Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
Cómo <strong>ac<strong>en</strong>tuar</strong> <strong>en</strong><br />
español<br />
Miguel Ángel Monjas Llor<strong>en</strong>te<br />
6 de diciembre de 1996<br />
El URL de este docum<strong>en</strong>to es<br />
http://www.dat.etsit.upm.es/~mmonjas/ac<strong>en</strong>tos.html<br />
El ac<strong>en</strong>to<br />
Se d<strong>en</strong>omina ac<strong>en</strong>to a la mayor fuerza de pronunciación que se carga sobre<br />
una sílaba de la palabra (a la que se d<strong>en</strong>omina sílaba tónica.<br />
Se llama tilde o ac<strong>en</strong>to ortográfico a una rayita oblicua (') que baja de<br />
derecha a izquierda del que lee o escribe, y que se pone, <strong>en</strong> los casos<br />
adecuados, sobre alguna de las vocales de la sílaba donde carga la fuerza <strong>en</strong><br />
la pronunciación del vocablo.<br />
En español, las palabras pose<strong>en</strong> un único ac<strong>en</strong>to de int<strong>en</strong>sidad (salvo los<br />
adverbios de modo con el sufijo -m<strong>en</strong>te), que cae sobre una sílaba<br />
determinada de cada palabra.<br />
Clasificación de las palabras<br />
Las palabras agudas son aquellas <strong>en</strong> las que la fuerza de pronunciación se<br />
ejerce sobre la última sílaba.<br />
• con-ver-sar<br />
• pas-tor<br />
• o-ra-ción<br />
• com-pe-tir<br />
• va-lor
Las palabras llanas son aquellas cuya fuerza de pronunciación se ejerce <strong>en</strong> la<br />
p<strong>en</strong>última sílaba.<br />
• pro-tes-tan-te<br />
• li-bro<br />
• di-fí-cil<br />
• ra-bi-no<br />
• án-gel<br />
Las palabras esdrújulas son aquellas cuya fuerza de pronunciación se ejerce<br />
<strong>en</strong> la antep<strong>en</strong>última sílaba.<br />
• prés-ta-mo<br />
• hi-pó-cri-ta<br />
• ag-nós-ti-co<br />
• cré-di-to<br />
• lle-gá-ba-mos<br />
Las palabras sobreesdrújulas son aquellas cuya fuerza de pronunciación se<br />
ejerce <strong>en</strong> la ante-antep<strong>en</strong>última sílaba. Por lo regular se trata de adverbios.<br />
• di-fí-cil-m<strong>en</strong>-te<br />
• fá-cil-m<strong>en</strong>-te<br />
• ob-via-m<strong>en</strong>-te<br />
• e-vi-d<strong>en</strong>-te-m<strong>en</strong>-te<br />
Reglas básicas<br />
Se ac<strong>en</strong>túan todas palabras agudas que terminan <strong>en</strong> vocal, n o s.<br />
• tam-bién<br />
• ja-más<br />
• lec-ción<br />
• se-gún<br />
• a-de-más<br />
Las palabras agudas que no terminan <strong>en</strong> vocal, n o s nunca se ac<strong>en</strong>túan.
• vir-tud<br />
• na-cio-nal<br />
• re-loj<br />
• a-co-me-ter<br />
• fe-liz<br />
Nunca se ac<strong>en</strong>túan las palabras llanas que terminan <strong>en</strong> vocal, n o s.<br />
• me-dios<br />
• lla-na<br />
• re-ve-la<br />
• mo-do<br />
• sub-jun-ti-vo<br />
Las palabras llanas que terminan <strong>en</strong> otras letras siempre se ac<strong>en</strong>túan.<br />
• di-fí-cil<br />
• cár-cel<br />
• au-to-mó-vil<br />
• Gon-zá-lez<br />
• i-nú-til<br />
• ár-bol<br />
Todas las palabras esdrújulas y sobresdrújulas siempre se ac<strong>en</strong>túan.<br />
• ás-pe-ra<br />
• es-drú-jula<br />
• <strong>en</strong>-tréa-ga-se-lo<br />
• ca-tó-li-co<br />
• pro-pó-si-to<br />
• éx-ta-sis<br />
Tilde diacrítica<br />
La tilde diacrítica se coloca sobre ciertas palabras para distinguir <strong>en</strong>tre<br />
diversos significados del vocablo, aunque según las reglas g<strong>en</strong>erales no<br />
corresponda colocar tilde. Hay varias categorías:
a. monosílabos con distintos significados (los monosílabos, salvo las<br />
excepciones descritas a continuación, no llevan ac<strong>en</strong>to):<br />
o más (cantidad): Quiero más comida.<br />
o mas (pero): Le pagan, mas no es sufici<strong>en</strong>te.<br />
o<br />
o<br />
tú (pronombre personal): Es preciso que v<strong>en</strong>gas tú.<br />
tu (posesivo): Dale tu cartera.<br />
o<br />
o<br />
él (pronombre): ¿Estuviste con él?.<br />
el (artículo).<br />
o<br />
o<br />
mí (pronombre personal): Todo esto es para mí.<br />
mi (posesivo): Trae mi cal<strong>en</strong>dario.<br />
o<br />
o<br />
o<br />
sí (afirmación): Él sí quería.<br />
sí (pronombre): Lo atrajo hacia sí.<br />
si (resto de los casos): Pregúntale si quiere v<strong>en</strong>ir.<br />
o<br />
o<br />
dé (del verbo dar). Cuando se le une algún pronombre, también<br />
se ac<strong>en</strong>túa: Déme ese dinero.<br />
de (preposición).<br />
o<br />
o<br />
sé (de los verbos ser o saber): Yo no sé nada, Sé un poco más<br />
educado.<br />
se (resto de casos).<br />
o té (bebida y planta).<br />
o te (pronombre).<br />
b. para evitar confusiones, lo que se conoce como anfibología (<strong>en</strong> caso de<br />
que no existiese confusión, podemos prescindir de la tilde):
o<br />
o<br />
sólo (adverbio, equival<strong>en</strong>te a solam<strong>en</strong>te): Sólo me quieres para<br />
eso.<br />
solo (adjetivo, sin compañía): No estés sólo.<br />
o<br />
o<br />
aún (todavía): ¿Aún no ha llegado?.<br />
aun (resto de casos): Ni aun él pudo hacerlo.<br />
o éste, ésta, ése, ésa, aquél y aquélla (pronombres).<br />
o este, esta, ese, esa, aquel y aquella (acompañando a nombres y<br />
referidos a él, adjetivos).<br />
o esto, eso y aquello no llevan tilde nunca.<br />
c. <strong>en</strong> interrogaciones, admiraciones o expresiones de carácter<br />
dubitativo (también <strong>en</strong> oraciones que pres<strong>en</strong>t<strong>en</strong> un matiz<br />
interrogativo o dubitativo, aunque no existan signos de puntuación o<br />
admiración), también se ac<strong>en</strong>túan:<br />
o cómo: ¡Cómo que no!, Me pregunto cómo habrá v<strong>en</strong>ido.<br />
o cuál: Esa es la habitación <strong>en</strong> la cual estuvieron, ¿Cuál es el<br />
tuyo?.<br />
o quién: ¿Quién lo ha dicho?<br />
o qué: Pídele lo que te debe, No sé qué hacer.<br />
o dónde: ¡Dónde fuiste a pedir dinero!.<br />
o cuándo: Hazlo cuando t<strong>en</strong>gas tiempo, ¿Cuándo vi<strong>en</strong>es?.<br />
o cuánto, cuán: No te imaginas cuán ridículo estás, ¿Cuantas<br />
cosas has traído?.<br />
o por qué (interrogativo): ¿Por qué no vi<strong>en</strong>es?<br />
o porque (conjunción). Porque te quiero a ti.<br />
o porqué (nombre): Este es el porqué de su decisión.<br />
o por que (por el cual o la cual): ¿Cuál es la razón por que te<br />
fuiste?<br />
d. el hecho de que tales palabras vayan <strong>en</strong> una oración interrogativa o<br />
exclamativa no significa que t<strong>en</strong>gan s<strong>en</strong>tido exclamativo o<br />
interrrogativo. Si no lo ti<strong>en</strong><strong>en</strong>, no deb<strong>en</strong> llevar tilde:<br />
o ¿Eres tú qui<strong>en</strong> lo ha hecho? (la pregunta se refiere a tú)<br />
o ¡V<strong>en</strong>drás cuando te lo diga!
e. la conjunción o debe llevar tilde cuando esté situada <strong>en</strong>tre dos cifras,<br />
para que no se confunda con el número cero.<br />
Diptongos, triptongos e hiatos<br />
Un diptongo es el conjunto de dos vocales d<strong>en</strong>tro de una misma sílaba, una<br />
de las cuales será siempre una vocal cerrada (i o u). A estos efectos, la<br />
exist<strong>en</strong>cia o no de una h intercalada <strong>en</strong>tre las vocales es transpar<strong>en</strong>te; no<br />
influye para nada. Por tanto, cuando observemos que las dos vocales que<br />
aparec<strong>en</strong> juntas d<strong>en</strong>tro de una misma sílaba son abiertas (a, e u o), podemos<br />
afirmar que no hay diptongo. Por ejemplo, existirá diptongo <strong>en</strong> palabras<br />
como avión, Jaime, cuerpo, viudo..., pero no <strong>en</strong> héroe, ahora,...<br />
Un triptongo aparece cuando no son dos, sino tres, las vocales que aparec<strong>en</strong><br />
d<strong>en</strong>tro de una misma sílaba. La vocal situada <strong>en</strong> el c<strong>en</strong>tro es siempre<br />
abierta, <strong>en</strong> tanto que las de los extremos son cerradas. Sólo hay cuatro<br />
posibles triptongos: uai (averiguáis), uei (averiguéis), iai (iniciáis) y iei<br />
(iniciéis).<br />
La pres<strong>en</strong>cia de una h intercalada no invalida la exist<strong>en</strong>cia de un posible<br />
diptongo o triptongo.<br />
Cuando dos vocales se <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tran <strong>en</strong> contacto d<strong>en</strong>tro de una palabra, pero<br />
no forman parte de la misma sílaba, se dice que existe un hiato. Exist<strong>en</strong><br />
tres reglas para distinguir un hiato de un diptongo:<br />
• si las dos vocales son abiertas, hay hiato.<br />
• si una de ellas es cerrada, sólo hay hiato cuando la fuerza de<br />
pronunciación de la palabra recae sobre dicha vocal. En caso<br />
contrario, es un diptongo.<br />
• si ambas vocales son cerradas (ui o iu), a efectos de ac<strong>en</strong>tuación, se<br />
trata de diptongos.<br />
Ac<strong>en</strong>tuación de diptongos, triptongos e hiatos
Hemos visto ya que los hiatos aparec<strong>en</strong> cuando dos vocales <strong>en</strong> contacto no<br />
pert<strong>en</strong>ec<strong>en</strong> a la misma sílaba.<br />
Si se trata de dos vocales abiertas, la tilde se coloca según las reglas<br />
g<strong>en</strong>erales: le-ón, co-á-gu-lo,...<br />
En cambio, si una de las vocales es cerrada, y el posible diptongo se ha<br />
deshecho debido a que sobre ella se carga la fuerza de pronunciación de la<br />
palabra, la tilde se coloca sobre ella, indep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te de que le<br />
correspondiera a la sílaba según las reglas g<strong>en</strong>erales. Por ejemplo, las<br />
sigui<strong>en</strong>tes palabras llevan tilde aunque no les corresponda según las reglas<br />
g<strong>en</strong>erales: ca-í-da, son-re-ír, re-ú-no,…<br />
Por lo que se refiere a los diptongos, si el ac<strong>en</strong>to de la palabra recae sobre<br />
una sílaba con diptongo, la tilde se coloca sobre la vocal abierta (a, e u o).<br />
Veamos algún ejemplo: co-rréis, hués-ped,...<br />
Existe una excepción a las reglas previas. Cuando son dos vocales cerradas<br />
(ui o iu) las que están <strong>en</strong> contacto, indep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te de que exista hiato<br />
o diptongo, hay reglas difer<strong>en</strong>tes. Suponemos que se trata siempre de un<br />
diptongo y colocamos la tilde según las reglas g<strong>en</strong>erales y siempre <strong>en</strong> la<br />
última vocal: cuídate, interviú, destruí, pero jesuita, destruir,...<br />
La única duda puede surgir <strong>en</strong> ciertas formas verbales, como hui o fui. Se<br />
les considera diptongos y a las palabras como monosílabos. Por tanto no<br />
llevan tilde (al igual que otras formas verbales como fue, dio, vio...).<br />
En los triptongos se sigue la regla g<strong>en</strong>eral de los diptongos. Se coloca la<br />
tilde <strong>en</strong> la vocal abierta del triptongo: a-ve-ri-guáis...<br />
La tilde <strong>en</strong> las palabras compuestas<br />
Si la palabras compuesta procede de la unión de dos palabras simples, sólo<br />
lleva tilde la útima compon<strong>en</strong>te si a la palabra compuesta le corresponde<br />
llevarla: contrapié, decimoséptimo, cortafríos, radiocomunicación,... (pierde<br />
su tilde la primera compon<strong>en</strong>te de la misma si la llevaba cuando era<br />
simple :asimismo, decimoséptimo,...).<br />
Si las palabras se un<strong>en</strong> mediante guion, cada vocablo conserva su tilde si ya<br />
la t<strong>en</strong>ía previam<strong>en</strong>te: físico-químico,...
En el caso de los adverbios de modo formados mediante la adición del sufijo<br />
-m<strong>en</strong>te (que ti<strong>en</strong><strong>en</strong> <strong>en</strong> realidad dos ac<strong>en</strong>tos), se manti<strong>en</strong>e la tilde del<br />
adjetivo que origina el adverbio si ya la t<strong>en</strong>ía: ágil --> ágil-m<strong>en</strong>te, rápido --><br />
rápida-m<strong>en</strong>te,...<br />
Cuando a una forma verbal que ya t<strong>en</strong>ía tilde se le añad<strong>en</strong> uno o varios<br />
pronombres, la tilde se manti<strong>en</strong>e: dé --> déme,...<br />
Si al reunir una forma verbal que no ti<strong>en</strong>e tilde con uno o varios pronombres<br />
resulta una palabra esdrújula, debemos ponerla: vamos --> vámonos, da --><br />
dáselo,...<br />
Ac<strong>en</strong>tuaciones dobles<br />
a. pose<strong>en</strong> doble ac<strong>en</strong>tuación las sigui<strong>en</strong>tes palabras. Se recomi<strong>en</strong>da la<br />
forma de la primera columna:<br />
alveolo<br />
chófer<br />
conclave<br />
dinamo<br />
fútbol<br />
gladíolo<br />
medula<br />
olimpiada<br />
omóplato<br />
ósmosis<br />
alvéolo<br />
chofer<br />
cónclave<br />
dínamo<br />
futbol<br />
gladiolo<br />
médula<br />
olimpíada<br />
omoplato<br />
osmosis<br />
p<strong>en</strong>tagrama<br />
período<br />
reuma<br />
p<strong>en</strong>tágrama<br />
periodo<br />
reúma<br />
b. palabras terminadas <strong>en</strong> -iaco/-íaco (y sus correspondi<strong>en</strong>tes<br />
fem<strong>en</strong>inos). La primera es preferible:<br />
austriaco<br />
policiaco<br />
zodiaco<br />
amoniaco<br />
cardiaco<br />
austríaco<br />
policíaco<br />
zodíaco<br />
amoníaco<br />
cardíaco
c. hay también doble ac<strong>en</strong>tuación <strong>en</strong> los pres<strong>en</strong>tes de indicativo de<br />
algunos verbos. Se indica, como de costumbre, la pronunciación<br />
recom<strong>en</strong>dada <strong>en</strong> primer lugar (sólo se indica la primera persona):<br />
afilio<br />
auxilio<br />
concilio<br />
expatrio<br />
afilío<br />
auxilío<br />
concilío<br />
expatrío<br />
Ac<strong>en</strong>tuaciones incorrectas<br />
a. incluyo aquí una serie de palabras que se ac<strong>en</strong>túan de dos formas<br />
difer<strong>en</strong>tes, aunque la Real Academia sólo considera como correcta<br />
una de ellas. Honestam<strong>en</strong>te, considero que el uso ha conferido carta<br />
de naturaleza a muchas de las ac<strong>en</strong>tuaciones no reconocidas por la<br />
Academia. De todas formas, ahí van (<strong>en</strong> la primera columna coloco la<br />
forma correcta, y <strong>en</strong> la segunda la incorrecta):<br />
expedito<br />
libido<br />
prístino<br />
intervalo<br />
Mondariz<br />
Trevélez<br />
Nobel<br />
accésit<br />
c<strong>en</strong>it<br />
coctel<br />
elite<br />
fútil<br />
táctil<br />
Sáhara<br />
máster<br />
expédito<br />
líbido<br />
pristino<br />
intérvalo<br />
Mondáriz<br />
Trévelez<br />
Nóbel<br />
áccesit<br />
cénit<br />
cóctel<br />
élite<br />
futil<br />
tactil<br />
Sahara<br />
master<br />
b. los verbos cuyo infinitivo termina <strong>en</strong> -cuar, llevan diptongo <strong>en</strong> la<br />
sílaba final. Por tanto, del verbo evacuar la conjugación da evacuo y<br />
no evacúo. Lo mismo vale para verbos como licuar o adecuar.<br />
En cambio, los verbos que terminan <strong>en</strong> -uar, si<strong>en</strong>do la consonante que<br />
la precede difer<strong>en</strong>te a c, pose<strong>en</strong> un hiato y se dirá habitúo y no<br />
habituo.
Otras consideraciones<br />
Las palabras latinas que se han incorporado al castellano colocan su tilde<br />
según las reglas g<strong>en</strong>erales (vademécum, currículum,...).<br />
En cambio, palabras y nombres propios de otros idiomas, conservan su grafía<br />
original, si se escribían <strong>en</strong> alfabeto latino. La tilde sólo se colocará según las<br />
reglas g<strong>en</strong>erales si se ha españolizado el término, lo que se conoce por<br />
exónimos (París, Aquisgrán, Milán...).