Discurso de apertura del Simposio de Insuficiencia Cardíaca del 23 ...

Discurso de apertura del Simposio de Insuficiencia Cardíaca del 23°
Congreso Uruguayo de Cardiología en honor al Dr. Roberto Paganini.
Buenas tardes.
Gracias a todos los que han concurrido al Simposio de Insuficiencia Cardiaca y un especial
agradecimiento para los expositores que con sus conocimientos y vasta experiencia van a
enriquecer esta jornada.
Teníamos pensado comenzar este simposio anunciando que en Marzo del año que viene se
iniciaba la primera encuesta nacional sobre insuficiencia cardíaca.
Fueron casi 2 años de trabajo. Fue necesario generar la idea, diseñar el proyecto, conseguir
los recursos logísticos y económicos, trabajar sobre los aspectos éticos y legales, convencer a
la SUC de que era posible y muchas otras cosas más…
Sólo la capacidad, la inteligencia, la fuerza de voluntad, el nunca estar dispuesto a bajar los
brazos y la perseverancia del nuestro gran amigo Roberto Paganini lo podían lograr.
Pero quiso Dios, el destino o el azar que Roberto se alejara de nosotros….
O tal vez, y yo me inclino mucho más por esta posibilidad, en una suerte de pacto secreto
consigo mismo, él ya había decidido desde hace ya mucho tiempo que en lugar de vivir una
vida larga y gris, era mucho mejor vivir una vida corta pero intensa y llena de realizaciones.
Yo conocí a Roberto hace más de 15 años en uno de los tantos proyectos que tuve la suerte de
compartir con él.
Como no teníamos dinero para pagar a un técnico neumocardiólogo, hacíamos las ergometrías
juntos. La primera él hacía de médico y yo de técnico y a la siguiente al revés y así
sucesivamente.
De ahí en más fue él quien me enseñó a manejar todos los equipos y programas. Fue el
primero que yo conocí en preparar las presentaciones en Power Point con lo cual tenía que
preparar la de él y luego la mía, y la de los otros que solíamos hacer presentaciones juntos.
Él junto a su esposa, que en aquel momento se dedicaba a la informática, diseñaron el mejor
programa de informe de ergometrías que yo haya visto hasta ahora, incluidos todos lo que
vienen del exterior.
Él diseñó todos los informes de estudios que hemos usado y que seguimos usando en nuestro
consultorio de MAPA, Registro de Eventos, holter, ergometrías etc.
Y desde esos ya lejanos días hasta ahora difícilmente haya transcurrido una semana sin
que él tuviera una idea nueva para desarrollar.
Algunas podían ser simples, otras complejas. Otras que no eran para la mentalidad del
Uruguay. La mayoría chocaban contra la burocracia y los tecnócratas que suelen dirigir las
instituciones médicas…
Pero lo destacable era su capacidad de generar proyectos y llevarlos adelante, su
energía era inagotable.
Roberto Paganini organizó y protocolizó todo el servicio de marcapasos de la Asociación
Española.

Jugó un rol protagónico en la organización del postoperatorio de cirugía cardíaca y ni qué decir
que fue fundamental en el diseño y organización de la Unidad de Insuficiencia Cardíaca en la
que trabajábamos juntos.
Y ya tenía en mente numerosos proyectos para desarrollar en todos estos servicios lo cual
sería muy extenso enumerar ahora.
Roberto era un apasionado de todo lo que hacía. Por eso no era fácil discutir nada con él,
porque en todo lo que hacía o todo lo que planificaba ponía el 100%.
Se equivocaba… por supuesto que se equivocaba, como todo el mundo, pero defendía sus
ideas con honestidad y valor.
Roberto trabajaba en 10 lugares al mismo tiempo.
Y en cada uno de ellos trabaja con más intensidad y rendimiento que si 10 personas estuvieran
ocupando esos lugares.
Con su partida, Roberto dejó enormes espacios vacíos en todos los lugares donde trabajaba,
cirugía cardíaca, marcapasos, insuficiencia cardíaca, comités, grupos sociales…
Esos espacios se van a llenar. No hay nadie que deje espacios que no se puedan llenar.
Los que les puedo asegurar es que todos los espacios que dejó Roberto nunca los va a poder
llenar una sola persona como lo hacía él. Tal vez muchas personas logren llenar esos espacios
pero nunca una sola.
Y lo otro que les puedo asegurar es que soñadores y generadores de ideas y proyectos como
él en la cardiología uruguaya son excepcionales.
Robertito Paganini, cómo te vamos a extrañar….
Dr. Eduardo Benkel