Bajar Documento PDF - Maestros Espirituales WWW Site

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Está en su despacho caminando de un lado para el otro, se muestra inquieto y
desconcertado. No se percibe en él la entrega que había en Bin Laden. La noticia lo ha
turbado profundamente, no la esperaba y tiene algunas dudas. Empieza a considerar que
la información que le han dado es falsa y quiere chequear la fuente de donde provino. El
demonio le dice que es mentira, que no se deje engañar porque el enemigo es capaz de
cualquier cosa con tal de confundirlo. Él ya lo conoce y tiene múltiples recursos para
hacerle aparecer las cosas de un modo cuando la realidad es otra. Saddam no puede
percibir el engaño del demonio que busca convencerlo para que siga adelante con los
planes que había trazado.
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Se lo ve furioso, su ira es contra Bin Laden pues no logra entender el por qué detenerse si
ya todo estaba casi resuelto. Vocifera a los que lo rodean y les ordena retirarse, sin
embargo hay alguien que se queda, de pie, delante suyo y en absoluto silencio.
S. H. ¿Quién eres tú que no te has ido como ordené?
YUKTESWAR. Soy quien no registra tu voz.
S. H. ¿Acaso no doy las órdenes clara y fuertemente?
YUKTESWAR. Para los que están en este plano puede que sí, pero yo he sido enviado para
que escuches otra voz.
S. H. ¿La de quién?
YUKTESWAR. La que le pidió a Bin Laden que dejara todo absolutamente en las manos
Divinas.
22