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Cerrar la brecha entre industria y academia, agregar valor a la
investigación y desarrollar productos y servicios tecnológicos, los
objetivos del ATTP en México: Tere de León Zamora
• El programa del CONACYT comenzó hace siete años.
• Tres planes de negocios, un plan de licenciamiento, cuatro planes
técnicos y cuatro valoraciones precomerciales, los resultados del ATTP
este verano en el INAOE.
Texto y fotografía por: Guadalupe Rivera Loy
Tonantzintla, Puebla, a 1º de septiembre de 2010.- Los centros públicos de
investigación en México poseen gran capacidad en materia de innovación y
desarrollo tecnológicos, pero en muy pocas ocasiones estas competencias se
traducen en un producto transferible a la industria o al mercado. El Advanced
Technology Transfer Program o Programa Avanzado de Transferencia de
Tecnología del CONACYT (ATTP por sus siglas en inglés) pretende cerrar esta
enorme brecha entre industria y academia, agregar valor a la investigación,
desarrollar productos y servicios tecnológicos, y abrir mercados en México. El
camino no es fácil, pero ya se avanza en esa dirección.
La Mtra. Tere de León durante la entrevista
Esto fue lo que comentó Tere de León Zamora, encargada del ATTP en el
Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (INAOE), días después de
la presentación de los proyectos desarrollados por estudiantes del Eller College
of Management de la Universidad de Arizona, de Thunderbird School of Global
Management, y de la Universidad de Iowa.
El ATTP es un programa de innovación en donde estudiantes de negocios de
universidades de Estados Unidos vienen durante el verano a los centros de
investigación de CONACYT en México a trabajar en análisis y en modelos de
negocios y de comercialización de las tecnologías que se desarrollan aquí. Los
antecedentes de este consorcio binacional se remontan a hace siete años,

cuando CONACYT firmó un convenio con la Universidad de Arizona enfocado a
la óptica y que fue impulsado de manera especial por el Dr. Joaquín Ruiz,
decano del Colegio de Ciencias de dicha Universidad
(http://intranet.inaoep.mx/noticias/abril/simposio_transtec.htm).
“Entonces se invitó al CIO, al CICESE y al INAOE a participar en un primer
piloto, y los estudiantes de negocios y de ciencias hacían un inventario de
tecnologías y evaluaban la posible pertinencia comercial de las mismas.
Después se extendió el programa a otras áreas y se fueron agregando
centros,” explica De León Zamora, quien además informa que este año se
trabajó no sólo en INAOE, sino también en el CIQA, el CIO, el CICY, el CIMAV,
el CIAD y el CIMAT.
Concretamente, este verano en el INAOE los estudiantes de negocios
trabajaron cerca de mil horas con investigadores y como resultado se
elaboraron tres planes de negocios, un plan de licenciamiento, cuatro planes
técnicos y cuatro valoraciones precomerciales. El equipo integrado por Syed
Huda, de la Universidad de Iowa; Varun Voora, Sonia Salam, Eric Ams, Jorge
Cozzarelly y Mike Hathaway, de Thunderbird; Cole Shaw, de Peace Corps
México, y Tere de León, de INAOE, presentó los siguientes proyectos: un
Centro de Negocios de MEMS (Sistemas Microelectromecánicos); un Centro de
Diseño de Circuitos Integrados; una valoración precomercial de un sensor de
rayos ultravioleta, un Plan de Negocios denominado INAOE Lab Ventures, y un
plan de licenciamiento de un proyecto de validación de datos. Entre los
investigadores con los cuales se trabajó están Alfonso Torres, Guillermo
Espinosa, Mariano Aceves, Jesús González, Claudia Feregrino, Enrique Succar
y Rogerio Enríquez.
Tere de León explica que inicialmente el programa consistía en una sola fase,
la de análisis y realización de un plan de negocios: “Pero lo cierto es que las
tecnologías de los centros no son productos, y difícilmente puedes llegar a
aterrizar un plan de negocios con tecnologías que están en etapas muy
tempranas. Esto nos estaba entregando productos poco útiles. Lo que hicimos
este año fue diseñar una primera etapa de valoración tecnológica que consiste
en identificar las invenciones, hacer búsquedas del arte previo, saber el grado
de innovación que tiene el conocimiento, y cómo están las invenciones o la
tecnología de los investigadores con relación a lo que sucede en todo el
mundo. Entonces hacemos búsquedas en bases de datos de patentes de
diferentes países y a partir de ahí sabes si va a tener sentido mover eso al
mercado o no.”
En un segundo paso se averigua todo lo relacionado a los derechos
intelectuales y posteriormente se realiza un análisis precomercial para saber a
quién en el mercado o en la industria le podría interesar la tecnología de los
centros en la etapa en la que está: “Con esto ya puedes evaluar qué necesitas
y cómo le puedes agregar valor a la tecnología y, entonces sí, haces un plan de
negocios. Es el caso del sensor ultravioleta de Mariano Aceves que ya está
patentado en México y tiene una solicitud de patente en Estados Unidos. Para
este caso hicimos contacto con varias industrias de ese país, pero nos dicen
que no les damos información suficiente para tomar una decisión y esa

información la obtenemos de pruebas y de caracterizaciones que se le hacen al
sensor. Lo que hicimos fue encontrar el eslabón en la industria que nos puede
ayudar con las pruebas ambientales que se requieren en este tipo de
tecnología, para que alguien lo entienda y tenga la suficiente información para
que decida si le interesa o no. Y una vez que conocemos qué necesita saber la
industria acerca de una tecnología, nos ponemos a buscar quién nos puede
ayudar a realizar las pruebas y la caracterización. En este caso encontramos
dos opciones, el CIQA en México y una empresa en California líder en el área
de fotónica y que dijo ‘yo hago las pruebas, me interesa.’ Eso es agregar valor
a la investigación. En resumen, elaboramos un plan tecnológico de cómo
necesita evolucionar esta tecnología para que eventualmente pueda llegar al
mercado.”
Otro producto del ATTP son los planes de negocios que se realizan cuando ya
se tienen una capacidad y un grupo emprendedor para llegar al mercado: “En
el caso de INAOE uno de los planes de negocios fue el del Laboratorio de
Innovación en MEMS, que pretende dar servicio a la industria y que cuenta con
una infraestructura material fuerte y con talentos. Lo que hay que hacer es
definir cómo todas estas capacidades van a llegar al mercado. Nosotros
desarrollamos todo un modelo para que el INAOE pueda incursionar en la
comercialización de servicios de tecnología. Diseñamos el plan de negocios en
donde el modelo fundamental es crear una empresa, una entidad nueva fuera
del INAOE pero que trabaje para el INAOE, que tenga la suficiente flexibilidad
para hacer las contrataciones y para operar organizacionalmente muy cerca del
Instituto con todo lo que eso implica. Otro caso es el de Guillermo Espinosa
quien tiene experiencia en la industria, está muy cerca del mercado, y este
mercado le está demandando servicios. Y finalmente tenemos un plan de
licenciamiento, que haces cuando tienes algo que ya puede ser cachado por
alguien en el mercado, aquí analizas cómo vas a negociar esa sesión de
derechos de propiedad intelectual a alguien más para que lo explote. Esto hace
mas sentido a las necesidades de los centros de investigación por lo que estos
generan.”
Finalmente, Tere de León agrega que el Plan de Negocios del Lab Ventures
surgió a raíz de que “nos dimos cuenta de que muchas invenciones de los
investigadores tienen que ver con software. Es el caso de Enrique Succar,
Claudia Feregrino, Rogerio Enríquez, Jesús González. No se trata de
productos, sino de herramientas de software que el investigador desarrolla para
sus propias investigaciones, eso puede llegar a tener un valor en el mercado,
en la industria, en otras universidades. La filosofía detrás es que el software, a
diferencia de las patentes, adquiere un valor en cuanto a su capacidad de
formar masa crítica. Están los casos de Google y de You Tube. El software no
vale nada si nadie lo usa. Partiendo de esta base hicimos una plataforma para
compartir software. La idea es decirle a la gente que lo use, que nos
retroalimente y si esto puede llegar a derivar en un producto negociamos.
Estamos tomando la idea de algo que se hizo en la Universidad de
Washington.”