po<strong>de</strong>rosa, no es posible, por así <strong>de</strong>cirlo, iniciar el proceso y<br />

<strong>de</strong>spués interrumpirlo, y no ir hasta el fin, como se acostumbra a <strong>de</strong>cir. Hacer tal cosa es no<br />

sólo una ocasión <strong>de</strong> mayor pecado, sino también es un pecado en sí, porque se está a<br />

obtener el placer ligado al acto marital, cuando esto está reservado apenas a quien está en el<br />

estado <strong>de</strong> matrimonio.<br />

E. Homosexualidad<br />

Debería ser muy claro para <strong>todos</strong> que los actos homosexuales, entre dos hombres o<br />

entre dos mujeres, son siempre un error, por la simple razón <strong>de</strong> que no pue<strong>de</strong>n resultar en<br />

procreación <strong>de</strong> una vida humana. Por lo tanto, no son apenas pecados, por ser hechos fuera<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

26


<strong>de</strong>l matrimonio, sino también porque frustran la finalidad misma para que <strong>Dios</strong> nos dio la<br />

facultad <strong>de</strong> procreación.<br />

Resumiendo, cada hombre y cada mujer es una criatura <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>. Como tal,<br />

pertenecen totalmente a <strong>Dios</strong>, <strong>de</strong> cuerpo y alma. Todos los miembros <strong>de</strong> su cuerpo<br />

pertenecen a <strong>Dios</strong>. No pue<strong>de</strong>n usar ninguna parte <strong>de</strong> su cuerpo <strong>de</strong> una manera prohibida por<br />

<strong>Dios</strong>. Deben usar sus diversas faculta<strong>de</strong>s según la finalidad para que <strong>Dios</strong> las hiciera.<br />

Aún sobre el sagrado po<strong>de</strong>r <strong>de</strong> la procreación (la sexualidad humana), esta<br />

capacidad <strong>de</strong>be ser usada <strong>de</strong> acuerdo con las enseñanzas estrictas <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>, que se<br />

encuentran en la Biblia Sagrada, en la Santa Tradición <strong>de</strong> la Iglesia católica y en el<br />

Magisterio Solemne, Ordinario y Universal <strong>de</strong> la Iglesia. Así siendo, el sexo solo pue<strong>de</strong> ser<br />

hecho entre un hombre casado y su esposa, y sólo cuando está abierto a traer al mundo una<br />

nueva vida humana. Cualquier otro uso <strong>de</strong>l sexo es un pecado mortal. Por lo tanto, hasta<br />

toques, miradas y vestidos inmo<strong>de</strong>stos constituyen pecados.<br />

Nuestra Señora <strong>de</strong> Fátima dijo: “Van más almas al infierno a causa <strong>de</strong> los pecados<br />

<strong>de</strong> la carne <strong>de</strong> que por cualquier otra razón”. San Alfonso enseña que estos pecados contra<br />

la sexualidad humana son uno <strong>de</strong> las cuatro gran<strong>de</strong>s entradas o portales <strong>de</strong>l infierno. Las<br />

Sagradas Escrituras nos dicen que hay cuatro pecados que claman al Cielo por venganza.<br />

Uno <strong>de</strong> ellos es la homosexualidad, y otro es tomar <strong>de</strong>liberadamente la vida <strong>de</strong> una persona<br />

inocente.<br />

Vemos que ambos estos pecados han aumentado inmensamente en la generación<br />

presente, a través <strong>de</strong> los pecados <strong>de</strong>l aborto y <strong>de</strong> su legalización, así como <strong>de</strong> la propaganda<br />

y legalización <strong>de</strong> la homosexualidad. Y esto es un signo más <strong>de</strong> que estamos en una crisis,<br />

y que iremos a ser castigados por <strong>Dios</strong>.<br />

Amar el pecador, <strong>de</strong>testar el pecado<br />

¿Cuál <strong>de</strong>be ser nuestra actitud ante la homosexualidad y otros pecados y otros tipos<br />

<strong>de</strong> pecadores? Fue bien resumida por San Agustín, cuando dijo que <strong>de</strong>bemos amar el<br />

pecador y <strong>de</strong>testar el pecado; por eso, sería un error preten<strong>de</strong>r que los pecados no son<br />

pecados.<br />

Las Sagradas Escrituras nos dicen lo que es recordado a <strong>todos</strong> los Obispos, en la<br />

hora <strong>de</strong> su consagración: no <strong>de</strong>bemos llamar “mal” al bien, así como no <strong>de</strong>bemos llamar<br />

“bien” al mal. Esto es peor que hipocresía.<br />

Hay tres niveles <strong>de</strong> mal. El primero es saber que una cosa es mal, y hacerla,<br />

sabiendo que es mal. El segundo es hacer mal, fingiendo ante los otros que no estamos<br />

haciendo mal, que, en verdad, somos buenos y que no cometemos tales pecados. Esto es<br />

hipocresía: hacer una cosa y <strong>de</strong>cir que se hace otra. Es peor que hacer mal y no <strong>de</strong>cir<br />

falseda<strong>de</strong>s a respecto <strong>de</strong> esto.<br />

El tercer tipo <strong>de</strong> mal es peor que la hipocresía: es hacer el mal y <strong>de</strong>cir que es el bien.<br />

Personas que cometen un asesinato, o que roban bancos, o que cometen pecados contra la<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

27


pureza, incluyendo el pecado <strong>de</strong> la homosexualidad, y <strong>de</strong>spués dicen: “Sí, cometo ese<br />

pecado y tengo orgullo en eso, es una cosa buena lo que estoy haciendo”, esto es una gran<br />

abominación a la vista <strong>de</strong> <strong>Dios</strong> y es peor que pecar, sabiendo que practicamos el mal, o<br />

pecar y preten<strong>de</strong>r que no está pecando. No <strong>de</strong>bemos llamar “mal” al bien, así como no<br />

<strong>de</strong>bemos llamar “bien” al mal.<br />

A respecto <strong>de</strong> los homosexuales, <strong>de</strong>bemos <strong>de</strong>cir, según los profetas y las Sagradas<br />

Escrituras, así como las enseñanzas solemnes <strong>de</strong> la Iglesia católica durante 2000 años, que<br />

los actos y <strong>de</strong>seos <strong>de</strong>liberados <strong>de</strong> homosexualidad son pecados. Cada uno <strong>de</strong> estos actos es<br />

un pecado serio. Es un pecado grave. Es un pecado mortal. Quien comete este pecado, aun<br />

si sea sólo una vez, y no arrepentirse <strong>de</strong> él – y esto implica que <strong>de</strong>be confesar el pecado,<br />

tener la intención <strong>de</strong> no volver a cometerlo, y estar arrepentido (a menos que esté<br />

moribundo y que no haya un sacerdote para oír su Confesión cuando se arrepiente; en este<br />

caso <strong>de</strong>berá hacer un Acto <strong>de</strong> Perfecta Contrición para salvarse) – este pecado, sin<br />

arrepentimiento, lo enviará al fuego <strong>de</strong>l infierno para toda la eternidad.<br />

Yo no amaría mi próximo, mi próximo homosexual, si no le dijese la verdad sobre<br />

esto. Es un hecho; porque si puedo convencerlo <strong>de</strong> que hay procedido mal y llevarlo al<br />

arrepentimiento, lo haré el mejor favor posible – a saber, lo salvaré <strong>de</strong>l fuego <strong>de</strong>l infierno.<br />

Si nadie lo convence a <strong>de</strong>jar <strong>de</strong> pecar y arrepentirse, es cierto que irá al infierno, con<strong>de</strong>nado<br />

por <strong>Dios</strong> a aquel sufrimiento eterno por aquel pecado. No podrá alegar ignorancia en el Día<br />

<strong>de</strong>l Juicio. Pue<strong>de</strong> hoy pensar que sí, pero eso no lo disculpará en el Día <strong>de</strong>l Juicio.<br />

No hay excepciones a esta regla, porque San Pablo dijo, en el 1º Capítulo <strong>de</strong> la<br />

Epístola a los romanos: “Los afeminados (los homosexuales practicantes) no entrarán en el<br />

Reino <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>”. No son sólo los homosexuales practicantes, que saben que sus actos y<br />

<strong>de</strong>seos homosexuales están errados, que irán al infierno, sino <strong>todos</strong> ellos, porque esta ley<br />

está escrita en sus corazones, y fue <strong>Dios</strong> quien la colocó en sus corazones.<br />

No es necesario un libro para enseñarles, no es necesario que un predicador los<br />

enseñe. Aun si el Papa, o un Car<strong>de</strong>nal, o un Obispo les dijera el contrario, esto no los<br />

disculparía en el Día <strong>de</strong>l Juicio, y es necesario que sepan eso. Por más doloroso que sea<br />

para <strong>nosotros</strong> <strong>de</strong>cirles eso, nuestro silencio o falsas enseñanzas no los servirían ni<br />

ayudarían.<br />

Debemos señalar que, cuando <strong>de</strong>cimos que “actos homosexuales o <strong>de</strong>seos<br />

homosexuales <strong>de</strong>liberados son pecados mortales”, no estamos <strong>de</strong>testando la persona que es<br />

afligida por esta tentación, ni <strong>de</strong>testando la persona que practica este pecado. No<br />

<strong>de</strong>testamos el pecador; <strong>de</strong>testamos el pecado. Porque amamos el pecador, <strong>de</strong>bemos <strong>de</strong>cirle<br />

la verdad, para que él se arrepienta y pueda salvar el alma, usando los medios <strong>de</strong> gracia,<br />

como el rezo <strong>de</strong>l Rosario <strong>todos</strong> los días y la confesión frecuente, para atraer las gracias <strong>de</strong><br />

<strong>Dios</strong> a su alma, y enviándole personas que lo puedan aconsejar sobre lo que pue<strong>de</strong> hacer y<br />

<strong>de</strong>be hacer para evitar esta tentación en el futuro.<br />

Tal como suce<strong>de</strong> con <strong>todos</strong> los otros pecados <strong>de</strong> <strong>de</strong>bilidad <strong>de</strong> la carne, evitando las<br />

ocasiones <strong>de</strong> pecado pue<strong>de</strong>n también evitarse casi <strong>todos</strong> los pecados <strong>de</strong> esta naturaleza. Un<br />

buen confesor, un buen padre, un buen consejero inspirado por las leyes <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>, por la<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

28


Biblia, pue<strong>de</strong>n ayudar cualquier uno a evitar este pecado en el futuro, especialmente si la<br />

persona sea católica y usa los medios <strong>de</strong> gracia que se encuentran en la Iglesia católica.<br />

Cualquier persona pue<strong>de</strong>, por lo menos, rezar tres Avemarías por día, resolver rezar<br />

siempre esas Avemarías, <strong>todos</strong> los días, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> hoy hasta el fin <strong>de</strong> la vida. Si perseveran en<br />

esta práctica lo mejor que pue<strong>de</strong>, Nuestra Señora los librará <strong>de</strong> este pecado a su tiempo. Es<br />

un comienzo.<br />

La actitud que <strong>de</strong>bemos tener, al ser confrontados con los pecados <strong>de</strong> nuestro<br />

tiempo, es <strong>de</strong> humildad, o sea, reconocer que, sin la gracia <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>, nos per<strong>de</strong>remos.<br />

Debemos tener la misma actitud <strong>de</strong> los pastorcitos <strong>de</strong> Fátima, que, al saber que muchas<br />

almas van al infierno porque no tienen nadie que rece y sacrifique por ellas, aceptaron<br />

sacrificios y penitencias heroicas, asociadas a sus oraciones, por la salvación <strong>de</strong> muchos<br />

pecadores.<br />

También <strong>nosotros</strong> <strong>de</strong>bemos jugar nuestra parte, con nuestras oraciones y sacrificios<br />

por la conversión <strong>de</strong> los pecadores. Como Jesús dijo: “A quien mucho se da, mucho se<br />

exige”. Si, por la gracia <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>, conseguimos evitar estos terribles pecados, <strong>de</strong>bemos<br />

agra<strong>de</strong>cer a <strong>Dios</strong> por Sus gracias especiales y por Su protección en estos tiempos, y<br />

<strong>de</strong>bemos pagarle, ofreciendo oraciones y sacrificios por la conversión <strong>de</strong> los pecadores.<br />

Debemos antes amarlos, así como Cristo amó los pecadores <strong>de</strong> Su tiempo.<br />

9 Lo que <strong>de</strong>bemos hacer<br />

Como po<strong>de</strong>mos ver a partir <strong>de</strong> estos cinco ejemplos, la vasta mayoría <strong>de</strong> los fieles<br />

católicos no se enseñaron acerca <strong>de</strong> algunos puntos muy simples que afectan el bienestar <strong>de</strong><br />

su alma y <strong>de</strong> las almas <strong>de</strong> los que los ro<strong>de</strong>an. Esto no es estar a juzgar al clero. Es muy<br />

posible que muchos sacerdotes bien intencionados sean culpados <strong>de</strong> no cumplir con su<br />

<strong>de</strong>ber, llamando los fieles a sus obligaciones solemnes en estos asuntos, por haber sido<br />

engañados por la falsa propaganda que hoy en día está tan extendida.<br />

Señalo esto, no por cólera o recriminaciones contra el clero, sino para apuntar los<br />

signos <strong>de</strong> los tiempos en que vivimos: <strong>todos</strong> <strong>nosotros</strong> estamos siendo engañados, en mayor<br />

o menor proporción, porque vemos los otros a nuestro alre<strong>de</strong>dor haciendo lo mismo, o no<br />

haciendo lo mismo, y concluimos por eso que <strong>de</strong>be estar todo bien, porque toda la gente<br />

hace lo mismo.<br />

Esta manera <strong>de</strong> ver las cosas es insuficiente, especialmente en nuestro tiempo. La<br />

gente <strong>de</strong>l tiempo <strong>de</strong>l Diluvio también se iludía, diciendo que todo estaba bien porque toda<br />

la gente hacía lo mismo. Pero toda la humanidad, o sea, millones y millones <strong>de</strong> almas, fue<br />

castigada por <strong>Dios</strong>, por no respectar Sus leyes fundamentales, y <strong>de</strong> toda la humanidad, sólo<br />

ocho personas sobrevivieron al Diluvio. Todos los otros estaban errados.<br />

Estamos viviendo en una época <strong>de</strong> apostasía y necesitamos <strong>de</strong> ser guiado por el<br />

Mensaje profético <strong>de</strong> Fátima para nuestro tiempo. Ignorándolo, <strong>de</strong>sobe<strong>de</strong>ciéndolo, dando<br />

oídos al sacerdote que nos dice que po<strong>de</strong>mos ignorar impunemente el Mensaje <strong>de</strong> Fátima;<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

29


pue<strong>de</strong> significar que estamos a camino <strong>de</strong>l infierno, creyendo en él o en cualquier otra<br />

persona que nos dice a ignorar ese aviso.<br />

Cuando la Santísima Virgen nos dice, en el Mensaje <strong>de</strong> Fátima: “Sólo Nuestra<br />

Señora <strong>de</strong>l Rosario os pue<strong>de</strong> ayudar”, está avisándonos literalmente que necesitamos a Ella<br />

y Su mensaje, y necesitamos obe<strong>de</strong>cerla. No hacerlo es poner en peligro nuestra salvación.<br />

Necesitamos también rezar por nuestros sacerdotes. Necesitamos hacer sacrificios.<br />

“Van muchas almas al infierno por no tener quien se sacrifique y pida por ellas”. 10<br />

Debemos también rezar y hacer sacrificios. Debemos ser <strong>de</strong>votos <strong>de</strong> Nuestra<br />

Señora. Debemos ser <strong>de</strong>votos <strong>de</strong> Su Inmaculado Corazón. De esa manera, atraeremos sobre<br />

<strong>nosotros</strong> la protección <strong>de</strong> <strong>Dios</strong> y <strong>de</strong> Nuestra Señora.<br />

“Mi Inmaculado Corazón será tu refugio y el camino que te conducirá hasta <strong>Dios</strong>.<br />

A quien abrazare la <strong>de</strong>voción a Mi Inmaculado Corazón serán amadas por <strong>Dios</strong>, como<br />

flores puestas por Mí para adornar su trono.” 11<br />

Si alguien alguna vez necesitó la protección <strong>de</strong>l Inmaculado Corazón, somos<br />

<strong>nosotros</strong>, que vivimos en esta generación perversa. Si alguien alguna vez necesitó rezar el<br />

Rosario <strong>todos</strong> los días, somos <strong>nosotros</strong>, que vivimos en esta generación perversa. Qué <strong>Dios</strong><br />

nos ayu<strong>de</strong> a <strong>todos</strong>.<br />

Sin embargo, la llama <strong>de</strong> nuestra Fe y la luz <strong>de</strong> Fátima aun están vivas. No<br />

necesitamos estar parados, sin hacer nada, a ver millones <strong>de</strong> almas <strong>de</strong>slizando al infierno.<br />

Fuimos elegidos para estar aquí, en este período <strong>de</strong> grave crisis en la Iglesia y en el mundo.<br />

Fuimos elegidos para vivir en la era <strong>de</strong> gracia salvadora <strong>de</strong> Fátima.<br />

Sabemos lo que po<strong>de</strong>mos y lo que <strong>de</strong>bemos hacer. Pero déjeme conducirlo por el<br />

camino iluminado por Fátima hacia el triunfo glorioso <strong>de</strong>l Inmaculado Corazón <strong>de</strong> María y<br />

<strong>de</strong> la Iglesia, y a la paz para todo el mundo. Decidimos dar testimonio a los que aman la<br />

verdad y quieren la salvación <strong>de</strong> las almas, y no la pérdida <strong>de</strong> millones <strong>de</strong> almas en la<br />

eternidad <strong>de</strong>l infierno.<br />

He aquí lo que <strong>de</strong>bemos hacer – y ¡ahora!<br />

Obe<strong>de</strong>cer los Mandamientos <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>.<br />

Obe<strong>de</strong>cer los Preceptos <strong>de</strong> la Iglesia católica.<br />

Aceptar y abrazar las tradiciones apostólicas y eclesiales <strong>de</strong> la Iglesia católica.<br />

Rezar el Rosario <strong>todos</strong> los días.<br />

Usar el Escapulario marrón.<br />

Consagrarnos, y nuestras familias, al Inmaculado Corazón <strong>de</strong> María.<br />

Hacer los Cinco Primeros Sábados.<br />

Hacer nuestro acto <strong>de</strong> caridad y <strong>de</strong> amor a Nuestra Señora y al próximo, dando a<br />

conocer la solución <strong>de</strong> Fátima, lo que atraería más bendiciones sobre <strong>nosotros</strong>.<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

30


Reconocer que hay muchos buenos sacerdotes, y apoyarlos. Dos terceros son<br />

buenos, según las Sagradas Escrituras. El Papa Juan Pablo II nos dijo que el<br />

Mensaje <strong>de</strong> Fátima dice que estamos en el tiempo <strong>de</strong> la profecía (Apoc. 12:3-4), en<br />

que la tercera parte <strong>de</strong>l clero es mala.<br />

Hacer la penitencia requerida por nuestra condición <strong>de</strong> vida.<br />

Evitar ocasiones <strong>de</strong> pecado: estilos <strong>de</strong> vestir, estilos <strong>de</strong> pensar; y personas, lugares,<br />

y cosas que puedan llevarnos a pecar. San Alfonso nos dice que, si los hombres y<br />

mujeres evitasen todas las ocasiones <strong>de</strong> pecado, casi <strong>todos</strong> los pecados mortales que<br />

ahora son cometidos no llegarían a ser cometidos.<br />

Evitar programas <strong>de</strong> TV, peliculas y juegos malos.<br />

Leer libros espirituales y vidas <strong>de</strong> santos.<br />

Buscar la perfección. Todos <strong>nosotros</strong> – legos, sacerdotes, religiosos – somos<br />

llamados a buscar la perfección. “Sed, pues, vosotros, perfectos, así como vuestro<br />

Padre celestial es perfecto” (Mateo 5.48) “Comportad las cargas unos <strong>de</strong> otros, y<br />

con eso cumpliréis la ley <strong>de</strong> Cristo” (Gal. 6:2) Esta crisis es una ocasión para<br />

nuestra santificación. En nuestras oraciones diarias, pedimos para ser generosos<br />

para con <strong>Dios</strong> y perseverar en la gracia. Hacemos voluntariamente algunos actos <strong>de</strong><br />

penitencia todas las semanas, o hasta <strong>todos</strong> los días. No protestemos: “No fui<br />

llamado a esto”. Sí, fuimos llamados para ser santos.<br />

Si po<strong>de</strong>mos hacer una cosa, lo hacemos. “Quien conoce el bien que <strong>de</strong>be hacer, y no<br />

lo hace, por lo mismo peca”. (Santiago 4:17)<br />

Hacemos lo que po<strong>de</strong>mos para que se lleve a cabo la Consagración <strong>de</strong> Rusia tal<br />

como Nuestra Señora pidió.<br />

Pedir la divulgación <strong>de</strong> todo el Tercer Secreto, porque nos dará los consejos <strong>de</strong><br />

Nuestra Señora para este tiempo <strong>de</strong> apostasía en la Iglesia, <strong>de</strong> corrupción en el clero,<br />

<strong>de</strong>l error generalizado por la Iglesia y por el mundo.<br />

Sor Lucía nos resumió todo en esta manera:<br />

“Dos son los medios para salvar al mundo: la oración y el sacrificio Y luego, el<br />

Santo Rosario. Mire, Padre, la Santísima Virgen, estos últimos tiempos en que estamos<br />

viviendo, ha dado una nueva eficacia al rezo <strong>de</strong>l Santo Rosario. De tal manera que ahora<br />

no hay problema, por más difícil que sea, sea temporal o sobre todo espiritual, que se<br />

refiera a la vida personal <strong>de</strong> cada uno <strong>de</strong> <strong>nosotros</strong>; o a la vida <strong>de</strong> nuestras familias sean<br />

familias <strong>de</strong>l mundo o Comunida<strong>de</strong>s Religiosas; o la vida <strong>de</strong> los pueblos y naciones.<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

31


“No hay problema, repito, por más difícil que sea, que no podamos resolver ahora<br />

con el rezo <strong>de</strong>l Santo Rosario. Con el Santo Rosario nos salvaremos, nos santificaremos,<br />

consolaremos a Nuestro Señor y obtendremos la salvación <strong>de</strong> muchas almas.<br />

“Y luego, la <strong>de</strong>voción al Corazón Inmaculado <strong>de</strong> María, Santísima Madre, poniéndonosla<br />

como se<strong>de</strong> <strong>de</strong> la clemencia, <strong>de</strong> la bondad y el perdón; y como puerta segura para entrar al cielo”. 12<br />

Es el tiempo <strong>de</strong> salvarnos, así como a nuestros amigos, las personas queridas,<br />

nuestros vecinos, nuestra Iglesia y el mundo. Es tiempo <strong>de</strong> rendir el <strong>de</strong>bido homenaje a<br />

<strong>Dios</strong> y a Su Madre Santísima.<br />

Fátima nos indica el camino. Es tiempo <strong>de</strong> pagar los talentos que <strong>Dios</strong> nos dio.<br />

Hasta quien piensa que estamos en el buen camino <strong>de</strong>be reexaminar si estamos a<br />

hacer todo lo que po<strong>de</strong>mos, hoy, en nuestro tiempo, para obe<strong>de</strong>cer al Mensaje <strong>de</strong> Fátima y<br />

difundirlo – por nuestras oraciones, por nuestros sacrificios, hablando con nuestros amigos<br />

y vecinos, insistiendo para que el Papa y los Obispos obe<strong>de</strong>zcan a Fátima, <strong>de</strong>fendiendo los<br />

Apóstoles <strong>de</strong> Fátima, contribuyendo financieramente para divulgar el Mensaje <strong>de</strong> Fátima,<br />

dando voluntariamente nuestro tiempo, o por cualquier otro medio que <strong>Dios</strong> pone a nuestra<br />

disposición para que lo usemos.<br />

NOTAS:<br />

1. Tomado <strong>de</strong> Miscelánea <strong>de</strong> San Alfonso <strong>de</strong> Ligorio, Doctor <strong>de</strong> la Iglesia.<br />

1a. Frère Michel <strong>de</strong> la Sainte Trinité, The Whole Truth About Fátima – Volume I: Science<br />

and the Facts, (Immaculate Heart Publications, Buffalo, Nueva York, 1989) pág. 182.<br />

1b. Frère Michel <strong>de</strong> la Sainte Trinité, The Whole Truth About Fatima – Volume III: The<br />

Third Secret, (Immaculate Heart Publications, Buffalo, Nueva York, 1990) pág. 505.<br />

2. San Juan Eu<strong>de</strong>s, The Priest: His Dignity and Obligations, (P.J. Kennedy & Sons,<br />

Nueva York, 1947), págs. 9-10.<br />

3. Diversos traductores tradujeron <strong>de</strong> manera diferente estos versículos, y, efectivamente,<br />

hay dos traducciones en latín <strong>de</strong> este pasaje. Cf. The Hours of the Divine Office in<br />

English and Latin, Tercer Volumen, (The Liturgical Press, Collegeville, Minn., 1964)<br />

pág. 267; y Biblia Vulgata, (Biblioteca <strong>de</strong> Autores Cristianos, Madrid, 1985), pág. 462.<br />

4. Carta <strong>de</strong> Sor Lucía <strong>de</strong>l 18 <strong>de</strong> mayo <strong>de</strong> 1936 (<strong>de</strong> Pontevedra) al Padre José Bernardo<br />

Gonçalves, S.J. Memórias e Cartas da Irmã Lúcia, (Padre António Maria Martins,<br />

editor, Porto, 1973), pág. 415<br />

5. William Thomas Walsh, Our Lady of Fatima, cuarta edición, (The Macmillan<br />

Company, Nueva York, 1947), pág. 226.<br />

6. The Whole Truth About Fatima – Volume III, pág. 504.<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

32


7. Ibid, pág. 506<br />

8. Ibid.<br />

8a. Ibid.<br />

8b. Esto está explicado en mi artículo “Pope John Paul II Gives Us the Key to the Real<br />

Third Secret” (‘El Papa Juan Pablo II nos da la llave <strong>de</strong>l verda<strong>de</strong>ro Tercer Secreto’),<br />

publicado en tres partes en The Fatima Crusa<strong>de</strong>r, Nºs 67, 68, y 69.<br />

8c. The Whole Truth About Fatima – Volume III, pág. 505.<br />

8d. Tomado <strong>de</strong> las palabras <strong>de</strong> Nuestra Señora el 19 <strong>de</strong> Agosto <strong>de</strong> 1917.<br />

9. La obligación <strong>de</strong> observar estos días y períodos <strong>de</strong> ayuno es generalmente grave (Cf.<br />

Const. Apostólica. Paenitemini II, 2, 17-02-1966, AAS 58 (1967) 183, CLD6 (1963-<br />

1967) 675; Respuesta <strong>de</strong> la Sag. Cong. <strong>de</strong>l Concilio <strong>de</strong> 24-02-1967, AAS 59 (1967)<br />

229, CLD 6 (1963-1967) 684-685. Los días <strong>de</strong> penitencia más importantes – Miércoles<br />

<strong>de</strong> cenizas y Viernes santo – requieren la obligación <strong>de</strong>l ayuno y <strong>de</strong> la abstinencia; en<br />

otros – cada Viernes durante el año – la obligación es sólo <strong>de</strong> abstinencia; para los<br />

<strong>de</strong>más – <strong>todos</strong> los otros días <strong>de</strong> Cuaresma – hay la obligación general <strong>de</strong> hacer algún<br />

acto <strong>de</strong> penitencia (cf. c. 1249).<br />

10. Cf. la nota 8d.<br />

11. Tomado <strong>de</strong> las palabras <strong>de</strong> Nuestra Señora el 13 <strong>de</strong> junio <strong>de</strong> 1917.<br />

12. The Whole Truth About Fatima – Volume III, pág. 508.<br />

http://www.fatima.org/span/crusa<strong>de</strong>r/cr71/cr71pg03.pdf<br />

33

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!