01.11.2014 Views

Descargar archivo Imagen social y trayectoria vital ... - noticiaspsh.org

Descargar archivo Imagen social y trayectoria vital ... - noticiaspsh.org

Descargar archivo Imagen social y trayectoria vital ... - noticiaspsh.org

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

“ Y aunque nunca podrá resolver la paradoja de que<br />

cuanto más se acerque a la realidad <strong>social</strong> más se le escapa<br />

–porque su acercamiento forma parte de la realidad <strong>social</strong>- ,<br />

si articula varias perspectivas el investigador podrá<br />

acceder a un número mayor de dimensiones<br />

de esa siempre compleja realidad <strong>social</strong>” 1<br />

1 G. Ferrando, M. et al. 2000. “El análisis de la realidad <strong>social</strong>. Métodos y técnicas de<br />

investigación”. Pag. 11. Madrid. Alianza


Agradecimientos<br />

Gratitud y sorpresa ante la maestría de mi directora de Tesis, Dra. Rocío<br />

Moldes Farelo, capaz de sobrellevar mis imprevisibles “bipolaridades”<br />

investigadoras. Ojalá que no llegue a padecer secuelas irreversibles, de las que<br />

yo nunca me sentiría responsable.<br />

Mi agradecimiento a la Dra. Blanca Rodríguez Polo, directora del<br />

Departamento de Empresa, sin cuyo estímulo y apoyo este trabajo no habría<br />

llegado a realizarse. Y a los compañeros del Departamento de Empresa, con<br />

mención especial para las colegas sociólogas, por su continuado interés y<br />

cercanía.<br />

A Fco. Javier Alonso Torrens, maestro y amigo. Por sus precisiones de escuela,<br />

por sus interesantes y siempre “lígrimas” observaciones.<br />

A las doctoras Margarita Diges y Susana Rodríguez, férreas y generosas a la<br />

vez, por haber usado conmigo guantes de seda. A Jesús Toro, Miguel Rivera y<br />

los amigos que, a su modo, han sabido y querido aguantarme.<br />

A Santiago Leguey, y su equipo de CUESA, por su amabilidad y excelente<br />

trabajo de campo para la realización de la encuesta telefónica. A Cristina<br />

Martínez, por su <strong>vital</strong>idad y su impecable labor de transcripción de entrevistas<br />

y grupo de discusión.


A Antonio Villalón, Director del Centro de Acogida Padre Damián, de<br />

Salamanca. Por su amable y continuada colaboración.<br />

A los profesionales, expertos y voluntarios que me entregaron generosamente<br />

una valiosa parte de su tiempo.<br />

A las personas sin hogar: las que compartieron conmigo retazos de sus vidas y,<br />

en igual medida, las restantes treinta mil que residen en las calles, solares,<br />

cajeros y plazas de España. (Cáritas 2010)<br />

A mis padres, Silvestre y Elisa. Por los valores que supieron transmitirme,<br />

desde la sencillez y la humildad. A mis hermanas, Mari, Elisa, Espe y Maite, con<br />

cuya complicidad siempre cuento y espero seguir contando siempre.


Con Charo y con Clara


ÍNDICE<br />

INTRODUCCIÓN 1<br />

Capítulo 1: MARCO TEÓRICO Marginación y exclusión<br />

en las ciudades contemporáneas 3<br />

1.1 Exclusión en las sociedades tecnológicas.<br />

y expresiones de marginación urbana 3<br />

1.2 Identidad, denominación y territorio de las<br />

personas sin hogar 8<br />

1.3 Trayectoria de la teoría sociológica sobre<br />

marginación y exclusión 19<br />

Capítulo 2: OBJETO Y CONTEXTO GENERAL<br />

DE LA INVESTIGACIÓN 29<br />

2.1 La investigación sobre personas sin hogar en España 29<br />

2.2 Justificación y objetivos de la investigación 35<br />

2.3 Presentación de hipótesis 38<br />

2.4 Planteamiento metodológico 39<br />

Capítulo 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

EN LA PRENSA 41


3.1 El análisis de contenido de prensa 41<br />

3.2 Los medios como orientadores de la opinión pública 50<br />

3.3 Análisis cuantitativo de la información 60<br />

3.3.1 El corpus y los criterios de codificación 60<br />

3.3.2 El volumen y distribución de la información 73<br />

3.3.3 Entidad y relevancia de la información 78<br />

3.3.3.1 Sección y Género 78<br />

3.3.3.2 Tamaño y ubicación 84<br />

3.3.3.3 Complemento gráfico 87<br />

3.3.3.4 Fuentes informativas 90<br />

3.3.3.5 Denominaciones del colectivo 92<br />

3.3.3.6 Presencia individual y grupal 97<br />

3.3.3.7 Temáticas predominantes 99<br />

3.3.4 Información especializada: Boletín enRed 103<br />

3.4 Análisis cualitativo de la información 111<br />

3.4.1 Introducción 111<br />

3.4.2 Actores y factores de cohesión <strong>social</strong> 115<br />

3.4.2.1 El papel de las instituciones 116<br />

3.4.2.2 Presencia de entidades cívicas y ciudadanos 130<br />

3.4.2.3 La voz de los protagonistas ausentes 145<br />

3.4.3 Contextos y procesos de anomia y conflicto <strong>social</strong> 149<br />

3.4.3.1 Conflictos, agresiones, violencia 150<br />

3.4.3.2 Muerte y muertes de las PSH 154<br />

3.4.4 Crisis y saturación de los recursos 157<br />

3.4.5 Precariedad de los inmigrantes desfavorecidos 159<br />

3.4.6 La dimensión del espectáculo mediático 161


3.5 Conclusiones 166<br />

Capítulo 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS<br />

CIUDADANOS ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR 169<br />

4.1 La encuesta telefónica: Sistema CATI 169<br />

4.2 Perfiles de la población entrevistada 172<br />

4.3 Análisis de la información obtenida 179<br />

4.3.1 Conocimiento y actitudes ante las PSH 179<br />

4.3.2 Las denominaciones del colectivo 183<br />

4.3.3 Posicionamiento ante tópicos y estereotipos 186<br />

4.3.4 Aceptación de la proximidad 194<br />

4.3.5 Valoración de las expectativas de futuro 197<br />

4.4 Conclusiones 199<br />

Capítulo 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y<br />

AUTOPERCEPCIÓN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR 201<br />

5.1 Introducción 201<br />

5.2 La Entrevista abierta en profundidad<br />

y el Grupo de Discusión 202<br />

5.3 Análisis de los resultados obtenidos 205<br />

5.3.1 EL AYER: Los caminos que desembocan en la calle 205<br />

5.3.2 EL HOY: La calle como espacio y escenario 224<br />

5.3.2.1 Vivir en la calle 227


5.3.2.2 La evolución de los perfiles 229<br />

5.3.2.3 Los lazos familiares. La red <strong>social</strong> 234<br />

5.3.2.4 La relación. La convivencia 236<br />

5.3.2.5 Los extranjeros 241<br />

5.3.2.6 Las mujeres sin hogar 242<br />

5.3.2.7 El trabajo 243<br />

5.3.2.8 La salud 247<br />

5.3.2.9 La relación con los recursos 248<br />

5.3.2.10 El potencial y utilidades de los blog,s 250<br />

5.3.3 EL MAÑANA: Las expectativas de futuro 254<br />

5.4 Conclusiones 260<br />

Capítulo 6: SÍNTESIS Y CONCLUSIONES 263<br />

6.1 Síntesis de resultados 263<br />

6.2 Contraste de hipótesis 264<br />

6.3 Posibles líneas de investigación 264<br />

ANEXOS 268<br />

Anexos al Capítulo 3 268<br />

Ficha técnica 268<br />

Tirada y difusión de los diarios 269<br />

Ficha y criterios de grabación de datos 271<br />

Relación cronológica de titulares, según diario 273


Anexos al Capítulo 4 316<br />

Ficha técnica 316<br />

Variables muestrales 318<br />

Cuestionario 321<br />

Anexos al Capítulo 5 326<br />

El trabajo de campo 326<br />

Ficha técnica grupo de discusión 328<br />

Guión entrevistas y perfiles expertos 329<br />

Guión entrevistas y perfiles personas sin hogar 329<br />

PÁGINAS WEB CONSULTADAS 342<br />

BIBLIOGRAFÍA 344<br />

ÍNDICE DE TABLAS 345<br />

ÍNDICE DE GRÁFICOS 346


Resumen<br />

Esta tesis consiste en una investigación sociológica en la que se aplica la<br />

triangulación metodológica, combinación de técnicas cuantitativas y<br />

cualitativas, para lograr una mirada plural y confluyente sobre la realidad del<br />

colectivo de las personas sin hogar.<br />

Los cuatro principales actores estudiados, y las técnicas usadas para ello, son<br />

los siguientes:<br />

<strong>Imagen</strong> del colectivo “sin hogar” que proyectan y difunden los medios<br />

de comunicación: Análisis de contenido de prensa<br />

Valoraciones y actitudes de la población residente en las principales<br />

ciudades españolas: Encuesta de opinión<br />

Reflexión y análisis de los expertos y profesionales especializados:<br />

Entrevistas abiertas en profundidad.<br />

Reflexión, vivencia y análisis de las propias personas sin hogar:<br />

Grupo de discusión, Entrevistas abiertas en profundidad.<br />

La información sobre el colectivo, obtenida a partir de esa multiplicidad de<br />

miradas, es analizada en el marco y contexto de las modernas formas de<br />

exclusión y marginalidad urbanas<br />

Palabras Clave<br />

Territorio, ciudad, identidad, sin hogar, futuro


Abstract<br />

This dissertation is based on a sociological research that applies<br />

methodological triangulation in conjunction with a set of qualitative and<br />

quantitative techniques in order to obtain a whole vision about the real<br />

situation of homeless people.<br />

The four key aspects explored in this study and the techniques used for the<br />

research purpose are the following:<br />

Image of homeless people showed in mass media. Press content<br />

analysis.<br />

Values and attitudes of people living in the main Spanish cities. Survey<br />

opinion.<br />

Discussion and analysis of practitioners’ opinions. In-depth-interviews.<br />

Discussion, life experience, and analysis of homeless’ opinion. Focus<br />

groups and in-depth-interviews.<br />

The information about the homeless people, which was collected from the<br />

above mentioned techniques, is explored from a framework that considers the<br />

recent ways of exclusion and urban marginality.<br />

Keywords<br />

Territory, city, identity, homeless, future


INTRODUCCIÓN<br />

INTRODUCCIÓN<br />

La tesis doctoral que presentamos se estructura en torno a siete capítulos que,<br />

a su vez, incorporan los siguientes contenidos:<br />

Capítulo 1: Marco teórico en el que se contextualiza la marginación<br />

urbana y la identidad, denominación y territorio de las personas sin<br />

hogar. Recorrido en torno a la evolución de la teoría sociológica sobre<br />

marginación y exclusión.<br />

Capítulo 2: Visión histórica de las investigaciones sobre personas sin<br />

hogar en España. A partir de ello, justificación y objetivos de la<br />

presente investigación. Definición de hipótesis y desglose del<br />

planteamiento metodológico.<br />

Capítulo 3: <strong>Imagen</strong> de las personas sin hogar en la prensa.<br />

Presentación de resultados del análisis de contenido.<br />

Capítulo 4: Opiniones y actitudes de los ciudadanos residentes en<br />

grandes ciudades ante las personas sin hogar. Resultados de la<br />

encuesta de opinión.<br />

Capítulo 5: Valoración de los expertos y autovaloración de las propias<br />

personas sin hogar. Resultados de entrevistas en profundidad y grupo<br />

de discusión.<br />

1


CAPÍTULO 1 MARCO TEÓRICO: MARGINACIÓN Y EXCLUSIÓN EN LAS<br />

CIUDADES CONTEMPORÁNEAS<br />

Capítulo 6: Síntesis de resultados, contraste de hipótesis y sugerencia<br />

de posibles líneas de investigación.<br />

Capítulo 7: Anexos ordenados de acuerdo con los capítulos a los que<br />

corresponden.<br />

Páginas Web y Bibliografía consultada.<br />

Índices de tablas y gráficos.<br />

2


CAPÍTULO 1 MARCO TEÓRICO: MARGINACIÓN Y EXCLUSIÓN EN LAS<br />

CIUDADES CONTEMPORÁNEAS<br />

Capítulo 1 MARCO TEÓRICO: Marginación y exclusión en las ciudades<br />

contemporáneas<br />

1.1 Exclusión en las sociedades tecnológicas y expresiones de<br />

marginación urbana<br />

A comienzos del siglo XXI asistimos a la expansión de una economía cada vez<br />

más globalizada, que incorpora nuevas formas de competencia y de<br />

<strong>org</strong>anización de la producción y el consumo y que desarrolla nuevas<br />

modalidades de intercambios monetarios y operaciones financieras. Se trata<br />

de un conjunto de profundas y radicales transformaciones que parecen señalar<br />

algunos rasgos propios de una nueva era, cuyo impacto y consecuencias<br />

pueden resultar de una importancia similar a las producidas en su momento<br />

por el tránsito a las sociedades industriales.<br />

La mencionada evolución de los sistemas productivos se acompaña de formas<br />

nuevas de desigualdad que comienzan a modificar los perfiles de las pirámides<br />

de estratificación <strong>social</strong>. Factores introducidos por las sociedades tecnológicas,<br />

como el paro de larga duración, la precarización laboral y las modificaciones en<br />

la <strong>org</strong>anización del trabajo prefiguran la tendencia hacia sociedades<br />

dualizadas, en que las posiciones que se ocupan en las escalas de<br />

estratificación se diversifican y añaden complejidad a la estructura <strong>social</strong>.<br />

(Tezanos et al 2004). De este modo, situaciones ya existentes de pobreza,<br />

precariedad y marginación pueden tender a consolidarse de modo endémico a<br />

la vez que aparecen nuevas formas de desigualdad y exclusión.<br />

3


CAPÍTULO 1 MARCO TEÓRICO: MARGINACIÓN Y EXCLUSIÓN EN LAS<br />

CIUDADES CONTEMPORÁNEAS<br />

De manera especialmente ácida, Bauman no se recata a la hora de señalar a<br />

los jóvenes de la “Generación X”, nacidos en la década de los setenta, como los<br />

primeros destinatarios no ya de situaciones de desempleo y subempleo<br />

masivos, sino como aspirantes a la condición de seres ”superfluos”.<br />

“Superfluidad comparte su espacio semántico con “personas o cosas<br />

rechazadas”, “derroche”, “basura”, “desperdicios”: con residuo. El destino de<br />

los desempleados, del “ejército de reserva del trabajo” era el de ser<br />

reclamados de nuevo para el servicio activo. El destino de los residuos es el<br />

vertedero, el basurero” . (Bauman 2005:24)<br />

La crisis del estado de bienestar, los grandes cambios tecnológicos señalados y<br />

la creciente globalización introducen profundas alteraciones en las reglas del<br />

juego conocidas por las generaciones anteriores. Lo peculiar de la nueva<br />

situación, según Bauman, es que extiende una desconocida sensación de<br />

confusión, desconcierto y perplejidad. Los remedios ante las crisis heredados<br />

del pasado han perdido su vigencia y tal vez desconozcamos las herramientas<br />

para abordar la nueva situación. En las sociedades de nuestros padres y<br />

abuelos se establecían condiciones para la admisión en sociedad o en el<br />

mundo laboral. Pero las condiciones se expresaban con claridad y con nítidas<br />

instrucciones sobre los procedimientos a seguir.<br />

“Las rutinas de antaño, denigradas y resentidas por tantos mientras aún<br />

conservaban plena vigencia, hoy se han extinguido, llevándose consigo a la<br />

tumba esa confianza inspiradora de seguridad... Se trata ahora del carácter<br />

evasivo (y, con demasiada frecuencia, ilusorio) de los fines, que se desvanecen<br />

y disuelven a más velocidad de lo que cuesta alcanzarlos” (Bauman 2005:29)<br />

4


CAPÍTULO 1 MARCO TEÓRICO: MARGINACIÓN Y EXCLUSIÓN EN LAS<br />

CIUDADES CONTEMPORÁNEAS<br />

Las radicales transformaciones que ahora experimentamos, la crisis sistémica<br />

que coinciden en diagnosticar numerosos especialistas, alimentan nuevas<br />

formas de marginación que también adquieren una expresión novedosa en las<br />

urbes contemporáneas. Wacquant sistematiza las manifestaciones de las<br />

nuevas formas de exclusión y su impacto en el tejido urbano y en los procesos<br />

de convivencia en las grandes urbes americanas y europeas.<br />

“Si no se ponen a punto y en marcha nuevos mecanismos de incorporación<br />

<strong>social</strong> y política que reincorporen a la población desechada en esos territorios<br />

de abandono, puede esperarse que esa marginalidad urbana siga creciendo y<br />

extendiéndose y con ella la violencia en las calles, la alienación política, la<br />

desertificación <strong>org</strong>anizacional y la informalización de la economía que afectan<br />

a los barrios de relegación de las grandes ciudades en las sociedades<br />

avanzadas” (Wacquant 2007:269).<br />

La segunda mitad del siglo XX propició en las sociedades occidentales un auge<br />

y estabilización de las economías y una acelerada recuperación y/o ampliación<br />

de los hábitos de consumo masivo. Las condiciones favorables para la<br />

extensión y mejora de las prestaciones propias del estado de bienestar no<br />

fueron aprovechadas por los gobiernos estatales, según el autor citado, para<br />

disminuir desigualdades y mejoras las condiciones urbanas y ciudadanas de los<br />

grandes barrios marginales. Por el contrario, la degradación fue en aumento<br />

como consecuencia de la “violencia estructural” alimentada por tres<br />

componentes fundamentales: el desempleo masivo, crónico y persistente; la<br />

relegación de los barrios depauperados y la consecuente estigmatización<br />

creciente de sus pobladores. Las nuevas formas de marginación, derivadas de<br />

las condiciones mencionadas, aparecen sintetizadas en la siguiente tabla:<br />

5


CAPÍTULO 1 MARCO TEÓRICO: MARGINACIÓN Y EXCLUSIÓN EN LAS<br />

CIUDADES CONTEMPORÁNEAS<br />

Tabla 1.1 Rasgos de las nuevas formas de marginación<br />

1.- El asalariado como vector de la inestabilidad y de la inseguridad <strong>social</strong>es:<br />

“ Al volverse inestable y heterogéneo, diferenciado y diferenciador, el<br />

trabajo asalariado se ha convertido en fuente de fragmentación y<br />

precariedad <strong>social</strong>es más que de homogeneidad, solidaridad y seguridad<br />

para aquellos que se hallan confinados en las zonas fronterizas o<br />

inferiores de la esfera del empleo” Pág. 271<br />

2.- La desconexión funcional de las tendencias macroeconómicas:<br />

“La marginalidad avanzada se halla cada vez mas desconectada de las<br />

fluctuaciones cíclicas y de las tendencias globales de la economía.Las<br />

condiciones <strong>social</strong>es y las posibilidades de vida en los barrios de<br />

relegación en Europa y los Estados Unidos no han sido afectadas en<br />

nada por los años de prosperidad de la década de 1980 y de la segunda<br />

mitad de la de 1990, sino que han empeorado sensiblemente con las<br />

fases de descenso y recesión” Pág. 273<br />

3.- Fijación y estigmatización territoriales:<br />

“ En lugar de estar diseminada en el conjunto de las zonas del hábitat<br />

obrero, la marginalidad avanzada tiende a concentrarse en territorios<br />

aislados y claramente circunscriptos, cada vez mas percibidos, desde<br />

afuera y desde adentro, como lugares de perdición, a la manera de<br />

páramos urbanos o de “corte de los milagros” de la ciudad<br />

postindustrial a la que sólo frecuentarían los desviados y los desechos<br />

de la sociedad…Una contaminación de lugar se superpone con los<br />

estigmas ya operantes tradicionalmente adjudicados a la pobreza y a la<br />

pertenencia étnica o al estatuto del inmigrante postcolonial, a los que<br />

dicha contaminación no se reduce aun cuando estén estrechamente<br />

ligados” Págs. 274-275<br />

4.- La alienación espacial y la disolución del “lugar”:<br />

“La otra cara de este proceso de estigmatización territorial es la<br />

disolución del “lugar” (en el sentido de sitio), es decir, la pérdida de un<br />

marco humanizado, culturalmente familiar y <strong>social</strong>mente tamizado, con<br />

el que se identifiquen las poblaciones urbanas marginadas y dentro del<br />

cual se sientan “entre sí” y en relativa seguridad… Los “lugares son<br />

arenas estables, plenas y fijas, mientras que los “espacios” son “vacíos<br />

potenciales”, posibles amenazas, zonas a las que hay que temer,<br />

resguardarse o huir” Págs. 278-279<br />

6


CAPÍTULO 1 MARCO TEÓRICO: MARGINACIÓN Y EXCLUSIÓN EN LAS<br />

CIUDADES CONTEMPORÁNEAS<br />

5.- La pérdida de un país interno:<br />

“ A la erosión del lugar se agrega la desaparición de un país interno o de<br />

una base interna viable. En las fases anteriores de crisis y<br />

reestructuración, los trabajadores temporalmente rechazados fuera del<br />

mercado laboral podían replegarse en la economía <strong>social</strong> de su<br />

colectividad de origen, se tratara de un distrito obrero funcional, del<br />

gueto comunitario o de una aldea en la campiña de origen o en la zona<br />

de inmigración… En nuestros días, los individuos duraderamente<br />

excluidos de un empleo remunerado en los barrios de relegación no<br />

gozan ya en su conjunto de un apoyo colectivo informal mientras<br />

esperan un nuevo trabajo que, además, podría no llegar nunca. Para<br />

sobrevivir, deben recurrir a estrategias individuales de<br />

“autoaprovisionamiento”, de trabajo en negro, de comercio<br />

subterráneo, de actividades criminales y de “deterioro” casi<br />

institucionalizado” Págs. 281-282<br />

6.- Fragmentación <strong>social</strong> y estallido simbólico o la génesis inacabada del<br />

“precariado”:<br />

“ La marginalidad avanzada difiere además de las formas anteriores de<br />

pobreza urbana en que se desarrolla en un contexto de descomposición<br />

de clase mas que de consolidación de clase, bajo la presión de una doble<br />

tendencia a la precarización y a la desproletarización en lugar de la<br />

homogeneización proletaria en las regiones inferiores del espacio <strong>social</strong><br />

y urbano… La proliferación misma de etiquetas que se supone designan<br />

a las poblaciones dispersas y dispares prisioneras del estado de<br />

marginación <strong>social</strong> y espacial – “nuevos pobres”, zonards,”excluidos”,<br />

underclass, “jóvenes de los suburbios” y la trinidad de los “sin” (sin<br />

trabajo, sin techo, sin documentos) – habla claramente de la<br />

desregulación simbólica en la cual se encuentran las franjas y las fisuras<br />

de la estructura <strong>social</strong> y urbana” Págs. 283-284<br />

Fuente: Wacquant L. 2007 Síntesis propia<br />

Pese a la gravedad de las carencias, el autor citado nos remite a colectivos<br />

marginados que encuentran en la ciudad alguna forma de identidad territorial,<br />

por precaria que esta sea. Espacio de convivencia o territorio que, como<br />

7


CAPÍTULO 1 MARCO TEÓRICO: MARGINACIÓN Y EXCLUSIÓN EN LAS<br />

CIUDADES CONTEMPORÁNEAS<br />

veremos en las siguientes páginas, se encuentra en muchas situaciones vedado<br />

para el colectivo de personas sin hogar en el que centramos el interés de<br />

nuestra investigación.<br />

1.2 Identidad, denominación y territorio de las personas sin hogar<br />

Entre los colectivos que, a lo largo de diversas épocas y culturas, se ven<br />

sometidos a graves situaciones de carencia, abordamos específicamente uno<br />

de los que, por la confluencia de debilidades, constituye un caso extremo de<br />

marginación, con significada y renovada presencia en nuestras sociedades<br />

económica y políticamente desarrolladas. Se trata de las personas que<br />

viven/circulan por las calles desprovistos de casi todo: sin casa, sin comida, sin<br />

trabajo, sin derechos, sin familia, sin ayer y, tal vez, sin mañana. Hablamos de<br />

un colectivo que “se encuentra fuera de las oportunidades <strong>vital</strong>es que definen<br />

una ciudadanía <strong>social</strong> plena en las sociedades de nuestros días” . (Tezanos<br />

2001:13)<br />

Las personas sin hogar, los “sin techo”, los “homeless”, los “clochard” han<br />

llegado a formar parte del paisaje urbano reconocible en cualquier gran ciudad<br />

occidental, acercando sus movedizas figuras hasta las zonas más nobles y<br />

exclusivas, aparcando su “improductivo” ocio al pie de los pulcros lugares en<br />

los que derrochamos “productivamente” el nuestro, como actores de mimo<br />

que desde sus gestos congelados nos someten a una continua interpelación.<br />

Ciudadanos incómodos, insertos en los circuitos de nuestra vida cotidiana, son<br />

vivencialmente, sin embargo, seres situados “al margen”, en los límites, en la<br />

periferia de las vidas estables y ordenadas:<br />

8


CAPÍTULO 1 MARCO TEÓRICO: MARGINACIÓN Y EXCLUSIÓN EN LAS<br />

CIUDADES CONTEMPORÁNEAS<br />

“Estar en la calle ha supuesto con frecuencia un punto de no retorno sobre el<br />

que se solía trazar la línea, la frontera simbólica, que separaba la pobreza<br />

<strong>social</strong>mente integrada, digna, fácil de asumir, dócil a la hora de dejarse<br />

ayudar; en suma, la pobreza que la sociedad estaba dispuesta a percibir y<br />

comprender como “cosa propia”, de aquella otra forma de pobreza que era<br />

percibida como ajena, extraña, imposible de entender o de asumir, peligrosa,<br />

incontrolable: la pobreza que se constituye como un mundo aparte”. (Cabrera<br />

1998:20)<br />

Hablamos, por tanto, de uno de los colectivos cuya forma extrema de<br />

marginalidad les sitúa fuera no solo de la realidad <strong>social</strong> normalizada, sino de<br />

las propias categorías del análisis <strong>social</strong>, como señala el autor citado.<br />

El fenómeno de la marginación aparece frecuentemente vinculado a<br />

condiciones de pobreza material y ambiental sin que necesariamente, como<br />

más adelante veremos, constituyan siempre realidades superpuestas o ligadas<br />

por una inexorable relación de causalidad. Se producen marginaciones de<br />

carácter ideológico que no llevan aparejadas situaciones de pobreza o<br />

indigencia, así como situaciones de pobreza material que no sepultan a las<br />

personas o grupos que las padecen en el espacio de la marginación plena.<br />

Sin embargo, aun eludiendo determinismos simplistas, marginación y pobreza<br />

tienden a autoalimentarse o, en términos más apropiados, a<br />

“autoempobrecerse”. Los colectivos marginados y, a la vez, pobres, se sitúan<br />

en la base de la pirámide <strong>social</strong> o incluso en las afueras de la convivencia<br />

normalizada. Marginación y pobreza, términos que en su propia definición<br />

incorporan una connotación negativa, constituyen así las dos apariencias de<br />

9


CAPÍTULO 1 MARCO TEÓRICO: MARGINACIÓN Y EXCLUSIÓN EN LAS<br />

CIUDADES CONTEMPORÁNEAS<br />

una misma realidad caracterizada por la carencia, la dependencia y, en<br />

definitiva, la exclusión.<br />

La exclusión no se define tanto por sus propias características, como por<br />

referencia a algo que no se posee o de lo que se está ausente. Ser marginado<br />

es estar “fuera de” o “al margen de” un determinado espacio de sociabilidad.<br />

Ante semejante situación, resulta pertinente investigar en qué medida las<br />

personas y grupos así llamados se sitúan fuera por sí mismos o, por el<br />

contrario, se ven abocados a situarse fuera de la realidad normalizada. Cabe<br />

preguntarse cuál es el peso de complejos factores personales y cuál el de los<br />

condicionantes ambientales y <strong>social</strong>es en los que la exclusión termina<br />

haciéndose evidente:<br />

“El grado de dicha marginación dependerá de dos componentes: por una<br />

parte, el estatus concedido a tales personas y grupos por parte de la<br />

colectividad cultural predominante; por otra, la de la reacción frente a dicho<br />

estatus por parte de las personas y grupos marginados. De este punto de<br />

partida nacen una serie de dependencias y rechazos en cadena entre<br />

marginantes y marginados que constituyen un auténtico proceso dialéctico sin<br />

solución de continuidad, un círculo infernal incesantemente recorrido”<br />

. (Manovel 1984:46)<br />

Cuando este círculo infernal se inicia, los procesos de<br />

destrucción/autodestrucción aparecen como casi inevitables. En palabras del<br />

sociólogo Raimon Bonal (1992:45): “nada ni nadie se interesa por la existencia<br />

y el mensaje del marginado, porque su mismo sufrimiento es motivo de<br />

rechazo <strong>social</strong>”. A medida que se avanza hacia situaciones límite, la propia<br />

10


CAPÍTULO 1 MARCO TEÓRICO: MARGINACIÓN Y EXCLUSIÓN EN LAS<br />

CIUDADES CONTEMPORÁNEAS<br />

marginación es cada vez sometida a mayores distancias y aislamientos. Las<br />

personas y grupos afectados tienden así a una suerte de exilio interior, a la<br />

ocupación de un espacio periférico a la sociedad en el que se vive la<br />

esquizofrenia, más o menos explícita, de la pertenencia/ no pertenencia.<br />

La diversidad de situaciones personales, la pluralidad de experiencias<br />

marginadoras y, en definitiva, la gran fragilidad de cada una de estas personas<br />

impiden prácticamente su identificación como colectivo <strong>social</strong> definido por<br />

rasgos compartidos. Les identifica la coyuntura de vivir en la calle, pero no<br />

cuentan con valores y expectativas comunes de futuro, condiciones básicas<br />

para que pueda ser usado el término de “grupo <strong>social</strong>”. No existe<br />

autoconciencia de pertenecer a una colectividad, y sin conciencia de grupo,<br />

resulta difícil establecer estrategias de supervivencia compartidas.<br />

La indefinición grupal se traduce en dispersión y debilidad de las<br />

denominaciones por las que el colectivo es <strong>social</strong>mente reconocido. En la<br />

misma línea de invisibilidad grupal, se encuentra desprovisto de una<br />

denominación propia, unívoca, precisa y genéricamente aceptada. Existen<br />

otros colectivos <strong>social</strong>es de gran heterogeneidad que, sin embargo, presentan<br />

un rasgo común suficientemente expresivo como para ot<strong>org</strong>arle una<br />

denominación inequívoca. No es el caso que nos ocupa y, por ello, no resulta<br />

obvio realizar un breve recorrido socio-histórico por las diversas<br />

denominaciones que, con generalizado infortunio, se les han venido<br />

atribuyendo. Precisamente la de desarraigados, una denominación de gran<br />

fuerza evocativa en castellano, y que resulta generalizable a todos ellos por<br />

encima de la diversidad de <strong>trayectoria</strong>s, se encuentra entre las que menor<br />

aceptación han conseguido.<br />

11


CAPÍTULO 1 MARCO TEÓRICO: MARGINACIÓN Y EXCLUSIÓN EN LAS<br />

CIUDADES CONTEMPORÁNEAS<br />

El desarraigo es “una situación de desvinculación de la sociedad que se<br />

caracteriza por la inexistencia o la debilidad de aquellos lazos que ligan a las<br />

personas instaladas en un lugar a una red de estructuras <strong>social</strong>es conectadas<br />

entre sí” (Davis 2004:134). . Esta definición es posiblemente la que con mayor<br />

propiedad debería aplicarse al colectivo que nos ocupa: Desarraigados,<br />

personas que –por diversas circunstancias- han perdido el vínculo con las<br />

raíces que necesitamos para alimentar nuestra identidad y como hilo<br />

conductor de la propia historia personal.<br />

La indigencia en las actuales sociedades es un fenómeno típicamente urbano.<br />

En la sociedad tradicional y rural los pobres, los afectados por defectos físicos<br />

o enfermedades mentales, las personas con tendencia a realizar una vida<br />

marginal, eran inmediatamente etiquetados, pero no excluidos de la<br />

comunidad. Formaban parte de la vida colectiva y mantenían raíces y<br />

referencias <strong>social</strong>es. La ciudad impone otras normas y las situaciones<br />

potencialmente marginadoras son, en buena parte de los casos, el inicio de la<br />

marginación. El espacio de la ciudad, la propia calle, es el cobijo de “los otros”,<br />

los no integrados o desarraigados.<br />

La macrohistoria de esta indigencia urbana, generalizada en nuestro país a<br />

partir de las avalanchas de población hacia las ciudades, propiciadas por el<br />

desarrollismo de los años sesenta, ya está suficientemente documentada y<br />

resultaría inadecuado volver a relatarla (Cabrera,1998).<br />

Sin embargo, desde la perspectiva de la microhistoria de los indigentes,<br />

abordada en el presente trabajo, resulta oportuno realizar un recorrido por las<br />

denominaciones que el colectivo al que nos referimos ha experimentado en un<br />

12


CAPÍTULO 1 MARCO TEÓRICO: MARGINACIÓN Y EXCLUSIÓN EN LAS<br />

CIUDADES CONTEMPORÁNEAS<br />

reducido periodo de tiempo. Son denominaciones que, en la mayor parte de<br />

los casos “connotan” y, por tanto, reflejan la valoración <strong>social</strong><br />

institucionalizada y <strong>social</strong>mente interiorizada.<br />

La literatura clásica española registra algunos antecesores de los “sin techo”<br />

que ya forman parte ineludible de nuestro imaginario colectivo: El Lazarillo, el<br />

Buscón, Rinconete ... son prototipos idealizados que reflejan una realidad<br />

<strong>social</strong> lumpen y sórdida que se extiende desde la baja Edad Media hasta bien<br />

avanzado el siglo XIX. Personajes similares a los que pueden hallarse en otras<br />

tradiciones culturales europeas.<br />

A partir del siglo XVI se establece la diferenciación entre pobreza “legítima”<br />

(fruto involuntario de la edad, de la muerte del cabeza de familia, de una<br />

invalidez,...) y una forma de pobreza carente de legitimidad, como una opción<br />

de vida evitable y libremente elegida. A partir de esta catalogación, “el pobre<br />

marginado será, de modo esencial, una categoría moral, <strong>social</strong>mente<br />

construida, en torno a la cuál resulte viable <strong>org</strong>anizar dispositivos de asistencia<br />

y/o represión, miedos, fantasías, discursos, ...” . (Cabrera 1998:22)<br />

Desde la segunda mitad del siglo XVI se <strong>org</strong>anizan con regularidad en toda<br />

Europa redadas y apresamientos masivos de vagabundos, que en ocasiones<br />

acaban siendo ejecutados. Ya en el siglo XVIII, Carlos III destaca en España por<br />

su afán de recoger y encerrar a los ociosos y vagabundos. La Ley de Vagos de<br />

1845 distingue entre los “simplemente vagos” y los “vagos con circunstancias<br />

agravantes”. Finalizando el siglo XIX, en el Código Penal de 1870, deja de<br />

considerarse un delito el vagabundeo.<br />

13


CAPÍTULO 1 MARCO TEÓRICO: MARGINACIÓN Y EXCLUSIÓN EN LAS<br />

CIUDADES CONTEMPORÁNEAS<br />

En las fechas más cercanas del siglo XX, la “Ley de Vagos y Maleantes”, de<br />

1933, además de permitir catalogar a cualquier sospechoso de disidencia<br />

ideológica en la dura postguerra, normaliza la condición “anómala” que nunca<br />

dejará de acompañar a los individuos pertenecientes al colectivo de los “sin<br />

hogar”. (Seres “empeñados” en situarse en los límites del sistema). Sin<br />

embargo, los “vagabundos”, figura que en buena medida se superpone a la de<br />

los “sin techo”, no eran objeto de un significado rechazo <strong>social</strong> . Las personas<br />

de luengas barbas, calentándose en una improvisada hoguera, bajo un puente,<br />

eran tan familiares a los pequeños municipios como los deficientes mentales<br />

que, a su modo, vivían una razonable y familiar integración en la comunidad.<br />

Entrados ya en el desarrollismo de los años sesenta, las ciudades se ven<br />

invadidas por oleadas de inmigrantes en busca de un futuro mejor. Una parte<br />

de ellos nutrirán las filas de los que empiezan a denominarse como<br />

transeúntes sin recursos, en una acepción que se generalizó en los entornos<br />

próximos a Cáritas. Ni entonces ni ahora la mayor parte de los indigentes eran<br />

transeúntes. Los que, en el argot de la calle, son denominados como<br />

“carrileros”, pueden ser considerados como “profesionales” de la indigencia.<br />

Conocen los recursos que proporcionan los diferentes municipios y recorren el<br />

país en base a rutas planificadas. Pero no definían ni definen al colectivo (el<br />

70,2 % de las personas sin hogar pernocta todas las noches en el mismo lugar.<br />

INE 2005). Los indigentes no abandonan la ciudad y, a ser posible, no<br />

abandonan el lugar y las personas en las que encuentran habitual cobijo.<br />

Vagos, maleantes, vagabundos, son términos que incorporan un elevado<br />

componente de reproche moral. El concepto transeúnte elude la penalización,<br />

14


CAPÍTULO 1 MARCO TEÓRICO: MARGINACIÓN Y EXCLUSIÓN EN LAS<br />

CIUDADES CONTEMPORÁNEAS<br />

pero no alcanza a reflejar los rasgos que caracterizan a la mayor parte del<br />

colectivo sometido a máxima exclusión <strong>social</strong>.<br />

En los estudios más recientes se han generalizado dos denominaciones de<br />

desigual cobertura: Las personas sin hogar y las personas sin techo 2 . La<br />

limitación de ambas consiste en que se reducen a resaltar el aspecto más<br />

visible de una realidad que hemos definido como multidimensional: pobreza,<br />

desarraigo, carencia de derechos, ruptura familiar, carencia de techo ...<br />

Sin que exista una total coincidencia entre los expertos, el término “sin hogar”,<br />

en línea con la definición de Feantsa, alude a un colectivo más amplio que<br />

incluye a todas aquellas personas que habitan en infraviviendas o en<br />

condiciones de masificación. El término “sin techo” se asigna a las personas<br />

que viven en la calle (portales, cajeros, plazas, parques …), aunque recurran de<br />

modo más o menos esporádico a los albergues.<br />

2 Personas sin hogar: “Todas aquellas que no pueden acceder o conservar un<br />

alojamiento adecuado, adaptado a su situación personal, permanente y que<br />

proporcione un marco estable de convivencia, ya sea por razones económicas u otras<br />

barreras <strong>social</strong>es, o bien porque presentan dificultades personales para tener una<br />

vivienda autónoma”.<br />

Personas sin techo: “Son las que están literalmente en la calle, que viven en espacios<br />

públicos abiertos y que duermen, a veces, en albergue nocturnos (cerrados durante el<br />

resto del día)”<br />

Definiciones de FEANTSA (Federación Europea de Asociaciones Nacionales que<br />

trabajan con los Sin Hogar)<br />

15


CAPÍTULO 1 MARCO TEÓRICO: MARGINACIÓN Y EXCLUSIÓN EN LAS<br />

CIUDADES CONTEMPORÁNEAS<br />

En sentido estricto, nuestro trabajo de investigación se centra exclusivamente<br />

en las personas “sin techo”, de acuerdo con la nomenclatura de Feantsa. Si<br />

hemos optado finalmente por adoptar la denominación de personas sin hogar<br />

(en adelante PSH) ha sido tras comprobar que, en la última época, todas las<br />

entidades que trabajan con este colectivo han tendido a adoptar la misma<br />

denominación, aludiendo al hecho de que estas personas no solo carecen de<br />

techo (un lugar donde cobijarse), sino también de hogar (un espacio propio<br />

donde pueden compartirse los afectos).<br />

En todo caso, y al margen del término expreso que utilicemos, el segmento de<br />

población marginada a que nos referimos puede ser definido del siguiente<br />

modo: aquellas personas que carecen de residencia o domicilio estable y que<br />

se encuentran en una situación socio-familiar vulnerable, sin ingresos ni<br />

trabajo y, en resumen, en situación de exclusión <strong>social</strong>. Estas personas pueden<br />

haberse establecido en una ciudad o moverse continuamente de una a otra<br />

(situación mucho menos habitual).<br />

Las condiciones en las que viven las PSH concentran sobre ellas muchas de las<br />

lacras de marginación que se producen en nuestra sociedad. Son uno de los<br />

segmentos de población más vulnerables no sólo por la falta de vivienda, sino<br />

también por el desempleo, la desestructuración familiar, el estigma público, el<br />

desarraigo <strong>social</strong>, la enfermedad, el deterioro de su propia identidad y la falta<br />

de acceso a los servicios <strong>social</strong>es básicos.<br />

La carencia de identidad grupal, junto a la evidente dispersión de<br />

denominaciones – ausencia de nombre genérico claramente compartido y<br />

reconocible por los ciudadanos- encuentra su correlato en la inexistencia de<br />

16


CAPÍTULO 1 MARCO TEÓRICO: MARGINACIÓN Y EXCLUSIÓN EN LAS<br />

CIUDADES CONTEMPORÁNEAS<br />

territorio propio. Difícilmente podríamos asociar una calle, un barrio o una<br />

determinada zona de una determinada ciudad con las PSH. Tal vez podríamos<br />

referirnos a lugares tradicionales de encuentro o “espacios de referencia”<br />

tanto para pernoctar como para charlar durante el día. Pero incluso los lugares<br />

tradicionales pueden desaparecer como consecuencia, entre otros factores, de<br />

sucesivas aplicaciones de políticas eufemísticamente calificadas como de<br />

“urbanismo preventivo”. Las PSH, aunque tienden a buscar lugares<br />

razonablemente estables en los que encontrar cobijo, compañía y protección,<br />

se ven de este modo sometidas a un proceso permanente de “movilidad<br />

forzada” (Bachiller 2009:125-137).<br />

El autor mencionado considera que este nomadismo provocado al que se ven<br />

sometidas las PSH se asienta sobre cuatro pilares: la actuación policial y de los<br />

cuerpos privados de seguridad, determinadas movilizaciones vecinales, la<br />

dispersión geográfica de los recursos <strong>social</strong>es destinados al colectivo y la<br />

aplicación de determinadas políticas de reconversión urbana. El pacto tácito<br />

con las fuerzas de seguridad es que tiendan a la invisibilidad, que la zona<br />

quede “limpia” al comenzar el día. Si los lugares de pernoctación tienden a<br />

crecer, o aparecen en zonas de la ciudad especialmente sensibles, el acoso<br />

policial se incrementa bajo formas más o menos sutiles.<br />

Las movilizaciones de vecinos hostiles, de las que veremos algún caso en<br />

nuestra investigación, se producen al amparo de la actual reconversión e<br />

indefinición de lo público. Hace tiempo que los residentes en las grandes<br />

ciudades dejamos de gozar y compartir las calles y plazas como escenarios de<br />

sociabilidad y convivencia. Los discursos de la seguridad han trasladado el<br />

panóptico a las calles en forma de omnipresentes cámaras de vigilancia. Los<br />

17


CAPÍTULO 1 MARCO TEÓRICO: MARGINACIÓN Y EXCLUSIÓN EN LAS<br />

CIUDADES CONTEMPORÁNEAS<br />

espacios públicos han venido derivando en lugares hostiles, aptos solo para el<br />

tránsito y poblados por seres indeseables que han invadido el espacio público<br />

ensuciándolo y afeándolo. En los lugares en que la presencia de personas sin<br />

hogar tiende a ser más notoria, la situación sufre también un proceso de<br />

conflicto en el que, si no ha mediado la presencia policial, los vecinos terminan<br />

manifestando su rechazo de diversas maneras.<br />

Estos rechazos vecinales contribuyen también a que los nuevos recursos que<br />

se habilitan terminen situándose en zonas aisladas, alejadas de los centros<br />

urbanos e igualmente distantes entre sí. 3<br />

En otra vertiente de las políticas municipales se encuentran las actuaciones<br />

urbanísticas. Bajo la argumentación de embellecer y ganar funcionalidad en los<br />

espacios urbanos se ocultan en algunos casos auténticas actuaciones<br />

destinadas al desalojo de las personas sin hogar que frecuentan esos lugares.<br />

A veces se trata de intervenciones de pequeña envergadura, como la retirada<br />

de mobiliario urbano o la instalación de bancos “anti-mendigos” (en los que no<br />

es posible tumbarse). En otros casos son operaciones de mucho mayor calado<br />

que implican una profunda remodelación de plazas o amplias zonas de uso<br />

colectivo.<br />

3 En nuestro informe destacamos el caso de la ciudad de Vigo, en la que si se quiere<br />

acudir a los diversos recursos que se ofrecen diariamente a las personas sin hogar,<br />

bastantes de ellas con evidentes limitaciones físicas, éstas han de recorrer un total de<br />

diecinueve kilómetros.<br />

18


CAPÍTULO 1 MARCO TEÓRICO: MARGINACIÓN Y EXCLUSIÓN EN LAS<br />

CIUDADES CONTEMPORÁNEAS<br />

1.3 Trayectoria de las teorías sociológicas sobre marginación y exclusión<br />

La exclusión <strong>social</strong> es un proceso mediante el cual los individuos o los grupos<br />

son total o parcialmente excluidos de una participación plena en la sociedad en<br />

la que viven (Fundación Europea, 1995). Remite, por tanto, a los obstáculos<br />

que encuentran determinadas personas para participar plenamente en la vida<br />

<strong>social</strong>, viéndose privadas de una o varias opciones consideradas<br />

fundamentales para el desarrollo humano.<br />

El concepto de exclusión <strong>social</strong> es multidimensional, y sus dimensiones<br />

pertenecen a tres áreas de gran importancia como son los recursos, las<br />

relaciones <strong>social</strong>es y los derechos legales, y pueden concretarse en los<br />

siguientes aspectos:<br />

PRIVACIÓN ECONÓMICA:<br />

a. Ingresos insuficientes.<br />

b. Inseguridad en el empleo.<br />

c. Desempleo.<br />

d. Falta de acceso a los recursos.<br />

PRIVACIÓN SOCIAL:<br />

a. Ruptura de los lazos <strong>social</strong>es y familiares, fuente de mecanismos de<br />

solidaridad comunitaria.<br />

b. Marginación <strong>social</strong>.<br />

c. Alteración de los comportamientos <strong>social</strong>es.<br />

d. Falta de participación en las actividades <strong>social</strong>es y políticas.<br />

e. Deterioro de salud.<br />

19


CAPÍTULO 1 MARCO TEÓRICO: MARGINACIÓN Y EXCLUSIÓN EN LAS<br />

CIUDADES CONTEMPORÁNEAS<br />

PRIVACIÓN POLÍTICA:<br />

a. Carencia de poder.<br />

b. Falta de participación en las decisiones que afectan a su vida<br />

cotidiana.<br />

c. Ausencia de participación política y escasa representatividad.<br />

Entre los grupos en riesgo de exclusión <strong>social</strong>, uno de los más vulnerables es el<br />

de las PSH, colectivo objeto de la presente investigación.<br />

La teoría sociológica y, en consecuencia, los métodos y técnicas usados para<br />

analizar la realidad <strong>social</strong>, ha experimentado una notable evolución en la<br />

forma de aproximarse a las situaciones de exclusión <strong>social</strong> que, a su vez,<br />

ofrecen diversas y renovadas apariencias en las modernas sociedades. Varios<br />

expertos han dejado constancia de los cambios de las corrientes sociológicas<br />

en su análisis de los colectivos marginados (Cabrera 1998; Sánchez Morales<br />

1999).<br />

Tradicionalmente, el estudio de las PSH se incardina básicamente en los<br />

parámetros de la “Sociología de la estratificación <strong>social</strong>” y de la “Sociología de<br />

la conducta desviada”. Son perspectivas que remiten básicamente a los<br />

estudios genéricos sobre pobreza y, por ello, difícilmente pueden explicar las<br />

complejidades de la exclusión <strong>social</strong>. . (Sánchez Morales 1999:15)<br />

A lo largo del siglo XX, la mayor parte de los estudios sobre la población “sin<br />

techo” tienen su origen en las universidades americanas, con posterior<br />

20


CAPÍTULO 1 MARCO TEÓRICO: MARGINACIÓN Y EXCLUSIÓN EN LAS<br />

CIUDADES CONTEMPORÁNEAS<br />

repercusión entre los estudiosos europeos. Estos desarrollos teóricos y<br />

pragmáticos atraviesan básicamente por tres fases:<br />

* La primera fase se inicia en los años veinte y finaliza tras la Segunda<br />

Guerra Mundial (su estudio emblemático es “El Hobo. Sociología del “sin<br />

techo”. Nels Anderson. 1923). Su argumento no supera la tradicional distinción<br />

entre pobres dignos e indignos. Tras la Gran Depresión del año 1929 proliferan<br />

los albergues para indigentes. En el año 1934, H. Sutherland y H. Locke<br />

introducen una nueva orientación, analizando la situación de los desarraigados<br />

que se albergan en la ciudad de Chicago, tomando en consideración factores<br />

estructurales, personales y relacionales.<br />

* En la segunda fase, desde el final de la Segunda Guerra Mundial<br />

hasta la conclusión de los años sesenta, los análisis del colectivo de los sin<br />

techo se realizan desde los postulados teóricos de la “Sociología de la<br />

desviación <strong>social</strong>” y la “Sociología urbana”. Son especialmente relevantes, para<br />

consolidar los posteriores marcos de análisis, los trabajos realizados a final de<br />

los años sesenta. Bahr comienza a utilizar el concepto de desarraigo o<br />

desafiliación para analizar los recorridos <strong>vital</strong>es de los sin hogar.<br />

* La tercera fase abarca desde los años ochenta hasta nuestros días.<br />

Aparecen nuevas orientaciones, que intentan responder a la evolución de los<br />

países más desarrollados, y que amplían la definición y comprensión de las<br />

“franjas de vulnerabilidad <strong>social</strong>”.<br />

21


CAPÍTULO 1 MARCO TEÓRICO: MARGINACIÓN Y EXCLUSIÓN EN LAS<br />

CIUDADES CONTEMPORÁNEAS<br />

En definitiva, se impone la necesidad de un nuevo marco teórico para<br />

comprender la complejidad de las formas de exclusión características de las<br />

nuevas sociedades desarrolladas .<br />

“Una investigación que pretenda darle al problema del sinhogarismo<br />

contemporáneo un tratamiento en consonancia con la pluricausalidad … y en<br />

el que se integre lo individual dentro de lo estructural, debería permitirnos<br />

sobrepasar los viejos estereotipos y descubrir nuevas complejidades, tanto en<br />

lo que se refiere a nuestra conceptualización del fenómeno, como en lo que<br />

atañe a los diseños de investigación” (Cabrera 1998:130) .<br />

O, como señala con precisión J. Blau (1992: 46): “Una adecuada teoría del<br />

sinhogarismo debería dar todo su peso a los factores <strong>social</strong>es, pero también<br />

tendría que ser capaz de explicar por qué una persona en lugar de otra llega a<br />

verse sin hogar” .<br />

Las recientes investigaciones sobre las causas que derivan en la marginación<br />

de los sin techo han abandonado los modelos explicativos centrados en<br />

factores individuales para conceder cada vez más importancia a los elementos<br />

de carácter socio-estructural. Igualmente, se ha renunciado a las explicaciones<br />

monocausales para obtener un amplio consenso en considerar que se trata de<br />

un proceso complejo, en el que inciden múltiples factores. Estos factores de<br />

tipo estructural supondrían la confluencia de fuerzas políticas, <strong>social</strong>es y<br />

económicas, “lo que incluye las dinámicas por las que atraviesa el mercado de<br />

la vivienda, los efectos de la reestructuración económica, la<br />

desindustrialización, los cambios en el mercado de trabajo, las políticas de<br />

22


CAPÍTULO 1 MARCO TEÓRICO: MARGINACIÓN Y EXCLUSIÓN EN LAS<br />

CIUDADES CONTEMPORÁNEAS<br />

bienestar <strong>social</strong> y de rentas y las políticas sectoriales de apoyo a los grupos más<br />

vulnerables” . (Cabrera 1998:129) .<br />

Actualmente, los diversos especialistas, al analizar los factores que convergen<br />

en el origen de los procesos de exclusión coinciden en diferenciar, con escasas<br />

variaciones terminológicas, los de carácter estructural, cultural,<br />

familiar/relacional e individual.<br />

Factores estructurales: Política laboral, de vivienda, educativa, fiscal, de<br />

distribución de la renta, pensiones, política de inmigración, de bienestar <strong>social</strong>,<br />

de integración de sectores vulnerables y grupos de excluidos.<br />

Factores culturales: Individualismo, insolidaridad, competitividad, darwinismo<br />

<strong>social</strong>.<br />

Factores familiares y relacionales: Debilidad y/o ausencia de vínculos<br />

familiares, conflictos y rupturas familiares, pérdidas (viudedad, orfandad...),<br />

pérdida de las redes de amigos, desarraigo <strong>social</strong>, aislamiento.<br />

Factores individuales: de personalidad, género, estado civil, estatus, raza,<br />

nacionalidad, alcoholismo, drogadicción, ludopatías, salud física y mental,<br />

antecedentes penales, experiencia de violencia y malos tratos, dificultades de<br />

aprendizaje, falta de habilidades <strong>social</strong>es, baja autoestima, pesimismo,<br />

procesos depresivos, débil estructura de motivaciones.<br />

Cuando se investiga el mundo de los sin hogar, tanto desde una perspectiva<br />

objetiva como subjetiva, siempre aparecen interrelacionados, con mayor o<br />

23


CAPÍTULO 1 MARCO TEÓRICO: MARGINACIÓN Y EXCLUSIÓN EN LAS<br />

CIUDADES CONTEMPORÁNEAS<br />

menor incidencia, varios de los factores que acabamos de sintetizar. Puede<br />

variar el factor más significativo en el desencadenamiento del proceso, pero<br />

paulatinamente se observan perfiles muy similares en los que confluyen<br />

idénticos factores. Algo comprensible por otro lado, si entendemos que los<br />

individuos débiles resultan más vulnerables a los diversos contratiempos<br />

personales y <strong>social</strong>es.<br />

En la investigación realizada en la ciudad de Madrid en 1996, Pedro J. Cabrera<br />

pregunta a los indigentes entrevistados por las causas principales que, según<br />

ellos mismos, les han llevado a la marginación en que se encuentran. Las<br />

causas más señaladas son: desempleo/paro (39%), problemas<br />

conyugales/separación (15 %), problemas familiares (12%), problemas con los<br />

padres (10 %), alcohol (7 %), falta de medios económicos (5 %), drogas (5 %),<br />

falta de apoyo/cariño (4 %) ... . . (Cabrera 1998:129) .<br />

El propio autor agrupa las causas señaladas por los afectados en torno a tres<br />

tipos de factores: los que aluden al funcionamiento del sistema económico y<br />

<strong>social</strong> (estructurales), los que se deben a la ruptura o pérdida de relaciones<br />

familiares y <strong>social</strong>es (socio-relacionales) y los que remiten a la posesión de<br />

algunas características individuales o la adopción de algunas pautas de<br />

conducta (individuales). De acuerdo con esta agrupación, los resultados<br />

obtenidos en la encuesta se distribuyen del siguiente modo: factores<br />

estructurales (52 %), factores socio-relacionales (48 %) y factores individuales<br />

(26 %).<br />

Obviamente, no puede entenderse de modo rígido esta u otras clasificaciones.<br />

Muchas de las deficiencias propias de los desarraigados hunden sus raíces en<br />

24


CAPÍTULO 1 MARCO TEÓRICO: MARGINACIÓN Y EXCLUSIÓN EN LAS<br />

CIUDADES CONTEMPORÁNEAS<br />

varios de esos factores (los problemas psíquicos pueden ser previos o<br />

posteriores al inicio de la exclusión, el alcoholismo puede explicarse en alguna<br />

medida a partir de un factor estructural o de una ruptura afectiva, etc.<br />

Podríamos describir múltiples situaciones en que diversos rasgos confluyen y<br />

se autoalimentan sin que resulte fácil establecer una clara secuencia de<br />

causalidad).<br />

En cualquier caso, y dadas las condiciones económicas y políticas actuales de<br />

los países de Europa occidental, lo que se viene observando es la configuración<br />

de tres zonas en el espacio <strong>social</strong> que forman un continuo y donde la<br />

pertenencia a una de ellas en un momento determinado no asegura que, por<br />

determinados condicionantes o circunstancias, no pueda pasarse a cualquiera<br />

de las otras.<br />

Tabla 1.2 Factores de marginación e inclusión<br />

Zona de marginación Zona de vulnerabilidad Zona de integración<br />

Trabajo estable<br />

Trabajo precario<br />

Exclusión laboral<br />

Aislamiento <strong>social</strong><br />

Relaciones inestables<br />

Relaciones sólidas<br />

Insignificancia <strong>vital</strong><br />

Convicciones frágiles<br />

Sentido <strong>vital</strong><br />

Fuente: Castel.R 1995<br />

25


CAPÍTULO 1 MARCO TEÓRICO: MARGINACIÓN Y EXCLUSIÓN EN LAS<br />

CIUDADES CONTEMPORÁNEAS<br />

Se trata del esquema elaborado por Robert Castel, autor de inevitable<br />

referencia para los investigadores interesados en los fenómenos de exclusión<br />

propios de las sociedades contemporáneas: .<br />

En la zona de integración o cohesión siguen funcionando los antiguos<br />

principios de cohesión <strong>social</strong>: el trabajo productivo como principio de inclusión<br />

económica, el consumo como principio de inclusión <strong>social</strong>, el sistema de<br />

protección pública como principio de inclusión política y las solidaridades<br />

familiares y ciertas identidades <strong>social</strong>es como principio de inclusión <strong>social</strong> y<br />

personal.<br />

Según vamos avanzando hacia zonas de vulnerabilidad, fragilidad y<br />

precariedad, se van quebrando uno o varios de estos principios hasta llegar a<br />

la zona de exclusión, donde se produce una pérdida del trabajo productivo<br />

como factor integrador, al haber desaparecido la condición salarial, tanto por<br />

las elevadas tasas de paro como por la precariedad del mercado de trabajo<br />

actual, una quiebra del consumo, derivada de la ausencia del trabajo<br />

productivo y también consecuencia de un sistema económico que propicia una<br />

distancia cada vez mayor entre quienes poseen y quienes simplemente no<br />

tienen, una quiebra del acceso a los sistemas de protección, en parte porque<br />

están ligados a la condición salarial, pero también por la crisis ideológica y<br />

práctica que han sufrido los sistemas de bienestar <strong>social</strong>, que se traduce en<br />

recortes en gastos <strong>social</strong>es y reducción de las prestaciones, y una quiebra en<br />

los vínculos familiares y en las identidades <strong>social</strong>es capaces de ot<strong>org</strong>ar sentido<br />

a la vida.<br />

26


CAPÍTULO 1 MARCO TEÓRICO: MARGINACIÓN Y EXCLUSIÓN EN LAS<br />

CIUDADES CONTEMPORÁNEAS<br />

Fiona Williams señala los tres cambios de foco de atención que implica el<br />

nuevo concepto de exclusión <strong>social</strong>: .<br />

*Pasa de centrarse en el ingreso y el gasto a centrarse en la<br />

multidimensionalidad.<br />

* Pasa de una visión estática de la pobreza como estado a un análisis<br />

dinámico de la exclusión como proceso.<br />

* Pasa de centrarse en el individuo a centrarse en la comunidad y, por<br />

tanto, de resaltar la intervención individual a señalar la importancia de<br />

las comunidades. (Williams 1998: 85)<br />

Esto hace posible crear indicadores de exclusión <strong>social</strong> que van más allá de los<br />

derechos económicos. Incluye derechos civiles, políticos y <strong>social</strong>es, y permite<br />

examinar los modos en los que la gente está excluida de los sistemas<br />

democráticos y legales, del mercado laboral (integración económica), del<br />

sistema de bienestar (integración <strong>social</strong>), de la familia y la comunidad<br />

(integración interpersonal).<br />

Como síntesis de las nuevas corrientes de análisis <strong>social</strong>, que han sido<br />

desglosadas en las páginas previas, cabe delimitar el perfil de los nuevos<br />

excluidos <strong>social</strong>es teniendo en cuenta los siguientes rasgos:<br />

27


CAPÍTULO 1 MARCO TEÓRICO: MARGINACIÓN Y EXCLUSIÓN EN LAS<br />

CIUDADES CONTEMPORÁNEAS<br />

Tabla 1.3 El perfil de la exclusión <strong>social</strong><br />

La exclusión es un proceso, que adopta diversas fases<br />

Implica carencia de todo tipo de recursos<br />

Limita la condición de ciudadano y el acceso a los recursos<br />

<strong>social</strong>es<br />

Psicológicamente suele suponer pérdida de identidad, escasa<br />

autoestima y desmotivación <strong>vital</strong>.<br />

Supone privación del ejercicio de derechos <strong>social</strong>es básicos<br />

Puede ser un estado permanente en la <strong>trayectoria</strong> <strong>vital</strong> de<br />

una persona.<br />

Fuente: Bruto da Costa, “¿Pauvreté ou exclusion?”. Service Social dans le Monde.<br />

1995. Reelaboración de Mª Rosario Sánchez Morales. 1999<br />

En definitiva, las actuales corrientes sociológicas abordan la realidad de la<br />

exclusión desde dos consideraciones previas: no se trata generalmente de un<br />

fenómeno puntual o aislado, sino de un proceso, recorrido que, a su vez, tiene<br />

un carácter multidimensional.<br />

28


CAPÍTULO 2: OBJETO Y CONTEXTO GENERAL DE LA INVESTIGACIÓN<br />

Capítulo 2: OBJETO Y CONTEXTO GENERAL DE LA INVESTIGACIÓN<br />

2.1 La investigación sobre personas sin hogar en España<br />

La tradición sociológica hunde sus raíces en la España del siglo XIX y, como<br />

resulta lógico, no es este el lugar para recorrer tan amplio panorama histórico.<br />

Quienes deseen conocer la evolución del pensamiento y la investigación<br />

sociológica aplicada en nuestro país, disponen de una excelente recopilación<br />

de ensayos. (Del Campo et al 2001)<br />

Remontándonos a fechas recientes, la apertura provocada por los Planes de<br />

Estabilización o Desarrollo, en torno a los años sesenta, propicia un renacer de<br />

los estudios sociológicos fuertemente influenciados por las corrientes<br />

funcionalistas vigentes en EEUU. Proliferan las investigaciones<br />

predominantemente cuantitativas orientadas a dos focos prioritarios de<br />

interés: análisis políticos sobre opiniones y tendencias de voto e investigación<br />

de mercados.<br />

En el caso que nos ocupa, nuestra investigación se incardina en una de las<br />

ramas de fuerte implantación desde los orígenes de la disciplina, impulsada<br />

por las grandes convulsiones <strong>social</strong>es propiciadas por la Revolución Industrial:<br />

los estudios sobre desigualdad, pobreza, marginación y exclusión. En España,<br />

finalizando el amplio periodo de autarquía, algunos <strong>org</strong>anismos de la Iglesia<br />

católica se convierten en pioneros de la reflexión y estudio sobre temas de<br />

interés económico y <strong>social</strong>. Posteriormente se irán uniendo con sus<br />

aportaciones los gabinetes de estudio de entidades gubernamentales, bancos<br />

y cajas, sindicatos y fundaciones con diversos orígenes y objetivos.<br />

29


CAPÍTULO 2: OBJETO Y CONTEXTO GENERAL DE LA INVESTIGACIÓN<br />

Las universidades católicas propician la reflexión y análisis de temas<br />

comprometidos de interés <strong>social</strong>: Deusto y los Centros Superiores de la<br />

Compañía de Jesús, el Instituto Social León XIII de la Universidad Pontificia de<br />

Salamanca, el Instituto Católico de Estudios Sociales de Barcelona, entre otros.<br />

El Plan CCB de Cáritas española (1961-1968):<br />

“Es el primer estudio sociológico global sobre la estructura y los procesos<br />

<strong>social</strong>es españoles. Supone un esfuerzo ingente de Cáritas española por<br />

analizar las necesidades y los problemas <strong>social</strong>es españoles que los años<br />

cincuenta y sesenta – y sobre todo el proceso acelerado de urbanizacióngeneran<br />

en el país” (De Miguel 1998:81).<br />

El Plan CCB constituye un estudio pionero en su especialidad: “Se trata de la<br />

primera investigación empírica de problemas <strong>social</strong>es de España tras la última<br />

guerra civil” (Casado 1999:24). El Informe FOESSA, publicado por la Fundación<br />

del mismo nombre, creada por Cáritas y CESA, se convierte desde sus inicios en<br />

un referente obligado de la investigación <strong>social</strong> en España. En sus entregas<br />

sucesivas colaboran buena parte de los sociólogos más relevantes de cada<br />

periodo de edición. Del primer informe, publicado en 1966, Jesús de Miguel<br />

dice que “supone la primera contribución al análisis global de la sociedad<br />

española y la más importante en la historia de España hasta finales de la<br />

década de los sesenta” (De Miguel 1999:191).<br />

Numerosos profesores e investigadores juegan un papel importante en ese<br />

periodo para la consolidación de los estudios sociológicos sobre la pobreza. De<br />

entre ellos, creemos que merecen una mención especial los múltiples trabajos<br />

de Demetrio Casado (1976-2005) desde su primera publicación (1976). Al igual<br />

30


CAPÍTULO 2: OBJETO Y CONTEXTO GENERAL DE LA INVESTIGACIÓN<br />

que las sucesivas aportaciones de Joaquín (Ximo) García Roca (1987-2005)<br />

desde su primera obra publicada (1987). Entre los gabinetes privados<br />

dedicados especialmente a las investigaciones sobre recursos <strong>social</strong>es,<br />

marginación, pobreza... merecen ser destacados el Equipo EDIS, de larga<br />

<strong>trayectoria</strong> vinculada a Cáritas en numerosas ocasiones y el Colectivo IOÉ, con<br />

especial dedicación a la investigación de la problemática de la población<br />

emigrante.<br />

La aportación de Cáritas al estudio empírico de la pobreza se concreta con la<br />

publicación en un número extraordinario de Documentación Social (nº 56-57.<br />

1984) de la investigación sobre “Pobreza y marginación”, realizada por el<br />

Equipo EDIS. En este trabajo, que tuvo una notable repercusión en su<br />

momento, se afirma que “alrededor de ocho millones de españoles se<br />

encuentran en una situación de pobreza, de los cuales aproximadamente la<br />

mitad, unos cuatro millones, se hallan en una situación de pobreza severa”<br />

(1984:12). Datos que, posteriormente, fueron revalidados con diversos matices<br />

en numerosas ocasiones y en diversos estudios de sociólogos y economistas.<br />

(no mencionamos los posteriores y múltiples trabajos sobre la pobreza porque<br />

no es el objeto central de nuestra investigación).<br />

El primer estudio específico sobre personas sin hogar del que tenemos noticia<br />

es publicado con el título de “Los transeúntes. Desarraigo y marginación<br />

<strong>social</strong>” (Revista Documentación Social. Nº 20. Cáritas. Equipo DIS. 1975). Ante<br />

la inexistencia de datos previos fiables los autores optan por una primera<br />

aproximación a los perfiles sociodemográficos y al contexto en que se<br />

desarrolla la vida de este colectivo. Se abordan las identidades básicas junto al<br />

nivel cultural, estados de salud, movilidad física, vinculación a la familia,<br />

31


CAPÍTULO 2: OBJETO Y CONTEXTO GENERAL DE LA INVESTIGACIÓN<br />

situación laboral y medios de subsistencia. Más de una década después,<br />

Cáritas publica un nuevo estudio que amplía y actualiza los datos de que se<br />

dispone hasta el momento. Se trata de “Los transeúntes en España” (Barroso<br />

1987). Paralelamente, los técnicos de Cáritas elaboran diversos materiales<br />

destinados especialmente al trabajo que desarrollan internamente con<br />

colaboradores voluntarios, pero que también contribuyen a consolidar los<br />

conocimientos sobre el diverso y complejo colectivo de las personas sin hogar.<br />

Es el caso del dossier sobre “Transeúntes y colectivos sin techo” (Cáritas 1993).<br />

En él se reúnen diversos ensayos elaborados por un significado número de<br />

expertos que reflexionan sobre el Observatorio Europeo de los sin techo<br />

(Feantsa), las causas del “transeuntismo” en España, la inserción <strong>social</strong>, el<br />

tratamiento psico-<strong>social</strong> y otros temas vinculados a la acción <strong>social</strong> concreta en<br />

diversas provincias españolas. En la misma línea, y en el año 1996, Cáritas<br />

recoge sus experiencias en el libro “Volver a ser. Modelo de intervención <strong>social</strong><br />

con transeúntes” (Cáritas 1996).<br />

Durante el breve plazo de poco más de cinco años se publican varios estudios<br />

que contribuirán a consolidar las investigaciones sobre las personas sin hogar y<br />

a aumentar la conciencia <strong>social</strong> respecto de un grupo de ciudadanos<br />

marginales y escasamente conocidos. Aparece editada la tesis doctoral de<br />

Pedro José Cabrera con el título de Huéspedes del aire. Sociología de las<br />

personas sin hogar en Madrid. (1998. UPCO). La investigación consta de tres<br />

apartados. Un minucioso y completo recorrido sobre la situación de los<br />

marginados sin hogar a lo largo de la historia de España. Una amplia revisión<br />

de las tradiciones de la teoría sociológica en el estudio de las personas sin<br />

hogar. Y, por último, una encuesta a personas que residen en albergues de la<br />

ciudad de Madrid. Una completa investigación en la que pueden señalarse dos<br />

32


CAPÍTULO 2: OBJETO Y CONTEXTO GENERAL DE LA INVESTIGACIÓN<br />

limitaciones: no aparece reflejada la problemática de las PSH que viven al<br />

margen de las instituciones y la muestra estadística tiene un pronunciado<br />

sesgo hacia los residentes en el Albergue de San Isidro, que de por sí reúne<br />

unas especiales características. El estudio se convierte en una investigación de<br />

obligada referencia. En 1999, la Fundación Sistema publica, en su colección<br />

“Informes y Documentos”, el texto titulado. La población “sin techo” en<br />

España: un caso extremo de exclusión <strong>social</strong>, del que es autora Mª del Rosario<br />

Sánchez Morales. Se parte de un marco para el análisis y una definición<br />

sociológica de este colectivo, para realizar, en múltiples capítulos, un<br />

minucioso recorrido por la problemática de las PSH: principales problemas,<br />

tipologías, prevención, rehabilitación, evolución de los recursos, tendencias de<br />

futuro. Es un estudio que complementa y enriquece las aportaciones de Pedro<br />

J. Cabrera. La misma autora publica un ensayo en la Revista del Ministerio de<br />

Trabajo y Asuntos Sociales (Nº 55, 2004), con el título de Los inmigrantes “sin<br />

hogar” en España: un caso extremo de exclusión <strong>social</strong>. Su principal aportación<br />

consiste en iniciar un camino de investigación respecto a los inmigrantes que,<br />

en situación de extrema penuria, han perdido opciones de trabajo y de<br />

residencia, acudiendo a los recursos que estaban diseñados para atender a los<br />

sin hogar autóctonos. A pesar de lo que enuncia el título del trabajo, la<br />

investigación se limita a la ciudad de Madrid, y a los inmigrantes que han<br />

acudido a solicitar algún tipo de recurso. En el año 2003 se publica Los límites<br />

de la exclusión, estudio coordinado por M. Muñoz y editado por Témpora. Se<br />

trata de una investigación psico-<strong>social</strong> de sólido planteamiento metodológico.<br />

Entre otros aspectos, contribuye a desmantelar algunos tópicos fuertemente<br />

arraigados. Entre ellos, explican y desmienten la creencia de que las personas<br />

con problemas mentales que viven en la calle procedan en su mayor parte del<br />

proceso de desinstitucionalización psiquiátrica que tuvo lugar en etapas<br />

33


CAPÍTULO 2: OBJETO Y CONTEXTO GENERAL DE LA INVESTIGACIÓN<br />

anteriores.<br />

A lo largo de estos años Cáritas continúa realizando y/o amparando estudios<br />

en las principales ciudades españolas, con el título genérico de Las personas sin<br />

hogar en ... o ·Las personas sin techo en .... Los objetivos y metodología de<br />

estos trabajos suelen ser muy similares. La Fundación RAIS crea una línea de<br />

publicaciones, bajo el patrocinio de la Obra Social Caja Madrid. Cabe destacar<br />

títulos como A ciegas. Milhistorias de la calle. Mónica Sánchez. 2003. Un<br />

despacho sin puertas. Trabajo de calle con personas sin hogar Diversos autores<br />

coordinados por J.M. Caballol. 2004. En dos. Un viaje a las fronteras. Mónica<br />

Sánchez. 2005.<br />

En 2005 el INE inicia sus Encuestas sobre personas sin hogar y sobre Centros y<br />

Recursos para personas sin hogar. La Encuesta sobre Centros para personas sin<br />

hogar fue actualizada en 2007. Son sólidas y fiables informaciones estadísticas<br />

de las que cabe esperar una regular continuidad. En 2006 se inician los<br />

recuentos anuales nocturnos de personas que se disponen a dormir en la calle<br />

en la ciudad de Madrid. Coordina el Foro Técnico Local de PSH, con la<br />

participación del Ayuntamiento, la Universidad, diversas entidades y<br />

voluntarios. En sucesivos años el recuento se extiende a las ciudades de<br />

Barcelona y Zaragoza.<br />

En 2006 la Fundación Assis presenta un informe sobre un análisis de contenido<br />

de prensa con el título Violencia directa, estructural y cultural contra las<br />

personas en situación de sin hogar en España. La reflexión teórica y aplicación<br />

de los diversos conceptos de violencia parecen de muy adecuada operatividad<br />

al ser aplicados a las situaciones que padecen las PSH. El colectivo enRed,<br />

34


CAPÍTULO 2: OBJETO Y CONTEXTO GENERAL DE LA INVESTIGACIÓN<br />

integrado por diversas entidades que trabajan con personas sin hogar, edita<br />

anualmente un análisis de contenido de prensa con el título Las personas sin<br />

hogar en la prensa escrita. El Informe correspondiente a 2006 es elaborado<br />

por Iñigo Arranz. Los correspondientes a 2007 y 2008 corresponden a Bárbara<br />

Contreras y Azahara Sánchez.<br />

En 2008, Miguel Rubio publica una obra de ficción con el título de Ahora que<br />

estamos muertos Ediciones Carena. El autor es sociólogo y trabajador <strong>social</strong>,<br />

conocedor durante diez años del mundo de las personas sin hogar. Al margen<br />

de la calidad literaria del texto, la obra supone una precisa reflexión<br />

sociológica. En 2008 lee su tesis doctoral, no publicada, Santiago Bachiller. La<br />

tesis es dirigida por Pilar Monreal y codirigida por Pedro J. Cabrera. Es leída en<br />

la Universidad Autónoma de Madrid, ante un tribunal presidido por Teresa del<br />

Valle, con el título de Exclusión <strong>social</strong>, desafiliación y usos del espacio. Una<br />

etnografía con personas sin hogar en Madrid. Se trata en efecto de una nueva<br />

perspectiva antropológica, en base a un trabajo de campo de tres años, en que<br />

se diseccionan los procesos que convierten a las personas sin hogar en seres<br />

sin territorio propio.<br />

2.2 Justificación y objetivos de la investigación<br />

Lejos de ser exhaustiva, la relación de estudios e investigaciones incluida en el<br />

anterior epígrafe nos permite, sin embargo, identificar las metodologías y<br />

técnicas predominantes. Respecto a ello destacaríamos dos aspectos, que a su<br />

vez han resultado útiles para orientar las coordenadas de nuestro trabajo. Por<br />

un lado, han proliferado claramente los estudios cuantitativos. Una parte<br />

significativa de las investigaciones se han centrado en identificar perfiles<br />

35


CAPÍTULO 2: OBJETO Y CONTEXTO GENERAL DE LA INVESTIGACIÓN<br />

sociodemográficos, en detectar necesidades y evaluar los recursos existentes.<br />

Por otro lado, la investigación cualitativa, especialmente por medio de<br />

entrevistas en profundidad, se ha centrado en las PSH que residen<br />

habitualmente en albergues, lo que evita la obtención de información sobre las<br />

personas sin hogar que suele sobrevivir al margen de las instituciones, o con<br />

escaso acceso a ellas.<br />

Hechas las anteriores consideraciones, cabe señalar que el objetivo básico<br />

propuesto en nuestra investigación es lograr una aproximación a los sucesos<br />

<strong>vital</strong>es, a las <strong>trayectoria</strong>s de las personas sin hogar en España. Se trataría, por<br />

tanto, de configurar una reconstrucción de los procesos personales, basada en<br />

las aportaciones de los múltiples rostros de la indigencia, asentada en la<br />

percepción subjetiva de los propios sujetos, en la experiencia de los<br />

profesionales, en la valoración de los ciudadanos y en la imagen que difunden<br />

y reflejan los medios de comunicación. Todo ello sistematizado y analizado<br />

desde la perspectiva externa del investigador que se propone comprender y<br />

explicar el contexto <strong>social</strong> y las circunstancias personales que culminan en la<br />

indefensión asociada a la ausencia de un techo. Se trata, por tanto, de la<br />

búsqueda de una mirada plural, basada en la triangulación metodológica y<br />

alimentada desde diferentes perspectivas.<br />

Operativamente, el objetivo principal y los secundarios pueden ser descritos<br />

del siguiente modo:<br />

36


CAPÍTULO 2: OBJETO Y CONTEXTO GENERAL DE LA INVESTIGACIÓN<br />

Tabla 2.1. Objetivo básico de la investigación<br />

Identificar los contextos y procesos que afectan a la experiencia <strong>vital</strong> de las<br />

personas sin hogar:<br />

Circunstancias que propician el proceso de exclusión<br />

Condiciones y vivencias de la estancia en la calle<br />

Expectativas factibles de reinserción <strong>social</strong>.<br />

Tabla 2.2. Objetivos secundarios<br />

Enmarcar la situación de las personas sin hogar en el contexto de<br />

las marginaciones urbanas.<br />

Analizar la imagen de las personas sin hogar que los medios de<br />

comunicación proyectan y difunden.<br />

Valorar las opiniones y actitudes de los ciudadanos ante los<br />

indigentes urbanos.<br />

Sistematizar los diagnósticos y valoraciones de los expertos.<br />

Propiciar espacios y situaciones de expresión a las propias personas<br />

sin hogar<br />

37


CAPÍTULO 2: OBJETO Y CONTEXTO GENERAL DE LA INVESTIGACIÓN<br />

2.3 Presentación de hipótesis<br />

La consulta previa de fuentes secundarias y la reflexión sobre los resultados<br />

aportados por diversas investigaciones, cuantitativas y cualitativas, derivan en<br />

el planteamiento de diversas hipótesis que, al igual que los objetivos, remiten<br />

a los cuatro actores centrales de la investigación:<br />

Tabla 2.1. Hipótesis<br />

La prensa diaria tiende a reflejar una imagen que ignora la<br />

cotidianeidad, las expectativas y, en muchos casos, el protagonismo<br />

de las propias PSH. Con ello tiende a reproducir indefinidamente<br />

tópicos y estereotipos sólidamente asentados.<br />

Los habitantes de la ciudad asimilan desde la distancia a las PSH<br />

como parte del escenario urbano, más cerca del personaje que del<br />

sujeto y, más o menos conscientemente, tienden a reproducir los<br />

tópicos divulgados por los medios de comunicación.<br />

Los profesionales tienden a ser extremadamente cautos a la hora<br />

de emitir opiniones o realizar valoraciones sobre el presente y las<br />

potencialidades de futuro de las PSH.<br />

La condición de persona sin hogar es el resultado de procesos<br />

socio-ambientales en mayor medida que de posibles tendencias<br />

personales/individuales. Debido a ello, el desarrollo de una<br />

38


CAPÍTULO 2: OBJETO Y CONTEXTO GENERAL DE LA INVESTIGACIÓN<br />

actividad laboral y, como consecuencia, el acceso a un techo propio,<br />

son condiciones necesarias pero no determinantes en el proceso de<br />

reinserción <strong>social</strong>.<br />

2.4 Planteamiento metodológico<br />

Para realizar nuestra investigación hemos buscado expresamente aplicar la<br />

triangulación entre métodos, en busca de una nueva perspectiva en relación<br />

con la línea habitual en los estudios sociológicos sobre PSH. Esta opción<br />

metodológica consiste en “la combinación de métodos de investigación (no<br />

similares) en la medición de una misma unidad de análisis. Con ello se<br />

pretende paliar las limitaciones de cada método, contrarrestándolas con las<br />

potencialidades de los otros métodos” . (Cea D,Ancona 2001: 65)<br />

En la tabla adjunta se indican los métodos utilizados. (Los detalles más<br />

específicos se incluyen en los anexos correspondientes):<br />

39


CAPÍTULO 2: OBJETO Y CONTEXTO GENERAL DE LA INVESTIGACIÓN<br />

Tabla 2.2. Métodos y técnicas utilizados<br />

Cap.1/ 2<br />

Contexto de la exclusión:<br />

Marco teórico/Objetivos/Hipótesis<br />

*Fuentes<br />

secundarias<br />

Cap. 3<br />

<strong>Imagen</strong> en medios de comunicación<br />

(Trabajo de campo:<br />

Seis meses/seis periódicos diarios/<br />

503 unidades informativas<br />

obtenidas y analizadas)<br />

* Análisis de<br />

contenido de<br />

prensa<br />

Cap. 4<br />

Opinión/Vivencias de los ciudadanos<br />

(803 encuestas realizadas a<br />

residentes en las diez principales<br />

ciudades españolas, aplicando cuotas de<br />

sexo y edad)<br />

* Encuesta por<br />

muestra<br />

representativa<br />

Cap. 5<br />

Diagnóstico profesionales y expertos<br />

(6 entrevistas en profundidad)<br />

* Entrevistas<br />

abiertas en<br />

profundidad<br />

Autovaloración PSH<br />

(6 entrevistas en profundidad/<br />

1 grupo de discusión)<br />

* Grupo discusión<br />

/Entrevistas<br />

abiertas en<br />

profundidad<br />

40


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Capítulo 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

3.1 El análisis de contenido de prensa<br />

El análisis de contenido parte del principio de que examinando textos es<br />

posible conocer no solo su significado, sino también información respecto a su<br />

modo de producción. Es decir, aborda los textos no solo como signos dotados<br />

de un significado conocido por su emisor, sino como indicios que hablan sobre<br />

ese mismo emisor o, generalizando, indicadores sobre el modo de producción<br />

de un texto. . (Abela A. 2004 ; Piñuel J. 2002)<br />

Como una evolución del análisis de contenido surgió el análisis semántico o del<br />

discurso. El análisis de contenido tiende a utilizar técnicas cuantitativas y el<br />

análisis semántico acude a técnicas cualitativas. En la investigación sobre la<br />

imagen de las personas sin hogar en la prensa, que desarrollamos en las<br />

próximas páginas, hemos intentado expresamente combinar, de la manera<br />

más productiva posible, ambas dimensiones del análisis.<br />

Uno de los precursores del análisis de contenido es el francés B. Bourbon<br />

(1892) quien, buscando enriquecer un trabajo sobre la expresión de las<br />

emociones y de las tendencias en el lenguaje, investigó un pasaje de la Biblia,<br />

El Éxodo, de manera relativamente rigurosa, haciendo una preparación<br />

elemental del texto y elaborando una clasificación de palabras.<br />

Loebel (1903) publicó un detallado esquema clasificatorio para el análisis de la<br />

“estructura interna o de contenido” de las funciones <strong>social</strong>es de los periódicos.<br />

41


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Aunque la propuesta tuvo aceptación en ciertos círculos periodísticos no<br />

consiguió estimular ninguna investigación empírica.<br />

Max Weber, en 1910, en la primera reunión de la Sociedad Alemana de<br />

Sociología, propuso llevar a cabo un amplio análisis de contenido de los medios<br />

de prensa, pero el estudio propuesto no llegó a concretarse.<br />

En 1912 Markov trabaja en una teoría sobre las cadenas de símbolos y publica<br />

un análisis estadístico de una muestra extraída de la novela en versos de<br />

Pushkin, Eugenio Onegin.<br />

Entre 1908-1918 Thomas y Znaniecki emprendieron un vasto estudio<br />

sociológico concerniente a la integración de los emigrantes polacos en Europa<br />

y América -El campesino polaco en Europa y América (1918-1921)-. Utilizaron<br />

una técnica elemental de análisis de contenido – más bien una sistematización<br />

de una lectura normal –con material compuesto por diversos documentos<br />

(cartas, diarios íntimos y también informes oficiales y artículos de periódicos).<br />

Quizás uno de los primeros autores que aporta algo más a las mediciones de<br />

prensa es H. Lasswell quien, además de realizar análisis de contenido,<br />

sistematiza los análisis de propaganda desde 1915. En 1927 aparece su obra<br />

más significativa Propaganda technique in the World War que impulsará<br />

numerosos estudios sobre este tema a partir de los años cuarenta,<br />

fundamentalmente después de la Segunda Guerra Mundial. Durante la<br />

Segunda Guerra Mundial se reunieron una serie de investigadores<br />

pertenecientes a la American Federal Communication Commissión (FCC) en el<br />

Foreing Broadcast Intelligence Service para espiar las emisiones radiofónicas<br />

42


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

del enemigo intentando comprender los sucesos que tenían lugar en el interior<br />

de la Alemania nazi.<br />

Durante los años de guerra, el gobierno americano convocó a los analistas para<br />

desenmascarar a los diarios y revistas sospechosos de propaganda subversiva<br />

–especialmente nazi-. Los métodos empleados para este objetivo fueron:<br />

localización de los temas favorables al enemigo, comparación de estos temas<br />

con las publicaciones sospechosas y las patrióticas, y análisis lexicológico a<br />

partir de una lista de palabras consideradas claves de la política y de la<br />

propaganda nazis.<br />

El final de los años 40 y 50 está marcado fundamentalmente por las reglas de<br />

análisis expuestas por B. Berelson, ayudado por F. Lazarfeld, que indican la<br />

inquietud de trabajar con muestras reunidas de forma sistemática, por<br />

interrogarse sobre la validez del procedimiento y de los resultados, por<br />

verificar la fidelidad de los codificadores, e incluso por medir la productividad<br />

del análisis. . (Berelson, Lazaferd y Gaudet 1962)<br />

En síntesis, varios hitos en la evolución del análisis de contenido permiten<br />

comprender su desarrollo en el ámbito sociológico. Son los siguientes periodos<br />

de la investigación, reproducidos por López Aranguren (y recogidos en Piñuel y<br />

Gaitán, 1995):<br />

1.- Décadas de 1920 y 1930. Análisis sobre el concepto de “estereotipo<br />

<strong>social</strong>” sugerido por Lippmann (1922) y sobre el concepto de “actitud”,<br />

de reciente aparición en psicología.<br />

43


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

2.- Segunda Guerra Mundial. Análisis de Lasswell y colaboradores,<br />

sistematizados más tarde por Ge<strong>org</strong>e (1959): conceptualización de<br />

objetivos y procesos de comunicación.<br />

3.- Décadas de 1950 y 1960. Codificación manual. Obras de Pool<br />

(1959), Lasswell et al. (1965) y Holsti (1969).<br />

4.- Aplicación de la informática, codificación electrónica automatizada,<br />

a partir de la obra de Stone y colaboradores (1966) sobre el sistema<br />

General Inquirer para el análisis de contenido de mensajes por medio<br />

de ordenador. (Ver García Ferrando, M., Ibáñez, J. y Alvira, F., 1986).<br />

Tiende a denominarse como análisis de contenido al conjunto de<br />

procedimientos interpretativos de productos comunicativos (mensajes, textos<br />

o discursos) que proceden de procesos singulares de comunicación<br />

previamente registrados y que, basados en técnicas de medida, a veces<br />

cuantitativas (estadísticas basadas en el recuento de unidades), a veces<br />

cualitativas (lógicas basadas en la combinación de categorías), tienen por<br />

objeto elaborar y procesar datos relevantes sobre las condiciones mismas en<br />

que se han producido aquellos textos, o sobre las condiciones que puedan<br />

darse para su empleo posterior. El análisis de contenido, de hecho, se convirtió<br />

a finales del siglo XX en una de las técnicas de uso más frecuente en muchas<br />

ciencias <strong>social</strong>es.<br />

El análisis de contenido se basa en la lectura (textual o visual) como<br />

instrumento de recogida de información, lectura que a diferencia de la lectura<br />

común debe realizarse siguiendo el método científico, es decir, debe ser,<br />

44


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

sistemática, objetiva, replicable y válida. En ese sentido es semejante en su<br />

problemática y metodología, salvo algunas características específicas, al de<br />

cualquier otra técnica de recolección de datos de investigación <strong>social</strong>,<br />

observación, experimento, encuestas, entrevistas, etc. No obstante, lo<br />

característico del análisis de contenido y lo que le distingue de otras técnicas<br />

de investigación sociológica es que se trata de una técnica que combina<br />

intrínsecamente, y de ahí su complejidad, la observación y producción de los<br />

datos y la interpretación o análisis de los datos.<br />

Todo contenido de un texto o una imagen puede ser interpretado de una<br />

forma directa y manifiesta o con criterios de búsqueda de su sentido latente.<br />

Por tanto, se puede percibir de un texto o una imagen el contenido manifiesto,<br />

obvio, directo, que es representación y expresión del sentido que el autor<br />

pretende comunicar. Se puede, además, percibir un texto latente indirecto que<br />

se sirve del texto manifiesto como de un instrumento, para expresar el sentido<br />

oculto que el autor tal vez no pretende transmitir.<br />

Tanto los datos expresos (lo que el autor dice) como los latentes (lo que dice<br />

sin pretenderlo) cobran sentido y pueden ser captados dentro de un contexto.<br />

El contexto es un marco de referencias que contiene toda aquella información<br />

que el lector puede conocer de antemano o inferir a partir del texto mismo<br />

para captar el contenido y el significado de todo lo que se dice en el texto.<br />

Texto y contexto son dos aspectos fundamentales en el análisis de contenido.<br />

Resulta inevitable mencionar brevemente algunas de las definiciones del<br />

análisis de contenido que se han convertido en ineludible referencia. Berelson<br />

(1952:18) sostiene que el análisis de contenido es “una técnica de<br />

45


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

investigación para la descripción objetiva, sistemática y cuantitativa del<br />

contenido manifiesto de la comunicación”. Según esta definición el análisis de<br />

contenido ha de someterse a ciertas reglas. La “objetividad” se refiere al<br />

empleo de procedimientos que puedan ser utilizados por otros investigadores<br />

de modo que los resultados obtenidos sean susceptibles de verificación. La<br />

“sistematización” hace referencia a pautas ordenadas que abarquen el total<br />

del contenido observado. En realidad, estos dos elementos, como indica<br />

Krippendorff (1990) confluyen en el requisito de “reproductividad” de todo<br />

instrumento de investigación científica, es decir, que las reglas que lo<br />

gobiernen sean explícitas (objetivas) y aplicables a todas las unidades de<br />

análisis (sistemáticas).<br />

Los otros dos elementos de la definición de Berelson “cuantificable” y<br />

“manifiesto” han sido ampliamente discutidos por ser notablemente<br />

restrictivos. La “cuantificación” pide que se pueda cifrar numéricamente la<br />

información –codificación – para obtener el recuento de las unidades e<br />

indicadores de los fenómenos que estamos interesados en mostrar. No<br />

obstante, aunque la cuantificación ha sido y es importante en la aplicación de<br />

técnicas de análisis de contenido, hoy la mayor parte de los investigadores<br />

<strong>social</strong>es reconoce que, además de mostrarse, los hechos han de ser<br />

interpretados. Por último, Berelson incorpora a su definición el atributo de que<br />

el contenido sea “manifiesto” simplemente para asegurar que la codificación<br />

de los datos en el análisis de contenido sea intersubjetivamente verificable y<br />

fiable. Esto deja fuera el contenido “latente” de los datos, pieza importante en<br />

un conocimiento profundo de ellos.<br />

46


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Hostil y Stone (1969:5) abogan por una definición que aporta varios aspectos<br />

muy importantes respecto a la realizada por Berelson. “El análisis de contenido<br />

es una técnica de investigación para formular inferencias identificando de<br />

manera sistemática y objetiva ciertas características específicas dentro de un<br />

texto”. Desaparecen por tanto los requisitos de que los análisis de contenido<br />

sean “cuantitativos” y “manifiestos” admitiéndose de esta manera la<br />

posibilidad de que dichos análisis puedan ser “cualitativos” haciendo<br />

referencia al contenido “latente” de los textos. Además se añade un nuevo<br />

elemento muy importante: la inferencia. El propósito fundamental del análisis<br />

de contenido es realizar “inferencias”. Inferencias que se refieren<br />

fundamentalmente a la comunicación simbólica o mensaje de los datos que<br />

tratan, en general, de fenómenos distintos de aquellos que son directamente<br />

observables.<br />

En ese último sentido Krippendorff (1990:28) define el análisis de contenido<br />

como “una técnica de investigación destinada a formular, a partir de ciertos<br />

datos, inferencias reproducibles y válidas que puedan aplicarse a su contexto”.<br />

El elemento que añade esta definición es el “contexto” como marco de<br />

referencias donde se desarrollan los mensajes y los significados. Con lo cual<br />

cualquier análisis de contenido debe realizarse en relación con el contexto de<br />

los datos y justificarse en función de este.<br />

En definitiva, el investigador <strong>social</strong> puede reconocer el significado de un acto<br />

situándolo dentro del contexto <strong>social</strong> de la situación en la que ocurrió. Quizás<br />

la definición de Laurence Bardin (1996:32) puede englobar todas las<br />

definiciones vistas hasta ahora, conceptualizando el término “análisis de<br />

contenido” como “el conjunto de técnicas de análisis de las comunicaciones<br />

47


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

tendentes a obtener indicadores (cuantitativos o no) por procedimientos<br />

sistemáticos y objetivos de descripción del contenido de los mensajes<br />

permitiendo la inferencia de conocimientos relativos a las condiciones de<br />

producción/recepción (contexto <strong>social</strong>) de estos mensajes”. . (Bardin 1996).<br />

Como señala Bardin, el análisis de contenido se convierte en una empresa de<br />

des-ocultación o re-velación de la expresión, donde ante todo interesa indagar<br />

sobre lo escondido, lo latente, lo no aparente, lo potencial, lo inédito (lo no<br />

dicho) de todo mensaje.<br />

El análisis de contenido, por sus características de técnica desarrollada desde<br />

los inicios de las investigaciones sobre comunicación, se ha convertido, casi<br />

con exclusividad, en la forma de determinar la influencia que los medios de<br />

comunicación de masas ejercen sobre la conducta humana y, recurriendo a las<br />

definiciones de autores clásicos, a la forma de medir la influencia de la prensa,<br />

puesto que este medio es el que más se presta a ser investigado (su<br />

información viene en un soporte escrito, lo que permite un análisis sin<br />

necesidad de realizar una transcripción previa del material, es un medio que<br />

llega a millones de personas, y quizá, por último, posea un lugar privilegiado<br />

entre los investigadores que se interesan por la influencia y el cambio de la<br />

conducta humana).<br />

Analizar el contenido de un material es algo que realizamos todos, sin recurrir,<br />

por regla general, a ningún tipo de técnica específica. En concreto, con<br />

materiales escritos, lo normal es que, tras una lectura detallada de ellos, cada<br />

uno trate de entresacar una serie de ideas, o de “vislumbrar” una serie de<br />

conceptos, que no están explícitos como tales en el texto, sino que se obtienen<br />

tras un proceso de abstracción y de elaboración. A veces dicho proceso no es<br />

48


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

sino de “baja inferencia”, y nos limitamos a afirmar que existe un predominio<br />

de las frases cortas en la expresión, o que los temas 'preferidos' por un<br />

articulista determinado son los políticos, o que en tales anuncios de un<br />

producto dado predominan los tonos cálidos.<br />

No obstante, el problema se plantea cuando la labor de analizar contenidos y<br />

extraer información partiendo del material recogido en un soporte específico<br />

debe ser realizada científicamente, es decir, mediante procedimientos fiables,<br />

válidos, y derivados de un cúmulo de nociones teóricas determinadas.<br />

En general, las definiciones del análisis de contenido pueden ser múltiples,<br />

destacándose fundamentalmente tres grandes tipos (Clemente y Santalla,<br />

1990):<br />

1) Las que realizan un énfasis en los aspectos metodológicos de la<br />

técnica, generalmente en lo que se refiere a la objetividad, a la<br />

codificación y a la cuantificación.<br />

2) Las que se centran en el origen de la técnica y en sus habituales<br />

aplicaciones, enfatizándose que es una técnica que permite el análisis<br />

de los mensajes de los medios de comunicación de masas.<br />

3) Las que, conscientes de que con ella se descubren ideologías,<br />

valores y datos que permiten evaluar posibles efectos persuasivos en<br />

la audiencia, y cambios de opinión y de actitudes, enfatizan que es una<br />

técnica que permite el análisis de los discursos políticos.<br />

49


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

A manera de resumen, por tanto, se define el análisis de contenido<br />

como(Clemente y Santalla, 1990):<br />

“Una técnica de recogida de información, que debe reunir todos los requisitos<br />

científicos necesarios como técnicas de medida, más los que se refieren a un<br />

sistema de creación de categorías que, empleado dentro del esquema general<br />

de una investigación, obtiene información numérica y cuantificable a través<br />

del contenido manifiesto de un documento, con lo que permite 'descubrir'<br />

aspectos del mismo que no figuran en él de manera directa y que es de gran<br />

ayuda para el estudio de todos aquellos procesos en los que está implícita la<br />

influencia <strong>social</strong>”.<br />

Señalemos, por último, que un análisis de contenido ha de incluir,<br />

necesariamente, los siguientes pasos:<br />

a) selección de la información que queremos analizar<br />

b) selección de las categorías que se utilizarán<br />

c) selección de las unidades de análisis, y<br />

d) selección del sistema de recuento o de medida<br />

3.2 Los medios como orientadores de opinión pública<br />

Los efectos de los medios de comunicación en la sociedad han sido estudiados<br />

bajo diferentes marcos teóricos. Mauro Wolf señala los siguientes mecanismos<br />

de influencia(1994:78):<br />

50


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

a) la dependencia de la sociedad respecto a los medios como sistema<br />

de información sobre cualquier ámbito<br />

b) el efecto de los medios en el establecimiento de la agenda pública, o<br />

la lista de temas que son prioritarios para una determinada sociedad<br />

en un momento concreto<br />

c) la influencia en las representaciones <strong>social</strong>es de la realidad (p. ej.,<br />

con la recreación de ciertos estereotipos y roles <strong>social</strong>es), y<br />

d) los efectos sobre la creación de la “opinión pública”, al difundir, por<br />

una parte, determinadas opiniones y, por otra, por ser uno de los<br />

sistemas utilizados individualmente a la hora de percibir cuál es la<br />

opinión de la mayoría.<br />

Por su parte, Berger y Luckmann sostienen que los medios de comunicación<br />

producen una mediación cultural que influye en la imagen de la realidad que<br />

asimilan los receptores. Esto sucede porque existe una distancia entre la<br />

realidad “real” y la realidad “re-presentada” por los medios de difusión masiva.<br />

Instituciones fuertes en la producción de sentido, como los medios, son<br />

considerados por los ciudadanos como trasmisores de una realidad objetiva de<br />

similares características a las del mundo “real”. . (Berger, Luckmann 1986)<br />

Si la realidad se construye <strong>social</strong>mente, de acuerdo con los autores citados, el<br />

conocimiento que los medios producen y difunden no deja de ser una<br />

elaboración cultural, sometida a múltiples mediaciones. El grado de<br />

legitimación de ese conocimiento, para la gran mayoría de ciudadanos, viene<br />

51


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

dado por la naturaleza de la institución que lo difunde. Los medios son una de<br />

las instituciones que proporcionan definiciones “oficiales” de la realidad, junto<br />

con el sistema educativo y el sistema legal/judicial.<br />

Además de decirnos cómo es la realidad (sobre qué debemos pensar), las<br />

instituciones nos trasladan pautas de comportamiento (cómo debemos<br />

pensar), que se repiten y encuentran eco en los ámbitos más diversos, sin que<br />

el ciudadano perciba la permanente redundancia.<br />

Enlazamos en este punto con la teoría de la Agenda-setting (McCombs & Evatt:<br />

1995). Estos autores postulan que los medios de comunicación de masas<br />

tienen una gran influencia sobre el público al determinar qué historias poseen<br />

interés informativo y qué espacio e importancia se les da. El punto central de<br />

esta teoría es la capacidad de los medios para graduar la importancia de la<br />

información que se va a difundir, dándole un orden de prioridad para obtener<br />

mayor audiencia, mayor impacto y una determinada conciencia sobre la<br />

noticia. Del mismo modo, deciden qué temas excluir de la agenda.<br />

Pero el papel <strong>social</strong> de los medios de comunicación como institución de<br />

referencia se comprende especialmente si recordamos que el periodismo<br />

actual se desarrolla y consolida históricamente en su vinculación, de manera<br />

muy estrecha, al nacimiento del moderno Estado democrático de masas. A<br />

finales del siglo XIX nace un tipo de prensa nacional y diaria que va<br />

configurando el modelo de la que se ha denominado como “prensa de<br />

referencia dominante” (Vidal-Beneyto:1986). Su función dentro del sistema<br />

52


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

político-<strong>social</strong> es fundamental como instrumento de integración <strong>social</strong>, por<br />

una parte, y como mecanismo de legitimación de la acción estatal, por otra.<br />

El papel central que la acción de las instituciones estatales tiene en las páginas<br />

de los diarios se explica a partir de estos supuestos. Los medios de referencia<br />

dominante no sólo publicitan sino que también controlan normativamente la<br />

acción institucional: dan cuenta de ésta y enmarcan los cauces por donde debe<br />

circular (reforzando su legitimidad). Por otra parte, este tipo de diarios ejerce<br />

como pieza fundamental de integración <strong>social</strong> a través de su papel<br />

conformador de una opinión pública integradora y uniformadora. Lo no<br />

integrado tenderá a ser tachado bajo el rótulo de a<strong>social</strong>, poniendo de<br />

manifiesto su peligrosidad en la esfera de la convivencia colectiva.<br />

Actualmente, en todos los diarios de difusión nacional puede encontrarse ese<br />

rasgo que los sitúa en el campo de actividad del Estado, como portavoces del<br />

orden político establecido, definiendo y acotando el espacio de la realidad<br />

pública. Aunque, como cumplen una cierta función mediadora entre Estado y<br />

sociedad, es posible percibir, en los diversos medios y en diversos grados, un<br />

discurso más o menos cercano a lo <strong>social</strong>.<br />

En todo caso, la tendencia de los medios a uniformar la opinión y neutralizar o<br />

negar la disidencia permite entender postulados como el de la Espiral del<br />

silencio, enunciado por Elisabeth Noelle-Neumann. . (1995). Según esta autora,<br />

es menos probable que un individuo se atreva a expresar su opinión sobre un<br />

determinado tema entre un grupo de personas si siente que es parte de la<br />

minoría, por miedo a la represión o aislamiento por parte de la mayoría. De<br />

este modo, la ortodoxia en cuanto a ideas, valores y modos de actuación<br />

53


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

<strong>social</strong>, custodiada y divulgada por los medios, termina siendo refrendada por<br />

los propios ciudadanos, temerosos de la marginación a que pueden verse<br />

sometidos por su entorno. Solamente los revolucionarios o visionarios,<br />

consecuentes con su proceder disidente, serán capaces de mantener<br />

posiciones distantes de las <strong>social</strong>mente aceptadas, asumiendo los costes<br />

derivados de no aceptar la espiral del silencio.<br />

El papel cohesionador y unificador de los medios, al que venimos<br />

refiriéndonos, explicaría en parte el creciente interés investigador sobre la<br />

representación mediática de las minorías. Van Dijk (1997) sostiene que los<br />

inmigrantes, refugiados, minorías étnicas y otras poblaciones marginales son<br />

asociados cada vez más en los medios de comunicación con las amenazas<br />

socioeconómicas y culturales, con la desviación, la delincuencia y la violencia. .<br />

De este modo, los medios fomentarían la creación de una especie de<br />

“correlación ilusoria”, al asociar a las minorías étnicas con acontecimientos de<br />

carácter negativo, a través de una estrategia discursiva establecida en tres<br />

etapas:<br />

(a) se realiza una polarización general entre “nosotros” y “ellos”<br />

(b) se mantiene una predilección por una variedad de “problemas” de<br />

los cuales son acusados los inmigrantes (culpabilización de la víctima)<br />

y, finalmente,<br />

(c) los medios toman preferencia por un pequeño conjunto de temas<br />

negativos (planteando la inmigración como invasión, ataque o<br />

54


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

amenaza y asociándola a violencia, terrorismo y/o desintegración<br />

<strong>social</strong>). Todo lo cual puede derivar en la creación y/o mantenimiento<br />

de determinados estereotipos y prejuicios sobre los inmigrantes.<br />

Si bien Van Dijk analiza de manera más específica la problemática de los<br />

inmigrantes y su reflejo en los medios de comunicación, parece razonable<br />

extrapolar sus reflexiones a la imagen que los medios proyectan sobre otras<br />

minorías, como las PSH, que son objeto de la presente investigación.<br />

Por todo lo señalado hasta el momento, es inevitable concluir que los medios<br />

de comunicación ocupan un lugar privilegiado en la construcción de imágenes<br />

<strong>social</strong>es. Su trabajo consiste no sólo en “transmitir” información, sino que en<br />

cierta medida “crean” realidad porque intervienen en su “legibilidad” y, de<br />

esta manera, contribuyen a la formación de “opinión pública”. Hablar de<br />

“opinión” es nombrar, de forma indirecta, actitudes, valores,<br />

representaciones, y también estereotipos, lugares comunes, vínculos de<br />

significación relativamente estables. Los medios de comunicación no<br />

transmiten de forma neutra -no reflejan- la realidad <strong>social</strong>, sino que la<br />

construyen. Y ayudan, en la medida en que tienen poder de representar y de<br />

difundir sus representaciones, al establecimiento de imágenes <strong>social</strong>es; por lo<br />

tanto también de estereotipos. Como de forma precisa advirtió el sociólogo<br />

Jesús Ibáñez (1985), el significante información comprende dos significados<br />

diversos pero inseparables: “dar noticia de“ y “dar forma a”.<br />

Revisar el trabajo de los medios aproxima a parcelas del extenso territorio de<br />

la comunicación de masas ya que su comportamiento, como el de cualquier<br />

otro agente <strong>social</strong>, habla de la sociedad y sus contextos: del mundo, de la<br />

55


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

cultura, en que se manifiesta y actúa. Hay que advertir, sin embargo, que todo<br />

acto de comunicación nombra un dúctil proceso, antes que un rígido dato, en<br />

el que la elaboración de sentido va acompañada de sus potenciales<br />

transformaciones. El discurso no es, en este sentido, un producto acabado,<br />

sino un momento de un proceso de elaboración. Por ello se hace posible<br />

intervenir en ese engranaje de significación, desde nuestra propia condición de<br />

sujetos en proceso.<br />

El poder de un emisor se acrecienta cuando disminuye el acceso del receptor a<br />

otras fuentes alternativas. Las posibilidades de percepción directa de los<br />

acontecimientos se encuentran limitadas espacial y temporalmente para<br />

cualquier persona; sin embargo, por medio de las noticias, las opiniones, los<br />

datos, las imágenes que producen, mantienen la ilusión de captación creciente de<br />

realidades ajenas. Cuanto más alejado está el acontecimiento de nuestro mundo<br />

vivencial inmediato, en mayor medida depende su difusión de un mediador<br />

transmisor-constructor de la información.<br />

Por otra parte, no debe olvidarse que el mismo poder unificador de los medios<br />

puede también devenir en un importante instrumento con potencial<br />

transformador (del mismo modo que tienen recursos para gestar estereotipos<br />

negativos, pueden usar su influencia para rescatar del olvido a las minorías y<br />

difundir sus deficientes condiciones de vida). Sin embargo, no hay que olvidar<br />

que, como toda empresa de producción, -en su caso producción de<br />

información- los medios se encuentran asimismo mediatizados: demandas de<br />

clientes o promotores, estrategias de competencia en el mercado, exigencias<br />

derivadas de la búsqueda de beneficios... son elementos implicados en la<br />

conformación del resultado comunicativo final. Hay que añadir a estos<br />

56


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

condicionantes las propias posiciones ideológicas de empresas y profesionales.<br />

También hay que considerar el peso de las dinámicas de trabajo, rutinas,<br />

modas, acontecimientos noticiables ... y otros elementos extra-textuales,<br />

como la transmisión de ecos y la formación de agendas con frecuencia<br />

programadas lejos de las tareas de campo del periodismo.<br />

La imagen de las personas sin hogar<br />

Una vez situados ante las múltiples evidencias de que los medios de<br />

comunicación intervienen en la construcción de la noticia, que existe un<br />

proceso de mediación entre el acontecimiento y su transmisión informativa, se<br />

deriva la conveniencia de iniciar un proceso de reflexión en torno a sus<br />

mensajes. El objetivo de nuestro proyecto, al aplicar esta técnica, es analizar<br />

claves de configuración de imagen y sentido en torno a las situaciones de las<br />

personas sin hogar, partiendo de la constatación de la influencia de los medios<br />

-en este caso, la prensa digital- en la formación de opiniones, actitudes y<br />

valores. La cristalización <strong>social</strong> de ciertos estereotipos vinculados al concepto<br />

de persona sin hogar incide en la vida cotidiana de quienes se encuentran en<br />

esa situación, contribuyendo a diversas formas de dificultad de integración e<br />

incluso marginación <strong>social</strong> en este amplio y diverso colectivo.<br />

El proceso investigador se dirige de forma específica en este análisis a la<br />

identificación de los contextos y los perfiles más significativos que configuran<br />

las diferentes imágenes en torno a las personas sin hogar. Tratamos de<br />

aproximarnos así a un proceso <strong>social</strong> tan complejo como importante, la<br />

conformación y mantenimiento de estereotipos y estigmas que:<br />

57


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

o ‘identifican’ <strong>social</strong>mente al colectivo de personas que viven en la calle,<br />

o tienen efectos pragmáticos en su cotidianidad y<br />

o afectan a su capacidad de constituirse como sujetos de su propio<br />

proyecto <strong>vital</strong>.<br />

El objetivo último, no sólo del análisis parcial de este capítulo sino del conjunto<br />

de la investigación, debería ser el de contribuir en la elaboración y emisión de<br />

propuestas comunicativas, en facilitar la percepción de los ciudadanos sobre la<br />

‘plural realidad’ actual de este colectivo y en facilitar propuestas que puedan<br />

contribuir a la configuración de imágenes de carácter integrador y<br />

neutralizador de estereotipos.<br />

El proceso de reflexión que debe realizarse como analistas y receptores exige un<br />

primer trabajo de desmontar, descodificar el mensaje o la noticia tal como es<br />

transmitida. Pero, en un segundo momento, es necesario considerar el contexto<br />

de representación, de interpretación, ideológico. Desde esta perspectiva, y<br />

considerando la previsible heterogeneidad de la información a estudiar, se han<br />

contemplado dos diferentes perspectivas metodológicas, utilizando técnicas y<br />

prácticas de investigación también diferentes:<br />

a) La primera perspectiva contempla las noticias, cada noticia, de forma<br />

aislada, y se trabaja a partir de la técnica de análisis de contenido.<br />

(Análisis cuantitativo)<br />

b) La segunda perspectiva contempla las noticias, contenidas en los<br />

medios de comunicación que han sido analizados, de forma transversal<br />

y coordinada, como relato, como discurso periodístico, y se trabaja<br />

58


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

desde la práctica sociológica del análisis interpretativo -semántico y<br />

semiológico- del discurso. (Análisis cualitativo)<br />

3.3 Análisis cuantitativo de la información<br />

3.3.1 El corpus y los criterios de codificación<br />

La prensa diaria continúa siendo un referente central, que sigue orientando<br />

contenidos y ejes de interés de los restantes medios, y ha sobrevivido a la<br />

decadencia que algunos expertos auguraban ante el empuje de los modernos<br />

instrumentos audiovisuales de comunicación. Para Justino Sinova, la prensa:<br />

“se ha mantenido como el centro del diálogo <strong>social</strong>. El periódico continúa<br />

siendo el referente de la actualidad, pese al atractivo irresistible de la<br />

televisión y a la penetración instantánea de la radio, hasta el punto de que es<br />

un instrumento indispensable para quien busque estar bien informado en<br />

esta sociedad...” . (1998:13-14).<br />

Los contenidos del presente capítulo describen y analizan la totalidad de<br />

unidades informativas obtenidas a lo largo de seis meses de seguimiento, en<br />

las ediciones digitales de seis de los principales diarios españoles.<br />

Concretamente, han sido localizadas un total de 503 unidades informativas,<br />

durante el periodo comprendido entre el 1 de agosto de 2009 y el 31 de enero<br />

de 2010, en los seis diarios siguientes: El País, El Mundo, ABC, La Vanguardia,<br />

La Voz de Galicia y 20 Minutos. (Ver Ficha técnica en Anexo).<br />

59


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

El criterio más adecuado para seleccionar los diarios a analizar habría sido<br />

acudir a los índices de lectura de prensa digital. Sin embargo, estos<br />

indicadores, además de escasos, actualmente aun no han alcanzado la<br />

fiabilidad de las clásicas estimaciones de OJD o AIMC/EGM para la prensa<br />

escrita. Sabemos, por otro lado, que los grandes diarios escritos son a su vez<br />

los más leídos en formato digital, con ligeras variaciones:<br />

Tabla 3.1. Diez principales diarios digitales en España<br />

Fuente: comScore. Junio de 2008<br />

En la clasificación realizada por Alexa www.alexa.com , que monitoriza en<br />

tiempo real las páginas web, también aparecen en las diez primeras posiciones<br />

cinco de los seis diarios que hemos seleccionado partiendo de los sólidos datos<br />

de OJD y EGM correspondientes a número de lectores y difusión de la prensa<br />

escrita. El paralelismo que establecemos entre ambos formatos se debe<br />

también al hecho de que buena parte de los lectores lo son por igual de las<br />

60


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

versiones escrita y digital<br />

formatos):<br />

(el 76 % de los internautas consultan ambos<br />

Tabla 3.2. Lectores de prensa escrita y digital<br />

Fuente: Gabardo “Internet, en medio de los medios” 2010<br />

Duplicidad que se mantiene para la mitad de los internautas y juega a favor de<br />

Internet para la otra mitad, que tienden a acudir menos a la versión impresa:<br />

Tabla 3.3. Evolución en el uso de formatos<br />

En lo que respecta a los contenidos de la información, que es el aspecto de<br />

especial relevancia para el análisis, puede afirmarse que todos los diarios<br />

reproducen la mayoría de sus contenidos en ambos formatos, con las<br />

61


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

modificaciones en redacción, presentación y potencial interactivo que son<br />

propias de la red.<br />

A partir de las consideraciones realizadas, se estimó como más rigurosa la<br />

selección de la muestra a partir de los datos que reflejan el impacto de la<br />

prensa escrita. Para ello, se aplicaron criterios de tirada, difusión, número de<br />

lectores y ámbito de influencia, a partir de la información facilitada por la<br />

Oficina para la Justificación de la Difusión (OJD) y el Estudio General de Medios<br />

(EGM). Para la obtención de la muestra más idónea han sido tenidas en cuenta<br />

las siguientes consideraciones:<br />

Por razones obvias se excluyen de la muestra los diarios de<br />

información deportiva, situados en los primeros lugares según número<br />

de lectores: Marca (1), As (3) y Sport (6). [EGM]<br />

Para evitar la presencia de dos diarios de ámbito catalán (El Periódico y<br />

La Vanguardia), y ampliar el campo informativo autonómico, ha sido<br />

excluido El Periódico de Cataluña en favor de La Voz de Galicia (cuyos<br />

datos de difusión y número de lectores son importantes aunque<br />

ligeramente inferiores).<br />

La extensión del fenómeno de la prensa gratuita nos ha llevado a<br />

incluir en la selección el gratuito de mayor tirada y de mayor lectura en<br />

formato digital (20 Minutos). Según datos de EGM, excluida la prensa<br />

deportiva, es el diario con mayor número de lectores (2.347.000).<br />

Mientras el consumo de periódicos de pago se estanca o retrocede, la<br />

prensa gratuita ha experimentado un continuo ascenso (20 Minutos,<br />

62


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Que y ADN suman 5,1 millones de lectores diarios) [EGM]. Por una<br />

parte, las nuevas tecnologías y, por otra, el hecho de que emplean a<br />

pocos profesionales, han permitido minimizar los costes de<br />

producción. Los costes de distribución también se reducen toda vez<br />

que ésta se realiza a través de repartidores o expositores situados en<br />

puntos estratégicos de las ciudades, como estaciones de metro o de<br />

ferrocarril con gran afluencia de viajeros, intercambiadores de autobús<br />

y otros puntos de interés: hospitales, hoteles, universidades, calles<br />

transitadas, etc. Se garantizan así una gran difusión, lo que los<br />

convierte en un buen soporte publicitario. Todos ellos, argumentos<br />

suficientes para incluir en el análisis una representación de este<br />

relativamente nuevo formato de diario.<br />

Los ámbitos de cobertura o campos informativos que abarcan los diarios<br />

seleccionados son amplios y diversos desde el punto de vista socio-político,<br />

geográfico y en cuanto al perfil de los lectores. Sus líneas editoriales y perfil<br />

ideológico cubren también un amplio espectro, y puesto que los seis diarios<br />

señalados son los emisores de la información que se analiza en estas páginas,<br />

resulta de especial interés conocer los rasgos que definen sus diversas<br />

orientaciones editoriales. La siguiente caracterización proviene del análisis<br />

aportado por A. S. Berrocal y C. Rodríguez-Maribona, expertos en<br />

comunicación (1998):<br />

63


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

“Nació con el evidente propósito de contribuir al afianzamiento del<br />

régimen democrático, crítico con el pasado y dirigido a las clases<br />

política e intelectual. Periódico renovador, de una excelente factura<br />

técnica, El País representa en España la prensa de calidad de los<br />

grandes países occidentales” “En cuanto a su línea ideológica El País se<br />

situó en la izquierda: mantuvo un apoyo sistemático al PSOE, fue<br />

comprensivo con el PCE, criticó de forma muy severa a la UCD (cuando<br />

estuvo en el poder), e implacable en su juicio con AP. En religión su<br />

postura fue laica e incluso anticlerical, muy a tono con los años de la<br />

transición.<br />

En su última etapa ha pretendido dar menos importancia a la política,<br />

hacer un diario menos ideológico y más analítico, atento a las<br />

transformaciones <strong>social</strong>es, económicas y científicas que está<br />

experimentando el mundo. El País es un diario innovador, que practica<br />

el periodismo más serio... con mucha formalidad en el tratamiento<br />

informativo, bien estructurado y muy ordenado”.<br />

“Es un periódico con una redacción joven, abierto ideológicamente y<br />

dirigido a una audiencia también joven; crítico ante la acción<br />

gubernamental, especialmente durante los años de gobierno del<br />

partido <strong>social</strong>ista. Técnicamente, tuvo como modelos al diario francés<br />

64


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Le Monde y al alemán Die Welt, y, en general, a aquellos medios que<br />

habían abierto nuevos caminos en la prensa.”<br />

“En cuanto a su línea ideológica resulta difícil de definir... Podríamos<br />

decir que su fórmula de periodismo agresivo le conduce a mantener<br />

una postura de oposición a todo y a todos. Es un periódico crítico,<br />

agresivo e inconformista que trata de potenciar en sus páginas el<br />

periodismo de investigación. Es muy opinativo en lo informativo.<br />

Destacan sus titulares interpretativos que condicionan la información.<br />

Incluye mucha opinión, a través de sus editoriales y comentarios, y<br />

presenta un número importante de columnistas de las más distintas<br />

posiciones ideológicas”<br />

“Un periódico independiente, conservador y monárquico y, todo ello, a<br />

la sombra de un pensamiento liberal, enraizado en el liberalismo<br />

sevillano al que pertenecía la familia Luca de Tena”<br />

“En su línea ideológica es un diario defensor de las tradiciones,<br />

conservador y popular. Destaca su defensa a ultranza de la institución<br />

monárquica, su oposición absoluta hacia los gobiernos de izquierda, y<br />

su defensa de los valores cristianos de la sociedad...<br />

ABC es un diario cómodo por su formato y fácil de leer en el desarrollo<br />

de las secciones. Es un periódico familiar que pasa de padres a hijos<br />

65


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

por su elevado número de suscriptores, el mayor de Madrid y el<br />

segundo de España, sólo superado por La Vanguardia”.<br />

“En su posición política e ideológica, siempre ha permanecido fiel a<br />

una equidistancia entre una abierta defensa de la cultura y las<br />

tradiciones catalanas y una afirmación matizada del carácter español<br />

de Cataluña. Conservador, liberal y monárquico, sin exageraciones...<br />

Hoy, con su talante ideológico burgués y un conservadurismo<br />

renovado, es una voz importante en todo el país y un diario<br />

estrechamente vinculado a sus audiencias inmediatas barcelonesas.”<br />

“Por su contenido se asemeja a los diarios nacionales, aunque posee<br />

una lógica orientación ideológica e informativa catalana.<br />

Con más de un siglo de existencia, y propiedad de la familia Godó, La<br />

Vanguardia es un complejo periodístico no inferior a ABC, propiedad<br />

de los Luca de Tena. Ambas familias constituyen en España la<br />

aristocracia de la industria periodística que ha sobrevivido a la Guerra<br />

Civil.<br />

Tanto por el tratamiento de sus secciones como por el desarrollo<br />

informativo y su nivel de credibilidad, que va más allá de su propio<br />

ámbito de difusión, se ha convertido en referencia cualificada,<br />

pudiéndose hablar de un claro ejemplo de prensa de calidad.”<br />

66


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Apareció el 4 de enero de 1882 en la ciudad de A Coruña. El editorial<br />

del primer número expresaba los objetivos con que nacía el diario:<br />

servicio a la región gallega, defensa y propagación de los ideales<br />

políticos del Partido Democrático Progresista y consecución de valores<br />

democráticos. En el periodo comprendido entre 1982 y 1992, La Voz<br />

pasó a diversificarse hasta formar el grupo de comunicación que es<br />

hoy y que integra además, a Diario de León, cabecera hegemónica en<br />

la provincia leonesa y la segunda más importante de Castilla y León;<br />

Radio Voz, cadena urbana con emisoras en las siete principales<br />

ciudades gallegas; la productora Voz Audiovisual, pionera en Galicia y<br />

una de las más activas del sector; Sondaxe, Instituto Demoscópico de<br />

referencia en la comunidad autónoma; y Canal Voz, que gestiona<br />

lavozdegalicia.es y diariodeleon.es.<br />

La Voz de Galicia es un periódico de A Coruña pero que tiene una<br />

edición para cada provincia gallega y gran ciudad (Vigo tiene su propia<br />

edición). La base del periódico es la misma y en su centro incorpora un<br />

suplemento dedicado a la ciudad de que trate la edición. Puede<br />

afirmarse que es el prototipo de periódico autonómico, con amplia<br />

dedicación, desde la misma portada, a noticias relativas a toda la<br />

Comunidad autónoma, incluyendo los municipios.<br />

67


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

20 Minutos nace en febrero de 2000 bajo el nombre de Madrid y m@s<br />

con una tirada inicial de 100.000 ejemplares repartidos en el<br />

transporte público. Desde entonces no ha dejado de crecer su impacto<br />

y hoy se reparte además de en Madrid, en un buen número de<br />

ciudades españolas: Barcelona, Sevilla, Zaragoza, Valencia, Alicante,<br />

Málaga, Granada, Murcia, Córdoba, Bilbao, Valladolid, A Coruña y Vigo.<br />

Su editora es Multiprensa y Más S.L. cuyo accionista mayoritario es 20<br />

Min Holding, propiedad de un grupo de comunicación de origen<br />

noruego.<br />

Al igual que el resto de prensa gratuita, se trata de un periódico de<br />

lectura rápida, basado principalmente en noticias blandas, con<br />

informaciones breves que buscan atraer la curiosidad, asombro,<br />

simpatía, sin opinión política y escasas noticias de economía. Al estar<br />

enteramente sufragados a partir de la venta de espacios publicitarios,<br />

la financiación queda ligada a multitud de anunciantes que buscan<br />

hacer llegar sus productos al mayor número posible de lectores. No es<br />

un tipo de prensa concebido para un segmento concreto de la<br />

población, sino que su pretensión es llegar al mayor espectro posible<br />

de lectores, de ahí que su temática sea tan amplia y dispar.<br />

Como complemento a los perfiles de los diarios emisores, señalaremos, por<br />

último, los principales rasgos que caracterizan a los receptores, aquellas<br />

68


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

personas que con mayor asiduidad leen la prensa generalista en nuestro país.<br />

Los más recientes datos del EGM establecen el perfil medio en los siguientes<br />

parámetros: predominan los hombres (seis de cada diez lectores); son de clase<br />

media-media (43,4%), media-baja (24,6%) y media-alta (17,6%); tienen un<br />

promedio de edad de 44,8 años y son en su mayor parte trabajadores en activo<br />

(seis de cada diez lectores). . (AIMC/EGM 2010)<br />

Según los datos de que se dispone, el perfil de los lectores de la prensa digital<br />

resulta muy similar, puesto que más de la mitad de ellos, como ya señalamos,<br />

consultan indistintamente ambos formatos. El lector internauta es ligeramente<br />

más joven y posee un mayor nivel cultural (comScore 2008)<br />

Los lectores de prensa gratuita cubren un espectro muy interesante que<br />

muestra significativas diferencias respecto al perfil del convencional lector de<br />

prensa escrita. Al ser una prensa de carácter popular, determinado en parte<br />

por sus puntos de distribución, confiere unas características concretas a sus<br />

lectores. Por una parte, trabajadores que se dirigen a su puesto de trabajo en<br />

transporte público; por otra, estudiantes que se desplazan a sus centros de<br />

estudios. En resumen, es una prensa de entretenimiento e información -ligeraque<br />

no demanda reflexión y concebida para ocupar el tiempo mientras se viaja<br />

o se espera.<br />

Señalemos finalmente que los seis diarios seleccionados reúnen un total de 7,8<br />

millones de lectores diarios (entendiendo que un mismo lector puede<br />

consultar dos o más de los diarios considerados). (EGM 2010). Por su parte, la<br />

consulta de noticias en versión digital aumenta progresivamente hasta el<br />

69


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

punto de que ya son más los lectores digitales entre los lectores totales de<br />

periódicos: un 52,5% del total de 16 millones de lectores de información diaria<br />

(EGM, INE 2009, 2010).<br />

Codificación y grabación de datos<br />

En todos los medios informativos, y muy especialmente en los escritos, los<br />

titulares juegan un papel determinante. Puede decirse que cumplen tres<br />

objetivos básicos: anunciar y resumir la información que contiene la noticia,<br />

convencer de que resulta interesante lo que se cuenta en el cuerpo de la<br />

noticia y resultar inteligibles por sí mismos, al margen de la información.<br />

Podemos decir que el titular comunica la noticia. Ello es importante por cuanto<br />

es sabido que un número significativo de lectores se limita en muchos casos a<br />

“leer” el periódico acudiendo casi en exclusiva a los titulares. Y ello explica que<br />

algunos análisis de contenido se realicen tomando exclusivamente los titulares<br />

como objeto de estudio. En nuestro caso, conscientes de que la información<br />

que deseamos obtener sobre las personas sin hogar en ocasiones no se hace<br />

evidente a través de los titulares, hemos realizado la selección y análisis de<br />

unidades informativas tomando en cuenta las referencias contenidas tanto en<br />

el titular como en el cuerpo o contenido de la información, lo que sin duda ha<br />

permitido obtener un corpus más completo y exhaustivo. (No obstante,<br />

conscientes del valor indicativo de que gozan, hemos añadido en Anexo una<br />

relación cronológica completa de todos los titulares correspondientes a las<br />

unidades analizadas).<br />

70


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

En nuestro caso, la selección de unidades informativas se ha realizado a partir<br />

de un seguimiento diario de las ediciones digitales de los seis periódicos<br />

mencionados. La localización y selección del material de análisis ha sido<br />

posible gracias al uso de los buscadores que todos los diarios incorporan y, en<br />

algunos casos, acudiendo también a sus respectivas hemerotecas. (los<br />

buscadores localizan los términos de búsqueda tanto en los titulares como en<br />

el cuerpo de la información). Los descriptores, términos o voces utilizadas para<br />

localizar la información que nos afecta fueron los siguientes: indigente,<br />

vagabundo, mendigo, sin techo, sin hogar, marginado, excluido, albergue. (en<br />

numerosas ocasiones, la búsqueda por una u otra de las voces terminaba<br />

mostrando la misma noticia, con lo que se llegaba a claras situaciones de<br />

saturación en la obtención de nuevas informaciones). Hemos realizado, por<br />

tanto, una búsqueda extensa de noticias, en torno al objeto específico de<br />

estudio, para su tratamiento informático y cuantitativo, una vez establecidas<br />

las unidades básicas de significación -categorías- que faciliten la posterior labor<br />

analítica. Con este fin se ha diseñado una ficha técnica en la que se incluyen<br />

diversos referentes contextuales y conformadores de la noticia –elementos<br />

formales, textuales, icónicos y de contenido. (Ver Ficha en Anexo).<br />

Ficha de recogida de datos<br />

La ficha elaborada con este propósito recoge información procedente de cada<br />

noticia del corpus, alguna codificada y otra en espacio abierto de libre<br />

escritura. Está <strong>org</strong>anizada en cinco campos de registro con información relativa<br />

a características formales, contenido visual (icónico), contenido textual,<br />

contenido temático y apartado para ‘observaciones’ y tipo de información.<br />

71


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Información incluida en Características formales (codificadas):<br />

- Nº de ficha: todas las fichas están numeradas, por orden de volcado<br />

- Fecha: día-mes-año en que la información recogida es publicada<br />

- Publicación: nombre del periódico donde la información se publica<br />

- Sección: lugar en el que el periódico ubica la información<br />

- Género: noticia, artículo de opinión, reportaje, entrevista, editorial,<br />

carta al director, publicidad<br />

- Tamaño: <strong>org</strong>anizado por ‘manchas’, refleja el espacio ocupado<br />

- Ubicación: portada, contraportada, página destacada, página normal<br />

Información incluida en Contenido visual:<br />

- <strong>Imagen</strong> icónica (codificada): fotografía, dibujo, gráfico o esquema que<br />

acompaña a la información de referencia<br />

- Pie de imagen (abierta): texto que acompaña (‘pie’) a la imagen gráfica<br />

- Descripción imagen (abierta): contenidos denotados en la imagen<br />

Información incluida en Contenido textual (abiertas):<br />

- Título noticia: registro literal del título<br />

- Antetítulo: registro literal de este complemento del titular, cuando<br />

existe<br />

- Subtítulo: registro literal de este complemento del titular, si existe<br />

- Noticias próximas o ‘marginales’: referencias de otras noticias que<br />

aparecen en la misma página que la información recogida<br />

72


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Información incluida en Contenido temático:<br />

- Denominación textual (codificada): término empleado en referencia a<br />

la/s persona/s sin hogar protagonistas (indigente, vagabundo,<br />

mendigo, sin techo, sin hogar, excluido, marginado, otros...)<br />

- Sujeto/s (codificada): sujetos nombrados en la información, y su<br />

identificación individual o colectiva<br />

- Fuente (codificada): origen de la noticia, de quién-de dónde emana<br />

- Contenido (abierta): breve descripción del contenido de la información<br />

Otra información recogida en la ficha:<br />

- Observaciones (abierta): apuntes analíticos a propósito de la recogida,<br />

cuando se considera pertinente<br />

- Cualitativo (codificada): distingue entre noticias cuya información<br />

muestra como asunto central a las personas sin hogar de aquellas<br />

otras en que aparecen de forma secundaria o indirecta.<br />

3.3.2 El volumen y distribución del corpus<br />

Las quinientas tres unidades informativas que constituyen el corpus<br />

informatizado de este informe se distribuyen entre los seis diarios<br />

seleccionados del siguiente modo:<br />

73


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Tabla 3.4. Información sobre personas sin hogar según diarios 4<br />

Frecuencia %<br />

El País 107 21,3<br />

El Mundo 88 17,5<br />

ABC 63 12,5<br />

La Vanguardia 70 13,9<br />

La Voz de Galicia 118 23,5<br />

20 Minutos 57 11,3<br />

TOTAL<br />

503 100,0<br />

Fuente: Análisis de contenido de prensa. 2010. Elaboración propia<br />

La muestra obtenida supone un total de 83 noticias por cada uno de los diarios<br />

analizados (14 noticias por diario y mes). Desde otra perspectiva, supone<br />

también una media de 83 noticias al mes (2,8 informaciones diarias en seis<br />

periódicos). Puede decirse que, si a efectos de investigación supone una<br />

muestra amplia y significativa, desde el ángulo concreto de la repercusión<br />

mediática del colectivo de las personas sin hogar refleja una presencia<br />

noticiosa de muy limitada entidad y relevancia. Aspectos ambos que podrán<br />

4 Todas las tablas y gráficos incluidos en esta sección corresponden al análisis de<br />

contenido de prensa<br />

74


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

ser precisados y profundizados a medida que el análisis proporcione nuevos y<br />

más precisos indicadores.<br />

Una primera aproximación a las cifras muestra que La Voz de Galicia es el<br />

diario que mayor volumen informativo aporta en relación con la población<br />

estudiada (23,5 %). Le siguen El País (21,3 %), El Mundo (17,5%), La Vanguardia<br />

(13,9 %), ABC (12,5 %) y 20 Minutos (11,3 %).<br />

Gráfico 3.1 Información según tipo de diario<br />

Los tres diarios de ámbito nacional contienen más de la mitad de la<br />

información (51,3 %), los dos diarios de ámbito autonómico aportan el 37,4%<br />

de las informaciones y el diario de tirada gratuita completa el 11,3% de la<br />

información restante.<br />

La aparición cronológica de la información, a lo largo de los seis meses<br />

considerados, es la siguiente:<br />

75


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Grafico 3.2 Unidades informativas según meses (%)<br />

El gráfico resulta muy ilustrativo, avanzando un aspecto que será contemplado<br />

con detalle en el análisis cualitativo: los enemigos (el invierno, el frío), se<br />

convierten en los aliados que aportan mayor visibilidad periodística a las<br />

personas sin hogar. La información aumenta clara y progresivamente de<br />

noviembre a enero, en paralelo a la creciente actividad de las entidades civiles<br />

y ONG, y a las “campañas del frío” desplegadas puntual y cíclicamente por las<br />

instituciones locales.<br />

76


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Grafico 3.3 Volumen informativo según diario y mes (%)<br />

La relación entre meses y diarios muestra como fluctúan los flujos<br />

informativos. El diario gratuito, tal vez más atento a lo impactante, muestra en<br />

enero una gran actividad informativa, al igual que, en menor medida, el diario<br />

ABC. El predominio de La Voz de Galicia durante el mes de agosto se explica<br />

por acontecimientos locales, relativos al conflicto en torno a la apertura de un<br />

albergue para indigentes. En el caso de La Vanguardia, el interés informativo<br />

aumenta notablemente en septiembre, coincidiendo con el creciente malestar<br />

ciudadano sobre el abandono de determinadas plazas y barrios en Barcelona.<br />

Ambos aspectos, que ya aparecen ahora en su expresión cuantitativa, serán<br />

detallados más adelante desde una consideración más dinámica e<br />

interrelacionada de las noticias.<br />

77


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

3.3.3 Entidad y relevancia de la información<br />

3.3.3.1 Sección y género<br />

Después de hojear la primera página, comenzamos a recorrer un periódico<br />

<strong>org</strong>anizado por secciones (aunque pertenezcamos al grupo de lectores que<br />

inician el diario desde la última página, siempre hemos de ir sorteando las<br />

“barreras” que delimitan el paso de una a otra sección). Las secciones<br />

vertebran, articulan y jerarquizan las informaciones en función del orden de<br />

prioridad establecido por la línea editorial de la publicación correspondiente.<br />

“Las secciones responden al carácter universal del periódico, que trata de<br />

ofrecer contenidos clasificados, para así responder a los intereses plurales de<br />

las audiencias. Son una prueba más del profundo perfil <strong>social</strong> que tienen<br />

todos los medios de comunicación... En la compaginación del periódico, las<br />

secciones se incluyen en orden decreciente de interés: desde la sección<br />

nacional o política hasta la sección de amenidades, que incluye una gama<br />

varia de contenidos de menor interés informativo...” . (Benito 2001)<br />

A su vez, dentro de cada sección, las informaciones aparecen jerarquizadas en<br />

función de la importancia relativa que cada medio les asigna. En nuestro caso,<br />

las informaciones relativas a las PSH se distribuyen en las siguientes<br />

secciones: 5<br />

5 Los diarios generalistas tienden a rotular las secciones con el mismo epígrafe, con<br />

ligeras variaciones. La Vanguardia incluye las sub-secciones Ciudadanos y Vivir que<br />

hemos codificado en Sociedad. La sección Sucesos prácticamente se ha extinguido,<br />

78


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Tabla 3.5. Informaciones según secciones del diario<br />

Frecuencia %<br />

Internacional 8 1,6<br />

Nacional 16 3,2<br />

Local (CC AA y municipios). 232 46,1<br />

Sociedad (ciudadanos, vivir...) 157 31,2<br />

Sucesos 34 6,8<br />

Economía/Vivienda 14 2,8<br />

Cultura/Comunicación 23 4,6<br />

Salud 4 0,8<br />

Suplementos 4 0,8<br />

Varias/Otras 11 2,2<br />

Total 503 100,0<br />

La mayor parte de las informaciones sobre personas sin hogar, en todos los<br />

diarios consultados, aparece reflejada en las secciones de Local y Sociedad<br />

(ambas secciones incorporan casi ocho de cada diez informaciones<br />

registradas). En El Mundo, La Vanguardia y 20 Minutos tienen también una<br />

presencia significativa en la sección Sucesos.<br />

“Cada periódico utiliza su criterio pero, en general, la coincidencia es normal.<br />

Se pueden advertir diferencias sutiles. La clasificación en secciones no es<br />

fundiéndose con otras cuestiones en Sociedad. En portada, la sección Sucesos<br />

solamente se mantiene en La Vanguardia, aunque también es utilizada en El Mundo y<br />

20 Minutos<br />

79


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

siempre una tarea tan inocente como puede parecer a simple vista. El que una<br />

noticia aparezca en una sección u otra puede obedecer a la aplicación de<br />

intenciones objetivadas pero también a la aplicación de otro tipo de<br />

razones” . (Núñez 1991:182)<br />

Gráfico 3.4 Distribución en secciones según tipo de diario (%)<br />

En los diarios de ámbito nacional el 46,1 % de las informaciones son incluidas<br />

en la sección de Local. En los diarios autonómicos el 45,7 % son presentadas en<br />

la sección Sociedad. El diario de difusión gratuita incorpora la mayor parte de<br />

la información a la sección de Local (71,9 %).<br />

Si las secciones clasifican, ordenan y jerarquizan las noticias, los géneros<br />

incorporan una acreditación predeterminada que se decanta claramente hacia<br />

la información (noticia, reportaje) o la opinión (editorial, columna, entrevista,<br />

cartas al director…)<br />

80


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

“El género expresa la variedad de presentar los contenidos de acuerdo con la<br />

intencionalidad que quiera darse a los diferentes textos. Aunque en el<br />

periodismo actual suele darse una mezcla de los diferentes géneros y un<br />

cierto abandono de los diferentes géneros periodísticos, estos siguen siendo,<br />

fundamentalmente, informativos o interpretativos; a estos últimos también<br />

se les suele llamar de opinión” (Benito 2001:154)<br />

En nuestro caso, los géneros informativos (noticia, reportaje) suponen el 87 %<br />

del espacio dedicado a las personas sin hogar. Los géneros interpretativos o de<br />

opinión (editorial, opinión, columna, entrevista, cartas al director) aglutinan<br />

solamente el 13 % de las informaciones.<br />

Tabla 3.6. Distribución en géneros informativos<br />

Frecuencia %<br />

Noticia 392 77,9<br />

Opinión/Columna/Blog 30 6,0<br />

Reportaje 46 9,1<br />

Entrevista 13 2,6<br />

Editorial - -<br />

Cartas al Director 20 4,0<br />

Publicidad - -<br />

Otros 2 0,4<br />

Total 670 100,0<br />

81


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

La limitada “visibilidad” de las personas sin hogar resulta más comprensible si<br />

analizamos los géneros periodísticos en que se difunde la información sobre<br />

este colectivo:<br />

Casi nueve de cada diez informaciones aparecen en forma de noticia o<br />

de “noticia ampliada” (reportaje). Ante una cuestión <strong>social</strong> compleja<br />

como la que nos ocupa, la opinión se difumina y apenas tiene<br />

presencia. Los hechos presentados como noticia adquieren la visión<br />

más aséptica y distante posible.<br />

Resulta relevante que en seis meses, y en seis diarios, no haya<br />

aparecido un solo editorial sobre la situación de las PSH. Obviamente,<br />

no se trata de una cuestión prioritaria para la línea informativa de los<br />

diarios. “Editorial es un artículo sin firma que expresa la opinión del<br />

periódico sobre asuntos de cierta importancia...<br />

El editorial debe recoger los planteamientos ideológicos del periódico<br />

e interpretar y opinar sobre los asuntos en consonancia con lo que<br />

vaya siendo su línea editorial” . (Benito 2001:84)<br />

Entre columnas, artículos y blogs por parte de los colaboradores y<br />

cartas al director por parte de los lectores apenas suman un 10 % de la<br />

totalidad informativa. Y, como más adelante veremos, esta implicación<br />

a través de los formatos opinativos no necesariamente supone apoyo,<br />

comprensión o solidaridad para con los ciudadanos sin hogar.<br />

El Mundo se significa por el abrumador predominio de la noticia; el<br />

reportaje tiene mayor cabida en El País; los artículos y columnas de<br />

opinión aparecen en mayor medida en La Vanguardia y ABC; las<br />

entrevistas en La Voz de Galicia, ABC y El País. La Vanguardia y 20<br />

82


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Minutos son los diarios que incorporan mayor volumen de cartas al<br />

director.<br />

Gráfico 3.5. Géneros periodísticos según diarios<br />

Si consideramos los diarios agrupados, en función de su ámbito de influencia,<br />

los resultados son los siguientes:<br />

Tabla 3.7. Géneros periodísticos según tipo de diario (%)<br />

Nacional Autonómico Gratuito<br />

Noticia 40,2 28,0 9,7<br />

Opinión/Columna/Blog 2,8 3,0 0,2<br />

Reportaje 6,4 2,8 -<br />

Entrevista 1,0 1,4 0,2<br />

Cartas al director 0,8 2,0 1,2<br />

Otros 0,2 0,2 -<br />

Total 51,3 37,4 11,3<br />

83


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

3.3.3.2 Tamaño y ubicación de las informaciones<br />

La mayoría de las informaciones (tres de cada diez) ocupan el tamaño<br />

equivalente a una columna. Un 28 % alcanzan la media página y un 27,2 % se<br />

muestran en una página completa. La doble página y los tamaños superiores,<br />

reservados para reportajes e informaciones a las que se quiere conceder<br />

especial relevancia, apenas suponen un 4,6 % del total<br />

Tabla 3.8 Amplitud o tamaño de las informaciones<br />

Frecuencia %<br />

1/2 columna o menos 47 9,3<br />

Columna 155 30,8<br />

1/2 Página 141 28,0<br />

Página 137 27,2<br />

Doble página 19 3,8<br />

Superior 4 0,8<br />

Total 503 100,0<br />

Los formatos más habituales se corresponden en la gran mayoría de los casos<br />

con Noticias. El formato inferior a una columna suele utilizarse también en el<br />

género Noticias así como en Cartas al director (siempre con una reserva de<br />

espacio muy limitada). Cuando se supera la doble página suele tratarse de<br />

reportajes, entrevistas o suplementos especiales, normalmente vinculados a<br />

las secciones de Cultura o Sociedad.<br />

84


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Gráfico 3.6 Amplitud de la información según prensa diaria (%)<br />

En cuanto al tipo de página en que aparecen insertas las noticias, el 93,6 % se<br />

muestran en una página normal, sin ser destacadas, dentro de sus respectivas<br />

secciones (sobre todo Local y Sociedad, como ya ha sido señalado). Un 6 % se<br />

ofrecen en página destacada (normalmente la portada de una sección, de un<br />

suplemento o cuadernillo especial, etc).<br />

85


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Tabla 3.9. Ubicación de las informaciones<br />

Frecuencia %<br />

Página normal 471 93,6<br />

Página destacada 30 6,0<br />

Contraportada 2 0,4<br />

Portada - -<br />

Total 503 100,0<br />

Ni una sola de las informaciones ha merecido los honores, durante esos seis<br />

meses, de aparecer en portada.<br />

“La primera página, llamada portada, constituye la tarjeta de presentación del<br />

periódico, el escaparate o la vitrina, desde la que se intenta llamar la atención<br />

al lector, ofreciéndole lo mejor de su contenido” . (Martín 1991:70)<br />

Gráfico 3.7 Ubicación de la información según tipo de diario (%)<br />

86


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Únicamente han sido localizadas dos informaciones ubicadas en la<br />

contraportada: una correspondiente a ABC y otra a La Vanguardia. Debemos<br />

recordar que la contraportada ha ganado peso específico en los nuevos<br />

conceptos de diseño periodístico y obtiene un tratamiento similar al de la<br />

propia portada (ambas admiten una publicidad limitada y muy costosa). La<br />

Vanguardia dedica la contraportada a una entrevista “atípica”, en cuanto al<br />

protagonista y al mensaje, que denomina LA CONTRA, y tiene gran aceptación<br />

entre sus lectores. El País hace algo similar en sus ediciones dominicales. Otros<br />

diarios sustituyen la entrevista por un reportaje sobre casos o sujetos atípicos.<br />

Y casi todos los formatos añaden una columna de opinión continua o<br />

secuencial, cubierta por alguna de sus firmas más prestigiosas. Es por ello, tras<br />

la portada, la segunda localización más apreciada en el diario.<br />

3.3.3.3. Complemento gráfico<br />

Una mirada a los periódicos que se editaban en la primera mitad del pasado<br />

siglo nos permitiría observar la enorme evolución estética de los diarios<br />

actuales. La competencia con otros medios de comunicación emergentes, los<br />

avances tecnológicos en las artes de la ilustración y las demandas de un<br />

público inmerso en una cultura crecientemente audiovisual, han llevado a los<br />

editores de prensa a ofrecer productos en los que el diseño adquiere una<br />

importancia central. La maquetación y el concepto global de la publicación, la<br />

tipografía, la introducción del color y los diversos recursos gráficos e<br />

infográficos, han convertido a los modernos periódicos en atractivos espacios<br />

de lectura. Desde que comenzaron a incluirse las primeras fotografías, a finales<br />

del pasado siglo, este recurso gráfico ha pasado a convertirse en un elemento<br />

87


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

básico de información y documentación. Actualmente, el complemento gráfico<br />

tiende a ser tratado al mismo nivel que textos y titulares. “La fuerza de una<br />

buena fotografía periodística es tan importante como el poder de la palabra<br />

escrita.” . (Brajnovic 1974: 300)<br />

El texto y la imagen se complementan como recursos de comunicación y,<br />

adecuadamente tratados y seleccionados, hacen más atractivo el diario.<br />

Algunas estimaciones señalan que casi ocho de cada diez lectores de un<br />

periódico se fijan, en primer lugar, en los elementos gráficos de la página. Si<br />

esto es así, titulares y grafismo comparten un atractivo fundamental.<br />

En el corpus informativo sobre las personas sin hogar que analizamos en estas<br />

páginas, esta es la presencia del complemento gráfico:<br />

Tabla 3.10. Complemento gráfico a la información<br />

Frecuencia %<br />

Ninguno 347 69,0<br />

Fotografía 150 29,8<br />

Gráfico/Esquema 3 0,6<br />

Dibujo 3 0,6<br />

Total 503 100,0<br />

Un 69 % de la información obtenida es exclusivamente textual. El 29,8 % se<br />

muestra acompañada de alguna fotografía (normalmente solo una). Mientras<br />

los gráficos, esquemas o dibujos apenas tienen una presencia testimonial. La<br />

88


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

proporción señalada se mantiene de modo similar en los diversos diarios<br />

analizados, si bien se aprecian algunas diferencias.<br />

Gráfico 3.8 Acompañamiento gráfico según tipo de diario<br />

Los diarios autonómicos, así como el gratuito, presentan un mayor<br />

acompañamiento gráfico que los periódicos nacionales. Cuando no existe<br />

acompañamiento gráfico se trata, en la mayor parte de los casos, de unidades<br />

informativas que corresponden al género Noticia. Y más concretamente,<br />

aquellas noticias cuya dimensión es igual o inferior a una columna (algo que<br />

resulta lógico, pues ese reducido formato difícilmente puede acompañarse de<br />

elementos gráficos, que tienden a ocupar un mayor espacio para lograr una<br />

visibilidad significativa). El uso de fotografías es más habitual en las secciones<br />

de Sociedad y Local así como en los géneros Reportaje y Entrevista. También<br />

adquieren mayor presencia en las informaciones que ocupan media página o<br />

una página completa. Las informaciones que resultan destacadas en<br />

contraportada aparecen acompañadas de fotografía. Los gráficos, esquemas y<br />

89


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

dibujos son utilizados casi exclusivamente en las secciones de Economía y<br />

Sociedad, al igual que en los reportajes.<br />

3.3.3.4 Fuentes informativas<br />

Los ‘diarios de calidad’ diversifican las fuentes de las que obtienen la materia<br />

prima para la elaboración de las informaciones, pero privilegian las elaboradas<br />

por sus propios redactores. La fuente es “el origen de los datos que dan lugar a<br />

una noticia. Puede ser una persona, un colectivo o una institución: periodista,<br />

agencia de noticias, oficina de prensa y cualquier <strong>org</strong>anización pública o<br />

privada que pueda proporcionar noticias que interesen al público. Los<br />

periódicos que tratan de competir ventajosamente con los demás medios<br />

suelen trabajar con fuentes propias: aquellas informaciones obtenidas<br />

directamente por sus redactores en el trabajo diario”(Martín 1991:82).<br />

Tabla 3.11. Fuentes de la información<br />

Frecuencia %<br />

Firma/Redacción 362 72,0<br />

Agencias prensa 137 27,2<br />

Institucional - -<br />

Internet 1 0,2<br />

Otras fuentes 3 0,6<br />

Total 503 100,0<br />

Las informaciones con firma tienen una presencia notablemente superior<br />

(suponen siete de cada diez noticias). Bajo este epígrafe han sido agrupadas<br />

90


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

tanto las informaciones firmadas por un redactor o corresponsal como<br />

aquellas que directamente aparecen firmadas por la “redacción”. En efecto,<br />

como señala la cita precedente, los principales diarios se nutren en mayor<br />

medida de la información elaborada por su propia plantilla de redactores,<br />

reporteros y corresponsales.<br />

Gráfico 3.9. Fuentes informativas según diario (%)<br />

Por su parte, las informaciones suministradas por agencias de prensa, y<br />

difundidas sin reelaboración posterior en la redacción de los diarios, tienen<br />

una presencia muy importante, incluso en los diarios de mayor difusión (el<br />

27,2 % de todas las noticias analizadas tienen su origen en una agencia de<br />

prensa). Es sabido que cuanto menor es la plantilla de un periódico, en mayor<br />

medida tienen que cubrir sus páginas con contenidos emitidos por las propias<br />

agencias de prensa. Resulta lógico por ello que la mayor parte de las<br />

informaciones de 20 Minutos proceda de agencias de prensa. Y, sin embargo,<br />

91


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

sorprende que la mayor parte de noticias sobre personas sin hogar que<br />

incorpora El Mundo proceda también de agencias, superando a las elaboradas<br />

por los profesionales del propio diario.<br />

No aparece ningún caso de información institucional en el corpus<br />

seleccionado. Lo que significa que no hay noticias emitidas, y firmadas,<br />

directamente por los gabinetes de prensa de los diversos <strong>org</strong>anismos públicos.<br />

Otra cosa distinta es que una parte significativa de la información analizada<br />

tenga relación directa o indirecta con la Administración (como reflejaremos en<br />

el análisis cualitativo). Una noticia puede referirse, por ejemplo, a la<br />

inauguración de un Centro de día para personas sin hogar, financiado por el<br />

Ayuntamiento y la Comunidad Autónoma. Pero si la crónica del<br />

acontecimiento aparece firmada por el redactor encargado de las noticias<br />

locales, en nuestro registro aparecerá codificada como noticia con firma y no<br />

como institucional.<br />

“Otras fuentes” aglutina aquellos casos en que no resulta fácil señalar<br />

claramente al autor/elaborador de la información. Las Cartas al director, por<br />

ejemplo, se incluyen en este apartado. Esas cartas llevan la firma de sus<br />

autores, pero esa firma no coincide con el criterio que hemos establecido para<br />

considerar firmados sólo aquellos textos generados por profesionales del<br />

periodismo.<br />

3.3.3.5 Denominaciones del colectivo<br />

La amplitud que ha sido aplicada en los criterios de selección de la información<br />

supone la inclusión de noticias en las que ni siquiera aparecen expresamente<br />

92


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

los términos con los que convencionalmente tiende a denominarse al colectivo<br />

que nos ocupa. Además de esto, la información obtenida “a priori”, por medio<br />

de otras fuentes, permite prever una dispersión importante entre las<br />

denominaciones más usuales. La variedad de términos usados por la prensa<br />

diaria aparece en el siguiente cuadro:<br />

Tabla 3.12. Denominación textual del colectivo<br />

Frecuencia %<br />

Indigentes 175 34,8<br />

Vagabundos 16 3,2<br />

Mendigos 54 10,7<br />

Sin techo 124 24,7<br />

Sin hogar 42 8,3<br />

Transeúntes 27 5,4<br />

Otras denominaciones<br />

No procede<br />

37<br />

28<br />

7,4<br />

5,6<br />

Total 503 100,0<br />

Entre los significantes localizados destaca claramente el de indigente, seguido<br />

de sin techo, mendigo y sin hogar. En el apartado correspondiente ya hemos<br />

realizado un recorrido por las diversas denominaciones en su proceso histórico<br />

y en la actualidad. Las entidades que trabajan con este colectivo tienden<br />

recientemente a compartir la denominación de personas sin hogar (PSH).<br />

También hemos señalado nuestra aceptación del término indigente (rechazado<br />

por las mencionadas <strong>org</strong>anizaciones), que no posee una carga semántica<br />

93


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

peyorativa y, en todo caso, parece ser una de las denominaciones más<br />

arraigadas.<br />

Gráfico 3.10. Denominaciones predominantes (%)<br />

La propia denominación de “sin techo” resulta utilizada con mucha mayor<br />

frecuencia que “sin hogar”. (Lo que en nuestro caso también resulta apropiado<br />

si nos atenemos a las definiciones de Feantsa ya mencionadas). La calificación<br />

como “mendigo”, que incorpora connotaciones peyorativas, tiene en la prensa<br />

una presencia superior a lo que la propia realidad muestra. Sólo se dedican a<br />

mendigar algunas personas muy concretas de las que viven en la calle, que han<br />

terminado por hacer su profesión de la larga permanencia a la puerta de las<br />

iglesias o en otros lugares estratégicos (y no todos los mendicantes son<br />

94


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

personas sin hogar). Nunca, en todo caso, el 10,7 % que son calificados como<br />

mendigos en la prensa diaria. Este, al igual que el de vagabundo, es uno de los<br />

tópicos consolidados por encima de cualquier justificación empírica.<br />

Tópico que puede ser ilustrado por medio del siguiente ejemplo. Cuando los<br />

diarios aluden a las personas sin hogar como colectivo las denominan<br />

preferentemente sin techo o indigentes. Cuando la información alude a una<br />

PSH de modo individual, las denominaciones preferentes son indigentes y<br />

mendigos. Lo que, curiosamente, coincide con el hecho de que casi las tres<br />

cuartas partes de informaciones individuales remiten a hechos de conflicto,<br />

violencia o muerte. En función de los hechos narrados se tiende, por tanto, a<br />

utilizar denominaciones con distinta carga semántica.<br />

Aunque todos los términos mencionados aparecen en los diferentes<br />

periódicos, existe una tendencia en cada uno de los diarios a privilegiar unas u<br />

otras denominaciones.<br />

La prensa de ámbito nacional se refiere principalmente a indigentes, personas<br />

sin techo, mendigos y personas sin hogar. La prensa autonómica habla de<br />

personas sin techo, indigentes, transeúntes, personas sin hogar y mendigos. El<br />

diario gratuito informa principalmente sobre indigentes y personas sin techo.<br />

La falta de una denominación claramente consensuada y generalizada lleva en<br />

un número importante de casos a que las informaciones aparecidas en la<br />

prensa utilicen un término en el titular y otro distinto en el cuerpo de la<br />

información. (Las denominaciones como indigentes y mendigos son<br />

intercambiadas por los redactores sin mayores consideraciones). Cuando esto<br />

95


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

sucede, y a efectos de codificar con criterios uniformes, siempre ha sido<br />

grabada la calificación atribuida en el titular.<br />

Para finalizar, se muestran los resultados de un análisis de correspondencias<br />

en el que puede percibirse, de manera gráfica, la afinidad/proximidad entre los<br />

diversos medios y las diferentes denominaciones:<br />

Gráfico 3.11. Correspondencias entre denominación y diario<br />

2<br />

Vagabundos<br />

1<br />

La Vanguardia<br />

0<br />

ABC<br />

Sin hogar<br />

Sin techo<br />

La Voz de Galicia El País Indigentes<br />

Mendigos<br />

El Mundo<br />

20 Minutos<br />

Transeuntes<br />

-1<br />

-1,5<br />

-1,0<br />

-0,5<br />

0,0<br />

0,5<br />

1,0<br />

Vagabundos y transeúntes aparecen como denominaciones marginales, con un<br />

eco limitado en la prensa autonómica. Parece adecuado que ambas<br />

denominaciones caigan en desuso. La inmensa mayoría de las personas sin<br />

hogar no son vagabundos, ni transeúntes. Antes al contrario, tienden al<br />

96


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

sedentarismo en torno a personas y lugares que les trasmiten protección. Los<br />

“carrileros”, como se les conoce en el argot, son la excepción: un número<br />

reducido de personas que, a lo largo de los años, se ha especializado en<br />

conocer y recorrer las ciudades y los diversos recursos de subsistencia que<br />

ofrecen. El resto de denominaciones se aglutinan en torno a los diferentes<br />

diarios, con ligeras cercanías o distancias según la frecuencia con que son<br />

usadas en cada uno de los medios. La Vanguardia es el diario que, desde la<br />

perspectiva que estamos contemplando, más se diferencia y aleja del resto de<br />

los periódicos.<br />

3.3.3.6 Presencia individual y grupal<br />

Si la opinión que nos formamos sobre los diversos aspectos de la realidad se<br />

nutre, entre otras fuentes, de la prensa diaria, pensaremos en las personas sin<br />

hogar como un colectivo (72,2 % de las informaciones) antes que como una<br />

suma o agregado de seres individuales, con su propio nombre, con su propia<br />

identidad y <strong>trayectoria</strong> que, coyunturalmente, comparten una determinada<br />

problemática.<br />

Tabla 3.13. Sujetos de la información<br />

Frecuencia %<br />

Colectivo 363 72,2<br />

Individual 140 27,8<br />

Total 503 100,<br />

97


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Resulta significativo este hecho por cuanto el colectivo de las PSH sea<br />

posiblemente el que menor capacidad tenga de <strong>org</strong>anizarse y, por tanto, de<br />

ser <strong>social</strong>mente identificado como tal. La “invisibilidad” real de las personas sin<br />

hogar como seres individuales tiende a desaparecen cuando las informaciones<br />

narran sucesos conflictivos y/o violentos. 6<br />

La presencia colectiva o individual de las personas sin hogar muestra<br />

diferencias significativas en las informaciones de los diarios analizados:<br />

Tabla 3.14. Sujeto/s de la información según diarios (%)<br />

El País El Mundo ABC La<br />

Vanguardia<br />

La Voz de<br />

Galicia<br />

20 Minutos<br />

Colectivo 74,8 63,6 50,8 87,1 84,7 59,6<br />

Individual<br />

25,2<br />

36,4<br />

49,2<br />

12,9<br />

15,3<br />

40,4<br />

TOTAL<br />

100<br />

100<br />

100<br />

100<br />

100<br />

100<br />

6 El cuestionable tratamiento de las PSH como colectivo o como personas concretas es<br />

abordado con mayor base documental en las páginas que describen el análisis<br />

cualitativo.<br />

98


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Lo individual tiene mayor presencia en los diarios de ámbito nacional y en el<br />

gratuito, más proclives a la información generalista. Lo colectivo adquiere una<br />

mayor presencia en los periódicos de ámbito local, más próximos a las<br />

actividades comunitarias y a realidades cotidianas que no tienen cabida en la<br />

prensa nacional-<br />

Gráfico 3.12 Sujeto/s de la información según tipo de diario<br />

3.3.3.7 Temáticas predominantes<br />

Las temáticas y contenidos de las unidades informativas obtenidas, así como<br />

las peculiaridades de actores y escenarios, son consideradas de manera<br />

detallada en el próximo apartado, correspondiente al análisis cualitativo. La<br />

primera aproximación a los contenidos informativos, que se presenta en el<br />

siguiente cuadro, es fruto de la precodificación que realizamos a partir de<br />

nuestros conocimientos e intuiciones previas respecto a los temas de interés<br />

que podrían ser tratados en la prensa con especial relevancia:<br />

99


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Tabla 3.15. Contenidos básicos de la información<br />

Frecuencia %<br />

Institucional: Gestión 116 23,1<br />

ONG,S/Fundaciones 81 16,1<br />

Ciudadanos 46 9,1<br />

Violencia/Conflicto/Muerte 141 28,0<br />

Campaña del Frío 44 8,7<br />

Día de los "sin techo" 1 0,2<br />

Institucional: Economía/Crisis 30 6,0<br />

Institucional: Emigración 17 3,4<br />

Otras 27 5,4<br />

Total 503 100<br />

Las consultas realizadas en diversas fuentes secundarias permitían aventurar<br />

que las situaciones conflictivas tendrían un especial eco en la prensa. En<br />

efecto, la mayor parte de unidades informativas (28 %) remite a situaciones de<br />

violencia, conflicto y/o muerte. El 23,1 % de las informaciones son<br />

protagonizadas por las instituciones (actuaciones o pasividades, en diversos<br />

sentidos, de las administraciones central, autonómica y local). La continuada<br />

labor y las actuaciones puntuales de las entidades civiles que trabajan con<br />

personas sin hogar suponen un 16,1 % de las unidades informativas. Los<br />

ciudadanos, de manera individual y también como fruto de iniciativas de muy<br />

diverso signo obtienen la atención de los medios en el 9,1 % de las<br />

100


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

informaciones. Las Campañas del Frío, que todos los inviernos movilizan a<br />

entidades públicas y privadas, constituyen el fenómeno puntual que mayor<br />

visibilidad concede a los sin hogar (8,7%).<br />

Aunque ni la crisis económica ni la emigración suponen objetos directos de<br />

estudio en esta investigación, obtienen una cierta y significativa presencia<br />

entre las informaciones analizadas porque, en ambos casos, fueron<br />

seleccionadas las noticias que se vinculan claramente a la situación de las<br />

personas sin hogar: aumento de las atenciones en comedores y albergues,<br />

según los balances de las entidades afectadas y mayor presencia de<br />

inmigrantes que han perdido sus trabajos solicitando ayudas en las entidades<br />

que tradicionalmente proporcionan recursos a las PSH. Ambas cuestiones<br />

serán consideradas con mayor precisión analítica en el siguiente apartado.<br />

Por último, descalificando nuestra previsión, el “Día de los sin techo”<br />

prácticamente resulta ignorado en la totalidad de los medios, a pesar de que<br />

tiene lugar en una fecha en la que estamos realizando nuestro trabajo de<br />

campo (22 de noviembre de 2009), por lo que habrían sido registradas todas<br />

las informaciones producidas, y a pesar de los esfuerzos de difusión mediática<br />

que todos los años realizan las entidades implicadas.<br />

Lógicamente, como se percibe en el siguiente cuadro, el peso de las<br />

informaciones varía en los diferentes diarios, en algunos casos de manera<br />

bastante notable. La información institucional tiene un eco mucho mayor en La<br />

Vanguardia, ABC, El Mundo y La Voz de Galicia, siendo El País el diario que<br />

menor peso proporcional le concede. Las ONG tienen una presencia<br />

especialmente destacada en La Voz de Galicia, en consonancia con la gran<br />

101


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

actividad que despliegan, como podrá precisarse en las próximas páginas. Los<br />

diarios que mayor atención informativa conceden a los hechos relativos a<br />

conflicto, violencia y muerte son El Mundo, ABC y 20 Minutos. Por último. El<br />

País, La Vanguardia y 20 Minutos son los diarios que mayor atención y difusión<br />

conceden a las actuaciones relativas a la “Campaña del Frío”<br />

Gráfico 3.13 Contenidos básicos de la información según diarios<br />

Resulta también revelador observar la relación entre el protagonista de la<br />

información y los contenidos de esta. Como ya fue señalado, en la mayor<br />

parte de las informaciones el protagonista es colectivo: los diarios, de modo<br />

abrumador, informan sobre el conjunto de las PSH. Sin embargo, predomina<br />

de modo elocuente el protagonista individual cuando las informaciones<br />

remiten a hechos de violencia, conflicto y muerte.<br />

102


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Gráfico 3.14 Temáticas predominantes según protagonistas de la información<br />

3.3.3.8 Información especializada: Boletín mensual Noticias psh<br />

Sin duda resultaría de gran interés el contraste entre la información<br />

seleccionada, elaborada y emitida por los grandes periódicos y la que generan<br />

las diversas entidades que trabajan con el colectivo de las PSH. Feantsa,<br />

Faciam, Cáritas, Fundación Rais, Asociación Realidades, Solidarios para el<br />

Desarrollo, Fundación San Martín de Porres, Fundació Arrels, Red Acoge,<br />

Albergue San Juan de Dios... emiten una amplia información a través de sus<br />

103


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

páginas web oficiales, blogs, boletines, revistas, comunicados en jornadas y<br />

seminarios, etc. Ese propósito, con afanes académicos, superaría los objetivos<br />

y límites de esta investigación.<br />

Sin embargo, y sin ignorar que nuestro objetivo se limita a analizar la imagen<br />

de las PSH que proyectan y difunden los diarios de mayor difusión e influencia,<br />

nos ha parecido sugerente y oportuno realizar una aproximación limitada y<br />

simbólica a ese contraste. Hemos elegido para ello el Boletín mensual que se<br />

difunde digitalmente con el título de Noticias psh, elaborado por la Fundación<br />

San Martín de Porres. El objetivo era seleccionar los seis boletines mensuales<br />

correspondientes a los seis meses durante los que se realizó el seguimiento de<br />

la prensa periódica. (agosto de 2009 a enero de 2010). Tal paralelismo se tornó<br />

imposible sobre la marcha, puesto que el boletín dejó de publicarse durante<br />

los tres meses en que fue sometido a un proceso de rediseño y mejora en las<br />

posibilidades de interactividad. Además de su periodicidad mensual, la<br />

elección de este informativo especializado se debió al hecho de que las<br />

noticias que destaca proceden en todos los casos de los diarios informativos<br />

convencionales, lo que permitiría establecer ese contraste entre los diversos<br />

criterios utilizados por los medios genéricos y especializados para resaltar el<br />

interés de una información.<br />

Finalmente, los seis boletines seleccionados fueron los que aparecieron<br />

publicados secuencialmente, desde el Nº 39 al Nº 44, que abarcan el tramo<br />

cronológico de agosto de 2009 a junio de 2010. Lógicamente, el volumen de<br />

noticias que aparecen destacadas en estos informativos mensuales es muy<br />

inferior al recopilado en los seis diarios y tampoco llega a producirse la total<br />

sincronización en el tiempo que se buscaba. Debido a ello, hablaremos de<br />

104


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

resultados orientativos pero, en ningún caso, de muestras estadísticamente<br />

contrastables.<br />

Noticias psh incorpora varias secciones habituales -Agenda, Campañas y<br />

Comunicados- que se orientan lógicamente a informar a profesionales y<br />

entidades que trabajan en el sector. Igualmente los apartados de<br />

Documentación y Audiovisual permiten enlazar con una amplia base de<br />

documentos, muchos de los cuales pueden ser consultados o guardados en su<br />

totalidad.<br />

En la cabecera de la página principal del boletín aparece siempre un contador<br />

con las muertes de PSH que vienen produciéndose a lo largo del año (sólo las<br />

muertes por causas “naturales” que han sido difundidas en los periódicos), y<br />

destacan siempre un breve editorial y una selección de entre tres y cinco<br />

noticias consideradas más importantes desde la publicación del anterior<br />

boletín (Junto a las noticias seleccionadas se puede acceder a una base en la<br />

que aparecen las emitidas en todos los boletines anteriores). Pero son los<br />

contenidos editoriales y la selección puntual y actual de noticias los elementos<br />

que tienen un especial interés a nuestros efectos.<br />

105


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

<strong>Imagen</strong> parcial de la portada del Boletín mensual digital Noticias.psh. Nº 44. Julio 2010<br />

106


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Una amplia muestra de las noticias destacadas durante los seis números de los<br />

boletines elegidos es la siguiente:<br />

Los educadores de calle del Ayuntamiento de Vitoria calculan que duermen en<br />

la calle hasta 600 indigentes (El triple que hace tres años)<br />

Casi 600 personas sin hogar durmieron en las calles de Madrid este invierno.<br />

Un 10 % más que en el anterior.<br />

Un hospital para los sin techo. Programa pionero del Ayuntamiento de Bilbao<br />

(Nº 39)<br />

Exigen la retirada del juego de los mendigos (varias entidades que trabajan<br />

con personas sin hogar)<br />

Nace una nueva congregación en Jaén para ayudar a los sin techo<br />

Manolo Lama pide perdón por las burlas que le hizo a un mendigo en<br />

Hamburgo.<br />

Las Ong de Vigo aplauden el proyecto de albergue pero reclaman más camas<br />

y un comedor.<br />

(Nº 40)<br />

Cientos de vecinos de Txurdinaga exigen paralizar el centro de baja exigencia<br />

para los sin techo<br />

Una enfermera de Torrejón aborda los problemas sanitarios de los sin techo<br />

Personas sin techo reclaman atención pública también los fines de semana<br />

“Miguel: Quince años en la calle” Un dibujante resurgido de sus cenizas<br />

(Nº 41)<br />

107


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Un jurado declara culpable a un hombre que mató a un mendigo<br />

Pagan a los vagabundos para que se peleen y poderlos grabar.<br />

(Nº 42)<br />

La crisis llena las zonas verdes de Barcelona de indigentes<br />

El número de sin techo crece un 42,6 % en Cataluña (Informe del Gobern)<br />

Cifra record en el albergue (Castellón)<br />

Este año aumentará la afluencia de inmigrantes y personas sin hogar<br />

(Nº 43)<br />

El polémico “Mendigogame” celebra su éxito en la red<br />

El centro Padre Cristóbal, de Córdoba, celebra doce años de acogida a las<br />

personas sin hogar<br />

Un centenar de voluntarios hace un barrido por Bilbao para elaborar un mapa<br />

de los “sin techo”<br />

(Nº 44)<br />

Una vez agrupadas las noticias del boletín, a lo largo de seis meses, con los<br />

mismos criterios con que fueron agrupadas las noticias de los diarios, tal y<br />

como se mostraba en un cuadro anterior, los resultados comparativos son los<br />

siguientes:<br />

108


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Gráfico 3.15 Temáticas predominantes en prensa diaria y boletín mensual<br />

especializado<br />

La orientación de la información seleccionada difiere, entre ambos tipos de<br />

vehículos informativos, especialmente en dos aspectos: las noticias conflictivas<br />

tienen un peso muy superior en los periódicos que en el boletin especializado.<br />

A su vez, Noticias psh concede mayor relevancia a las informaciones<br />

relacionadas con asociaciones y voluntarios dedicados a las personas sin hogar.<br />

Pero no se trata solamente de la selección de las noticias, sino tambien de los<br />

temas de interés que predominan. Los contenidos destacados en los<br />

editoriales de los números seleccionados del boletín parecen dibujar un<br />

colectivo y una realidad <strong>social</strong> que dificilmente puede superponerse a los<br />

mismos hechos considerados desde la narración de los diarios. Los temas<br />

sobre los que editorializa Noticias psh son:<br />

109


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

- Nuevo Informe sobre las personas sin hogar en la prensa 2008<br />

- Doce muertes desde el anterior boletin (en época veraniega)<br />

- Celebración del Día de los sin techo<br />

- Campaña para la retirada del videojuego Mendigogame<br />

- Elección de Miss Sin Techo en Bélgica<br />

- Despues de un año de conflicto, el Ayuntamiento anuncia un nuevo albergue.<br />

Hubo gran presión <strong>social</strong> (Vigo)<br />

- Reacciones contra las burlas en directo de un presentador deportivo a un<br />

mendigo en Hamburgo<br />

- Dos estudios muy distintos. En Barcelona analizan la exclusión residencial. En<br />

Madrid la Policía Municipal elabora un Mapa de riesgo en el que mezcla<br />

personas que viven en la calle con las que practican la mendicidad<br />

- Jornadas sobre el Decálogo para la erradicación del sinhogarismo<br />

- Administraciones públicas y entidades privadas han presentado balance en<br />

Junio. Han aumentado las atenciones en 2009 respecto al año anterior<br />

- El conflicto en Vigo entre Xunta, alcalde y vecinos retrasa la puesta en marcha<br />

del albergue<br />

110


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

3.4 Análisis cualitativo de la información<br />

3.4.1 Introducción<br />

En la fase interpretativa, el objeto de análisis no son ya las noticias aisladas. El<br />

análisis discursivo trata de contextualizar la noticia -en el propio medio y en el<br />

mundo de referencia informacional- y busca desvelar el sentido. Ot<strong>org</strong>a<br />

significación al texto manifiesto, a la declaración explícita, pero también trata<br />

de aflorar contenidos latentes y espacios ocultos. Recordemos que, si el<br />

lenguaje es significativo, los silencios también pueden resultar muy elocuentes,<br />

como lo son los balbuceos, las imprecisiones o los términos peyorativos.<br />

En ocasiones, la propia mirada del investigador acota el objeto de análisis,<br />

inyectando en todo el proceso investigador un sesgo limitante. Lejos del<br />

convencional análisis de contenido, que busca en el texto términos prefijados<br />

como indicadores de las noticias perteneciente al corpus, la lectura y<br />

recopilación de contenidos que hemos realizado directamente (sin acudir a<br />

colaboradores cualificados), ha buscado seleccionar, con mirada abarcadora,<br />

aquellos contenidos que, de forma directa o tangencial, construyen imagen en<br />

relación al universo de PSH.<br />

El análisis pretende superar la dimensión informativa centrada en los contenidos,<br />

para tratar de reconstruir el universo ideológico en el que las noticias aisladas<br />

pasan a formar parte de una trama narrativa coherente que se constituye como<br />

un modo de representación del mundo al que pertenecen los lectores. En<br />

contraste con aproximaciones más individualistas, la tradición sociológica en<br />

que se inscribe nuestro trabajo analiza la ideología, en sentido abarcador,<br />

111


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

como “producto de un grupo <strong>social</strong>, considerándola como un sistema de ideas<br />

y representaciones que comprende las costumbres y estilo de vida de un grupo<br />

de sujetos y sosteniendo, por tanto, que hace referencia a algo más que a<br />

simples experiencias aisladas de miembros individuales" . (Seoane y Herrera<br />

1989:69).<br />

Los textos en contexto son el motivo de análisis de este apartado. En ocasiones,<br />

sin embargo, se hace necesario aludir a los silencios, a las carencias más<br />

evidentes en el corpus analizado. Es comúnmente aceptado que la lectura de la<br />

noticia no se realiza sólo a partir de lo que dice: lo ausente y connotado y otros<br />

elementos de referencia -las competencias culturales, por ejemplo-, son<br />

generalmente necesarios para darle sentido. Incluso las interpretaciones más<br />

conductistas reconocen el previsible mayor impacto de una noticia en función<br />

del tratamiento de sus elementos de significación que el estrictamente<br />

derivado de la frecuencia estadística de su aparición, aunque no neguemos la<br />

importancia y derivaciones de ésta.<br />

Ningún texto es una isla. Existe una compleja estructura de interrelaciones,<br />

una reserva de ecos que provienen de otros textos, expresiones, comentarios,<br />

situaciones, personajes. En definición aportada por Jensen, la intertextualidad<br />

es "el proceso en que los elementos del discurso comunican significados<br />

específicos a las audiencias porque hacen referencia a otros discursos, temas,<br />

géneros o medios que nos son familiares, que pueden también estar presentes<br />

o implícitos en el contexto de recepción" . (Jensen 1997:25).<br />

Resulta un concepto especialmente interesante en el análisis de la<br />

comunicación de masas, ya que los medios de comunicación dialogan -aun<br />

112


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

cuando manifiesten distanciamiento o desdén hacia el adversario- en un<br />

permanente efecto eco que no afecta exclusivamente al índice de sus<br />

contenidos.<br />

Una antigua sentencia asegura que “hay muchos mundos, pero están en éste”;<br />

hay que intentar percibirlos, así como sus procesos de conformación y cambio.<br />

En España venimos asistiendo en las últimas décadas a varios procesos de<br />

transición que afectan directamente a nuestro objeto de estudio: una nueva y<br />

rápida transición demográfica, paralela e íntimamente asociada a otras<br />

transiciones -política, cultural, productiva- que dan cuenta de un abarcador<br />

cambio <strong>social</strong>. Procesos que, al igual que a los ciudadanos “integrados”,<br />

afectan – tal vez de modo más difícilmente perceptible- a las personas situadas<br />

en los límites del sistema <strong>social</strong>.<br />

Los datos, los hechos, los acontecimientos, que definen esas transiciones se<br />

perciben, se viven, se transmiten, cargados de significación, de sentidos que no<br />

se presentan unívocos, que son múltiples pues múltiples son los sujetos, los<br />

colectivos, que los nombran, y diferentes también los lugares -los espacios<br />

<strong>social</strong>es- desde los que son nombrados. Por ello aludimos al proceso de<br />

‘construcción <strong>social</strong>’; y si constatamos que la realidad <strong>social</strong> se construye<br />

<strong>social</strong>mente, debemos derivar que también la información, la conformación de<br />

formas de nombrar, son elaboración <strong>social</strong>.<br />

Las imágenes <strong>social</strong>es de las personas sin hogar están, como no podía ser de<br />

otra manera, vinculadas a esos procesos de construcción. Y tienen que ver con<br />

valores, jerarquías y códigos de amplio alcance. Si pensamos por ejemplo, sin<br />

hacer saltos excesivos en el tiempo, en las personas sin hogar de los años<br />

113


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

cuarenta, de los sesenta, podemos representarnos algunas significativas<br />

diferencias y evoluciones respecto a los ciudadanos sin hogar del siglo XXI.<br />

En el conjunto de referencias que los medios analizados asignan a quienes<br />

integran el colectivo de personas sin hogar -es decir, en el conjunto de<br />

unidades informativas construidas en torno a este colectivo- es preciso<br />

delimitar en primer lugar los campos semánticos o campos de sentido que nos<br />

permitan una mejor comprensión de nuestro objeto de estudio.<br />

El conjunto de unidades informativas analizadas se polariza, de manera<br />

notable, en torno a dos ejes semánticos básicos:<br />

El que podemos caracterizar genéricamente como articulado alrededor<br />

de la cohesión <strong>social</strong>: Comprende todas las unidades informativas,<br />

interrelacionadas, relativas al papel de las instituciones, a la labor de<br />

las entidades de acción <strong>social</strong>, a las actitudes de los ciudadanos y a la<br />

propia presencia/ausencia de los protagonistas, las PSH.<br />

La gran variedad de informaciones que remiten a acontecimientos y<br />

situaciones de malestar, conflicto, violencia y muerte. Eje semántico al<br />

que podemos calificar como significante de las situaciones de anomia y<br />

conflicto <strong>social</strong>.<br />

Ambos ejes de significación contienen y explican en torno a un 85 % de<br />

la totalidad de las unidades informativas recopiladas. Las restantes<br />

informaciones, aun con mucho menor respaldo cuantitativo, remiten a<br />

aspectos de relevancia cualitativa no despreciable: el impacto de la crisis<br />

en la depauperización de las familias más vulnerables, incluidas las de<br />

114


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

inmigrantes sin recursos, y el impacto internacional de hechos puntuales<br />

dotados de gran potencial mediático.<br />

3.4.2. Actores y factores de cohesión <strong>social</strong><br />

El modo en el que se gestan y desarrollan los procesos <strong>social</strong>es suele implicar a<br />

diversos actores de manera compleja, lo que dificulta el establecimiento de<br />

tipologías o la clara delimitación de la importancia y/o influencia de cada uno<br />

de ellos en cada una de las fases del proceso. El campo de sentido al que<br />

hemos denominado como el de la cohesión <strong>social</strong> se sustenta al menos en la<br />

intervención de cuatro actores principales: las instituciones (especialmente las<br />

más cercanas al ciudadano, Ayuntamientos y CCAA); entidades <strong>social</strong>es que<br />

trabajan con las personas sin hogar (diversas en cuanto a su arraigo, su<br />

tradición, el volumen de su actividad, el reconocimiento <strong>social</strong>...), los<br />

ciudadanos significándose de modo activo e independiente y las PSH, los<br />

teóricos protagonistas de la realidad <strong>social</strong> estudiada.<br />

El resultado obvio es que en buena parte de las informaciones aparecen<br />

mencionados dos o más de los agentes implicados. Porque el propio decurso<br />

de la realidad <strong>social</strong> se define a partir de las relaciones de cooperación y<br />

conflicto entre los diferentes sujetos de los acontecimientos. Hemos<br />

procurado por ello asignar cada una de las informaciones al que puede ser<br />

considerado protagonista principal en cada uno de los casos. De este modo<br />

nos encontramos ante una escalera descendente en la que el mayor volumen<br />

informativo corresponde a las diversas actuaciones de <strong>org</strong>anismos e<br />

instituciones públicas, seguido del notable papel de las entidades <strong>social</strong>es<br />

115


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

privadas, las manifestaciones puntuales de los ciudadanos con carácter<br />

individual y, por último, la presencia escasa, aunque teóricamente<br />

protagonista, de las propias personas sin hogar.<br />

3.4.2.1. El papel de las instituciones<br />

La amplia presencia de los <strong>org</strong>anismos públicos en la información relativa a<br />

personas sin hogar termina obteniendo lo que puede calificarse como un<br />

resultado neutro: la difusión y reconocimiento de las actuaciones positivas se<br />

compensa con la denuncia de pasividad o de actuaciones desacertadas. Desde<br />

el punto de vista cuantitativo predominan claramente las unidades<br />

informativas de denuncia y de crítica. Pero estas se encuentran en cierto modo<br />

sobredimensionadas cuando la misma denuncia procede de diversos agentes.<br />

Aunque esa redundancia implica también que la noticia presenta un interés<br />

especial. El intento de aplicar un cierto rigor analítico debe llevarnos a<br />

compensar el desequilibrio entre ambos tipos de noticias, lo que puede<br />

mostrarse claramente a través de un ejemplo:<br />

Noticia favorable a las instituciones: “ El Hogar del transeúnte recibe<br />

2.500 euros más por el aumento de usuarios” –Santander-<br />

(20 Minutos 20/8/09). Solo es preciso emitir una vez esta noticia<br />

Noticia desfavorable a las instituciones: “Enfado por descartar el<br />

refugio de indigentes” – Vigo- (La Voz de Galicia 5/9/09). La amplia<br />

crítica <strong>social</strong> a este hecho producirá varias y diversas noticias<br />

similares generadas por diversos actores.<br />

116


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Si únicamente tuviéramos en cuenta el elemento cuantitativo (frecuencia de<br />

las informaciones) habría que concluir que la imagen mediática de las<br />

actuaciones administrativas es mayoritariamente negativa. Sin embargo, y<br />

puesto que los hechos noticiables son complejos y diversos, parece oportuno<br />

establecer elementos de ponderación como el anteriormente ejemplificado.<br />

Búsqueda de equilibrio o balance que nos devuelve a la situación que ya<br />

hemos señalado: La actuación de las administraciones públicas en relación con<br />

los recursos que precisan las personas sin hogar aparece reflejada en los<br />

medios de modo ambivalente. Tanto las actuaciones adecuadas como las<br />

erróneas (o la falta de actuaciones) obtienen una proyección mediática similar.<br />

Si esta imagen proyectada por los medios reflejara con fidelidad la dinámica<br />

<strong>social</strong> real, puede decirse que la sociedad civil, aun reconociendo<br />

determinadas actuaciones y logros de las administraciones públicas, se<br />

muestra notablemente exigente al considerar que los recursos para personas<br />

sin hogar son en muchos casos insuficientes.<br />

En lo que se refiere a las informaciones favorables, predominan las relativas a<br />

los tradicionales medios asistenciales (albergues y comedores):<br />

“El Centro de Acogida Municipal alcanza el 97 por ciento de su capacidad en<br />

2009” –Sevilla- (ABC, 17/11/09)<br />

El Consell asegura 670 plazas para las personas sin techo” – Valencia- (ABC,<br />

30/10/09)<br />

“El Ayuntamiento subvenciona a Cáritas para crear un centro con 67 plazas<br />

para personas sin hogar” –Sevilla- (ABC, 28/8/09)<br />

“La Xunta acuerda con las Misioneras del Silencio ampliar su albergue con 29<br />

camas” –Vigo- (La Voz de Galicia, 28/1/10)<br />

117


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

”El área de Acción Social de Bilbao aumenta hasta 609.000 euros la<br />

subvención concedida a los comedores <strong>social</strong>es” (20 Minutos, (24/1/10)<br />

Se publican los resultados de dos informes sociológicos orientados a conocer el<br />

perfil de las PSH y evaluar la idoneidad de los recursos existentes: “La mitad,<br />

extranjeros y enfermos” (El País, 5/12/09) encargado por la Diputación de<br />

Vizcaya, destaca la inmigración como conformadora del nuevo perfil de los<br />

indigentes y señala también la conflictividad de algún sector de los residentes<br />

magrebíes. “La mitad de los indigentes de Barcelona sufre algún trastorno<br />

mental” (20 Minutos, 25/1/10). De este estudio, realizado por la Fundación<br />

Jaume Bofill y la Fundación Sant Joan de Déu, el diario que lo publica extrae un<br />

titular impactante y sensacional, si bien uno de los autores del estudio aclara<br />

que “la mayoría de los trastornos que sufren estas personas son estrés,<br />

angustia y ansiedad, producto del hecho de vivir en la calle, dormir mal y pasar<br />

miedo”. El informe señala, además, que tanto los trastornos mentales como<br />

las toxicomanías tienden a aparecer después de la estancia en la calle.<br />

Junto a las tradicionales actuaciones asistenciales, también obtienen difusión<br />

algunas iniciativas que buscan superar lo convencional y tienden a recuperar la<br />

dignidad de las PSH, superando la imagen de cronicidad y supervivencia<br />

asociada a los recursos convencionales. En esta línea destaca el ambicioso<br />

proyecto “Sen teito”, integrado en el Plan Galego de Inclusión <strong>social</strong> y<br />

desarrollado por la Xunta de Galicia. “Un plan para erradicar la pobreza<br />

atendió a 838 indigentes en Galicia este año” ((La Voz de Galicia, 4/8/09). El<br />

citado plan, en colaboración con Cruz Roja realizó un minucioso seguimiento,<br />

diagnostico y búsqueda de soluciones para un importante número de PSH. Las<br />

restantes iniciativas que merecen ser destacadas son las siguientes:<br />

118


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

“ El Ayuntamiento ya presta atención psiquiátrica a las personas sin techo” –<br />

Valencia- (ABC, 16/10/09)<br />

“”El Concello anuncia la puesta en marcha de un servicio pionero de<br />

acompañamiento a los sin techo” –Ferrol-(La Voz de Galicia, 13/8/09)<br />

“Un centenar de escolares reflexionan sobre los derechos y la forma de vida de<br />

las personas sin hogar” –A Coruña- (La Voz de Galicia, 21/11/09)<br />

Los albergues y centros de baja exigencia carecen de atención psiquiátrica<br />

continuada y específica, por lo que los pacientes son derivados a las urgencias<br />

de la red sanitaria pública. Sin embargo, cerca de la mitad de las PSH padecen<br />

algún tipo de problema psiquiátrico (INE:2005). La carencia de esta atención<br />

especializada y continuada es seguramente la más grave entre las que padecen<br />

las actuales redes de atención a las personas sin hogar. Resulta por ello<br />

especialmente innovadora la actuación del Ayuntamiento de Valencia para<br />

crear un programa específico –Cast- desarrollado por dos psiquiatras, dos<br />

psicólogos y una enfermera, y que ya ha atendido a 138 personas sin hogar. El<br />

servicio pionero implantado por el Concello de Ferrol incluye varias iniciativas<br />

que no resultan habituales. Entre ellas, un programa de acompañamiento, la<br />

creación de talleres de habilidades <strong>social</strong>es o la creación de una ruta por<br />

diversos lugares del municipio para sensibilizar a los ciudadanos sobre las PSH.<br />

De igual modo, en el ámbito de las actuaciones administrativas consideradas<br />

elogiables se enmarca una entrevista con el jefe del Samur Social, Darío Pérez:<br />

“Duele mucho ver a gente en soledad”- Madrid- (ABC, 27/9/09). El entrevistado<br />

resalta los aspectos de la lucha diaria contra la soledad, la marginación y la<br />

exclusión <strong>social</strong> y, al ser preguntado sobre si es más duro estar en la calle<br />

119


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

siendo joven o anciano, señala: “Al joven, en teoría, le queda mucho recorrido.<br />

Y te rebelas por verle en medio de la nada. El anciano ya tiene el recorrido<br />

hecho y te preguntas si es justo que llegue a esa edad con la soledad como<br />

compañera. Al final, sientes que ni uno ni otro se merecen esa vida”.<br />

A la entrada del invierno, los Ayuntamientos de las grandes ciudades ponen en<br />

marcha sus respectivas Campañas del Frío. Como ya ha sido expresado en<br />

forma cuantitativa, esta circunstancia es la de mayor calado mediático: el gran<br />

enemigo de los indigentes es el que les hace más visibles. (El 8,7 % de las<br />

unidades informativas). Y, a su vez, este especial esfuerzo de las<br />

administraciones locales debe considerarse en el ámbito de las actuaciones<br />

positivas destinadas a las personas sin hogar, sin olvidar que todos los años se<br />

suceden las críticas respecto a la insuficiencia de los recursos “extraordinarios”<br />

aportados. Irónicamente, y en el extremo contrario, el “adelgazamiento” de los<br />

recursos por vacaciones de verano obtiene una escasa relevancia informativa.<br />

Sin embargo, es obvio que las PSH no descansan, no tienen “vacaciones de<br />

verano”. La reducción en plazas de albergues y comedores durante el estío<br />

supone un serio contratiempo para un importante número de indigentes que<br />

se ven forzados a reconstruir sus estrategias de supervivencia. ¿Serán menos<br />

preocupantes las muertes propiciadas más o menos indirectamente por exceso<br />

de calor, que las muertes por exceso de frío?<br />

Si retomamos la etapa invernal, puede observarse que los ejes discursivos que<br />

aportan las unidades informativas relativas a esta actuación específica fluyen<br />

en paralelo del siguiente modo: actuación municipal, labor especial de las<br />

entidades <strong>social</strong>es y reportajes sobre la vida de los sin hogar a partir de la<br />

experiencia del frío. Ejemplo de las informaciones relativas a las medidas<br />

120


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

institucionales lo ofrecen los siguientes titulares:<br />

“La campaña del frío tendrá mas plazas que nunca en albergues y pensiones”<br />

–Madrid- (20 Minutos, 17/11/09)<br />

“El albergue municipal de Zaragoza activa el protocolo por frío, que permite<br />

acoger a 37 nuevos transeúntes” –Zaragoza- (20 Minutos, 8/01/109<br />

“Protección Civil trasladará a albergues a los indigentes que lo soliciten a<br />

causa de la ola de frío” –A Coruña- (La Voz de Galicia 8/01/10)<br />

“ La situación de 300 indigentes se agrava con la brusca bajada de<br />

temperaturas en la ciudad” –Vigo- (La Voz de Galicia 15/12/09)<br />

Otras informaciones específicas sobre la campaña del frío se centran en<br />

destacar expresamente la labor que realizan los voluntarios y profesionales de<br />

las diversas entidades sin ánimo de lucro que trabajan con las personas sin<br />

hogar:<br />

“Proteger del frío a los sin techo” – Madrid. (El País, 19/12/09)<br />

“El dispositivo de la Cruz Roja atendió a 14 personas sin hogar debido a las<br />

bajas temperaturas” – A Coruña- (La Voz de Galicia, 12/01/10)<br />

“Un café caliente para combatir en Castellón el frio de la noche a la<br />

intemperie” – Castellón- (El Mundo, 18/12/09)<br />

El coyuntural protagonismo que las personas sin hogar adquieren en estas<br />

fechas, debido a las bajas temperaturas, lleva a algunos medios a aumentar el<br />

foco informativo elaborando reportajes que buscan ampliar la información<br />

sobre las condiciones de vida de las personas sin hogar. Destaca en ello el<br />

diario El País con los informes elaborados por Beatriz Jiménez “La gélida noche<br />

de los irreductibles” (20/12/09) y por Jerónimo Andreu: “ Noches de frío en los<br />

121


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

huesos” (11/01/10). Los reporteros realizan un recorrido por los lugares en que<br />

pernoctan los indigentes y procuran descifrar las razones por las que se<br />

resisten a acudir a un albergue, así como describir los recursos que utilizan<br />

para protegerse del frío. “Nunca hay plazas libres” señala uno de los indigentes<br />

consultados. Afirmación que desmiente Darío Pérez, responsable del Samur<br />

Social.”No es cierto que no haya plazas”. “Muchas veces rechazan los<br />

albergues como mecanismo de defensa, tienen miedo a perder su libertad o<br />

su anonimato porque creen que allí se les va a fichar”. Según el profesional<br />

mencionado, en otras ocasiones serían los problemas mentales los que les<br />

llevan a eludir los albergues: “Si alguien se cree Napoleón, no va a ir a un<br />

albergue a dormir, prefiere hacerlo a la puerta del Palacio Real”. En otros<br />

casos, los menos, el problema estaría en que algunas personas desconocen la<br />

existencia de esos recursos. También aparece una barrera en la normativa de<br />

los centros que impide alojarse junto con las mascotas: “A mí no me dejan<br />

entrar con mi perrita Neca. Y sin ella no voy a ninguna parte”.<br />

Hasta ahora no nos hemos referido a la información que proporcionan las<br />

imágenes, normalmente fotografías, porque en el conjunto de unidades<br />

informativas tienen una presencia muy reducida. No obstante, resulta<br />

bastante evidente la tendencia de esta información gráfica a mostrar la cara<br />

más pasiva y tópica de las personas sin hogar: tumbados en las aceras o<br />

portales, rodeados de cartones, de bolsas con sus pertenencias y con envases<br />

de bebidas al lado. El acompañamiento gráfico de los reportajes mencionados,<br />

realizados de noche y con frío, profundiza esa imagen de abandono y<br />

desamparo. “La cuestión de las fotografías con las que se ilustran las noticias<br />

sobre sinhogarismo merecería por sí sola un estudio específico puesto que en<br />

gran medida la construcción mediática del problema viene generada a partir<br />

122


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

de la necesidad de acompañar el texto de imágenes sintéticas y<br />

suficientemente ilustrativas. En este sentido lo habitual es recoger únicamente<br />

aquellas estampas de personas sin hogar que más refuerzan visualmente el<br />

estereotipo dominante, descartando las fotografías de todas aquellas PSH que<br />

presentan un aspecto “normal” puesto que resultan sencillamente inválidos<br />

para ilustrar gráficamente cualquier noticia sobre el tema ya que no llevan en<br />

su aspecto externo ninguna seña de identidad suficientemente característica<br />

que les vuelva identificables a primera vista”. (Cabrera 2005:23)<br />

Las informaciones críticas respecto a la actuación <strong>social</strong> de las<br />

administraciones públicas son diversas, pero se concentran claramente en dos<br />

polos, correspondientes a otros tantos movimientos ciudadanos de rechazo,<br />

de muy diverso signo. En ambos casos hablamos de situaciones que, lejos de<br />

resultar noticias aisladas, conforman un proceso temporal amplio que obtiene<br />

también un eco sucesivo en los periódicos.<br />

El primer caso se sitúa en Vigo, donde el edificio conocido popularmente como<br />

la Gota de Leche, perteneciente a la Xunta, se encuentra en estado de<br />

abandono. Políticos de la oposición, entidades <strong>social</strong>es y ciudadanos se<br />

movilizan de modo creciente para lograr que sea rehabilitado y utilizado como<br />

un albergue para personas sin hogar. Se trata de un evidente movimiento de<br />

solidaridad con ese colectivo, que choca contra los intereses encontrados de<br />

las diversas administraciones. El conflicto queda perfectamente reflejado en la<br />

siguiente secuencia de titulares:<br />

“El Valedor presiona a la Xunta para que se abra ya el albergue”<br />

“ El Concello pide a la Xunta que abra inmediatamente el albergue<br />

123


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

para indigentes”<br />

“Xunta y Concello dejan sin solución a las personas sin techo de la<br />

ciudad”<br />

“Los tres grupos políticos del Concello proponen soluciones distintas<br />

para el albergue”<br />

“La historia del albergue pone en evidencia el escaso pudor y<br />

sensibilidad de los políticos”<br />

–Vigo- (La Voz de Galicia, 18/8, 8/10, 9/10, 20/11,15/12/2010)<br />

La continua sucesión de conflictos institucionales retrasa indefinidamente la<br />

resolución del problema y, paralelamente, alimenta un creciente malestar<br />

entre muy diversos colectivos ciudadanos que terminan asociándose para<br />

mostrar su rechazo hacia la ineficacia de los gestores en manifiestos y<br />

movilizaciones, como se verá en el siguiente apartado.<br />

(La Voz de Galicia. 9/10/09)<br />

124


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

El otro polo de las actuaciones críticas hacia las administraciones se sitúa en la<br />

ciudad de Barcelona. En este caso, son también los políticos de oposición, las<br />

entidades cívicas y los ciudadanos individuales quienes muestran los diversos<br />

rostros del descontento. En Barcelona se decantan de modo explícito los<br />

modernos conflictos relativos al valor, el uso y la ocupación del espacio<br />

urbano. La crítica, en este caso, se centra en el deterioro, abandono y suciedad<br />

de diversos espacios públicos de la ciudad, incluidos lugares emblemáticos del<br />

centro, como el barrio del Raval y el entorno del mercado de la Boquería.<br />

Abandono que viene acompañado de la ocupación de esos espacios por los<br />

“nómadas”, indigentes y/o drogadictos. (Dependiendo del matiz atribucional<br />

de los discursos, podríamos haber descrito la problemática a la inversa;<br />

primero son los indeseables ocupantes del espacio urbano; luego la suciedad y<br />

el abandono).<br />

“CIU pide medidas ante los “nómadas” en Ciutat Vella”<br />

“Las plazas de civismo creadas en Barcelona siguen sin resolver sus<br />

problemas” -Barcelona- (La Vanguardia, 4/8, 16/10)<br />

“Barcelona instala bancos “antimendigos” y esquinas “antiorines”<br />

contra los incívicos” - Barcelona- (20 Minutos, 30/9)<br />

Tres miradas a un mismo problema. CIU denuncia la “pasividad” del gobierno<br />

municipal ante el fenómeno de los “nómadas” o transeúntes que ocupan<br />

espacios públicos para comer, beber y dormir, “empeorando cada verano la<br />

convivencia en nuestras calles y plazas”. Sugieren que se les facilite “ducha,<br />

comida y transporte en tren al albergue más próximo”.<br />

125


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Un reportaje de La Vanguardia recorre las plazas y lugares que el<br />

Ayuntamiento había seleccionado en el 2005, en los diez distritos de la capital,<br />

como “laboratorios para su plan de fomento del civismo”. La conclusión es<br />

que, si bien algunos lugares lograron resolver viejos problemas de convivencia,<br />

otros han visto agravarse la situación, o trasladarse a lugares cercanos: Plaza<br />

Villa de Madrid (una valla provisional impide que los indigentes duerman);<br />

Plaza de Fort Pienc (adolescentes que juegan al fútbol y heces de perro<br />

visibles); Pasaje de Trinitat Vella (mejora la limpieza pero se agrava el comercio<br />

de droga); Plaza Osca (disminuyen las molestias ruidosas y las pintadas); Plaza<br />

de Bruixa (los problemas de incivismo pasan a la historia); Jardines de Brusi<br />

(menos grafitis, pero persiste la suciedad en el parque) ...<br />

En el distrito de Ciutat Vella se aplican “soluciones urbanísticas” con el fin de<br />

evitar conductas incívicas en la calle (en algún otro lugar de este informe esas<br />

medidas son calificadas como “urbanismo preventivo”, eufemismo que se<br />

limita a nombrar las medidas municipales destinadas a erradicar a las personas<br />

sin hogar de un determinado espacio público). Una de las “soluciones”<br />

urbanísticas consiste en la instalación de bancos “antimendigos” (con varios<br />

apoyabrazos –dos o cuatro, según los formatos- que impiden ser usados como<br />

cama) y esquinas “antiorines” diseñadas en rampa para evitar la<br />

correspondiente micción. En el siguiente apartado, relativo a entidades cívicas<br />

y ciudadanos, retomaremos la problemática desde las ópticas propias de los<br />

residentes en la ciudad.<br />

Las problemáticas viguesa y barcelonesa que hemos descrito destacan<br />

claramente sobre el resto. No obstante, las críticas a las instituciones por las<br />

carencias o deficiencias en los recursos mínimos son comunes a buena parte<br />

de las grandes ciudades españolas, para lo que sirve la siguiente muestra:<br />

126


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

(20 Minutos. 30/09/09)<br />

“Sin albergues en la isla para acoger a todos los sin techo”<br />

– Fuerteventura- (ABC, 25/10/09)<br />

“La situación de los sin techo en las calles de Sevilla se vuelve<br />

dramática”- Sevilla- (ABC, 8/1/10)<br />

“Un nuevo año sin techo” –Granada- El Mundo, 3/1/10)<br />

“La Policia desaloja a 40 indigentes de la Comandancia Militar de<br />

Ibiza” – Ibiza- (El Mundo, 13/11/09)<br />

127


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

“El refugio de los rechazados” – Málaga- (El País, 21/09/09)<br />

Proliferan los mensajes relativos a las grandes ciudades que, en medidas<br />

diversas, no disponen de alojamientos suficientes para albergar a los<br />

indigentes que en ellas habitan. Sin embargo, la dialéctica propia de todas<br />

estas situaciones es siempre la misma: las fuentes municipales destacan la<br />

calidad y variedad de los servicios <strong>social</strong>es que prestan a sus ciudadanos; las<br />

entidades cívicas, <strong>social</strong>es y/o vecinales muestran las innumerables carencias.<br />

En la ciudad de Vigo, que hemos destacado por la movilización vecinal a favor<br />

de un albergue, se estima que las personas de la calle deben recorrer<br />

diariamente “casi medio maratón” para acudir a los dispersos servicios <strong>social</strong>es<br />

que se les ofrecen. “Los 19 kilómetros de la ruta del pobre” –Vigo- (La Voz de<br />

Galicia (2/8/09). Según el gerente del albergue de los Misioneros de Teis “ La<br />

atención a los pobres en la ciudad la hacemos entidades privadas; nosotros,<br />

Cruz Roja, Sereos, Médicos del Mundo, Cáritas, Imán .... Cada una está donde<br />

puede, repartidas por la ciudad, y los sin techo se pasan el día caminando por<br />

la calle, de una a otra”. En buena parte de los casos se trata de gente enferma,<br />

personas mayores o discapacitados. Sin embargo, y según señala sin lugar a<br />

dudas el podómetro utilizado por el autor del reportaje, cuando acuden de<br />

nuevo al albergue para tener derecho a cena, no más tarde de las 18,30 horas,<br />

han recorrido 19,4 kilómetros, uno menos que la media maratón. “A la<br />

mañana siguiente, cada día, de lunes a domingo, comenzará una nueva ruta<br />

del pobre”.<br />

Por último, en el apartado de las críticas a la actividad institucional, merecen<br />

ser destacados dos hechos que generan diversas unidades informativas: la<br />

Ordenanza de la convivencia en Granada y el conflicto entre munícipes en<br />

128


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Madrid a raíz del fallecimiento de dos indigentes. La Concejalía de<br />

Participación ciudadana de Granada elabora una Ordenanza de convivencia<br />

que no ha sido consensuada ni contrastada con los colectivos <strong>social</strong>es. Estas<br />

entidades se enfrentan y manifiestan para rechazar una directiva plagada de<br />

prohibiciones que afectan a “indigentes, mendigos, artistas callejeros,<br />

trabajadoras del sexo y vendedores ambulantes”.<br />

Por su parte, la muerte de dos personas sin techo en Leganés, en la Comunidad<br />

de Madrid, desata entre políticos madrileños de diverso signo el juego de las<br />

mezquindades. La concejal <strong>social</strong>ista de Servicios Sociales, Emilia Quirós,<br />

manifiesta que no se necesita un albergue porque “atrae pobreza”. Según ella<br />

“el efecto llamada atraería a 100 personas de Usera, de Móstoles, de<br />

Carabanchel, del centro de Madrid y no, mire usted. Los ciudadanos de<br />

Leganés tienen una calidad de vida aceptable y si llega el momento en que se<br />

desestructuran, habrá que poner más recursos o exigir a la Comunidad lo que<br />

nos corresponde”. (ABC, 18/1/10). Por su parte, la concejala popular de<br />

Servicios Sociales del Ayuntamiento de Madrid, Ana Botella, envía un escrito a<br />

ABC que resulta publicado con el título de “La hipocresía de la izquierda”. En él<br />

se destaca que, a raíz del fallecimiento de los indigentes, hemos sabido que en<br />

Leganés hay un albergue para perros, pero no para personas sin hogar. La<br />

autora del texto se pregunta “¿Qué clase de sensibilidad <strong>social</strong> es esta que no<br />

deja lugar para las personas sin hogar? ¿No es hipócrita tener la sensibilidad<br />

como bandera política y, al mismo tiempo, no hacer nada por quienes en<br />

nuestro entorno más cercano necesitan nuestra ayuda?” Para concluir<br />

afirmando que “ser solidario es una actitud que debe comenzar por los que<br />

tenemos más cerca. Quizá por eso en el Ayuntamiento de Leganés prefieren<br />

que las personas en situación de exclusión <strong>social</strong> estén lejos. Si este doble<br />

129


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

juego de los mal llamados progresistas no es hipocresía, desde luego se le<br />

parece mucho” (ABC, 20/1/10).<br />

3.4.2.2 Presencia de entidades cívicas y ciudadanos<br />

Las fundaciones, asociaciones, ong..., que trabajan con las personas sin hogar<br />

en diversos ámbitos, tienen una presencia muy significativa en la prensa,<br />

aunque con una relevancia informativa menor a la concedida a las entidades<br />

institucionales. El 16,1 % de todas las unidades informativas recopiladas tienen<br />

a una de estas <strong>org</strong>anizaciones como actor principal del hecho noticiable. Sin<br />

olvidar que, de modo menos directo, en otro importante número de<br />

informaciones también tienen una presencia secundaria. Es importante<br />

destacar que estas <strong>org</strong>anizaciones que aglutinan los compromisos <strong>social</strong>es de<br />

los ciudadanos tienen una excelente imagen en la prensa. Tan solo una de las<br />

unidades analizadas supone un reproche puntual a una actuación concreta de<br />

una de estas entidades.<br />

La presencia en la prensa diaria de las diversas asociaciones incluye contenidos<br />

agrupables en los siguientes ejes:<br />

Agradecimientos por la labor realizada, incluyendo el recuerdo de<br />

algún miembro significado con motivo de su fallecimiento.<br />

Reflejo y relato de actuaciones realizadas, especialmente en las áreas<br />

convencionalmente más habituales (comedores y albergues).<br />

Difusión de manifiestos, declaraciones y relato de movilizaciones<br />

puntuales en torno a reivindicaciones concretas.<br />

130


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Entrevistas con algún miembro de alguna de las entidades.<br />

Una muestra de agradecimientos queda reflejada en los siguientes titulares:<br />

“El Gobierno de C-LM agradece a Cáritas su dedicación a las personas sin<br />

hogar y compromete su apoyo a la <strong>org</strong>anización” -Toledo- (20 Minutos,<br />

07/01/10)<br />

“El albergue de Talavera de la Reina cumple 25 años. El abrazo de Cáritas” –<br />

Talavera- (ABC, 15/11/09)<br />

“El Padre Ricardo García afirma que recibir la Alta Distinción es un estímulo” -<br />

Castellón- (El Mundo, 09/10/09)<br />

“Ramón Bonet, fundador del albergue Casa los Amigos. Todas sus iniciativas<br />

se volcaron con los más desfavorecidos” –Valencia- (El País, 09/12/09).<br />

Como contrapartida, y en el único caso registrado, una lectora dirige una Carta<br />

al director del diario 20 Minutos para mostrar su malestar por el, según ella,<br />

“trato indigno” recibido por parte de Cáritas. –Madrid- (30/01/10).<br />

La amplia gama de informaciones relativas a actuaciones realizadas por las<br />

entidades cívicas puede sintetizarse en la siguiente muestra:<br />

“Cáritas Diocesana atendió a más de 1.150 personas sin techo el pasado año”<br />

(ABC, 8/1/10). El balance de esta entidad en Toledo registra a más de mil<br />

personas a las que se ha proporcionado “comida, cama, ducha y ropa limpia”.<br />

Asimismo, repartió 4.000 bocadillos, casi el doble que el año 2008.<br />

“Solidarios los 365 días del año” (La Voz de Galicia, 20/12/09). Las Hijas de la<br />

Caridad de San Vicente de Paul, que mantienen el Instituto Benéfico-Social<br />

Padre Rubinos, llevan más de noventa años en A Coruña atendiendo a los más<br />

131


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

necesitados en la residencia de ancianos, la guardería y el Refugio para<br />

personas sin hogar. Además de cubrir sus necesidades básicas se plantean<br />

nuevos retos y han incluido un servicio de Atención <strong>social</strong> dirigido a la<br />

promoción integral de la persona, a brindarles la posibilidad de reconstruir su<br />

historia personal.<br />

“Casa Caridad supera en los seis primeros meses del año las raciones<br />

repartidas en 2008” (El Mundo, 12/8/09). Esta entidad benéfica privada,<br />

declarada de utilidad pública, confía en el aumento de las aportaciones de sus<br />

socios para satisfacer las crecientes demandas. La institución valenciana<br />

reparte cada año en su comedor <strong>social</strong> más de 160.000 raciones de alimento<br />

y su albergue acoge más de 20.000 pernoctaciones. “Aliviando las heridas del<br />

hambre” (El Mundo, 4/1/10). El comedor <strong>social</strong> de Santo Domingo, en Málaga,<br />

ha ofrecido en 2009 más de 82.000 servicios de alimentación a unas 1800<br />

personas. Se destaca igualmente la gran importancia de Bancosol, el gran<br />

banco de alimentos que cubre las necesidades de la mayor parte de las<br />

entidades que trabajan con personas sin hogar. Su actividad de obtención de<br />

alimentos y entrega a las ong se ha duplicado durante el año 2009 y<br />

consideran que deben actuar para satisfacer un mayor volumen de demanda<br />

en 2010.<br />

La prensa acoge también un amplio número de unidades informativas<br />

relacionadas con manifiestos, declaraciones y relato de movilizaciones<br />

puntuales. Sin duda, las <strong>org</strong>anizaciones <strong>social</strong>es pretenden cubrir con esa<br />

amplia presencia pública la escasa o nula capacidad de movilización de las<br />

propias personas sin hogar (por sus peculiaridades de movilidad, carencia de<br />

autonomía y la ausencia de conciencia grupal):<br />

132


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

(20 Minutos. 25/03/09)<br />

En Barcelona, sobre los ya mencionados conflictos de convivencia y de<br />

deterioro, la Fundació Tot Raval, que agrupa a 120 asociaciones, se<br />

lamenta de que el Ayuntamiento, durante años, haya dedicado más<br />

recursos a urbanismo que al trabajo <strong>social</strong> y de cohesión. Rechazan<br />

133


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

igualmente la “estigmatización” que sufre el Raval, fruto de<br />

persistentes visiones tópicas y cargadas de prejuicios sobre el barrio.<br />

En Vigo, las entidades agrupadas en la Red Social Galicia Sur realizan<br />

continuas manifestaciones y declaraciones orientadas a conseguir que<br />

el edificio conocido como la Gota de Leche sea convertido en albergue<br />

para personas sin techo (como ya mencionamos al hablar de la<br />

responsabilidad de las administraciones).<br />

De nuevo en Barcelona, donde cada año se <strong>org</strong>aniza una campaña de<br />

concienciación ciudadana sobre la realidad de las personas sin hogar,<br />

impulsada por la Fundació Arrels. En 2009, bajo el lema “Posa sostre a<br />

Barcelona”, se invita a los ciudadanos a que fotografíen un techo y<br />

envíen la fotografía, junto a sus comentarios, a una dirección que<br />

posteriormente difundirá en internet los resultados.<br />

En Madrid, las ong Solidarios y Acción en Red <strong>org</strong>anizan una acampada<br />

en la Puerta del Sol. Unos 70 miembros de estas <strong>org</strong>anizaciones, junto<br />

a unas 20 personas sin techo que se les unen, pernoctan a la<br />

intemperie y charlan con los ciudadanos que se acercan a conocer la<br />

iniciativa. “¿Qué se sueña en una acera?” es la pregunta-eslogan que<br />

vertebra la acción concienciadora.<br />

En Barcelona, la comunidad de Sant Egidio, que lleva trabajando con<br />

indigentes desde 1989, publica una guía en la que se detallan los<br />

lugares de la ciudad en los que se puede comer, dormir y ducharse sin<br />

pagar.<br />

134


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Cáritas encabeza una declaración, secundada por otras diez entidades,<br />

en la que califican de “iniciativa lamentable” el programa que Antena 3<br />

emitirá en breve con el título de “Famosos y mendigos”. Un producto<br />

“orientado a convertir en espectáculo la realidad de la exclusión<br />

<strong>social</strong>”. “Nos parece lamentable que se utilice la dramática realidad de<br />

las personas sin techo ...”. Fuentes de la cadena indicaron que se trata<br />

de un espacio documental y no de telerrealidad y se muestran<br />

dispuestos a colaborar con estas entidades de las que “no se ha<br />

recibido hasta el momento ni una sola llamada”. La declaración de las<br />

entidades ciudadanas obtiene eco en prácticamente todos los diarios<br />

analizados. (Finalmente, el reportaje se emitió sin mayores<br />

repercusiones posteriores).<br />

Una iniciativa desconocida en Madrid: “El Museo Thyssen abre sus<br />

puertas a una experiencia única, un grupo de personas sin hogar de un<br />

centro municipal recorre los pasillos del arte” (El Mundo, 30/4/10). Los<br />

indigentes expresan su propia lectura y visión de los cuadros<br />

estimulados por el monitor que dirige la visita guiada.<br />

Una iniciativa radical llevada a cabo, al calor de las movilizaciones<br />

viguesas, por la asociación Imán de ayuda a los sin techo. Esta entidad<br />

estudia con sus abogados la interposición de una denuncia contra la<br />

Administración por un delito de homicidio por imprudencia o de<br />

denegación de socorro por la muerte en la calle de 30 personas sin<br />

hogar en lo que va de año (Noviembre 2009) por falta de un albergue<br />

de inclusión <strong>social</strong>. “La Administración conoce la realidad de los sin<br />

135


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

techo. Sabe que hay personas enfermas, que no tienen camas y que<br />

esa gente está muriendo en la calle” afirma Antón Bouzas, portavoz de<br />

la <strong>org</strong>anización.<br />

Por último, hay que señalar las actuaciones patrocinadas por Cáritas<br />

España, Faciam y Feantsa España con motivo de la celebración de la<br />

Campaña de las Personas sin Hogar 2009, bajo el lema: “Su historia es<br />

parte de la nuestra. Todos contamos” Con esta campaña se pretende<br />

sensibilizar sobre la carencia de derechos que tiene este colectivo y<br />

“hacer visible lo invisible”. Se aportan las estadísticas más recientes,<br />

que resumimos en los siguientes datos: Entre 25.000 y 30.000<br />

personas en España no tienen un hogar donde vivir. El 90,5 % son<br />

hombres y la edad media es de casi 40 años. En más de la mitad de los<br />

casos se encuentran en situación de búsqueda de trabajo. Un tercio de<br />

las personas sin hogar son abstemias y nunca han consumido drogas.<br />

Un 13 % ha recibido educación superior y el 63,9 % ha finalizado la<br />

educación secundaria. La actual crisis económica ha provocado que<br />

“un grupo importante de gente que ha terminado su proceso de<br />

exclusión y tenía una vida digna ha vuelto a caer en una situación<br />

marginal” según Sonia Olea, responsable del Programa de Personas Sin<br />

Hogar de Cáritas española.<br />

136


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

(La Voz de Galicia. 14/11/09)<br />

La imagen más personalizada y cercana de estas entidades sin ánimo de lucro<br />

nos llega a través de las entrevistas a alguno de sus miembros. Es el caso de las<br />

dos entrevistas que hemos registrado entre el volumen informativo<br />

correspondiente a los seis meses analizados:<br />

“Quedarte sin dinero no es lo que te lleva a la calle” (La Voz de Galicia<br />

31/12/09). Diego Conde, integrador <strong>social</strong> del Proyecto Sin Techo, de<br />

Cruz Roja, describe los objetivos y actuaciones de esta iniciativa<br />

durante todo el año y, especialmente, durante los meses del frío.<br />

137


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Señala que permanecer en la calle durante los días peores del invierno<br />

es una opción personal que debe ser respetada y que los motivos<br />

económicos, aunque importantes, no son definitivos para llegar a esta<br />

situación. “Tienen que romperse lazos personales y familiares. Cada<br />

persona es un mundo...”<br />

“No puedes querer ser un Cid” (El Pais, 24/11/09). Andrés Gabaldón es<br />

psicólogo y actualmente Director del albergue San Juan de Dios de<br />

Madrid. Lleva trabajando en él desde que se fundó en 1979. Al igual<br />

que la anterior entrevista ha sido solicitada al calor mediático de las<br />

fechas invernales. El albergue, con 140 plazas, ha alojado a más de<br />

80.000 personas a lo largo de su historia. “Ahora todos estamos más<br />

cerca que antes de acabar en la calle” señala el entrevistado. No<br />

pretenden dar la “sopa boba” sino crear un espacio con dignidad que<br />

ofrezca oportunidades para rehacer la vida. Por eso, su apoyo a las<br />

personas intenta evitar que se cree dependencia. Considera que para<br />

seguir adelante en este trabajo tiene que haber una gran motivación<br />

íntima y personal, ya que “frustra y quema mucho”. Entiende además<br />

que “al trabajo <strong>social</strong> no se le concede valor”. “Pero tienes que saber<br />

que no puedes salvar el mundo, no puedes querer ser un Cid<br />

todopoderoso”.<br />

Existe además una poco relevante pero significativa implicación de los<br />

ciudadanos, a título personal, en la situación de las PSH. A falta de la mayor<br />

facilidad de acceso que tienen las <strong>org</strong>anizaciones <strong>social</strong>es a los medios<br />

informativos, los ciudadanos, cuando desean expresarse de modo individual,<br />

tienen como principal y casi único recurso las Cartas al director.<br />

138


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Recientemente, los blogs particulares en ocasiones encuentran eco en la<br />

prensa de gran difusión. Si las entidades cívicas actúan públicamente, en casi<br />

todos los casos, desde la sensibilidad hacia las condiciones de las personas sin<br />

hogar y demandando recursos que cubran satisfactoriamente sus necesidades;<br />

las intervenciones individuales de los ciudadanos muestran una clara dualidad.<br />

Una parte de las unidades informativas recopiladas, las menos, proceden de<br />

ciudadanos solidarios, sensibles a la problemática de las PSH. Otra parte de las<br />

informaciones, las más, muestran a unos vecinos críticos y airados que sitúan a<br />

las PSH en el origen de los problemas que padecen sus barrios. En uno y otro<br />

caso vuelven a aparecer como protagonistas las movilizaciones viguesas,<br />

reclamando un albergue, y las continuas denuncias del deterioro urbano en los<br />

barrios clásicos del centro de Barcelona.<br />

La faceta solidaria aparece reflejada en informaciones como las siguientes:<br />

“La Rambla, todos a una” (La Vanguardia, 11/10/09), “La indigencia,<br />

otro problema en Barcelona” (El Mundo, 28/12/09). En el primer caso,<br />

una lectora que posee farmacia en la Rambla, tras denunciar el<br />

deterioro del barrio, llama a todos los sectores implicados a colaborar<br />

en su mejora. Destaca expresamente la positiva labor que realizan con<br />

las personas sin techo las Fundaciones Arrels y Exit, asi como Cáritas.<br />

En el segundo caso, un lector considera que el Ayuntamiento debe<br />

poner todos los medios a su alcance para conseguir, en la medida de lo<br />

posible, la integración de los ochenta indigentes que, según él,<br />

“malviven al raso” en Ciutat Vella<br />

“Pobreza” (La Voz de Galicia,18/10/09). Un ciudadano vigués denuncia<br />

139


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

la incapacidad de las Administraciones para sacar adelante un albergue<br />

para las personas sin hogar. “Clama al cielo... Es una vergüenza y un<br />

lujo tener cerrado a cal y canto un edificio como la Gota de leche”. “El<br />

albergue” (La Voz de Galicia, 18/10/09). Un ciudadano denuncia que el<br />

Concello de Vigo es el único de una gran ciudad que no tiene cobertura<br />

de emergencia para los sin techo. Denuncia las muertes de catorce<br />

transeúntes en lo que va de año y estima que serán muchas más.<br />

Ironiza con el hecho de que “la Xunta es una potencia mundial en<br />

materia de albergues. Los ofrece gratuitos a los peregrinos en los<br />

infinitos caminos de Santiago. Y los pagamos todos, con nuestros<br />

impuestos, para que duerma gente que podría costearse un hotel. Sin<br />

embargo, no hay un duro para hacer un miserable albergue para los<br />

más desgraciados. Para los que se mueren y se seguirán muriendo en<br />

la calle”. “Cadáveres” (La Voz de Galicia, 28/02/10). Un lector<br />

cuestiona la distribución de los recursos en Vigo, que obliga a los sin<br />

techo a recorrer cada día 19 kilómetros entre los centros que les<br />

ofrecen servicios diversos y necesarios. Denuncia igualmente el hecho<br />

de que, en los mismos lugares por los que los vecinos circulan<br />

diariamente, aparezcan con frecuencia indigentes muertos. “Nadie<br />

debería morir así”<br />

“Mi más sentido pésame” ((ABC, 24/01/10) La alcaldesa de Fuengirola<br />

se lamenta en una carta doblemente: por la muerte y agresión contra<br />

indigentes y por el hecho de que los sucesos hayan ocurrido en su<br />

municipio. Convencida de que “incluso los indigentes tienen derechos<br />

humanos intactos y siempre vulnerados por el sistema”, señala que su<br />

grupo político lleva tiempo intentando que la Cámara andaluza<br />

apruebe la elaboración de un mapa socio-sanitario y la Ley de Inclusión<br />

140


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Social, sin lograrlo. Considera que las Administraciones son<br />

responsables y culpables de la situación de estos ciudadanos<br />

indefensos. (Al margen de su responsabilidad administrativa, el texto<br />

es enviado como Carta al director. Por ello lo incluimos entre las<br />

aportaciones ciudadanas). “Cifras” (El País, 09/09/09). Un lector<br />

considera que las clases medias se han olvidado de los ciudadanos más<br />

desfavorecidos. Y elogia el trabajo de la National Coalition for the<br />

Homeless, la gran <strong>org</strong>anización americana que trabaja con personas sin<br />

hogar, destacando su denuncia de las prácticas de pagar a indigentes<br />

para que se dejen filmar mientras se pegan entre ellos o son<br />

humillados de cualquier otra forma. Señala que, en 2008, 106<br />

indigentes fueron apaleados por grupos de jóvenes estadounidenses,<br />

27 de ellos hasta la muerte.<br />

Las diversas formas en que los ciudadanos manifiestan su rechazo a las<br />

personas sin hogar confluyen en un trasfondo único: se les culpabiliza por su<br />

propia condición de víctimas.<br />

El malestar de los ciudadanos de Barcelona ante el deterioro de<br />

diversos espacios públicos es amplio y genera respuestas y propuestas<br />

diversas. Aun constatando la presencia de indigentes en las calles y<br />

plazas de la ciudad, hemos visto como algunos ciudadanos, lejos de<br />

considerarles parte del problema, reclaman soluciones que mejoren su<br />

calidad de vida. Para el resto de vecinos que expresan su inquietud, las<br />

PSH son parte del origen y la consolidación del deterioro.<br />

“Degradación del centro de Barcelona” (La Vanguardia, 03/09/09). Un<br />

lector señala como “por la noche la ciudad parece una película de<br />

141


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Tarantino (y de las fuertes). Robos, prostitutas, drogas, indigentes,<br />

suciedad, peleas, heridos ...” Bajando por la Rambla te puedes<br />

encontrar a “prostitutas que te ofrecen sus servicios mientras te roban<br />

la cartera, indigentes tirados en cartones, camellos ofreciendo droga<br />

...” “El incivismo expulsa a los niños de los parques infantiles de<br />

Barcelona” (La Vanguardia, 02/09/09). Los niños no pueden jugar sin<br />

temor en los parques de la ciudad. ”...indigentes, alcohólicos,<br />

drogadictos y pies negros, absortos en su hoyo, amenazan a los más<br />

pequeños”. “No son rincones abandonados, sino conquistados por los<br />

grandes perdedores de esta sociedad” La ocupación del espacio<br />

urbano, en un contexto de conflicto, y en toda su crudeza. Y hasta<br />

alguna comprensión hacia la situación de estas personas no evita que<br />

puedan ser indirectamente perjudiciales “Los indigentes<br />

recientemente instalados en los jardines Montserrat ni ensucian ni<br />

molestan. Pero algunos vecinos temen que atraigan a vagabundos<br />

conflictivos”. “Arreglar y vigilar” ( La Vanguardia, 29/10/09). Un lector<br />

señala que uno de los rincones más bonitos de Ciutat Vella, la Plaza<br />

Vila de Madrid, es también uno de los de peor suerte. “”En esta plaza<br />

se encuentra una necrópolis romana que durante demasiado tiempo<br />

ha sido dormitorio de vagabundos, drogadictos y refugio de cacos y<br />

alcohólicos. Todos ellos, además, se dedicaban a hacer sus<br />

necesidades en las tumbas romanas”. Precisamente en la mencionada<br />

plaza el Ayuntamiento ha intervenido recientemente para evitar su<br />

degradación y reducir la presencia de indigentes en la zona. La<br />

regidora de Ciutat Vella, Itziar González, señala que se está<br />

potenciando la coordinación entre los diversos servicios municipales y<br />

no descarta la adopción de medidas relacionadas con el “urbanismo<br />

142


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

preventivo”. Eufemismo que puede traducirse por la instalación de<br />

bancos que impiden dormir en ellos, esquinas anti-orines, vallados...<br />

En Galicia, donde los vecinos de Vigo se habían significado por su<br />

apoyo a la creación de un albergue, se producen situaciones<br />

conflictivas en A Coruña. “Denuncian el incremento de indigentes en<br />

los soportales del Rosalía” (La Voz de Galicia, 05/11/09). Vecinos y<br />

comerciantes se quejan del “incremento alarmante del número de<br />

vagabundos que han establecido su domicilio particular en los<br />

soportales del Teatro Rosalía de Castro”. Junto a la mala imagen que<br />

ofrecen a los visitantes, denuncian el problema de toda la basura y<br />

suciedad que generan en este entorno histórico. Los comerciantes<br />

consideran que estas personas “generan muy mal ambiente en el<br />

barrio, además de que algunos de ellos también se han puesto muy<br />

agresivos cuando se les ha llamado la atención”.<br />

La situación de mayor conflicto se produce en la ciudad de Bilbao.<br />

”Cientos de vecinos de Txurdinaga exigen paralizar el centro para los<br />

sin techo” (El Correo Digital, reproducido en Boletin enRed, 23/10/09).<br />

Se trata de la apertura de un centro de día de baja exigencia para<br />

personas sin hogar. A partir de las prestaciones más básicas- café,<br />

ducha y lavadora- los educadores de la asociación Bizitegi que gestiona<br />

el proyecto, pretenden “posibilitar el inicio de procesos de<br />

incorporación <strong>social</strong>”. La asociación Bizitegi reúne a comunidades de<br />

vecinos, asociaciones y miembros de partidos políticos para explicarles<br />

el proyecto, mientras tienen la impresión de que “a cualquier sitio al<br />

143


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

que fuéramos nos pasaría lo mismo”. El concejal de Acción Social pidió<br />

la suspensión temporal del proyecto para acallar la polémica. Y los<br />

vecinos dicen no cuestionar a la asociación ni su proyecto.<br />

Simplemente “no han elegido la ubicación adecuada”. Alegan que se<br />

trata de una zona con muchos recovecos, parques y soportales donde<br />

temen que los usuarios del centro se queden merodeando una vez que<br />

haya cerrado sus puertas a las siete de la tarde. Consideran que no se<br />

les puede tachar de insolidarios porque “en este barrio ya hay<br />

sobrecarga de actividades <strong>social</strong>es”. “Tenemos el barrio decente y<br />

ahora puede cambiar todo, no sabes lo que te vas a encontrar”.<br />

(El Correo Digital. 23/10/09)<br />

144


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

3.4.2.3 La voz de los protagonistas ausentes<br />

Si la voz institucional es la palabra hegemónica en los medios, la voz de las<br />

personas sin hogar, en cuanto referidas por esa condición, es la palabra<br />

ausente. Es necesario ser alguien, que sea otro el rasgo identificador -<br />

protagonista de una acción heroica o ejemplar, de un drama humano o de un<br />

escándalo…-, para hablar con voz propia. Antes de ser reconocidas como<br />

‘sujetos de enunciación’, las personas sin hogar aparecen como meros ‘objetos<br />

de enunciado’. Anulación de la palabra que, por mera rutina, tiende a<br />

convertirse en perpetuación del estigma:<br />

“Mi opinión, por ejemplo, cómo opina la prensa sobre… yo, vivo en la calle… es<br />

muy negativo que, más o menos, siempre, la prensa trata de forma negativa a<br />

las personas, a sus comportamientos, que cómo son: ladrones, sucios,<br />

drogadictos, alcohólicos… estas cosas; como leprosos que están fuera de la<br />

sociedad. Yo conozco muchos sitios que si saben que vives en la calle o saben<br />

que vives en un lugar así, y te vas a entrar en un supermercado y te conocen y<br />

te controlan si estás tomando algo o no, esas cosas. No… yo no tengo tanta<br />

experiencia de lo que se dice… yo no leí… sólo digo que el 80% de lo que he<br />

leído, los periódicos, más o menos todos hablan sobre las personas que viven<br />

en la calle como ladrones, como negativos”. (GDPSH1). 7<br />

7 Los códigos utilizados en Entrevistas y Grupo de discusión son los siguientes:<br />

EE = Entrevista a experto. ESH = Entrevista a persona sin hogar. GDPSH: Grupo de<br />

discusión con personas sin hogar. Los perfiles correspondientes a las personas<br />

entrevistadas se describen en el anexo metodológico<br />

145


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

De las múltiples informaciones a las que hasta este momento nos hemos<br />

referido, siendo las personas sin hogar los protagonistas centrales de la noticia,<br />

en ningún caso son requeridos como informantes cualificados, como fuente<br />

informativa que permite contemplar el hecho en sus correctas dimensiones.<br />

En muchas ocasiones, los medios de comunicación ofrecen informaciones<br />

sobre hechos que protagonizan PSH, pero sin contar con ellos como fuente<br />

informativa. La apertura de un recurso, un problema vecinal, o el trabajo de<br />

una <strong>org</strong>anización <strong>social</strong> son noticias en las que la perspectiva de las personas<br />

sin hogar parece prescindible. En estos casos, se informa sobre las personas<br />

sin hogar, pero sin ellas.<br />

Según los Libros de Estilo de los principales medios de comunicación<br />

españoles, los periodistas deben consultar todas las fuentes de información<br />

implicadas en una noticia. Por tanto, parece parte de su código deontológico<br />

la propuesta de que el informador trate siempre de contar con la opinión de<br />

las personas sin hogar cuando éstas sean una parte significativa de la<br />

información. Debido a su situación particular, el testimonio de estas personas<br />

resulta irremplazable, puesto que sólo ellas pueden informar con una<br />

determinada perspectiva acerca de lo que viven.<br />

Las distintas administraciones públicas y las <strong>org</strong>anizaciones <strong>social</strong>es pueden<br />

aportar datos, argumentos, aspectos generales, pero en ningún caso pueden<br />

sustituir la voz de los verdaderos protagonistas de los hechos sobre los que se<br />

informa. Pensar que, debido a su difícil situación, las personas sin hogar no<br />

son capaces de expresar su punto de vista, explicar las causas de sus acciones,<br />

o señalar qué necesitan para mejorar su vida, es uno más de los prejuicios que<br />

acompañan a este colectivo. En cualquier caso, nadie mejor que las propias<br />

146


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

personas implicadas, tengan hogar o no, para informar al público sobre los<br />

hechos que protagonizan”.(Fundación Rais 2010)<br />

Apunta esta ausencia al interesante y sistemáticamente esquivado debate en<br />

torno a las ‘fuentes de información’ de los propios medios. ¿Quiénes están<br />

legitimados para hablar en los medios? Si los <strong>org</strong>anismos públicos son lugares<br />

de obligada consulta ¿por qué no extender el abanico de entradas, facilitando<br />

sonidos más plurales y matizados?. Ya los medios se encargan de advertir que<br />

no asumen todas las opiniones invitadas a participar en ellos, lo que resulta<br />

coherente con una propuesta de apertura a cierto pluralismo: la aproximación<br />

a ámbitos especialmente implicados puede tener el riesgo de una mirada<br />

menos universal (¿quién la ofrece?), más orientada por intereses y estrategias<br />

definidos, pero al tiempo puede ayudar a matizar contenidos, a completar<br />

referentes, a situar las acciones en contexto.<br />

Lo más próximo que encontramos al colectivo de personas sin hogar, son<br />

referencias más bien anecdóticas, recogidas en espacios de información local,<br />

tratadas generalmente, eso sí, con la proximidad e incluso el cariño<br />

comunitario que el contenido propicia. Son noticias que se encuentran,<br />

lógicamente, en la sección Local o en periódicos de ámbito territorial<br />

autonómico o provincial. Son estos los que pueden descender al barrio, al<br />

distrito, a espacios vecinales.<br />

Sin embargo, y una vez constatado que las personas sin hogar no suelen<br />

aparecen como verdaderos protagonistas de las noticias que les afectan, es<br />

preciso señalar que, coyunturalmente, los medios les ot<strong>org</strong>an la palabra, en<br />

forma de entrevistas o de Cartas al director. En esas contadas ocasiones<br />

147


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

emerge la persona desnuda, única, con identidad. Seres cuyos fracasos, rutinas<br />

y expectativas les muestran como poseedores de dignidad y derechos, al igual<br />

que el resto de ciudadanos:<br />

“Vivo en la calle. Soy indigente, eufemismo de sin techo. Existo en<br />

Madrid. Porque vivir así no es vivir. Los días son muy largos, infernales<br />

en verano y muy fríos en invierno. No hay lugares donde pasar el día<br />

que no sea la calle para mí. Por eso las bibliotecas públicas son<br />

esenciales, un lugar donde pasar horas leyendo y resguardado....No<br />

queda ninguna biblioteca en varios distritos a la redonda. ¿Dónde<br />

iremos entonces?” “Sin el abrigo de la lectura” (20 Minutos, 05/01/10)<br />

“Andar y andar, así perdemos el día, cuando lo que yo quiero es un<br />

trabajo para salir de este bache”. José Carlos, 28 años, diez trabajando<br />

en la construcción.”Ni yo me lo creo, pero esto le puede pasar a<br />

cualquiera, nunca consumí drogas, ni tengo ningún problema de salud,<br />

ni con el alcohol, ni con nada. Pero no hay trabajo y me quedé sin<br />

dinero. Solo quiero salir del hoyo y trabajar” “José Carlos, transeúnte<br />

alojado en el Albergue de Teis” (La Voz de Galicia, 02/08/09)<br />

Es indigente y aparcacoches. Benigno Rial vive en el interior de un tubo<br />

de hormigón como el sabio griego Diógenes, fundador de la escuela<br />

cínica. Benigno sigue su ejemplo por necesidad, porque no tiene hogar<br />

y vive en Vigo, donde no hay un albergue abierto permanentemente<br />

para los sin techo. “El inventor de la tubería-hogar sigue en el mismo<br />

sitio” (La Voz de Galicia, 13/11/09).<br />

148


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

“Usted también puede caer en la calle. No lo olvide nunca. Los<br />

indigentes somos gente a la que se nos rompió la vida, las pasamos<br />

más putas que Caín, he intentamos salir... Somos más inexistentes que<br />

el estiércol, porque el percibir el hedor les haría alterar sus inhumanas<br />

facciones. Nos niegan lo único que nos queda: el reconocimiento de<br />

nuestra existencia. Lo jodido de la calle es que estás hecho una<br />

auténtica mierda, psíquica y moralmente, y no sirves ni para<br />

esconderte”. Miquel Fuster. Dibujante de cómic y pintor. Quince años<br />

de indigente en Barcelona.<br />

Guillermo Llobet, un joven fotógrafo madrileño retrata a indigentes de<br />

la ciudad dentro de una cabina de metacrilato. Imágenes que enfatizan<br />

la sensación de separación de dos mundos indisolublemente unidos,<br />

pero separados como por un cristal infranqueable. Exposición en el<br />

Centro de Arte Complutense.<br />

Historias de vida que aparecen en los diarios de forma deshilachada, inconexa.<br />

Sin entidad suficiente como para lograr cuestionar, al menos, la imagen pasiva,<br />

tópica e irrecuperable de las personas que duermen en las calles de las<br />

ciudades, sostenidas por limitados recursos de supervivencia.<br />

3.4.3 Contextos y procesos de anomia y conflicto <strong>social</strong><br />

De las quinientas tres unidades informativas recopiladas en seis diarios,<br />

durante los seis meses de duración del trabajo de campo, la mayor parte de las<br />

informaciones (28 %) remiten a episodios de conflicto, violencia y muerte.<br />

149


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Cualquier investigador capaz de manejar unos indicadores básicos de análisis, y<br />

de observar la realidad ciudadana, es consciente de que se encuentra ante la<br />

proyección de una realidad notablemente deformada. La imagen que los<br />

diarios difunden de la vida cotidiana de las personas sin hogar ha pasado,<br />

antes que por el contraste de fuentes fidedignas, por los espejos deformantes<br />

del Callejón del Gato. 8<br />

En justa correspondencia, y para ser coherentes con los datos que aporta<br />

nuestro análisis, dedicaremos a este epígrafe la limitada atención que merece.<br />

3.4.3.1 Conflictos, agresiones, violencia<br />

“Entendemos la violencia como aquella “actitud o comportamiento que<br />

constituye una violación o la privación al ser humano de algo que le es<br />

esencial como persona (integridad física, psíquica o moral, derechos,<br />

libertades...)”. Vicenç Fisas añade que no se refiere sólo a una forma de<br />

“hacer”, sino también de “no dejar hacer”, de negar potencialidad. Lo que<br />

generalmente se entiende por violencia es una agresión física o psicológica: un<br />

asesinato, un puñetazo o patada, una tortura, una agresión verbal o insulto, y<br />

otras formas de maltrato físico o psicológico. Llamamos a esta violencia:<br />

violencia directa. Pero este tipo de violencia, a pesar de ser la más visible, no<br />

es la única. Hay otros tipos menos visibles pero muy presentes y con<br />

consecuencias muy graves. De hecho creemos que la violencia directa ejercida<br />

contra las personas sin hogar a menudo es el resultado visible de otras<br />

8 Espacio madrileño de gran popularidad a partir de su presencia relevante en “Luces<br />

de bohemía”, de D. Ramón Mª del Valle-Inclán<br />

150


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

violencias. Una de estas violencias invisibles es la violencia estructural, la<br />

violencia que forma parte de la estructura <strong>social</strong> y que impide cubrir las<br />

necesidades básicas, como la generada por la desigualdad <strong>social</strong>: ingresos, la<br />

vivienda, la carencia o precariedad de los servicios sanitarios (especialmente<br />

los relacionados con la salud mental), el paro, la malnutrición, aspectos<br />

formativos y lúdicos básicos, etc. La otra es la violencia cultural, aquellos<br />

aspectos del ámbito simbólico (medios de comunicación, culturales, lengua,<br />

educación, religión, arte, ciencias…) que se utilizan para justificar o legitimar<br />

la violencia estructural o directa. Aquellas argumentaciones que nos hacen<br />

percibir como "normales" situaciones de violencia profunda. La violencia<br />

cultural también puede tomar el nombre de cultura de la violencia.<br />

Desenmascararlas es posible entendiendo los mecanismos psicológicos de las<br />

personas que llevan a simplificar todo lo que nos rodea en categorías, que<br />

generan la necesidad de sentirse parte de un grupo homogéneo, y que hacen<br />

que sean más visibles las diferencias que las similitudes respeto al otro grupo.<br />

Unos mecanismos que podemos encontrar muy cerca debido a la mezcla de<br />

necesidades que está comportando las desigualdades en nuestro país. A<br />

menudo, las causas de la violencia directa están relacionadas con situaciones<br />

de violencia estructural y/o justificadas por la violencia cultural: muchas<br />

situaciones son consecuencia de un abuso de poder que recae sobre un grupo<br />

oprimido, o de una situación de injusticia <strong>social</strong> (de un reparto de recursos<br />

insuficiente, de una gran desigualdad en la renta de las personas, dificultad de<br />

acceso a los servicios <strong>social</strong>es y a la red sanitaria, etc.), y reciben el<br />

espaldarazo de discursos que justifican estas violencias. Esta observación no<br />

debe servirnos para justificar la violencia directa, sino para entender bien sus<br />

dimensiones y ser capaces de poder intervenir con antelación: minimizar la<br />

violencia indirecta o estructural y la violencia cultural puede ser un medio de<br />

prevención muy efectivo de la violencia directa”. . (Fundación Assis 2006:23-25)<br />

151


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

La violencia directa, que en tan gran medida sobrevaloran los medios<br />

periodísticos, sería únicamente la punta del iceberg de las otras violencias –<br />

estructural y cultural- a que se ven sometidas las personas sin hogar. La factura<br />

que la violencia estructural pasa a las personas sin hogar raramente encuentra<br />

reflejo en los medios de comunicación (corresponde a un plano más elevado<br />

de análisis). Y es comprensible que así sea. Se trata de la “violencia” que la<br />

sociedad, y cada uno de los ciudadanos, ejercemos sobre las personas<br />

marginadas hasta llevarlas a los límites del sistema. Una vez en el margen,<br />

vencidos y sin recursos, resulta fácil hacerles responsables de su propia<br />

situación.<br />

Aun en el plano más elemental de la violencia directa, cabe diferenciar tres<br />

posibles escenarios de conflicto:<br />

- Las personas sin hogar son sujetos pasivos de las agresiones.<br />

(Casos más habituales)<br />

- Las personas sin hogar se agreden entre sí.<br />

(Casos esporádicos)<br />

- Las personas sin hogar agreden a otros ciudadanos.<br />

(Casos excepcionales)<br />

Las personas que viven en la calle son vulnerables y tienden a adoptar una<br />

permanente actitud de defensa ante las posibles agresiones. Un 41,7 % han<br />

sido insultados o amenazados, un 40 % han sufrido robos de sus pertenencias,<br />

un 26,2 % han sido agredidos. (INE 2005)<br />

152


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

“Los testigos identifican como “rapados” a los agresores de un<br />

indigente en Moncloa”<br />

“La Audiencia condena a un marroquí por violar a una indigente”<br />

“Buscan en Fuengirola a un agresor de mendigos, a los que ataca con<br />

un hacha”<br />

“Un portero de discoteca afronta 13 años de prisión por violar a una<br />

menor sin hogar”<br />

“Detenido tras intentar cortar la cabeza a un indigente con una<br />

sierra”<br />

“Juzgados en Ourense cuatro acusados de agredir a un indigente”<br />

“Tres años y medio de cárcel para los dos asaltantes de un mendigo”<br />

“Un indigente pasa 10 días en coma tras recibir una paliza de un<br />

grupo de neonazis”<br />

(ABC, El País, El Mundo, la Voz de Galicia, 20 Minutos)<br />

Los conflictos entre las propias PSH no suelen derivar en consecuencias<br />

trágicas, siendo más bien el resultado de una convivencia conflictiva, poblada<br />

de carencias y alimentada en ocasiones por los excesos alcohólicos:<br />

“El Concello pide a la policía más patrullas en lugares donde se<br />

repiten peleas entre indigentes”<br />

“Detenida una mujer vagabunda por herir a estacazos a otra cuando<br />

dormían en la calle”<br />

“Un mendigo da tres puñaladas a otro porque iba a robarle”<br />

“Amenaza con una pistola a dos indigentes para dormir él en un<br />

cajero automático”<br />

Las agresiones reales de PSH hacia el resto de ciudadanos son prácticamente<br />

inexistentes. Cuando ocurren suelen partir de un substrato de desequilibrio<br />

153


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

psíquico:<br />

“Detenida una mendiga en Ávila por un intento de homicidio en<br />

Sevilla”<br />

“Una indigente apuñala en el cuello a una monja del Albergue de<br />

Covadonga”<br />

“Un indigente de Granada agrede sin motivo a una mujer de<br />

avanzada edad”<br />

3.4.3.2 Muerte y muertes de las personas sin hogar<br />

Las personas que viven en la calle encuentran más de cara a la muerte, aunque<br />

atesoren ilusiones y se esfuercen en reencontrar los caminos de la convivencia<br />

normalizada. Una vez en la calle, la salida es un proceso tremendamente<br />

complejo. (Véanse las valoraciones de los profesionales en el capítulo VI). La<br />

calle no perdona y, a medida que aumenta el tiempo de permanencia, el<br />

deterioro físico y psíquico se torna en la mayoría de los casos irreversible. La<br />

esperanza de vida de los sin techo es 25 años inferior a la media de los<br />

ciudadanos españoles (Fundación Rais:2005). Las catalogadas como “muertes<br />

naturales” de las personas que viven en la calle podrían ser etiquetadas, en<br />

realidad, como “muertes <strong>social</strong>es”. Cualquier persona que duerma en un<br />

parque, a 10 grados bajo cero, fallece. A la mayoría de los ciudadanos no nos<br />

ocurre. Sencillamente, porque no dormimos en un parque. Cuando les sucede<br />

a quienes duermen en los parques ¿podemos considerarlas “muertes<br />

naturales”?<br />

154


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Las muertes de personas sin hogar, contrastables por su aparición en medios<br />

de comunicación, han sido: 59 fallecimientos en 2008, 83 fallecimientos en<br />

2009, 45 fallecimientos en 2010- sin acabar el año-. (Boletín enRed.<strong>org</strong>). Los<br />

datos reales son evidentemente superiores. Cifras en todo caso merecedoras<br />

de una mayor atención por parte de la sensibilidad <strong>social</strong> de los ciudadanos.<br />

Al igual que las muertes por violencia de género, pero en un contexto de<br />

menor repercusión <strong>social</strong>, las noticias sobre muertes de indigentes se suceden<br />

en la prensa como eslabones de una cadena que no deja de perpetuarse. Las<br />

noticias son breves, en lugares de escasa relevancia, con un tamaño reducido y<br />

sin acompañamiento gráfico. Salvo aquellos casos que, por su especial<br />

impacto, obtienen un destacado tratamiento.<br />

(El Mundo. 23/12/09)<br />

155


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

De entre todas las muertes sin nombre, nos gustaría destacar aquellas que<br />

pueden ser consideradas como metáforas (el resto alimentan la estadística que<br />

ya ha sido mencionada):<br />

“Homenaje a la transexual asesinada hace 18 años en Barcelona” (El País,<br />

06/10/09)<br />

Asaltada por siete cabezas rapadas que la mataron a golpes de puntera de<br />

aluminio y palos. Hirieron también a su compañero y a otro indigente que<br />

dormía en el parque.<br />

“El Supremo no admite el recurso de los dos condenados por quemar viva a<br />

una sin techo” (20 Minutos, 23/12/09)<br />

Mª del Rosario Endrinal fue quemada viva por tres jóvenes en el cajero de<br />

Barcelona en el que vivía. La indefensión y el sufrimiento de la víctima, frente<br />

a la barbarie y la sinrazón de unos jóvenes de familias acomodadas se han<br />

convertido en un símbolo y un elemento clave de reflexión sobre la deriva de<br />

la moralidad colectiva.<br />

“Detenida una indigente por matar a otra a puñaladas” (El País, 30/09/09).<br />

Los celos llevados a su extremo, en un espacio hostil en que la compañía es<br />

necesaria.<br />

“La policía nos dice que durmamos en grupo” ((El País, 17/01/10)<br />

La vulnerabilidad, frente al asesino de Fuengirola que amenaza con un hacha.<br />

“Encuentran muerta de frío en plena calle de la capital almeriense a una<br />

mendiga” ((El Mundo, 11/01/10)<br />

La muerte “natural” de las personas sin hogar.<br />

156


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

(El Mundo. 11/01/10)<br />

3.4.4 Crisis y saturación de los recursos<br />

La crisis económica no es en ningún caso el objeto de esta investigación y, sin<br />

embargo, se “ha cruzado” con nosotros en numerosas ocasiones durante la<br />

fase de recogida de datos. Las informaciones sobre el progresivo deterioro de<br />

la economía que hemos recopilado son únicamente aquellas en las que la<br />

noticia alude también a concretas situaciones de marginación y deriva hacia la<br />

exclusión y la pérdida del hogar. Estas informaciones, en la gran mayoría de los<br />

casos, proceden de los balances de sus actividades que, anualmente, hacen<br />

públicos las diversas entidades cívicas que trabajan con personas sin hogar. La<br />

mejor muestra de ello es la siguiente relación de titulares:<br />

157


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

“ Cruz Roja detecta un aumento de personas sin techo en Castellón por la<br />

crisis”<br />

“Valencia duplica sus sin techo”<br />

“El número de indigentes se dispara un 70 % en un año en Alicante”<br />

“Cáritas atenderá esta año a un 11 % más de personas que en 2008”<br />

“Cáritas de Padrón tiene un 40 % más de demandas de ayuda que años atrás a<br />

causa de la crisis”<br />

“El Banco de Alimentos distribuye el doble de comida que en el año anterior”<br />

(El Mundo, 20 Minutos, La Vanguardia, La Voz de Galicia)<br />

El aumento medio en las demandas de ayuda, tomando en consideración<br />

todas las unidades informativas recopiladas, oscila alrededor del cincuenta por<br />

ciento. Y debemos tener en cuenta que los datos facilitados por las entidades<br />

humanitarias, claramente coincidentes en esta ocasión, resultan ser un<br />

indicador de primera magnitud y gran fiabilidad, sin necesidad de acudir a las<br />

revistas e informes económicos más cualificados.<br />

El impacto de la crisis sobre las familias y sectores de población más<br />

vulnerables lleva a estas entidades a reflexionar sobre el surgimiento de<br />

“nuevos pobres”, nuevas formas de exclusión <strong>social</strong> y, en determinados casos<br />

constatados, el retorno a la marginalidad de personas que se hallaban en<br />

proceso de inclusión <strong>social</strong>. Junto a ello, entidades como Cáritas o Cruz Roja<br />

señalan el aumento de peticiones de ayuda por parte de familias que nunca<br />

antes habían solicitado estos servicios, con notables muestras de pudor y<br />

desconcierto en la mayor parte de los casos. Tres reportajes sucesivos del<br />

diario El País intentan describir el drama <strong>social</strong> que se apodera de los<br />

158


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

segmentos de población que, especialmente vulnerables, se encuentran en<br />

situación de engrosar las cifras de la miseria y la marginalidad. “El cuarto pilar<br />

del bienestar está cojo”, “Familias hundidas por la crisis”, “Vivir con 370 euros<br />

al mes”. (El País, 20/07/09, 25/10/09, 02/12/09).<br />

(La Voz de Galicia. 28/11/09)<br />

3.4.5 Precariedad de los inmigrantes desfavorecidos<br />

El colectivo de inmigrantes y su problemática específica tampoco son objeto<br />

de estudio en esta investigación, salvo cuando a su condición de inmigrantes<br />

159


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

se añade la de persona sin hogar. El 48,2 % de las personas sin hogar son<br />

extranjeros, víctimas de diversas carencias (INE:2005). Sin embargo, la pérdida<br />

de trabajos como consecuencia de la crisis, así como coyunturas especialmente<br />

dramáticas (el temporal que arruina la campaña de fruta en Lleida o retrasa la<br />

recogida de aceituna en Jaén) llevan a la calle a ciudadanos extranjeros que en<br />

años anteriores habían desarrollado su trabajo como temporeros sin necesidad<br />

de acudir a los servicios <strong>social</strong>es básicos. Las informaciones relatan el<br />

peregrinar de estas personas por los diversos municipios en busca de comida y<br />

techo, con temperaturas que dificultan dormir a la intemperie:<br />

“Congelados y sin trabajo a la vista”<br />

“El temporal golpea a los inmigrantes”<br />

“Los albergues de Jaén han acogido ya a 6.000 inmigrantes”<br />

“Ruta de la miseria entre olivos”<br />

“Valencia recorta los fondos para acoger inmigrantes”<br />

“La inmigración toca fondo”<br />

(El País 4,22 y 27/09; 9 /16/01)<br />

El agravamiento de la situación de estos trabajadores frustrados lleva a las<br />

entidades con mayor capacidad para improvisar respuestas, como Cáritas y<br />

Cruz Roja, a establecer patrullas de voluntarios en ciudades como Jaén, donde<br />

el problema se expresa con crudeza en diversas zonas de la ciudad. Los<br />

voluntarios llevan comida y bebidas calientes e intentan encontrar un techo<br />

para quienes se disponen a dormir en la calle. “La patrulla de la solidaridad” –<br />

Jaén- (El País, 20/12/09). Mientras, los desafortunados apenas pueden<br />

resignarse ante la evidencia de que sus expectativas de conseguir un dinero<br />

para enviar a sus familias resulta cada vez más inalcanzable. Algunos no han<br />

160


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

logrado trabajo desde que llegaron a España, en ocasiones a bordo de una<br />

patera, otros empeñaron un dinero que ahora no pueden recuperar. “Estamos<br />

desesperados, pero volver sin dinero a nuestro país sería un fracaso” (El País,<br />

09/08/09)<br />

3.4.6 La dimensión del espectáculo mediático<br />

En ningún momento hemos establecido referencias o comparaciones con<br />

personas sin hogar de otros países debido a que nuestra investigación se<br />

centra en las PSH en España. No obstante, en el curso del trabajo de campo, y<br />

en periodos consecutivos, se han desvelado varios acontecimientos, de<br />

repercusión internacional y amplia cobertura mediática. Hasta el punto de que<br />

todos los diarios analizados se hacen eco de ellos:<br />

- Llega a España el polémico juego en red “Mendigogame”<br />

- Elección en Bélgica de “Miss Sin Techo”<br />

- El Príncipe Guillermo de Inglaterra duerme una noche en la calle, por<br />

solidaridad con los sin techo, y Carla Bruni desvela que conoce a una persona<br />

sin hogar y, coyunturalmente, conversa con ella sobre las aficiones<br />

compartidas.<br />

-<br />

“Llega a España el juego online para meterse en la piel de un mendigo” “El<br />

polémico juego Mendigogame llega a Facebook” (20 Minutos, El País).<br />

Después de su éxito en diversos países, los españoles pueden jugar online a<br />

Mendigogame. El juego llega rodeado de polémica. Es preciso recoger<br />

chatarra, atracar una tasca o beber calimocho para pasar de niveles. Varias<br />

asociaciones que trabajan con gente sin hogar (Solidarios, Fundación Rais y<br />

Acción en Red) piden la retirada del juego por denigrante. En su comunicado<br />

161


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

consideran “una falta de respeto acercarse de una manera tan grosera a un<br />

grupo de personas con igual dignidad que cualquier otro ciudadano”. Según<br />

estas entidades, las personas sin hogar se enfrentan a diario a toda clase de<br />

dificultades y un videojuego “no puede convertir ese itinerario de<br />

calamidades en un pasatiempo”. (El Mundo, 12/08/09). Tres ciudadanos<br />

expresan también su malestar en otras tantas Cartas al director (dos de ellos<br />

se identifican como voluntarios que trabajan con personas sin hogar): “Hace<br />

ya tiempo aparecía un reportaje en la revista Vogue que hacía alusión al estilo<br />

sin techo. Aparecían varias modelos acicaladas y con las uñas de negro al<br />

estilo homeless. Si bien es grave usar como motivo de moda a un colectivo<br />

estigmatizado <strong>social</strong>mente, menos se puede bromear con quienes duermen<br />

tirados en un cajero, para trasladarlo a un videojuego con el que se divertirán<br />

nuestros hijos en la sala de estar, delante de su portátil de última<br />

generación”. “La innovación y la imaginación son lícitas y deseables en la<br />

creación de riqueza de las empresas, pero no todo vale, los valores humanos<br />

marcan límites que no se deben traspasar. Jugar con la realidad de personas<br />

sin hogar que día a día se enfrentan a la dureza de las calles, a la muerte, a la<br />

falta de derechos y de recursos es una falta de respeto y un hecho cruel e<br />

inhumano”. “La dignidad del ser humano no debe comercializarse así. Ser una<br />

persona sin hogar no puede ser cuestión de puntos y bonos. Internet puede<br />

ser una biblioteca de lujo, pero es también un gran basurero”<br />

(20 Minutos, El País, La Voz de Galicia).<br />

Los creadores del juego responden a las críticas. Marius Follert señala en un<br />

comunicado: “Somos muy conscientes de que el desamparo y la pobreza son<br />

asuntos muy graves y un reto político-<strong>social</strong> importante para España.<br />

Afrontamos las críticas y aclaramos que el juego es una sátira y no pretende<br />

representar la realidad”. La empresa creadora del videojuego, Farbflut<br />

Entertainment, explica que en su política de responsabilidad <strong>social</strong> corporativa<br />

162


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

(RSC) destacan acciones de apoyo a las personas sin hogar, a través de<br />

cuantiosos donativos a <strong>org</strong>anizaciones que velan por los intereses de los<br />

mendigos. Asimismo, gestionan su compromiso <strong>social</strong> a través de la página<br />

www.betterplace.<strong>org</strong>, un portal que hace posible al usuario del juego<br />

participar en acciones solidarias a través de internet. (Desde la versión original<br />

del juego, Pennergame, han recibido numerosas críticas, lo que también puede<br />

ayudar a explicar el celo de la empresa por lavar su imagen a través de<br />

actuaciones de RSC).<br />

La <strong>org</strong>anización Artefix convoca en Bélgica un concurso para la elección de<br />

Miss Sin Techo. El certamen tiene como objetivo “sensibilizar sobre las causas<br />

y las consecuencias de la vida en la calle” según Mathilde Perlsers, miembro de<br />

la <strong>org</strong>anización. Como requisito para poder optar a este galardón, las<br />

participantes debían dar fe de su deseo de abandonar la vida en la calle. La<br />

bruselense Théresè Van Belle, de 58 años, se alza con el título por “su<br />

habilidad al expresarse, su gran moral y sus tremendas ganas de cambiar”. El<br />

premio consiste en un año de alojamiento gratis. El concurso llegó a realizarse<br />

a pesar de las numerosas críticas recibidas, aunque se decide que nunca<br />

continuará en una segunda edición. La <strong>org</strong>anizadora del evento argumenta que<br />

nunca podrá volver a reunir a un grupo semejante. “Imposible hacerlo mejor.<br />

Sin duda, sería una decepción” (ABC, La Vanguardia, 20 Minutos).<br />

El mes de diciembre de 2009 parece convertirse en un momento propicio para<br />

la fugaz confluencia entre los diversos representantes del poder y los<br />

ciudadanos situados en los límites del sistema:<br />

“Carla Bruni asegura tener un amigo indigente llamado Denis”<br />

163


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

“El hada Carla y el mendigo”<br />

“Carla Bruni habla de libros y música con un sin techo”<br />

“Príncipe sin techo por un día”<br />

“El príncipe Guillermo no quiere ser un adorno real”<br />

“De príncipe a mendigo: Guillermo de Inglaterra pasa una noche bajo un<br />

puente”<br />

(20 Minutos. 26/12/09)<br />

“El Papa come con pobres en su primera salida tras la agresión en<br />

Nochebuena”<br />

“El Papa, conmovido con los vagabundos”<br />

164


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

“Rajoy, voluntario por un día en un comedor <strong>social</strong> de Madrid”<br />

La Navidad responde al ritual establecido por nuestra cultura para la<br />

exteriorización de los nobles sentimientos. Aun aceptando semejantes<br />

coordenadas de las tradicionales expresiones colectivas, resulta difícil<br />

permanecer indiferente ante la desmesura de la escenificación mediática.<br />

Resulta difícil sustraerse a una cierta sensación de impudor, de ostentación, de<br />

obscenidad, de simulacro. ¿Cómo será el día de después, y los restantes días<br />

del año, para los seres indefensos que, en la euforia de los confetis y los<br />

cánticos, han aceptado confusamente ejercer de comparsas?.<br />

En un reciente reportaje, el periodista John Carlin reflexiona sobre la<br />

relación/alianza entre las celebridades del cine, el deporte y la música con las<br />

ONG. “¿Famosos con causa?” (El País Semanal, 10/10/09). En principio, todos<br />

parecen salir ganando: unos refuerzan su imagen, otros consiguen más<br />

recursos. Un cooperante señala que “hay que reconocer que si vamos a<br />

avanzar en nuestro trabajo tenemos a veces que tratar con el mundo como es,<br />

y no como quisiéramos que fuera”. Desde otra <strong>org</strong>anización humanitaria se<br />

expresan en similares términos. “Lo podemos ver como un mal necesario: el<br />

mundo no es perfecto”. Seguramente sea así y, de algún modo, todos salgan<br />

ganando. Pero resulta difícil ignorar la sensación de que, tras la panoplia de<br />

cámaras y televisiones, algo tal vez sustancial pueda estar quedándose en el<br />

camino.<br />

165


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

3.5 Conclusiones del capítulo<br />

Los medios de comunicación, y expresamente la prensa diaria, contribuyen a la<br />

creación de imágenes y representaciones <strong>social</strong>es -informan y conforman<br />

realidad- y, en esa medida, intervienen asimismo en la percepción de sí de los<br />

diversos actores <strong>social</strong>es. ‘Ver’ y ‘ser visto’ son dos momentos del<br />

incesantemente renovado proceso identitario y la representación de las<br />

personas sin hogar constituye un punto central de referencia en esta<br />

construcción.<br />

El análisis comparativo de los datos de esta investigación con algunos<br />

trabajos anteriores permite confirman un incremento de la atención<br />

mediática a asuntos relacionados con personas sin hogar. . (Arranz et al<br />

2006,2007,2008) La información es más frecuente en periódicos de<br />

ámbito local, y en secciones ‘localistas’ de la prensa, y en aquellos<br />

medios cuyo ‘público objetivo’ se sitúa en edades avanzadas. La<br />

atención de la prensa mantiene cierto equilibrio en los diferentes<br />

momentos del año, salvo en la mayor proliferación informativa<br />

durante los meses de invierno (Campañas del frío).<br />

A pesar de un posible incremento en el volumen informativo, la<br />

atención sigue siendo limitada. La mayor parte de las unidades<br />

informativas son noticias breves, sin acompañamiento gráfico.<br />

Destacan únicamente el reducido número de reportajes y entrevistas<br />

dedicados a este colectivo. En ninguno de los seis diarios, a lo largo de<br />

seis meses, consiguen que les sea dedicado un solo editorial.<br />

166


CAPÍTULO 3: IMAGEN DE LAS PERSONAS SIN HOGAR EN LA PRENSA<br />

Se mantiene y consolida la asociación tópica entre personas sin hogar<br />

y mendigos. Las PSH aparecen como personas pasivas, rodeadas de<br />

cartones y de objetos, con escasas concesiones a la narración de sus<br />

vidas y expectativas. Incluso en el importante número de casos y<br />

sucesos en los que tienen un papel protagonista son ignorados como<br />

fuente informativa.<br />

Las noticias e informaciones sobre circunstancias de agresiones,<br />

conflictos y muertes aparecen claramente sobredimensionadas,<br />

creando de este modo una asociación entre vida en la calle y<br />

situaciones conflictivas. Los datos objetivos muestran que, sin<br />

embargo, las PSH son especialmente vulnerables ante agresiones<br />

ajenas.<br />

167


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Capítulo 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

4.1 La encuesta telefónica: Sistema CATI<br />

La entrevista telefónica, como técnica de investigación, comienza a aplicarse<br />

en Estados Unidos en torno al año 1950. Su proceso de implantación en<br />

Europa es lento y mucho más tardío, en parte debido a que el ritmo de<br />

instalación del teléfono en los hogares europeos es también mucho más<br />

limitado. Y en parte también debido al hecho de que la propia ubicación de los<br />

asentamientos humanos en aquella época no implicaba una diferencia de<br />

costes significativa entre los sistemas de recogida personal (face to face) y los<br />

procedimientos a distancia, como el teléfono. (Wert. en G. Ferrando et al<br />

2000).<br />

Factores económicos, tecnológicos y logísticos terminan explicando su sucesiva<br />

implantación en Europa y, concretamente, a partir de los años 90, la<br />

introducción generalizada de la informatización, por medio del sistema CATI,<br />

de las entrevistas telefónicas.<br />

La encuesta CATI (Computer Assisted Telephone Interviewing) utiliza un<br />

sistema informático que selecciona y realiza aleatoriamente las llamadas y<br />

permite al entrevistador telefónico plantear y cumplimentar el cuestionario<br />

con ayuda de un ordenador. En la entrevista telefónica es fundamental<br />

controlar que la muestra entrevistada sea representativa de la población a<br />

169


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

investigar. Un aspecto importante para conseguirlo es la adaptación de los<br />

horarios de llamada a las costumbres de la población entrevistada.<br />

La técnica CATI, que es un desarrollo de la entrevista telefónica, “utiliza la<br />

asistencia del ordenador obligatoriamente en tres momentos del proceso de la<br />

investigación” (Reinares y Ortega, 1999:112)<br />

1.- En el diseño, control y administración de la muestra: estructura poblacional<br />

con sus registros telefónicos según distribución geográfica, lo que permite, si<br />

se desea, la extracción de muestras estratificadas, que se pueden alinear con la<br />

estructura de la población según sexo y edad. También, facilita la gestión de<br />

los números telefónicos a la hora de realizar la tarea de marcar por parte del<br />

entrevistador (marcado automático, re-marcado, sustitución...)<br />

2.- En el programa para el diseño del cuestionario de la entrevista telefónica:<br />

seguimiento obligatorio y automático del cuestionario, inserción automática<br />

de respuestas anteriores, sustitución de listas muy extensas por árboles de<br />

búsqueda, rotación aleatoria de preguntas, respuestas o de secciones del<br />

cuestionario, codificación e introducción directa de los datos, creación de<br />

zonas de memoria individuales para las respuestas a preguntas abiertas o a<br />

códigos “otros”, controles de incoherencias con respuestas anteriores,<br />

confirmación de respuestas anteriores, creación de índices y cálculos de forma<br />

automática.<br />

3. En el análisis de los resultados: análisis directo de los datos del mismo<br />

output resultante de las entrevistas. Además de las características anteriores<br />

AEDEMO ha publicado las directrices ESOMAR sobre cómo desarrollar la<br />

170


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

encuesta telefónica” (Grande y Abascal, 2000), en el sentido de que se debe<br />

dejar muy claro al encuestado que se trata de una investigación, que se<br />

garantiza su anonimato, que puede verificar la garantía de la empresa<br />

investigadora, que se le debe explicar de forma clara por qué se le está<br />

llamando, y finalmente, que las llamadas se deben realizar a horas razonables.<br />

Como todas las técnicas de investigación, las entrevistas telefónicas asistidas<br />

por ordenador tienen sus ventajas y desventajas, que pueden sintetizarse de<br />

forma siguiente:<br />

Ventajas<br />

-Resulta económico cuando la muestra está dispersa geográficamente.<br />

-Es una técnica muy rápida. El sistema CATI permite realizar gran cantidad de<br />

encuestas diariamente.<br />

-Se obtiene un alto índice de respuestas.<br />

-El proceso de selección y formación de los entrevistadores es más sencillo de<br />

realizar.<br />

Limitaciones<br />

-Implica la creación de listados telefónicos previos de la población analizada.<br />

-Solamente podremos entrevistar a personas que dispongan de instalación<br />

telefónica.<br />

-El cuestionario debe ser reducido, sencillo y sin preguntas abiertas.<br />

-No puede utilizarse material auxiliar.<br />

-No se pueden obtener datos por observación.<br />

171


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Sea como fuere, la encuesta telefónica, y sus aplicaciones informatizadas, es la<br />

técnica de investigación de mayor crecimiento en los últimos años. La<br />

consolidación y aumento en su uso también vendrá dado por la tendencia a la<br />

saturación en el equipamiento telefónico fijo (superar el 90 % de los hogares,<br />

que es el estándar de los países desarrollados). Este hecho tenderá a eliminar<br />

las objeciones sobre las limitaciones de la técnica para elaborar muestras<br />

satisfactorias en relación con determinados colectivos. El teléfono, al igual que<br />

otras tecnologías, tiende también a aumentar su potencial de uso. Además de<br />

instrumento para la recogida de información a través de encuestas, es usado<br />

cada vez en mayor medida como transmisor de datos en técnicas de<br />

audiometría y otros desarrollos en la línea de lo que viene conociéndose como<br />

“investigación en tiempo real”.<br />

4.2 Perfiles de la población entrevistada<br />

Al plantearnos conocer las opiniones y actitudes de los ciudadanos ante las<br />

personas sin hogar decidimos que nuestros informantes “objetivos” eran<br />

únicamente quienes residen en grandes ciudades, condición que les permite<br />

haber tenido experiencia directa sobre las personas sin techo, que tienden<br />

mayoritariamente a instalarse en ellas, porque ofrecen un mayor número de<br />

posibilidades y recursos. La consideración como entrevistados de personas<br />

residentes en ámbito rural o en pequeños municipios habría supuesto la<br />

introducción de un sesgo al conceder igual entidad a informaciones de menor<br />

valor, por proceder de experiencias indirectas o del total desconocimiento de<br />

la problemática abordada. No se trataba, por tanto, de realizar una encuesta<br />

de ámbito nacional, sino de establecer una muestra suficientemente<br />

representativa de los ciudadanos residentes en las principales áreas urbanas.<br />

172


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Por lo anteriormente señalado, decidimos aplicar una muestra extrapolable en<br />

las diez principales ciudades españolas, con la siguiente distribución de<br />

entrevistas (proporcionales a los volúmenes reales de sus respectivas<br />

poblaciones):<br />

Gráfico 4.1 Entrevistas según ciudades<br />

Se realizaron un total de 803 encuestas para una población de 9.130.318<br />

personas. La muestra fue igualmente estratificada en base a cuotas de sexo y<br />

edad. (Ver Ficha técnica en Anexo)<br />

A las dos grandes ciudades (Madrid y Barcelona) les corresponden el 36,6 % de<br />

las entrevistas y el 63,4 % de las encuestas a las restantes ocho ciudades.<br />

173


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Tabla 4.1. Sexo de las personas entrevistadas<br />

Frecuencia %<br />

Hombre 397 49,4<br />

Mujer 406 50,6<br />

TOTAL<br />

803 100,0<br />

Las personas entrevistadas se distribuyen casi a partes iguales entre hombres y<br />

mujeres, como muestra la tabla anterior. Por tramos de edad, las entrevistas<br />

realizadas han sido las siguientes:<br />

Tabla 4.2 Edad de las personas entrevistadas<br />

Frecuencia %<br />

De 18 a 30 años 191 23,8<br />

De 31 a 50 años 302 37,6<br />

De 51 a 65 años 155 19,3<br />

Más de 65 años 155 19,3<br />

TOTAL<br />

803 100,0<br />

174


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Seis de cada diez entrevistados tienen 50 o menos años. Los mayores de 65<br />

años suponen casi dos de cada diez.<br />

Gráfico 4.2 Edad y género de las personas entrevistadas<br />

De acuerdo con el nivel académico que poseen, las personas entrevistadas se<br />

distribuyen del siguiente modo:<br />

Solamente un 7% carecen de estudios. El 22,5 % de los entrevistados han<br />

completado estudios primarios. Un 9,6 % poseen estudios secundarios, un 25,8<br />

% han finalizado Bachillerato o FP y la mayoría, el 35,1 %, cuentan con estudios<br />

superiores.<br />

175


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Tabla 4.3 Nivel de estudios<br />

Frecuencia %<br />

Sin estudios 56 7,0<br />

Estudios primarios 181 22,5<br />

Estudios secundarios 77 9,6<br />

Bachillerato/FP 207 25,8<br />

Estudios superiores 282 35,1<br />

Total 803 100<br />

Los datos resultan más favorables al tratarse solamente de población urbana<br />

(por ejemplo, el 35,1% de universitarios entre los residentes en las grandes<br />

ciudades se reduce al 24% para el conjunto de la población española). . (OCDE<br />

2005)<br />

La mitad de las personas entrevistadas manifiestan leer a diario uno o más<br />

periódicos escritos, digitales o ambos (50,3 %). En el extremo opuesto, dos de<br />

cada diez no leen nunca la prensa diaria (19,1%).<br />

176


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Gráfico 4.3 Tiempo dedicado a la lectura de la prensa (escrita y/o digital)<br />

En relación con los diarios que hemos analizado, y con independencia de la<br />

asiduidad en su lectura, un 23,9 % de los entrevistados lee El País, un 18,1%<br />

lee 20 Minutos, un 13,9% lee El Mundo, un 8,1% lee ABC y un 5,7% lee La<br />

Vanguardia. Además, un 47,7% de las personas consultadas manifiestan leer<br />

otros diarios distintos a los considerados como muestra en nuestra<br />

investigación.<br />

Las situaciones ocupacionales de las personas entrevistadas se distribuyen del<br />

siguiente modo:<br />

177


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Tabla 4.4. ¿Cuál es actualmente su ocupación principal?<br />

Frecuencia<br />

%<br />

En activo. Trabajador asalariado o<br />

autónomo<br />

327 40,7<br />

En activo. Directivo, Ejecutivo 16 2,0<br />

Estudio y trabajo 23 2,9<br />

Sólo estudio 42 5,2<br />

En paro (cobrando desempleo) 41 5,1<br />

En paro (sin cobrar desempleo) 33 4,1<br />

Ama de casa 114 14,2<br />

Jubilado 185 23,0<br />

Otras situaciones 22 2,7<br />

TOTAL<br />

803 100<br />

Por último, las creencias religiosas, según el propio criterio de los informantes,<br />

se expresan del siguiente modo<br />

178


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Gráfico 4.4. Creencias religiosas<br />

4.3 Análisis de la información obtenida<br />

4.3.1 Conocimiento y actitudes ante las personas sin hogar<br />

En una primera aproximación hemos querido averiguar cuál es el grado de<br />

conocimiento que los ciudadanos de las grandes urbes tienen sobre las<br />

personas sin hogar, en qué medida reflexionan sobre la situación de estos<br />

conciudadanos e, incluso, si llegan a tener un contacto directo y de apoyo<br />

hacia estas personas. Las respuestas a esta pregunta, que implica esos tres<br />

niveles de distancia/cercanía, quedan resumidas en la siguiente tabla:<br />

179


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Tabla 4. 5. ¿Conoce, ha tenido algún tipo de relación o algún contacto<br />

con la gente que vive en las calles de su ciudad? 9<br />

Frecuencia %<br />

No. Intento no mirarlos. Les ignoro<br />

186 23,2<br />

Me fijo alguna vez en ellos y en ocasiones<br />

me pregunto por su vida<br />

301 37,5<br />

Les observo con frecuencia y reflexiono<br />

sobre su situación<br />

150 18,7<br />

Conozco a alguno de ellos y/o colaboro<br />

166 20,7<br />

para mejorar su situación<br />

Total 803 100,0<br />

La situación predominante es la de las personas que manifiestan fijarse y<br />

reflexionar de modo circunstancial sobre la situación de las PSH (37,5 %). A<br />

continuación, un importante 23,2 % de ciudadanos admite que les ignora e<br />

intenta no mirarlos. Dos de cada ocho ciudadanos muestran el mayor nivel de<br />

implicación, conocen y/o colaboran con alguna de estas personas. Por último,<br />

el restante 18,7 % adopta también una posición intermedia, dicen observar y<br />

reflexionar con frecuencia sobre su situación.<br />

9 EL sistema de encuesta fue prefijado en la formula de nodos condicionales, para<br />

evitar expresamente la opción NS/NC. Para obtener una encuesta completa<br />

necesariamente debían ser respondidas todas las preguntas precedentes.<br />

180


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Si sumamos las dos posiciones de menor implicación (60,7 %), superan<br />

claramente a las posiciones más favorables y participativas (39,4%). Aparecen<br />

dos sectores de población con tendencias contrapuestas y un segmento<br />

central, muy amplio, en situación de mayor ambigüedad. En el análisis de<br />

contenido de prensa reflejado en anteriores páginas, aparece también la<br />

evidencia de unas y otras posiciones diversas y, en ocasiones, enfrentadas,<br />

aunque en ese caso no llegamos a establecer una cuantificación de los<br />

diferentes grados de implicación.<br />

Algunas reflexiones sobre la posición de los entrevistados ante las encuestas<br />

sugieren que quienes se prestan a responder tienden a adoptar un papel<br />

“políticamente correcto”. Es decir, responden en función de lo que creen que<br />

se espera de ellos. Si en este caso se hubiera dado ese supuesto, cabe pensar<br />

que los entrevistados habrían tendido a presentar una cara más amable o<br />

complaciente. Se habrían mostrado más generosos de lo que lo son en sus<br />

comportamientos cotidianos. Y sin embargo, es implacable el 23% de<br />

entrevistados que se identifican con la ignorancia y el rechazo.<br />

Tal vez las encuestas telefónicas, sin la mediación cara a cara del entrevistador,<br />

se presten a la obtención de respuestas más fiables. En todo caso, no resulta<br />

superfluo recordar que una encuesta intenta objetivar informaciones cuya<br />

fuente es subjetiva: no nos facilita información sobre las opiniones y<br />

actuaciones de los entrevistados, sino sobre lo que ellos mismos dicen que<br />

piensan o que hacen.<br />

En el caso que consideramos, el género de las personas entrevistadas no<br />

establece diferencias significativas en sus respuestas. Desde la perspectiva de<br />

181


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

la edad, se produce la particular situación de que los jóvenes menores de<br />

treinta años destacan sobre el resto en ambos extremos de los<br />

posicionamientos: se encuentran entre los más distanciados y, a su vez, entre<br />

los más comprometidos. Dualidad que aparece reflejada también en buena<br />

parte de las informaciones de prensa: entre los más comprometidos como<br />

voluntarios se encuentran los jóvenes, y los actos de barbarie contra los<br />

indigentes son también protagonizados por jóvenes.<br />

Las personas con mayor nivel educativo tienden a posturas más<br />

comprometidas, pero también se significan estas posturas entre las personas<br />

sin ningún tipo de estudios. Los residentes en Madrid y Barcelona tienden a<br />

situarse en las posiciones intermedias. Los habitantes de las restantes grandes<br />

ciudades tienden a destacar en los posicionamientos extremos. Reacciones<br />

contradictorias producto, tal vez, de la mayor cercanía a las personas sin hogar<br />

(en las grandes urbes su presencia se diluye). Considerando las creencias<br />

religiosas de los entrevistados, las posiciones adoptadas son las siguientes:<br />

Gráfico 4.5. Creencias según actitud ante las PSH<br />

182


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Quienes se manifiestan indiferentes y ateos se posicionan en los extremos<br />

contrarios. Los indiferentes respecto a la religión tienden también a ser los<br />

más indiferentes hacia las personas sin hogar. Los ateos, sin embargo,<br />

destacan entre las actitudes más comprometidas con las PSH.<br />

“Pues yo, yo sí que he visto, pues sí, la diferencia, de la gente pues esta, que<br />

está en una esquina, como la gente, pues que no pueden más, que se<br />

arrinconan... y se ven cada día más hundido y hundido por ahí… la gente<br />

pues… habrá alguno que tenga un corazón bueno que… qué se yo, que le eche<br />

una mano, o le eche una moneda, o le invite a algo, pero… la mayor parte, la<br />

mayoría de las veces pues la gente… no lo ve. O no lo ve, o trata de no verlo”.<br />

(GDPSH 3)<br />

4.3.2 Las denominaciones del colectivo<br />

En el marco teórico hemos señalado el hecho de que, junto a la inexistente<br />

identidad colectiva, el grupo humano al que nos referimos carece también de<br />

una denominación genéricamente asumida. Si entre los expertos no existe<br />

acuerdo a la hora de consensuar la denominación más pertinente, parece<br />

lógico que los ciudadanos reproduzcan esa disparidad de criterios.<br />

Preguntados sobre la cuestión, en base a respuesta espontánea (sin<br />

mencionarles ningún calificativo), la distribución de denominaciones obtenida<br />

es la siguiente:<br />

183


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Tabla 4.6 ¿Cuál cree usted que sería el nombre más adecuado<br />

para las personas que viven en la calle?<br />

Frecuencia<br />

Porcentaje<br />

Personas sin techo<br />

Vagabundos<br />

Indigentes<br />

Mendigos<br />

Personas sin hogar<br />

Transeúntes<br />

Otros<br />

233 29,0<br />

40 5,0<br />

103 12,8<br />

46 5,7<br />

188 23,4<br />

5 ,6<br />

188 23,4<br />

Total 803 100,0<br />

Las denominaciones más mencionadas son: personas sin techo (29%), personas<br />

sin hogar (23,4%) e indigentes (12,8%). Un número muy inferior de ciudadanos<br />

utilizan los calificativos de mendigos (5,7 %) y vagabundos (5%). El amplio<br />

apartado de “otras denominaciones” incluye las siguientes variantes: quienes<br />

no logran encontrar un calificativo adecuado, quienes consideran que deben<br />

ser denominadas únicamente como personas, sin ningún tipo de adjetivación.<br />

Y quienes, en una proporción muy inferior, desgranan una diversidad de<br />

términos de muy variada connotación. Las denominaciones generosas o<br />

compasivas: personas con mala suerte, pobre gente, desgraciados,<br />

184


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

desfavorecidos, personas tristes, marginados, personas sin arraigo,<br />

necesitados, luchadores. Y las calificaciones que implican rechazo y asignación<br />

de culpabilidad: pordioseros, autodiscriminados, marginales, inadaptados,<br />

enfermos, perdidos, diletantes, desahuciados, extraños.<br />

En su apartado correspondiente, también codificamos y clasificamos las<br />

denominaciones que, con mayor asiduidad, aparecen en la prensa diaria. El<br />

contraste entre los nombres asignados por la prensa y por los ciudadanos<br />

urbanos se refleja en el siguiente gráfico:<br />

Gráfico 4.6 Denominaciones del colectivo según prensa y ciudadanos<br />

185


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

En orden inverso, indigentes y personas sin techo son dos denominaciones<br />

predominantes, compartidas por ambos actores (prensa y ciudadanos). La<br />

prensa utiliza en mayor medida la calificación de mendigos que la de personas<br />

sin hogar. Ese tópico, que erróneamente asigna la condición de mendicantes al<br />

colectivo que nos ocupa, obtiene un eco mas limitado en la memoria de los<br />

ciudadanos lectores. Mientras el término transeúntes, que apenas es<br />

mencionado por los ciudadanos, todavía mantiene una presencia significativa<br />

en la prensa. En resumen: personas sin techo, indigentes y personas sin hogar<br />

son los nombres más genéricamente compartidos por prensa y ciudadanos. La<br />

calificación de mendigos sigue teniendo un peso significativo y las de<br />

vagabundos y transeúntes son utilizadas en mucha menor medida.<br />

4.3.3 Posicionamiento ante tópicos y estereotipos<br />

Hemos utilizado varias afirmaciones que, en base a toda la documentación<br />

previamente consultada, parecen reflejar tópicos sólidamente consolidados.<br />

Lo que los ciudadanos residentes en las grandes urbes piensan, o dicen pensar,<br />

tiende a desmantelar, al menos, alguno de los más acusados estereotipos:<br />

186


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Tabla 4.7. Grado de acuerdo con las siguientes expresiones<br />

(1= Total desacuerdo; 5= Total acuerdo)<br />

Media<br />

Desv.<br />

típica<br />

Si viven en la calle es porque se lo han buscado 2,33 1,19<br />

Su principal ocupación es la de mendigar 3,19 1,39<br />

En general corren riesgo de ser agredidos 4,02 1,30<br />

La mayoría de ellos son enfermos mentales 2,22 1,36<br />

Son personas molestas y peligrosas 1,91 1,21<br />

Cualquiera de nosotros puede terminar viviendo en<br />

la calle<br />

4,13 1,21<br />

“Cualquiera de nosotros puede terminar viviendo en la calle” y “En general,<br />

ellos no son violentos, al revés, corren el riesgo de ser agredidos”, son las dos<br />

187


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

afirmaciones que mayor adhesión suscitan. Se mantiene muy elevada la<br />

asociación entre personas sin hogar y mendigos.<br />

Gráfico 4.7. Grado de acuerdo con diversos estereotipos<br />

En el otro extremo, resultan mayoritariamente rechazadas las afirmaciones<br />

que consideran a estas personas como seres molestos o peligrosos, así como el<br />

hecho de que vivan en la calle porque se lo han buscado. Aunque persiste un<br />

número significativo de ciudadanos que les consideran vocacionalmente<br />

callejeros y mendigos. Si analizamos individualmente cada una de las<br />

afirmaciones, los matices que merecen ser resaltados son los siguientes:<br />

188


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

“Si viven en la calle es porque se lo han buscado”<br />

Un 18 % de los ciudadanos urbanos está algo o muy de acuerdo con esta<br />

afirmación. Un 55 % está muy o algo en desacuerdo con ella.<br />

Gráfico 4.8 Si viven en la calle es porque se lo han buscado<br />

El desacuerdo con esta afirmación aumenta cuanto mayor es el conocimiento<br />

que los entrevistados tienen de estas personas. A mayor nivel de estudios,<br />

mayor es también el rechazo a la afirmación precedente. En todo caso, es<br />

importante el segmento de población que deposita en los propios indigentes la<br />

“culpabilidad” de su situación.<br />

189


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

“Su principal ocupación es la de mendigar”<br />

Como hemos señalado y documentado en otros lugares, la mayor parte de las<br />

personas sin hogar no mendigan. Sin embargo, la mayoría de las personas<br />

entrevistadas están algo o muy de acuerdo en que esa es la actividad principal<br />

de las PSH (46,7 %).<br />

Gráfico 4.9 Su principal ocupación es la de mendigar<br />

El grado de acuerdo con esta afirmación tiende a aumentar entre quienes les<br />

desconocen, así como entre quienes se opondrían a la apertura en su barrio de<br />

un Centro para PSH.<br />

190


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

“En general, ellos no son violentos. Al revés, corren el riesgo de ser<br />

agredidos”<br />

La mayoría de los entrevistados coinciden en que, antes que sujetos activos de<br />

violencia, las personas que viven en la calle corren un importante riesgo de ser<br />

agredidos. Más de la mitad de los entrevistados corroboran esta afirmación.<br />

Un 15,4 % no la comparten. Las personas de edades intermedias (39 a 65 años)<br />

tienden a compartir la anterior afirmación; el grado de acuerdo disminuye<br />

entre los menores de 30 años y los mayores de 65 años. El grado de acuerdo<br />

también es mayor a medida que aumenta el conocimiento de estas personas,<br />

de igual manera que a medida en que aumenta la tolerancia hacia la<br />

instalación en su barrio de un Centro para personas sin hogar.<br />

Gráfico 4.10. En general corren riesgo de ser agredidos<br />

191


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

“La mayoría de ellos son enfermos mentales”<br />

Aproximadamente, la cuarta parte de las personas entrevistadas considera que<br />

esta afirmación es cierta, aunque predominan quienes están algo o muy en<br />

desacuerdo con ella (63,6 %). En efecto, los datos disponibles parecen señalar<br />

que esta afirmación es incierta. Aunque una proporción importante de<br />

personas que viven en la calle necesitaría una atención psicológica que<br />

difícilmente reciben (bien por problemas mentales previos a la llegada a la<br />

calle o bien por el inevitable deterioro psico-físico a que la calle somete a<br />

quienes viven en ella).<br />

Gráfico 4.11. La mayoría de ellos son enfermos mentales<br />

“Son personas molestas y peligrosas”<br />

Las tres cuartas partes de las personas entrevistadas manifiestan su<br />

desacuerdo con esta afirmación. Consideran, al menos así lo manifiestan, que<br />

192


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

las personas que viven en la calle ni causan molestias ni resultan peligrosas. Un<br />

15 % opina lo contrario.<br />

Gráfico 4.12. ¿Cuál es su grado de acuerdo con la afirmación<br />

son personas molestas?<br />

Frecuencia %<br />

Muy en desacuerdo<br />

Algo en desacuerdo<br />

433 53,9<br />

169 21,0<br />

Ni acuerdo ni en desacuerdo 78 9,7<br />

Algo de acuerdo<br />

Muy de acuerdo<br />

Total<br />

86 10,7<br />

37 4,6<br />

803 100,0<br />

“Cualquiera de nosotros puede terminar viviendo en la calle”<br />

En proporciones aún superiores, un 77,8 % de las personas entrevistadas<br />

parece tener conciencia de que la llegada a la calle es un riesgo que puede<br />

acechar a cualquier tipo de personas, al margen de su actual situación de<br />

integración y convivencia normalizada. Con ello parece asumirse que, al<br />

margen de determinados rasgos de personalidad o peculiaridades individuales,<br />

son sobre todo factores <strong>social</strong>es los que pueden confluir en una coyuntura<br />

determinada para afectar a personas que nunca antes se habían visto<br />

abocadas a esa situación.<br />

193


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Gráfico 4.13. Cualquiera de nosotros puede terminar viviendo en la calle<br />

La convicción sobre el riesgo de caer en la calle resulta similar para todos los<br />

entrevistados, al margen del nivel de estudios que posean. Las mujeres, que<br />

suelen eludir la calle en mucha mayor medida que los hombres, se muestran<br />

especialmente convencidas de ello. Quienes muestran mayor conocimiento de<br />

los indigentes, y quienes tienden a mostrar actitudes más favorables hacia<br />

ellos, son también los que mayor conciencia tienen de lo vulnerables que<br />

podemos llegar a ser ante esta cuestión.<br />

4.3.4 Aceptación de la proximidad<br />

El análisis de contenido de prensa nos mostró diversos ejemplos de la no<br />

siempre bien llevada convivencia entre los habitantes de las grandes ciudades<br />

194


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

y las personas sin hogar. Una clara y continuada expresión de solidaridad<br />

individual y colectiva en el caso de los habitantes de Vigo que reclaman un<br />

Albergue para las PSH. Una posición ambivalente por parte de los barceloneses<br />

en su denuncia de las situaciones de deterioro urbano. Y un rechazo sin<br />

paliativos de “cientos de vecinos de Txurdinaga”, un barrio de Bilbao,<br />

rechazando la instalación de un centro de baja exigencia para personas sin<br />

hogar.<br />

Hemos colocado a las personas entrevistadas ante la situación ficticia de que,<br />

en su propio barrio, se creara un Centro o Albergue de acogida para las<br />

personas sin hogar. Si damos por válidas sus afirmaciones, ello no supondría<br />

un elemento de conflicto <strong>social</strong>:<br />

Tabla 4.8 Imagine que el Ayuntamiento va a poner en marcha en su barrio<br />

un Centro de día o un Albergue para personas sin techo.<br />

¿Cómo respondería usted?<br />

Frecuencia %<br />

Me opondría totalmente 55 6,8<br />

Me resultaría indiferente 137 17,1<br />

Lo aceptaría sin problemas<br />

Total<br />

611 76,1<br />

803 100,0<br />

Tan solo un 6,8 % de los entrevistados manifiesta que mostraría su total<br />

oposición. Un 76,1 % lo aceptaría sin problemas. Quienes aceptarían el Centro<br />

195


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

o Albergue son especialmente aquellos ciudadanos que no les consideran<br />

personas molestas o peligrosas e, igualmente, quienes más confían en sus<br />

posibilidades para salir de la calle, si reciben las ayudas adecuadas. Los<br />

ciudadanos de Bilbao, Palma de Mallorca y Valencia son los más remisos a<br />

aceptar un Centro para PSH, mientras los de Barcelona y las Palmas son los que<br />

ejercerían menor oposición. La cercanía y/o conocimiento de las personas sin<br />

hogar se traduce también en posiciones significativas, como muestra el<br />

siguiente mapa de correspondencias:<br />

Gráfico 4.14. Correspondencias entre conocimiento de PSH<br />

y aceptación de un Centro o Albergue<br />

0,50<br />

0,25<br />

0,00<br />

-0,25<br />

Me opondría<br />

No. Intento no mirar<br />

Conozo a alguno de e<br />

Lo aceptaría<br />

Les observo con frec<br />

Me fijo alguna vez e<br />

¿Conoce, ha<br />

tenido algún<br />

tipo de<br />

relación con<br />

la gente que<br />

vive en las<br />

calles de su<br />

ciudad?<br />

En su barrio<br />

van a<br />

inagurar un<br />

centro de día<br />

o un albergue<br />

para<br />

personas sin<br />

techo. ¿Cómo<br />

respondería<br />

usted?<br />

Indiferente<br />

-0,50<br />

-1,0<br />

-0,8<br />

-0,6<br />

-0,4<br />

-0,2<br />

0,0<br />

0,2<br />

0,4<br />

196


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

En situación marginal respecto al resto de entrevistados se sitúan quienes se<br />

opondrían a la creación de un Centro, y a su vez tienden a coincidir con<br />

quienes manifiestan ignorar y tender a no ver a estos ciudadanos residentes en<br />

la calle. Quienes se expresan como indiferentes tienden a serlo a la vez tanto<br />

hacia la puesta en marcha de un centro como hacia la propia presencia<br />

callejera de los indigentes. Quienes conocen a alguna persona de la calle, y<br />

quienes manifiestan observarlos con frecuencia, son los que menos reparos<br />

pondrían a la apertura de un Centro o Albergue.<br />

4.3.5 Valoración de las expectativas de futuro<br />

Mas adelante veremos cómo los profesionales y expertos tienden a mostrarse<br />

muy cautos respecto a las posibilidades de reinserción <strong>social</strong> de las personas<br />

que viven en la calle. Y, en todo caso, se refieren a que el proceso es complejo,<br />

como lo fue la llegada a la calle, y digno de ser considerado de modo<br />

individual. Los ciudadanos urbanos, tal vez más desconocedores de la<br />

problemática o tal vez más optimistas, creen que, con la ayuda necesaria, en<br />

bastantes o la mayoría de los casos las personas afectadas podrían salir de la<br />

calle (66,3 %).<br />

197


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Tabla 4.9 ¿Cree que las personas que viven en la calle,<br />

si reciben la ayuda necesaria,<br />

pueden reintegrarse plenamente en la sociedad?<br />

Frecuencia %<br />

No. En ningún caso 48 6,0<br />

En muy pocos casos 223 27,8<br />

En bastantes casos 305 38,0<br />

En la mayoría de los casos 227 28,3<br />

Total 803 100,0<br />

Si el conjunto de entrevistados se muestra optimista, los jóvenes destacan<br />

claramente entre los ciudadanos que consideran que la salida de la calle sería<br />

posible en la mayoría de los casos.<br />

A medida que aumenta la edad la posición no es tan contundente, pero se<br />

aprecia también un número significativo de ciudadanos que consideran<br />

factible la salida en bastantes casos. Quienes mayor conocimiento y/o relación<br />

tienen con personas que viven en la calle son, precisamente, los menos<br />

convencidos de que la salida sea posible en la mayor parte de los casos.<br />

198


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Gráfico 4.15. Opinión sobre el futuro de las PSH según edad del entrevistado<br />

4.4 Conclusiones del capítulo<br />

Las opiniones y actitudes de los ciudadanos que residen en grandes ciudades<br />

parecen reflejar en ocasiones los mismos estereotipos que difunden los<br />

medios de comunicación. En otros casos, sin embargo, parecen distanciarse de<br />

los tópicos más asentados:<br />

Evaluados desde el interés, la curiosidad, la observación y la cercanía a<br />

las personas sin hogar, con las que se encuentran en las calles de sus<br />

ciudades, las posiciones predominantes entre los ciudadanos son las<br />

menos favorables (60,7 %). De ellos, un importante 23,2 % no duda en<br />

199


CAPÍTULO 4: PERCEPCIONES Y ACTITUDES DE LOS CIUDADANOS<br />

ANTE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

corroborar la afirmación de que tienden a ignorarlos, a no mirarlos. Un<br />

39,4 % manifiesta su interés por la situación de estas personas que<br />

incluye, en algunos casos, ayudas y conocimientos personales.<br />

La mayor parte de los ciudadanos comparte la opinión de que, en<br />

determinadas circunstancias, cualquiera puede terminar en la calle.<br />

Igualmente predomina la opinión de que las personas sin hogar, antes<br />

que agresores, son potenciales y reales víctimas de violencias que no<br />

han provocado.<br />

La mayoría de los entrevistados afirma que aceptaría sin problemas un<br />

Centro de día o un Albergue para personas sin hogar en su barrio.<br />

También se muestran especialmente optimistas respecto a las<br />

posibilidades de reintegración <strong>social</strong> de estas personas, siempre que<br />

dispongan de las ayudas necesarias. Un 66 % de los entrevistados<br />

consideran que tienen bastantes o muchas posibilidades de lograrlo.<br />

200


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Capítulo 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN DE<br />

LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

5.1 Introducción 10<br />

Una vez considerada la imagen proyectada por la prensa y las valoraciones<br />

realizadas por los ciudadanos, se abordan en esta ocasión las aportaciones<br />

realizadas por los dos actores restantes: profesionales y expertos, por un lado,<br />

y las propias personas sin hogar, por otro.<br />

La primera fase del trabajo de campo fue completada con una segunda en la<br />

que se buscaba contrastar, validar y actualizar toda la información obtenida.<br />

Las cuatro primeras entrevistas a expertos fueron completadas con otras dos,<br />

hasta comprobar la saturación y validez actual de los discursos. Por su parte,<br />

las seis entrevistas que en su momento se realizaron a personas sin hogar<br />

fueron completadas, sin abandonar la metodología cualitativa, con un grupo<br />

de discusión realizado en esta ocasión con PSH alojados coyunturalmente en<br />

un albergue. Buscábamos también con ello ampliar la gama de miradas y<br />

vivencias que pueden ser expresadas desde las distintas situaciones y<br />

perspectivas de las personas sin hogar. Por último, y especialmente desde la<br />

óptica de las expectativas de futuro, la segunda fase del trabajo de campo se<br />

cerró con un análisis contrastado de dos blogs: uno de ellos mantenido por dos<br />

10 El presente capítulo es el resultado del desarrollo y ampliación del informe<br />

anteriormente realizado para el Diploma de Estudios Avanzados (DEA).<br />

201


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

profesionales/voluntarios y el otro por un indigente. (Ver detalles del Trabajo<br />

de campo en Anexo).<br />

Las valoraciones y experiencias de los expertos aparecen, en las próximas<br />

páginas, entremezcladas con las opiniones y vivencias de las personas sin<br />

hogar. Esto se debe a que hemos llegado a la conclusión, después de realizar<br />

diversos contrastes, de que este formato enriquece notablemente la<br />

información obtenida. De igual modo, hemos mantenido y profundizado un<br />

recorrido transversal que profundiza secuencialmente en las diversas fases del<br />

proceso por el que pasan las PSH. Las circunstancias que confluyen para que<br />

una persona se vea arrojada a la calle (el ayer); las vivencias, actividades y<br />

expectativas que se desarrollan durante la estancia en la calle (el hoy) y las<br />

condiciones y posibilidades de futuro (el mañana).<br />

5.2 La Entrevista abierta en profundidad y el Grupo de Discusión<br />

“Para explorar dimensiones relacionales y cercanas al mundo de la vida<br />

cotidiana y a la cultura comunicativa de los grupos <strong>social</strong>es,... se vienen<br />

manejando en los últimos años investigaciones de carácter cualitativo donde<br />

la atención a los modos concretos en que los grupos <strong>social</strong>es construyen su<br />

cohesión en situaciones concretas, mediante la producción y la recepción de<br />

códigos comunicativos, tratan de complementar la versión de recuento u<br />

observación externa realizada desde los sistemas institucionales formales que<br />

han ofrecido tradicionalmente los indicadores más objetivistas.<br />

202


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Así pues, creemos que es aconsejable la elaboración de barómetros<br />

cualitativos con carácter continuado –realizados a partir de entrevistas en<br />

profundidad y grupos de discusión- para estudiar los valores y las<br />

representaciones <strong>social</strong>es de la cohesión efectivamente expresados en los<br />

discursos de los grupos <strong>social</strong>es concretos. Ambas prácticas de investigación<br />

parecen hoy en día imprescindibles para complementar y complejizar los<br />

resultados que nos ofrecen las medidas más descriptivas” (Alonso, 2004:211) .<br />

Esta segunda parte de nuestra investigación se basa de manera exclusiva en el<br />

uso de la metodología cualitativa, a partir de las seis entrevistas en<br />

profundidad realizadas a expertos y profesionales y de las seis entrevistas y un<br />

grupo de discusión realizados con personas sin hogar.<br />

El enfoque cualitativo se orienta a una investigación motivacional profunda, y<br />

busca la libre manifestación por parte de los entrevistados de sus intereses<br />

informativos (recuerdo espontaneo), de sus creencias (expectativas y<br />

orientaciones de valor) y de sus deseos (motivaciones conscientes e<br />

inconscientes). (Ortí. A. en G. Ferrando et al. 2000:273).<br />

Las entrevistas abiertas en profundidad, semidirigidas o con guión<br />

semiestructurado, suponen la máxima interacción personal posible entre el<br />

sujeto investigado y el sujeto investigador. Este tipo de entrevistas consisten<br />

en un diálogo, cara a cara, directo y relativamente espontáneo, con el objeto<br />

de profundizar en las motivaciones personalizadas frente a cualquier problema<br />

<strong>social</strong>. La concentración del entrevistado y la habilidad del entrevistador para<br />

explorar sobre la marcha cuestiones que surgen espontáneamente, sin haber<br />

sido previstas, buscan obtener todos los matices posibles que una<br />

203


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

investigación por medio de encuesta cerrada y precodificada no puede<br />

proporcionar.<br />

Los grupos de discusión se sitúan a caballo entre lo psicológico y lo<br />

sociológico. Algunos investigadores los denominan entrevistas colectivas, o<br />

focus group cuando se realizan estudios de mercado. Se trata de reunir a un<br />

grupo reducido de personas (entre seis y diez), cuidadosamente seleccionadas<br />

en base al perfil socio-cultural adecuado a la investigación, que no han tenido<br />

un contacto previo ni un conocimiento del tema sobre el que van a tratar, para<br />

evitar discursos pre-construidos y facilitar la expresión espontánea en un<br />

contexto de libre intercambio. El moderador debe adaptar su lenguaje a las<br />

características del grupo, evitar emitir juicios de valor y lograr que el grupo<br />

respete su autoridad moral. El moderador debe intervenir en las menos<br />

ocasiones posibles, pero debe hacerlo siempre que el grupo se oriente al<br />

silencio o, en el otro extremo, a la crispación, teniendo siempre presentes los<br />

objetivos últimos de la reunión.<br />

El objetivo de estas reuniones es contextualizar los discursos, que como<br />

productos <strong>social</strong>es se producen siempre en determinados contextos; Se trata<br />

de que el grupo hable desde la posición que ocupa, que construya o<br />

"deconstruya" su propio discurso, que se evidencie la contradicción y se refiera<br />

a lo que "manifiestamente" no se expresa.<br />

204


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

5.3 Análisis de los resultados obtenidos<br />

5.3.1 EL AYER: Los caminos que desembocan en la calle<br />

El de los indigentes sin techo es un mundo plural, complejo, polimorfo, nunca<br />

puede entenderse como un ‘mundo cerrado’. Incluso los orígenes se muestran<br />

ramificados: como punto de partida, encontrarse ‘en la calle’ puede ser el<br />

resultado de un daño ‘congénito’ o ‘adquirido’ (tendencial o sobrevenido).<br />

Existen múltiples circunstancias que pueden derivar en esta situación que, a su<br />

vez, puede ser relativamente puntual o eternizarse en el tiempo. No se<br />

entienda esto como relativismo: en una estructura <strong>social</strong> concreta, es evidente<br />

que existen estratos vulnerables especialmente susceptibles a la exclusión.<br />

Pero en un contexto de redefinición de vulnerabilidades y amenaza en<br />

sectores de riesgo, la pluralidad de casos relativamente heterogéneos se<br />

muestra en toda su evidencia.<br />

Las personas entrevistadas ejemplifican ese entreabierto abanico: haber<br />

convivido o no en una familia estructurada, el mantenimiento actual de<br />

vínculos familiares, tener o no experiencia de vida laboral, haber formado<br />

familia propia, el acceso a cierta formación, las situaciones de salud... son<br />

variables -centrales y determinantes- que ayudan a explicar las muy diversas<br />

<strong>trayectoria</strong>s.<br />

Sin embargo, también se observan puntos de convergencia: bruscos traumas<br />

<strong>vital</strong>es, carencia de apoyos en momentos clave, problemas de salud -sean de<br />

tipo físico o psíquico-, procesos de <strong>social</strong>ización en la violencia...<br />

205


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Campaña “Homeless”. Glorieta de Atocha. Autor/es anónimo/s<br />

Fotografía: Bitácora www.labroma.<strong>org</strong>.es<br />

Convergencias asimismo previsibles si partimos de una mínima -necesariamirada<br />

‘estructural’ que explica vínculos consolidados entre posiciones<br />

<strong>social</strong>es, oportunidades laborales, <strong>trayectoria</strong>s formativas, habitats<br />

convivenciales... sin excluir características de personalidad y otras<br />

dependencias añadidas -padecimiento de alguna deficiencia, hábitos de<br />

consumos tóxicos...<br />

Esta óptica continúa una <strong>trayectoria</strong> ya antigua -clásicos de la Escuela de<br />

Chicago- que amplía el punto de mira desde el ‘sujeto desviado’ a una<br />

206


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

‘patología’ <strong>social</strong> sobre la que hay que intervenir o, al menos, hay que tener en<br />

cuenta; perspectiva que atiende situaciones concretas pero en contextos<br />

<strong>social</strong>es más amplios que no sólo ‘enmarcan’ dichas situaciones sino que<br />

ayudan a explicarlas y, en esa medida, intervenir en ellas. Tendencias de<br />

análisis que, como señalamos en el marco teórico, es la que predomina entre<br />

los investigadores <strong>social</strong>es actuales.<br />

Ya señalamos anteriormente uno de los aspectos que creemos haber<br />

detectado con mayor evidencia en nuestra investigación. Existe un gran río,<br />

que arrastra casi desde su origen a un determinado número de personas. Los<br />

contextos, factores, evolución y procesos desencadenantes varían, pero suelen<br />

terminar derivando en combinaciones diversas cuyo resultado es la llegada a la<br />

calle. (Indigencia tendencial). Y existen diversos afluentes, que terminan<br />

arrastrando hacia el gran río a algunos bañistas desprevenidos (Indigencia<br />

sobrevenida).<br />

En los estudios que hemos consultado, los analistas no suelen diferenciar<br />

claramente a este segmento de indigentes que no responden a la lógica<br />

generalizada del proceso multicausal. “Desde un punto de vista transaccional<br />

el estrés se entiende como un proceso interactivo entre las situaciones<br />

amenazantes o peligrosas –o percibidas por el sujeto como tales- y los recursos<br />

psicológicos y <strong>social</strong>es de los que dispone el individuo. En esta línea la<br />

investigación ha avanzado hacia la identificación de aquellas situaciones que<br />

son susceptibles de provocar reacciones de estrés en las personas, y los<br />

efectos que producen”: . (Muñoz et al 2003)<br />

“ Los expertos lo llaman “sucesos <strong>vital</strong>es estresantes”… una persona tiene a lo<br />

largo de una vida cinco o seis de estos sucesos. Pues ellos [los indigentes]<br />

207


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

sufren en un corto espacio de tiempo… pues, varios. Claro, unos sucesos<br />

alimentan a otros y a lo mejor, en periodos cortos, pues no te da tiempo a<br />

asumirlos”. (EE2) 11<br />

“ Uno de los estudios que hemos hecho desde la Fundación Rais dice que si en<br />

un periodo de un año y medio sufres al menos cinco causas traumáticas en tu<br />

desarrollo <strong>vital</strong>,- ya sea la pérdida de un familiar, la pérdida de empleo, algún<br />

tipo de adicción a alguna sustancia …- lo normal es que termines en la calle.<br />

Hay personas que tienen más o menos capacidad para resistir, más o menos<br />

apoyos en los cuales asirse en una situación complicada pero… lo normal es<br />

que acabe en una situación de exclusión <strong>social</strong>”. (EE3)<br />

“Nosotros lo explicábamos, cuando, cuando hacemos las sesiones de<br />

formación con los voluntarios… en el circo antiguo, había trapecistas y había<br />

red… los trapecistas hacían malabares casi imposibles y habitualmente les<br />

salían bien, pero había veces que se caían, y se caían a una red, y la red era<br />

buena, era de cuerda gorda, con nudos fuertes, muy tupida, de manera que el<br />

trapecista caía, pum, rebotaba, la gente le aplaudía, volvía a bajar y volvía a<br />

subir; y si a esa red le empezamos a quitar cuerdas y el trapecista vuelve a<br />

intentarlo, y le vuelve a salir bien muchas veces, pero hay veces que le sale mal<br />

¿eh?, ostras, si tiene suerte y cae medio bien, la red le va a sujetar, si no, se va<br />

a caer… si quitamos muchas y sólo le quedan 5 cuerdas, las posibilidades de<br />

partirse la cabeza son mucho mayores. Entonces, ¿cuáles son las causas? Pues<br />

las causas pueden ser muchas, desde el problema de las adicciones, muchos<br />

11 Los códigos utilizados en Entrevistas y Grupo de discusión son los siguientes:<br />

EE = Entrevista a experto. ESH = Entrevista a persona sin hogar. GDPSH: Grupo<br />

discusión con personas sin hogar. Los perfiles correspondientes a las personas<br />

entrevistadas se describen en el anexo metodológico<br />

208


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

problemas de adicciones terminan así, por ejemplo la gente con problemas de<br />

drogodependencia, no de alcoholismo solamente, sino de drogodependencia.<br />

Al final mucha, mucha gente muchas veces terminan marchándose de casa o<br />

mucho padres les echan a los hijos de casa, le dicen “vete por ahí, a mangar a<br />

otro lado” o ellos mismos se van, o gente con consumo de drogas,<br />

delincuencia, cárcel… sale de la cárcel y cae aquí”. (EE5)<br />

“Por supuesto, no tiene ni un solo mal, es lo que yo digo, que “al perro flaco<br />

todos son pulgas”, estos tienen una acumulación de problemas, incluido, en un<br />

sector, no sé si es el 50%, con problemas mentales, ¿eh? pero una<br />

acumulación de problemas y carencias de todo tipo. Porque para mí, te lo he<br />

explicado antes, esa es la raíz fundamental de lo que llaman pobreza en<br />

general. Y la pobreza suma como puede ser esta, que no es que no tengan<br />

nada, algo tienen porque si no se morirían de pura inanición ¿eh? pero es<br />

simplemente que están colocados muy mal en la escala del<br />

malestar/bienestar, es decir, están en el último escalón y además es<br />

dificilísimo salir, porque además hay que tocar muchísimos palillos para poder<br />

salir”. (EE6)<br />

En general, la diversidad de problemas que precipitan el acceso a la calle suele<br />

sintetizarse en los siguientes:<br />

De tipo material: pérdida de empleo u hogar, situación económica<br />

precaria.<br />

De tipo relacional: problemas familiares, violencia en el hogar,<br />

aislamiento.<br />

De tipo personal: problemas físicos y mentales.<br />

De tipo institucional: salida de prisión o exilio. (Cabrejas 2004:22)<br />

209


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Tarjeta tipo postal editada por la Fundación RAIS<br />

De una manera mucho más sistematizada y precisa, Sánchez Morales<br />

(1999:52) enumera los principales factores que influyen en la exclusión <strong>social</strong><br />

de las personas “sin techo”: .<br />

Laborales (paro, inestabilidad laboral, subempleo y empleos marginales,<br />

trabajos no cualificados, carencia de Seguridad Social).<br />

Económicos (ingresos irregulares, economía de subsistencia, carencia de<br />

ingresos, cobro de prestaciones <strong>social</strong>es, sin vivienda, viviendo en la calle,<br />

viviendo con amigos).<br />

210


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Culturales (pertenencia a minorías étnicas, problemas idiomáticos y<br />

culturales, elementos de marginación, analfabetismo, baja instrucción,<br />

baja cualificación laboral, alto nivel formativo y educativo).<br />

Personales (enfermedades físicas y mentales, ludopatías, alcoholismo y<br />

drogadicción, antecedentes penales, violencia y malos tratos, separación o<br />

divorcio, viudedad, orfandad, baja autoestima, actitud pasiva y de<br />

acomodo a la situación, pesimismo, fatalismo, procesos depresivos, débil<br />

estructura de motivaciones, variables negativas de edad y sexo).<br />

Sociales (desarraigo <strong>social</strong>, debilidad o falta de vínculos familiares, familias<br />

monoparentales, solteros, separados, divorciados y viudos, carencia de<br />

redes <strong>social</strong>es y círculos de amigos, aislamiento, falta de derechos políticos<br />

y <strong>social</strong>es, pérdida de prestaciones <strong>social</strong>es, utilización de la red asistencial<br />

específica).<br />

Por nuestra parte, consideramos que entre esa constelación de factores, es<br />

preciso destacar dos elementos de trascendental relevancia: La pobreza<br />

material y/o ambiental y la pérdida de los lazos personales y <strong>social</strong>es. La<br />

confluencia de pobreza y soledad deriva en situaciones de total desamparo:<br />

“Yo pienso que son varias cosas [las que llevan a la calle]. En el caso de las<br />

mujeres quizás puedan ser situaciones de desarraigo familiar, problemas de<br />

alcoholismo o drogadicción, siempre y cuando estén unidos a la pobreza.<br />

Porque ninguna persona que tenga esos problemas y no sean pobres se van a<br />

la calle. La pobreza creo que es la sombrilla que cubre todo lo demás”. (ESH3)<br />

211


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

“Es importante mantener la relación entre pobreza y desigualdad, pues es el<br />

único camino para romper la concepción “individualista” de la pobreza”.<br />

. (Renes 1993:46)<br />

“Existen muchas situaciones diferentes. Yo creo que el rasgo más común y más<br />

básico, para que una persona llegue a estar en situación de calle es el de<br />

personas en que la red de apoyo no ha funcionado. Hay una pérdida de los<br />

vínculos familiares, fundamentalmente, y la red de apoyo tanto natural como<br />

institucional no ha funcionado .. Está unido el deterioro de la persona con el<br />

deterioro de las relaciones con la red y viceversa”. (EE4)<br />

“Desde luego, el fracaso en las relaciones personales, eso está. Porque<br />

fundamentalmente son personas que están muy solas… Yo creo que tanto la<br />

pérdida de vivienda, como la pérdida de trabajo, eso sería subsanable si tu<br />

tienes una red de apoyo, que te ayuda a sostenerte”. (EE4)<br />

En efecto, multitud de ciudadanos experimentan una o varias de las<br />

situaciones traumáticas señaladas sin que por ello se vean obligados a residir<br />

en la calle. Los recursos económicos y la trama de relaciones suponen un<br />

espacio de protección definitivo en estos casos.<br />

“Cuando las personas experimentan dificultades <strong>social</strong>es, económicas o algún<br />

tipo de dificultad personal, la salida depende de los recursos a los que tengan<br />

acceso en ese momento. El riesgo de convertirse en sin techo se ve<br />

incrementado por la falta de acceso a los recursos ya sean económicos, ayuda<br />

de amigos y familiares o a los servicios públicos o voluntarios. Por otra parte,<br />

la oferta de viviendas es un factor crucial”. . (Daly 1993:12-13)<br />

212


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

“Creo que la, que la raíz está en la pérdida de las redes <strong>social</strong>es primarias<br />

Como son: pues lo de, puede ser lo de la pareja, o puede ser lo de la familia o<br />

puede ser lo de los amigos… porque si no, en circunstancias en las que muchos<br />

han caído, hay un sector de la población, que es muy grande que no cae. Es<br />

una causa, pues, que no es una causa única ni nada. Fundamentalmente me<br />

da la impresión que se debe a problemas de maduración de la personalidad<br />

que pueden venir desde la infancia, y después en la adolescencia. Por, en gran<br />

parte, en un sector bastante grande que tú dices 50% aquí, 30% en otros sitios<br />

que yo he visto, pues por problemas mentales, maltratados, o sea, son<br />

trastornos de la personalidad, carencias fundamentalmente de una cosa que<br />

es fundamental, que es la autoestima ¿eh? llega un momento que ya… y<br />

después una colección de elementos asociados o de factores asociados, como<br />

puede ser todo el tema del alcoholismo, de las drogas… “. (EE6)<br />

“Que la gente termina estando en la calle, con las rupturas de todo tipo que<br />

eso supons, pues… pues cada momento tiene su perfil, porque cada momento<br />

tiene sus rupturas; en los años 70, fundamentalmente, mucha gente terminó<br />

en la calle por dificultades de acceder al mercado laboral, porque los sistemas<br />

de protección eran menores, sobre todo gente mayor, con problemas de<br />

alcoholismo que terminaban en la calle. Y ahora, en este momento, de<br />

principios del siglo XXI, con el tema de la crisis, pues nos estamos encontrando<br />

con que, al final, terminan en la calle los más desestructurados. O sea, un<br />

tema importante es, la gente más desestructurada es la que está terminando<br />

en la calle. Y esa gente más desestructurada, fundamentalmente es: gente<br />

cada vez más joven, gente inmigrante,“. (EE5)<br />

“Yo he hecho en algunas investigaciones esta pregunta: “¿Qué sintió usted el<br />

primer día que estuvo en la calle?”, sobre todo el tema del miedo. Las mujeres<br />

pasan más miedo, pero un miedo horrible, e incluso ellos. Una de las cosas que<br />

213


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

hay que tener, que hay que tragarse, que hay que tener más valor que para<br />

torear a un miura, es el decir: “yo, esta noche ya no tengo donde ir y duermo<br />

en el primer portal que encuentre”. Se podrá hacer callo, pero lo que es la<br />

primera vez, eso es exactamente igual que cuando sale un miura por los toriles<br />

de Las Ventas. Es el miedo, el miedo a que te apuñalen, a que te roben si<br />

tienes 2 euros en el bolsillo, o el reloj, que te lo quiten. Entonces, eso tiene que<br />

ser tremendo. Entonces, para dar ese paso, tienen que haber ocurrido muchas<br />

circunstancias a la vez, y al mismo tiempo, pues eso, no tener una… sobre todo<br />

no tener a quién acudir, no tener a quién acudir: el desvalimiento total”. (EE6)<br />

Separación, alcoholismo, problemas de trabajo, problemas mentales … Las<br />

personas sin techo entrevistadas desgranan desde la espontaneidad de sus<br />

discursos las causas y/o situaciones que creen haber vivido o haber detectado<br />

en las personas que han conocido en la calle. No se trata de una descripción<br />

sistematizada, como las que nos aportan los estudiosos de la marginación,<br />

pero coinciden puntualmente al señalar los diversos ejes que, por uno u otro<br />

camino, tienden a confluir:<br />

“Unos porque se separan de la mujer y se vuelven borrachazos, no les gusta<br />

trabajar o no les admiten en el trabajo por las borracheras … la mayoría se<br />

quedan medio gilipollas y ¿qué hacen? No trabajan, no tienen dinero. La<br />

mayoría de los que están en la calle es por obligación o es porque quieren,<br />

porque ya no saben vivir de otra manera”. (ESH1)<br />

“Porque si no te has preocupado mucho de tu bienestar, terminas en la calle.<br />

Es muy duro terminar en la calle ¿no? es muy duro, y más si, si te vas a la calle,<br />

pues si tienes alcohol, te da alcohol, si eres alcohólico, o eres drogadicto… es<br />

que ahí ya se te quita todo, no tienes noción, no tienes noción de nada, te da<br />

214


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

lo mismo estar sentado en un banco, en una esquina… ese, eso ya es lo<br />

último”. (GDSH1)<br />

“Problemas mentales o problemas familiares. Se tiran a la calle y ya se<br />

acostumbran a vivir de la calle y no saben …”. (ESH1)<br />

“Hay tres problemas fundamentales: uno es el alcohol, otro son las drogas y<br />

otro los problemas mentales”. (ESH2)<br />

“Alguien me comentaba que, sobre todo en los últimos años, hay mucho<br />

hombre en la calle que proviene de problemas con la mujer. La mujer se queda<br />

con la casa y el hombre se queda en la calle … por muchas causas diferentes”.<br />

(ESH2)<br />

“Hay casos de separación en que el hombre prefiere irse a la calle que<br />

aguantar, a lo mejor, situaciones de maltrato moral por parte de la mujer y de<br />

injusticia económica”. (ESH3)<br />

“No sé, las circunstancias de cada uno son diferentes… (GDPSH2)<br />

No sé, pero la persona que termina en la calle es porque ya está hundido<br />

totalmente. (GDPSH1)<br />

Totalmente de acuerdo. (GDPSH4)<br />

No lo quiere su familia, no lo quiere su mujer, no lo quieren sus hijos, nadie lo<br />

quiere, ni sus compañeros de trabajo, ni los amigos habituales ¿por qué?<br />

Porque no lo quieren”. (GDPSH1)<br />

“Yo es que creo que, cuando la persona, pues se va a la calle, es por… creo, a<br />

mi parecer, es por una falta de… de preparación, de… de su grado de estudios<br />

o eso. Eh… pienso que, la persona, lo digo por mí, que… a veces también por<br />

215


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

las cosas que rondas, por las que uno actúa de una forma que no es lo<br />

correcto. Cuando uno a veces lo tiene todo… y comete el error de buscar algo<br />

de lo que no, no tiene, o sea, buscar algo en otra parte, pues que quizás lo<br />

tienes en tu propio país, que si tienes tus hijos, tienes tu esposa, lo tienes<br />

todo, pues no tienes dinero, no mucho dinero, pero tienes trabajo… y a veces<br />

eso es, son el tipo de errores que te llevan a cometer, a caer, pues en esta<br />

situación, lo digo por mí, y cuando te quieres dar cuenta ya es tarde. No hay<br />

marcha atrás… o encuentras un lugar como éste, o definitivamente estás<br />

acabado”. (GDSH4)<br />

“...entonces, cuando una persona acaba en la calle… ya no se quiere, no es<br />

que… es posible que haya tenido mala suerte, puede ser, pero como yo no creo<br />

en la suerte, creo que uno decide lo que quiere hacer, cuándo lo quiere hacer…<br />

entonces, si quiere irse a la calle, o sea, lo ha tomado como opción y si lo ha<br />

tomado como opción es que tú no te quieres… no te quieres en absoluto, has<br />

perdido completamente la dignidad… has perdido… lo has perdido todo, lo has<br />

perdido todo porque no te quieres. Es más, es justo cuando vienes a un centro<br />

de estos, a un albergue, o a un centro de acogida, y después de un año, el<br />

tiempo que sea, empiezas a recuperarte y empiezas a querer vivir en un piso y<br />

empiezas a no querer estar en la calle, es cuando empiezas a quererte<br />

realmente, entonces lo que perdiste fue eso. El amor por ti lo perdiste. Cuando<br />

lo perdiste, la calle lo ves como una opción más y tampoco lo ves muy drástico,<br />

muy drástico, porque si lo ves como una opción de vivienda y no se te cae el<br />

mundo encima porque vivas en la calle, lo soportas, si soportas eso es que no<br />

te quieres. Y si pasa un tiempo y ya no soportas vivir en la calle es que estás<br />

empezando a quererte. Entonces yo creo que es una cuestión de… de<br />

autoestima por supuesto, autoestima, al nivel más bajo”. (GDSH2)<br />

216


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Según el grado de cronicidad, que en buena medida remite al tiempo de<br />

permanencia en situación de indigencia callejera, pueden establecerse entre<br />

tres/cuatro categorías de personas que han terminado residiendo en la calle a<br />

partir de procesos diversos:<br />

“ Están las personas con un problema puntual – les han robado, un desahucio<br />

…-. Pueden salir de la calle sin problemas. Están los que llevan más tiempo en<br />

la calle. Pueden recuperarse trabajando sobre hábitos personales, de salud,<br />

trabajo … Y están las personas con un problema crónico. Se puede mantener y<br />

mejorar su calidad de vida. A lo mejor tienen un grado de cronicidad por estar<br />

en la calle, o porque tienen cincuenta y cinco años o porque tienen una<br />

enfermedad …” (EE1)<br />

Sin abandonar el criterio de la cronicidad y, de un modo más sistematizado,<br />

Sánchez Morales (1999) establece una gradación de mayor o menor<br />

vulnerabilidad en base a la incidencia de los siguientes factores: Circunstancias<br />

laborales, relaciones familiares, vínculos relacionales, estado de salud,<br />

contacto con la red asistencial y grado de desarraigo. Unos u otros factores<br />

habrían estado más o menos presentes en el acceso a la calle y, a su vez, serían<br />

más o menos determinantes en cuanto a las posibilidades de rehabilitación<br />

<strong>social</strong>.<br />

Por último, y desde el punto de vista del origen, causas o factores que derivan<br />

en la exclusión, los resultados de la observación y de las entrevistas que hemos<br />

realizado nos llevan a considerar la existencia de dos categorías o perfiles de<br />

indigentes. Unos de ellos, la mayoría, se encuadran en la indigencia<br />

217


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

tendencial. Un número más reducido, pero tal vez con creciente presencia,<br />

pueden ser considerados como resultado de una indigencia sobrevenida.<br />

La indigencia tendencial responde a los patrones clásicos del moderno<br />

indigente urbano (familias desestructuradas, infancia o adolescencia<br />

problemáticas, fracaso escolar, experiencia en centros de menores, consumo<br />

habitual de tóxicos …). Se trata de personas cuyo proceso <strong>vital</strong> tiende a<br />

abocarles hacia los márgenes, salvo excepciones notablemente significativas:<br />

“Viví con mis padres, mis padres son toxicómanos los dos... si quería salir,<br />

tenía que salir de casa primero porque si no era como una misión imposible,<br />

yo en casa tenía todos los días tres, cuatro, cinco gramos diarios y era pues,<br />

como me quiero quitar pero no puedo, era imposible... Todo esto hablado con<br />

mis hermanos, tengo cinco hermanos más, y ellos salieron antes que yo, son<br />

más listos que yo. Me dijeron:`como te quedes en casa te vas a enganchar<br />

pero como un campeón.”. (ESH5)<br />

“Soy de una familia desarreglada. Yo he nacido en una familia desarreglada.<br />

Soy de un pueblo de Guadalajara... Y estoy trabajando desde los ocho años<br />

detrás de una barra. Primero trabajé para mis padres, luego para mi<br />

hermano... luego yo dije: “bueno, ya está bien, ya me toca a mí, ¿no?. ... ¿pues<br />

qué voy a hacer? si son las circunstancias que me han tocado”. (ESH5)<br />

“Porque mi madre me pegaba con los tacones de aguja…”. (ESH6)<br />

La indigencia sobrevenida afecta a aquellos ciudadanos que no estaban<br />

destinados a la calle, de acuerdo con las convenciones de nuestro modelo de<br />

218


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

sociedad: personas <strong>social</strong>izadas en familias no conflictivas, con notable nivel de<br />

educación reglada, en un entorno socio- económico medio-alto. Para<br />

entendernos en el lenguaje convencional: Uno cualquiera de nosotros,<br />

normales y convencionales ciudadanos (hacen verdad aquello de que<br />

cualquiera, en determinadas circunstancias, puede terminar en la calle):<br />

“ Yo me encontré con un desahucio. Digamos que yo dependía de una persona,<br />

estaba totalmente confiada… y esto me sobrevino porque ni se me ocurrió<br />

pensar lo que se me venía encima. Yo no estaba empadronada en Madrid,<br />

había cosas que no había aclarado porque pensaba que no era necesario. Y de<br />

repente me cayo lo que me cayó, que fue el desahucio”. (ESH3)<br />

“Es totalmente cierto que cualquier persona puede acabar en la calle. Yo he<br />

conocido un piloto de aviación, directores financieros de grandes compañías,<br />

un corresponsal de guerra, un director de marketing, empresarios … gente que<br />

ni te lo crees ... no. Simplemente por una depresión, por un problema familiar,<br />

por tal … Causas muchas veces inesperadas”. (ESH2)<br />

“Jamás, jamás [ pensé que yo iba a estar en la calle]. Mi casa siempre fue casa<br />

de alojamiento y nunca pensé que yo fuera a necesitar que alguien me alojara.<br />

Y, paradójicamente, no tengo quién me aloje”. (ESH4)<br />

“Yo he sido un triunfador valoradísimo, y ahora soy un fracasado<br />

valoradísimo… es decir, bueno, me siento mas fracasado probablemente en mi<br />

época de triunfo que ahora. Me siento mucho mas triunfador ahora que<br />

cuando era triunfador. He sido capaz de rehacerme. Me siento mucho mas<br />

<strong>org</strong>ulloso de lo que he hecho ahora que de lo que hacía antes”. (ESH2)<br />

219


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Para la indigencia convencional parece evidente significar dos elementos<br />

claves: se trata de un proceso multicausal. La indigencia sobrevenida no<br />

responde necesariamente a ese patrón: puede ser un momento, contexto,<br />

circunstancia, desencadenante. Puede ser una única causa de enorme impacto<br />

psicológico en un breve lapso temporal (si no fuera así, serán los psiquiatras<br />

quienes posiblemente identifiquen un posible proceso latente).<br />

Lo que resulta evidente, sin embargo, es la notable disparidad de los discursos.<br />

El indigente tendencial ha asimilado, a lo largo del tiempo, un proceso que<br />

termina asumiendo como propio. El indigente sobrevenido, una vez que es<br />

consciente de su nueva situación, se enfrenta y rebela contra ella, utilizando<br />

las armas de reflexión, análisis y expresión adquiridas en su anterior vida<br />

“normalizada”. Podemos hablar, por ello, de dos líneas argumentales básicas:<br />

el discurso poco reflexivo e inconexo propio de la resignación; el discurso<br />

encendido y rebelde propio de la resistencia.<br />

Respecto al proceso dialógico, por tanto, podemos destacar un primer y muy<br />

representativo indicador de desigualdad entre las personas entrevistadas: su<br />

diferente nivel de competencia comunicativa. A las previsibles diferencias<br />

entre las posiciones discursivas de varones y mujeres -más ‘abstracto’ y<br />

racionalizador en un caso, más ‘concreto’ y vivencial en el otro- el lenguaje<br />

utilizado manifiesta fuertes divergencias -ya no asociadas al género- en la<br />

capacidad de reflexión -y, por tanto, de expresión- sobre las propias<br />

experiencias y <strong>trayectoria</strong>s <strong>vital</strong>es. Contamos en este sentido con<br />

desigualdades de partida que afectan a procesos cognitivos y comprehensivos<br />

sobre la propia historia vivida, su despliegue y su proyección -planes,<br />

estrategias- hacia el futuro.<br />

220


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Pero también varían las posiciones discursivas de estas personas en una línea<br />

de gran interés para el análisis, ya que viene definida por sus diferentes<br />

actitudes, valoraciones, deseos... en cuestiones que atañen no sólo a su<br />

espacio <strong>vital</strong> inmediato sino también a un mundo colectivo más amplio. Esas<br />

plurales posiciones se perfilan, pues, en lógica conexión con cuestiones como:<br />

la percepción de sí mismos, su percepción de los otros -desde los más<br />

próximos a los más lejanos-, su experiencia y vínculos institucionales, su<br />

ideología, su mayor o menor pragmatismo... Considerando estas variables y a<br />

partir del análisis de las entrevistas abiertas, podemos distinguir las siguientes<br />

posiciones discursivas (que a su vez desvelan diversos recorridos <strong>vital</strong>es):<br />

Posición discursiva ‘dependiente o edípica’ : Es la mostrada por aquellos<br />

que viven una situación de total dependencia de los recursos y servicios.<br />

En general, llevan mucho tiempo en la calle, y los albergues son su<br />

obligada referencia y único soporte.<br />

Posición discursiva ‘integradora’ : Corresponde a quienes muestran deseos<br />

y esperanzas de reincorporarse a una vida <strong>social</strong> “normalizada”. Dependen<br />

de los recursos, pero actúan para desprenderse de ellos.<br />

Posición discursiva ‘victimista’ : No exenta de un manifiesto voluntarismo<br />

idealista. Situada en un complejo equilibrio entre la sumisión y la crítica.<br />

Posición discursiva ‘reivindicativa-reflexiva’ : Es la que corresponde, en<br />

gran medida, a los indigentes sobrevenidos. Cuestionan su propia realidad<br />

221


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

y la del colectivo de los marginados. Se rebelan contra su inesperado<br />

destino y aspiran a modificarlo.<br />

En resumen, los procesos de indigencia que podemos describir tienden a<br />

mostrar una realidad dual: se observan dos caminos de acceso a la indigencia,<br />

tendencial y sobrevenido, que a su vez se explicitan en los dos discursos<br />

básicos que se superponen a ambas realidades: el resignado y el resistente.<br />

Tras ambos procesos y discursos se aprecian cuatro posiciones que se<br />

corresponden a otras tantas <strong>trayectoria</strong>s <strong>vital</strong>es: dependiente, integradora,<br />

victimista y reivindicativa.<br />

Prevención<br />

Llegados a este punto, parece inevitable remitirse a un concepto que hasta<br />

ahora hemos ignorado: se trata de la prevención. Actualmente, parece cierto<br />

que todos los agentes <strong>social</strong>es son conscientes de la importancia de las<br />

actuaciones preventivas, destinadas a abordar a tiempo situaciones que<br />

siempre serán mas complejas cuando se hayan desencadenado y tiendan a un<br />

proceso de cronificación. Sin embargo, existe escasa constancia de claras<br />

estrategias de prevención orientadas a mitigar la exclusión y, aun menos, que<br />

existan balances o memorias que muestren claras evidencias de sus posibles<br />

resultados preventivos. Ya en el año 1975, con motivo de la primera encuesta<br />

a indigentes realizada en el ámbito nacional, los autores del estudio<br />

especifican las líneas que consideran necesarias en una labor preventiva:<br />

. (Equipo DIS 1975:10-11)<br />

222


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Actuar sobre la pobreza: acceso a un nivel de vida digno, a una vivienda<br />

decente, a una asistencia medico-sanitaria adecuada… Esto implica,<br />

necesariamente, una distribución de la renta más justa.<br />

Acceso real a la educación, a la cultura y a la formación profesional. Y, con<br />

ello, una verdadera igualdad de oportunidades laborales.<br />

Modificar algunos de los valores vigentes en nuestra sociedad.<br />

Especialmente el concepto productivo y utilitarista que se tiene de la<br />

persona.<br />

Promover la vida asociativa y comunitaria, y una mayor participación del<br />

individuo en su sociedad. Lo relacional no debe restringirse exclusivamente<br />

a la familia; debe ampliarse a otros niveles que integren a la persona e<br />

impidan su desarraigo cuando, por cualquier razón, se destruyera su vida<br />

familiar.<br />

“Todo, absolutamente todo, es una cuestión de prevención. Me da<br />

igual que sea sanidad, como que sean servicios <strong>social</strong>es … Todo es una<br />

cuestión de prevención”. (ESH3)<br />

“No hay unas ayudas claras y definidas para cuando un tío cae en la<br />

calle. Habría que cogerle justo cuando entra en la calle y decirle:<br />

tranquilo, que no pasa nada. Probablemente se recuperaría pero, claro,<br />

si no hay eso… el tío se hunde”. (ESH2)<br />

223


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

“Entonces te entra una depresión, te da igual vivir, empiezas a beber,<br />

pierdes el trabajo, tu familia que te dice que te den por saco... puffff. ¿Y<br />

dónde vas? Pues a los albergues, ¿qué vas a hacer? Mucha gente se<br />

tira a la desesperada, ya no aguanta más”. (ESH5)<br />

5.3.2 EL HOY: La calle como espacio y escenario<br />

Para quienes gozamos de un techo y, tal vez además, de un hogar, la calle es el<br />

espacio en que nuestra vida se expande. Circulamos por ella para gozar de las<br />

224


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

aceras y los escaparates, para sentir el pulso de la ciudad, para trasladarnos<br />

perezosamente a nuestros trabajos. Pero tenemos la certeza del retorno al<br />

hogar. Al espacio propio, sea o no compartido, a la seguridad, al refugio.<br />

Habitamos la calle como actores del amplio reparto, pero no somos huéspedes<br />

esclavizados a ella. Bajamos a la calle o subimos de la calle. Pero no somos<br />

calle. Es más, a medida que en las modernas ciudades hemos ido<br />

replegándonos del espacio colectivo, para recluirnos en la intimidad, hemos<br />

desarrollado nuevos recelos hacia quienes se ven obligados a convertir la calle<br />

en su único territorio: 12<br />

“Al tener un techo tu eres dueño de una libertad, y puedes hacer tu<br />

vida como te apetezca. Yo, si en este momento no tengo que estarme<br />

preocupando porque hoy no tengo para pagar el hostal … con esa<br />

preocupación ¿como me concentro yo en conseguir trabajo? ¿Cómo?<br />

Tres metros cuadrados que te den. Algo adonde llegar”. (ESH4)<br />

“Mañana y un techo es algo sinónimo. Cuando tienes un techo<br />

puedes decir mañana. A mi me gusta la filosofía oriental cuando uno<br />

tiene un techo, si no no me interesa. A mi no me gusta meditar al aire<br />

libre, a mi me gusta salir de mi techo a meditar al aire libre. Esta es la<br />

diferencia… y esto es lo que hacen los orientales”. (ESH3)<br />

12 Los paseantes y turistas aprecian la pulcra estética de los setos que, debidamente<br />

recortados, adornan armoniosamente los jardines de la Plaza de Oriente. La mayoría<br />

de ellos ignoran que, cuando cae la noche, la base de esos setos se convierte en un<br />

tradicional y codiciado “techo” que presta cobijo a un buen número de indigentes.<br />

225


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

“Sí, las personas sin hogar en general han sufrido mucho, porque lo<br />

más esencial que puede tener una persona, que es un hogar, no lo<br />

han tenido”. (ESH1)<br />

Durante las últimas décadas ha ido avanzando y consolidándose la retórica de<br />

la seguridad, que siempre encuentra un adecuado eco entre las amplias clases<br />

medias y, a medida que avanza, va arrancando a la calle su anterior condición<br />

de espacio de convivencia para transformarla en el imaginario colectivo en un<br />

territorio hostil: el lugar ajeno, extraño, el lugar por el que inevitablemente<br />

debemos circular, el espacio de la agresión y la violencia, el ámbito que ha sido<br />

secuestrado por personas con las cuales eludimos cruzarnos: 13<br />

“Van a limpiar algunas plazas, para librarlas de los pobres que ensucian y<br />

cambiarlos de sitio. Que en vez de cambiarlos de sitio piensen en darles<br />

camitas. Camitas con techo. Porque cambiarlos de sitio no sirve para<br />

nada”. (ESH3)<br />

13 Algunos sucesos que exteriorizan la valoración municipal del espacio urbano y la<br />

propia concepción que los munícipes tienen como garantes de la convivencia<br />

ciudadana en Madrid:<br />

Remodelación de la Plaza de Tirso de Molina para expulsar a los indigentes<br />

que allí se reunían.<br />

Desalojo, sin previo aviso, del túnel de la Plaza de España, residencia habitual<br />

de un buen número de indigentes. Pérdida de sus objetos y enseres. De sus<br />

“señas de identidad”.<br />

Amplia operación policial para desmantelar la acampada en el Campus de la<br />

Universidad Complutense, compartida por jóvenes que reclaman facilidades<br />

en el acceso a la vivienda e indigentes a los que los jóvenes proporcionaban<br />

comida y alojamiento.<br />

226


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

5.3.2.1 Vivir en la calle<br />

En la actual fase del neoliberalismo “la mercantilización se extiende al tiempo,<br />

a la cultura, a los afectos, al ocio, a la intimidad y a los procesos educativos,<br />

cada vez más mercantilizados. El principio de competitividad, que orienta al<br />

neocapitalismo neoliberal, se impone también en la producción, distribución y<br />

consumo de las viviendas”. . (Rifkin 1990:69)<br />

La lógica del hiperconsumismo tiende a convertir lo superfluo en estatus: tener<br />

dos o más viviendas es señal de prestigio, es un rasgo propio de la sociedad de<br />

la abundancia. Como señala García Roca (2004:35): “ Es necesario popularizar<br />

un discurso alternativo sobre la vivienda como ya se ha hecho con el agua, el<br />

aire, la protección, la infancia, la educación básica, la salud… que deben<br />

garantizarse a todos mas allá de sus capacidades” .<br />

“Yo de hecho para vivir en la calle no valgo, a mí la calle me tiene muy<br />

comida, no me veo con higiene, no me veo... no me veo nada”. (ESH3)<br />

“Esto es una mierda. La gente te ve y dice, pobrecillo. Tú para adentro<br />

dices, esto es una porquería. Al que le guste que esté… pero al 60 % no le<br />

gusta”. (ESH1)<br />

“Evidentemente la calle no beneficia a nadie. Sólo deteriora”. (ESH2)<br />

“Y cuando un tío acaba en la calle se hunde totalmente, porque es<br />

tremenda la entrada en la calle y es muy difícil volver a tener un estado de<br />

227


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

ánimo para intentar salir. Cuando llegas a la calle es angustia, es miedo,<br />

depresiones. Es muy difícil recuperarse de todo eso”. (ESH2)<br />

Con la casa a cuestas. Fotografía: Ángel Martín Caño<br />

“Yo lo que veo mucho en la calle es gente que ha dicho: ya no tengo nada<br />

que hacer, me quedo en la calle y abandono. Ya no pelean, no pelean en<br />

ningún sentido. Cuando necesitan algo van y lo piden, y si se lo dan bien y<br />

si no no. Pero, en el fondo, nunca les han ayudado. La realidad es que<br />

siguen en la calle”. (ESH2)<br />

228


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

“ Yo he leído mucho a Nietzche que decía eso de que lo que no te destruye<br />

te fortalece, entonces no te queda más remedio. Yo no tengo tanta<br />

fortaleza”. (ESH3)<br />

“ El hogar es también cosmos, ordenación, experiencia de sentido. La casa no<br />

sólo es cuerpo sino que también es elección. Vuelvo al hogar cuando quiero<br />

librarme de una pesadilla, salirme de un contexto denso o colocarme las<br />

zapatillas. Necesito hogar para rehacer mi vida, como señal de libertad frente a<br />

la forzosidad. Del hogar depende la planificación de la propia vida y los sin<br />

hogar son biografías interrumpidas y <strong>trayectoria</strong>s fallidas… La ausencia de<br />

hogar conlleva, en consecuencia, la pérdida de vinculaciones, de sentido y de<br />

anclaje. La inseguridad que obliga a inventar la propia biografía, la falta de<br />

opciones, que se deslizan hacia las zonas más oscuras. En las personas sin<br />

hogar hay también una amplificación de la incerteza y la inseguridad de quién<br />

pierde el control sobre sus propios riesgos” . (García Roca 2004:37-39)<br />

5.3.2.2 La evolución de los perfiles<br />

Los rasgos básicos del indigente urbano no se han modificado sustancialmente<br />

a lo largo de décadas, en lo que se refiere a los perfiles que continúan siendo<br />

predominantes. Sin embargo, en los últimos años, este colectivo ha<br />

experimentado transformaciones cualitativamente significativas. Pedro J.<br />

Cabrera, partiendo de la evolución observada en EE.UU., describe los rasgos de<br />

los nuevos “sin hogar” de los años 80 y 90:<br />

229


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

“El problema… no cabe duda que acaba por afectar cada vez en mayor medida<br />

a grupos de personas – mujeres solas con hijos, trabajadores con bajos<br />

salarios o desempleados, jóvenes en busca de un primer empleo, …- que en<br />

condiciones normales están muy lejos del estereotipo habitual del vagabundo,<br />

transeúnte, alberguista… En todos y cada uno de los rasgos que hemos<br />

repasado como definitorios de los modernos sin hogar se intuyen biografías<br />

bastante más próximas a las condiciones de vida de mucha gente “normal” de<br />

lo que a menudo se quiere reconocer ..”.(Cabrera 1998:118-126) .<br />

El colectivo de los sin techo experimenta transformaciones, tal y como señalan<br />

también los expertos que hemos entrevistado:<br />

“Sí, si que ha cambiado el perfil clásico, tradicional … Cada vez hay más<br />

mujeres. Otro tipo novedoso es que cada vez hay más gente joven y, en torno<br />

al 10 ó 15 %, tienen estudios universitarios … Entonces esto nos hace mucho<br />

que pensar.” (EE2) .<br />

La tipología tradicional de los sin techo, contrastada con los nuevos perfiles,<br />

aparece sintetizada en la siguiente tabla (Sánchez Morales 1999:25)<br />

230


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Tabla 5.1 Clásicas y nuevas tipologías de las PSH<br />

Población “sin techo” tradicional<br />

Nuevos tipos de “sin techo”<br />

Varón de edad media o<br />

elevada<br />

Soltería<br />

Alcoholismo<br />

Origen <strong>social</strong> desfavorecido<br />

Bajo nivel formativo<br />

Bajo nivel educativo<br />

Varones edad intermedia<br />

Separados y/o divorciados<br />

Varones jóvenes con problemas laborales<br />

Varones jóvenes y de edad intermedia<br />

drogadictos y ex-drogadictos<br />

Mujeres jóvenes y de mediana edad con<br />

malos tratos, separaciones o divorcios<br />

Mujeres jóvenes y de mediana edad<br />

drogadictas y exdrogadictas<br />

Mayor nivel educativo y cultural<br />

Enfermos mentales<br />

Inmigrantes<br />

De acuerdo con la misma autora de las tipologías descritas en la tabla, la nueva<br />

indigencia podría resumirse en las siguientes denominaciones:<br />

“Juvenalización”, feminización, soledad legal (separaciones y divorcios),<br />

toxicomanías, elevado nivel educativo/formativo, internacionalización.<br />

Descrito en otros términos, Jesús Camarero (1998:68) recurre a la metáfora del<br />

ascensor: “En 1984 había menos pobres que en una década anterior, pero<br />

estos pobres no son los mismos: son más pobres y lo son por más tiempo” . El<br />

ascensor que se marcha lleva a ancianos y familias numerosas. El ascensor que<br />

llega alberga a personas solas, familias sin niños, familias monoparentales y<br />

desempleados, sobre todo de larga duración.<br />

231


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

“Nuestra experiencia, en base al trabajo que hacemos desde los distintos<br />

programas, nos dice que el perfil que viene dándose durante los últimos años,<br />

y se mantiene, salvo algunas excepciones, son: varones, en una edad a partir<br />

de los 35/40 años, en una situación complicada producto de múltiples causas<br />

a partir de una causa originaria … en los últimos cinco o seis años hemos<br />

venido detectando que cada vez hay más gente joven, todavía son una<br />

minoría, una inmensa minoría, pero hay jóvenes preparados profesional o<br />

culturalmente. También hemos detectado que hay algunas mujeres más, no<br />

muchas. Las mujeres siguen siendo una minoría … la razón es que las mujeres<br />

son mucho más resistentes. Aguantan carros y carretas”. (EE3)<br />

“ La calle, en general, ha crecido en número, sobre todo por la inmigración.<br />

Según las estadísticas, casi un 50 % son extranjeros. Lo que si se empieza a ver<br />

es más gente joven, mujeres yo creo que se mantiene más o menos, siempre<br />

hay algunas, un 15 %, yo no sé. Y las mujeres tienen más problemas que<br />

nosotros porque para ellas es más peligrosa la calle, corren más riesgos,<br />

tienen pocos albergues ... problemas de higiene”. (EST2)<br />

Mención especial merece el colectivo de los inmigrantes que viven en la calle,<br />

y que suponen casi la mitad de quienes acuden a los recursos y servicios<br />

establecidos, en principio, para los indigentes. Ante la falta de servicios<br />

habilitados expresamente para ellos, acuden a los circuitos convencionalmente<br />

“ocupados” por los indigentes “autóctonos”, generando conflictos a los que<br />

más adelante nos referimos. Entendemos, no obstante, que los inmigrantes<br />

“sin papeles”, insertos coyunturalmente en el circuito de la indigencia, no<br />

responden al perfil de los “indigentes sin techo” que son objeto de la presente<br />

investigación. Existen estudios específicos que analizan la problemática de los<br />

232


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

inmigrantes que se enfrentaron a un destino distinto al imaginado. (Sánchez<br />

Morales 2004)<br />

Las estadísticas más recientes (INE. 2005), corroboran los datos señalados. El<br />

actual perfil de los indigentes “sin techo” responde a los siguientes rasgos:<br />

Tabla 5.2. Datos básicos sobre personas sin hogar<br />

- El 82,7% de las personas sin hogar son varones. La edad media de<br />

este colectivo es de 37,9 años y sus ingresos medios son de 302<br />

euros al mes.<br />

- Casi la mitad de esta población tiene hijos (46%), aunque sólo una<br />

décima parte vive con ellos.<br />

- El 30% de las personas sin hogar es abstemia y nunca ha<br />

consumido drogas.<br />

- El 37,5% lleva más de tres años sin alojamiento propio.<br />

- La mitad de la población sin hogar busca trabajo.<br />

- El 51,8 % son españoles y el 48,2 % extranjeros<br />

Si analizamos los datos aportados por las principales encuestas realizadas en<br />

nuestro país, se confirman las tendencias señaladas por los expertos: creciente<br />

233


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

presencia femenina, mayor número de jóvenes, creciente visibilidad de<br />

indigentes extranjeros. 14<br />

La información estadística, la evaluación de los expertos y profesionales del<br />

sector y la propia opinión de los indigentes coinciden en señalar que, junto a<br />

los tradicionales perfiles, el colectivo de indigentes urbanos viene renovándose<br />

en los últimos años a partir de la exclusión <strong>social</strong> de colectivos sometidos a<br />

nuevas formas de precariedad.<br />

5.3.2.3 Los lazos familiares. La red <strong>social</strong><br />

El momento y la circunstancia de la salida de la familia de origen marcan ya<br />

diferencias de partida en las diversas <strong>trayectoria</strong>s <strong>vital</strong>es de las personas<br />

entrevistadas. Los procesos se muestran plurales y poco previsibles. Por<br />

ejemplo, una relación familiar conflictiva puede derivar en un rápido abandono<br />

o, por el contrario, en un aplazamiento de la salida. El acceso al<br />

trabajo/ocupación, en ocasiones desde la infancia y en otras ocasiones más<br />

aplazado, tampoco se presenta como elemento de motivación unidireccional<br />

hacia la independencia. Sólo el análisis de cada caso concreto apunta algunas<br />

claves en relación al ámbito y a la historia familiares: al vínculo, al contexto, al<br />

peso en cada proceso de variables de personalidad.<br />

14 Consultar resultados de las siguientes encuestas:<br />

“Los transeúntes. Desarraigo y marginación <strong>social</strong>”. Equipo DIS/ Cáritas. 1975<br />

“Los transeúntes en España”. Clemente Martín Barroso/ Cáritas. 1987<br />

“Encuesta a personas sin hogar” Pedro J. Cabrera. 1996<br />

“Encuesta sobre las personas sin hogar” INE, 2005<br />

234


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Tiendas de campaña instaladas en París por los Hijos de Don Quijote. Fotografía: AFP<br />

Siendo amplio, en el conjunto de población sin techo, el abanico de formatos e<br />

historias familiares, el grupo originario de convivencia mantiene su fuerza<br />

referencial; los relatos cargan emocionalmente su expresión sobre todo<br />

nombrando la carencia, la convivencia problemática pero en parte añorada...<br />

En las <strong>trayectoria</strong>s narradas se constata la apuesta por mantener vínculos<br />

familiares, en la medida y extensión en que esto se percibe posible. Lazos<br />

tejidos con diferentes materiales, de diversa resistencia, pero que constituyen<br />

referencias necesarias a las que no se renuncia sin sensación de pérdida, de<br />

herida incurable, en una biografía ya para siempre fragmentada.<br />

“Con la familia ya he roto... Ahora mismo estoy en casa de unos amigos...<br />

ya me han dicho que tengo esta semana, digo: “tranquilos, que ya me voy.<br />

235


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Que yo sé cuando me tengo que ir. Soy un señor. Ya me voy” Pero cuando<br />

me ofreces las lentejas déjame que me termine el plato, si no no me las<br />

des”. (ESH6)<br />

No es necesario subrayar el importante papel de la familia de origen en el<br />

proceso de configuración de la identidad –personal y colectiva-, de<br />

<strong>social</strong>ización primaria, de referencias cognitivas, morales, comportamentales.<br />

Con diferencias muy destacables en su composición, dinámica, incluso en su<br />

posición socio-económica, las familias que nombran las personas entrevistadas<br />

no parecen haber podido -o sabido, o querido- ayudar mucho en estos<br />

procesos. Los relatos de historias familiares ya relativamente lejanas en el<br />

tiempo, ya vividas, se presentan desde una lectura ‘fatalista’ -inevitabilidad de<br />

lo ocurrido- que se actualiza en la presente imposibilidad de transformar la<br />

relación, de ensayar una recuperación con vínculos más amables. Quizá sólo<br />

quede la proyección hacia otro espacio, en otro contexto: hacia un núcleo<br />

propio de convivencia -más imaginario que real- sobre todo cuando no existe<br />

pareja. En cualquier caso, se constata en las conversaciones cierta resistencia a<br />

entrar más a fondo en un terreno resbaladizo, en el que amedrenta indagar<br />

por lo espinoso y también por lo lejano.<br />

5.3.2.4 La relación. La convivencia<br />

La pérdida o el conflicto en las relaciones, la búsqueda y el mantenimiento de<br />

vínculos afectivos, configuran el espacio más delicado, al tiempo que se<br />

presenta de inmediato como el más necesario. Las heridas más intensas, y<br />

también las más alentadoras apuestas, sitúan el mundo relacional como eje<br />

236


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

vertebrador, elemento clave en la construcción de la identidad. En el microespacio<br />

de lo íntimo y privado, pero también en el espacio más amplio -<br />

comunitario- de la vida cotidiana, el mantenimiento de vínculos resulta clave<br />

para el proceso de construcción de la propia identidad -yo- y de la conciencia<br />

colectiva -nosotros.<br />

“ Hay como una <strong>org</strong>anización dentro de la calle. Es decir, la gente que<br />

convive en espacios muy amplios, está todo muy jerarquizado, cada uno<br />

sabe más o menos en la zona en la que puede dormir, hay espacios<br />

comunes donde puedes dejar las cosas, el sitio en el que te puedes lavar…<br />

está todo más o menos <strong>org</strong>anizado. Esto es subsistencia. La gente tiene<br />

varios sitios con ropa... si llega la policía, los barrenderos, que no te<br />

quedes sin absolutamente nada”. (EE3)<br />

“Las relaciones son muy fuertes, tanto para lo bueno como para lo malo.<br />

Muchas de estas personas son muy quejicas, muy gruñonas, están<br />

siempre discutiendo… es como la gente alcohólica y los toxicómanos,<br />

están siempre discutiendo entre ellos. También creo que llega un<br />

momento de necesidad y desesperación que te hace perder cualquier<br />

valor de solidaridad”. (EE3)<br />

En el momento actual, para estas personas el mundo relacional tiene ya una<br />

‘libertad condicionada’. Si la ‘historia’ con minúsculas -historia de vida- y la<br />

‘historia’ con mayúsculas -contextos <strong>social</strong>, político, cultural...- determinan en<br />

buena medida nuestros vínculos, las situaciones de necesidad, de<br />

dependencia, se presentan como elementos fuertemente condicionadores<br />

para el establecimiento y el mantenimiento de relaciones. La precariedad exige<br />

237


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

del ‘otro’ un nivel de implicación y compromiso que amigos y familiares no<br />

siempre están en condiciones de asumir.<br />

“Y ahí está el refrán, Dios nos crea pues nos juntamos. Y se van juntando<br />

pues con quien se llevan mejor, pues con esos te juntas. Personas que...<br />

enseguida se hacen migas ¡pero si están todos en el mismo barco!, lo que<br />

pasa que uno se baja y se queda en el puerto y en el mes al mes, a los dos<br />

meses, a los tres meses vuelve a retomar el barco y se encuentran”.<br />

(ESH5)<br />

“La calle hay que vivirla para saber lo que hay... porque en la calle hay<br />

mucha indiferencia, la calle tiene muchos peligros, muchas indiferencias,<br />

nos vamos a llevar mal, porque uno va a tener una opinión, otro va a<br />

tener otra, el otro va a opinar, el otro también y va a llegar un<br />

enfrentamiento, ¿dónde vamos a tener el enfrentamiento?, pues en el<br />

sitio donde nos vemos todos los días”. (ESH5)<br />

El proceso de construcción de identidad se muestra, sin embargo,<br />

inexorablemente definido por el mundo relacional. Como tan sugerentemente<br />

ha desplegado en Psicología Social el Interaccionismo Simbólico, la identidad<br />

personal surge a través de un proceso <strong>social</strong> en el que es importante el<br />

contexto inmediato, pero resulta imprescindible considerar los conceptos de<br />

‘construcción’ y ‘estructura’ <strong>social</strong>es. Ya el viejo concepto de Cooley (1902) del<br />

“yo-espejo”, o del “yo-reflejado” en otro, apuntaba en esta dirección. .<br />

“Hay gente muy solitaria porque se ha hecho solitaria. Se acostumbra a ir<br />

a por sus cosas porque en la calle hay que sobrevivir y aunque parezca<br />

que los que están en la calle son unos vagos, trabajan muchísimo. Están<br />

238


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

todo el día recorriendo las calles de Madrid para buscar chatarra, para<br />

buscar un eurito… luego la mayoría de la gente tiene un cierto respeto por<br />

los demás y es consciente de que cada uno se busca la vida por su cuenta<br />

y, sobre todo, que todo el mundo puede salir de esto. Hay un cierto<br />

compañerismo dentro de lo que es posible ”. (ESH2)<br />

Convendría recordar, en esta línea, cuando se utilizan términos como el de<br />

‘autoestima’, de uso tan extendido en la actualidad como ‘indicativo’ de logro<br />

o de eficacia en múltiples actuaciones de intervención, que: “el sentimiento de<br />

autovaloración, o cualquier otra idea que tienda a formar el concepto de ‘sí<br />

mismo’, la autoidentificación o identidad personal, surge a través de la<br />

captación de la imagen de uno mismo en el otro” (Torregrosa 1989:58) . . Cabría<br />

retomar el término, en todo caso, desde una perspectiva más amplia que<br />

contextualizara respuestas que difícilmente adquieren sentido de forma<br />

aislada-individual; esta recomendación parece especialmente oportuna<br />

cuando se habla de personas fuertemente estigmatizadas.<br />

“Hay muy buena gente. Yo cuando entre por primera vez en un albergue<br />

estaba lleno de miedo. Aparte de mi problema de depresión… convencido<br />

de que todo estaba lleno de delincuentes, pero he hecho buenos amigos<br />

en esta historia. Gente muy legal y buena gente. Absolutamente<br />

recuperable con un poco de ayuda y de…”. (ESH2)<br />

“La relación que yo conozco en lo general es de camaradería, a pesar de<br />

que puede haber algún mal rollo momentáneo. Pero normalmente es de<br />

apoyo. La calle une mucho, porque si tienes que estar durmiendo con una<br />

persona que está cerca de ti, pues de alguna manera te protege… tu la<br />

proteges a ella y ella te protege a ti, y eso une bastante”. (ESH3<br />

239


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

240


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

5.3.2.5 Los extranjeros<br />

Nadie está libre de reproducir prejuicios y estereotipos de circulación <strong>social</strong>,<br />

incluso cuando a su vez sea objeto de esos u otros tipos de estigmatización.<br />

Esta generalista observación es aplicable a algunas de las opiniones expresadas<br />

en torno a la presencia de inmigrantes en las calles de Madrid.<br />

La competencia se presenta como telón de fondo, dibujando la lógica interna<br />

del enfrentamiento: los recursos son escasos, existe la amenaza de su pérdida,<br />

en el mejor de los casos del reparto; en esta situación, “nosotros” antes que<br />

“ellos”. La situación de vulnerabilidad desde la que se plantean estas<br />

valoraciones exige no leerlas de forma frívolamente distanciada; advierten<br />

acerca de la importancia de una planificación cuidadosa en los procesos de<br />

distribución y acceso a recursos, y la máxima difusión de su justificación y<br />

motivos.<br />

“También existe muchas veces el discurso de que los extranjeros están<br />

quitando recursos para que les atiendan a ellos… También es muy llamativo<br />

que mucha de la gente sin hogar es muy conservadora, muy tradicional, muy<br />

de derechas… pero mucho, mucho”. (EE3)<br />

“Influye sobre los que somos españoles... sobre los comunitarios, que son los<br />

segundos, después de nosotros. Primero los españoles, luego ellos como<br />

comunitarios y después el resto”. (ESH1)<br />

“El extranjero es peor, son unos racistas. Dicen que somos nosotros los racistas<br />

pero en realidad son ellos… Se creen que les miras mal…. Ellos mismos, los<br />

mismos pobres, vienen y te quitan el dinero”. (ESH1)<br />

241


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

“¿Qué pasa? Que hay peleas, hay broncas y hay líos. Por un plato de comida<br />

se pega la gente, que te lo dan en cualquier lado”. (ESH1)<br />

“En la calle se mantienen una serie de normas o de códigos de<br />

funcionamiento. ¿Cuál es el problema de los extranjeros? Pues que no<br />

respetan ningún código de funcionamiento. Se cuelan permanentemente,<br />

siempre hay movidas, eso genera desprecio hacia el extranjero… No hay<br />

racismo, hay más bien coleguismo entre los indigentes. No es una cosa de<br />

racismo sino de cabreo ante ciertas actitudes”. (ESH2)<br />

5.3.2.6 Las mujeres sin hogar<br />

Los indigentes -al igual que los profesionales- destacan en las entrevistas la<br />

menor presencia de mujeres en la calle. Algo más variadas se presentan las<br />

interpretaciones de este hecho. Por una parte, hay quien simplemente apunta<br />

a menores niveles de necesidades absolutas entre las mujeres. Tampoco<br />

resulta desdeñable el argumento de uno de los expertos consultados, que ya<br />

mencionamos anteriormente, en el sentido de que las mujeres se resisten<br />

hasta el extremo porque “aguantan carros y carretas”.<br />

Sin embargo, la ‘feminización de la pobreza’ es un hecho contrastado, que se<br />

manifiesta en gran medida por la mayor presencia de mujeres en otros<br />

ámbitos de lucha contra la exclusión; por ejemplo, los programas de<br />

orientación laboral dirigidos a personas perceptoras del REMI, están<br />

fuertemente feminizados.<br />

242


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Las explicaciones a la menor presencia de mujeres ‘sin techo’ destacan sobre<br />

todo el mayor peligro que supone la calle para una mujer sola, aunque para<br />

evitarlo tenga que sufrir otras privaciones y violencias, lo que explicaría<br />

también el gran deterioro, físico y psíquico, que presentan la mayoría de las<br />

mujeres que terminan viviendo en la calle.<br />

Las mujeres que hemos entrevistado, tal vez porque ambas se aproximan al<br />

perfil de la indigencia sobrevenida, se alejan del estereotipo del deterioro (más<br />

propio de las mujeres toxicómanas) y rechazan el tópico de que se encuentren<br />

sometidas a mayor indefensión:<br />

“Yo creo que las dificultades que puedan tener en la calle el hombre o la mujer<br />

son las mismas. Depende de cómo el hombre o la mujer se sepan defender. Lo<br />

que pasa es que los hombres, a lo mejor, al haber más en la calle están más<br />

unidos, o hay sitios puntuales donde ellos están más juntos compartiendo<br />

unas cervezas…”. (ESH3)<br />

“La mujer no está peor en la calle. Depende de cómo tú seas. El miedo llama al<br />

miedo”. (ESH4)<br />

5.3.2.7 El trabajo<br />

El trabajo formalizado, el reconocido como actividad productiva -de bienes o<br />

servicios- en forma de contrato laboral o iniciativa empresarial/autónoma, es<br />

decir, el trabajo entendido como empleo, es la fórmula ‘estrella’, el objetivo<br />

priorizado en las actuales ‘políticas de integración’. El empleo se convierte en<br />

243


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

el gran referente legitimador de proyectos y actuaciones diseñados con esa<br />

finalidad integradora, así como para la posterior evaluación de sus resultados.<br />

Este reconocimiento <strong>social</strong>mente incuestionado es entendible, ya que resulta<br />

evidente que la vía de ‘integración laboral’ es requisito imprescindible, en la<br />

gran mayoría de la población, para alcanzar ciertos niveles de autonomía.<br />

Esta valoración colectiva, y este requisito casi insoslayable para la integración,<br />

es asumido también por las personas excluidas, no siempre desde el<br />

convencimiento personal de sus posibilidades reales en este ámbito, pero sí<br />

como un filtro que tienen que considerar porque, en principio, se presenta<br />

como condición <strong>social</strong>mente requerida. Esto explica la entrada en este asunto<br />

con las cautelas previsibles: resulta necesario-conveniente plantear el intento,<br />

priorizar esa búsqueda.<br />

“Es cierto que encontrar un trabajo estando durmiendo en la calle es muy<br />

difícil, porque piden buena presencia, limpieza. Es difícil”. (EE2)<br />

Cuando no existe una situación de partida que justifique esta propuesta, la<br />

alusión al empleo como estrategia integradora se muestra como<br />

racionalización legitimadora. Sin embargo esta estrategia pronto es<br />

desmontada por la constatación de la situación real, incluso por la<br />

explicitación, a lo largo del relato, de demandas muy lejanas al mundo laboral.<br />

Para evitar fracasos y aprovechar recursos y esfuerzos resulta necesario<br />

apostar fuerte, ofreciendo alternativas de inserción laboral, pero considerando<br />

asimismo las limitaciones. Conocer, ponderar y trabajar para la ‘normalización’<br />

laboral es exigible en políticas de inclusión, lo que no significa necesariamente<br />

caer en lecturas ingenuas que asimilan trabajo y logro –recompensa-, garantía<br />

244


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

de ‘salvación’ <strong>social</strong> por el esfuerzo personal. Quizá conviene recordar estas<br />

cuestiones en momentos en los que resulta fácil ‘culpabilizar a la víctima’<br />

desde lógicas neoliberales y fuertemente individualistas: “puesto que en<br />

principio todos somos iguales, la posición <strong>social</strong> alcanzada no depende ya del<br />

nacimiento, ni del patrimonio familiar, sino exclusivamente de nuestro<br />

esfuerzo individual, de nuestras capacidades, de nuestros propios méritos”.<br />

. (Varela, Alvarez-Uría 1989:34)<br />

“Les compensa cobrar el REMI (renta mínima de inserción) (300 €) y no<br />

trabajar, a trabajar por 600 € “ .(EE3)<br />

Resulta razonable plantear proyectos para la integración laboral, cuando se<br />

muestren alternativas mínimamente viables, pero también garantizar ciertos<br />

niveles de atención y mantenimiento de servicios para quienes no sea posible<br />

el empleo: frente a la ‘única vía’, una posición realista y atenta a derechos.<br />

“ Cuando un hombre está en la calle se le está pidiendo un esfuerzo<br />

sobrehumano para que salga de ella, sin darle ayudas. Cuando consigue un<br />

puesto de trabajo, cosa difícil, resulta que no tiene donde dormir porque en los<br />

albergues no puedes estar si trabajas de vigilante de noche o de camarero.<br />

Porque los horarios no lo permiten. Tienes que irte a dormir a la calle. O cama<br />

o trabajo”. (ESH2)<br />

“Si uno no se pregunta por qué está en la calle y encuentra un trabajo, como<br />

no se pregunte por qué está en la calle, volverá a estar en la calle ¿entiendes?<br />

Si uno no sabe por qué está en la calle y arregla eso, da igual que encuentre un<br />

trabajo o que le toque la lotería, lo que sea, volverá otra vez al punto de<br />

partida”. (GDPSH3)<br />

245


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Existen dificultades objetivas de inserción laboral en empleo ‘normalizado’<br />

para una población con claros estigmas de exclusión. Aunque se trabaje en<br />

paralelo por la neutralización de esos estigmas y, sobre todo, por las causas<br />

que explican la exclusión <strong>social</strong>, es necesario desarrollar alternativas de<br />

‘ocupación protegida’ en espacios de máxima vulnerabilidad <strong>social</strong>.<br />

246


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

5.3.2.8 La salud<br />

Hay que considerar también el freno que suponen los problemas de salud para<br />

iniciar un proceso de integración laboral. Y en el colectivo de personas sin<br />

techo existen graves y acelerados procesos de deterioro de salud, tanto física<br />

como psíquica. En ocasiones, los problemas de salud y el padecimiento de<br />

discapacidades han estado detrás de la exclusión del ‘hogar’; en todo caso, la<br />

vida ‘en la calle’ está detrás de graves deterioros de salud. Ya es clásica la<br />

correspondencia entre ‘discapacitación <strong>social</strong>’ y otros tipos de minusvalías. Y<br />

no hace falta insistir en la ya conocida condensación establecida por la O.M.S.<br />

en el concepto de “salud” de indicadores de bienestar “físico, psíquico y<br />

<strong>social</strong>”. 15<br />

“Hay una cosa que no existe en este país, no existe asistencia psiquiátrica ni<br />

psicológica. Todos los tíos que están en la calle necesitan esa asistencia,<br />

todos… Es el primer recurso que necesita, levantarle la autoestima, quitarle la<br />

depresión, ayudarles en terapias de desintoxicación… Apenas existen esos<br />

recursos. [El albergue de] San Isidro tiene una psiquiatra que va de vez en<br />

cuando, y hay trescientos y pico de tíos allí metidos”. (ESH2)<br />

Entre los ‘malos hábitos’ relacionados con el consumo destaca el problema de<br />

la drogodependencia entre las personas sin techo. Siempre que se evite<br />

15 Freud, Foucault, el movimiento antipsiquiátrico, entre otros autores que vinculan el<br />

malestar físico y psíquico al contexto <strong>social</strong>.<br />

247


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

realizar una fácil y mecánica asociación entre calle y tetrabrick (El 30 % de la<br />

población sin techo es abstemia y nunca ha consumido drogas. INE 2005).<br />

Aunque las <strong>trayectoria</strong>s <strong>vital</strong>es ayudan a explicar los procesos concretos de<br />

adicción, ésta se convierte en una fortísima barrera ante planteamientos de<br />

integración. En el límite, la drogadicción anula el interés por la propia vida, el<br />

total abandono y, en consonancia, el rechazo a iniciar cualquier proceso<br />

integrador:<br />

“Hay algunos que terminan en la calle por ser alcohólicos y hay otros que<br />

estando en la calle se convierten en alcohólicos. La gran mayoría se convierten<br />

en alcohólicos estando en la calle. Es la manera de evadirte”. (EE2)<br />

5.3.2.9 La relación con los recursos<br />

Aunque no aparezca en las primeras fases de la comunicación, los propios<br />

profesionales/expertos apuntan las posibles carencias que condicionan el<br />

actual sistema de prestaciones <strong>social</strong>es:<br />

“La gente que duerme en la calle es la que lleva más tiempo en esa situación. Y<br />

la mayoría si conocen los recursos, pero no sé si no les interesan, han tenido<br />

malas experiencias, han hecho uso de esos recursos y a lo mejor no han<br />

conseguido lo que ellos querían”. (EE2)<br />

“Las personas sin hogar tienen muchos trastos, tampoco pueden dejarlos en<br />

ningún sitio y en el fondo son sus cosas, las pocas cosas que tienen son esas…<br />

248


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Los animales, lo único de lo que reciben afecto. A lo mejor, al no poder entrar<br />

con ellos tampoco les interesa [ir a un albergue]”. (EE2)<br />

Ya anticipamos que los indigentes “tendenciales” derivan hacia una asunción<br />

“acrítica” de los recursos a los que tienen acceso. Salvo en pequeñas críticas<br />

derivadas de la experiencia cotidiana (trato degradante, demoras en la<br />

atención, productos caducados…)<br />

16 . Sin embargo, los indigentes<br />

“sobrevenidos” tienden a realizar un análisis implacable del uso que se asigna<br />

a unos fondos públicos que, como ellos bien saben, no pueden ser calificados<br />

de raquíticos y, en el menor de los casos, parecen ser susceptibles de un mayor<br />

control de “calidad”<br />

“[Las instituciones, ONG,s,…] viven de los pobres. No que vivan para los<br />

pobres. Hay un aprovechamiento, hay un dinero como recurso que no se<br />

justifica, porque normalmente los pobres no podemos protestar. Si un<br />

trabajador <strong>social</strong> te trata mal ¿a quién se le dice? Si eres el último eslabón de<br />

la cadena ¿a quién se recurre?”. (ESH3)<br />

“ Son tantas las humillaciones que se sufren pidiendo ayuda que hay gente con<br />

capacidad que… por vuelcos que da la vida, por no pasar por humillaciones, se<br />

quedan en la calle, y en ella encuentran una libertad que no encuentran<br />

acudiendo a estas pseudos-asociaciones de caridad, que de caridad no tienen<br />

nada. Te hacen comerte tu dignidad para paliar el hambre…”. (ESH4)<br />

16 En nuestro trabajo de campo hemos podido constatar, en alguno de los comedores<br />

de obligada referencia, la entrega de postres de reconocidas marcas cuyo precinto<br />

estaba roto, o la fecha de caducidad ampliamente superada. Las sábanas de algunos<br />

albergues que hemos podido observar se encuentran al límite de sus prestaciones,<br />

seguramente ya son incapaces de admitir un nuevo lavado.<br />

249


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

“Aquí no hay intención. Quieren que los que están en la calle sigan estando en<br />

la calle para que les proporcionen a ellos trabajo. Esfuerzo por sacarte de la<br />

calle, ninguno. Pero, ninguno ¿sabes? Yo supongo que les da miedo de que se<br />

jode su salario. Porque yo les veo trabajar y… ¡que desesperación! ¿Qué están<br />

haciendo? ¿Cómo me dicen que están ocupados?. Y hay gente que se está<br />

desquiciando, que están en la calle. Tantos centros que han abierto para<br />

entretener a los imbéciles que no tenemos dinero y vas y están cerrados por<br />

verano…”. (ESH2)<br />

“Para todos nosotros es bien humillante el trato que nos dan. Tienes que hacer<br />

méritos para que te lleven al cine… por ejemplo. No me extraña que se tiren al<br />

pinche alcohol del tetrabrick”. (ESH4)<br />

“No es posible que haya cuatro mil indigentes, hayan ciento y pico de oficinas<br />

para atendernos a nosotros, y yo tenga que esperar un mes y pico para que<br />

me atienda mi asistente <strong>social</strong>, y mientras tanto que los pájaros me den de<br />

comer ¿sabes?. No es posible ¿te parece lógico?”. (ESH3)<br />

“Para conseguir ayuda la gente tiene que humillarse, tiene que pedir, parece<br />

que te estén dando un regalo… por eso mucha gente acaba abandonando y se<br />

va [de albergues y comedores]. Hay que considerar que el tío que está en la<br />

calle no es un sinvergüenza, ni un delincuente. Los delincuentes son otros”.<br />

(ESH2)<br />

5.3.2.10 El potencial y utilidades de los blogs<br />

El creciente uso de diversos recursos informáticos por parte de las personas sin<br />

hogar muestra como, aun careciendo de todo tipo de recursos, la tecnología<br />

puede aliarse con los más desfavorecidos para contribuir a dignificar su vida y<br />

250


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

a buscar expectativas profesionales y personales. Para ello, las personas sin<br />

hogar que sienten interés por la comunicación a través de Internet suelen<br />

recurrir a los medios a los que tienen acceso en albergues, centros de día o<br />

bibliotecas públicas. En su momento se trataba de crear una página personal<br />

pero, con el desarrollo de nuevas aplicaciones, lo que ahora podemos<br />

encontrar son numerosos blogs o bitácoras mantenidos por personas sin hogar<br />

de muy diversos países. Algunos han alcanzado gran éxito en la red. como<br />

Kevin Barbieux que mantiene el blog The Homeless Guy. Recibe entre doce<br />

mil y quince mil visitas al mes. Trata de la vida cotidiana de su protagonista, en<br />

las calles y en los lugares públicos, y de quienes viven sin casa como él en la<br />

ciudad de Los Ángeles. Happy Ivy es otro de los blogueros “callejeros” que ha<br />

logrado una notable repercusión.<br />

Por nuestra parte hemos seleccionado dos blog,s españoles mantenidos por<br />

profesionales, en un caso, y por una persona sin hogar, en el otro. Se trata de<br />

Con cartones en la calle http://enriquerichard.es/ y de El rincón de Bubú<br />

http://elrincondebubu.blogspot.com/ El primero de ellos es el lugar de<br />

expresión de dos profesionales, vinculados a la Fundació Arrels, de larga<br />

<strong>trayectoria</strong> en su compromiso con los marginados y excluidos. Enrique y<br />

Gabriel son expertos en “hacer la calle” y ello se refleja en la frescura y riqueza<br />

de los contenidos de su blog. La misma cercanía y reflexión directa que expresa<br />

Bubú en el suyo. Frente a la formalidad de las páginas de las diversas entidades<br />

que trabajan con las personas sin hogar (formalidad y rigor que cumplen su<br />

función y nos parecen de gran utilidad), el formato del blog facilita una<br />

comunicación especialmente viva, directa y cercana.<br />

251


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Con cartones en la calle muestra una edición muy cuidada, con presencia<br />

notable de la imagen. Sus autores alternan los relatos sobre experiencias<br />

reales con personas concretas de la calle con reflexiones sobre los aspectos<br />

<strong>social</strong>es que pueden encontrarse detrás de las realidades de pobreza y<br />

exclusión. A diferencia de lo observado en la prensa escrita, en este caso los<br />

protagonistas son tratados en verdad como tales, desde el cariño, la cercanía y<br />

el máximo respeto a su dignidad. Los post que destacaban en nuestra última<br />

consulta eran los siguientes:<br />

Jordi. No está. Las obras en los jardines de la Sagrada Familia, y la<br />

posterior instalación de bancos anti-indigentes (“urbanismo preventivo”)<br />

han desterrado a Jordi del que era su habitual lugar de “residencia”<br />

Los ahogados. Un relato sobre “distribución de espacios…, de dinero, de<br />

poder, de justicia, de derechos…”<br />

Préstame tus oídos. La reflexión sobre una experiencia escuchando a<br />

quienes no suelen tener voz. “Y volverá, si se siente importante y se siente<br />

tratado como persona. Una persona única, irremplazable…, diferenciada<br />

del resto.”<br />

Desde Buenos Aires Proyecto 7. Una experiencia sobre las actuaciones de<br />

los sin hogar argentinos.<br />

Bubú se instala en su rincón para sentirse vivo, para contar que es una persona<br />

con valores, con ganas de vivir, con deseos de futuro. (“En este blog intento dar a<br />

conocer tanto la problemática de los indigentes y personas sin hogar como el día a día<br />

de un ex alcohólico que intenta rehabilitarse he integrarse de nuevo a la sociedad,<br />

dando a conocer sus impresiones y la de otros siempre bajo la consigna del respeto”).<br />

252


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Las últimas entradas en su página son las siguientes<br />

Buscarse la vida, cuando vives en la calle. Relato coloquial de los diversos<br />

“trucos” y fórmulas usados en la calle para obtener unos eurillos para<br />

tabaco.<br />

Ir al banco de alimentos, en nuestro propio coche. Desvela las diversas<br />

prácticas para obtener recursos y alimentos que luego son revendidos.<br />

Denuncia de las personas que se hacen pasar por indigentes sin serlo.<br />

29S, mucha huelga general pero nadie se acordó de los sin techo.<br />

Reflexión amplia sobre la indefensión de los sin techo, a los que nadie<br />

tiene en cuenta.<br />

Las diversas bitácoras consultadas, mantenidas por profesionales y por<br />

personas que se encuentran sin hogar, muestran su gran potencial<br />

“terapéutico”. Sirven para que los profesionales intercambien con gran<br />

fluidez sus experiencias, trasmiten con total actualidad el pálpito de la<br />

calle, son un espacio de realización, de mejora en la calidad de vida y un<br />

altavoz privilegiado de denuncia para las personas sin hogar. Parece<br />

razonable mencionar que, junto a otros recursos necesarios, sería un<br />

notable avance que los albergues y centros de día se esforzaran en<br />

mantener un equipamiento informático básico a total disposición de sus<br />

usuarios. En los casos en que existe este recurso las dotaciones suelen<br />

mantener todavía la categoría de anecdóticas.<br />

253


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

5.3.3 EL MAÑANA: Las expectativas de futuro<br />

En términos generales, los expertos tienden a mostrarse cautelosos respecto a<br />

las perspectivas de futuro de los indigentes. En todo caso, se esfuerzan en<br />

señalar que las causas, situaciones y condiciones del desarraigo son muy<br />

diversas y no cabe establecer un pronóstico generalizable a la totalidad del<br />

colectivo:<br />

“Hay que poner en funcionamiento muchos recursos y muchos resortes… y hay<br />

que trabajar mucho con esas personas. Pero no todas las situaciones son la<br />

misma. Hay que diferenciar entre gente muy crónica, de gente que está<br />

coyunturalmente o que se está haciendo crónica porque faltan elementos de<br />

poder trabajar con ellos”. (EE1)<br />

“Que a mí me hace… me cabrea un poco el tema este de… ¿no? pero porque<br />

es una pregunta muy de rueda de prensa, eso de “¿pero cuánta gente sale de<br />

la calle?” muy periodística… ¿Cuánta gente sale de la calle? Pues<br />

probablemente aquellos que tienen que salir, probablemente… pero ¿cuántos,<br />

de la gente que estudió periodismo contigo han ganado el premio Pulitzer? No<br />

lo es, no lo es, no es homogénea, no es… o sea, no responde a…. a<br />

componentes de “programo tal cosa, consigo tal cosa”, no, no. Eso no<br />

funciona. pero es lo que es, porque estamos hablando de la vida. La vida de la<br />

gente, como la vida nuestra y la vida de todo el mundo, es un proceso, en el<br />

que uno va aprendiendo cosas, va adquiriendo cosas nuevas… y, y en ese<br />

proceso <strong>vital</strong>, uno tiene que tener las posibilidades de poder hacerlo. Mira, con<br />

un martillo y con puntas no se hace un avión. O sea, tú puedes tener toda la<br />

buena intención del mundo pero no te da. La gente sale, la gente sale cuando<br />

hay recursos adaptados para que salga”. (EE5)<br />

254


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

“Siempre me han insistido, pero sin yo decirles nada, en que, como cada<br />

persona es un caso, es cosa de seguimiento personal. Y que dedicándole<br />

mucho tiempo al seguimiento personal y a que el fulano o la fulana se confíen<br />

en ti, pues, con un tratamiento a lo mejor largo, de un par de años, logras<br />

recuperar la autoestima, y no sé cuántas cosas más, y ya puedes a partir de<br />

ahí hacer algo. Lo que se puede., como mucho y echándole mucho dinero,<br />

recuperas un 20%. Que son exactamente, es eso, una quinta parte, pero la<br />

quinta parte que no está tocada por drogas ni enfermedades mentales. De<br />

esos otros, se recuperarían igual que el resto de la población que tiene<br />

enfermedades mentales o de drogas, si hubiera recursos para ello. Pero estos<br />

tenían la experiencia de que recuperaban un 20%., que no es lo mismo una<br />

persona que otra”. (EE6)<br />

El psicólogo José Manuel Caballol (2004:47-49), junto al concepto de “sucesos<br />

<strong>vital</strong>es estresantes”, que ya hemos descrito al analizar las condiciones que<br />

propician la llegada a la calle, introduce dos nuevas orientaciones de la teoría<br />

psicológica para intentar explicar la persistencia y las dificultades para salir de<br />

ella: se trata de la “indefensión aprendida” y de los “modelos atribucionales” . .<br />

La primera de ellas se basa en el experimento, típicamente conductista, del<br />

psicólogo americano Seligman, realizado con perros sometidos a diferentes<br />

situaciones de cautividad y opciones de evasión. El resultado, la moraleja<br />

“científica”, es que ante determinadas condiciones, todos terminamos en<br />

rendición o, lo que es lo mismo, en situación de “indefensión aprendida”. La<br />

aplicación a la realidad de los indigentes es obvia: si te sientes encerrado<br />

nunca podrás romper los barrotes.<br />

255


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Extrema fragilidad<br />

Fotografía: José Vázquez<br />

La otra vertiente del análisis, referida a los “modelos atribucionales”, puede<br />

sintetizarse del siguiente modo: la forma en que una persona percibe un hecho<br />

determinará su grado de satisfacción o frustración y, por tanto, condicionará<br />

su comportamiento futuro. (El modo en que nos ven y nos vemos, que ya ha<br />

sido descrito en anteriores páginas). En resumen: si te sientes cautivo y,<br />

además frustrado, es mejor que te quedes dónde estás.<br />

En todo caso, y junto a una adecuada utilización de los recursos, parece<br />

inevitable e imprescindible la firme convicción del indigente en cuanto a sus<br />

deseos y posibilidades de abandonar la situación en que se encuentra. Uno de<br />

los mecanismos de defensa que con frecuencia usamos para afrontar la<br />

realidad es negarla. En alguno de los relatos que hemos grabado resulta<br />

enormemente difícil separar la realidad de la ficción: el interlocutor reinventa<br />

256


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

de tal modo su pasado y su presente que cuesta concluir cuál es la realidad en<br />

la que vive.<br />

“Los sin techo niegan ser transeúntes. Viven un mundo imaginario, simbólico,<br />

y a veces racionalizan su situación como un estilo de vida elegido que<br />

abandonarán en un momento dado …” .(Salinas 1993:57) .<br />

Y, por supuesto, se muestra tan convencido de que puede salir de la calle en<br />

cuanto se lo proponga que no es posible comprender su permanencia en ella.<br />

Para salir de la calle es preciso entender y asumir que, de momento, se está en<br />

ella. Y, a partir de esa convicción, ir generando la voluntad y la energía<br />

necesarias para abordar el camino de salida:<br />

“A día de hoy, con los planes de ayuda, los recursos y los instrumentos<br />

actuales yo diría que pocos [pueden salir de la calle]. Faltan recursos no solo<br />

para que salgan, sino recursos para motivar. Si una persona no tiene el deseo<br />

total y absoluto de salir no va a salir nunca, aunque yo le ponga en bandeja<br />

un trabajo. Es fundamental la recuperación de la autoestima … nosotros<br />

creemos que se necesitan no solo muchos más recursos, sino recursos mucho<br />

más especializados”. (EE3)<br />

“No, mire, son enfermos, el 66% de una manera o de otra son enfermos y<br />

tendrían que tener, dentro del Estado de Bienestar un tratamiento propio,<br />

específico de unos enfermos con más problemas todavía porque están solos,<br />

están sin el acompañamiento de la red. Eso por un lado. Por ahí van los tiros. Y<br />

después, en los albergues, mucha tarea, mucha tarea de psicólogos, de<br />

acompañamiento, del sistema de ángel de la guarda del que te hablaba yo<br />

antes”. (EE6)<br />

257


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Las propias PSH, desde su misma experiencia <strong>vital</strong>, señalan los caminos que<br />

pueden devolverles a los espacios normalizados de convivencia:<br />

“Lo primordial es un maldito techo. Sea como sea. En México había un cura en<br />

un barrio marginal, en una Iglesia derruida llena de niños que esnifaban<br />

cemento [cola o pegamento]. Se quiso ocupar de esos niños y lo primero que<br />

decía era: tengo que darles techo y libertad”. (ESH4)<br />

“Para salir sería necesario primero un techo seguro, y que no sea inestable.<br />

Estoy de acuerdo en que fuera inestable al principio el trabajo … El techo no<br />

puede ser inestable. Primero el techo. El hogar viene después. El techo es lo<br />

fundamental para conseguir otras cosas”. (ESH3)<br />

“Cada persona estamos aquí por cosas muy distintas y los recursos [para salir]<br />

deberían ser para cada persona en particular, con lo que está pasando aquí y<br />

ahora y con lo que tenía antes si es que pesa mucho”. (ESH3)<br />

“Lo triste es que mucha gente ya tiene muy difícil un futuro fuera de la calle.<br />

Porque un día ya tiraron la toalla y han hecho de la calle su reino. Si tuvieran<br />

recursos les costaría un poco, pero creo que lo conseguirían”. (ESH3)<br />

“Todavía no se me desamuebla mucho la cabeza, pero hay gente que la va<br />

perdiendo. Y entonces sus aspiraciones ya son otras. Sus aspiraciones son …<br />

voy a ir por el bocadillo allí, voy a ir por el bocadillo allá”. (ESH4)<br />

“Tengo mucha nostalgia de México. Pero no puedo regresar a mi país<br />

derrotada. No saben nada. ¿por qué voy a mortificarles con mis pendejadas?.<br />

Si ya saldré adelante”. (ESH4)<br />

258


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

“Pues uno, uno de los caminos para salir de ahí, de ese mundo tan jodido, es…<br />

querer que te ayuden, pedir que te ayuden y aceptar esa ayuda… y a partir de<br />

ahí, y poco a poco… ir valorando un poquito más… y coger lo bueno. Eso es la<br />

mejor, dejarte ayudar”·(GDPSH1)<br />

E: O sea, pedir ayuda y aceptarla.<br />

Y querer tú que te ayuden… porque… ”·(GDPSH1)<br />

E: De hecho, yo conozco a gente que está en la calle que dice “bueno, si yo<br />

saldré en cualquier momento, cuando quiera salgo”.<br />

Ese está confundido. ”·(GDPSH1)<br />

Pues yo veo, que con el camino para salir adelante es quererte a ti mismo… y<br />

luego, pues… hacerte un hueco en la sociedad… y si alguien pues te echa una<br />

mano, pues aprovéchala, y partes desde ahí… podría ser un curso, podría ser...<br />

qué se yo, cualquier tipo de ayuda que te sirva para prepararte… y… pues<br />

piensa que ese es un buen camino para salir de allí. Pero lo principal, creo,<br />

para salir, es cuando uno mismo, darse cuenta de en el meollo que está<br />

metido y… y no pues, darse ahí. Y aprovechar, todo lo que sea en bien de<br />

ayudarte, bienvenido sea, y luego ir haciéndote un hueco. ”·(GDPSH4)<br />

“Cuando la gente que ha salido de la calle vuelve es porque el proceso no ha<br />

sido bien hecho y se recae. Una enfermedad que no ha sido curada vuelve. El<br />

proceso lleva un tiempo y es para no volver a caer. Salir deprisa no es la<br />

solución”. (ESH3)<br />

Para terminar este capítulo, creemos necesario sintetizar los resultados de la<br />

consulta de fuentes secundarias, de la observación participante y de las<br />

vivencias y reflexiones expresadas por todas las personas entrevistadas -<br />

expertos y PSH-.<br />

259


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

La <strong>trayectoria</strong> íntima de cada persona que reside en la calle, al igual que la de<br />

cualquier otra persona, es un espacio solo perceptible o analizable para la<br />

investigación psico<strong>social</strong>. Las posibilidades de reincorporación a la vida <strong>social</strong><br />

normalizada, cuando la persona excluida desea realmente iniciar ese proceso,<br />

sólo pueden tener garantías de éxito si confluyen diferentes elementos que no<br />

siempre dependen, o no dependen en su totalidad, del sujeto activo:<br />

Un techo, con garantías de continuidad, supone una columna básica para<br />

la reincorporación al entramado <strong>social</strong> convencional.<br />

Un trabajo, en diferentes dosis de implicación y remuneración, refuerza el<br />

techo y la autoestima.<br />

Una referencia personal (compañeros de trabajo, amigos, pareja,… )<br />

equilibran la inserción en la trama de los grupos <strong>social</strong>es.<br />

El respaldo profesional médico (psico-<strong>social</strong>) consolida y profundiza los<br />

aspectos anteriormente señalados.<br />

Al igual que en todas las situaciones <strong>vital</strong>es, nunca es fácil reconocer los<br />

caminos que nos han llevado a un determinado lugar. Aún más difícil es<br />

intentar abordar uno nuevo. Salvo que se considere necesario intentarlo.<br />

5.4 Conclusiones del capítulo<br />

Las valoraciones realizadas por los profesionales y por las propias personas sin<br />

hogar pueden sintetizarse en las siguientes conclusiones:<br />

260


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

El perfil de los indigentes que viven en la calle ha evolucionado. Se<br />

rejuvenece, se feminiza, se internacionaliza. Se amplía, en términos<br />

estrictamente cuantitativos.<br />

La residencia en la calle es la conclusión de un largo proceso para una<br />

buena parte de sus moradores: la confluencia de carencias personales<br />

y ausencias colectivas les dejaron indefensos en algún momento<br />

irreversible (Indigencia tendencial). Para este tipo de personas cabe<br />

hablar de un proceso alimentado por causas diversas. Sin embargo, la<br />

calle también es el hábitat de seres que “<strong>social</strong>mente” no estaban<br />

destinados a ella. Personas <strong>social</strong>izadas en contextos favorables. Con<br />

un nivel de vida medio/medio-alto. (Indigencia sobrevenida). Para este<br />

tipo de indigencia resulta más difícil identificar un proceso (se trataría<br />

más bien de una crisis puntual). E, igualmente, no aparece de manera<br />

evidente la multicausalidad (se identifica más concretamente una<br />

causa certera y fulminante). Existe un segmento minoritario de<br />

indigentes que no representan el modelo de proceso multicausal<br />

aceptado por las más recientes corrientes de investigación.<br />

A medida que el tiempo de permanencia en la calle se dilata, la<br />

condición de “sin techo” tiende a cronificarse. Aspectos clave como la<br />

autoestima y las expectativas de futuro se debilitan paulatinamente y,<br />

con ello, se agranda la distancia y se complica el futuro acceso a una<br />

vida <strong>social</strong> normalizada.<br />

261


CAPÍTULO 5: DIAGNÓSTICOS DE LOS EXPERTOS Y AUTOPERCEPCIÓN<br />

DE LAS PERSONAS SIN HOGAR<br />

Para iniciar un proceso de “reinserción”, junto al necesario apoyo de<br />

recursos y servicios <strong>social</strong>es, es precisa una clara determinación<br />

personal que se sustenta: en la asunción de la realidad, en la<br />

conciencia de la dificultad del proceso y en la decisión basada en el<br />

reforzamiento de la autoestima.<br />

Al igual que, en la mayor parte de los casos, la residencia en la calle es<br />

el resultado de un proceso multicausal, la salida de la calle, para ser<br />

realmente efectiva, necesita de la confluencia de cuatro elementos:<br />

reconstrucción y/o creación de una red personal y <strong>social</strong> de relaciones;<br />

poder disponer de un techo con carácter indefinido; acceder a un<br />

trabajo que permita una progresiva adaptación y disponer de atención<br />

sanitaria integral (salud física y mental). El binomio trabajo-techo no<br />

son en si mismos suficientes soportes en el proceso de reintegración<br />

<strong>social</strong>.<br />

262


CAPÍTULO 6: SÍNTESIS Y CONCLUSIONES<br />

Capítulo 6: SÍNTESIS Y CONCLUSIONES<br />

6.1 Síntesis de resultados<br />

Cada uno de los capítulos incorpora sus propias conclusiones, y ello nos<br />

permite apreciar algunas similitudes y líneas de encuentro en aspectos<br />

importantes entre los diversos actores analizados. Sin embargo, los ejes<br />

discursivos que generan y difunden cada uno de ellos adquieren sus propios<br />

matices diferenciadores. Para evitar ser redundantes respecto a los contenidos<br />

finales de cada capítulo, adoptamos a modo de síntesis una perspectiva<br />

diferente: destacaremos los discursos que mejor sintetizan las verbalizaciones<br />

de cada uno de los actores analizados.<br />

El discurso de la prensa:<br />

Mantiene y consolida los tradicionales estereotipos y, en ese sentido,<br />

puede decirse que es un discurso ensimismado y distorsionador.<br />

El discurso de los ciudadanos:<br />

Muestra una cierta tendencia hacia la complacencia y podemos decir por<br />

ello que se trata de un discurso ambiguo y políticamente correcto.<br />

El discurso de los profesionales:<br />

Cauto y pragmático. Los expertos, conocedores de la diversidad y<br />

complejidad de situaciones, y condicionados tal vez por su propia rutina<br />

profesional, evitan asumir cualquier tipo de riesgo en sus valoraciones y<br />

afirmaciones<br />

263


ANEXOS<br />

El discurso de las personas sin hogar:<br />

Distinguimos cuatro tipos de discurso, correspondientes a otras tantas<br />

situaciones personales. El discurso dependiente o edípico, propio de los<br />

indigentes mas cronificados y con mayor dependencia de las instituciones.<br />

El discurso integrador, correspondiente a quienes, siendo dependientes,<br />

parecen realizar esfuerzos para dejar progresivamente de serlo. El discurso<br />

victimista, a caballo entre la sumisión y la crítica. Y, por último, el discurso<br />

reivindicativo, correspondiente a quienes cuestionan su propia situación y<br />

se muestran críticos respecto a las diversas formas de marginación.<br />

6.2 Contraste de hipótesis<br />

Los resultados de la investigación nos permiten determinar en qué medida las<br />

hipótesis planteadas pueden ser consideradas aceptables o validadas:<br />

Contraste de hipótesis<br />

1.- La prensa diaria tiende a reflejar una imagen que ignora la<br />

cotidianeidad, las expectativas y, en muchos casos, el<br />

protagonismo de las propias PSH. Con ello tiende a reproducir<br />

indefinidamente tópicos y estereotipos sólidamente asentados.<br />

La hipótesis resulta validada. La desaparición de las secciones de sucesos a<br />

favor de las de sociedad, no siempre se traduce en el cambio conceptual de<br />

enfoque que ello debería suponer. Se ignora la cotidianeidad de las PSH a favor<br />

264


CAPÍTULO 6: SÍNTESIS Y CONCLUSIONES<br />

de una imagen de pasividad y “acartonamiento”. Se sobredimensionan los<br />

episodios más morbosos o llamativos. Ignorando los Libros de Estilo, en<br />

muchos casos no se les considera fuente informativa en situaciones en que son<br />

claros protagonistas. Tienden a predominar las noticias breves y en escasas<br />

ocasiones se publica alguna entrevista o reportaje (también al hilo de<br />

situaciones tópicas como la Campaña del Frío). No resultan merecedores de<br />

ningún editorial.<br />

2.- Los habitantes de la ciudad asimilan desde la distancia a las<br />

PSH como parte del escenario urbano, más cerca del personaje<br />

que del sujeto y, más o menos conscientemente, tienden a<br />

reproducir los tópicos divulgados por los medios de<br />

comunicación.<br />

Esta hipótesis no resulta contrastada en su totalidad y, por tanto, no puede ser<br />

validada. Los ciudadanos adoptan, o dicen adoptar, diversas posiciones y<br />

actitudes ante las personas sin hogar. Desde la total ignorancia y/o rechazo<br />

hasta la cercanía y colaboración. No ha resultado posible probar que los<br />

tópicos divulgados por los medios sean asimilados y reproducidos por los<br />

ciudadanos. De hecho, las personas entrevistadas tienden a rechazar los<br />

estereotipos más habituales y usuales.<br />

3.- Los profesionales tienden a ser extremadamente cautos a la<br />

hora de emitir opiniones o realizar valoraciones sobre el presente<br />

y las potencialidades de futuro de las PSH.<br />

265


ANEXOS<br />

Tal como señalamos al referirnos a los discursos de los diversos actores, los<br />

profesionales señalan que, al igual que el proceso por el que se accede a la<br />

calle es lento y complejo, la estancia en la misma también lo es, al igual que los<br />

procesos de integración o re<strong>social</strong>ización. Lejos de establecer tipologías, los<br />

expertos consideran que cada situación es única y distinta a todas las demás.<br />

Es por ello que, efectivamente se expresan con gran cautela. La hipótesis<br />

puede ser considerada como validada.<br />

4.- La condición de persona sin hogar es el resultado de procesos<br />

socio-ambientales en mayor medida que de posibles tendencias<br />

personales/individuales. Debido a ello, el desarrollo de una<br />

actividad laboral y, como consecuencia, el acceso a un techo<br />

propio, son condiciones necesarias pero no determinantes en el<br />

proceso de reinserción <strong>social</strong>.<br />

Las investigaciones previamente realizadas, y los resultados que aporta<br />

nuestro trabajo, tienden a incidir en el proceso multicausal, basado en la<br />

sucesión y acumulación de sucesos estresantes, como desencadenantes de las<br />

situaciones de indefensión en que terminan las personas sin hogar. La<br />

combinación y el peso de cada uno de los factores influyentes varía en cada<br />

situación personal, paro la desaparición de vínculos relacionales y la falta de<br />

referencias institucionales juegan un papel determinante. Por otra parte, los<br />

expertos tienden a coincidir en que las diversas experiencias indican que la<br />

consecución de un trabajo y un techo no son elementos suficientes para la<br />

266


CAPÍTULO 6: SÍNTESIS Y CONCLUSIONES<br />

reinserción. La atención sanitaria, la recuperación de la autoestima y la<br />

recreación de redes <strong>social</strong>es y/o familiares son elementos fundamentales. La<br />

hipótesis puede considerarse validada<br />

6.3 Posibles líneas de investigación<br />

Como resultado de la reflexión sobre las investigaciones consultadas, así como<br />

de nuestro propio proceso investigador, consideramos oportuno sugerir la<br />

profundización en dos líneas de análisis.<br />

La investigación cualitativa ofrece un potencial analítico de gran<br />

interés para analizar un colectivo como el que nos ocupa.<br />

Incluyendo técnicas etnográficas o antropológicas que en nuestro<br />

caso no hemos utilizado, como son las historias de vida o la<br />

observación no participante.<br />

La situación de crisis económica ha llevado a un segmento<br />

importante de la población inmigrante a situaciones de difícil<br />

subsistencia. Sería preciso profundizar en la relación inmigraciónpersonas<br />

sin hogar estableciendo claramente las diferencias entre<br />

medio rural y urbano, además de la consideración de otras<br />

variables especialmente significativas.<br />

267


ANEXOS<br />

ANEXOS<br />

Anexos al Capítulo 3<br />

Ficha técnica<br />

Ficha Técnica: Análisis de contenido de prensa<br />

- Análisis de contenido y análisis interpretativo-semántico de seis diarios<br />

españoles, a lo largo de seis meses<br />

- Corpus: Ediciones digitales de El País, El Mundo, ABC, La Vanguardia, La<br />

Voz de Galicia, 20 Minutos<br />

- Criterios de selección del corpus: Tirada, difusión, número de lectores y<br />

ámbito de influencia (Según datos de OJD y EGM)<br />

- Tramo cronológico: Los seis meses comprendidos entre el 1 de agosto de<br />

2009 y el 31 de enero de 2010<br />

- Trabajo de campo: Seguimiento diario de las ediciones digitales de los seis<br />

diarios seleccionados, utilizando como instrumento de detección y<br />

selección de las unidades informativas los buscadores y hemerotecas de<br />

los propios diarios<br />

- Criterios de búsqueda: Las voces utilizadas para acceder a las bases de<br />

datos de los diarios fueron las siguientes: indigente, vagabundo, mendigo,<br />

sin techo, sin hogar, marginado, excluido, albergue.<br />

- Volumen de información: Se han obtenido 503 unidades informativas,<br />

procedentes de los seis diarios, durante los seis meses de seguimiento<br />

- Recogida y análisis de la información: Todas las unidades informativas se<br />

imprimen y son clasificadas previamente, de cara al análisis cualitativo. A<br />

su vez, todos los aspectos cuantificables de las unidades informativas son<br />

codificados y grabados en una base de datos, para su posterior análisis<br />

cuantitativo<br />

268


ANEXOS<br />

Datos de nº de lectores y difusión. EGM 2010<br />

269


ANEXOS<br />

Lectores, tirada y difusión según control de EGM y OJD.2010<br />

DIARIOS Lectores/Día (000)<br />

EGM<br />

Tirada<br />

(Promedio)<br />

OJD<br />

Difusión<br />

(Promedio)<br />

OJD<br />

El País 2.012 563.495 431.033<br />

El Mundo 1.329 427.306 323.587<br />

ABC 751 343.525 251.642<br />

La Vanguardia 749 238.004 201.859<br />

La Voz de Galicia 588 120.086 102.858<br />

20 Minutos<br />

(Gratuito)<br />

2.347 789.094 --------<br />

TOTAL: 7.776 2.481.510 -------<br />

Fuente: OJD Enero2010 / EGM Octubre 2009-Mayo 2010 (Elaboración propia)<br />

270


ANEXOS<br />

Ficha y criterios de grabación de datos<br />

271


ANEXOS<br />

272


ANEXOS<br />

Relación cronológica de titulares, según diario<br />

AÑO<br />

MES DIARIO TÍTULO noticia<br />

2009<br />

8<br />

1<br />

El cuarto pilar del bienestar está cojo<br />

Detenido un mendigo por la muerte de otro en Sants<br />

Un indigente muere embestido por un toro en unas fiestas<br />

locales en Castellón<br />

Un indigente es asesinado a puñaladas en Ferrol<br />

El riesgo de pobreza<br />

"Estamos desesperados, pero volver sin dinero a nuestro país<br />

sería un fracaso"<br />

"Ha habido falta de reflejos y se ha dejado que se resuelva<br />

solo"<br />

Pocas zonas lúdicas y sucias<br />

Los veranos del Maravillas<br />

La Casa de la caridad no da abasto para repartir comidas<br />

Sin techo<br />

Un indigente aparece muerto en el centro de Santiago<br />

Cinco años para abrir un albergue<br />

Valencia recorta los fondos para acoger inmigrantes<br />

"Mendigogame"<br />

La Junta pagará por el crimen de un menor bajo su tutela<br />

273


ANEXOS<br />

2<br />

Muere un indigente tras ser embestido por un toro en las<br />

fiestas de Moncofa<br />

Llega a España el "juego del mendigo" en Internet tras su éxito<br />

en Alemania<br />

Varias ONG piden la retirada de "Mendigogame" por<br />

denigrante<br />

Casa Caridad supera en los 6 primeros meses del año las<br />

raciones repartidas en 2008<br />

A Grosske le crecen los rumanos<br />

Puedo haberme contagiado de hepatitis o sida<br />

Enterrado el hombre que confundieron en el Anatómico<br />

La Junta recurre el fallo que le obliga a indemnizar a los hijos<br />

de un mendigo asesinado<br />

Cuenta atrás para el derribo de tres iconos del paisaje urbano<br />

de Tarragona<br />

3<br />

Un mendigo asesina a otro con antecedentes penales tras una<br />

pelea en Ferrol<br />

Recoge chatarra, atraca una tasca o bebe calimocho para<br />

pasar de pantalla<br />

Uvas de crisis<br />

274


ANEXOS<br />

La Policía investiga la muerte de un hombre cuyo cadáver fue<br />

hallado en un pozo en Gandía<br />

La pobreza extrema no sale de vacaciones<br />

"Que pida perdón y dimita"<br />

El Ayuntamiento subvenciona a Cáritas para crear un centro<br />

con 67 plazas para personas sin hogar<br />

4<br />

CIU pide medidas ante los "nómadas" en Ciutat Vella<br />

"El arte existe ante ti, pero sobre todo dentro de ti"<br />

El "Mendigogame" español se estrena con éxito y se defiende<br />

de las críticas<br />

Dormir en la playa<br />

Multa a la junta por el crimen de un menor tutelado<br />

Detenida una mujer vagabunda por herir a estacazos a otra sin<br />

techo cuando dormían en la calle<br />

José Carlos, transeunte alojado en el albergue de Teis<br />

Muere apuñalado un indigente que dormía en la calle tras una<br />

pelea en Ferrol<br />

275


ANEXOS<br />

AÑO<br />

MES DIARIO TÍTULO noticia<br />

Los indigentes hacen una guía de albergues por todo Galicia<br />

Los 19 kilómetros de la ruta del pobre<br />

"Me da rabia porque no pude hacer nada; si hubiese pasado<br />

minutos antes, a lo mejor se habría salvado"<br />

Este es el tercer enfrentamiento violento entre indigentes en<br />

los últimos meses<br />

Cadáveres<br />

Un plan para erradicar la pobreza atendió a 838 indigentes en<br />

Galicia este año<br />

La policía busca en Ferrolterra a otro vagabundo como autor<br />

del asesinato<br />

El Concello pide a la policía más patrullas en lugares donde se<br />

repiten peleas entre indigentes<br />

El PP demanda más presencia policial, la limpieza de calles y<br />

servicios de ayuda a los sin techo<br />

El mendigo<br />

Comienzan las obras para acondicionar el antiguo centro de<br />

transeúntes de la Cruz Roja<br />

La falta de testigos dificulta la resolución del asesinato del<br />

vagabundo José Romero<br />

276


ANEXOS<br />

"Fun ao enterro do rei dos mendigos nun autocar cheo de<br />

delincuentes"<br />

Vilagarcía mejora sus servicios <strong>social</strong>es con la recuperación del<br />

hogar de transeúntes<br />

El "Mendigogame" español se estrena con éxito y se defiende<br />

de las críticas<br />

Jugar a ser mendigo<br />

El Concello anuncia la puesta en marcha de un servicio pionero<br />

de acompañamiento a los sin techo<br />

El PP critica que los usuarios del Hogar del Transeúnte tuvieran<br />

que arreglarse sin luz varios días<br />

Hallado el cadáver de un indigente en un portal de un edificio<br />

del casco urbano de Santiago<br />

El comedor atiende a cincuenta personas diarias<br />

Cáritas detectó un incremento en verano de un diez por ciento<br />

en las peticiones de vales para comer<br />

Tres indigentes murieron en las calles en los últimos cinco<br />

años<br />

Casi 40 personas necesitan comer en el Fogar do Transeúnte<br />

6<br />

Una moción para apartar de la calle a los sin techo enfrenta a<br />

PP y PSOE<br />

277


ANEXOS<br />

AÑO<br />

MES DIARIO TÍTULO noticia<br />

Muere un indigente embestido por un toro en las fiestas<br />

patronales de Moncofa<br />

No frivolizar con los sin techo<br />

El número de indigentes se dispara en un 70% en un año en<br />

QAlicante<br />

"Aquí en la calle también estamos notando mucho la crisis....<br />

Aparte del frío"<br />

Más de 530 sin techo viven en Madrid<br />

No quiero ser mendigo<br />

Una guía de Barcelona recoge donde dormir, comer y asearse<br />

de forma gratuita<br />

Fallece un indigente al recibir una paliza de otros dos<br />

vagabundos en Mataró<br />

9<br />

1<br />

El 4,5 % de los andaluces vive bajo pobreza severa<br />

Mapas de incivismo<br />

"Amo la libertad de vivir en la calle"<br />

278


ANEXOS<br />

AÑO<br />

MES DIARIO TÍTULO noticia<br />

Cifras<br />

Se lo presto, señor alcalde<br />

La inmigración toca fondo<br />

El refugio de los rechazados<br />

Detenida una indigente por matar a otra a puñaladas<br />

2<br />

Detenido tras intentar cortar la cabeza a un indigente con una<br />

sierra<br />

Detenida una mendiga en Ávila por un intento de homicidio en<br />

Sevilla<br />

3<br />

Testigos identifican como "rapados" a los agresores de un<br />

indigente en Moncloa<br />

"Duele mucho ver a gente en soledad"<br />

Un "sin techo", en coma diez dias tras recibir una brutal paliza<br />

en Moncloa<br />

4<br />

279


ANEXOS<br />

El hambre, una lacra <strong>social</strong><br />

Juegos peligrosos. La derrota de los niños<br />

El incivismo expulsa a los niños de los parques infantiles de<br />

Barcelona<br />

Parques dormitorio<br />

Jugando entre cartones<br />

La crisis llena las zonas verdes de Barcelona de indigentes<br />

Degradación del centro de Barcelona<br />

Doble vara de medir<br />

Opción por los débiles<br />

Incivismo, más allá de Ciutat Vella<br />

Muerte de dos religiosos comprometidos con los marginados<br />

en Catalunya<br />

Pagan a vagabundos para que se peleen y poderlo grabar<br />

Olviden aquella ciudad fácil de gobernar, ya no existe<br />

280


ANEXOS<br />

AÑO<br />

MES DIARIO TÍTULO noticia<br />

Escepticismo<br />

Entidades del Raval lamentan que las inversiones hayan<br />

priorizado el urbanismo y no a las personas<br />

El príncipe Guillermo quiere apoyar la beneficencia y no ser un<br />

"adorno"<br />

Made in Spain<br />

Una degradación anunciada<br />

Ciutat Vella instala bancos anti-indigentes, esquinasa anti-pipís<br />

y superficies anti-botellón<br />

Una indigente mata con arma blanca a la actual pareja de su<br />

exnovio en Madrid<br />

5<br />

Intenta cortar la cabeza a un mendigo<br />

Enfado por descartar el refugio de indigentes<br />

El subdelegado del Gobierno reitera que los índices de<br />

delincuencia en Ferrol son menores a la media<br />

Juzgados en Ourense cuatro neonazis acusados de agredir a un<br />

indigente<br />

281


ANEXOS<br />

Cáritas de Padrón tiene un 40 % más de demandas de ayuda<br />

que años atrás a causa de la crisis<br />

"Duermo en un cajero tras perder mi trabajo"<br />

Detienen a un hombre que mató a un indigente durante una<br />

discusión<br />

El Ayuntamiento seleccionará personal de refuerzo para el<br />

hogar del transeúnte<br />

El Valedor presiona a la Xunta para que se abra ya el albergue<br />

El príncipe Guillermo no quiere ser un "adorno" real<br />

6<br />

Barcelona instala bancos "antimendigos" y esquinas<br />

"antiorines" contra los incívicos<br />

Uno de cada cinco españoles corre el riesgo de caer en la<br />

pobreza, según un informe<br />

Una indigente mata a puñaladas a la actual pareja de su ex en<br />

Arganzuela<br />

Un indigente pasa diez días en coma tras recibir una paliza de<br />

un grupo de neonazis<br />

Exigen la retirada del juego de los mendigos<br />

10<br />

1<br />

Emancipación y dependencia<br />

282


ANEXOS<br />

El Raval exige que otros barrios acojan centros para<br />

marginados<br />

La Audiencia condena a un marroquí por violar a una indigente<br />

21 días tirada en la calle<br />

Homenaje a la transexual asesinada hace 18 años en Barcelona<br />

¿Qué pasará con los "sin techo"?<br />

Familias hundidas por la crisis<br />

2<br />

Mantienen la acusación para un hombre por matar a un<br />

mendigo<br />

Absuelven a un padre de pagar una pensión a su hija por estar<br />

casi en la indigencia<br />

El padre Ricardo García afirma que recibir la Alta Distinción es<br />

"un estímulo"<br />

Condenado a tres años por matar a un mendigo que le tocó el<br />

culo a su sobrina<br />

Hallan restos humanos en avanzado estado de<br />

descomposición en una playa<br />

Se incendia un pabellón abandonado y ocupado por indigentes<br />

en Pasaia<br />

283


ANEXOS<br />

Hallan el cadáver de un joven de 24 años dentro del edificio de<br />

GESA<br />

Antich, tú decides<br />

Recurren la sentencia que condenó a un hombre por matar a<br />

un mendigo<br />

3<br />

Absuelven a un "indigente" que no pagó la pensión a su hija<br />

La Asociación de la madre de Palomino se manifestará contra<br />

los "ataques fascistas"<br />

Eligen a "Miss Sin Techo", una indigente de 58 años<br />

El polémico "Mendigogame" celebra su éxito en la Red<br />

Los "cacos" del cobre destrozan un albergue<br />

El director del albergue vaticina un aumento progresivo de<br />

personas necesitadas en el centro<br />

El Ayuntamiento ya presta atención psiquiátrica a las personas<br />

sin techo<br />

Sin albergues en la isla para acoger a todos los sin techo<br />

El Consell asegura 670 plazas para las personas sin techo<br />

284


ANEXOS<br />

4<br />

El matador José Tomás dona 200.000 euros a asociaciones<br />

catalanas necesitadas<br />

la suciedad gana terreno en todos los barrios de Barcelona<br />

La Rambla: todos a una<br />

El controvertido concurso belga "Miss Sin Techo" corona a<br />

mujer de 58 años<br />

Hallan el cadáver de un indigente cerca de la plaza de toros de<br />

Granada<br />

Las plazas de civismo creadas en Barcelona siguen sin resolver<br />

sus problemas<br />

La buena gente<br />

Una Barcelona de espaldas al ciudadano<br />

Arreglar y vigilar<br />

5<br />

"Nosotros, sin techo y la Gota de Leche, vacía; es una<br />

vergüenza"<br />

Disminuye la criminalidad aunque están dos homicidios<br />

recientes todavía sin aclarar<br />

El centro, ubicado en el convento de San Francisco, está<br />

atendido por la orden de las Hijas de la Caridad<br />

285


ANEXOS<br />

Las <strong>org</strong>anizaciones <strong>social</strong>es insisten en reclamar el albergue en<br />

la Gota de Leche<br />

El Concello pide a la Xunta que abra inmediatamente el<br />

albergue para indigentes<br />

Xunta y Concello dejan sin solución a las personas sin techo de<br />

la ciudad<br />

El vecino de Chorente que apareció muerto en el Miño residió<br />

como indigente en Caldas de Rei<br />

El albergue de Xoán XXIII reabre sus puertas tras ocho meses<br />

en obras<br />

El Concello estudiará el perfil de los sin techo para buscar<br />

soluciones<br />

Cerca de 300 personas en el "bache" de la calle<br />

Un inmigrante hiere con una catana a una sin techo que<br />

dormía en O Berbés<br />

Vecinos de Vigo acampan junto a indigentes frente al Concello<br />

para reclamar un albergue <strong>social</strong><br />

Polémica sobre el centro pese a la muerte de un sin techo<br />

cada 15 días<br />

Vigo acoge hoy la manifestación central de toda Galicia contra<br />

la pobreza<br />

286


ANEXOS<br />

AÑO<br />

MES DIARIO TÍTULO noticia<br />

La Gota de Leche se alza en símbolo de la manifestación contra<br />

la pobreza<br />

Pobreza<br />

El albergue<br />

La Xunta acuerda con las Misioneras del Silencio ampliar su<br />

albergue con 20 camas<br />

Un numeroso grupo de okupas es desalojado de una casa en<br />

As Rodas<br />

Padres de A Escardia denuncian la presencia de toxicómanos<br />

en las inmediaciones del colegio<br />

Ferrol activa talleres para facilitar la integración de las<br />

personas sin hogar<br />

La crisis incrementa los usuarios de Cáritas, que mantiene las<br />

donaciones<br />

El Concello ordena la demolición del edificio en ruinas de la<br />

calle Real<br />

6<br />

Encuentran restos humanos en unos matorrales de una playa<br />

de El Rinconcillo.<br />

287


ANEXOS<br />

Un fallecido y un herido muy grave al ser apuñalados en un bar<br />

de la zona centro<br />

Más de trece de cada cien madrileños viven por debajo del<br />

nivel de pobreza<br />

Prohibido mendigar en el metro<br />

Miss indigente<br />

11<br />

1<br />

"Tiene que pagar por ello"<br />

Con la casa en las calles catalanas y el hogar en Rumanía<br />

Ondas 2009<br />

Sospechan que un mendigo murió en Bilbao tras provocar un<br />

incendio<br />

Convivir sin mimos ni mendigos<br />

Los albergues de temporeros de Jaén abren a partir de hoy<br />

Una congregación religiosa venderá el único castillo medieval<br />

de Galicia<br />

Los nuevos pobres<br />

"No puedes querer ser un Cid"<br />

288


ANEXOS<br />

AÑO<br />

MES DIARIO TÍTULO noticia<br />

Morir por miedo a ser expulsado<br />

Instantáneas de la soledad<br />

Un castillo por diez millones<br />

2<br />

El Banco de Alimentos distribuye el doble de comida que en el<br />

año anterior<br />

San Sebastián abre desde este domingo el Local del Frío para<br />

indigentes<br />

La Policía desaloja a 40 indigentes de la Comandancia Militar<br />

de Ibiza<br />

De oficial de primera a "sin techo" en sólo cinco meses<br />

Las calles de Barcelona se ensucian más con los nuevos<br />

contenedores<br />

El PSOE pide que alguien urgentemente se ocupe de estas<br />

familias<br />

El próximo día 25 comienza la campaña del frío para<br />

indigentes<br />

Centro Social Marillac, el hospital de los pobres<br />

289


ANEXOS<br />

En España hay más de 25.000 personas sin hogar, el 90 %<br />

hombres<br />

La crisis devuelve a los "sin techo" reinsertados a la calle<br />

El amo de los contenedores<br />

Hallan a un hombre muerto en un callejón de Ibiza<br />

Valencia duplica sus "sin techo"<br />

El Ayuntamiento tendrá un protocolo específico para los "sin<br />

hogar" con gripe A<br />

Instalan cámaras de videovigilancia en el pasadizo subterraneo<br />

de Atotxa<br />

La Fundación Padre Ricardo creará un centro para enfermos<br />

mentales<br />

Investigan la muerte de un indigente tras quemarse el colchón<br />

donde dormía<br />

Un centenar de personas protesta contra la ordenanza de<br />

convivencia de Granada<br />

"Camping" en la Puerta del Sol por los "sin techo"<br />

3<br />

La gran noche de los Ondas<br />

290


ANEXOS<br />

AÑO<br />

MES DIARIO TÍTULO noticia<br />

A la sombra de las luces de Navidad<br />

El albergue de Talavera de la Reina. El abrazo de Cáritas<br />

Divorciados y sin techo, nuevos beneficiarios del V Plan<br />

Nacional de Vivienda<br />

El Centro de Acogida Municipal alcanza el 97 por ciento de su<br />

capacidad en 2009<br />

Cáritas Diocesana hace un llamamiento a la solidaridad con las<br />

personas que carecen de techo<br />

4<br />

Ladrones camuflados actúan en la biblioteca de la facultad de<br />

Geografia del Raval<br />

Una zona de juegos junto a la narcosala se usa como refugio<br />

nocturno para drogadictos<br />

Abandono del Raval<br />

¿Barrio "in fashion"?<br />

Los nuevos contenedores de basura de Barcelona "ideales"<br />

para hurgar en ellos<br />

Crecen los "sin techo" en Girona<br />

Trabajo por techo<br />

291


ANEXOS<br />

AÑO<br />

MES DIARIO TÍTULO noticia<br />

"Nos veíamos bajo un puente"<br />

El número de "sin techo" crece un 5 % en Barcelona<br />

Alimentación <strong>social</strong> municipal en Barcelona<br />

"Pase, pase, caballero, encantados de tenerle aquí"<br />

No sólo alimento<br />

5<br />

Un incendio quema otro edificio protegido donde vivían<br />

indigentes<br />

Los acusados de pegar a un pobre alegan que son cabezas de<br />

turco<br />

Denuncian el incremento de indigentes en los soportales del<br />

Rosalía<br />

Numerosas personas denuncian amenazas de los indigentes<br />

del Rosalía<br />

Hallan a un indigente de 40 años muerto desde hace días en<br />

una casa abandonada de A Ferrería<br />

Acampada de más de 28 tiendas ante el Concello y la Xunta en<br />

protesta por la muerte de 30 sin techo al año<br />

292


ANEXOS<br />

El inventor de la tubería-hogar sigue en el mismo sitio<br />

La Xunta anuncia que La Gota de Leche será una guardería y<br />

un centro de empleo<br />

" La Administración sabe que no hay camas y que la gente está<br />

muriendo"<br />

Pernoctar en la calle es duro<br />

El Concello <strong>org</strong>aniza una ruta para sensibilizar a la ciudadanía<br />

sobre las personas sin hogar<br />

Galicia Sur propone Marqués de Valterra como albergue<br />

Los Hermanos de Teis inician la negociación para vender su<br />

castillo<br />

Sin techo, pero con historia<br />

Los tres grupos políticos del Concelo proponen soluciones<br />

distintas para el albergue<br />

Un centenar de escolares reflexionaron sobre los derechos y la<br />

forma de vida de las personas sin hogar<br />

Cáritas Interparroquial celebra el Día de los Sin Techo con el<br />

objetivo de poner en marcha un albergue<br />

La crisis potencia nuevas formas de pobreza y exclusión <strong>social</strong><br />

293


ANEXOS<br />

AÑO<br />

MES DIARIO TÍTULO noticia<br />

6<br />

La campaña del frio tendrá más plazas que nunca en albergues<br />

y pensiones<br />

Sólo 87 sin techo, con nombre y apellidos, se podrán alojar en<br />

el centro invernal de Bilbao<br />

Cerca de un centenar de personas malviven en chabolas a lo<br />

largo del rio Manzanares<br />

Un hombre acumulaba 41 contenedores de basura robados en<br />

un solar en el Centro<br />

Los indigentes fijan su hogar en los soportales del la Plaza<br />

Mayor<br />

12<br />

1<br />

Vivir con 370 euros al mes<br />

Ruta de la miseria entre olivos<br />

Psiquiatras a pie de calle<br />

La mitad, extranjeros y enfermos<br />

El último refugio contra el frío<br />

El misterioso ladrón de los cubos de basura<br />

294


ANEXOS<br />

La meteorología se alía con el Ayuntamiento<br />

Ramón Bonet, fundador del albergue Casa los Amigos<br />

Albergues llenos antes de las heladas<br />

Los albergues se llenan<br />

La losa del siglo XXI<br />

Hallado el cadáver de un indigente con un hachazo en la<br />

cabeza<br />

Carla Bruni es amiga de un "sin techo"<br />

Sant Andreu, albergue de emergencia<br />

La ordenanza de convivencia de Granada llega al TSJA<br />

Proteger del frío a los "sin techo"<br />

La ola de frío pone en alerta a 51 provincias<br />

La patrulla de la solidaridad<br />

El frío llena los albergues municipales de las tres capitales<br />

295


ANEXOS<br />

AÑO MES DIARIO<br />

TÍTULO noticia<br />

La gélida noche de los irreductibles<br />

El invierno llega hoy con la amenaza de nieve<br />

Los albergues de Jaén han acogido ya a 6.000 inmigrantes<br />

Barcelona desactiva la "operación frío", de atención a los "sin<br />

techo"<br />

Guillermo de Inglaterra duerme al raso en solidaridad con los<br />

"sin techo"<br />

Príncipe sin techo por un día<br />

Navidades negras<br />

Una banda utilizó a mendigos para defraudar a Hacienda<br />

El Supremo rechaza el recurso de los jóvenes que quemaron<br />

viva a una mendiga<br />

Los cien años de la Gran Vía<br />

Morir de frío en Europa<br />

El temporal golpea a los inmigrantes<br />

296


ANEXOS<br />

AÑO<br />

MES DIARIO TÍTULO noticia<br />

La "banda de la ternera"<br />

Una lista con cuatro millones de nombres<br />

El albergue de Huelva amplía la estancia "por Navidad"<br />

Máxima seguridad en torno al Papa<br />

2<br />

Fallece un indigente en una céntrica plaza de Palma<br />

Más de 8 años de psiquiátrico por matar a otro indigente<br />

El hogar de los desesperados<br />

La caridad fue su vida<br />

El fiscal solicita 20 años para un hombre que mato a palos a un<br />

colega borracho<br />

Cruz Roja detecta un aumento de personas sin techo en<br />

Castellón por la crisis<br />

Hallan el cadáver de un indigente con un hachazo en la cabeza<br />

Hallan un hombre muerto con signos de violencia en Lanzarote<br />

297


ANEXOS<br />

El Ayuntamiento de Alicante activa el servicio de acogida para<br />

personas sin hogar<br />

Las estaciones de metro de Turia y Colon, abiertas por la<br />

noche para indigentes<br />

Carla Bruni y su amigo "homeless"<br />

Un café caliente para combatir en Castellón el frio de la noche<br />

a la intemperie<br />

Sin techo para pasar la noche más fría<br />

Los "sin techo" cenaran langostinos, bacalao y dulces esta<br />

nochebuena<br />

El Supremo confirma la pena para los acusados de quemar a<br />

una indigente en Barcelona<br />

El principe Guillermo, indigente por una noche<br />

Desarticulada una <strong>org</strong>anización que defraudó 25 millones de<br />

euros a Hacienda<br />

Unas 200 personas pueden celebrar las fiestas gracias al<br />

comedor del padre Ricardo<br />

Feliz nochebuena sin techo<br />

Los vecinos del Pumarejo acusan a Lipasam de amenazarlos<br />

con multas<br />

298


ANEXOS<br />

AÑO MES DIARIO<br />

TÍTULO noticia<br />

El programa de patología dual grave del Hospital Provincial ha<br />

atendido a 150 pacientes<br />

El Papa come con pobres en su primera salida tras la agresión<br />

en nochebuena<br />

Despertar en la indigencia<br />

La indigencia, otro problema en Barcelona<br />

Rajoy, voluntario por un día en un comedor <strong>social</strong> de Madrid<br />

3<br />

Las primeras señales de que el invierno se acerca<br />

La marquesa<br />

Hallan en Fuengirola el cadáver de un indigente con un<br />

hachazo en la cabeza<br />

Un indigente de Granada agrede sin motivo a una mujer de<br />

avanzada edad<br />

Alarma ante un indigente ebrio al que creyeron cadáver<br />

Un indigente sufre quemaduras al quemarse la vivienda en la<br />

que dormía<br />

Echan abajo el edificio "La Gaviota"<br />

299


ANEXOS<br />

Condenado a dieciocho años de cárcel el indigente que mató a<br />

otro<br />

Un indigente en un contenedor se salva de morir triturado por<br />

el camión de basura<br />

Sólo hay servicios municipales para la mitad de los "Sin techo"<br />

El Samur Social: de los almacenes Arias a la campaña contra el<br />

frio<br />

No es Jauja, es Jaén<br />

La nieve y el frío disparan la asistencia de los "sin techo" a los<br />

albergues<br />

Cerca de 850.000 valencianos viven por debajo del umbral de<br />

la pobreza<br />

Paralelismos<br />

4<br />

La guardia urbana destina más agentes al patrullaje de barrio<br />

La plaza Vila de Madrid se blinda contra el incivismo<br />

Hallan el cadáver de un indigente con un hachazo en Málaga<br />

El hada Carla y el mendigo<br />

Fallecen dos personas en una casa abandonada en Lleida por<br />

la mala combustión de un brasero<br />

300


ANEXOS<br />

AÑO MES DIARIO<br />

TÍTULO noticia<br />

Vacuna contra la gripe A para los sin techo<br />

Cáritas atenderá este año a un 11 % más de personas que en<br />

2008<br />

Campaña por los sin techo<br />

El frío intenso afectará de manera generalizada a toda<br />

Catalunya el fin de semana<br />

La Operación Frio da alojamiento a 53 personas sin hogar en<br />

Barcelona<br />

Alerta por nieve tras la noche más fría del año<br />

El príncipe Guillermo duerme al raso en solidaridad con los<br />

"sin techo"<br />

El fraude de la trama empresarial desarticulada en Barcelona<br />

podría elevarse hasta 25 millones<br />

El Supremo desestima el recurso de los dos condenados por<br />

quemar viva a una indigente en Barcelona<br />

Navidad con pobres<br />

Derechos y responsabilidad<br />

5<br />

301


ANEXOS<br />

El gran sueño es un comedor <strong>social</strong> en el que dar alimento<br />

caliente a los necesitados una vez al día<br />

Piden 2880 euros de multa para 4 "sin techo" por vivir en una<br />

casa de Karpin<br />

Hallado el cadáver de un indigente con un hachazo en la<br />

cabeza en Málaga<br />

La crisis aboca a mariñanos a pedir ayuda a Cáritas para las<br />

hipotecas<br />

Una pelea con arma blanca en el local para indigentes de<br />

Elduayen se salda con un detenido<br />

La historia del albergue pone en evidencia el escaso pudor y<br />

sensibilidad de los políticos<br />

La Xunta tiene plazas libres en un albergue privado<br />

El temporal pone en alerta por frio y nieve a más de 20<br />

provincias<br />

La situación de 300 indigentes se agrava con la brusca bajada<br />

de temperaturas en la ciudad<br />

Carla Bruni habla de libros y música con un sin techo<br />

El frio humaniza los cajeros<br />

Solidarios los 365 días del año<br />

El centro cultural Conxo toma el relevo de los menús solidarios<br />

del bar Paluso<br />

302


ANEXOS<br />

AÑo MES DIARIO<br />

TÍTULO noticia<br />

Cruz Roja atiende a 215 personas sin hogar, de las que el 61%<br />

han acudido por primera vez a la ONG<br />

Un albergue sin señal de la cruz<br />

El príncipe Guillermo se convierte en un Sin techo<br />

Algunas familias solicitan que las oenegés abonen por ellas las<br />

cuotas de sus hipotecas<br />

Los pisos de integración para mujeres pasarán a ser mixtos, al<br />

no presentarse este año solicitudes<br />

El pabellón de O Berbés se abre como albergue de emergencia<br />

"Nos han regalado 100 pollos para cocinar en estas fiestas"<br />

La crisis y la navidad desbordan a las <strong>org</strong>anizaciones de<br />

beneficencia<br />

Integrador <strong>social</strong> del programa "sin techo" de Cruz Roja:<br />

Quedarte sin dinero no es lo que te lleva a la calle"<br />

6<br />

Mariano Rajoy, voluntario por un día en un comedor <strong>social</strong> de<br />

Madrid<br />

El Supremo no admite el recurso de los dos condenados por<br />

quemar viva a una sin techo<br />

303


ANEXOS<br />

AÑO<br />

MES DIARIO TÍTULO noticia<br />

Carla Bruni asegura tener un amigo indigente llamado Denis<br />

Encuentran el cadáver de un indigente con un hachazo en<br />

Fuengirola<br />

De príncipe a mendigo: Guillermo de Inglaterra pasa una<br />

noche bajo un puente<br />

El PP de Vigo afirma que el ayuntamiento ha privatizado<br />

"múltiples" servicios <strong>social</strong>es y rechaza las críticas a la Xunta<br />

El Hogar del Transeúnte recibe 2.500 euros más por el<br />

aumento de usuarios<br />

Los residentes del albogue municipal celebran la Nochebuena<br />

y la Navidad con un menú especial<br />

2010<br />

1<br />

La otra cara de la noche viguesa<br />

Vigo: veinte muertos<br />

Herido de un hachazo en la cabeza un indigente en Fuengirola<br />

Nuevo caso de ataque a un mendigo en Fuengirola<br />

Identificada a 100 kilómetros de casa a una mujer que llevaba<br />

cuatro meses desaparecida<br />

304


ANEXOS<br />

AÑO<br />

MES DIARIO TÍTULO noticia<br />

La Policía investiga la muerte de otro indigente en Málaga<br />

Investigan la muerte de dos indigentes en Sevilla y Málaga<br />

Rescatan a dos indigentes en Málaga por la crecida del río<br />

Guadalmedina<br />

El refugio se convierte en trampa para dos indigentes<br />

Congelados y sin trabajo a la vista<br />

Muere una indigente en Almería<br />

Noches de frío en los huesos<br />

Muerte en la chabola<br />

Cierran 17 de los 23 albergues de Jaén<br />

"La policía nos dice que durmamos en grupo"<br />

Frío extremo en el sur<br />

La Ertzaina prosigue la investigación por la muerte de una<br />

indigente en Tolosa<br />

La pobreza de hoy tiene un rostro joven<br />

305


ANEXOS<br />

La alerta por frío y nieve vuelve esta medianoche a Madrid<br />

Once ONG critican "Famosos y mendigos"<br />

Un portero de discoteca afronta 13 años de prisión por violar a<br />

una menor sin hogar<br />

El polémico juego "Mendigogame" llega a Facebook<br />

Las sombras de "La Farola"<br />

El frío echa a los indigentes de la calle<br />

El Ayuntamiento de Barcelona aloja a 65 personas sin hogar a<br />

causa de las bajas temperaturas<br />

Españoles sin papeles<br />

Un techo de cartón<br />

Hopper visto desde la calle<br />

Trabajadores de la T-4 denuncian inseguridad por el aumento<br />

de mendigos<br />

Un nuevo año sin techo<br />

Aliviando las heridas del hambre<br />

Un herido grave por el segundo ataque a un indigente<br />

306


ANEXOS<br />

AÑO MES DIARIO<br />

TÍTULO noticia<br />

Los "sin techo “se cobijan en el "escaparate" de Sevilla<br />

Retiran la respiración mecánica al indigente herido con un<br />

hacha<br />

Investigan si la agresión a un indigente se debió a un problema<br />

entre mendigos<br />

Encuentran degollado a un indigente de 50 años<br />

Desalojadas 9 personas de las Naves del Barranco<br />

Fallece el indigente de 50 años degollado en la calle en<br />

Guillena<br />

Investigan la muerte de un mendigo en Málaga capital<br />

El indigente agredido en la cabeza podría ser interrogado en<br />

las próximas horas<br />

Encuentran muerta de frío en plena calle de la capital<br />

almeriense a una mendiga<br />

Más de 100 incidencias en una hora debido a la lluvia en<br />

Málaga y Alhaurin de la Torre<br />

Casi 300 personas trabajan en Vitoria para despejar las calles<br />

de nieve<br />

Un centenar de indigentes escapan del frio en albergues<br />

municipales<br />

Amenaza con una pistola a 2 indigentes para dormir él en un<br />

307


ANEXOS<br />

cajero automático<br />

Realojados los indigentes de la zona donde se produjo el<br />

incendio<br />

Un mendigo da tres puñaladas a otro porque iba a robarle<br />

Hallan el cadáver de un hombre en un edificio en obras<br />

Granada prevé ingresos por multar a prostitutas pero ningún<br />

plan <strong>social</strong><br />

Caritas critica el programa "famosos y mendigos" de Antena 3<br />

Hallan el cadáver de un indigente de origen checo en un<br />

descampado de Rota<br />

Herido grave tras ser rescatado del interior de un camión de<br />

basura<br />

Cuando el alcohol mata más que el frío<br />

3<br />

Herido grave el segundo indigente atacado con un hacha en<br />

Fuengirola<br />

Los indigentes toman la Nave del Barranco como albergue<br />

Buscan en Fuengirola a un agresor de mendigos, a los que<br />

ataca con un hacha<br />

Investigan la muerte de un tercer indigente en Málaga<br />

308


ANEXOS<br />

Muere el indigente hallado en Guillena con heridas en el cuello<br />

El último indigente fallecido en Málaga murió por causas<br />

naturales<br />

"Sine Domus" urge al ayuntamiento a que habilite zonas para<br />

los "sin techo"<br />

La policía peina Jaén para impedir pernoctaciones a la<br />

intemperie<br />

Hallado el cadáver de una mujer indigente en una calle de<br />

Almería<br />

La hipotermia, posible causa de la muerte de una indigente en<br />

una calle de Almería<br />

No a un albergue porque "atrae pobreza"<br />

Mi más sentido pésame<br />

Piden que las pernoctaciones del Consistorio en el Prestige<br />

sean para familias sin hogar<br />

Cáritas Diocesana atendió a más de 1.150 personas sin techo<br />

el pasado año<br />

La situación de los "sin techo" en las calles de Sevilla se vuelve<br />

dramática<br />

309


ANEXOS<br />

AÑO<br />

MES DIARIO TÍTULO noticia<br />

La hipocresía de la izquierda<br />

Hallan muerto a un mendigo en la Plaza de Montesión<br />

De la chabola a Benidorm<br />

El Papa, conmovido con los vagabundos<br />

Una indigente apuñala en el cuello a una monja del Albergue<br />

Covadonga<br />

Enfermos, angustiados y en la calle<br />

"Somos más inexistentes que el estiércol"<br />

Barajas, refugio para decenas de indigentes<br />

4<br />

En estado grave un indigente en Fuengirola por una herida de<br />

hacha en la cabeza<br />

Miralá, es la Gran Vía<br />

Seis equipos para recoger a los "sin techo"<br />

Los Servicios <strong>social</strong>es de Barcelona atienden a 100 personas<br />

sin hogar<br />

La ola de frío en Catalunya deja mínimas de hasta 9 bajo cero<br />

310


ANEXOS<br />

¿Vale la pena?<br />

Cáritas y otras diez <strong>org</strong>anizaciones califican de "iniciativa<br />

lamentable" el programa "Famosos y mendigos"<br />

El peligro de la desintegración<br />

5<br />

Carbón para los políticos por dejar un año más Vigo sin un<br />

albergue para indigentes<br />

Queridos Reyes Magos: pedimos un albergue para no vivir en<br />

los cajeros<br />

"As persoas sen fogar non podemos esperar"<br />

Colectivos <strong>social</strong>es de Vigo ponen zapatos a los Reyes magos<br />

en plena calle para pedir un albergue<br />

Un año y diez meses de cárcel para cuatro cabezas rapadas<br />

que atacaron a un indigente<br />

Protección Civil trasladara a albergues a los indigentes que lo<br />

soliciten a causa de la ola de frio<br />

La ola de frío no aumentó las pernoctaciones en el Hogar del<br />

Transeúnte<br />

El dispositivo de la Cruz Roja atendió a 14 personas sin hogar<br />

debido a las bajas temperaturas<br />

Los albergues agotaron sus plazas por el intenso frío del fin de<br />

semana<br />

311


ANEXOS<br />

AÑO MES DIARIO<br />

TÍTULO noticia<br />

Los muebles para el renovado hogar del transeúnte, costaran<br />

cerca de cincuenta mil euros<br />

Bar plaza punto com<br />

"Mis hijos piensan que estoy en España de vacaciones"<br />

Calor y café<br />

Tres años y medio de cárcel para los dos asaltantes de un<br />

mendigo<br />

Rector de los franciscanos de Santiago: "Llegó un momento en<br />

el que ir de discoteca ya no me llenaba"<br />

Cáritas califica de "iniciativa lamentable"<br />

"famosos y mendigos” de Antena 3<br />

el programa<br />

Indigentes causan otro incendio en el antiguo asilo de Pi y<br />

Margall<br />

Pueblo Gitano acusa al Concello de despreocuparse por las<br />

personas que pasan penurias<br />

6<br />

Hallan a otro mendigo muerto en Málaga<br />

La policía podría interrogar en las próximas horas al indigente<br />

agredido en Fuengirola<br />

312


ANEXOS<br />

Hallan el cadáver de un indigente de origen checo en un<br />

descampado de Rota<br />

Sigue la investigación de la muerte del indigente de Guillena a<br />

la espera de la autopsia<br />

Segundo ataque a un indigente con un hacha en Fuengirola en<br />

un mes<br />

Evacuado a un hospital un indigente descubierto en Guillena<br />

con heridas en el cuello y las manos<br />

Una indigente muere de frío en Almeria<br />

Los famosos se quedan sin techo en un nuevo "docureality" de<br />

Antena 3<br />

Hallan a otro mendigo muerto en Malaga<br />

El área de Acción Social de Bilbao aumenta hasta los 609.000<br />

euros la subvención concedida a los comedores <strong>social</strong>es<br />

Murcia es una de las ciudades con más recursos asistenciales<br />

para las personas pobres, según Consumer Eroski<br />

El ayuntamiento de Albacete ha esparcido 150 toneladas de<br />

sal en la ciudad por la nevada caída<br />

El Foro <strong>social</strong> ve "fundamental" que los albergues sigan<br />

abiertos ante el "retraso" en la campaña de la aceituna<br />

El Gobierno de C-LM agradece a Cáritas su dedicación a las<br />

personas sin hogar y compromete su apoyo a la<br />

<strong>org</strong>anización<br />

Seis "sin techo" se trasladan al albergue de la capital para<br />

evitar los efectos del intenso frio<br />

313


ANEXOS<br />

Detienen en un albergue de Candina a un joven que insultó y<br />

amenazó de muerte a policías de Santander<br />

El albergue municipal de Zaragoza activa el protocolo por frío,<br />

que permite acoger a 37 nuevos transeúntes<br />

El albergue municipal de la capital acoge a 3.175 personas<br />

diferentes durante 2009<br />

Madrid derriba chabolas sin realojar a sus vecinos<br />

La monja apuñalada por una indigente en el Albergue<br />

Covadonga está "estable" tras ser operada<br />

Los invisibles<br />

La mitad de los indigentes de Barcelona sufre algún trastorno<br />

mental<br />

Sin el abrigo de la lectura<br />

Un jurado enjuicia desde mañana al acusado de asesinar a un<br />

indigente hace ocho años en la capital<br />

Encuentran el cadáver de un hombre en el río Genil a su paso<br />

por la capital<br />

El trato indigno de Cáritas<br />

314


ANEXOS<br />

Anexos al Capítulo 4<br />

Ficha técnica<br />

FICHA TÉCNICA: Encuesta de opinión<br />

Percepción e imagen de las personas sin hogar<br />

entre los habitantes de las grandes ciudades españolas<br />

ÁMBITO DE LA<br />

ENCUESTA<br />

Personas mayores de 18 años que residan en las 10 ciudades más<br />

grandes de España.<br />

PERIODO DE<br />

RECOGIDA<br />

DE LA<br />

INFORMACIÓN<br />

Abril -Junio del 2010.<br />

ERROR DE<br />

MUESTREO<br />

CUOTAS<br />

El error es de ± 0,0346 (± 3,46%). para muestreo aleatorio simple<br />

por ciudad, y un nivel de confianza del 95%, y el caso más<br />

desfavorable P=Q=0,5. Estableciendo cuotas de sexo y edad.<br />

Cuotas ajustadas proporcionalmente por edades y CCAA a los<br />

Datos del Padrón 2009 INE, diferenciadas por edades y sexo<br />

NÚMERO DE<br />

ENTREVISTAS<br />

803 encuestas válidas<br />

TAMAÑO<br />

MUESTRAL<br />

Desagregadas por ciudad en:<br />

Madrid 182<br />

Barcelona 112<br />

315


ANEXOS<br />

Valencia 74<br />

Sevilla 70<br />

Zaragoza 70<br />

Málaga 64<br />

Bilbao 60<br />

Murcia 58<br />

Las Palmas de Gran Canaria 58<br />

Palma de Mallorca 55<br />

MÉTODO DE<br />

RECOGIDA<br />

Encuesta telefónica. Sistema CATI. Ámbito nacional, 10 ciudades<br />

más grandes de España sin restricción horaria.<br />

316


ANEXOS<br />

Datos muéstrales<br />

Distribución de cuotas por población, sexo y edad<br />

18 a 30<br />

31 a 50<br />

51 a 65<br />

Más de 65<br />

Edad<br />

años<br />

años<br />

años<br />

años Total<br />

Barcelona Sexo Hombre 13 21 11 11 56<br />

Mujer 13 21 11 11 56<br />

Total 26 42 22 22 112<br />

Bilbao Sexo Hombre 7 11 6 6 30<br />

Mujer 7 11 6 6 30<br />

Total 14 22 12 12 60<br />

Las<br />

Palmas Sexo Hombre 7 11 5 5 28<br />

Mujer 7 11 6 6 30<br />

Total 14 22 11 11 58<br />

Madrid Sexo Hombre 21 34 17 17 89<br />

Mujer 22 35 18 18 93<br />

Total 43 69 35 35 182<br />

Málaga Sexo Hombre 8 12 6 6 32<br />

Mujer 8 12 6 6 32<br />

Total 16 24 12 12 64<br />

Murcia Sexo Hombre 7 11 5 5 28<br />

Mujer 7 11 6 6 30<br />

Total 14 22 11 11 58<br />

317


ANEXOS<br />

Palma Sexo Hombre 7 10 5 5 27<br />

Mujer 7 11 5 5 28<br />

Total 14 21 10 10 55<br />

Sevilla Sexo Hombre 8 13 7 7 35<br />

Mujer 8 13 7 7 35<br />

Total 16 26 14 14 70<br />

Valencia Sexo Hombre 9 14 7 7 37<br />

Mujer 9 14 7 7 37<br />

Total 18 28 14 14 74<br />

Zaragoza Sexo Hombre 8 13 7 7 35<br />

Mujer 8 13 7 7 35<br />

Total 16 26 14 14 70<br />

TOTAL<br />

General 803<br />

318


ANEXOS<br />

Ciudades españolas según número de habitantes y<br />

encuestas realizadas<br />

CIUDAD Habitantes Muestra<br />

Madrid 3.213.271 182<br />

Barcelona 1.615.908 112<br />

Valencia 807.200 74<br />

Sevilla 699.759 70<br />

Zaragoza 666.129 70<br />

Málaga 566.447 64<br />

Bilbao 430.571 60<br />

Murcia 396.570 58<br />

Las Palmas de Gran 381.123 58<br />

Canaria<br />

Palma de Mallorca 353.340 55<br />

TOTAL 9.130.318 803<br />

Fuente: INE. 2009<br />

319


ANEXOS<br />

Cuestionario<br />

CUESTIONARIO:<br />

Percepción e imagen de las personas sin hogar<br />

entre los habitantes de las grandes ciudades españolas<br />

P1.- ¿Conoce, ha tenido algún tipo de relación o algún<br />

contacto con la gente que vive en las calles de su<br />

ciudad?<br />

1. No. Intento no mirarlos. Les ignoro.<br />

2. Me fijo alguna vez en ellos y en ocasiones me pregunto<br />

por su vida.<br />

3. Les observo con frecuencia y reflexiono sobre su<br />

situación.<br />

4. Conozco a alguno de ellos y/o colaboro para mejorar su<br />

situación.<br />

P2.- ¿Cual cree Ud. que sería el nombre más adecuado<br />

para las personas que viven en la calle?<br />

1. Personas sin techo<br />

2. Vagabundos<br />

3. Indigentes<br />

4. Mendigos<br />

5. Personas sin hogar<br />

6. Transeúntes<br />

7. Pordioseros<br />

8. Otro ¿Cual? --------------------------<br />

320


ANEXOS<br />

P3/P8.- ¿Cual es su grado de acuerdo con cada una de<br />

las siguientes expresiones?<br />

(1: Total desacuerdo; 5: Total acuerdo)<br />

Si viven en la calle es porque se lo han buscado<br />

Su principal ocupación es la de mendigar<br />

En general ellos no son violentos. Al revés, corren<br />

riesgos de ser agredidos<br />

La mayoría de ellos son enfermos mentales<br />

Los indigentes son personas molestas y peligrosas<br />

Cualquiera de nosotros, en un momento dado,<br />

puede terminar viviendo en la calle<br />

P9.- Imagine que el Ayuntamiento va a poner en marcha<br />

en su barrio un Centro de Día o un Albergue para<br />

personas sin techo. ¿Cómo respondería Ud.?<br />

1. Me opondría totalmente<br />

2. Me resultaría indiferente<br />

3. Lo aceptaría sin ningún problema<br />

P10.- ¿Cree que las personas que viven en la calle, si<br />

reciben la ayuda necesaria, pueden reintegrarse<br />

plenamente en la sociedad?<br />

1. No. En ningún caso.<br />

2. En muy pocos casos<br />

321


ANEXOS<br />

3. En bastantes casos<br />

4. En la mayoría de los casos.<br />

_______________________________<br />

P11.- ¿Cada cuanto tiempo lee Ud. la prensa (escrita y/o<br />

digital)?<br />

1. Nunca leo periódicos.<br />

2. Una vez al mes, aproximadamente.<br />

3. Una vez a la semana.<br />

4. Dos o tres días a la semana.<br />

5. Cuatro o cinco días a la semana<br />

6. Todos los días<br />

P12.- ¿Lee Ud. alguno de los siguientes periódicos<br />

(escritos y/o digitales)?<br />

(Respuesta múltiple)<br />

1. El País<br />

2. El Mundo<br />

3. ABC<br />

4. La Vanguardia de Barcelona<br />

5. La Voz de Galicia<br />

6. 20 Minutos<br />

7. Otros<br />

P13.- ¿Cuál es su nivel de estudios?<br />

1. Sin estudios<br />

322


ANEXOS<br />

2. Estudios primarios<br />

3. Estudios secundarios<br />

4. Bachillerato/FP<br />

5. Estudios superiores<br />

P14.- ¿Cuál es actualmente su ocupación principal?<br />

1. En activo. Trabajador asalariado o autónomo.<br />

2. En activo. Directivo, ejecutivo<br />

3. Estudio y trabajo<br />

4. Solo estudio<br />

5. En paro, cobrando desempleo<br />

6. En paro, sin cobrar desempleo<br />

7. Sus labores<br />

8. Jubilado<br />

9. Otras situaciones.<br />

P15.- Por último, ¿podría decirme cuáles son sus<br />

creencias religiosas?<br />

1. Católico practicante<br />

2. Católico no practicante<br />

3. Creyente en otra religión<br />

4. Agnóstico<br />

5. Ateo<br />

6. Indiferente<br />

(Variables muestrales)<br />

323


ANEXOS<br />

P16.- Sexo<br />

1. Hombre<br />

2. Mujer<br />

P17.- Edad<br />

1. De 18 a 30 años<br />

2. De 31 a 50 años<br />

3. De 51 a 65 años<br />

4. Más de 65 años<br />

P18.- Ciudad<br />

1. Madrid<br />

2. Barcelona<br />

3. Valencia<br />

4. Sevilla<br />

5. Zaragoza<br />

6. Málaga<br />

7. Bilbao<br />

8. Murcia<br />

9. Las Palmas de Gran Canaria<br />

10. Palma de Mallorca<br />

324


ANEXOS<br />

Anexos al Capítulo 5<br />

El trabajo de campo<br />

La primera fase del trabajo de campo específico para la realización de las<br />

entrevistas se prolongó durante el periodo comprendido entre los meses de<br />

Mayo a Julio de 2006. La fase previa de captación para la realización de las<br />

entrevistas a indigentes ocupo los tres meses anteriores (Febrero a Abril de<br />

2006). La realización de las cuatro entrevistas a profesionales no presentó<br />

ningún tipo de incidencia operativa o metodológica. El acceso a los indigentes<br />

que respondían a los perfiles establecidos, una vez realizadas las entrevistas a<br />

expertos, resultó de una gran dificultad. Expresamente se había señalado el<br />

criterio metodológico de no acudir a albergues o centros de día para<br />

establecer contacto con los potenciales entrevistados. Ello habría facilitado<br />

enormemente el contacto y aplicación de las entrevistas, pero nos habría<br />

entregado discursos previsiblemente lastrados por la dependencia y la<br />

proximidad de lo institucional. Esos relatos viciados o “cautivos” corrían el<br />

riesgo de encontrarse atravesados por un sesgo incompatible con la narración<br />

de vivencias espontáneas y honestamente transmitidas. El proceso, lento y<br />

paciente, terminó concretándose en la apertura de dos vías de contacto que<br />

facilitaban el acceso a indigentes que respondían a los diversos perfiles y,<br />

además, se mostraban dispuestos a ser entrevistados. De este modo, sin que<br />

hubiera sido establecido de antemano, la realización de las entrevistas se ha<br />

enmarcado en un auténtico y genuino proceso de investigación participante<br />

que, junto a las entrevistas, ha aportado una parte significativa de la<br />

325


ANEXOS<br />

información obtenida. Las diez entrevistas realizadas totalizan unas dieciséis<br />

horas de grabación. Sin embargo, son muchas más las horas de trabajo de<br />

campo efectivo y eficaz.<br />

La segunda fase del trabajo de campo tuvo lugar entre los meses de Agosto de<br />

2009 y Enero de 2010. Durante esta fase se procedió a la recogida de datos<br />

para el análisis de contenido de prensa, se realizó la encuesta telefónica a la<br />

población de las diez principales ciudades españolas, se realizaron dos nuevas<br />

entrevistas a expertos y tuvo lugar un grupo de discusión con personas sin<br />

hogar<br />

Ficha técnica grupo de discusión<br />

Ficha técnica del grupo de discusión (GDPSH)<br />

Lugar de realización: Centro de Acogida Padre Damián. Salamanca<br />

Fecha: 2 de Agosto de 2010<br />

Duración: 74 minutos<br />

Participantes: Seis personas sin hogar acogidas en el Albergue:<br />

- (GDPSH1) Csaba, 46 años, separado, tres semanas de<br />

vida en la calle, un año y medio en Albergue<br />

- (GDPSH2) Luis P., 45 años, soltero, dieciséis meses de<br />

326


ANEXOS<br />

vida en la calle, dos años en Albergue<br />

- (GDPSH3) Agustín, 48 años, divorciado, una semana<br />

de estancia en la calle, dos años y medio en Albergue<br />

- (GDPSH4) Richard, 41 años, soltero, sin experiencia de<br />

calle, un año en Albergue<br />

- (GDPSH5) Luis A., 44 años, casado, una semana<br />

viviendo en la calle, cinco meses en Albergue<br />

- (GDPSH6) Susana, 49 años, separada, un mes en la<br />

calle, ocho meses en Albergue<br />

7.3.3 Guión entrevistas y perfiles expertos<br />

- Perfiles actuales y tradicionales de los indigentes. Cambios más significativos<br />

-Factores y/o causas que confluyen en la llegada a la calle. Aspectos comunes y<br />

diferenciales de los procesos.<br />

- Dinámica de la vida en la calle. Convivencia. Conflictos. Relación con los<br />

extranjeros indigentes. La situación de la mujer<br />

- Valoración de las expectativas de futuro. Tipificación de los posibles procesos.<br />

Evaluación de los resultados “rehabilitadores” obtenidos por las ong,s,<br />

fundaciones … El papel de la administración pública.<br />

327


ANEXOS<br />

Perfiles Entrevistas a expertos (EE)<br />

* EE1. Carmen Sánchez. Directora de CEDIA. Centro de día y de noche<br />

de Cáritas. Popularmente conocido como “Calor y café”. (26/5/06)<br />

* EE2. Ana Muñoz. Responsable de comunicación de Solidarios para el<br />

Desarrollo. (1/6/06)<br />

* EE3. Saúl Rodríguez. Responsable de comunicación y webmaster de la<br />

Fundación Rais (6/6/06)<br />

* EE4. Carmen Luque. Trabajadora <strong>social</strong>, responsable del Programa de<br />

acompañamiento de la Asociación Realidades (12/6/06)<br />

* EE5. Alfonso García. Trabajador y educador <strong>social</strong>. Siete años como<br />

Director del Centro de Acogida Padre Damián, de Salamanca. (21/11/09)<br />

* EE6. Javier Alonso. Sociólogo. Miembro fundador y director de EDIS<br />

(Equipo de Investigación Sociológica). Numerosos trabajos y publicaciones<br />

sobre bienestar <strong>social</strong>, marginación y pobreza (17/07/010)<br />

- Todas las entrevistas a informantes cualificados fueron realizadas en las<br />

sedes de las respectivas entidades a las que pertenecen.<br />

328


ANEXOS<br />

Guión de entrevistas y perfiles de personas sin hogar entrevistadas<br />

Guión entrevistas abiertas semiestructuradas a personas sin hogar (basado en<br />

encuesta Pedro J. Cabrera. 1996)<br />

- Lugar de origen, estado civil, lugar de residencia actual<br />

- Espacios y tiempos en la calle (sucesivos y/o discontinuos)<br />

- Experiencia en relación con recursos y servicios (especialmente albergues<br />

y comedores).<br />

-Valoración de recursos y actuaciones publica/privadas<br />

- Trayectoria de formación reglada/no reglada<br />

- Experiencia laboral previa/ actual. Expectativas de futuro.<br />

- La vida en la calle en todos sus aspectos (asistir al relato y buscar la<br />

pormenorización)<br />

- La experiencia afectiva: amigos, pareja, carencias, futuro …<br />

329


ANEXOS<br />

- La salud personal y del entorno. Valoración de la cobertura sanitaria<br />

- El relato personal de la <strong>trayectoria</strong>: ayer/hoy/mañana<br />

- Aportación de cuestiones no señaladas anteriormente<br />

Entrevistas a personas sin hogar (ESH):<br />

* ESH1. Paco. Plaza de Chamberí. (26/6/06)<br />

Tiene 53 años. Lleva dos meses “viviendo” en el mismo banco. En total, unos<br />

tres años en la calle, en dos fases. No va a albergues ni comedores. No cobra el<br />

REMI. Obtiene suficientes ingresos en la Iglesia que tiene en “exclusiva”. Por la<br />

Iglesia y el barrio conoce a mucha gente ilustre. Le dan comida en carnicerías,<br />

etc. Un amigo “ingeniero” le proporciona toda la ropa que necesita “de<br />

marca”. Una vecina del barrio le lava y plancha la ropa. Se ducha en los baños<br />

públicos de Cuatro Caminos. El desencadenante de su situación fue la<br />

separación matrimonial. Ha sido torero, fontanero, actor de reparto, estuvo en<br />

las GOES (Grupo de Operaciones Especiales), pasó a la Policía Secreta. Fue<br />

prejubilado por las graves lesiones que recibió en una agresión de miembros<br />

de Fuerza Nueva. Luego trabajó como aparcacoches en Mutua Madrileña.<br />

Tiene una casa embargada judicialmente y que no puede habitar. El embargo<br />

se debería a problemas fiscales causados por el administrador de una sociedad<br />

330


ANEXOS<br />

que falsificó su firma en diversos documentos. El administrador está huido.<br />

Aún no ha tenido lugar el juicio.<br />

Espera recuperar su casa, volver a trabajar y salir de la calle. Lleva siempre<br />

consigo una bolsa de viaje grande con todos sus enseres, que incluyen una<br />

pequeña televisión. Tiene teléfono móvil. El relato de su vida resulta confuso y<br />

complejo, a pesar de mostrar una cierta coherencia. Su nivel comunicativo es<br />

notable, partiendo de una baja cualificación académica. Responde a un perfil<br />

mixto entre la indigencia tendencial y sobrevenida.<br />

* ESH2. Peter Cluster. Plaza del Dos de Mayo (29/6/06)<br />

Tiene 52 años. Es un notable caso de indigencia sobrevenida. Ha estado unos<br />

dos años en la calle (cajero, calle, albergue). De nivel académico y socioeconómico<br />

elevado. Promotor de empresas y responsable de comunicación y<br />

marketing en importantes <strong>org</strong>anismos públicos y privados. Separado, con dos<br />

hijos. Hace años que no se comunica con ellos. Llegó a la calle como<br />

consecuencia de un proceso generado por una depresión no diagnosticada, ni<br />

tratada. Como señala elocuentemente, la misma tarjeta con la que en unas<br />

navidades pagaba la cena en el Palace ¿o era el Ritz?), le resulto útil las<br />

navidades siguientes para abrir las puertas de un cajero en el que albergarse.<br />

Cuando comenzó a superar el momento crítico de la depresión, creó una<br />

bitácora que continúa en activo, valiéndose de los escasos medios informáticos<br />

de albergues y centros de día. Ha logrado con ello difundir la problemática de<br />

los excluidos callejeros y hacerse acreedor del apelativo de “indigente<br />

mediático”. Colabora en un exitoso programa de radio y es reclamado con<br />

frecuencia por diversos medios de comunicación. Recientemente se ha<br />

331


ANEXOS<br />

convertido en ex-indigente, ya no vive en la calle, pero ha creado una<br />

asociación “Desde la calle” cuyos ambiciosos proyectos van concretándose en<br />

torno a un objetivo “empresarial” insobornable: lograr sacar de la calle al<br />

mayor número de gente posible. Su discurso se afirma a partir de una sólida<br />

formación y amplia experiencia empresarial: es radical en su crítica a las<br />

formas y modos de gestión de las entidades, publicas y/o privadas, que actúan<br />

en el ámbito de la indigencia.<br />

* ESH3. Anís estrellado. Plaza de Tribunal (30/6/06)<br />

Puede tener en torno a unos 40 años y sabe mantener un peculiar hermetismo<br />

sobre su “anterior” vida privada a lo largo de toda la entrevista. Logra<br />

introducir algo de misterioso y cabalístico en el proceso que la ha llevado a la<br />

calle. Tal vez ello sea debido en parte a su indudable curiosidad intelectual. Sin<br />

conocer su formación académica, es evidente que posee un bagaje como<br />

autodidacta que se traduce en la originalidad de su discurso. Posee un notable<br />

conocimiento de diferentes disciplinas “alternativas”. Su llegada a la calle se<br />

produjo de manera brusca y traumática, como consecuencia de un desahucio<br />

que jamás habría podido imaginar. La sana ingenuidad y, a la vez, fortaleza con<br />

la que parece abordar los reveses del destino, puede encontrarse también en<br />

la base de su sobrevenida indigencia. Todo parece indicar que su pareja, en un<br />

determinado momento, utilizó artes y recursos en su propio beneficio, a<br />

consta de dejar a nuestra entrevistada en la mismísima cuneta. Es crítica con la<br />

labor de las entidades que trabajan en el espacio <strong>social</strong> de la indigencia, pero<br />

raramente se observa en sus palabras restos de rencor o de odio. Positiva sus<br />

actuales infortunios y los interpreta como una fase en su proceso de<br />

aprendizaje y de maduración personal. Su discurso es lúcido, coherente y<br />

332


ANEXOS<br />

original. Al igual que la sencilla elegancia con la que viste. Es otro evidente caso<br />

de indigencia sobrevenida. Su mente y actividad se orientan hacia un futuro<br />

mejor al que en ningún caso va a renunciar.<br />

* ESH4. Rosalinda. Zona Glorieta de Bilbao (3/7/06)<br />

Tal vez se encuentre en la cincuentena avanzada o haya iniciado la sesentena.<br />

Es hija de españoles inmigrados a México, en cuya casa supo de niña de<br />

ilustres refugiados como Luís Buñuel o León Felipe. Su cultura y formación la<br />

orientan, junto a su marido, hacia las producciones multimedia y<br />

cinematográficas. Cuando ambos llegan a España trabajan largos años en<br />

actividades relacionadas con su profesión. Cuando su marido fallece<br />

prematuramente, coincidiendo con un declive en el mercado publicitario, ella<br />

decide montar dos restaurantes que, tras el inicial éxito, fracasan<br />

sucesivamente. (En un caso, por las eternas obras que entonces se abordaron<br />

para rehabilitar totalmente el barrio de Maravillas, en el entorno de la Plaza<br />

del Dos de Mayo. En el segundo caso, por problemas insolubles con el casero,<br />

propietario de la totalidad de la finca). Coincidiendo con su fracaso empresarial<br />

es sometida a una compleja y delicada operación. Cuanto sale del hospital,<br />

necesitada de un largo periodo de rehabilitación, ha perdido también la casa<br />

que tenía alquilada como consecuencia de la demora en el pago de los<br />

alquileres. Apenas logra salvar a su gato en el piso de una amiga en el que ella<br />

misma logra alojarse provisionalmente. Su propio pudor le impide acudir a los<br />

viejos y famosos antiguos amigos. Sólo queda la calle, en la que ella nunca<br />

habría imaginado habitar. Se asea en los lavabos de los Vip,s o centros<br />

comerciales y muestra en su apariencia la elegancia que nunca la ha<br />

333


ANEXOS<br />

abandonado (en general, la gente de la calle viste de manera bastante<br />

convencional, como resultado de acudir a los roperos y al “shopping<br />

contenedor”). Pero Rosalinda se adorna con floridos trajes mexicanos y con<br />

discretos pero elegantes abalorios. Cuando se sienta en un banco, los colegas<br />

de la calle no la reconocen como tal, se dirigen a ella como a una señora. Es<br />

evidente que ese lugar no estaba escrito para ella, y todas sus palabras<br />

evidencian la situación de desconcierto en la que se encuentra. Acostumbrada<br />

a las relaciones públicas, le resulta incomprensible el estilo en el trato y en la<br />

labor que desarrollan los trabajadores <strong>social</strong>es. No puede comprender que los<br />

recursos y personas que los atienden descansen en verano, cuando la<br />

indigencia no sabe de vacaciones. Elude los albergues y, cuando reúne la<br />

cantidad suficiente de dinero, se aloja en un hostal. No se plantea la<br />

posibilidad de retornar a su país como derrotada. Está convencida de que<br />

saldrá adelante y será ella misma quién logre superar sus “pendejadas”.<br />

* ESH5. Enrique. Plaza de Oriente (5/7/06)<br />

Tiene 35 años y es alcohólico. Enrique responde por completo a los rasgos que<br />

hemos descrito como propios de la indigencia tendencial. Abandonó de<br />

preadolescente, por causas no claramente explicitadas, su familia de origen.<br />

Abandonó pocos años después a su familia de acogida. Y comenzó a dar<br />

tumbos por la piel de toro. Conoce multitud de albergues, plazas y trabajos<br />

esporádicos en las más diversas ciudades de España. Transmite la sensación de<br />

que siempre se sintió extranjero en todos los lugares (según él, en todas partes<br />

le rechazaban por ser madrileño). Frustrado y de retorno a su ciudad de origen<br />

parece haber conocido todo tipo de acosos policiales cuando intentaba<br />

pernoctar en un parque o una plaza, a pesar de su discreta, sencilla y pacífica<br />

334


ANEXOS<br />

apariencia. Se ha convertido en dependiente de los recursos <strong>social</strong>es a lo largo<br />

de diversa etapas y ciudades. Tal vez por eso su discurso es complaciente y<br />

nada beligerante hacia las entidades con las que actualmente tiene relación.<br />

Aspira a superar la dependencia y reincorporarse progresivamente a la vida<br />

laboral<br />

* ESH6. Juanma. Plaza de Tribunal (9/7/06)<br />

La Plaza de Tribunal es uno de los referentes tradicionales de la indigencia<br />

(junto a Las Salesas, Tirso de Molina, la Plaza de Oriente, el entorno de las<br />

estaciones de Príncipe Pío y Atocha …). Juanma es un personaje obligado para<br />

quién desee encontrar un espacio de acogida en la plaza de Tribunal. De<br />

hecho, describe con precisión como han ido repartiéndose los espacios de la<br />

plaza entre los indigentes tradicionales, los “negros” que llegaron más<br />

adelante, y los polacos que tienen toda una suite en uno de los rincones más<br />

protegidos. Juanma ha aprendido a poner los huevos en varias cestas (después<br />

de diversas perdidas de pertenencias a manos de barrenderos y policías, ahora<br />

reúne sus trastos en varios rincones seguros). Si por él fuera, montaría un<br />

auténtico equipo de campaña en pleno corazón de Madrid. No en vano fue<br />

soldado en la primera guerra del Golfo. A falta de mayor intendencia, instala su<br />

pequeña cocina desmontable y hace café o cocina para todos aquellos que<br />

pasan sus severos controles de amistad. Juanma tiene diagnosticado un<br />

trastorno bipolar. Según él, es el único loco que sabe que está loco, y además<br />

cobra por ello. Su infancia es digna de ser narrada por Charles Dickens. El<br />

cúmulo de sus desgracias se inicia en una casa en la que no existe el padre y de<br />

la que la madre se ausenta con frecuencia para cumplir con sus múltiples<br />

compromisos como trabajadora del amor. En ocasiones, a modo de pedagogía<br />

335


ANEXOS<br />

intensiva, recibe en la cabeza los golpes de los tacones de aguja de su<br />

progenitora. Nuestro protagonista en un hombre deteriorado por una densa<br />

vida de dura supervivencia. Su relato es obsesivo, circular y ajeno a todos los<br />

criterios de la lógica. Resulta muy difícil obtener de él información que no<br />

tenga sobrescrita. Es otro caso evidente de indigencia tendencial.<br />

336


PÁGINAS WEB CONSULTADAS<br />

PÁGINAS WEB CONSULTADAS<br />

- OJD Organismo para la Justificación de la Difusión<br />

Control de difusión y tirada de gran número de publicaciones<br />

http://www.ojd.es/<br />

- EGM/AIMC Estudio General de Medios<br />

Investigaciones sobre difusión y perfil de medios y lectores<br />

http://www.aimc.es/<br />

- Feantsa<br />

Federación Europea de Asociaciones que trabajan con los Sin Hogar<br />

http://www.feantsa.es<br />

- Faciam<br />

Federación de Asociaciones de Centros para la Integración y Ayuda de<br />

Marginados<br />

http://www.faciam.<strong>org</strong>/<br />

- EAPN<br />

Red española de lucha contra la pobreza y la exclusión <strong>social</strong><br />

http://www.eapn.es<br />

- enred.psh<br />

Red Nacional de Entidades que trabajan con Personas Sin Hogar<br />

http://www.enredpsh.<strong>org</strong>/principal.php3<br />

342


PÁGINAS WEB CONSULTADAS<br />

- Cáritas<br />

http://www.caritas.es/<br />

- Fundación Rais<br />

http://www.fundacionrais.<strong>org</strong>/<br />

- Asociación Realidades<br />

http://www.asociacionrealidades.<strong>org</strong>/<br />

- Solidarios para el Desarrollo<br />

http://www.ucm.es/info/solidarios/<br />

- Con cartones por la calle<br />

Página de voluntarios vinculados a la Fundació Arrels<br />

http://enriquerichard.es/<br />

- El Rincón de Bubú<br />

Página mantenida por una persona sin hogar<br />

http://elrincondebubu.blogspot.com/<br />

- CAM<br />

http://www.map.es<br />

- Ayuntamiento de Madrid<br />

http://www.munimadrid.es<br />

- INE<br />

http://www.ine.es<br />

343


BIBLIOGRAFÍA<br />

BIBLIOGRAFÍA<br />

AIMC/EGM 2010 “Marco general de los medios en España”<br />

Alonso. L.E 2004 “Hacia una fundamentación de las políticas locales de<br />

cohesión <strong>social</strong>”. En Un despacho sin puertas , Coord. José Manuel Caballol.<br />

Madrid. Fundación Rais y Obra Social Cajamadrid.<br />

Arranz I. 2006. Contreras B. et Sánchez A. 2007 y 2008 “Las personas sin hogar<br />

en la prensa escrita”. Madrid. Colectivo enRed<br />

Bachiller S. 2008 “Exclusión <strong>social</strong>, desafiliación y usos del espacio. Una<br />

etnografía con personas sin hogar en Madrid” Tesis doctoral leída en la<br />

Universidad Autónoma de Madrid. No publicada<br />

Bachiller,S. 2009. “Significados del espacio público y exclusión de las personas<br />

sin hogar como un proceso de movilidad forzada”. Madrid. REIS. Nº 128, pp.<br />

125-137<br />

Bardin, L. 1996 “Análisis de contenido”. Madrid. Akal<br />

Barroso. C. 1987 “Los transeúntes en España” Madrid. Cáritas<br />

Bauman, Z. 2005 “Vidas desperdiciadas. La modernidad y sus parias”.<br />

Barcelona. Paidós<br />

Benito, A. 2001 “Diccionario de periodismo”. Madrid. Acento.<br />

Berelson, Lazaferd y Gaudet 1962 “El pueblo elige. Cómo decide el pueblo en<br />

una campaña electoral”. Ediciones 3. Buenos Aires<br />

344


BIBLIOGRAFÍA<br />

Berger. P, Luckmann 1986 “La construcción <strong>social</strong> de la realidad”. Buenos<br />

Aires. Amorrortu<br />

Berrocal S., Rodriguez-Maribona C. 1998 “Análisis básico para la prensa<br />

diaria. Manual para aprender a leer periódicos” Madrid. Editorial Universitas.<br />

Blau, Joel. 1992 “The Visible Poor.: Homelessness in the United States”. New<br />

York. Oxford University Press.<br />

Brajnovic L. 1974 “Tecnología de la información”. Pamplona. Eunsa.<br />

Caballol, J. M. 2004 En “Un despacho sin puertas. Trabajo de calle con personas<br />

sin hogar”. VV.AA. Madrid. Fundación Rais.<br />

Cabrejas, R. et al. 2004 “Proceso de exclusión y personas sin hogar en La Rioja”.<br />

Gobierno de La Rioja.<br />

Cabrera, P, J. 2004 “La imagen de las personas sin hogar en dos diarios”.<br />

Madrid. Feantsa<br />

Cabrera, P. J. 1998. “Huéspedes del aire. Sociología de las personas sin hogar<br />

en Madrid”. Madrid. UPCO<br />

Camarero, J. 1998 “El déficit <strong>social</strong> neoliberal. Del Estado <strong>social</strong> neoliberal a la<br />

sociedad de la exclusión” Santander. Sal Terrae.<br />

Casado, D. 1976 “La pobreza en la estructura <strong>social</strong> de España”. Madrid. Ayuso<br />

Castel .R 1995 “Les metamorphoses de la question <strong>social</strong>” . París. Fayard<br />

Cea D,Ancona, M. A. 2001 “Metodología cuantitativa. Estrategias y técnicas de<br />

investigación <strong>social</strong>”. Madrid, Síntesis Sociología<br />

Daly, M. 1993 “Segundo Informe del Observatorio europeo para los sin techo”.<br />

345


BIBLIOGRAFÍA<br />

Davis. L. S. (dir.) 2004 “Enciclopedia Internacional de Ciencias Sociales”.<br />

Madrid. Aguilar<br />

Del Campo,S et al. 2001 “Historia de la sociología española”. Barcelona. Ariel<br />

Equipo DIS. 1975 “Los transeúntes. Desarraigo y marginación <strong>social</strong>” Revista<br />

Documentación Social. Nº 20. Madrid. Cáritas.<br />

EDIS 1984 “Pobreza y marginación”. En “Documentación <strong>social</strong>”. Nº 56-57.<br />

Madrid. Cáritas<br />

Fundación Assís. 2006 “Violencia directa, violencia estructural, violencia<br />

cultural contra las personas en situación de sin hogar en España”. Barcelona. F.<br />

Assis<br />

Fundación Rais (Coord.) 2010 “Guía de Estilo para Periodistas: MIRA A LAS<br />

PERSONAS SIN HOGAR”. Madrid.<br />

Gabardo J. A. 2010 “Internet, en medio de los medios” Madrid. AIMC<br />

Garcia Ferrando, M. et al. 2000. “El análisis de la realidad <strong>social</strong>. Métodos y<br />

técnicas de investigación”. Madrid. Alianza<br />

García Roca J. 1987 “Cristianismo y marginación <strong>social</strong>” Bilbao. Cáritas<br />

García Roca J. 2004 En “Un despacho sin puertas. Trabajo de calle con personas<br />

sin hogar”. Madrid. Fundación Rais.<br />

INE 2005 “Encuesta sobre las personas sin hogar” Madrid. INE<br />

Jensen, K.B. 1997 “La semiótica <strong>social</strong> de la comunicación de masas”. Bosch<br />

Comunicación.<br />

Manovel, M. J. 1984 “En torno a las personas sin techo” Madrid. Revista<br />

“Cáritas” Nº 110-111<br />

346


BIBLIOGRAFÍA<br />

Martín J.A. 1991 “Proyecto y diseño de un diario” Madrid. Ciencia3.<br />

Martín Barroso, Clemente 1987 “Los transeúntes en España”. Madrid. Cáritas.<br />

Muñoz, M; Vázquez, C; Vazquez, J.J. 2003 “Los límites de la exclusión”. Madrid.<br />

Ediciones Témpora.<br />

Noelle-Neumann 1995 “La espiral del silencio. La opinión pública: Nuestra piel<br />

<strong>social</strong>”. Barcelona. Paidós.<br />

Núñez Ladevezè, L. 1991 “Manual para periodismo” Barcelona. Ariel.<br />

OCDE 2005 “Una mirada a la educación” Bruselas<br />

Renes, Víctor. 1993 “Luchar contra la pobreza hoy”. Madrid. Ediciones HOAC.<br />

Revista Milhistorias. (abril/diciembre de 2005) Nrs. 1, 2, 3 y 4. Fundación RAIS.<br />

Rifkin, J. 1990 “Entropía: Hacia el mundo invernadero”. Barcelona. Urano<br />

Rubio M. 2008 “Ahora que estamos muertos”. Barcelona. Carena<br />

Sánchez Morales M. R. 2004 “Los inmigrantes “sin hogar” en España: un caso<br />

extremo de exclusión <strong>social</strong>” Madrid. Revista del Ministerio de Trabajo y<br />

Asuntos Sociales. Nº 55.<br />

Sánchez Morales M. R. 1999 “La población “sin techo” en España: Un caso<br />

extremo de exclusión <strong>social</strong>”. Madrid. Fundación Sistema.<br />

Sánchez M. 2003 “A ciegas. Milhistorias de la calle”. Madrid. Fundación Rais<br />

Sánchez, M. 2005 “En dos: Un viaje a las fronteras”. Madrid. Fundación Rais.<br />

Salinas, F. 1993 “Informe final del Observatorio español de los “sin techo”.<br />

Madrid. Cáritas.<br />

347


BIBLIOGRAFÍA<br />

Seoane, J. y Herrera, M. 1989 "Actitudes e ideología política" en Creencias,<br />

actitudes y valores, Rodríguez, Á. y Seoane, J. Granada. Coord. Alhambra<br />

Universidad.<br />

Sinova J. 1998 En prólogo a “Análisis básico de la prensa diaria”. Madrid.<br />

Universitas.<br />

Tezanos.J.F. 2001 “La sociedad dividida. Estructuras de clase y desigualdades<br />

en las sociedades tecnológicas” Madrid. Biblioteca Nueva<br />

Tezanos, J. F. (ed.) 2004 “Tendencias en desigualdad y exclusión <strong>social</strong>”.<br />

Madrid. Sistema<br />

Torregrosa, J.R. 1989 “Sobre la identidad personal como identidad <strong>social</strong>”<br />

Van Dijk 1997 “Racismo y análisis crítico de los medios” Barcelona. Paidós.<br />

Varela,J y Álvarez-Uría,F. 1989 “Sujetos frágiles. Ensayos de sociología de la<br />

desviación”.FCE<br />

Wacquant L. 2007 “Los condenados de la ciudad” Argentina. Siglo XXI Editores.<br />

Williams, F. 1998 “Agency and Structure Revisited: Rethinking Poverty and<br />

Social Exclusion” en BARRY, Monica y HALLET, Christine: Social Exclusion and<br />

Social Work, Hampshire: Russel House Publishing<br />

Wolf M. 1994 “Los efectos <strong>social</strong>es de los media”. Barcelona. Paidós<br />

VV. AA.: 2001 “Literatura y asfalto”. Madrid. Fundación RAIS<br />

VV. AA.: 2003 “Un acuerdo con luz”. Madrid. Fundación Iberdrola y Fundación<br />

RAIS<br />

348


ÍNDICE DE CUADROS<br />

ÍNDICE DE CUADROS<br />

Tabla 1.1 Rasgos de las nuevas formas de marginación 6<br />

Tabla 1.2 Factores de marginación y exclusión 25<br />

Tabla 1.3 El perfil de la exclusión <strong>social</strong> 28<br />

Tabla 2.1 Hipótesis 38<br />

Tabla 2.2 Métodos y técnicas utilizados 40<br />

Tabla 3.1 Diez principales diarios digitales en España 60<br />

Tabla 3.2 Lectores de prensa escrita y digital 61<br />

Tabla 3.3 Evolución en el uso de formatos 61<br />

Tabla 3.4 Información sobre PSH según diarios 74<br />

Tabla 3.5 Información según secciones del diario 79<br />

Tabla 3.6 Distribución en géneros informativos 81<br />

Tabla 3.7 Géneros periodísticos según tipo de diario 83<br />

Tabla 3.8 Amplitud o tamaño de las informaciones 84<br />

Tabla 3.9 Ubicación de las informaciones 86<br />

Tabla 3.10 Complemento gráfico a la información 88<br />

Tabla 3.11 Fuentes de la información 90<br />

Tabla 3.12 Denominación textual del colectivo 93<br />

Tabla 3.13 Sujetos de la información 97<br />

Tabla 3.14 Sujeto/s de la información según diarios 98<br />

Tabla 3.15 Contenidos básicos de la información 100<br />

Tabla 4.1 Sexo de las personas entrevistadas 174<br />

Tabla 4.2 Edad de las personas entrevistadas 174<br />

Tabla 4.3 Nivel de estudios 176<br />

Tabla 4.4 Ocupación principal 178<br />

Tabla 4.5 ¿Conoce a la gente que vive en las calles de su ciudad? 180<br />

Tabla 4.6 ¿Cuál es el nombre más adecuado para las estas personas? 184<br />

Tabla 4.7 Grado de acuerdo con estereotipos 187<br />

Tabla 4.8 ¿Aceptaría en su barrio un Albergue para personas sin hogar? 195<br />

349


ÍNDICE DE GRÁFICOS<br />

ÍNDICE DE GRÁFICOS<br />

Gráfico 3.1 Información según tipo de diario 75<br />

Gráfico 3.2 Unidades informativas según meses 76<br />

Gráfico 3.3 Volumen informativo según diario y mes 77<br />

Gráfico 3.4 Distribución en secciones según diario 80<br />

Gráfico 3.5 Géneros periodísticos según diario 83<br />

Gráfico 3.6 Amplitud de la información según prensa diaria 85<br />

Gráfico 3.7 Ubicación de las informaciones según tipo de diario 86<br />

Gráfico 3.8 Acompañamiento gráfico según tipo de diario 89<br />

Gráfico 3.9 Fuentes informativas según diario 91<br />

Gráfico 3.10 Denominaciones predominantes 94<br />

Gráfico 3.11 Correspondencia entre denominación y diario 96<br />

Gráfico 3.12 Sujetos de la información según tipo de diario 99<br />

Gráfico 3.13 Contenidos básicos de la información según diarios 102<br />

Gráfico 3.14 Temáticas predominantes según protagonistas de la información 103<br />

Gráfico 4.1 Entrevistas según ciudades 173<br />

Gráfico 4.2 Edad y género de las personas entrevistadas 175<br />

Gráfico 4.3 Tiempo dedicado a la lectura de prensa 177<br />

Gráfico 4.4 Creencias religiosas 179<br />

Gráfico 4.5 Creencias según actitud ante las PSH 182<br />

Gráfico 4.6 Denominaciones del colectivo según prensa y ciudadanos 185<br />

Gráfico 4.7 Grado de acuerdo con diversos estereotipos 188<br />

Gráfico 4.8 Si viven en la calle es porque se lo han buscado 189<br />

Gráfico 4.9 Su principal ocupación es la de mendigar 190<br />

Gráfico 4.10 En general, corren riesgo de ser agredidos 191<br />

Gráfico 4.11 La mayoría son enfermos mentales 192<br />

Gráfico 4.12 Son personas molestas y peligrosas 193<br />

Gráfico 4.13 Cualquiera de nosotros puede terminar en la calle 194<br />

Gráfico 4.14 Conocimiento de PSH y aceptación de un Albergue 196<br />

350


APÉNDICE<br />

APÉNDICE<br />

Qué es el AE2010<br />

El Parlamento Europeo y el Consejo Europeo, mediante la Decisión<br />

1098/2008/CE, de 22 de octubre de 2008, designaron el Año 2010 como Año<br />

Europeo de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social.<br />

El objetivo es transmitir a la sociedad europea el compromiso de la UE con las<br />

personas que viven en la pobreza y la exclusión <strong>social</strong> y hacerla reflexionar<br />

sobre los problemas a los que se tienen que enfrentar, así como fomentar la<br />

participación <strong>social</strong> en la prevención de la pobreza y la exclusión <strong>social</strong>.<br />

Qué objetivos pretende el AE2010<br />

Con el Año Europeo contra la pobreza y la exclusión <strong>social</strong> se busca conseguir<br />

los siguientes objetivos:<br />

Reconocimiento de derechos: Hacer visibles y reconocer el derecho de<br />

las personas que se encuentran en situación de pobreza y exclusión<br />

<strong>social</strong> a vivir con dignidad y a desempeñar un papel activo en la<br />

351


APÉNDICE<br />

sociedad, así como a participar como destinatarias en las políticas que<br />

se emprendan.<br />

Compartir la responsabilidad: Promover el apoyo <strong>social</strong> a las políticas<br />

de inclusión <strong>social</strong> enfatizando la responsabilidad colectiva e individual<br />

y fomentando el compromiso y la participación de todos los actores,<br />

tanto públicos como privados, en la lucha contra la pobreza y la<br />

exclusión <strong>social</strong>.<br />

Cohesión <strong>social</strong>: Trabajar por una sociedad más cohesiva y solidaria en<br />

la que nadie dude de los beneficios que tiene para toda la sociedad la<br />

erradicación de la pobreza, en el marco de un desarrollo sostenible y<br />

garantizado la igualdad de oportunidades.<br />

Compromiso y acción: Renovar el compromiso de la Unión Europea y<br />

sus Estados miembros respecto a la lucha contra la pobreza y la<br />

exclusión <strong>social</strong> e involucrar a todos los niveles políticos para conseguir<br />

la erradicación de la pobreza, impulsando con más fuerza la acción de<br />

los Estados miembros y de la Unión Europea en este ámbito.<br />

El Año Europeo en España<br />

Partiendo de las prioridades marcadas por la Unión Europea, cada uno de los<br />

Estados miembros ha elaborado un Programa Nacional con objetivos y<br />

actuaciones adaptadas a sus características, situación y necesidades.<br />

En el caso de España, el contexto general de actuación ya se definió en el<br />

Informe Nacional de Estrategias para la Protección Social y la Inclusión Social<br />

del Reino de España 2008-2010, y más concretamente en el Plan Nacional de<br />

352


APÉNDICE<br />

Acción para la Inclusión Social del Reino de España 2008-2010 (PNAin 2008-<br />

2010) que incluye dicho Informe.<br />

El PNAin 2008-2010 plantea dos objetivos estratégicos de actuación en la lucha<br />

contra la pobreza y la exclusión <strong>social</strong> en España:<br />

1. Fomentar la inclusión activa, es decir, impulsar la inserción laboral de<br />

las personas combinando este objetivo con una adecuada política de<br />

garantía de rentas y con el acceso a unos servicios de calidad,<br />

especialmente a los servicios educativos, entendiendo que estos<br />

factores se retroalimentan unos a otros.<br />

2. Abordar el impacto producido por el crecimiento de la inmigración y<br />

el envejecimiento de la población en la pobreza y la exclusión <strong>social</strong>,<br />

especialmente en una situación de crisis económica como la actual.<br />

Relacionados con esto objetivos estratégicos, y dentro del AE2010, se<br />

celebrarán en todo el territorio diversos eventos, jornadas, seminarios y<br />

conferencias, dirigidos a debatir, reflexionar y avanzar en la lucha contra la<br />

pobreza y la exclusión <strong>social</strong>, así como diversas actividades dirigidas a<br />

fomentar la participación activa de las personas en situación de pobreza y<br />

exclusión <strong>social</strong>.<br />

También se realizarán diversos estudios y análisis relacionados con la situación<br />

de especial vulnerabilidad y exclusión <strong>social</strong> en la que viven determinados<br />

colectivos, para profundizar en el conocimiento y múltiples factores que<br />

inciden en las diferentes situaciones de pobreza y exclusión <strong>social</strong>.<br />

353


APÉNDICE<br />

De la misma forma, se habilitarán diferentes instrumentos de comunicación<br />

con el objetivo de informar y difundir los objetivos del Año, de las actividades y<br />

eventos así como de sus principales resultados, conclusiones y evaluación final.<br />

354

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!