ENTREVISTASINTERNACIONALESJaime Franky RodríguezENTREVISTAS INTERNACIONALES | EDICIÓN COLOMBIAJaime Franky RodríguezDirector Revista Acto,Director Observatorio de DiseñoAplicado, ODA.Universidad Nacional de Colombia.Con alguna frecuencia me siento a pensar enel diseño y en el sentido que puede tener en mipaís. Me pregunto por su sentido en este contexto,porque he considerado siempre que lo unodebe establecer una relación estrecha con lo otro,si queremos hablar de diseño seriamente. Añadoa mis divagaciones la exploración sobre las posibilidadesde lograr una inserción real del diseñoen la sociedad y en la esfera productiva. Exploroimaginariamente esas posibilidades, porque creoque el diseño es una herramienta incomparablepara mejorar cualitativamente nuestras vidas,para procurar un mejor desempeño de nuestrasempresas y, por lo tanto, para lograr su sostenibilidady desarrollo, lo cual redundará también enla calidad de nuestra vida. Pienso, a veces, queel diseño es necesario en el mundo contemporáneo,si nos interesa participar en él. Me preocupopor la suerte del diseño colombiano en el marcode la globalización del mundo, del triunfo del libremercado o del advenimiento de las sociedadesde conocimiento, porque creo que no debemosquedar marginados por incapacidad, sino participardignamente en ellos desde el reconocimientode nuestras diferencias. Mi práctica profesionalestá orientada por estas cosas que pienso.Como ya se podrá advertir, me interesa la promocióny el fomento del diseño. Vengo de la arquitectura;llegué al diseño hace alrededor de28 años y desde entonces no he querido salirde él. Podría decir que estoy enfermo de diseñoy que, por extraño que parezca, lo disfruto: seque es una enfermedad que no se adquiere porcontagio, se adquiere voluntariamente y es precisamentela voluntad, la que la desarrolla y lahace más aguda.Por todo lo anterior, me muevo prioritariamenteen la gestión de proyectos para el desarrollo deldiseño, convencido de que la mejor salida, quizála única, es la articulación en profundidad deldiseño con la empresa. Para esto he asumido elpapel del camaleón obrando en unas ocasionescomo asesor o consultor de entidades del estadoy en otras como gerente de proyectos de fomentodiseño; he dado rienda suelta a mi interés porla formación y la academia y he actuado comodiseñador independiente, conciente de que miinterés fundamental no es vivir del diseño, sinoel de que todos puedan vivir el diseño.38 CREATIVIDAD ETICA MAG
ENTREVISTASINTERNACIONALESJAIME FRANKY RODRÍGUEZ ENTREVISTAS INTERNACIONALES | EDICIÓN COLOMBIAPor suerte no estoy solo en la tarea. Es cadavez más frecuente en Colombia encontrar otros-diseñadores y no diseñadores- con quienescompartir estas ideas o con quienes echar arodar iniciativas que permitan avanzar en esadirección. Hay que anotar aquí, que el diseño enel país, especialmente el diseño industrial, nacehace algo más de 40 años, distante del sectorempresarial y que, pese a lo mucho que hemosavanzado, en buena medida ese distanciamientopersiste. Con matices diferentes por supuesto,producto del reconocimiento que ha logrado, delas nuevas circunstancias y del cambio profundodel entorno empresarial. Se ha hecho muchoy aún queda mucho por hacer. Cada vez vemosmás talento y más diseñadores, pero no crecenen la misma proporción las empresas y las institucionesdispuestas a contar con ellos dentro desus equipos de trabajo; cada vez se oye hablarmás del diseño, se menciona en las agendas dedesarrollo empresarial o en planes de gobierno.A las preguntas ¿cómo es su visión del diseñoen Colombia? y ¿cuales son las acciones queviene desarrollando su país con referencia al diseñoen los diferentes sectores?, debo responder,en primer lugar, que en el país el diseñoya adquirió un reconocimiento en lo social y loeconómico, que existe una sensibilidad ante lanecesidad o conveniencia de utilizarlo e incluso,que se ha avanzado en la vinculación laboral delos diseñadores. Se menciona en los medios, enlas reuniones sociales, goza de una imagen positivao lo utilizan (indebidamente en mi opinión)como elemento de prestigio. Ya se logró llegara la meta que nos trazamos hace veinte años,pero hoy nos damos cuenta que no es suficientey que, si no avanzamos, resulta peligrosa. Hemencionado con insistencia en estos días quemás del 60% de los empresarios del país dicenincorporar diseño en sus organizaciones, quetan sólo alrededor del 15% vinculan diseñadoresprofesionales y que, de estos, muy pocosparticipan en el nivel estratégico o de decisiónen las empresas. Estamos ocupados sí -y sepiensa en el diseño-, pero en la realidad nuestroaporte parece ser considerado irrelevante.En segundo lugar, debo responder que el compromisohoy es otro: lograr lo que hemos llamadola inserción del diseño en profundidad, que no esotra cosa que procurar transferir los compromisosy los postulados más robustos de la disciplina (enlo que se refiere por ejemplo a la preocupaciónpor la calidad, la estética y la innovación), a lasesferas de decisión de la sociedad en general ydel sector empresarial en particular. Escribí que:“La inserción en profundidad sólo se logrará si seintroducen cambios en los modos de ver, pensary obrar de la dirigencia, la sociedad y el empresariadocolombiano, es decir, cambios culturales. Sise sigue haciendo lo mismo no se podrán obtenerresultados diferentes. Desde esa perspectivalo que hay es una corresponsabilidad del diseño,que puede ser considerado como el jalonador delcambio pero no como la panacea mágica que resuelvetodos los problemas”. A eso le estamosapuntando desde varios flancos: desde la Revistaacto, el Observatorio de Diseño Aplicado,ODA, de la Universidad Nacional de Colombia,y desde la Asociación Colombiana para el desarrollodel Diseño ACOA, entidades que trabajanpor articular los diseños a las políticas públicas yorganizan para el mes de noviembre del 2011 elsegundo encuentro sobre el tema, dando continuidadal realizado en Buenos Aires en el 2010.He revisado hasta aquí el tema desde una perspectivaamplia, en primer lugar por lo anotadoal inicio sobre mi campo de acción particular y,en segundo lugar, por mi convicción de la necesidadde una mirada estratégica y una miradadesde fuera del ámbito del diseño, para impulsarsu desarrollo. Pero esa es sólo una cara de la“...Es clave precisar que el sectorDiseño en Colombia no apareceregistrado en las cámaras decomercio como una actividadeconómica, se encuentradesagregado o atomizado, portanto no permite identificar estaactividad creativa, de ideas yconceptos propios del Diseñocon resultados e indicadoreseconómicos traducidos enproductos y servicios...”CREATIVIDAD ETICA MAG 39