El macroeconomista corno cientifico y como ingenierok* - Uam
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<strong>El</strong> <strong>macroeconomista</strong><br />
<strong>corno</strong> <strong>cientifico</strong> y <strong>como</strong> <strong>ingenierok*</strong><br />
* Robert-M. Beren Professor of Econon~ics,<br />
Harvard University. Estoy agradecido con Steven Braun, James<br />
Hines, Donald Marron, David Romer, Andrei Shleifer, Timothy Taylor, Michael Walkman y Noam Yuchtrnan<br />
por sus valiosos comentarios.<br />
** Originalmente publicado <strong>como</strong> "The macroeconomist as Scientist and Engineer", Journal of Economic<br />
Perspectives, vol. 20, num. 4, Fall 2006, pp. 29-46 (traduccion de Carlos A. Rozo). Se agradece a G. Mankiw<br />
el apoyo para publicar esta traduccion.
Est~cn.;ayo ofrece un,i brt>ve Ii~stol-1'1 cle 1'1 m~lcroecononiia,<br />
con~untamc~itt~ con un'i e\~aluac~on eft. lo<br />
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pmfeiCtn ha evoluc~onaclo par los estuer70s clt> dos<br />
t~ps cic mcicroecc~no~ii~stcis -,icluellos que rnt~cnelm<br />
estc campo <strong>como</strong> un tipo cle ingenieri'i ~ic1ut~llosquc<br />
prefc.r~rian clue fuc~-~i ~iiuclio m6s Lln clueIi,ict.r<br />
cientif~co Fl cwf'isis clc la 1n1 est~gac Ion '1.1 los<br />
mcicrocconomIstL~s hci variC1clo a lo largo clt,l tlempo<br />
cntrc estos dos rnoti\ c>s pero cw la nied~ci~i clue c.1<br />
c~irnpo cie la ~n'icrnt~~o~io~ii~~~<br />
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clcscicucrcio sustdnt~\ o entrc Ins c~cmt~tlcos ! Ins ingtmicros<br />
clcbc ser un hcclio \,t\rgonLoso para toclos<br />
10s clue, tral~cijan c.n estc c~lnipo. Untc es clue 1
10s economistas les gusta adop-<br />
tar la pose de <strong>cientifico</strong>s, yo lo si.<br />
debido a que a menudo lo hago.<br />
Cuando enseiio a estudiantes de<br />
licenciatura muy conscientemen-<br />
te describo el campo de la econo-<br />
mia <strong>como</strong> una ciencia, de tal<br />
mod0 que ningun estudiante co-<br />
mience el curso pensando que el o ella se esta em-<br />
barcando en algun esfuerzo academico insulso.<br />
Nuestros colegas en el Departamento de Fisica pue-<br />
den encontrar ocurrente que 10s vemos <strong>como</strong> pri-<br />
mos cercanos, pero nosotros estamos preparados<br />
para recordarle a cualquiera que desee escuchar que<br />
10s economistas formulan teorias con precision ma-<br />
tematica, recolectan inmensas bases de datos sobre<br />
el comportamiento agregado e individual, y utili-<br />
zan las mas sofisticadas tecnicas estadisticas para<br />
llegar a resultados empiricos libres de juicios per-<br />
sonales e ideologicos (o por lo menos nos gusta pen-<br />
sar asi).<br />
Despues de pasar dos afios en Washington<br />
<strong>como</strong> asesor economico en un periodo en el cual la<br />
economia de Estados Unidos estaba tratando de<br />
salir de una recesion, he sido recordado que el campo<br />
de la macroeconomia nacio no <strong>como</strong> una ciencia<br />
sino mas bien <strong>como</strong> un tipo de ingenieria. Dios<br />
coloco a 10s <strong>macroeconomista</strong>s sobre la Tierra no<br />
para que propusieran y probaran teorias elegantes<br />
sin0 para que resolvieran problemas practicos.<br />
Aceptemos ademas, que 10s problemas que gl nos<br />
asipo no son de dimensiones modestas. La encrucijada<br />
que dio origen a nuestra profesion -la Gran<br />
Depresion de la decada de 1930- fue un declive economic~<br />
de una escala sin precedentes, el ingreso se<br />
deprimio tanto y el desempleo fue tan extendido<br />
que no es exageracion decir que la viabilidad del<br />
sistema capitalista estuvo puesta en duda.<br />
Este ensayo ofrece una breve historia de la<br />
macroeconomia, conjuntamente con una evaluacion<br />
de lo que hemos aprendido. Mi premisa de<br />
partida es que la profesion ha evolucionado por<br />
10s esfuerzos de dos tipos de <strong>macroeconomista</strong>s<br />
-aquellos que entienden este campo <strong>como</strong> un tipo<br />
de ingenieria y aquellos que preferirian que fuera<br />
mucho mas un quehacer <strong>cientifico</strong>. Los ingenieros<br />
se dedican, primero y ante todo, a solucionar<br />
problemas. Por el contrario, el objetivo de 10s <strong>cientifico</strong>s<br />
es entender <strong>como</strong> funciona el mundo. <strong>El</strong> enfasis<br />
de la investigacion en macroeconomia ha<br />
variado a lo largo del tiempo entre estos dos motivos.<br />
Mientras que 10s primeros <strong>macroeconomista</strong>s<br />
eran ingenieros tratando de solucionar problemas<br />
practicos, 10s <strong>macroeconomista</strong>s de las pasadas<br />
decadas han estado mas interesados en desarrollar<br />
herramientas analiticas y en proponer principios<br />
teoricos. Estas herramientas y estos principios,<br />
sin embargo, han tenido serias limitaciones<br />
para encontrar aplicaciones practicas. En la medida<br />
que el campo de la macroeconomia ha evolucionado,<br />
un tema recurrente es la interaccion -al-
gunas veces productiva otras no tanto- entre 10s<br />
<strong>cientifico</strong>s y 10s ingenieros. <strong>El</strong> desacuerdo sustantivo<br />
entre la ciencia y la ingenieria de la macroeconomia<br />
debe ser un hecho vergonzoso para todos<br />
10s que trabajamos en este campo.<br />
Para evitar cualquier confusion, he de decir desde<br />
el principio que la historia que voy a narrar no<br />
es una de chicos malos y chicos buenos. Ni 10s<br />
<strong>cientifico</strong>s rii 10s ingenieros tienen derecho a mayor<br />
virtud. La historia tampoco es una de pensadores<br />
sofisticados y de plolneros de mente llana.<br />
Los profesores que ensefian la ciencia no son tipicamente<br />
mejores en resolver problemas de ingenieria<br />
que 10s profesores de ingenieria lo Sean en<br />
resolver cuestiones cientificas. En ambos campos,<br />
10s problemas fundamentales son temas complicados<br />
a1 igual que intelectualmente retadores. Asi<br />
<strong>como</strong> el mundo necesita igualmente <strong>cientifico</strong>s que<br />
ingenieros, el niundo necesita <strong>macroeconomista</strong>s<br />
con estas dos perspectivas. Pero, pienso que la disciplina<br />
avanzaria mas serena y productivamente<br />
si los macroecono~nistas siempre mantuvieramos<br />
en mente que la profesion tiene esta doble funcion.<br />
LA REVOLUCION KEYNESIANA<br />
La palabra "macroeco~iomia" aparecio inicialmente<br />
en la literatura acadernica en la decada de 1940.<br />
Los temas de la rnacroeconomia -idlacion, desempleo,<br />
creciniiento economico, el ciclo economico, y<br />
las politicas monetarias y fiscal- han interesado a<br />
10s economistas descie hace mucho tiempo. En el<br />
siglo XVIJI, For ejemplo, David Hume (1752) escribib<br />
sobre 10s efectos de corto y de largo plazo de las<br />
inyecciones monetarias; en muchos aspectos, su<br />
analis~s parece notablemente similar a lo que uno<br />
podria esperar que un economista monetario mo-<br />
derno o de un banquero central. Arthur Pigou publico<br />
un libro titulado Indzrstrial Flrrctr~ntions en el<br />
que trato de explicar 10s ciclos economicos. De<br />
cualquier manera, el campo de la macroeconomia<br />
<strong>como</strong> area activa e independiente de investigacion<br />
apareci6 a la sombra de la Gran Deyresion;<br />
no hay nada <strong>como</strong> una crisis para encauzar el<br />
pensamiento.<br />
La Gran Depresion tuvo un profundo impact0<br />
en aquellos que la vivieron. En 1933, el desenipleo<br />
en Estados Unidos habia alcanzado el 25 por ciento<br />
y el product0 nacional estaba 31 por ciento por<br />
debajo del nivel de 1929. Subsecuentemente, todas<br />
las recesiones de la economia de Estados Unidos<br />
han sido simples oleajes en un mar tranquilo comparados<br />
con este tslrnnirii. Ensayos autobiograficos<br />
de prominentes economistas de aquella epoca, tales<br />
colno Lawrence Klein, Franco Modigliani, Paul<br />
Samuelson, Robert Solow y James Tobin, confirman<br />
que la Gran Depresion fue un factor determinante<br />
en sus carreras profesionales (Breit y Hirsch, 2004).<br />
Ln Teouin Gcn~.r.al de John Maynard Keynes fue el<br />
punto de partida en las discusiones profesionales<br />
sobre con10 entender este tip0 de acontecimientos.<br />
Estos cinco premios Nobel confirman esta experiencia.<br />
Tobin reyorta la siguiente reaccion desde<br />
Harvard, dortde era estudiante a finales de la decada<br />
de 1930 y principios de 1940: "10s profesores<br />
de rnayor antigiiedad eran 10s ~nas hostiles I...] Los<br />
profesores mas jovenes y 10s estudiantes de<br />
posgrado ayudantes cle investigacion estuvieron<br />
mucho mas entusiasmados con el libro cle Keynes".<br />
Como ocurre a menudo, 10s jovenes tenian mas vision<br />
de futuro que 10s mayores sobre el inipacto de<br />
las nuevas ideas. Keynes enipataba con Alfred<br />
Marshall <strong>como</strong> 10s economistas mas frecuentemente<br />
citados en 10s aiios treinta y fue el segundo mas<br />
citado en 10s afios cuarenta despues de Hicks
(Quandt, 1976). Esta influencia persistio por mu-<br />
chos aiios, de tal mod0 que Keynes aparecia en la<br />
posicion 14 entre 10s mas citados para el period0<br />
de 1966 a 1986, a pesar de que habia muerto dos<br />
decadas antes (Garfield, 1990).<br />
La revolucion keynesiana influyo no solo en la<br />
investigacion economica sino tambien en la ense-<br />
iianza. <strong>El</strong> libro clasico de texto de Samuelson<br />
Econolrlics fue publicado por primera vez en 1948 y<br />
su organizacion reflejaba su percepcion de lo que<br />
la profesion tenia que ofrecer a1 lector comun y co-<br />
rriente. T,a oferta y la demanda, conceptos que hoy<br />
en dia son la esencia de lo que ensefiamos a 10s<br />
alumnos de primer ingreso, no aparecen sino has-<br />
ta la pagina 447 de un libro de 608 paginas. Ida<br />
macroeconomia aparece en primer plano, inclu-<br />
yendo conceptos <strong>como</strong> el multiplicador fiscal y la<br />
paradoja del ahorro. Samuelson escribio (p. 253),<br />
"aunque mucho de este analisis se le debe a un<br />
economista ingles, John Maynard Keynes [...I hoy<br />
estos fundamentos estan siendo aceptados por eco-<br />
nomistas de todas las escuelas del pensamiento".<br />
Cuando un economista contemporaneo lee La<br />
Ieoria General, la experiencia es a la vez estimulan-<br />
te y frustrante. Por un lado, el libro es la palabra de<br />
una mente genial enfocada a un problema social<br />
cuya actualidad y relevancia no puede ser cuestio-<br />
nada. Por otro, aunque el libro es exhaustivo en su<br />
analisis a veces parece 16gicamente incompleto.<br />
Demasiados hilos quedan fuera de lugar. <strong>El</strong> lector<br />
se pregunta constantemente, jcual, exactamente,<br />
es el modelo economico que integra todas estas<br />
piezas?<br />
lnmediatamente a la publicacion de La Teorio<br />
General de Keynes, una generacion de macroeco-<br />
nomistas trabajaron para responder a esta pregun-<br />
ta en el intento de transformar esta gran vision en<br />
un modelo concreto y sencillo. Una de las prime-<br />
ras y mas influyentes iniciativas fue el modelo IS-<br />
LM propuesto por un hombre cle 39 afios, John<br />
Hicks (1937). Por su parte, Franco Modiagliani<br />
(1944), entonces de 26 aiios, amplio y explico el<br />
modelo mas elaboradamente. Hasta el dia de hoy,<br />
el modelo IS-LM se mantiene <strong>como</strong> la interpretacion<br />
de Keynes ofrecida por 10s libros de texto mas<br />
usados en cursos de macroeconomia a nivel intermedio.<br />
Algunos keynesianos criticos del modelo<br />
IS-LM se quejan de que 6ste simplifica en extremo<br />
la vision econdmica propuesta por Keynes en Ln<br />
Teoria General. En cierto grado esto puede ser cierto.<br />
<strong>El</strong> proposito del modelo era simplificar una linea<br />
de argumentacion que era niuy dificil de entender.<br />
<strong>El</strong> limite entre simplificar y sobre simplificar<br />
no es del todo preciso.<br />
Mientras economistas te6ricos <strong>como</strong> Hicks y<br />
Modigliani estaban desarrollando modelos keynesianos<br />
apropiados para el pizarron de 10s salones<br />
de clase, econometristas <strong>como</strong> Klein estaban trabajando<br />
en modelos mas practicos que pudieran ser<br />
contrastados con la informacion empirica y ser<br />
utilizados para el analisis de las politicas economicas.<br />
En el tiempo, y en la esperanza de ser mas<br />
realistas, 10s modelos se hicieron mas complejos,<br />
eventualmente llegando a incluir cientos dr variables<br />
y de ecuaciones. Para la decada de 1960, existian<br />
muchos modclos que competian entre sf, cada<br />
uno basado en las ideas de prominentes keynesianos<br />
del momento, tal <strong>como</strong> el Modelo Wharton<br />
asociado a Klein, el modelo DRI (Data Resources,<br />
Inc.) asociado a Otto Eckstein, y el modelo MPS<br />
(MIT-Penn-Social Research Council) asociado con<br />
Albert Aldo y Modigliani. Estos niodelos fueron<br />
ampliamente utilizados tanto para pronosticar<br />
<strong>como</strong> para el analisis de politicas publicas. <strong>El</strong> model~<br />
MPS elaborado y actualizado por el Banco de<br />
la Reserva Federal por muchos aiios seria el pre-
cursor del ~noclelo ~RB/ us, todavia utilizado por el<br />
personal del Ranco Central.<br />
Aunque estos modelos difieren en 10s detalles,<br />
sus semejanzas son mas importantes que sus diferencias.<br />
Todos ellos tienen, esencialmente, una estructura<br />
keynesiana. En la mente de cada uno de<br />
sus constructores estaba el mismo modelo que se<br />
ensefia a 10s estudiantes de licenciatura hoy en<br />
dia: una curva IS que relaciona las condiciones financieras<br />
y la politica fiscal a 10s co~nponentes<br />
del yroducto nacional bruto, y una curva LM que<br />
deterrnina la tasa de interes <strong>como</strong> el precio que da<br />
equrlibrio a la dernanda y la oferta por dinero, con<br />
algtin tipo de curva de Phillips que describe <strong>como</strong><br />
el nivel de precios responde en el largo plazo a<br />
cambios en la economia.<br />
En el campo de la ciencia, Ln Teorin General, fue<br />
un acontecimiento extraordinano. La revoluci6n<br />
que inspiro atrajo muchas de las mentes mas brillantes<br />
del momento. La prodigiosa produccion<br />
brind6 una nueva forma de entencler las fluctuaciones<br />
de corto plazo. A1 reflexionar sobre estos<br />
acontecirnientos, Samuelson (1988) ofrecio un conciso<br />
resumen: "La revolucion keynesiana ha sido<br />
el acontecimiento mas significative en la ciencia<br />
economica del siglo xx". Este sentimiento es cornpartido<br />
por muchos economistas de su generacion.<br />
Aun asi, la revoluci6n keynesiana no puede ser<br />
razonada simplemente <strong>como</strong> un avance <strong>cientifico</strong>.<br />
En grnn med~da, Keynes y 10s constructores de los<br />
rnodelos keynesianos compartian la perspectiva<br />
de 10s ingenieros. <strong>El</strong>los estaban motivados por problemas<br />
del mundo real, y una vez que desarrollaron<br />
sus teorias, estaban muy entusiasliiados en Ilevarlos<br />
a la practiccl. Hasta su muerte en 1946,<br />
Kevnes estuvo ferreamente coniprometido en la<br />
asisoria sobre opciones de politica econ6mlca. Pero<br />
igualrnente, lo estuvieron 10s primeros keynesianos.<br />
Tobili, Solow, y Eckstein sacrificaron sus empeiios<br />
academicos durante la decada de 1960 para tra-<br />
bajar en el Consejo de Asesores Economicos del<br />
presidente. Ida iniciativa para bajar las tasas<br />
irnpositivas de la administration Kennedy, eveii-<br />
tualmente ayrobada en 1964, fue en muchas de<br />
sus lineas el resultado directo del consenso<br />
keynesiano emergente y de 10s modelos que lo re-<br />
presentaron.<br />
LoS NUEVOS CLASICOS<br />
Para finales de la decada de 1960, fisuras en el<br />
consenso keynesiano empezaban a manifestarsc.<br />
Estas fisuras se convirtieron en grietas que eventualmente<br />
derrumbaron el consenso niacroeco-<br />
~ioniico y deterioraron la confianza en 10s modelos<br />
econometricos clel moniento. En su lugar, un punto<br />
de vista sustentado en el pensamiento clasico<br />
de la econornia comenzo a emerger.<br />
La primera generacion de la nueva economia clasics<br />
fue el monetarism0 y su mas notable expositor<br />
fue Milton Friedman. <strong>El</strong> trabajo inicial de Frieclman<br />
(1957) sobre la hipotesis del ingreso permanente no<br />
trato directamente sobre el dinero o sobre 10s ciclos<br />
economicos, pero tuvo i~nplicaciones para la teoria<br />
de los ciclos economicos. En parte, este fue un ataque<br />
a la funcion de consumo keynesiana, la cual<br />
proporcionaba el fundamento de 10s multiplicadores<br />
de la politica fiscal que eran centrales en la<br />
teoria keynesiana y en sus recomendaciones de politica.<br />
Si la propension marginal a1 consumo de un<br />
ingreso teriiporal es pequeiia, <strong>como</strong> la teoria de<br />
Friedman lo sugiere, la politica fiscal tendria un<br />
ilnpacto inucho menor sobre el ingreso de equilibrio<br />
que lo que muchos keynesianos argumentaban.
<strong>El</strong> trabajo de Friedman y Schwartz (1 963), Ln<br />
liistovin vronefnrin de 10s Esfnrlos Unidos, estuvo mas<br />
directamente enfocado a 10s ciclos economicos lo<br />
cual contribuyo a quebrar el consenso keynesiano.<br />
La mayoria de 10s keynesianos veian a la economia<br />
<strong>como</strong> inherentemente volatil, constantemente<br />
zarandeada por 10s cambios en 10s "espiritus animales"<br />
de 10s inversionistas. Friedman y Schwartz<br />
sugirieron que la inestabilidad economics no se le<br />
deberia de atribuir a 10s agentes privados, mas bien,<br />
se debia a politicas monetarias ineptas. La implicacidn<br />
era que las autoridades monetarias deberian<br />
estar satisfechas si no causan daiio lo cual<br />
ocurriria al seguir reglas simples de politica monetaria.<br />
Aunque la regla propuesta por Friedman<br />
de una tasa constante de crecimiento de 10s agregados<br />
nlonetarios tiene pocos adherentes hoy en<br />
dia, ella fue un precursor original de 10s regimenes<br />
de objetivos inflacionarios a 10s que ahora se adhieren<br />
muchos de 10s bancos centrales del mundo.<br />
<strong>El</strong> discurso de Friedman en su toma de posesion<br />
<strong>como</strong> presidente de la Asociacion Americana<br />
de Economia en 1968, junto con J'helps (1968), enfoco<br />
baterias sobre el elemento mas debil dcl model~<br />
keynesiano: la compensacion reciproca entre<br />
la inflacion y el desempleo representado por la<br />
curva de Phillips. Por lo menos desde Samuelson<br />
y Solow (1960), algun tip0 de curva de Phillips<br />
habia sido parte del consenso keynesiano, aunque<br />
no fuera una posicion endosada por el yropio<br />
Keynes.<br />
Samuelson y Solow entendieron la tenuidad teorica<br />
de esta compensacion, y su trabajo estaba lleno<br />
de advertencias sobre el yorque este resultado<br />
yodria ser diferente en el corto que en el largo plazo.<br />
Pero la literatura subsiguiente olvido estas advertencias<br />
con demas~ada facilidad. La curva cle<br />
Phillips proporcionaba una forma conveniente<br />
para completar el modelo keynesiano, el cual siempre<br />
tuvo problemas para explicar por que 10s precios<br />
fallaban en lograr el equilibrio de mercado y<br />
<strong>como</strong> el nivel de precios se ajustaba en el tiempo.<br />
Friedman argumento que la compensacion reciproca<br />
entre inflacihn y desempleo no se sostenia en<br />
el largo plazo, <strong>como</strong> si lo hacia en la logica de 10s<br />
principios clasicos en que la moneda era neutral.<br />
Esta compensacion aparecia en 10s gastos debido a<br />
que, en el corto plazo, la inflacion es siempre anticipada<br />
y la inflacion anticipada puede reducir el desempleo.<br />
<strong>El</strong> mecasiismo particular que Friedman sugirio<br />
fue la ilusion monetaria que afecta a 10s<br />
trabajadores. Mas importante para el desarrollo de<br />
la macroeconomia fue que Friedman colocci las expectativas<br />
en el centro de la discusion.<br />
Esta 16gica preparo las condiciones para la segunda<br />
generacion de la rlueva economia clasica:<br />
la revolucion de las expectativas racionales. En una<br />
serie de articulos muy influyentes, Robert Lucas<br />
extendio el argument0 de Friedman. En su articulo<br />
"Econometric Policy Evaluation: A Critique" 1,ucas<br />
(1976) argumento que 10s modelos keynesianos<br />
eran inutiles para el analisis de las politicas ya<br />
que fallaban en tomar seriamente las expectativas,<br />
en consecuencia, las relaciones empiricas estimadns<br />
con estos modelos no se mautendrian si una<br />
nueva politica fuera puesta en practica. Lucas<br />
(1973) tambikn propuso una teoria del ciclo economic~<br />
basada en 10s supuestos de informacion imperfects,<br />
expectativas racionales y cquilibrio de<br />
mercado. En esta teoria, la politica monetaria tiene<br />
efectos solamente en tanto que ella sorprenda a 10s<br />
agentes y 10s confunda en rclacion con 10s precios<br />
relativos. Barro (1977) ofrecih evidencia de queeste<br />
modelo era consistente con series de tiempo para<br />
Estados Unidos. Sargent y Wallace (1973) li~cieron<br />
notar una implication clave para la politica:
debido a que es imposible sorprender permanen-<br />
temente a individuos racionales, una politica mo-<br />
nctaria sistematicamente orientada a la estabiliza-<br />
cion de la economia esta condenada a1 fracaso.<br />
La tercera generacion de la nueva economia cla-<br />
sics fueron las teorias del ciclo real de 10s negocios<br />
de Kydland y Prescott (1982) y de Long y Plosser<br />
(1983). A1 igual que las teorias de Friedman y Lucas<br />
6stas fueron construidas sobre el supuesto de que<br />
10s precios se ajustan instantaneamente para lograr<br />
el equilibrio de mercado -una diferencia radical con<br />
la teorizacion keynesiana. Pero a diferencia de sus<br />
predecesores de la nueva economia clasica, las teo-<br />
rias del ciclo real de 10s negocios omitieron cual-<br />
quier participation de la politica monetaria en ex-<br />
plicar las fluctuaciones economicas.<br />
<strong>El</strong> enfasis se inclino hacia la importancia de los<br />
choques aleatorios que proporciona la tecnologia<br />
p a la sustitucion intertemporal en el consumo y en<br />
el tiempo de ocio a que estos choques inducen.<br />
Como resultado de estas tres generaciones de la<br />
nueva economia clasica, el campo de la macroeco-<br />
nomia se hizo constantemente mas riguroso y con-<br />
tinuamente mas dependiente de las herramientas<br />
de la niicroeconomia. Los modelos del ciclo real de<br />
10s negocios fueron ejemplos muy esyecificos y<br />
dinamicos de la teoria general del equilibrio de<br />
Arrow y Debreu. Aun mas, este metoclo se convir-<br />
ti6 en uno de sus principales atractivos. Con el<br />
tiempo, algunos proponentes de esta orientacion<br />
han dejado de lado el supuesto de que el ciclo de<br />
10s negocios es determinado por factores reales en<br />
oposicion de las fuerzas monetarias y han comen-<br />
zado a enfatizar las contribuciones metodologicas<br />
de este trabajo. Hoy, muchos <strong>macroeconomista</strong>s<br />
en la tradicion de 10s nuevos clasicos estan satisfe-<br />
chos de aceptar el supuesto keynesiano de precios<br />
pegajosos, en tanto este suyuesto estk amarrado<br />
en un modelo rigurosarnente adecuado en el cu,ll<br />
10s agentes economicos sean racionales y previso-<br />
res. Debido a1 camhio de enfasis, la terminologia<br />
ha evolucionado y esta clase de trabajo ahora a<br />
menudo se le designa conio "equilibrio general<br />
dinamico estocastico". Pero me estoy adelantando<br />
en la historia.<br />
Cuando las tres gencraciones de 10s nuevos cla-<br />
sicos aparecieron en la discusion en las decadas<br />
de 1970 y 1980, uno de sus principles objetivos<br />
era socavar 10s viejos modelos macroeconilmicos<br />
keynesianos tanto con10 instrurnentos <strong>cientifico</strong>s<br />
<strong>como</strong> instrumentos de ingenieria. En su articulo<br />
"After Keynesian Mncroeconomics", Lucas y<br />
Sargent (1979) escribieron: "En terminos de politi-<br />
ca econornica, el heclio central es que las recomen-<br />
daciones keynesianas de politica no tienen bases<br />
mas solidas, en un sentido <strong>cientifico</strong>, que las reco-<br />
mendaciones de 10s economistas no keynesianos,<br />
o incluso de 10s no economistas". Auuque Sargent<br />
y Lucas pensaron que la ingenieria keynesiana<br />
estaba sustentada en bases cientificas defectuosas,<br />
ellos sabian que la escuela de 10s nuevos clasicos<br />
(1979) aun no tenia un modelo que estuviera listo<br />
para ser llevado a Washington: "Nosotros consi-<br />
deramos que 10s mejores modelos de equilibrio ge-<br />
neral actualmente existentes son prototipos para<br />
lnejores y futuros modelos 10s cuales, esperamos,<br />
tendran UII uso practico en la formulacion de poli-<br />
ticas". <strong>El</strong>los tarnbien se aventuraron a afirmar que<br />
tales modelos estarian disponibles "en diez aiios,<br />
si sc tiene suerte". Regresare mas adelat~te a la pregunta<br />
de si esta perspectiva se hizo realidad <strong>como</strong><br />
ellos esperaban.<br />
Como estas declaraciones sugieren, aquellos<br />
comprometidos en el movimiento de los nuevos<br />
clasicos no eran timidos acerca de sus intenciones<br />
11i modestos acerca de sus alcances. Lucas emitio
la afirmacion mas categorica a1 respecto en un ar-<br />
ticulo de 1980 titulado "The death of Keynesian<br />
Economics":<br />
Uno no puede encontrar economistas buenos y me-<br />
nores de cuarenta aiios que se identifiquen o iden-<br />
tifiquen su trabajo <strong>como</strong> keynesiano. De hecho, la<br />
gente se ofende si st. les refiere <strong>como</strong> keynesianos.<br />
En seminarios de investigacion, 10s participantes<br />
ya no toman seriamente la teoria keynesiana, la<br />
audiencia comienza a chismear y a sonreir unos<br />
con otros.<br />
Pero justo cuando Lucas escribia la eulogia de<br />
la economia keynesiana, la profesion estaba a pun-<br />
to de dar la bienvenida a la generacion de "nuevos<br />
keynesianos".<br />
LOS NUEVOS KEYNESIANOS<br />
Los economistas atraidos a1 enfoque keynesiano<br />
del ciclo economico han estado desconcertados yor<br />
el dilema de 10s microfundamentos. De hecho, en<br />
un articulo de 1946 Lawrence Klein, uno de 10s<br />
primeros en usar el termino macroeconomia, co-<br />
menzo de la s'iguiente manera:<br />
Muchos de 10s modelos matematicos recientemen-<br />
te elaborados sobre sistemas economicos, especial-<br />
mente 10s de teorias del ciclo economico, estan muy<br />
ligeramente relacionados con el comportamiento<br />
individual de 10s hogares o de las empresas que<br />
deberia de ser la base de todas las teorias del com-<br />
portamiento econ6mico.<br />
Todos 10s economistas modernos son, en algun<br />
grado, clasicos. Todos ensefiamos a nuestros alum-<br />
nos 10s temas de la optimizacion, el equilibrio y la<br />
eficiencia de rnercado. Como reconciliar estas dos<br />
visiones de la economia -una fundada sobre la<br />
mano invisible que Adam Smith y las curvas de<br />
oferta y de~nanda de Alfred Marshall, y la otra basada<br />
en el analisis de Keynes de una econo~nia<br />
que sufre una insuficiencia de demanda agregada-<br />
ha sido la preocupacion profunda y constante<br />
desde que la macroeconomia comenzo <strong>como</strong> un<br />
campo de estudio independiente.<br />
Lo primeros keynesianos, tales <strong>como</strong> Samuelson,<br />
Modigliani y Tobin, pensaron que ellos habian reconciliado<br />
estas dos visiones en lo que a veces es<br />
llamada la "sintesis neoclasica keynesiana". Estos<br />
economistas pensaron que la teoria clasica de<br />
Smith y Marshall era correcta en el largo plazo,<br />
pero que la mano invisible podria ser paralizada<br />
en el corto plazo <strong>como</strong> 10s postulara Keynes. <strong>El</strong><br />
horizonte temporal era muy importante debido a<br />
que algunos precios -singularmente notable el precio<br />
del trabajo- se ajustan lentamente en el tiempo.<br />
Los primeros keynesianos pensaron que 10s modelos<br />
clasicos describian el equilibrio hacia el cual<br />
la economia gradualmente evolucionaba, pero que<br />
10s modelos keynesianos ofrecian una mejor descripci6n<br />
de la economia en cualquier momento<br />
cuando 10s precios son razonablemente tornados<br />
<strong>como</strong> predeter~ninados.<br />
La sintesis neoclasica keynesiana es coherente,<br />
pero tambien es vaga e incompleta. Mientras que<br />
10s economistas de la nueva escuela clasica respondian<br />
a estos defectos rechazando la sintesis y<br />
comenzando de cero, 10s nuevos keynesianos pensaron<br />
que habia mucho que preservar. Su objetivo<br />
fue usar las herramientas de la microeconomia<br />
para dar mayor precision a1 debil compromiso logrado<br />
por 10s primeros keynesianos. La sintesis<br />
neoclasica keynesiana era <strong>como</strong> una casa cons-
truida en la decada de 1940. Los nuevos clasicos<br />
miraban a sus sistemas anacronicos y concluian<br />
que debian ser eliminados, mientras que 10s nue-<br />
vos keynesianos admiraban la artesania de 10s vie-<br />
jos maestros y la aceptaban <strong>como</strong> una oportuni-<br />
dad para una reconstruccion mayor.<br />
La primera generacion de investigacion que co-<br />
rrectamente puede ser llamada "nueva keyne-<br />
siana" es la que trabajo sobre equilibrio general<br />
(Barro y Grossman, 1971; Malinvaud, 1997). Estas<br />
teorias se proponian utilizar las herramientas de<br />
analisis del equilibrio general para entender la<br />
asignacion de recursos que resulta cuando 10s mer-<br />
cados no logran el equilibrio. Los salarios y 10s<br />
precios eran tornados <strong>como</strong> predeterminados. <strong>El</strong><br />
enfasis era en entender <strong>como</strong> el fracas0 de un mer-<br />
cado para lograr el equilibrio influia en la oferta y<br />
la demanda de mercados relacionados. De acuer-<br />
do con estas teorias, la economia se puede encon-<br />
trar en uno de varios regimenes, dependiendo<br />
en cuales mercados estan experimentando un ex-<br />
ceso de oferta y cuales estan experimentando un<br />
exceso de demanda. <strong>El</strong> regimen mas interesante<br />
-en el sentido de que corresponde mejor a lo que se<br />
observa durante una recesion economica- es el asi<br />
llamado regimen "keynesiano" en el cual tanto el<br />
mercado de bienes <strong>como</strong> el de trabajo exhiben un<br />
exceso de oferta. En el regimen keynesiano, el des-<br />
empleo aparece debido a que la demanda por tra-<br />
bajo es demasiado baja para asegurar pleno em-<br />
pleo a1 nivel de salario existente, la demanda por<br />
trabajo es baja debido a que las empresas no pue-<br />
den vender todo lo que desean a 10s precios co-<br />
rrientes; y la demanda por la produccion de las<br />
empresas es inadecuada porque muchos consu-<br />
midores estan desempleados. Las recesiones y las<br />
depresiones resultan de un circulo vicioso de in-<br />
suficiencia de demanda, y un estimulo a la demanda<br />
puede tener efectos multiplicadores.<br />
La segunda generacion de investigacion en la<br />
logica de 10s nuevos keynesianos apuntaba a explorar<br />
<strong>como</strong> el concept0 de expectativas racionales<br />
podria ser usado en lnodelos que carecian del<br />
supuesto cle equilibrio de mercado. En cierta manera,<br />
este trabajo respondia a la conclusion de la<br />
irrelevancia de la politica monetaria a la que llegaron<br />
Sargent y Wallace (1975) demostrando <strong>como</strong><br />
una politica monetaria sistematica podria potencialmente<br />
estabilizar a la economia, a pesar de las<br />
expectativas rationales (Fischer, 1977). Esta investigacion<br />
tambien fue motivada por el deseo de encontrar<br />
un modelo empiricamente adecuado para<br />
explicar la dinamica de la inflacion (Taylor, 1980).<br />
<strong>El</strong> talon de Aquiles de este trabajo fue que asumio<br />
una forma de contratos de trabajo que, aunque justificable<br />
sobre bases empiricas, eran dificiles de<br />
encuadrar en 10s principios de la microeconomia.<br />
Debido a que buena parte de la tradicion<br />
keynesiana estaba basada sobre la premisa de que<br />
10s salarios y 10s precios fallan en lograr el equilibrio<br />
de mercado, la tercera generacion de investigaci6n<br />
keynesiana intento explicar por quP ocurria<br />
tal resultado. Varias hipotesis fueron exploradas:<br />
que las empresas se enfrentan "un menu de<br />
costos" cuando decide11 modificar 10s precios; que<br />
las empresas pagan a 10s trabajaclores "salarios<br />
de eficiencia" por arriba del nivel de equilibrio para<br />
incentivar una mayor productividad; que quienes<br />
determinan 10s salcirios y 10s precios carecen de<br />
una racionalidad perfecta. Mankiw (1985) y<br />
Akerlof y Yellen (1985) notaron clue cuando 1'1s<br />
empresas tienen poder de mercado, existen grandes<br />
diferencias en el cdlc~ilo entre el costo-beneficio<br />
privado y social relacionadas con el ajuste de
precios, de tal forma que el equilibrio con precios<br />
pegajosos podria ser racional (o casi racional) en<br />
terminos privados pero socialmente muy costoso.<br />
Blanchard y Kiyotaki (1987) mostraron que parte<br />
de esta diferencia entre incentivos privados y sociales<br />
resulta de una externalidad de la demanda<br />
agregada: cuando una empresa recorta sus precios<br />
se incrementa el saldo de dinero real y por lo<br />
tanto la demanda por 10s productos de todas las<br />
empresas. Ball y Romer (1990) establecieron que<br />
existe una fuerte complementariedad entre las<br />
inflexibilidades reales y nominales, por lo tanto,<br />
cualquier causal para evitar cambios en precios<br />
relativos exacerba la lentitud de movimiento de 10s<br />
precios nominales.<br />
En retrospectiva, estas contribuciones de 10s<br />
nuevos keynesianos estaban mas relacionadas y<br />
eran mas complementarias de lo que parecieron<br />
en su momento, aun para profesionales trabajando<br />
en este campo. Por ejemplo, es tentador evaluar<br />
10s primeros trabajos sobre equilibrio general <strong>como</strong><br />
un camino sin salida -un programa de investigacion<br />
que sembro las raices de su propia destruccion<br />
con el supuesto de precios predeterminados.<br />
En verdad, este trabajo raramente es leido en la<br />
actualidad. Aun asi, uno puede apreciar una progresion<br />
de ideas relacionadas a cerca de <strong>como</strong> la<br />
economia trabaja cuando 10s precios no se mueven<br />
instantaneamente para encontrar el equilibrio<br />
entre oferta y demanda.<br />
Hay, por ejemplo, una interesante pero raramente<br />
apreciada relacio~i entre la priniera y la tercera<br />
generacion de economistas nuevo keynesianos. En<br />
particular, se puede calificar a la tercera generacion<br />
<strong>como</strong> la que establecio la importancia del regimen<br />
keynesiano sobre las ideas de 10s de la primera<br />
generacion. Cuando las empresas tienen<br />
poder de mercado se establecen precios por arriba<br />
del costo marginal, por lo tanto, siempre desean<br />
vender mas. En un sentido, si todas las elnpresas<br />
tienen algun grado de poder de mercado, entonces<br />
10s mercados de bienes estan tipicamente en una<br />
situacion de exceso de oferta. Esta teoria del mer-<br />
cado de bienes esta a menudo ligada a una teoria<br />
del mercado de trabajo con salarios por encima de<br />
10s de equilibrio, tal <strong>como</strong> ocurre en el modelo de<br />
salarios de eficiencia. En este caso, el regimen<br />
keyne-siano de exceso de oferta generalizado no<br />
es simplemente un posible resultado de la econo-<br />
mia, es el resultado normal.<br />
En mi opinion, estas tres generaciones de inves-<br />
tigacion en la logica nueva keynesiana se suman<br />
para constituirse en una teoria microeconornica<br />
coherente que explica el fracaso de la mano invisi-<br />
ble en proporcionar resultados macroeconomicos<br />
de corto plazo. Entendernos, entonces, <strong>como</strong> 10s<br />
mercados interactuan cuando existen inflexi-<br />
bilidades de precios, el rol que las expectativas<br />
pueden desempefiar, y 10s incentivos que 10s hace-<br />
dores de precios enfrentan cuando escogen si de-<br />
ben o no modificar precios. Como una labor cienti-<br />
fica, este trabajo de investigacion tuvo muchos<br />
exitos (aunque, por ser uno de 10s participantes,<br />
no pretend0 argumentar que soy totalmente objeti-<br />
vo). Este trabajo no fue revolucionario, pero tan<br />
poco pretendio serlo. En verdad, fue contrarrevolu-<br />
cionario: su proposito fue defender la esencia de la<br />
siritesis neoclasica keynesiana del ataque de 10s<br />
nuevos clasicos.<br />
iFue este trabajo igualmente exitoso en el cam-<br />
po de la ingenieria? iAyud6 a 10s responsables de<br />
la politica economica a disefiar mejores politicas<br />
para enfrentar el ciclo economico? <strong>El</strong> juicio en esta<br />
materia es menos positivo -un tema sobre el cual<br />
volvere en breve.
Pero lo relevante es que 10s nuevos keynesianos<br />
fueron, por temperamento, mas inclinados hacia<br />
la ingenieria macroeconornica que 10s economis-<br />
tas que trabajaron en la tradicion de 10s nuevos<br />
clasicos. Entre 10s lideres de la escuela nueva cla-<br />
sics ninguno (que yo sepa) ha dejado en algun<br />
momento la academia para aceptar un puesto pro-<br />
minente en la administracion publica. Contraria-<br />
mente, el movimiento de 10s nuevos keyne-sianos,<br />
<strong>como</strong> las generaciones anteriores de keynesianos,<br />
tuvo en su seno mucha gente que intercambio al-<br />
gunos afios de la torre de marfil por una experien-<br />
cia de trabajo en la capital del pais. Ejeniplo de<br />
ellos incluye a: Stanley Fischer, Larry Summers,<br />
Joseph Stiglitz, Janet Wellen, John Taylor, Richard<br />
Clarida, Ben Bernanke y yo mismo. Los primeros<br />
cuatro marcharon a Washington en 10s afios de la<br />
administracion Clinton; 10s otros cuatro durante<br />
la de Bush. La division de 10s economistas entre<br />
nuevos clasicos y nuevos keynesianos no es, de<br />
manera alguna, entre la derecha politica y la iz-<br />
quierda politica. En gran medida, es un rompi-<br />
miento entre <strong>cientifico</strong>s puros e ingenieros econo-<br />
micos.<br />
La teoria y el emyirisrno del crecimiento economico<br />
de largo plazo estan mas alla del objetivo de<br />
este ensayo, pero vale la pena anotar que estos temas<br />
han ocupado mucha de la atencion cle 10s<br />
<strong>macroeconomista</strong>s durante la decada de 1990. Este<br />
trabajo distrajo la atencion de las fluctuaciones de<br />
corto plc~zo que habia dominado el campo de la<br />
macroeconomia desde su nacimiento medio siglo<br />
antes.<br />
Hay varias razones para la emergencia del crecimiento<br />
<strong>como</strong> area prioritaria de investigacion.<br />
Primero, una serie de trabajos influyentes de Paul<br />
Romer (1986) y otros ofrecieron una gama de ideas<br />
y de instrumentos para analizar lo que es uno de<br />
los temas mas obligados de estudio, la gran brecha<br />
entre las naciones ricas y las pobres. Segundo,<br />
nuevas bases de datos se l~icieron disponibles las<br />
cuales permitian un analisis sistematico de la validez<br />
de teorias alternativas (Summers y Heston,<br />
1991). Tercero, La economia de Estados Unidos<br />
estaba experimentando en la decada de 1990 su<br />
mas larga expansion en la historia. A1 igual que<br />
10s primeros keynesianos fueron atraidos a este<br />
campo de investigacion por su inmediata relevancia<br />
para el bienestar de la nacion, la econoniia de<br />
10s noventa sugeria a esta generacio~i de estudiantes<br />
que el ciclo econ6mico no era ya de gran importancia<br />
empirica.<br />
Hay ademas una cuarta y mas complicada razon<br />
del porque los <strong>macroeconomista</strong>s de 10s noventa<br />
fueron atraidos a1 estudio del creciniiento<br />
de largo plazo mas que a las fluctuaciones decorto<br />
plazo: la tension entre las visiones del mundo<br />
asociadas a 10s nuevos clasicos y 10s nuevos<br />
keynesianos. Mientras que Lucas, el lider, de 10s<br />
nuevos clasicos, proclamaba que "la gente ya no<br />
tomaba seriamente la teoria keynesiana", algunos<br />
de 10s keynesianos eran igualmente condescendientes<br />
con sus colegas del nuevo clasicismo. En<br />
su discurso de inauguracion <strong>como</strong> presidente de<br />
la Asociacion Americana de Econornia, Solow<br />
(1980) denomino "tontamente restrictiva" el que<br />
10s nuevos clasicos descartaran por medio de una<br />
simple suposicion la existencia de inflexibilidades<br />
de precios y salarios y la posibilidad de que 10s<br />
mercados no logren el equilibrio. g1 dijo:
Recuerdo haber leido alguna vez que aun no es<br />
posible entender <strong>como</strong> una jirafa logra enviar una<br />
cantidad suficiente de sangre a su cabeza; pero es<br />
mas dificil imaginar que alguien, por lo tanto, con-<br />
cluya que las jirafas no tienen cuellos largos.<br />
En una entrevista con Arjo Klamer (1984) unos<br />
aiios despues, Lucas afirmo "no creo que Solow,<br />
en particular, haya tratado de enfrentar alguno de<br />
estos temas except0 haciendo bromas". En su pro-<br />
pia entrevista en el mismo volumen, Solow cxpre-<br />
s6 su falta de disposicion para enfrentarse con<br />
cualquiera de 10s nuevos clasicos:<br />
Suponga que alguien se siente donde ahora usted<br />
esta sentado y me diga que el es Napoleon Bonaparte.<br />
Lo Cltimo que yo querria hacer con 61 es enredarme<br />
en una discusion tecnica sobre estrategias de caba-<br />
lleria en la Batalla de Austerlitz. Si yo hiciera eso,<br />
yo estaria implicitamente cayendo en el juego de<br />
que tl es Napolebn Bonaparte.<br />
En cierto sentido, esta disputa refleja las dife-<br />
rentes perspectivas de 10s protagonistas sobre 10s<br />
objetivos de la profesion. Lucas parece estarse que-<br />
jando de que Solow no aprecia el mayor rigor ana-<br />
litico que 10s <strong>macroeconomista</strong>s de la nueva es-<br />
cuela clasica tienen que ofrecer. Solow parece<br />
quejarse de que Lucas no aprecia la patetica au-<br />
sencia de realism0 de sus supuestos para el equili-<br />
brio de mercado. Cada uno tiene razon. Desde la<br />
perspectiva de la ciencia, el mayor rigor que 10s<br />
nuevos clasicos ofrecen es una virtud. Pero desde<br />
el punto de vista de la ingenieria el costo de agre-<br />
gar este rigor parece demasiado alto.<br />
Me extiendo en la naturaleza de este debate no<br />
solo porque refleja las tensiones que existen entre<br />
10s <strong>cientifico</strong>s y 10s ingenieros sino porque ade-<br />
mas ayuda a explicar las alternativas propuestas<br />
por la siguiente generacion de economistas. Tal<br />
virulencia entre gigantes intelectuales atrae la atencion,<br />
muy parecido a lo que ocurre entre 10s parroquianos<br />
que en un bar presencian una refriega y<br />
exacerban a 10s participantes. Pero no ha sido saludable<br />
para el calnpo de la macroeconomia. No<br />
es de sorprender, que muchos jovenes economistas<br />
evitaran tomar partido en esta disputa a1 preferir<br />
desviar su atencion del estudio del ciclo economic~<br />
hacia otros temas.<br />
~UNA NUEVA SINTESIS, 0 UNA TREGUA?<br />
Un viejo refran dice que la ciencia progresa fune-<br />
ral tras funeral. Hoy, con 10s beneficios de una<br />
mayor expectativa de vida, seria mas precis0 (y<br />
menos fuerte) decir que la ciencia progresa jubila-<br />
cion tras jubilacion. En macroeconomia, en la me-<br />
dida que la vieja generacion de protagonistas se<br />
jubila o este cerca de hacerlo ha sido reemplazada<br />
por una nueva generacion que han adoptado una<br />
cultura de mayor civilidad. Simultaneamente, un<br />
nuevo consenso ha emergido sobre la mejor mane-<br />
ra para entender el ciclo econcimico. Marvin<br />
Goodfriend y Robert King (1997) han bautizado<br />
esta vision de consenso <strong>como</strong> "la nueva sintesis<br />
neoclasica". Este modelo ha sido ampliamente uti-<br />
lizado en la investigacion de politicas monetarias<br />
(Clarida, Gali y Gertler, 1999; McCallum y Nelson,<br />
1999). <strong>El</strong> tratamiento mas extenso de esta nueva<br />
sintesis es el monumental (en ambos sentidos de<br />
la palabra) tratado de Michael Woodford (2003).<br />
A1 igual que la sintesis neoclasica-keynesiana<br />
de una generacion anterior, la nueva sintesis in-<br />
tenta integrar las fortalezas de 10s enfoques que le<br />
precedieron. Del modelo de 10s nuevos clasicos
toma las herramientas de la teoria dinamica<br />
estocastica del equilibrio general. Preferencias, res-<br />
tricciones y optimizacion son 10s puntos de parti-<br />
da de un analisis que se construye desde 10s fun-<br />
damentos microeconomicos. Del modelo de 10s<br />
nuevos keynesianos se toman las inflexibilidades<br />
nominales que se usan para explicar porque la<br />
politica Inonetaria tiene efectos reales en el corto<br />
plazo. <strong>El</strong> enfoque mas comunmente usado es el<br />
asumir empresas monoyolisticamente competiti-<br />
vas que cambian precios de vez en cuando, lo cual<br />
resulta en una dinamica que algunos han llamado<br />
la nueva curva keynesiana de Phillips. <strong>El</strong> corazon<br />
de esta sintesis esta en la vision que la economia<br />
es un sistema dinamico de equilibrio general que<br />
se desvia del optimo de Pareto <strong>como</strong> consecuencia<br />
de la existencia de precios pegajosos (y quizas de<br />
una variedad de otras imperfecciones de mercado).<br />
Es altamente tentador calificar la emergencia de<br />
este consenso <strong>como</strong> un gran 6xito. En alguna for-<br />
ma lo es. Pero tambien hay uli modo menos entu-<br />
siasta de ver el estado actual de cosas. Quizas lo<br />
que ha resultado no es tanto una sintesis sino una<br />
tregua entre 10s com,batientes intelectuales, segui-<br />
da por una retirada honorable de las dos partes en<br />
conflicto. Ambos, 10s nuevos clasicos y 10s nuevos<br />
keynesianos pueden ver esta sintesis y reclamar<br />
parte de la victoria, mientras ignoran la mas pro-<br />
funda derrota que flota bajo la superficie.<br />
<strong>El</strong> corazon de esta nueva sintesis -un sistema<br />
dinamico de equilibrio general con inflexibilidades<br />
nominales- es precisamente lo que se encuentra<br />
en el modelo original keynesiano. Hicks propuso<br />
el modelo IS-LM, por ejemplo, en un intento de ex-<br />
presar las ideas de Keynes en un context0 de equi-<br />
librio general. (Debemos recordar que Hicks gano<br />
el Premio Nobel de economia en 1972, conjunta-<br />
mente con Kenneth Arrow, por sus contribuciones<br />
a la teoria general del equilibrio). Klein, Modigliani,<br />
y 10s otros constructores de modelos intentaban<br />
acercar ese sisterna de equilibrio general a la evidencia<br />
empirica para mejorar la politica economlca.<br />
En gran medida, la nueva sintesis recoge la<br />
agenda de investigacion que la profesion abandono,<br />
a requerimiento de 10s nuevos clasicos, en la<br />
decada de 1970.<br />
En retrospectiva, es evidente que los nuevos clasicos<br />
empetiaron su palabra mas alla de sus posibilidades.<br />
Su objetivo explicit0 era desechdr la teoria<br />
keynesiana y reernplazarla con modelos de<br />
equilibrio que pudieran ser traducidos convincentemente<br />
en modelos empiricos para el arialisis de<br />
la politica economics. En esa perspectiva, el intento<br />
fue un fracaso. En su lugar, ellos contribuyeron<br />
a desarrollar herramientas analiticas que ahora<br />
estan siendo usadas para desarrollar otra geueracion<br />
de modelos que asunlen precios pegajosos,<br />
que en muchas formas, se parecen a 10s modelos<br />
que 10s nuevos clasicos denigraron.<br />
Los nuevos keynesianos pueden reclalnar un<br />
cierto grado de reivindicacion. La nueva sintesis<br />
descarta 10s supuestos de equilibrio de mercado<br />
clue Solow denomir~o "tontamente restrictivos"<br />
y que la agenda de investigacion de los nuevos<br />
keynesianos se propuso socavar. A 10s nuevos<br />
keynesianos se les puede criticar por haber mordrclo<br />
el seiiuelo de 10s nuevos clasicos y que los llevo a<br />
perseguir una agenda de investigacion que termino<br />
por ser demasiado abstracta e insuficientemente<br />
practica. Paul Krugman (2000) ofrece una evaluacion<br />
de esta agenda de investigacion: "Uno<br />
puede ahora explicar <strong>como</strong> 10s precios pegajosos<br />
pueden ocurrir. Pero predicciones titiles acerca de<br />
cu61ido ello puede ocurrir o cuando puede no ocurrir,<br />
o modelos que construyen desde un menil de<br />
costos una Curva de Phillips realista, no parecen
opciones factibles". Como un postulante de esta<br />
linea de trabajo deb0 de admitir que hay algo de<br />
verdad en este juicio.<br />
LA PERSPECTIVA DESDE LA BANCA CENTRAL<br />
Si Dios coloco a la macroeconomia sobre la tierra<br />
para resolver problemas practicos, entonces San<br />
Pedro nos juzgara por nuestras contribuciones a<br />
la ingenieria economica. Consecuentemente, permitame<br />
preguntar: jha contribuido el desarrollo<br />
de la teoria del ciclo economico durante las ultimas<br />
decadas a mejorar el disefio de la politica economica?<br />
0, en terminos de un objetivo mas modesto,<br />
ihan 10s avances en la ciencia macroeconomica<br />
transformado la manera en que la politica economica<br />
es analizada y discutida entre 10s economistas<br />
profesionales que estan dedicados a su disetio?<br />
Un lugar donde encontrar evidencia para responder<br />
estas preguntas es el encantador relato de<br />
Laurence Meyer A Term at the Fed. En 1996 Meyer<br />
dejo su trabajo <strong>como</strong> profesor de economia en la<br />
universidad de Washington y <strong>como</strong> un prominente<br />
consultor para servir seis aiios <strong>como</strong> gobernador<br />
de la Reserva Federal. Sus memorias proporcionan<br />
una ventana sobre <strong>como</strong> 10s economistas<br />
en 10s mas altos niveles del diseiio de la politica<br />
monetaria perciben su trabajo y 10s enfoques que<br />
utilizan para analizar la economia.<br />
Este libro deja a1 lector con una clara impresion:<br />
10s desarrollos residentes en la teoria del ciclo economic~,<br />
promovidas por 10s nuevos clasicos y nuevos<br />
keynesianos, han tenido cero impact0 en la<br />
prjctica de la politica economica. <strong>El</strong> analisis de<br />
Meyer sobre las fluctuaciones economicas y la politica<br />
monetaria es inteligente y matizado, per0 no<br />
muestra signo alguno de la teoria moderna<br />
macroeconomica. Este analisis debe ser perfecta-<br />
mente familiar para alguien que fue entrenado en<br />
la sintesis neoclasica keynesiana que predomino<br />
en la decada de 1970 y que ha ignorado la literatu-<br />
ra academica desde entonces. Esta vision de Meyer<br />
seria facil de descartar <strong>como</strong> pasada de moda si<br />
fuera idiosincrasica, pero no lo es. Es tipica de 10s<br />
economistas que han trabajado en las altas esferas<br />
de 10s bancos centrales del mundo.<br />
Es algo comun entre 10s academicos creer que el<br />
quehacer de 10s bancos centrales ha sido altamen-<br />
te influenciado por la literatura de reglas-discre-<br />
cion, particularmente del trabajo sobre la incon-<br />
sistencia en el tiempo que comenzo con Kydland y<br />
Prescott (1977). Dos cambios institucionales son a<br />
menudo ligados a estas contribuciones academi-<br />
cas: la mayor autonomia de 10s bancos centrales<br />
en paises <strong>como</strong> Nueva Zelanda y la adopcion de<br />
objetivos de inflacion <strong>como</strong> un regimen de politica<br />
en muchos bancos centrales alrededor del mundo.<br />
Estos cambios institucionales, a su vez, se relacio-<br />
nan a las mejoras en la politica monetaria. De<br />
acuerdo con esta linea dt argumentacion, se debe<br />
agradecer a Kydland y Prescott por el bajo y esta-<br />
ble nivel de inflacion que muchos paises han dis-<br />
frutado durante las ultimas dos decadas.<br />
Esta vision de autocongratulaciones enfrenta<br />
dos problemas. Primero, 10s cambios institu-<br />
cionales que hemos observado son, en el mejor de<br />
10s casos, ligeramente conectados a 10s temas que<br />
pernean en la literatura teorica. Un banco central<br />
independiente no es lo mismo que un banco cen-<br />
tral gobernado por reglas. <strong>El</strong> Banco de la Reserva<br />
Federal de Estados Unidos ha tenido desde tiempo<br />
atras un alto grado de independencia sin compro-<br />
meterse alguna vez con un sistema de reglas. Inclu-<br />
so el dispositivo de objetivos inflacionarios esta mas<br />
cercano a una declaracion de intenciones y a una
forma de comunicarse con el public0 que a un cotnpromiso<br />
con reglas de politica monetaria. Bernanke<br />
(2003) le ha llamado "discrecion obligada".<br />
La segunda, un problema de mayor peso, es que<br />
estos cambios institucionales no estan necesariamente<br />
relacionados con las mejoras que hemos observado<br />
en la politica monetaria. Ball y Sheridan<br />
(2005) exatninaron una muestra amplia de paises<br />
y mostraron que la adopcion de 10s objetivos de<br />
inflacion no ayuda a explicar el movimiento reciente<br />
hacia un ~dvel bajo y estable de idlacion. La<br />
politica monetaria ha sido tan eficiente en esos<br />
paises que han acloptado el mecanismo de objetivos<br />
inflacionarios a1 igual que en 10s que no. Esta<br />
mejoria en 10s resultados inflacionarios a escala<br />
mundial podria deberse a que la economia mundial<br />
no ha tenido que enfrentar choques de oferta<br />
tan adversos <strong>como</strong> 10s experimentados en la decada<br />
de 1970 o porque 10s bancos centrales han aprendido<br />
de la experiencia de la decdda de 1970 de que<br />
la alta inflacion debe ser asiduarnente evitada. Pero<br />
la evidencia muestra que el sistema de objetivos<br />
inflacionarios no es prerrequisito para una buena<br />
politica monetaria.<br />
l,a Reserva Federal bajo la direccion de Alan<br />
Greenspan es un ejemplo de ello. De acuerdo con<br />
Blinder y Reiss (2005), Greenspan tiene el derecho<br />
de reclamar ser "el mejor banquero central que jamas<br />
haya existido". Sin duda, por rnuchos motivos,<br />
la politica monetaria funcion6 excepcionalmente<br />
bien bajo su mal-tdato. Pero a lo largo de su<br />
gestion Greenspan evito cualquier anuncio de reglas<br />
de politica y valor6 mas la flexibilidad que el<br />
compromiso. Asi es <strong>como</strong> Greenspan (2003) defendio<br />
su forma de actuar:<br />
Algunos criticos han argumentado que tal enfoque<br />
para la definicihn de politicas es poco disciplinado<br />
-tendencioso, aparentemente discrecional, y difi-<br />
cil cie explicar. La Reserva Federal debe tratar, ar-<br />
gumelitan otros, de ser mas formal en sus opera-<br />
ciones atnarrando sus acciones exclusivamente 'a<br />
las prescripciones dc reglas formales de politica.<br />
Que cualquier enfoque en esta lbgica lleve a un<br />
mejoramiento en el desenipefio econhniico es poco<br />
creible [...I Las reglas por su naturaleza son sini-<br />
ples, y cuando las incertidunibres que existcn en el<br />
inedio amhiente econ6mico son niuclias y varia-<br />
bles, no pueden ser substitutes de paracligmas para<br />
la administracihn del riesgo, que son mucho m5s<br />
apropiados para el diseiio de politicas.<br />
Aun asi, a pesar de la aversion de Grrenspan a1<br />
dominio de las reglas en la definicion de la5 politi-<br />
cas, la inflacion fue baja y estable durante su per-<br />
manencia <strong>como</strong> gobernador del Banco Central de<br />
Estados Unidos. Greenspan demostr6 que 10s ban-<br />
cos centrales pueden producir 10s resultados de-<br />
seables aun ejerciendo un poder discrecional subs-<br />
tancial.<br />
LA PERSPECTIVA DESDE LA POLITICA FISCAL<br />
Otro espacio en el cud1 examiriar el irnpacto practico<br />
de la teoria macroeconomics es en el terreno de<br />
la politica fiscal. <strong>El</strong> recorte de impuestos de Bush<br />
en 2001 y 2003 ofrece un buen caso de estudio, en<br />
parte debido a que fue un intento reciente de lograr<br />
un estimulo significative para combatir la recesi6n<br />
y en parte por que a1 haber sido el presidente del<br />
Consejo de Asesores Econoniicos por dos afios,<br />
estoy familiarizado con mucho clel analisis economic~<br />
que asento las bases para dicha politica. De<br />
hecho, existieron varios niotivos para el diseiio de<br />
la politica impositiva de Bush. La expansion del
credito fiscal para la nifiez, por ejemplo, estuvo<br />
enraizada tanto en factores politicos y de filosofia<br />
social <strong>como</strong> en economicos. Ademas, los econo-<br />
mistas del Consejo de Asesores Economicos y del<br />
Departamento del Tesoro tuvieron una participa-<br />
cion substancial en el desarrollo de esa politica,<br />
por lo tanto puede ser ilustrativo reparar sobre 10s<br />
instrumentos que ellos usaron para ese trabajo.<br />
<strong>El</strong> analisis economico del plan impositivo de<br />
Bush se hizo con un ojo en el crecimiento de largo<br />
plazo y el otro en el ciclo econ6mico de corto plazo.<br />
La perspectiva de largo plazo debe ser familiar para<br />
10s tstudiantes de finanzas publicas. Mas impor-<br />
tante, en 2003 Bush propuso eliminar la doble im-<br />
position del ingreso sobre el capital corporativo.<br />
La ley finalmente aprobada en el Congreso no cum-<br />
pli6 enteramente con este cometido pero la reduc-<br />
ci6n substancial en las tasas impositivas sobre 10s<br />
dividendos orient6 en la direccion de una mayor<br />
neutralidad impositiva, a1 reducir el sesgo a favor<br />
de las ganancias retenidas en desventaja de 10s<br />
dividendos, el sesgo a favor de la deuda en des-<br />
ventaja del financiamiento bursatil, y el sesgo a<br />
favor del capital no corporativo en desventaja del<br />
corporativo. Tainbien movio la estructura impo-<br />
sitiva en direccion de 10s impuestos indirectos<br />
apartandola de 10s impuestos sobre el ingreso. Este<br />
ultimo objetivo es consistente con la literatura co-<br />
munmente aceptada sobre finanzas publicas<br />
(por ejemplo, Diamond y Mirless, 1971; Atkinson<br />
y Stiglitz, 1976; Feldstein, 1978; Chamley, 1986) y<br />
no es particularmente nueva en terminos de la teo-<br />
ria economica. Hace tres decadas, Atkinson y<br />
Stiglitz observaron que habia una "presuncion<br />
convencional a favor de impuestos sobre el consu-<br />
mo mas que sobre el ingreso".<br />
Mas relevante para este ensayo, sin embargo, es<br />
el andisis de corto plazo de la politica impositiva.<br />
Cuando el presidente George W. Bush tom6 pose-<br />
sion en 2001, la economia se dirigia hacia una re-<br />
cesion despues de que estallara la burbuja de la<br />
Bolsa de Valores de finales de la decada de 1990.<br />
Un objetivo de la reduccion de impuestos era esti-<br />
mular la recuperacion economica y el empleo.<br />
Cuando Bush firm6 la Ley de Reduction Impositiva<br />
para la Reconciliacion del Empleo y el Crecimien-<br />
to de 2003, explico la politica en 10s siguientes ter-<br />
minos:<br />
[...I cuando la gente tiene mAs dinero, pueden<br />
gastarlo en bienes y servicios. Y en nuestra socie-<br />
dad, cuando 10s ciudadanos demandan bienes o<br />
servicios adicionales alguien producira ese bien<br />
o ese servicio. Y cuando alguien produce ese bien o<br />
ese servicio, significa que alguien tiene mayores<br />
posibilidades de encontrar un empleo.<br />
Esta logica es la quintaesencia del keynesianismo.<br />
A1 Consejo de Asesores Economicos se le pidio<br />
que cuantificara <strong>como</strong> la reduccion de impuestos<br />
afectaria el empleo. Nosotros contestamos esta pre-<br />
gunta usando un modelo convencional. <strong>El</strong> modelo<br />
especifico que utilizamos mientras yo estuve ahi<br />
fue el elaborado por Macroeconomic Advisors, la<br />
firma consultora creada y dirigida por Lawrence<br />
Meyer antes que fuera uno de 10s gobernadores de<br />
la Reserva Federal. Este modelo estaba siendo usa-<br />
do por el Consejo mucho antes que yo llegara <strong>como</strong><br />
presidente p, de hecho, habia sido usado For cerca<br />
de dos decadas de administraciones Republica-<br />
nas y Democratas. La eleccion de este modelo no<br />
es de particular relevancia, debido a que este mode-<br />
lo es similar a otros de 10s sofisticados modelos<br />
macroecon6micos, tales <strong>como</strong> el modelo FRB/US que<br />
utiliza el banco de la Reserva Federal. Desde el punto<br />
de vista de historid intelectual, estos modelos son
descendientes directos de 10s esfuerzos originales<br />
Je modelacion de Klein, Modigliani y Eckstein. La<br />
investigacion de 10s nuevos clasicos y de 10s nuevos<br />
keynesianos ha tenido una minima influencia<br />
en la constr~iccion de estos modelos.<br />
<strong>El</strong> munclo real en el que se elabora la politica<br />
macroecon6mica puede ser desolador para aque-<br />
110s de nosotros que han pasado la mayor parte de<br />
su carrera en la academia. La triste realidad es que<br />
la investigacion macroeconomica de las Bltimas<br />
tres decadas apenas ha tenido un impacto menor<br />
en el analisis de las politicas monetaria y fiscal. La<br />
explicacion no es que 10s economistas en la arena<br />
de la politica economica sean ignorantes de 10s<br />
desarrollos recientes. Todo lo contrario: 10s equipos<br />
de la Reserva Federal incluyen algunos de 10s<br />
mejores y mas jovenes economistas con grados de<br />
doctorado y el Consejo de Asesores Economicos<br />
de administraciones Republicanas <strong>como</strong> Democratas<br />
atraen talentos de las mejores universidades.<br />
<strong>El</strong> hecho de que la investigacion mas reciente en<br />
~nacroeconomia no sea usada en la elaboracion de<br />
politicas publicas es evidencia, prii~lnfncie, de que<br />
esta es de poca aplicacion para este propbsito. La<br />
investigacion puede ser muy exitosa en terminos<br />
<strong>cientifico</strong>s, pero no ha contribuido significativainente<br />
a la ingenieria macroeconomica.<br />
LO QUE OCURRE EN LAS AULAS<br />
Ademas de los corredores del poder de las capita-<br />
les del niundo, existe otro lugar donde la profesion<br />
econornica trata de vender sus productos a una<br />
audiencia mas amplia -10s salones cle clase de las<br />
licenciaturas en economia. Aquellos de nosotros<br />
que regularmente ensenamos cursos de licencia-<br />
tura vemos nuestra tarea <strong>como</strong> la de producir ciu-<br />
dadanos bien informados acerca de 10s principios<br />
fundamentales para la elaboracion de una buena<br />
politica economica. Nuestra seleccion de materia-<br />
les esta guiada por lo que nos parece importante<br />
que entienda la siguiente generacion de electores.<br />
A1 igual que 10s funcionarios, 10s estucliantes<br />
de licenciatura tipicamente tienen poco interes en<br />
la teoria per se. En realidad, ellos estan mas intere-<br />
sados en entender <strong>como</strong> funciona el rnundo real,<br />
<strong>como</strong> la politica publica puede mejorar el desem-<br />
peiio de la economica. A excepcion de los pocos<br />
estudiantes que estan considerando estudios de<br />
posgrado y una carrera <strong>como</strong> economistas acade-<br />
micos, los estudiantes cle licenciatura tienen la<br />
perspectiva de un ingeniero, mas que la de un cien-<br />
tifico. Por ello, es crucial lo que nosotros escoge-<br />
mos para enseliar a 10s estudiantes de este nivel.<br />
No hay mejor lugar para ver lo que enseiiamos que<br />
10s contenidos de 10s libros de texto mLis usados a<br />
nivel licenciatura.<br />
Consideren, por ejemplo, los libros usados para<br />
ensefiar macroeconomia a nivel intermedio. Hace<br />
una generation, 10s tres libros m&s populares para<br />
este curso eran 10s de Robert Gordon, Robert Hall<br />
y John Taylor y Rudiger Dornbusch y Stanley<br />
Fischer. Hoy, 10s mas vendidos son aquellos escri-<br />
tos por Oliver Blanchard, Andrew Abel y Ben<br />
Bernanke, y el mio. <strong>El</strong> elemento comun es que cada<br />
uno de estos libros fue escrito por a1 nienos un eco-<br />
nomista con estudios a nivel posgrado del Institu-<br />
to Tecnologico de Massachussets, una prominen-<br />
te escuela de ingenieria donde la tradicicin<br />
macroeconomica dominante fue la de Samuelson<br />
y Solow. En todos estos libros, la teoria h6sica en-<br />
seiiada a 10s estudiantes de licenciatura es alguna<br />
version de la dernanda y oferta agregadas, y la teo-<br />
ria bjsica de la demanda agregada es el moclelo IS-<br />
LM. La misma leccion se puede extraer examinan-
do los libros de texto mas usados en cursos<br />
introductorios de economia: 10s ciclos economicos<br />
de corto plazo se entienden mejor usando alguna<br />
version de la sintesis neoclasica-keynesiana.<br />
No estoy sugiriendo que la pedagogia se ha es-<br />
tancado en tanto que la profesion evoluciona. Los<br />
libros de texto de hoy en dia dan enfasis a la teoria<br />
monetaria clhsica, a 10s modelos de crecimiento de<br />
largo plazo, y a1 papel de las expectativas que lo<br />
hicieron aquellos de liace 30 afios. Existe menos<br />
confianza acerca de lo que la politica economica<br />
puede alcanzar y mas enfasis en la importancia de<br />
las reglas sobre la discrecionalidad en las decisio-<br />
nes de politicas monetaria y fiscal (a pesar de la<br />
falta de evidencia sobre la importancia practica<br />
del uso de reglas). Es claro que el marco basico que<br />
10s estudiantes contemporftneos aprenden para<br />
entender el ciclo economico es aquel con el cual<br />
estuvo familiarizada una generacion anterior de<br />
keynesianos.<br />
La excepcidn que prueba la regla es el texto in-<br />
termedio escrito por Robert Barro, publicado origi-<br />
nalmente en 1984. Esta obra de Barro proporciona<br />
una introduccion clara y accesible a1 enfoque<br />
macroeconomico de 10s nuevos clasicos al nivel de<br />
licenciatura. Se incluyen modelos keynesianos en<br />
la parte final del libro per0 se les da poco enfasis.<br />
Cuando el libro aparecio, recibio mucha atencion.<br />
Sin embargo, aunque muchos <strong>macroeconomista</strong>s<br />
leyeron el libro y tuvieron una buena in~presion,<br />
pocos lo escogieron <strong>como</strong> una opcion para sus<br />
alumnos. La revolucion pedagogica de 10s nuevos<br />
cl5sicos que Barro esperaba inspirar nunca ocu-<br />
rrio, y el libro no llego a ofrecer una competencia<br />
real a 10s libros de texto predominantes en el mo-<br />
mento.<br />
Este fracaso revolucionario en la pedagogia de<br />
la macroeconomia esta en gran contraste a lo que<br />
ocurrio medio siglo antes. Cuando el libro de<br />
Samuelson fue originaln~ente publicado en 1948<br />
con el proposito de introducir a 10s estudiantes de<br />
licenciatura a la revolucion keynesiana, 10s profesores<br />
en el ambito mundial rapida y entusiastamente<br />
acogieron el nuevo enfoque. En contraste,<br />
las ideas de 10s nuevos clasicos y 10s nuevos<br />
keynesianos no han logrado transformar en forma<br />
fundamental la manera en la cual la macroeconomia<br />
a nivel licenciatura es ensefiada.<br />
NI UN DENTISTA A LA VISTA<br />
John Maynard Keynes (1931) opino acertadamen-<br />
te que "si 10s economistas pudieron pensar de si<br />
mismos <strong>como</strong> gente modesta y competente a la al-<br />
tura de 10s dentistas, seria esplendido". De esta<br />
manera el expresaba su esperanza de que la cien-<br />
cia de la macroeconomia pudiera evolucionar ha-<br />
cia un tip0 de ingenieria util y conventional. En<br />
esta utopia, evitar una recesion seria tan elemental<br />
<strong>como</strong> curar una carie.<br />
Los desarrollos en la frontera de la macroeco-<br />
nomia academics de las pasadas decadas tienen<br />
muy poca semejanza a lo que pasa en la oclontolo-<br />
gia. La agenda de investigacion de 10s nuevos cla-<br />
sicos y 10s nuevos keynesianos ha tenido poco<br />
impacto en 10s economistas practicos encargados<br />
de las dificiles tareas de instrumentar las politicas<br />
monetaria y fiscal. Igualmente, ha tenido muy poco<br />
impacto en lo que 10s n-,aestros ensefian a 10s futu-<br />
ros votantes sobre la politica niacroeconomica<br />
cuando t.stos aun estan en las aulas de clase. Des-<br />
de el punto de vista de la ingenieria macroeco-<br />
nomica el trabajo de las ultimas decadas aparece<br />
<strong>como</strong> un viraje desafortunado y equivocado.
No obstante, en la perspectiva mas conceptual<br />
de la ciencia rnacroeconomica, este trabajo puede<br />
ser entendido mas positivamente. Los nuevos clasicos<br />
han sido exitosos en mostrar las limitaciones<br />
de 10s sofisticados modelos keynesianos y de las<br />
politicas sustentadas en estos modelos. <strong>El</strong>los han<br />
logrado centrar la tensi6n sobre la importancia de<br />
las expectativas y de la relevancia de politicas sujetas<br />
a reglas. Los nuevos keynesianos hall elaborado<br />
niejores lnodelos para explicar por que 10s<br />
salarios y 10s precios no inducen a1 equilibrio de<br />
rilercado y, mas generalmente, que tip0 de imperfecciones<br />
de mercado deben considerarse para explicar<br />
las fluctuaciones economicas de corto plazo.<br />
La confrontation entre estas dos visior~es, no<br />
Akerlof, George A. y Janet L. Yellen (1985), "A Near-<br />
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siempre civilizada, puede haber sido procluctiva,<br />
porque la competencia es tan importante en el dvance<br />
intelectual <strong>como</strong> lo es en el mercado.<br />
Las nuevas ideas estdn siendo incorporacias en<br />
la nueva sintesis que ahord se esta desarrollal~do<br />
y que, eventualniente, llegara a ser el fundamento<br />
para la proxima generation de 1iiodelos macroeconomicos.<br />
Para aquellos de nosotros interesados en<br />
la macroecono~nia, <strong>como</strong> c~elicia o <strong>como</strong> ingenieria,<br />
podemos toniar la reciente emergencia de una<br />
nueva sintesis <strong>como</strong> un signo de esperanza de que<br />
mayores avances se puedan hacer en ambas alternativas.<br />
En una visiiin de futuro, "la modestia" y<br />
"la competencia" permanecen <strong>como</strong> ideales hacia<br />
10s cuales 10s macroecono~nistas deben aspirar.<br />
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