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revista38

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judíos, las obsesiones nazis...son también ejemplos de esta proyección<br />

inconsciente de la sombra colectiva<br />

<br />

sombra?<br />

La auto-consciencia de la sombra tiene por objeto fundamental la expansión<br />

de nuestra identidad a través de la relación con el inconsciente.<br />

De esta forma se integran las actitudes conscientes con nuestras<br />

profundidades inconscientes. Este proceso sirve para liberar nuestra<br />

conducta de repeticiones no deseadas, equilibrar nuestros rechazos<br />

viscerales o fascinaciones irrefrenables, armonizar nuestro carácter y<br />

expandir nuestra tolerancia y capacidad de amar. Además de aceptarnos<br />

tal como somos. Aceptar nuestras partes más oscuras y primitivas<br />

es un proceso harto difícil, pero esencial para el crecimiento personal.<br />

<br />

Ejemplo 3. Lo inexistente: Una<br />

persona segura de sí misma y que se<br />

acepta tal cual es, ante la presencia<br />

de otra persona que no se acepta a sí<br />

misma y que trata de llamar la atención,<br />

simplemente acepta a la otra persona y<br />

convive con ella sin sentir el menor rechazo<br />

hacia ella. Caso contrario, se esa<br />

persona no se acepta a sí mismo tampoco<br />

y no acepta este hecho, ante la presencia<br />

de otra persona que no acepta a sí<br />

misma y que es muy ruidosa (para llamar<br />

la atención), se sentirá molesta, incómoda y<br />

rechazará a esa persona.<br />

Observe que la sombra sólo resulta peligrosa cuando no<br />

le prestamos la debida atención. Prestarle atención es el camino<br />

hacia una luz Mayor.<br />

Pero siempre se ha hablado de erradicar la sombra. De<br />

lo que se trata para crecer integralmente, es de ser un individuo<br />

bra<br />

sólo se convierte en algo hostil, cuando la ignoramos y no la<br />

tenemos en cuenta. La sombra no se puede eliminar pero, ciertamente<br />

si la conocemos, la aceptamos y la integramos como parte<br />

de nosotros mismos y somos concientes de ella y sus manifesta-<br />

<br />

y aquellos en los que tiende a manifestarse. Podemos entonces<br />

hacer uso de nuestros recursos que no están en la sombra, en<br />

lugar de actuar apasionadamente desde la sombra.<br />

El lado oscuro de la relación con<br />

nuestros “enemigos”<br />

Aunque parezca un chiste, debemos cui-<br />

<br />

constituyen una de las mejores ayudas<br />

que conducen al crecimiento. Si pudiéramos<br />

leer la historia secreta de nuestros<br />

enemigos, encontraríamos en la vida de<br />

mientos<br />

para desarmar cualquier hostilidad.<br />

Entonces, ¿Dónde ponemos la atención<br />

<br />

con la imagen del enemigo debemos de prestar atención a los ojos<br />

que ven el mismo. Es decir, de manera genérica, se dice que aquello<br />

que nos molesta de los demás, es lo que no hemos podido aceptar de<br />

nuestra propia sombra pero aquello que no reside en nuestra sombra,<br />

<br />

Ejemplos:<br />

Ejemplo 1: Lo no aceptado: Una persona que es muy tranquila<br />

y dulce de carácter, así se ve y sabe que así lo ven los demás.<br />

Se irrita y se aleja sintiéndose mal ante la presencia de una persona<br />

iracunda o que grita mucho y se altera. ¿Por qué? Porque es alguien<br />

que sabe en su inconciente que también a veces necesita enojarse<br />

quilo<br />

y dulce, no se permite nunca enojarse y gritar. Ha rechazado en<br />

sí, la parte de su sombra que es enojona y gritona. Por ello, cuando<br />

la ve fuera de sí, la rechaza también.<br />

Ejemplo 2. Lo aceptado: Una persona que es muy impuntual<br />

y tal defecto lo tiene perfectamente asumido, entonces<br />

cuando tiene una cita de trabajo y la otra persona también<br />

es impuntual y lo hace esperar 30 minutos, este hecho no lo<br />

va a molestar, más bien lo va a comprender, se va a poner a<br />

leer alguna revista mientras espera y cuando la otra persona<br />

<br />

<br />

La diferencia entre el ejemplo 2 y 3, en donde<br />

una persona no se siente molesta ante la presencia de otra<br />

<br />

uno ha aceptado e incorporado tal defecto como parte de su propia<br />

personalidad. Es decir, ha movido tal defecto de su sombra a<br />

su conciente y lo acepta como parte de sí. En el ejemplo 3, uno<br />

simplemente no tiene dentro de sí tal defecto y al no estar dentro<br />

<br />

Recordemos, lo que nos molesta de otras personas son rasgos<br />

de nosotros mismos que no hemos podido aceptar e integrar a nuestro<br />

conciente. Son rasgos que rechazamos de nosotros mismos y no aceptamos<br />

tener tales rasgos. Son rasgos por tanto que están en nuestra sombra<br />

y, al verse manifestados en otras personas, nos molestan.<br />

Sanando los efectos de la sombra<br />

La curación de la sombra es también una cuestión de amor. Amarse<br />

a uno mismo no es una tarea sencilla, es por ello que la atención<br />

y la aceptación que prestamos a nuestras facetas más abyectas<br />

forman parte del proceso de curación. Tomar consciencia<br />

cotidianamente de nuestras limitaciones y fallos es permanecer<br />

atentos para que la sombra no nos coja desprevenidos.<br />

Ejercicio práctico:<br />

Primero elije aquello con lo que quieres trabajar. Suele ser más fá-<br />

<br />

o en contradicción. Por ejemplo un problema con la pareja, el jefe,<br />

algún hijo, algún amigo.<br />

En este caso vamos a centrarnos en aquello que nos perturba<br />

del otro (por ejemplo, la ingratitud), aunque también podría-<br />

<br />

llo<br />

ante lo que nos sentimos reactivos, hipersensibles, enfadados,<br />

obsesionados... y tomamos consciencia de ello.<br />

Una vez que hacemos contacto con lo que vamos a trabajar<br />

(la ingratitud), lo vamos sintiendo y respiramos profunda-<br />

<br />

también soy una persona que puede manifestar ingratitud a<br />

veces; integro la ingratitud como una parte de mi personalidad.<br />

Me acepto así como soy y me amo con todas mis virtudes y<br />

<br />

Haciendo este ejercicio, la próxima ocasión que uno<br />

esté frente a un evento en el que pueda manifestarse su<br />

ingratitud, uno mismo será conciente de ello y entonces podrá<br />

elegir entre ser agradecido o la ingratitud, pero esta ya<br />

no es parte de la sombra porque ya está en el conciente.<br />

Paradójicamente, cuando hemos integrado la ingratitud en<br />

nuestra aceptación y conciencia, a partir de entonces nos<br />

convertimos en personas más agradecidas y cada vez menos<br />

se manifiesta la ingratitud.<br />

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