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04<br />
el menjurJe<br />
Cinenrollos<br />
Echando un pie<br />
Muchos son los puntos de Caracas<br />
donde se puede bailar al aire<br />
libre. Uno de estos es la plaza El Venezolano, donde los adultos mayores<br />
gozan al son de la música. Los abuelos bonchones se reúnen todos los<br />
días, pero los mejores son jueves, viernes y sábado. Foto ASDRúBAL BRICEÑO<br />
Toda una<br />
Ópera<br />
HOY<br />
5 pm<br />
Después de la exitosa<br />
apertura a casa<br />
llena de la serie “La<br />
Ópera en el Teatro<br />
Municipal 2014”, continúa la<br />
magia del género operático en<br />
Caracas con la presentación de<br />
Cavalleria Rusticana (Caballerocidad<br />
Rusticana), en un acto de<br />
Pietro Mascagni.<br />
Mancheta<br />
¡Nos vemos<br />
en Santa Inés!<br />
Los fachos y el cine (II). Luego de la<br />
Primera Guerra Mundial, y la ascensión del<br />
fascismo en Europa, hubo una fuga masiva de<br />
directores y artistas de cine hacia Estados Unidos.<br />
Algunos de ellos famosos como Lubitsch,<br />
Murnau o Lang, quienes llevarían el movimiento<br />
cultural del expresionismo alemán a Hollywood,<br />
que sentaría las bases para la creación del cine<br />
negro o film noir, del que hablaremos luego.<br />
La gran ironía, sin embargo, es que Hollywood,<br />
con gente trabajando en los estudios, se convirtiera<br />
luego en el gran perseguidor de ideas<br />
distintas al capitalismo, al “mundo libre”. Si bien<br />
es fácil dilucidarlo desde el punto de vista histórico,<br />
pues para ese momento la “amenaza roja”<br />
y el nazismo llenaban de temor —ficticio y real—<br />
la cabeza de los gringos, el poder mediático ya<br />
se encontraba en pleno auge y el cine, como<br />
instrumento portador de ideología capitalista, ya<br />
se había apoderado de la industria (recordemos<br />
que los pioneros en el cine como instrumento<br />
ideológico son los rusos).<br />
Para esa época, por allá por 1940, Charles Chaplin<br />
nos regalaba El Gran Dictador, filme que, en<br />
clave de comedia, condenaba el nazismo y el fascismo<br />
satirizando a Hitler. A pesar de la condena<br />
que Chaplin haría en tan memorable filme, luego<br />
sería acusado de “comunista” y fue perseguido y<br />
calumniado en los Estados Unidos. Era la época<br />
de la cacería de brujas y el comunismo —que<br />
había tomado auge durante la Gran Depresión de<br />
1929— era el enemigo interno a vencer, la antítesis<br />
del capitalismo y las sociedades “libres”.<br />
De igual manera, durante los años 40 y 50<br />
también cobró auge el género western. Era la<br />
respuesta contra la “barbarie” de los indígenas<br />
y mexicanos, así como también la afirmación del<br />
hombre blanco como representante del progreso<br />
y de la ley y, en especial, del resguardo de la propiedad.<br />
Aunque hay westerns de westerns, se<br />
trata de un género cargado de códigos fascistas.<br />
Esto no se trata de meras coincidencias sino de<br />
momentos históricos de reafirmación capitalista.<br />
Para esa época comienza uno de los episodios<br />
más infaustos en la historia del cine gringo,<br />
como lo es la cacería de brujas o la persecución<br />
de comunistas y de cualquiera que tuviera ideas<br />
afines a la izquierda.<br />
Mauricio Sánchez<br />
diaz.mauricio@gmail.com<br />
Edición Número Ochenta y uno. Año 02. ÉPALE CCS<br />
Caracas, 25 de mayo de 2014.