21.02.2015 Views

I CERTAMEN DE RELATOS CORTOS - Instituto de la Mujer de ...

I CERTAMEN DE RELATOS CORTOS - Instituto de la Mujer de ...

I CERTAMEN DE RELATOS CORTOS - Instituto de la Mujer de ...

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

una amarga sinfonía <strong>de</strong> miedo. Una vida nueva <strong>de</strong>bida<br />

a <strong>la</strong> valentía <strong>de</strong> una persona <strong>de</strong>sconocida, a quien quizá<br />

jamás podría agra<strong>de</strong>cérselo.<br />

La convalecencia fue <strong>la</strong>rga: curó <strong>la</strong>s heridas <strong>de</strong>l<br />

cuerpo, <strong>la</strong>s <strong>de</strong>l alma tardaron bastante más. Tuvo que<br />

atravesar multitud <strong>de</strong> puertas: hospital, comisaría, casa<br />

<strong>de</strong> acogida… Como una inmensa puerta giratoria cuyo<br />

fin no se vislumbra, una tras otra, <strong>de</strong>jando atrás días y<br />

volviéndolos a retomar para volverlos a <strong>de</strong>jar atrás.<br />

Se dijo a sí misma que al cruzar <strong>la</strong> próxima puerta,<br />

<strong>la</strong> última que le quedaba por cruzar, <strong>la</strong> que daba acceso al<br />

andén <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el que partiría su tren, nunca volvería a vivir<br />

con miedo, nunca bajaría los ojos ni los brazos. Esa puerta<br />

significaba un adiós, atravesar esa puerta era atravesar<br />

un puente sin retorno, un puente levadizo que una vez<br />

izado no vuelve a ten<strong>de</strong>rse, no permite regreso alguno.<br />

Mas su <strong>de</strong>cisión era firme: <strong>la</strong> atraía hacia esa puerta el<br />

olor <strong>de</strong> <strong>la</strong> libertad, <strong>de</strong> viajar hacia un lugar don<strong>de</strong> nadie<br />

<strong>la</strong> conociese, don<strong>de</strong> <strong>la</strong>s murmuraciones no existieran,<br />

don<strong>de</strong> no <strong>la</strong> volviese a asaltar <strong>la</strong> falsa culpabilidad, don<strong>de</strong><br />

<strong>la</strong> incomprensión se diluyera como se habían diluido los<br />

últimos años, silenciosamente, apenas sin <strong>de</strong>jar rastro.<br />

Se encontraba ante el mayor reto <strong>de</strong> su vida: comenzar<br />

<strong>de</strong>s<strong>de</strong> cero. Debía avanzar, cruzar esa próxima puerta:<br />

se puso en pie, se colgó <strong>la</strong> mochi<strong>la</strong> al hombro y se dirigió<br />

hacia su <strong>de</strong>stino.<br />

Carlos Hernán<strong>de</strong>z Millán<br />

19

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!