Número 67 Junio - Julio 2015

H oteles I méxico
Hotel Presidente
InterContinental
Guadalajara
para disfrutar poco a poco
Por: Rosa Mendoza
Instalaciones remodeladas.
Salón Gran Tequila.
La experiencia de hospedarse en un hotel va más allá de solo dormir,
convertir la habitación en una oficina, realizar una comida de
negocios en uno de los restaurantes que conforman el inmueble
o asistir a un evento en los salones con los que cuentan. Ahora, esos
momentos se expanden, ya que para hacer más placentera la estancia,
que la mayoría de las veces suele ser breve, se han ideado actividades
alternas que puedan complementar su visita. Tal es el caso de la agenda
propuesta por el hotel Presidente InterContinental de Guadalajara.
Actividades grupales
Se puede empezar el día disfrutando de la variedad de platillos que se
sirven en el bufet del restaurante Frutas y Flores; en tanto, por la tarde,
trasladarse a Tlaquepaque puede ser la opción para caminar por su
corredor de arte en donde quizá se puedan encontrar a alguno de los
autores de las obras que se exhiben en las diferentes galerías, como
es el caso de Rodo Padilla, reconocido escultor —artesano mexicano—,
quien a su parecer lo que diseña no son figuras de gorditos, sino
formas geométricas que reflejan la cotidianidad del mexicano. Aquí
se sugiere visitar el Parián, para escuchar a los mariachis y probar las
cazuelas, bebida de tequila acompañada de cítricos. Este sitio también
puede ser utilizado para cenas y cocteles, ya que tiene un espacio para
1,200 personas, siendo escenario, también, de películas mexicanas
como “Hay Jalisco no te rajes”, con Jorge Negrete.
Otro día se puede llevar al grupo a un “desayuno de altura”, es decir,
en el helipuerto del hotel; para después ir a Casa Cuervo y recorrer
los sembradíos agave de donde se extrae el tequila; así como visitar
sus instalaciones para conocer su proceso de destilación, realizar una
cata para distinguir entre el añejo, reposado y blanco, agudizando los
sentidos con ayuda del aroma de los granos de café, canela, cáscara de
limón y el sabor del dulce de agave para luego comer en sus jardines
una buena carne asada.
Por la noche, una cena con salmón ahumado en la terraza de la
suite presidencial los espera, seguida de una clase de baile, que además
de relajarse, se aprenden nuevos pasos, todo con la idea de seguir
gozando del ambiente del hotel, el cual está conformado de 423 habitaciones,
y de lo que Guadalajara tiene para ofrecer como destino.
Así al día siguiente, y para los que se quieren alejar un poco del ajetreo
del hotel, se cuenta con la opción del piso club, en donde también se sirven
alimentos frescos y bebidas. Otro aspecto que se puede agregar a la
agenda, es dar un paseo por el centro de la ciudad para visitar el Palacio de
Gobierno, en donde se exhibe uno de los murales de José Clemente Orozco,
sobre la libertad y la independencia encabezada por Miguel Hidalgo.
90 | JUNIO - JULIO 2015