Vida - Volúmen 5 - Grupo ICE

II. Algunos elementos conceptuales de la Responsabilidad
Social Empresarial:
La Cumbre Mundial sobre Responsabilidad Social Corporativa,
celebrada en Johannesburgo en setiembre del 2002, define el
concepto como: “el desarrollo de las actividades de la empresa,
asumiendo la responsabilidad de los impactos que genera,
creando con ello valor para sus acciones y la sociedad a través
del empleo de buenas prácticas”.
Según La Fuente, presentado en (Fundación Ecológica y
Desarrollo, 2004) una definición de responsabilidad social
corporativa sería:“La adopción de criterios de Responsabilidad
Social Corporativa en la gestión empresarial entraña la
formalización de políticas y sistemas en los ámbitos económico,
social y medioambiental; también, la transparencia informativa
respecto a los resultados alcanzados en tales ámbitos; y,
finalmente, el escrutinio externo de los mismos. Se dice que
las organizaciones ejercen su responsabilidad social cuando
prestan atención a las expectativas que tienen sobre su
comportamiento sus diferentes grupos de interés”
De la definición anterior se aprecia que el concepto es amplio
e integra todas las acciones que una organización realiza.
Además, las empresas que aspiren a aplicar la responsabilidad
social deben estar dispuestas al escrutinio público y asumir una
posición proactiva, estableciendo mecanismos de rendición
de cuentas en todos los ámbitos. Otro elemento relevante
de la definición anterior es que las acciones verdaderamente
valoradas por la sociedad tienen un sustento social, cultural
e histórico, pues las expectativas surgen de esos elementos
mencionados. Así pues, lo que la sociedad costarricense puede
tener como expectativa del ICE en general y del sector eléctrico
en particular, puede ser más exigente de lo que esperaría de
otra organización en el campo socio-ambiental. Por lo tanto
la posibilidad de llenar las expectativas del ciudadano es más
difícil, requiriendo mayor esfuerzo y dedicación para conservar
la valoración positiva que en términos generales se tiene a la
fecha (Velazco, 2004).
Es importante tener en cuenta que la RSE es un nuevo
instrumento de intermediación que tiene la sociedad, que
muestra el interés de la colectividad y las empresas, ya no
solamente el Estado juega ese papel. Las acciones de las
organizaciones se ven recompensadas o castigadas en la
demanda de bienes y servicios por clientes más concientes,
para los cuales la valoración de la actuación ambiental y las
acciones responsables y solidarias en el campo social, pueden
ser elementos que inciden en sus procesos de decisión. (Núñez,
2003, Cárdenas y otros, 2005).
Otra dimensión que las empresas socio-ambientalmente
responsables pueden gestionar mejor, son las relaciones con
los grupos interesados. El sector eléctrico en particular, tiene
múltiples interacciones con comunidades, organizaciones
sociales, empresas, municipios y entes públicos, entre otros.
Estos grupos pueden tener incidencia en el desarrollo y
operación de las obras y actividades del sector eléctrico, por
lo cual una gestión socio-ambiental responsable, proactiva y de
avanzada es una inversión que puede dar importantes réditos.
Se considera que hay al menos tres razones por las cuales
las organizaciones han tenido que ir incorporando la RSE. La
primera tiene que ver con el aumento de la normativa legal
aplicable a los ámbitos económicos, sociales y ambientales.
Un segundo elemento es el establecimiento de empresas
transnacionales, que tienden a aplicar las normativas y formas
de gestión de sus países de origen, implementando un modelo
que presiona para que las empresas locales lo adopten o imiten.
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