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Pagina 20 Sábado 07 de enero de 2012
Diseño Editorial: G. Lomas
Alergias en la piel por
cambios de temporada
Los factores genéticos
y la predisposición
personal también
influyen en su aparición
Durante los cambios estacionales
se produce un aumento de la presencia
de alérgenos por excelencia,
como el moho, polen y los ácaros,
sobre todo en aquellos lugares
donde el clima es variable, donde
hay momentos de intensas lluvias y
de repente sol y calor. Por ello, los
cambios de temperatura funcionan
como activadores de numerosos
procesos alérgicos en el ser humano,
de manera particular de manifestaciones
que afectan la piel, señala la
dermatóloga Mariel Isa Pimentel,
del Instituto de Cirugía
Especializada.
Las alergias estacionales se manifiestan
con frecuencia en niños. Es
por esto que se puede ver cómo los
niños con hipersensibilidad a los
ácaros se ponen peor en épocas de
cambio estacional y que incluso sirvan
de “aviso o anuncio” de los cambios
de tiempo, manifestó.
No obstante, las alergias no tienen
inclinación por sexo ni edad. Por tal
razón, la especialista destaca que un
individuo que jamás tuvo un síntoma
de alergia puede llegar a padecerla
en cualquier momento, ya que
con el paso del tiempo el cuerpo se
hace más sensible ante las condiciones
externas. La concentración
de ácaros en las casas aumenta
durante las épocas de cambio estacional
(primavera y otoño) y suele
disminuir durante el verano.
Las condiciones climáticas de tu
lugar de residencia, el factor genético
y la disposición personal son factores
que influyen en el desarrollo
de las alergias por cambio de temporada,
según dijo la especialista.
Isa Pimentel explica que la alergia
puede definirse como una hipersensibilidad
que presentan algunas personas
ante sustancias particulares
que pueden ser inhaladas, ingeridas
o por contacto directo y producen
síntomas característicos, siendo la
picazón o prurito el más común,
debido a que la piel sufre cambios
importantes como la resequedad
marcada.
Los ácaros, presentes en el polvo
doméstico; hongos, principalmente
los de la humedad; pólenes, picaduras
de insectos, colorantes o aditivos
alimentarios, epitelios de animales
(gatos, perros, plumas, hámsters),
alérgenos profesionales (harinas,
polvo de madera, látex),
medicamentos o alérgenos de contacto,
son los principales elementos
que provocan las alergias, puntualiza
la dermatóloga.
Más frecuentes
La urticaria figura entre los tipos
de alergias más frecuentes causados
por cambios de temporada.
Según la dermatóloga, se define
como una reacción alérgica que
puede ser causada o desencadenada
por cambios bruscos de temperatura,
frío o calor, que provoca cuadros
de lesiones tipo ronchas o habones.
El contacto con ciertos insectos, el
consumo de alimentos que funcionen
como alérgenos, la ingesta de
algunos medicamentos y los estímulos
hormonales que desencadenen
transpiración excesiva, son otras de
las múltiples causas de la manifestación
de estas lesiones en la piel.
La dermatitis atópica, el angioedema
y la dermatitis por contacto son
también otras de las enfermedades
que pueden ser exacerbadas
durante los cambios estacionales,
destaca Isa Pimentel.
En épocas de mucha humedad,
aumentan los casos de afección por
hongos y levaduras.
Asimismo, el frío favorece la aparición
o agrava los casos de piel seca,
quebradiza y fisurada, y promueve
la contaminación secundaria con
bacterias.
Recomendaciones preventivas
La dermatóloga Mariel Isa
Pimentel recomienda evitar las
exposiciones innecesarias a los
diferentes alérgenos, incluso al
momento de vestirnos. Un problema
frecuente que traen los cambios
climáticos es el cambio en la forma
de vestir y las telas utilizadas. En
épocas de frío, se tienden a utilizar
ropas que producen calor, que
aumentan la sudoración y promueven
la humedad, que son factores
que estimulan la aparición de
las alergias y de otras enfermedades
en la piel.
Las personas con tendencia a la
aparición de alergias deben consultar
un médico especialista al inicio
de la estación y evitar auto
medicarse.