Taxi Libre 170 - Stac

estat
El taxi instaura el examen informático
para erradicar las trampas
Pese a que nunca se demostró, se
habló de personas que se presentaban
con la identidad de otro. De
candidatos que se habían aprendido
de memoria las preguntas sin apenas
hablar castellano. Incluso de compra
ilegal de credenciales. El examen de
taxista siempre ha estado en el ojo
del huracán. Ante esta situación,
hace tiempo que el ayuntamiento
de Barcelona se propuso mejorar
esta prueba. En primer lugar añadió
un redactado para filtrar a los que
no hablan ninguna de las lenguas
oficiales. Y ahora, en un segundo y
definitivo paso para atajar de una vez
por todas las trampas, se ha decidido
informatizar el examen, que ya cuenta
con más de 3.000 preguntas, cuando
hace un par de años no había más de
600. El 9 de julio se hizo la prueba
piloto, y en la próxima convocatoria,
en octubre, se espera que los 800
candidatos ya pasen del lápiz al ordenador.
Rosa Hinojosa, coordinadora
del centro de formación del STAC, no
tiene ninguna duda en sentenciar
que el cambio le parece "genial".
Básicamente porque "hemos pasado
del siglo XIX al XXI, con este nuevo
examen ya no hay lugar a trampas,
aunque el problema es la cantidad de
gente que está circulando y que no
sería capaz de pasar este examen".
Eduard Ràmia, gerente del IMET señala
además el ahorro logístico que supone
dar este paso.
Un taxi robado destapa una trama ilegal de
arrendamientos de taxis en Madrid
La casualidad ha destapado el oscuro
negocio que se cierne sobre el
taxi de Madrid. La Policía Municipal
encontró este mes de julio un taxi
abandonado y descubrió que se trataba
de un coche robado. El Skoda
Octavia, el típico vehículo de los
taxistas de la capital, no estaba
registrado como taxi, sino como
coche particular, aunque pertenece
a una taxista de las llamadas
floteras. La matrícula pertenecía a
otro taxi y la licencia tampoco se
correspondía con la matrícula. La
investigación determinó que ni el
taxímetro ni la capilla pertenecían
a ninguno de esos vehículos. Todo
ello permitió descubrir la relación
entre los propietarios de la matrícula
y la licencia, ya que ambos habían
subarrendado su licencia a la Asociación
Pionera del Taxi de Madrid
cuando subarrendar está prohibido
por el reglamento de Servicios de
Transporte Público. Se trata de una
asociación que en realidad es una
empresa dedicada a la labor ilegal
de gestionar licencias de taxistas
y que tiene detrás a varios de los
llamados en el gremio floteros, que
gestionan varios taxis a la vez. La
Policía localizó a un empleado de
esta asociación, que confirmó que la
empresa se dedica a eso y que tanto
la licencia que figuraba en el vehículo
robado como la que se corresponde
con la matrícula que llevaba
están gestionadas por la Asociación
Pionera del Taxi de Madrid. Uno de
sus responsables es Juan de Dios,
un ex policía que lleva una década
dedicado al taxi, tiene tres licencias
y está vinculado a otras empresas.
También figuran en la asociación
Leonor Armero, con tres licencias,
y Clementina Menéndez, autónoma
del taxi. Estas empresas suelen
ofrecer sus servicios a jubilados, que
ahora no quieren vender su licencia
(el precio ronda los 150.000 euros)
porque hay poca demanda. El pacto
suele consistir en pagarles un fijo o
un variable mensual y dejar que ellos
figuren como los que explotan esas
licencias, contratando a su nombre
a conductores y realizando todas las
gestiones.
14