12.07.2015 Views

poemas 1.pdf - Revista La Manzana de la Discordia

poemas 1.pdf - Revista La Manzana de la Discordia

poemas 1.pdf - Revista La Manzana de la Discordia

SHOW MORE
SHOW LESS
  • No tags were found...

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

POEMAS Ana María Gómez VélezDescubrimiento¿Quién teje el <strong>de</strong>licado hiloque va <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el camino hasta tus pies?¿Cuántas estrel<strong>la</strong>s cabenen <strong>la</strong> cuenca <strong>de</strong> tu mano cerrada?¿Cuántos sueños vue<strong>la</strong>n en un suspiro?¿Cuánto amor contiene una lágrima?¿Es verdad que aparecencientos <strong>de</strong> ángeles en una sonrisa?¿Cuántas veces en un abrazoestán el cielo y el infiernomezc<strong>la</strong>dos e intactos?AbecedarioAusenciaBúsquedaCaídaDominioErranteFalsoGrutaHuertoIs<strong>la</strong>Jung<strong>la</strong>LugarLluviaMúsicaNuncaÓrbitaPasiónQuejidoRumboSueñoTemorUlteriorVértigoYZambullirse¿Cómo <strong>de</strong>sapareció el <strong>de</strong>samor?I.<strong>La</strong> caraco<strong>la</strong> que recogió en <strong>la</strong> p<strong>la</strong>yasirvió para que <strong>la</strong> hechicera <strong>de</strong> <strong>la</strong> tribuhiciera un col<strong>la</strong>ry anudara el silencio a su costado.II.Y <strong>de</strong> repente todo volvió a su sitio.Los jarrones antes hechos añicos en el piso,ahora estaban enteros.Igual su corazón,el amor estaba intacto.El <strong>de</strong>samor había <strong>de</strong>jado <strong>de</strong> existir.III.El<strong>la</strong> era una mariposay murió al posarsesobre <strong>la</strong> flor <strong>de</strong>l color <strong>de</strong>l sol.A <strong>la</strong> mañana siguienteapareció <strong>la</strong> flor-mariposa:Era un pájaro tan pequeñocomo un <strong>de</strong>do meñiquey tan liviano como un copo <strong>de</strong> algodón.Besó <strong>la</strong> flor <strong>de</strong>shojaday todo empezó <strong>de</strong> nuevo.SueñosSueños consentidoscorazón agitadosentidos atentosfluyen en mi sangre<strong>de</strong>seantes burbujassuspiros levessueños fluyendoflores <strong>de</strong>shojadas en mi espaldamanos en mi vientrealiento cálidomurmullossueños y sedas<strong>La</strong> manzana <strong>de</strong> <strong>la</strong> discordia, Enero - Junio, Año 2011, Vol. 6, No. 1: 103-106


104 Ana María Gómez VélezDos pa<strong>la</strong>bras“Ni i<strong>de</strong>a. Esas son dos pa<strong>la</strong>bras…”Cuarto menguante.Soy yo. Te extraño. Nos vemos.Te cuidas. Salgamos juntos.Te pienso. Aquí estoy.Cuenta conmigo. Caminemos juntos.Cuarto creciente.No sé. Nada creo. Flor <strong>de</strong>shojada.<strong>La</strong> vida. Una trampa.Bonito día. Buenas noches. Puerta cerrada.Quiero sexo. <strong>La</strong> muerte.Tomemos otro.Emborráchate conmigo.Luna llena.No estoy. Usuario <strong>de</strong>sconectado.¿Qué piensas? Tiempo muerto.Caída libre. No respon<strong>de</strong>.Luna nueva.Estoy soñando.Duermo penas. Usuario inexistente.Escribo <strong>poemas</strong>. Leo nove<strong>la</strong>s.Camino, canto.Soy mujer. Sin retorno.<strong>La</strong> mar. Calma chica.Todo acabó. Por fin.¡Oh, no!Soy mujerSoy mujerDiversa, mudable, variable, cambiante,soy una y soy miles,soy ésta y <strong>la</strong> otra<strong>la</strong> que está aquí, <strong>la</strong> que está allá.En mí encuentrasa <strong>la</strong> sumisa, a <strong>la</strong> contrincante,a <strong>la</strong> apasionada, a <strong>la</strong> dócil, a <strong>la</strong> tierna,a <strong>la</strong> amiga, a <strong>la</strong> novia, a <strong>la</strong> amante,a <strong>la</strong> santa, a <strong>la</strong> pecadora,a <strong>la</strong> anciana, a <strong>la</strong> dulce niña,a <strong>la</strong> coqueta, a <strong>la</strong> apaciguadora,a <strong>la</strong> compañera, a <strong>la</strong> enemiga mortal,a <strong>la</strong> enfermera, a <strong>la</strong> incondicional,a <strong>la</strong> <strong>de</strong>vota.Soy <strong>la</strong> poeta<strong>la</strong> periodista, <strong>la</strong> narradora,<strong>la</strong> memoriosa,<strong>la</strong> que escucha,<strong>la</strong> que pregunta,<strong>la</strong> que domina <strong>la</strong> situacióny <strong>la</strong> asustadiza.<strong>La</strong> que olvida todo sin preocupacionesni dobleces,<strong>la</strong> que exige y pelea por sus <strong>de</strong>rechos.<strong>La</strong> que aguanta todo sin hab<strong>la</strong>r.Y <strong>la</strong> que grita, <strong>la</strong> que gime.Y también tienes en mí a esa,a <strong>la</strong> que cal<strong>la</strong>, a <strong>la</strong> que sueña,a <strong>la</strong> que llora, a <strong>la</strong> que goza,a <strong>la</strong> que juega todos los juegos sin trampasa <strong>la</strong> que se equivoca a cada instante ya <strong>la</strong> que piensa y entien<strong>de</strong>a <strong>la</strong> que sabe <strong>de</strong> estrategiasa <strong>la</strong> que sufre, a <strong>la</strong> que ríe,a <strong>la</strong> que sabe <strong>de</strong> entregarlo todoy <strong>de</strong> per<strong>de</strong>rlo todo, también.A <strong>la</strong> que sabe <strong>de</strong> mitos y <strong>de</strong> ritos,<strong>de</strong> embrujos,<strong>de</strong> hechizos, <strong>de</strong> conjuros.A <strong>la</strong> científica,a <strong>la</strong> que calcu<strong>la</strong> y compara,a <strong>la</strong> que niega, a <strong>la</strong> que espera,a <strong>la</strong> que teje, a <strong>la</strong> que <strong>de</strong>steje,a <strong>la</strong> que une, a <strong>la</strong> que separaa <strong>la</strong> que dice <strong>la</strong> verdad


Poemas105a pesar <strong>de</strong> que quieras escuchar mentiras.Soy una y mutablesoy yo y soy milesSoy yo misma y muchas otras.¿Por qué, hombre ingrato,buscas a otras si conmigo<strong>la</strong>s tienes a todas?No ves que soy yo, <strong>la</strong> que cambia,<strong>la</strong> que muda <strong>de</strong> piel y <strong>de</strong> oficio?Abre bien los ojos para que sientasAbre bien el oído para que miresCierra bien los ojos para que veasquién está a tu <strong>la</strong>doy aunque <strong>la</strong> ignoresse ocupa <strong>de</strong> tus pequeñas cosasy alegra tus días.Soy yo, única e inmutable.<strong>La</strong> mujer que sueña, <strong>la</strong> mujer que espera.<strong>La</strong> mujer <strong>de</strong>finitiva y total:Ana María, Penélope, Anita, Chiqui,Pame<strong>la</strong>, Andrea, Sonia, Inés, Tata,Edith, Aurelia, Romelia, Esmeralda.Soy yo: mujer entera.Mujer para mí, para ti y para el mundo.Para escribir un cuentoHabía una vez en un país remoto una mujer quese l<strong>la</strong>maba Heroína. Una tar<strong>de</strong> soleada salió a pasearbajo los guayacanes, cuando pisaba <strong>la</strong>s hojas secasy <strong>la</strong>s flores que caían, sus sandalias les arrancabanleves crujidos. <strong>La</strong> brisa que venía <strong>de</strong>l mar lejano leacariciaba el cabello y los hombros <strong>de</strong>snudos. Heroínaañoraba besos y abrazos -una sonrisa se dibujabaen su rostro-. Caminó bajo una ceiba enormeque perdía sus hojas por puñados y que <strong>de</strong>sprendíaunas motas b<strong>la</strong>ndas, Heroína <strong>la</strong>s recogió y encontróun diminuto grano oscuro y duro y dijo:-Dentro <strong>de</strong> ti se encuentra ese árbol enorme- y setragó <strong>la</strong> semil<strong>la</strong>.El<strong>la</strong> quería ser etérea, no existir, para vo<strong>la</strong>r comoese grano <strong>de</strong> árbol que había encontrado.En su camino topó con un hombre bello y <strong>de</strong>seable.Se l<strong>la</strong>maba Único y pensaba que el mundo girabaa su merced y dignísima disposición. Conversaron<strong>la</strong>rgo rato, a Heroína le encantaba hab<strong>la</strong>r <strong>de</strong>temas profundos y Único no <strong>de</strong>seaba quedarse atrás.Caminaron juntos y luego el<strong>la</strong> se marchó a sutorre <strong>de</strong> cristal don<strong>de</strong> vivía tranqui<strong>la</strong> y so<strong>la</strong>. A lospocos días recibió una paloma mensajera con unanuncio <strong>de</strong> Único quien <strong>de</strong>seaba ver<strong>la</strong> <strong>de</strong> nuevo.Heroína, quien esa mañana se <strong>de</strong>dicaba a juntarletras y a contar flores se dijo:-¿Qué más da?- Le <strong>de</strong>volvió <strong>la</strong> paloma con unanota en <strong>la</strong> que le prometía que lo vería al atar<strong>de</strong>cer,bajo <strong>la</strong> ceiba.Ese atar<strong>de</strong>cer Único y Heroína contaron estrel<strong>la</strong>sy cortaron azahares.Sintieron que <strong>la</strong> vida los recompensaba al caminarbajo <strong>la</strong> luna.Se besaron con dulzura y durmieron una siestabajo los guayacanes, <strong>de</strong>snudos…Pasaron los días y el intercambio <strong>de</strong> cartas entreÚnico y Heroína creció. Se veían algunas tar<strong>de</strong>s,conversaban y comían frutas. Una vez compartieronuna madrugada <strong>de</strong> suspiros anhe<strong>la</strong>ntes.De repente a Único empezó a crecerle el pecho:primero era un grano diminuto que poco a pocotomó <strong>la</strong> forma <strong>de</strong> un seno <strong>de</strong> mujer. Esto lo perturbóy l<strong>la</strong>mó a Sandro –sabio en vidas y muertes-.-¿A quién estás frecuentando?Único expresó su verdad:-Veo a muchas mujeres: algunas para inter-


106Ana María Gómez Vélezcambios sexuales, otras para robarles sus réditosy otras que ni siquiera me importan.-Tal vez aquí está <strong>la</strong> explicación: no crees enel amor–dijo Sandro–. ¿Alguna madrugada compartida?Único recordó aquel<strong>la</strong> vez que estuvo con Heroínay sonrió.Sí –dijo–. No tuve <strong>la</strong> precaución <strong>de</strong> cuidarmecomo me previniste, recibí una bebida <strong>de</strong> manos<strong>de</strong> mujer.Sandro lo miró y le dijo:-Es probable que esa mujer te hiciera un conjuro.Debes contactar<strong>la</strong> pronto.Único escribió a Heroína sin recibir respuestasdurante dos semanas. Su seno seguía creciendo,estaba en el centro <strong>de</strong> su pecho y hacía que respiraracon dificultad. A<strong>de</strong>más sentía muchos <strong>de</strong>seos<strong>de</strong> salir vo<strong>la</strong>ndo, per<strong>de</strong>rse en el infinito, irse, noestar.Heroína aceptó ver a Único un atar<strong>de</strong>cer, bajo<strong>la</strong> ceiba. Él llegó ansioso y se sentó en <strong>la</strong> hierba aesperar. Los guayacanes tenían muchas hojas ver<strong>de</strong>s.Heroína caminó hacia Único con una sonrisaentre su cabello suelto. Único le dijo:-Heroína ¿qué me hiciste aquel<strong>la</strong> madrugada?El<strong>la</strong> lo miró y respondió:-Nada diferente a lo que tú hiciste conmigo.Un poco <strong>de</strong> mi esencia. Ahora solo queda soñaren <strong>de</strong>saparecer.Se abrazaron y <strong>de</strong>l pecho <strong>de</strong> Único nació unaceiba, primero una rama y luego salieron otras:era una ceiba en miniatura, <strong>la</strong> ceiba gran<strong>de</strong> elevósus raíces hacia <strong>la</strong> pequeña, <strong>la</strong> llevó a sus pies y <strong>la</strong>sembró allí en <strong>la</strong> tierra.Único lloró porque no quería –a pesar <strong>de</strong> todo–separarse <strong>de</strong> su hija. Heroína lo miró, se dieron unbeso suave y sus cuerpos se volvieron pequeñosy duros y se metieron en <strong>la</strong> tierra, subieron por <strong>la</strong>savia hasta <strong>la</strong> ceiba y esperaron tres años a que <strong>la</strong>ceiba diera motas y así cumplir su sueño <strong>de</strong> <strong>de</strong>saparecer,<strong>de</strong> vo<strong>la</strong>r, <strong>de</strong> ser etéreos.El río <strong>de</strong> <strong>la</strong> memoriaEstoy <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> ti. Corro <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> tu sangre.Soy el río <strong>de</strong> <strong>la</strong> memoria que hace que <strong>la</strong>s cosassucedan en acontecimientos extraños, que se unan<strong>de</strong> maneras casi invisibles y permitan enca<strong>de</strong>narnuevas i<strong>de</strong>as, que los sueños se vuelvan enreda<strong>de</strong>ras.Deja que surjan los recuerdos.Deseo que me mires, <strong>de</strong>seo que me sientas. Atemoslos hilos que se recortan en este entramado.Haz que <strong>la</strong>s cosas regresen a su lugar, al lugarprimigenio en que empezaron <strong>la</strong>s anunciaciones.Dime que quieres retornar a <strong>la</strong> antigua estación,a <strong>la</strong> edad primera, al hilo <strong>de</strong> <strong>la</strong> memoria. Quese anu<strong>de</strong>n el pasado y los sueños <strong>de</strong> maneras casiin<strong>de</strong>scifrables. Deja que te lleve el movimientosin fin <strong>de</strong> <strong>la</strong> vida. ¡Oh, <strong>la</strong> vida! ese acontecimientocrucial, ese ser y estar en <strong>la</strong> memoria <strong>de</strong> los otros.Soy por lo que piensas <strong>de</strong> mí. Existo en re<strong>la</strong>cióncon tus i<strong>de</strong>as. Deja que <strong>la</strong> corriente llevetus sueños y tus ilusiones más allá <strong>de</strong> <strong>la</strong> realidad.Dime que quieres empezar a <strong>de</strong>senmarañar el ovillo<strong>de</strong> <strong>la</strong> memoria. Dime que quieres <strong>de</strong>satar los<strong>la</strong>zos que unen <strong>la</strong>s cosas, los temas, los tiemposy quieres hacer que todo salga a <strong>la</strong> luz como enaquel<strong>la</strong>s épocas en que soñábamos un mundo felizy eterno.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!