08.07.2015 Views

Otitis externa micótica y perforación timpánica: Reporte de dos casos

Otitis externa micótica y perforación timpánica: Reporte de dos casos

Otitis externa micótica y perforación timpánica: Reporte de dos casos

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

CASOS CLÍNICOSRev. Otorrinolaringol. Cir. Cabeza Cuello 2010; 70: 245-252<strong>Otitis</strong> <strong>externa</strong> micótica y perforación timpánica: <strong>Reporte</strong> <strong>de</strong> <strong>dos</strong> <strong>casos</strong>Otomycosis and perforated tympanic membrane. Two casesSamanta Ruz G 1 , Hayo Breinbauer K 2 , Claudia Corssen J 1 .RESUMENLa otitis <strong>externa</strong> constituye entre el 5% y 30% <strong>de</strong> las consultas <strong>de</strong> urgencia ORL yafecta al 10% <strong>de</strong> la población al menos 1 vez en la vida. La gran mayoría son <strong>de</strong> causabacteriana, sólo el 15% a 20% son atribuidas a hongos. Las complicaciones son pocofrecuentes alcanzando el 10% a 20% <strong>de</strong> los <strong>casos</strong> según la serie, siendo la perforacióntimpánica la más frecuente. Se presenta la evolución y tratamiento <strong>de</strong> 2 <strong>casos</strong>.Palabras claves: <strong>Otitis</strong> <strong>externa</strong> micótica, perforación timpánicaABSTRACTExternal otitis constitutes among 5%-30% of urgency ORL consultations and affects10% of the population at least 1 time in their life. Most of them had a bacterial origin,only 15% to 20% are attributed to fungi. Otomycosis complications are slightly frequentreaching 10% to 20% of the cases according to diferent series, being the tympanicperforation the most frequent. We present 2 cases, their evolution and treatment.Key words: Otomycosis, Tympanic perforation.1Médico Servicio <strong>de</strong> Otorrinolaringología Hospital San Juan <strong>de</strong> Dios.2Médico Cirujano. Universidad <strong>de</strong> Chile.245


REVISTA DE OTORRINOLARINGOLOGÍA Y CIRUGÍA DE CABEZA Y CUELLOINTRODUCCIÓNLa otitis <strong>externa</strong> pue<strong>de</strong> ser aguda o crónica, difusao localizada y ser causada por infección, alergia otrauma. Incluye todas las condiciones inflamatorias<strong>de</strong>l pabellón auricular, conducto auditivoexterno (CAE) y cara <strong>externa</strong> <strong>de</strong> la membranatimpánica 1,2 .Constituye 1 <strong>de</strong> cada 6 referencias a otorrinolaringología(ORL), entre el 5%-30% <strong>de</strong> las consultas<strong>de</strong> urgencia ORL y afecta al 10% <strong>de</strong> lapoblación al menos 1 vez en la vida 1,3,4 . La granmayoría son <strong>de</strong> causa bacteriana, sólo el 15% a20% son atribuidas a hongos. Las infeccionesmixtas en general son escasas, pues la florafúngica suele inhibir a la flora bacteriana 5 . Si bienaún existe controversia entre colonización versusinfección real, la evi<strong>de</strong>ncia clínica y <strong>de</strong> laboratoriorespalda la otomicosis como una entidad patológicain<strong>de</strong>pendiente, cuya inci<strong>de</strong>ncia iría en aumento,producto <strong>de</strong>l mayor uso <strong>de</strong> antibióticos <strong>de</strong> amplioespectro y <strong>de</strong>l número <strong>de</strong> pacientes inmunocomprometi<strong>dos</strong>4 . Los <strong>casos</strong> clínicos que a continuaciónse presentan correspon<strong>de</strong>n a 2 otomicosisque evolucionaron con perforaciones timpánicas.CASO 1Mujer <strong>de</strong> 72 años <strong>de</strong> edad, diabética no insulinorequiriente,sin historia <strong>de</strong> otorrea o enfermedadotológica previa. Consulta por cuadro <strong>de</strong> un mes<strong>de</strong> evolución caracterizado por otalgia <strong>de</strong>rechaintermitente y sensación <strong>de</strong> plenitud ótica. Enatención primaria recibe ciprofloxacino oral y óticopor 14 días, sin respuesta por lo que se <strong>de</strong>riva aORL. El examen físico <strong>de</strong> ingreso evi<strong>de</strong>ncia, enoído <strong>de</strong>recho, tapón <strong>de</strong> cerumen con hifas yotorrea. El aseo realizado permite ver una perforacióntimpánica anteroinferior. El oído izquierdo esnormal. Se indica aseo local, lava<strong>dos</strong> con ácidobórico y econazol tópico por 14 días, con respuestafavorable. El audiograma muestra una pérdidaconductiva <strong>de</strong>l oído <strong>de</strong>recho (Figura 1).A los 2 meses es controlada nuevamente porpresentar otalgia, sensación <strong>de</strong> plenitud ótica yotorrea sanguinolenta izquierda, acompañada <strong>de</strong>vértigo objetivo y vómitos <strong>de</strong> 7 días <strong>de</strong> evolución.Al examen el oído <strong>de</strong>recho se encuentra mejor,seco y con perforación anteroinferior <strong>de</strong> menortamaño (Figura 2). En el oído izquierdo se apreciaun tapón <strong>de</strong> cerumen con hifas, perforaciónholotimpánica con tejido <strong>de</strong> aspecto necróticoblanquecinoadherido al mango <strong>de</strong>l martillo. Laactividad facial normal y no existe evi<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong>nistagmo. Un nuevo audiograma confirmahipoacusia conductiva <strong>de</strong> oído <strong>de</strong>recho y un componenteconductivo en oído izquierdo <strong>de</strong> 25 dB(Figura 3).Se hospitaliza con diagnóstico <strong>de</strong> otitis <strong>externa</strong>complicada con laberintitis. Los exámenes generalesy reumatológicos son normales, la TC <strong>de</strong> oídoFigura 1.246


OTITIS EXTERNA MICÓTICA Y PERFORACIÓN TIMPÁNICA - S Ruz, H Breinbauer, C CorssenFigura 2.Figura 3.muestra velamiento bilateral <strong>de</strong> celdillas mastoi<strong>de</strong>asy engrosamiento <strong>de</strong> pare<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l CAE en oídoizquierdo. Sin erosiones <strong>de</strong> pare<strong>de</strong>s óseas y sinotros hallazgos patológicos (Figura 4).En el cultivo <strong>de</strong> secreción <strong>de</strong> oído izquierdo, seencuentra Aspergillus niger y Staphyloccoccuscoagulasa negativo meticilino resistente. Se realizótratamiento por 14 días con cefepime, vancomicinay econazol (Micolis ® ) tópico asociado a otomicroscopías<strong>de</strong> aseo diarios; su evolución es favorable,con <strong>de</strong>saparición <strong>de</strong> clínica vertiginosa alsegundo día <strong>de</strong> tratamiento. Al séptimo día el oídoizquierdo se encuentra seco con caja limpia, aunquemantiene perforación (Figura 5). En oído <strong>de</strong>rechoevoluciona a un cierre <strong>de</strong> su perforación a los 3meses. Audiológicamente persiste hipoacusia <strong>de</strong>conducción en oído izquierdo, pero con oído <strong>de</strong>rechonormal.CASO 2Mujer <strong>de</strong> 33 años, sin antece<strong>de</strong>ntes mórbi<strong>dos</strong> y sinhistoria <strong>de</strong> otorrea o enfermedad otológica previa.Cuadro clínico <strong>de</strong> una semana <strong>de</strong> evolución caracterizadopor otalgia y otorrea <strong>de</strong>recha. En atención247


REVISTA DE OTORRINOLARINGOLOGÍA Y CIRUGÍA DE CABEZA Y CUELLOFigura 4.Figura 5.primaria recibe 7 días <strong>de</strong> amoxicilina, sin repuestapor lo que es <strong>de</strong>rivada a policlínico <strong>de</strong> choque ORL.Al examen físico se constata tapón micótico, conhifas y otorrea espesa. La curación <strong>de</strong>l oído, permitever la membrana timpánica íntegra. Se indicaeconazol en gotas (Micolis ® ) por diez días. Alcontrol se observa regresión <strong>de</strong> la otorrea y <strong>de</strong>otalgia, pero la paciente refiere hipoacusia y elexamen constata una perforación puntiformeanteroinferior. Sin vértigo y función facial normal.Se mantiene tratamiento tópico y realiza audiometríaen la que se observa hipoacusia <strong>de</strong> conducciónleve <strong>de</strong>l oído <strong>de</strong>recho (Figura 6). Se controla en 48horas evi<strong>de</strong>ncián<strong>dos</strong>e al examen físico <strong>dos</strong> nuevasperforaciones timpánicas también puntiformes encuadrante posteroinferior. Se toma cultivo que espositivo para Aspergillus sp. Se agrega fluconazoloral 200 mgr día por 2 veces. El control a lasemana evi<strong>de</strong>ncia ausencia <strong>de</strong> otorrea y otalgia. Elexamen otomicroscópico confirma el cierre <strong>de</strong> <strong>dos</strong><strong>de</strong> las perforaciones timpánicas quedando sólouna posteroinferior. Se suspen<strong>de</strong> tratamiento tópicoy sistémico. El control al tercer mes muestratímpano sano y audiometría normal.DISCUSIÓNLa otomicosis se <strong>de</strong>scribe como una infección <strong>de</strong>lconducto auditivo externo causada por hongos, suprevalencia varía <strong>de</strong> 9% a 30% en pacientes consíntomas o signos <strong>de</strong> otitis <strong>externa</strong> 6-9 , lo que serelaciona con el área geográfica (mayor en climastropicales y húme<strong>dos</strong>) y época <strong>de</strong>l año 5 . Las complicaciones<strong>de</strong>l oído medio son infrecuentes enesta patología.Los agentes que producen otomicosis son generalmenteespecies fúngicas saprófitas que abundan248


OTITIS EXTERNA MICÓTICA Y PERFORACIÓN TIMPÁNICA - S Ruz, H Breinbauer, C CorssenFigura 6.en la naturaleza 5 y que forman parte <strong>de</strong> la floracomensal <strong>de</strong>l CAE sano, generalmente Aspergillus yCandida son las especies más frecuentemente aisladas6,7,10-13 . Dentro <strong>de</strong>l grupo <strong>de</strong> los Aspergillus elmás frecuente seria el Aspergillus níger 13,14 tanto enregiones tropicales y subtropicales 8 , pero tambiénse han aislado las varieda<strong>de</strong>s Aspergillus fumigatusy Aspergillus tereus. Con respecto a las Candidas lasvarieda<strong>de</strong>s más frecuentes son Candida Albicans yCandida parapslosis 13,14 .Dentro <strong>de</strong> los factores <strong>de</strong> riesgo se encuentranclima húmedo, instrumentalización <strong>de</strong>l oído,inmunosupresión, embarazo, corticoi<strong>de</strong>s sistémicos,audífonos sin ventilación, trauma repetido6,12,15 . Más recientemente se han agregadoautoinoculación <strong>de</strong>s<strong>de</strong> una <strong>de</strong>rmatomicosis 6,16 , nadar9,17-19 y otros más controversiales como conformación<strong>de</strong>l CAE 5 , presencia <strong>de</strong> cerumen 6 , cirugíaotológica con canal wall down 15 y uso reciente <strong>de</strong>gotas tópicas con antibióticos y/o esteroi<strong>de</strong>s 6 .Con respecto a la conformación <strong>de</strong>l CAE, elreceso timpánico inferior se caracteriza por suten<strong>de</strong>ncia a acumular cerumen, por ser una zona<strong>de</strong> difícil limpieza don<strong>de</strong> se dan las condicionesi<strong>de</strong>ales para el crecimiento fúngico en relación ahumedad, temperatura y pH. Por otro lado la pieles más gruesa en el tercio externo, con anexoscuyas secreciones se mezclan con <strong>de</strong>tritus celularesdando origen al cerumen que es hidrofóbico,haciendo la superficie <strong>de</strong>l conducto impermeable alagua, evitando la maceración y el daño epitelial ytiene a<strong>de</strong>más una gran flora comensal que no espatógena mientras se mantenga el equilibrio entrebacterias y hongos 4 .En relación a la cirugía con canal wall down sedice que ésta no sólo predispone a la patologíaótica sino que la hace más rebel<strong>de</strong> al tratamiento,reportán<strong>dos</strong>e el doble <strong>de</strong> recidivas <strong>de</strong> otomicosisrespecto <strong>de</strong> los pacientes sin cirugía 4 . La mayoría<strong>de</strong> los autores cree que la proliferación es secundariaa humedad por otorrea, al escaso cambio <strong>de</strong> lacomposición <strong>de</strong>l cerumen, pH 5,7 , todo asociado aun <strong>de</strong>sequilibrio entre hongos y bacterias ya que lamayoría <strong>de</strong> estos pacientes han sido trata<strong>dos</strong> congotas que contienen quinolonas o aminoglicósi<strong>dos</strong>1,4,19-21 .El cuadro clínico no difiere en general <strong>de</strong> cualquierotitis <strong>externa</strong> y afecta a individuos <strong>de</strong> todas laseda<strong>de</strong>s, sin preferencia por sexo 17 . Generalmente sonunilaterales, pero hasta en 12% pue<strong>de</strong>n ser bilaterales23 . En un estudio retrospectivo <strong>de</strong> 132 pacientes,segui<strong>dos</strong> por un promedio <strong>de</strong> 25 días, se observó quelos síntomas más frecuentes son otalgia 48%, otorrea48%, pérdida auditiva 45%, plenitud ótica 33% ytinitus 6 . Dicha distribución <strong>de</strong> síntomas concuerdancon varios autores 9,22 . El prurito siempre ha sidoconsi<strong>de</strong>rado como un síntoma patognomónico, sinembargo, no siempre está presente y las series sonvariables entre 23% y 93% 6,7,15 para este síntoma. Alexamen físico se observa inflamación <strong>de</strong>l CAE yformación <strong>de</strong> <strong>de</strong>tritus con hifas. Los <strong>casos</strong> másseveros pue<strong>de</strong>n presentar perforaciones timpánicas,alteraciones <strong>de</strong>l oído medio y <strong>de</strong>l hueso temporal yasociarse a inmunosupresión 17 .249


REVISTA DE OTORRINOLARINGOLOGÍA Y CIRUGÍA DE CABEZA Y CUELLOAl momento <strong>de</strong>l diagnóstico el 25% ha recibidotratamiento <strong>de</strong> otitis media aguda 8 , sin embargo ennuestro medio creemos que es mayor. En USA el98% ha sido tratado con antibióticos tópicos, 49%con ciprofloxacino y el 21% con aminoglicósi<strong>dos</strong>.El diagnóstico es fundamentalmente clínico. Loscultivos son <strong>de</strong> rendimiento variable. En un estudioretrospectivo 4 , sólo el 22,6% fueron positivos yconfirmaron el diagnóstico. Otros han logradorendimientos cercanos al 79% 5,7 . Esto podría explicarsepor la similitud con la presentación clínica <strong>de</strong>una otitis <strong>externa</strong> bacteriana, resultado a menudo<strong>de</strong> un mal diagnóstico y tratamiento ina<strong>de</strong>cuadocon antibióticos tópicos en varias ocasiones. Engeneral los pacientes se automedican o se lesindican múltiples tratamientos antibióticos oralesantes <strong>de</strong>l diagnóstico correcto. De esta forma seelimina la flora bacteriana favoreciendo el crecimiento<strong>de</strong> la flora fúngica 19 .Las complicaciones son poco frecuentes alcanzandoel 10% a 20% <strong>de</strong> los <strong>casos</strong> según la serie,siendo la perforación timpánica la más frecuente.Infrecuentemente osteítis <strong>externa</strong> (


OTITIS EXTERNA MICÓTICA Y PERFORACIÓN TIMPÁNICA - S Ruz, H Breinbauer, C CorssenEl ácido bórico es un ácido débil usado frecuentementecomo antiséptico. Ha sido utilizadopara el tratamiento <strong>de</strong> infecciones fúngicas óticas yvaginales causadas por Candida albicans y paraprevención <strong>de</strong>l pie <strong>de</strong> atleta 8 .Un metaanálisis publicado en febrero <strong>de</strong>l2008 8 , que estudió to<strong>dos</strong> los grupos enuncia<strong>dos</strong>concluyó que <strong>de</strong> to<strong>dos</strong> los antifúngicos los másefectivos eran los azoles, segui<strong>dos</strong> por la nistatinay el tolnaftato. To<strong>dos</strong> sin efectos ototóxicos enmembranas timpánicas sanas. Muy poco existesobre la seguridad <strong>de</strong> los agentes antimicóticos enla presencia <strong>de</strong> perforaciones timpánicas. En unestudio <strong>de</strong> 22 <strong>casos</strong> <strong>de</strong> perforaciones timpánicasque fueron trata<strong>dos</strong> con azoles en ninguno <strong>de</strong> ellosse reportó ototoxicidad 24 .Con respecto a la literatura nacional, un estudio<strong>de</strong> 23 <strong>casos</strong> <strong>de</strong> otomicosis mostró que el agentemás frecuente es el Aspergillus níger y al evaluar lasensibilidad in vitro <strong>de</strong> los diferentes antifúngicoslos <strong>de</strong> mejor resultado fueron timerasol y terbinafina,seguido por econazol y clotrimazol 31 . Sinembargo el primero <strong>de</strong> éstos fue <strong>de</strong>saprobado porla FDA por su contenido <strong>de</strong> mercurio 8 .CONCLUSIÓNLa otitis <strong>externa</strong> micótica es una enfermedadprevalente que va en ascenso. Su diagnóstico esclínico basado en los síntomas, características <strong>de</strong>la otorrea y presencia <strong>de</strong> hifas. El cultivo, en unpaciente que cumpla con las características clínicasapoya el diagnóstico. Las perforacionestimpánicas asociadas a esta patología son pocofrecuentes (12%-16%), y en general <strong>de</strong> buen pronóstico,ya que la mayoría <strong>de</strong> ellas cicatriza enforma espontánea con el tratamiento, sin registrarpérdida auditiva permanente. El tratamiento habitualmenteconsiste en aseo local asociado aantimicótico tópico. Si bien no existe ningún estudioprospectivo respecto <strong>de</strong>l uso <strong>de</strong> antifúngicosen otomicosis con perforación timpánica, los <strong>casos</strong>reporta<strong>dos</strong> con uso <strong>de</strong> azoles, no muestranefectos ototóxicos, por lo que el tratamiento essimilar a su equivalente sin perforación. En los<strong>casos</strong> <strong>de</strong>scritos las pacientes evolucionaron <strong>de</strong>acuerdo a lo reportado en la literatura.BIBLIOGRAFÍA1. MCKEAN SA, HUSSAIN SS. <strong>Otitis</strong> <strong>externa</strong>. ClinOtolaryngol 2007; 32(6): 457-9.2. National Library for Health. <strong>Otitis</strong> <strong>externa</strong>. http://www.cks.library.nhs.uk/otitis_<strong>externa</strong> [acceso5 Marzo 2008].3. RAZA SA, DENHOLM SW & WONG JC. An audit ofclinical management of acute otitis <strong>externa</strong> inan ENT casualty clinic. J Laryngol Otol 1995;109: 130-3.4. HUESO GUTIÉRREZ P, JIMÉNEZ ALVAREZ S, GIL-CARCEDOSAÑUDO E, GIL-CARCEDO GARCÍA LM, RAMOS SÁNCHEZC, VALLEJO VALDEZATE LA. Presumption diagnosis:otomycosis. A 451 patients study. ActaOtorrinolaringol Esp 2005; 56(5): 181-6.5. NOYON P, PORTMANN D. L’Otite externe. Dossierd´Enseignement nº5. Rev Laryngol Otol Rhinol1997; 118: 213-20.6. HO T, VRABEC JT, YOO D, COKER NJ. Otomycosis:clinical features and treatment implications.Otolaryngol Head Neck Surg 2006; 135(5):787-91.7. PRADHAN B, TULADHAR NR, AMATYA RM. Prevalenceof otomycosis in outpatient <strong>de</strong>partment ofotolaryngology in Tribhuvan University TeachingHospital, Kathmandu, Nepal. Ann Otol RhinolLaryngol 2003; 112: 384-7.8. MUNGUIA R, DANIEL SJ. Ototopical antifungalsand otomycosis: A review. Int J PediatrOtorhinolaryngol 2008; 72: 453-9.9. KURNATOWSKI P, FILIPIAK A. Otomycosis: prevalence,clinical symptoms, therapeuticprocedure. Mycoses 2001; 44(11-12): 472-9.10. KAUR R, MITTAL N, KAKKAR M, ET AL. Otomycosis: aclinicomycologic study. Ear Nose Throat J2000; 79: 606-9.11. JADHAV VJ, PAL M, MISHRA GS. Etiologicalsignificance of Candida albicans in otitis <strong>externa</strong>.Mycopathologia 2003; 156: 313-5.12. VENNEWALD I, SCHONLEBE J, KLEMM E. Mycologicaland histological investigations in humans withmiddle ear infections. Mycoses 2003; 46: 12-8.13. MERCADO V, PIONTELLI E, LARREA R, HERRERA S, TORO M,ROJAS G. Consi<strong>de</strong>raciones micológicas en otitismedia crónica. Rev Otorrinolaring 1987; 47: 19-24.14. HOSHINO T, MATSUMOTO M. Otomycosis: sub<strong>de</strong>rmalgrowth in calcified mass. Eur ArchOtorhinolaryngol 2006; 263: 875-8.251


REVISTA DE OTORRINOLARINGOLOGÍA Y CIRUGÍA DE CABEZA Y CUELLO15. STERN JC, LUCENTE FE. Otomycosis. Ear NoseThroat J 1988; 67: 804-10.16. OZCAN KM, OZCAN M, KARAARSLAN A, KARAARSLAN F.Otomycosis in Turkey: predisposing factors,aetiology and therapy. J Laryngol Otol 2003;117: 39-42.17. FASUNLA J, IBEKWE T, ONAKOYA P. Otomycosis inWestern Nigeria. Mycoses 2008; 51(1): 67-70.18. MARTIN TJ, KERSCHNER JE, FLANARY VA. Fungalcauses of otitis <strong>externa</strong> and tympanostomytube otorrhea. Int J Pediatr Otorhinolaryngol2005; 69: 1503-8.19. JACKMAN A, WARD R, APRIL M, BENT J. Topicalantibiotic induced otomycosis. Int J PediatrOtorhinolaryngol 2005; 69: 857-60.20. HAYNES DS, RUTKA J, HAWKE M, ROLAND PS.Ototoxicity of ototopical drops—an update.Otolaryngol Clin North Am 2007; 40(3): 669-83.21. ARAIZA J, CANSECO P, BONIFAZ A. Otomycosis: clinicaland mycological study of 97 cases. Rev LaryngolOtol Rhinol (Bord) 2006; 127(4): 251-4.22. MGBOR N, GUGNANI HC. Otomycosis in Nigeria:treatment with mercurochrome. Mycoses 2001;44: 395-7.23. TISNER J, MILLÁN J, RIVAS P, ADIEGO Y, CASTELLOTE A,VALLÉS H. Otomicosis y aplicación tópica <strong>de</strong>timerosal: estudio <strong>de</strong> 152 <strong>casos</strong>. Acta OtorrinolaringolEsp 1995; 46: 85-9.24. HURST WB. Outcome of 22 cases of perforatedtympanic membrane caused by otomycosis. JLaryngol Otol 2001; 115: 879-80.25. YOUSSEF YA, ABDOU MH. Studies on fungusinfection of the <strong>externa</strong>l ear. II. on thechemotherapy of otomycosis. J Laryngol Otol1967; 81: 1005-12.26. STERN JC, SHAH MK, LUCENTE FE. In vitroeffectiveness of 13 agents in otomycosis andreview of the literature. Laryngoscope 1988;98: 1173-7.27. PAULOSE KO, AL KHALIFA S, SHENOY P, ET AL.Mycotic infection of the ear (otomycosis): aprospective study. J Laryngol Otol 1989; 103:30-5.28. BASSIOUNY A, KAMEL T, MOAWAD M.K, HINDAWY D.S.Broad spectrum antifungal agents inotomycosis. J Laryngol Otol 1986; 100: 867-73.29. PIANTONI S, NARNE S, BOTTIN R, SOLAZZO A, BIANCHIW. 1% bifonazole lotion in the therapy ofotomycosis. Clin Ter 1989; 130: 23-7.30. THOMPSON L. Antifúngicos. Rev Chil Infectol2002; 19(1): 22-5.31. JOFRÉ D, GONZÁLEZ I, IÑIGUEZ M, GUZMÁN A. Sensibilidadin vitro a los distintos antifúngicos tópicosdisponibles en otomicosis <strong>externa</strong>. Rev OtorrinolaringolCir Cabeza y Cuello 2005; 65: 173-8.32. BASSIOUNY A, KAMEL T, MOAWAD MK, HINDAWY DS.Broad spectrum antifungal agents in otomycosis.J Laryngol Otol 1986; 100 (8): 867-73.33. MARSH RR, TOM LW. Ototoxicity of antimycotics.Otolaryngol Head Neck Surg 1989; 100: 134-6.34. TOM LW. Ototoxicity of common topicalantimycotic preparations. Laryngoscope 2000;110: 509-16.Dirección: Dra. Samanta Ruz GómezServicio <strong>de</strong> Otorrinolaringología, Hospital San Juan <strong>de</strong> DiosAvenida Los Militares 5777 Depto. 1303, Las Con<strong>de</strong>s, Santiago252

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!