excreción urinaria de yodo en el monitoreo del programa para la ...

Rev Cubana Aliment Nutr 2008;18(1):72-83Instituto de Nutrición e Higiene de los Alimentos.EXCRECIÓN URINARIA DE YODO EN EL MONITOREO DELPROGRAMA PARA LA ELIMINACIÓN DE LOS DESÓRDENES PORDEFICIENCIA DE YODO.Mayttel De La Paz Luna, 1 Beatriz Basabe Tuero, 2 Daisy Zulueta Torres, 3 Blanca Terry Berro, 4Sailid Granado Viera, 5 María Eugenia Quintero Alejo, 5 María Victoria Luna, 6 Mavis DíazMiranda. 7RESUMENLa sal destinada al consumo humano en Cuba se fortifica con yodo desde 1999. Se hapropuesto la Excreción Urinaria de Yodo (EUY) como un indicador del impacto delPrograma Nacional de Yodación de la Sal. En el 2004 se determinó la EUY en 1,988niños escolares de uno y otro sexo, con edades entre 6 – 12 años, y representativos de losestratos urbano, rural y rural–montañoso del país. Se recolectaron también 1,598 muestrasde sal de los hogares de estos niños para determinar la concentración de yodo mediante untest colorimétrico. El 66.7% de las muestras de sal obtenidas de los hogares de los niñosestudiados mostró niveles óptimos de yodación. El percentil 50 de la distribución de losvalores de EUY de la serie de estudio fue de 246.9 µg/L, casi 2.5 veces mayor que ellímite tenido como aceptable para esta determinación. Aunque la EUY fuesignificativamente menor entre los niños del estrato rural–montañoso, el valor propio deeste estrato fue superior al límite aceptable (211.1 vs. 100.0 µg/L; p < 0.05; test decomparación para una media poblacional conocida). Los valores observados de EUYpermiten afirmar que los ingresos de yodo entre escolares de diferentes estratosgeográficos son óptimos.Descriptores DeCS: Yodo / Yoduria / Excreción urinaria de yodo / Deficiencia de yodo /Sal yodada / Fortificación.1 Licenciada en Ciencias Farmacéuticas. Máster en Nutrición en Salud Pública. Investigadora Agregada.2 Doctora en Ciencias de los Alimentos. Investigadora Auxiliar.3 Máster en Nutrición en Salud Pública. Investigadora Auxiliar.4 Máster en Salud Ambiental. Investigadora Auxiliar.5Técnico medio en Química Industrial.6Ingeniera en Agronomía. Investigadora Titular.7Licenciada en Bioquímica.Recibido: 10 de diciembre del 2007. Aprobado: 23 de febrero del 2008.Maytell de la Paz Luna. Instituto de Nutrición e Higiene de los Alimentos. Infanta 1158 entre Clavel y Llinás.La Habana. CUBA.Correo electrónico: mayttel@infomed.sld.cu

73 Rev Cubana Aliment Nutr 2008, Vol. 18, No. 1 De la Paz Luna y cols.INTRODUCCIÓNDesde hace varias décadas se conoce quela deficiencia de micronutrientes puedeperjudicar el desarrollo intelectual y lacalidad de vida de las personas, y enocasiones pueden favorecer la ocurrencia demuertes en edades tempranas. 1-2 Según laOrganización Mundial de la Salud (OMS), eldéficit de yodo sigue siendo la principalcausa global evitable tanto de retraso mentalcomo de parálisis cerebral, y afecta en gradovariable el desarrollo y bienestar de más de1,000 millones de personas en el mundo,esto es, la quinta parte de la poblaciónmundial. 1-4La presencia de cuadros de desórdenespor deficiencia de yodo (DDY) se reveló enCuba por primera vez a mediados de los1960’s. 5 Sin embargo, no fue hasta 1974 enque se realizaron las primerasdeterminaciones de excreción de yodo(EUY) en muestras de orina colectadasdurante 24 horas. Los hallazgos de estosestudios permitieron establecer que la EUYera menor de 50 µg del mineral por cadagramo de creatinina urinaria excretada entrelos habitantes de la región de Baracoa, y porlo tanto, la existencia de estadosmoderadamente deficitarios de ingestión deyodo en esta zona del país. 5-8A fin de cumplir los acuerdos de laCumbre Mundial en Favor de la Infancia,celebrada en el año 1990, y de laConferencia Internacional sobre Nutrición,del año 1992, que definieron como meta laeliminación de los cuadros de DDY antes delaño 2000, 9-11 el Instituto de Nutrición eHigiene de los Alimentos (INHA) realizó en1995 un estudio sobre la disponibilidad deyodo en la dieta de los cubanos en escolaresentre 6 – 12 años de edad residentes enzonas rurales del país mediante la EUY. 12 Lainvestigación fue coordinada con elMinisterio de Educación (MINED) de Cuba,y contó con la asesoría de la OrganizaciónPanamericana de la Salud (OPS) y elInstituto de Nutrición de Centroamérica yPanamá (INCAP), y el apoyo financiero delFondo de las Naciones Unidas para laInfancia (UNICEF). De acuerdo con losresultados obtenidos de EUY, se concluyóque la situación actual se correspondió conestados leves de deficiencia de yodo (EUYentre 50 – 100 µg/L). Sin embargo, el valorde la EUY entre los escolares muestreadosen las zonas montañosas de Cuba fue menorde 20 µg/L, correspondiente a estados gravesde deficiencia de consumo de yodo, unhallazgo significativo si se tiene en cuentaque las montañas de esta región del país norebasan los 1,000 metros de altura.A partir del año 1999 se inició elPrograma Nacional para la Eliminación13Sostenible de los cuadros de DDY.Gracias a este programa, se produce, ydistribuye a la población, sal yodada.El Programa sostiene un sistema devigilancia de la calidad de la sal yodada. 13 Elsistema prevé la determinación del contenidode yodo en la sal de consumo humanomediante tests colorimétricos conperiodicidad trimestral. Se ha establecidoque el contenido de yodo sea mayor de 15partes por millón (ppm) en la sal consumidaen el 90% o más de los hogaresmuestreados. 13Como parte de este Programa se creó enel INHA un laboratorio para ladeterminación de la EUY. La introducciónen el Programa de la tecnología para ladeterminación de la EUY sirvió entoncespara evaluar el impacto de la fortificacióncon yodo de la sal en colectividadeshumanas de estratos representativos del paístenidos como vulnerables.Este trabajo presenta el estado de la EUYen escolares cubanos muestreados de variosestratos sociodemográficos del país entre losaños 2004 – 2005.

Yoduria como medidor de la fortificación de la sal Rev Cubana Aliment Nutr 2008, Vol. 18, No. 1 74MATERIALES Y MÉTODOSSe realizó un estudio epidemiológicoobservacional, transversal, de la poblaciónescolar cubana con edades entre 6 – 12 años,distribuida en los estratos sociodemográficosurbano, rural, rural-montañadefinidos por la Oficina Nacional deEstadísticas (ONE). Se extrajo una muestrarepresentativa de cada estrato, teniendo enconsideración: el tamaño de la población encada uno de los estratos, la prevalencia delos cuadros de DDY hallada en los estudiosdel año 1995, 12 un efecto de diseño de 1.8, yuna caída de muestra del 10%. Se trató deque el error de muestreo no superara el 10%del tamaño estimado de las muestras. Seeligió una confiabilidad del 95%.Se excluyeron los niños y niñas conedades menores de 6 años, o mayores de 12años, y aquejados de alguna enfermedadaguda importante en el momento delmuestreo.La ejecución del proyecto no implicóprocedimientos invasivos. Una vezseleccionados los niños y las niñas en lasescuelas participantes en el estudio, elequipo de investigadores, de conjunto conlos maestros, se reunió con los padres, uotros familiares, para explicar lascaracterísticas y propósitos del proyecto, yobtener el consentimiento informadorequerido para la continuación de losestudios.Figura 1. Gradiente de coloración del punto final de la reacción colorimétrica para la determinación deyodo en las muestras de sal común retiradas de los hogares de los niños y niñas muestreados.Fuentes: Referencia (13).Los escolares integrantes de las muestrasen cada estrato se seleccionaron mediante undiseño bietápico complejo, estratificado ypor conglomerados. En la primera etapa seseleccionaron aquellas escuelas con unaprobabilidad proporcional al tamaño de lamuestra, mientras que en la segunda etapa seextrajeron aleatoriamente entre 18 y 20 niñosde las edades prescritas. El listado deestudiantes matriculados en las escuelasprimarias del país durante el curso escolar2003 – 2004 fue suministrado por elMINED.La muestra nacional quedó integradafinalmente por 2,101 niños y niñasprovenientes de 86 escuelas, 67 municipios y14 provincias del país. y el total de lasmuestras de los estratos: 14 provincias, 67municipios y 86 escuelas.Obtención de las muestras de orina yensayo del yodo contenido: De cada niño seobtuvo una muestra de orina casual, bajo laobservación de los profesores de lasescuelas, y sin que constituyera riesgoalguno para la salud del mismo. Lasmuestras de orina se recogieron en frascos

75 Rev Cubana Aliment Nutr 2008, Vol. 18, No. 1 De la Paz Luna y cols.plásticos desechables, opacos y de cierrehermético. Los frascos se rotularondebidamente, y se refrigeraron hasta elmomento del análisis en el laboratorio.El yodo contenido en las muestras deorina casual se determinó mediante unmicrométodo espectrofotométrico cinéticodesarrollado en el INCAP a partir de lareacción descrita por Sandell y Kolthoff. 14-15Figura 2. Distribución de los valores obtenidos deEUY según los criterios epidemiológicos para laevaluación del estado nutricional del yodo. Losvalores mostrados representan los porcentajes deresultados de EUY comprendidos en cadacategoría. Las concentraciones de la EUY seexpresan en µg/L.Fuente: Registros del estudio.Tamaño de la serie de estudio: 1,988.Los valores de la EUY se estratificaronsegún los criterios de la WHO/UNICEF/ICCIDD: 16 Mayor de 100.0 µg/L: Excreciónesperada; Entre 50.0 – 99.9: Excreciónligeramente disminuida; Entre 20.0 – 49.9:Excreción moderadamente disminuida; yMenor de 20.0: Excreción gravementedisminuida.De acuerdo con los valores de la EUY, laingestión de yodo se calificó como sigue: 16Menor de 100.0 µg/L: Ingestión insuficientede yodo; Entre 100.0 – 199.9: Ingestiónadecuada; Entre 200.0 y 299.9: Ingestiónmás que Adecuada; e Igual/Mayor de 300.0µg/L: Ingestión excesiva de yodo.Obtención de las muestras de sal comúny ensayo del yodo contenido: Del hogar delniño muestreado se obtuvieron muestras dela sal empleada en el consumo familiar ydoméstico. Las muestras de sal seconservaron en frascos debidamenterotulados y cerrados.El yodo contenido en las muestras de salcomún se ensayó mediante los sistemascolorimétricos empleados en el sistema devigilancia previsto por el ProgramaNacional. 13 La intensidad del colorobservado se corresponde con laconcentración de yodo en la muestra de sal(Figura 1). El contenido de yodo en lamuestra ensayada de sal se denotó comoaceptable si fuera igual que (mayor de) 15ppm. 13Análisis estadístico de los resultados:Los datos sociodemográficos de los niños yniñas participantes en el estudio, losresultados de los ensayos del yodo contenidoen las muestras de orina casuales, y losresultados de la determinación de yodo enlas muestras de sal retiradas de los hogaresmuestreados se almacenaron en uncontenedor digital creado al efecto enEXCEL v. 7.0 para OFFICE de Windows(Microsoft, Redmont, Virgina, EstadosUnidos). Los resultados se redujeron porsexo y estrato de pertenencia, y sedescribieron estadísticamente medianteestadígrafos de locación central(media/mediana), dispersión (desviaciónestándar/rango) y agregación (porcentajes)con auxilio de los paquetes SPSS v. 10.0(Jaendel Scientific, Estados Unidos) yEpinfo v. 10 (Centros para el Control de lasEnfermedades, Atlanta, Estados Unidos). Lanormalidad de los resultados se comprobómediante el test de Kolmogorov-Smirnov.Los resultados de la EUY se presentaroncomo la mediana de los valores. Las

Yoduria como medidor de la fortificación de la sal Rev Cubana Aliment Nutr 2008, Vol. 18, No. 1 76diferencias entre estratos respecto de lasmedianas de los valores de la EUY seevaluaron mediante el test de Mann-Whitney-Wilcoxon.diferencias como significativas estadísticamente.Figura 3. Cambios en los valores de la EUY en el decenio 1995 – 2005. Se muestran los casos condeficiencia establecida de yodo (EUY < 100 µg/L), junto con aquellos declarados como de deficienciagrave de yodo (EUY < 20 µg/L). Línea roja discontinua: Mediana de los valores de EUY en 1995.Línea azul discontinua: Mediana de los valores de EUY en el 2005.Los valores de la EUY, y del contenidode yodo en las muestras domésticas de sal,se dicotomizaron de acuerdo con los puntosde corte reflejados en las normasinternacionalmente aceptadas. Lasdiferencias entre subgrupos se evaluaronmediante los correspondientes tests deanálisis de tablas de contingencia basados enla distribución ji-cuadrado. A fin decuantificar la fuerza de factores tenidoscomo de riesgo de desarrollo de estados deDDY se calcularon las respectivas razonesde disparidades. Se empleó un nivel designificación del 5% para denotar lasRESULTADOS Y DISCUSIÓNDe los 2,101 niños y niñas seleccionadospara el estudio, se obtuvieron muestras deorina casual en 1,988 de ellos, resultando enuna tasa global de respuesta del 94.5%. Loscasos perdidos se correspondieron conaquellas instancias en los que no se pudocompletar la recolección de la muestra deorina casual, o la muestra obtenida fueinsuficiente para los análisis de laboratorio.Sin embargo, la caída de la muestra fuemenor que el valor anticipado del 10%.La mediana global, no ajustada porestrato, de las concentraciones urinarias de

77 Rev Cubana Aliment Nutr 2008, Vol. 18, No. 1 De la Paz Luna y cols.yodo fue 246.9 µg/L. Este valor fue superioren casi 2.5 veces el límite de aceptabilidadde 100 µg/L, lo que indica una ingesta deyodo mayor que la adecuada, según loscriterios epidemiológicos empleados para laevaluación del estado nutricional del yodo.En el reporte del Coordinador delICCIDD para las Américas, dado a conoceren el 2004, se hace notar que 8 países delárea, a saber: Costa Rica, Honduras,Panamá, Brasil, Chile, Ecuador, Paraguay yPerú, presentaron medianas de los valores deEUY superiores a 200 µg/L. Cuba se une aeste selecto grupo, al mostrar resultadospositivos en el programa para el control delos DDY.Si se comparan los resultados delpresente estudio con los obtenidos en el año1995, 12 tal y como se aprecia en la Figura 3,se observa una reducción notable delporcentaje de escolares con deficienciaestablecida de yodo, esto es, para valores deEUY < 100 µg/L (1995: 51.0% vs. 2005:8.4%; p < 0.05; test de comparación deproporciones independientes). Los resultadospresentados apuntan hacia la influenciafavorable del programa nacional de yodaciónde la sal.Asimismo, se apreció una disminuciónde casos con deficiencia severa de yodo,cuando la EUY < 20 µg/L (1995: 19.0% vs.2005: 0.6%; p < 0.05; test de comparaciónTabla 1. Valores de EUY encontrados en los escolares muestreados por estratos distribuidos segúnindicadores programáticos empleados para la certificación de los esfuerzos del país en laeliminación sostenible de los cuadros de DDY. Se muestran además el número y [entre corchetes] elporcentaje de valores de EUY que satisfacen los criterios globales de certificación de eliminaciónsostenible de los cuadros de DDY.Estrato Tamaño EUY, µg/L < 50 µg/L < 100 µg/L > 300 µg/LUrbano 681 245.3 § 8[1.2]Rural 697 266.5 § 16[2.3]Rural-montañoso 608 211.1 § 22[3.6]CUBA 1,986 241.5 46[2.3]37[5.4]48[6.9]83[13.7]168[8.5]193[28.3]261[37.4]121[19.9]575[28.9]Criterios para la certificación de los esfuerzos del país en la eliminación progresiva de los cuadrosde DDY: Mediana nacional de la EUY: > 100 µg/L; Valores de EUY < 50 µg/L: Menos del 20%;Valores de EUY

Yoduria como medidor de la fortificación de la sal Rev Cubana Aliment Nutr 2008, Vol. 18, No. 1 78La Tabla 1 muestra la mediana de losvalores de EUY para los distintos estratossocio-demográficos de pertenencia de losniños y niñas muestreados. Se observó unadeclinación progresiva y estadísticamentesignificativa de la mediana de la EUY amedida que el lugar de residencia del escolarse hacía más intrincado. Así, los niños yniñas residentes en lugares ruralesmontañososmostraron los valores más bajosde EUY, si bien la mediana observada fuesuperior en 2 veces al límite de aceptabilidadde 100 µg/L. Igualmente, la proporción deescolares con valores de EUY menores de 50µg/L, y de 100 µg/L, fue mayor entre losmuestreados en estratos rurales-montañosos.También se observó entre los escolaresestudiados entre los estratos ruralesmontañososla menor proporción de valoresde EUY mayores de 300 µg/L.Si se tienen en cuenta los criteriosglobales para la certificación de losesfuerzos del país en la eliminaciónsostenible de los desórdenes por deficienciade yodo, se observa que la mediana de losvalores de EUY encontrada en este estudiosupera en 2.5 veces el valor límite deconcentración recomendado de 100 µg/L.Además, los porcentajes observados deescolares con valores de EUY menores de 50y 100 µg/L fueron inferiores a las cotasfijadas internacionalmente (Valores de EUY< 50 µg/L: 2.3% vs. 20.0%; p < 0.05;Valores de EUY < 100 µg/L: 8.5% vs.50.0%; p < 0.05; test de comparación paravalores conocidos de una proporciónpoblacional).Este estudio reveló que el 64.5% de losvalores reunidos de EUY fue mayor de 200µg/L. Hay que hacer notar que el 29.0% delos valores de EUY fue superior a los 300µg/L. Estos valores son indicativos de unaingesta de yodo superior a la adecuada, ydeben convertirse en consecuencia en unaalerta para los conductores del programa. Seobtuvieron resultados similares en un estudiorecientemente concluido con 3,319 niños delos 5 continentes, de los cuales el 31.0%presentó valores de EUY superiores a los300 µg/L. 17Figura 4. Estado de la yodación de la sal común. Sepresentan los porcentajes de muestras de salrecuperadas de los hogares de los escolares en cadaestrato muestreado con contenido de yodo quesatisfacen los criterios expuestos.Fuente: Registros del estudio.Tamaño de la serie de estudio: 1,598.El estudio realizado también conllevó ladeterminación del grado de yodación deconsumo familiar y doméstico en los hogaresde los niños y niñas muestreados. Seobtuvieron 1,598 muestras de sal de loshogares de los escolares, lo que representó el88.2% del tamaño muestral propuesto. Lacaída observada de la muestra se debiófundamentalmente a que algunos niños yniñas no suministraron al equipo deinvestigadores la muestra pedida de la salconsumida en sus hogares.A nivel del país, sólo el 66.7% de lasmuestras de sal de consumo familiar ydoméstico mostró niveles óptimos deyodación, mientras que el 33.3% de lasmuestras de sal mostró valores de yodación

79 Rev Cubana Aliment Nutr 2008, Vol. 18, No. 1 De la Paz Luna y cols.inferiores al valor límite de 15 ppm (Figura4).La Figura 5 muestra la distribución delcontenido de yodo en las muestras de sal deuso familiar y doméstico según los estratosde pertenencia de los niños y niñasmuestreados. El estrato rural se distinguiópor el más alto porcentaje de muestras de salcon niveles insuficientes de yodación, conun 48.0%. Puede señalarse que en el estratorural-montaña se encontraron los porcentajesmás bajos de muestras de sal conconcentraciones insuficientes de yodo (< 15ppm), con el 22.0%.Figura 5. Distribución de los valores de contenidode yodo en las muestras de sal de consumo familiary doméstico.Los estratos urbano y rural-montañosomostraron los porcentajes más altos demuestras con yodación mayor de 15 ppm,con valores del 73.0% y 78.0%,respectivamente.La Tabla 2 muestra la distribución delcontenido de yodo en las muestras de sal deconsumo de acuerdo con el estrato depertenencia del escolar muestreado.Considerando el estrato rural como el demayor riesgo de desarrollo de cuadros deDDY, en base a los registros históricos delsistema de vigilancia del programa nacional,las razones de disparidades estimadasdemostraron que sí existe un mayor peligrode no recibir sal con niveles adecuados deyodo si el escolar reside en un área rural,antes que una urbana o rural-montañosa.Ello también serviría para explicar por quélos porcentajes de adecuación del yodocontenido en la sal de uso común en loshogares rurales fueron los más bajos detodos.Por la importancia de la fortificación conyodo de la sal de consumo humano, esnecesario el monitoreo regular de la calidadde este producto, de manera que asegureniveles de fortificación adecuados y permitahacer los ajustes requeridos en cadamomento, pues de encontrarse una EUYmayor de 300 µg/L tampoco se lograría unanutrición óptima de yodo.La constatación de una EUY muchomayor que la establecida para un estadonutricional óptimo del yodo, podría tenercausas diversas, como podría ser el consumopor parte de la población estudiada de salyodada obtenida por vías no reconocidas quepudieran sumar cantidades de estemicronutriente más altas que lasrecomendadas. Otros factores, como el yodopresente en el agua potable, el consumo dealimentos ricos en este mineral, u otros nosuficientemente caracterizados, pudieraninfluir en la ingesta reportada de yodo. Noobstante el monitoreo regular de la calidadde la sal yodada debe llevarse a cabo, demanera que asegure que el nivel defortificación sea el adecuado y permita hacerlos ajustes requeridos en cada momento. Conrelación a este tema varios países de laregión poseen sus propias experiencias.Ecuador y Panamá han logrado reducir laEUY mediante la disminución del contenidode yodo en la sal. Sin embargo, en Chile esteproceder no se tradujo en cambios de laEUY. 16-18Este estudio reveló que sólo el 66.7% delas muestras de sal retiradas de los hogaresde los escolares estaban adecuadamenteyodadas. El estrato rural-montaña se destacópor los porcentajes más altos de muestras de

Yoduria como medidor de la fortificación de la sal Rev Cubana Aliment Nutr 2008, Vol. 18, No. 1 80sal con un contenido de yodo mayor de 15ppm (y más). Estos resultados podríanreflejar que el área rural-montaña fueconsiderada de alto riesgo de desarrollo decuadros por DDY desde la misma instalacióndel programa, y en consecuencia, segarantizó desde el primer año de existenciadel mismo la distribución de sal yodadaenvasada en bolsas, junto con la divulgaciónde las medidas para la protección del yodoen la sal.realizado por el mismo equipo deencuestadores en todos estratos del país quefueron seleccionados, mientras que en elsistema de vigilancia confluyen técnicos yevaluadores con diferentes formacionescurriculares y grados de entrenamiento.Los estudios realizados con escolareshondureños revelaron que alrededor del 60%de las muestras de sal contenían cantidadesadecuadas de yodo, pero el porcentaje deadecuación del contenido de yodo disminuíaTabla 2. Distribución del contenido de yodo en la sal de consumo doméstico y familiar según el estrato depertenencia del escolar. Las razones de disparidades (OR) se calcularon para las parejas de estratos Ruralvs. Urbano, y Rural vs. Rural-Montaña. Para más detalles: Consulte la Sección RESULTADOS yDISCUSION de este artículo.Estrato Tamaño Contenido de yodo en la sal OR χ2< 15 ppm > 15 ppmUrbano 542 147[27.1]395[72.9]2.57[1.98 – 3.34]54.90(p < 0.05)Rural 550 269[48.9]281[51.1]Rural-Montañoso 506 116[22.9]390[77.1]3.22[2.44 – 4.24]76.74(p < 0.05)CUBA 1,598 532 1,066χ2 calculado según Mantel-Haenszel.Los porcentajes de hogares con nivelesde sal adecuadamente yodada estimados eneste estudio difirieron de los reportados porel sistema de vigilancia y monitoreointegrado en el programa nacional. Estasdiferencias podrían ser explicadas por lasdiferencias existentes entre las metodologíassobre las cuales se han sustentado ambasindagaciones: este estudio representa unaindagación al azar, mientras que el sistemade vigilancia actúa a través de sitioscentinelaubicados en colectividades yestratos de alto riesgo de desarrollo de DDY.Otro aspecto metodológico que podríaexplicar los estimados dispares del impactodel programa nacional de yodación sería lasdiferencias entre las formaciones yactuaciones de los encargados de conducirambas indagaciones: el presente estudio fuehasta ser del 20% en aquellas comunidadesconsideradas como lejanas de los centrosurbanos. 19 Estos resultados confirman lasobservaciones realizadas en otros estudios deque el indicador de yodación óptima de la salcomún está influida por la existenciasimultánea de áreas geográficas muyretiradas y con escasa disponibilidad de lasal yodada, las comunidades favorecidas poruna mayor disponibilidad de productosindustriales, aquellas con un ingresoeconómico superior, y la mayor exposición amensajes educativos acerca de laconveniencia del consumo de sal yodada. 20-27El estudio presente señaló también que,probablemente, los elevados porcentajes desal adecuadamente yodada detectados en lasáreas rurales y urbanas del país, con gradovariable de accesibilidad y urbanización,

81 Rev Cubana Aliment Nutr 2008, Vol. 18, No. 1 De la Paz Luna y cols.pueden ocultar las altas frecuencias de sal noadecuadamente yodada encontradas en áreasrurales postergadas, observación realizadaindependientemente por otros autores. 19-27Los avances alcanzados en nuestro paísdespués de 4 años de producción sostenidade sal yodada reflejan la validez de laestrategia adoptada por el Gobierno y lasautoridades sanitarias para mejorar el estadonutricional del yodo en la población cubana,al observarse mejorías sustanciales de losindicadores de impacto del programa, encomparación con el estudio realizado en1995. Este progreso no solo ocurrió a nivelnacional, donde, según los valores de laEUY, se pasó de un cuadro de deficiencialigera a otro con una ingesta superior a laadecuada; sino también dentro de cada unode los estratos estudiados, ya que losporcentajes de escolares con deficiencias enla ingestión de yodo se redujeron en más deun 30% tanto en las zonas urbana como larural, mientras que la zona montañosa pasóde un estado de grave deficiencia deingestión de yodo a otro óptimo nutricionalmente.CONCLUSIONESSegún los resultados de la EUY, secomprobó un estado nutricional de yodoóptimo, tanto a nivel del país, como de losdiferentes estratos muestreados. Estosresultados avalan también la utilidad de laEUY como indicador del impacto delPrograma Nacional de Yodación de la sal.La mayor parte de los cuadros encontradosde deficiencia de yodo se clasificaron comoligeros. El alto porcentaje de escolares conuna EUY mayor de 300 µg/L debeconstituirse en una alerta para losadministradores del programa.Todos los estratos muestreadosexhibieron una ingesta de yodo mayor que lafijada por los límites de aceptabilidad. Sibien el estrato rural-montañoso se distinguiópor valores mínimos de EUY, éstossuperaron en 2 veces el límite deaceptabilidad. Los niveles óptimos deyodación de la sal de uso domésticoconstatados a nivel nacional fueroninferiores a los reportados por el Sistema deVigilancia y Monitoreo del Programa. A ellopueden haber contribuido diferencias en lasmetodologías de diseño y conducción de losprocesos de vigilancia y monitoreo. Existeuna mejora a nivel nacional en la situaciónnutricional del yodo, lo que evidencia lavalidez de la estrategia de fortificación de lasal con yodo.RECOMENDACIONESLos investigadores recomiendan elmonitoreo regular de la calidad de la salyodada, de manera que asegure que el nivelde fortificación sea el adecuado, y se puedanhacer los ajustes requeridos en el momentooportuno.AGRADECIMIENTOSEl equipo de investigadores agradece al ClubKiwanis Internacional y la UNICEF, por elapoyo brindado para la consecución de esteproyecto.Los autores también agradecen al Dr. SergioSantana Porbén, Secretario de ActividadesCientíficas de la Sociedad Cubana deNutrición Clínica, por la ayuda prestada enla redacción de este artículo.SUMMARYSince 1999 salt for human consumption in Cubais fortified with iodine. Urinary Iodine Excretion(UIE) has been proposed as a measure of impactof the Nacional Program for Salt Iodation. UIEwas determined in 1,988 school boys and girlsaged between 6 – 12 years, sampled from thecountry’s urban, rural and mountain-rural strataduring the course of 2004. Iodine content of1,598 samples of salt collected fromparticipating boys and girls’s homes was alsocolorimetrically assayed. Sixty-six point seven

Yoduria como medidor de la fortificación de la sal Rev Cubana Aliment Nutr 2008, Vol. 18, No. 1 82percent of collected salt samples showed optimallevels of iodation. Fiftieth-percentile of UIEvalues distribution in the study serie was 246.9µg/L, almost 2.5-fold higher than the limit ofacceptability for this measurement. AlthoughUIE was significantly lower among childrenbelonging to the rural-mountain stratum, theUIE value estimated for these children washigher than the acceptability limit (211.1 vs.100.0 µg/L; p < 0.05; comparison test for aknown population median). UIE observed valuesindicate that iodine intakes among school boysand girls living in different geographical strataare optimal.Subject headings: IODINE / URINARYIODINE EXCRETION / IODINEDEFICIENCY / IODATED SALT /FORTIFICATION.REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS1. World Health Organization. Iodine statusworldwide. En: WHO Global databaseon iodine deficiency (Editor: de BenoisB). Geneva: 2004. pp. 9-21.2. United Nations System. StandingCommittee on Nutrition. 5th Report ofthe world nutrition situation. Geneva:2004.3. Amarra MSV, Bongga DC, Petaño Ho L,Cruz FB, Solis JS, Barrios EB. Effect ofiodine status and other nutricional factorson psicomotor and cognitiveperformance of Filipino schoolchildren.Food and Nutrition Bull 2007;28:47-54.4. World Health Organization and Foodand Agricultural Organization of theUnited Nations. Human vitamin andmineral requirements. WHO/FAO.Roma: 2002.5. Alavez Martín E, Torres O, Amador P,Romeo J. Bocio endémico en Cuba:encuesta en la región de Baracoa. RevCub Hig Epid 1977;15:123-36.6. Alavez Martín E, Navarro D. Prevalenciade bocio simple en población escolar enun área de Salud de la Ciudad de laHabana. Rev Cub Med 1980;22:164-72.7. Alavez Martín E. Endemic goiter inCuba. En: Towards the eradication ofendemic goiter, cretinism, and iodinedeficiency. Proceeding of the V Meetingof the PAHO/WHO technical group onendemic goiter, cretinism and iodinedeficiency (Editores: Dunn J, Pretell EA,Daza CH, Vitteri FE). PAHO ScientificPublication. No. 502. Washington DC:1986. pp 288-91.8. Alavez Martín E, Zulueta Torres D,Terry Berro B, Sánchez R, Valdespino F.Desórdenes por deficiencia de yodo.UNICEF. Premium Publicity SA. LaHabana: 2001.9. Grant J. Estado mundial de la infancia.UNICEF. J&J Asociados. Barcelona:1995.10. Latham MC. Nutrición en el mundo endesarrollo. Colección FAO:Alimentación y Nutrición. Roma: 2002.11. Fondo de Naciones Unidas para laInfancia. Evaluación externa de losprogramas/proyectos de eliminación delos DDI desórdenes por deficiencia deyodo. Proceso de certificación. UNICEF.Ginebra: 1999.12. Rodríguez-Ojea A, Menéndez R, TerryB, Vega L, Abreu Y, Díaz Z. Low levelsof urinary iodine excretion inschoolchildren of rural areas in Cuba.Eur J Clin Nutr 1998;52:372-5.13. Zulueta Torres D. Programa para laeliminación sostenible de los desórdenespor deficiencia de yodo en Cuba: estadoactual. Tesis para optar por el Título deMáster en Nutrición en Salud Pública.Instituto de Nutrición e Higiene de losAlimentos. Ministerio de Salud Pública.La Habana: 2005.14. Mazariegos Cordero DI. Análisissemiautomatizado de yodo en orina y enmuestras de sal. Adaptación de métodosespectrofotométricos al análisis cinéticoen microplacas. Tesis de Grado.

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