los cambios en la interpretación de la pobreza en el mundo

CAPÍTULO CINCO5LOS CAMBIOS EN LA INTERPRETACIÓNDE LA POBREZA EN EL MUNDOUna evolución enla interpretaciónde la pobreza hacemás complejala cuestión decómo abordarla,aunque tambiénaumenta elabanico deherramientaspolíticas.5.1 IntroducciónEn las dos últimas décadas, los procesosasociados a la globalización económica y a laintegración política han tenido un impactomarcado en el crecimiento, la pobrezay la desigualdad. Estos procesos tienenimplicaciones importantes en cómo la cooperaciónmundial podría promover el bienestar de los queviven en la pobreza o de quienes sufren otros tiposde privación. Al mismo tiempo, una evolución enla interpretación de la pobreza hace más complejala cuestión de cómo abordarla, aunque tambiénaumenta el abanico de herramientas políticas.El presente capítulo analiza este panorama cambiantede pobreza. La primera sección se centra en la pobrezade ingresos, que ocupa un lugar destacado en el marcode los ODM. Describe las tendencias en la cifra, laproporción y la ubicación de las personas que vivenen situación de pobreza y considera dónde es probableque vayan a estar los focos de pobreza en los próximosaños. Examina el movimiento en torno al umbral dela pobreza de ingresos, las tendencias de la pobrezarelativa y los patrones de desigualdad. La segundasección examina los cambios en la interpretaciónde lo que constituye la pobreza, basándose en lainvestigación sobre las múltiples dimensiones y laexperiencia subjetiva de la pobreza. La sección finaldesarrolla las implicaciones potenciales de estepanorama cambiante de la pobreza para un sucesorpost-2015 a los ODM.5.2 La evolución de la pobrezade ingresosDesde 1990, año de referencia de los ODM, se haproducido una importante reducción de la pobreza deingresos en la mayor parte del mundo, y un cambio ensu distribución: mientras que en 1990 la mayoría de lospobres vivían en los países de renta baja (PRB), muchosde estos países están ahora clasificados como países derenta media (PRM). Este cambio ha generado un debatesobre los tipos de política más idóneos para acabar conla privación persistente en diferentes contextos.Las formas de medir la pobreza tradicionales secentran en los ingresos necesarios para comprar unacesta de bienes mínima para satisfacer las necesidadesbásicas. Para comparar la pobreza entre países y alo largo del tiempo, el Banco Mundial utiliza variosumbrales de la pobreza de ingresos internacionales.La atención se centra en los umbrales de la pobrezabajos –a saber, los 2 USD al día como medida, lo querepresenta la media de los umbrales de la pobreza entodos los países en desarrollo y otro más extremo de1,25 USD al día, que es el umbral medio de pobrezade los 15 países más pobres del mundo y el centro deinterés del ODM 1 45 .45 Los precios están en paridad del poder adquisitivo (PPA) de 2005, que tiene por objeto dar cuenta de las diferencias en el coste de la vida entrepaíses (véase Deaton, de próxima aparición). El método en el que se basa la construcción de estos umbrales de la pobreza ha sido criticado(por ej. Klasen, de próxima aparición), pero siguen siendo las medidas más ampliamente aceptadas de comparación de la pobreza de ingresosy se utilizan en informes sobre los ODM. Además de los umbrales de la pobreza de 1,25 USD al día y de 2 USD, los responsables políticos hanadoptado también umbrales de la pobreza de 4 y 5 USD al día para emplearlos sobre todo en las economías emergentes y en transición. Estecapítulo se centra en las dos medidas más bajas.66INFORME EUROPEO SOBRE EL DESARROLLO 2013

SOBREELINFORME EUROPEODESARROLLO5.2.1 Un perfil de pobreza comparableLas tendencias de la pobreza mundiales se basanen datos de encuestas nacionales 46 . Las cifrasmás recientes registran la pobreza desde el año2008 y sugieren una fuerte caída en el númerode personas que viven en la pobreza extrema deingresos y su proporción en la población total enlas últimas décadas 47 . Se estima que en 1990 el 43%de la población de los países en desarrollo vivía conmenos de 1,25 USD y que esta proporción se habíareducido a la mitad en 2008. Es decir, 620 millonesde personas salieron de la pobreza extrema en menosde veinte años. El avance más espectacular se produjoen China, donde el 60% de la población vivía en lapobreza extrema en 1990, cifra que se redujo al 13%en 2008. De hecho, China representó más del 80%de la reducción de la pobreza mundial durante esteperiodo (Loewe y Rippin, 2012).Como se muestra en la figura 5.1, no todas las regioneshan reducido la pobreza en la misma medida. En 1990,el porcentaje de la población que vivía en condicionesde pobreza en Asia Oriental y el Pacífico (EAP), enel África subsahariana (ASS) y en Asia Meridionaloscilaba entre el 54% y el 56%. La disminución dela pobreza fue más drástica en EAP, donde cayó del56% al 14% de la población. En Asia Meridional lapobreza se redujo en 18 puntos porcentuales en 18años, mientras que en el ASS se redujo del 56% al 47%de la población. En el conjunto de los países menosadelantados cayó desde el 65% (1990) hasta el 47%(2008), alrededor de 18 puntos porcentuales 48 .Se estima que en1990 el 43% dela población delos países endesarrollo vivíacon menos de1,25 USD y queesta proporción sehabía reducido ala mitad en 2008.Figura 5.1 Recuento de la pobreza por región con respecto al umbralde la pobreza de 1,25 USD, 1990-200857 4856 14 54 36 12 6 6 3 2 043 22ÁfricaSubsaharianaAsia Orientaly el PacíficoAsiaMeridionalAméricaLatina yel CaribeOrienteMedio yNorte deÁfricaEuropa yAsia CentralTotalRecuento (%) 1990 Recuento (%) 2008Fuente: PovcalNet, 201246 Estos datos provienen de más de 850 encuestas de hogares en cerca de 130 países en desarrollo, representativas del 90% de su población. Losdatos originales están disponibles en: http://go.worldbank.org/4K0EJIDFA0 (página consultada el 7 de julio de 2012).47 Los últimos datos corresponden a 2008, antes de la crisis económica mundial que ha aumentado la pobreza –aunque la falta de datos de suficientefrecuencia en tiempo real hace que sea difícil juzgarlos (Poverty Analysis Discussion Group: 8, 2012).48 No obstante, esta fuerte caída no está corroborada por otras fuentes. Por ejemplo, la UNCTAD (2011), basándose en los datos reunidos porKarshenas (2010) de 33 PMA tomando como referencia las cuentas nacionales y los datos de encuestas de hogares (representativos del 86% dela población de los PMA en 2007), sugiere una disminución del 58% al 52% entre 1990 y 2007. En general, la falta de datos impide un análisisfiable. Para los dos estudios de casos de los PMA en este IED, los datos de Karshenas indican caídas de sólo 5 puntos porcentuales en el caso deNepal, pero de 15 para Ruanda.POST-2015: ACCIÓN MUNDIAL PARA UN FUTURO INCLUYENTE Y SOSTENIBLE67

SOBREELINFORME EUROPEODESARROLLOque centrarse en la erradicación de la pobreza enuna serie de contextos diferentes y considerar quéformas de acción internacional podrían contribuir deforma más eficaz para lograrla en el ámbito nacionaly regional.La medida de recuento de la pobreza no revela elgrado de pobreza real, ya que no hace distinción entrequienes están justo por debajo o muy por debajo delumbral de la pobreza. Medidas complementariastoman en cuenta la distribución de los ingresos delos pobres –las más populares son la medición dela brecha de la pobreza, que incorpora la distanciade ingresos por debajo del umbral de la pobreza yla brecha de la pobreza al cuadrado, que incorporaesta distancia, pero también le da más «peso» a lascircunstancias de quienes están más lejos del umbralde la pobreza. Ambas medidas se redujeron en másde la mitad entre 1990 y 2008 en el caso de la líneade 1,25 USD al día, lo que sugiere que no sólo seredujo drásticamente la pobreza, sino que tambiénes menos aguda entre los que siguen siendo pobres.Las medidas se redujeron en todas las regiones, peroespecialmente en EAP, seguida de Asia Meridional(figura 5.2).Si bien queda claro que, con arreglo a las medicionesde 1,25 y 2,00 USD al día, la pobreza se redujonotablemente entre 1990 y 2010, la distribución yel ritmo proyectados de la futura reducción de lapobreza en el futuro se ponen en duda. Por ejemplo,el Banco Mundial (2012) prevé que la pobreza globalcaerá del 25% en 2005 al 16% en 2015, mientras queChandy y Gertz (2011) proyectan una disminucióndel 10% para 2015. Estas tendencias tienenimplicaciones para la distribución de la pobreza. ElBanco Mundial (2012) estima que el porcentaje de lospobres del mundo que viven en el ASS aumentará del28% en 2005 al 39% en 2015, mientras que Chandy yGertz (2011) sugieren que la cifra puede alcanzar el60% en 2015. A pesar de estas discrepancias, Kharasy Rogerson (2012:3) argumentan que en 2025, «lalocalización de la pobreza mundial estará centradasobre todo en los Estados frágiles, principalmente derenta baja y en países africanos». Estas tendencias setratan con más detalle en el capítulo 6.5.2.2 Las perspectivas nacionalessobre la pobrezaLa medición de la pobreza de una manera comparablea escala internacional ofrece ventajas evidentes parahacer mapas de la pobreza. Sin embargo, quedandudas considerables sobre cómo se construyen estosumbrales de la pobreza –a saber, la forma en queregistran las pautas de consumo diferentes entrepaíses y a lo largo del tiempo (Klasen, de próximaaparición). Los datos sobre las tendencias son muchomás fiables que sobre los niveles, pero existe lapreocupación de que los umbrales internacionalespuedan no estar identificando la pobreza absolutade forma consistente. Las implicaciones de la revisiónde las cifras de PPA son importantes: la revisión de2008 de las cifras de PPA de China situó a su cifrade pobreza en 1990 en el 60,2%, muy superior a lacifra del 33% en la revisión 2005 (Klasen, de próximaaparición, p. 6).Más allá de esto, las medidas de 1,25 USD y de2 USD captan sólo la pobreza más absoluta porlo que pierden su sentido en los países más ricos.Un estudio reciente para comparar las cifras depobreza derivadas de los umbrales de la pobrezanacionales e internacionales (Gentilini y Sumner,2012) se hace eco de algunas cifras internacionales–el estudio revela que 1500 millones de personasson pobres actualmente, según lo determinado porlos umbrales de la pobreza nacionales (el 22,5% dela población mundial), sólo ligeramente por encimade los 1300 millones de pobres identificados por lamedida de 1,25 USD internacional. Sin embargo, lasdos medidas llevan a estimaciones similares de lapobreza solamente en algunos países y, a menudo,las diferencias son considerables –en la India,las estimaciones de la pobreza internacionalesidentificaron a 45 millones de personas más comopobres que en las estimaciones nacionales. Ysiguiendo los umbrales nacionales de la pobreza, el10% de los pobres del mundo viven en países de rentaalta (PRA).Los problemas inherentes a la construcciónde umbrales de la pobreza internacionales y elargumento de que la privación también se deberíaconsiderar en relación con los estándares nacionalessugiere que los umbrales de la pobreza nacionalespodrían emplearse en la fijación de objetivos y enlos esfuerzos de seguimiento de la reducción dela pobreza en cualquier acuerdo mundial post-2015. Una propuesta reciente es centrarse en elSi bien quedaclaro que, conarreglo a lasmediciones de1,25 y 2,00 USDal día, la pobrezase redujonotablementeentre 1990 y 2010,la distribucióny el ritmoproyectados dela futurareducción de lapobreza en elfuturo se ponenen duda.POST-2015: ACCIÓN MUNDIAL PARA UN FUTURO INCLUYENTE Y SOSTENIBLE69

CAPÍTULO CINCOLa pobreza noes un fenómenoestático. Engeneral, laspersonas y loshogares entrany salen de lapobreza deingresos.Mientras quela erradicaciónde la privaciónextrema esclaramentefundamentalpara el bienestarhumano, laspersonas tambiéndan una granimportancia asu consumo enrelación a losestándaresvigentes y a sucapacidad departiciparplenamente ensu sociedad.establecimiento de los umbrales de la pobrezanacionales utilizando un procedimiento que seacoherente a escala internacional (Klasen, de próximaaparición en 2013, basándose en el trabajo de Reddy,S., Visaria, S. y Asali, M. (2009)).5.2.3 Las dinámicas de la pobrezaLa pobreza no es un fenómeno estático. En general,las personas y los hogares entran y salen de lapobreza de ingresos, a pesar de que quienes sonpobres durante periodos prolongados, o son pobrescrónicos, pueden quedar atrapados en «trampasde la pobreza», de carácter espacial, económicoo social. Varios estudios han tratado de analizarqué porcentaje de personas son pobres crónicos, elperiodo medio de pobreza y lo que hace que la genteentre y salga de la pobreza en contextos particulares(Shepherd, 2011). En los estudios realizados en paísesricos y pobres por igual, aparecen dos conclusionescomunes: las transiciones de entrada y salida dela pobreza son frecuentes y «las caídas y salidas sedan de forma simultánea» (Krishna, 2007:1). Porejemplo, en Uganda, uno de cada tres de los hogaresestudiados entre 1979 y 1994 salió de la pobreza en ladécada siguiente, mientras que el 11% de los hogarescayeron en ella (Krishna et al., 2006). En Bangladesh,entre 1987 y 2000, el 26% de los hogares estudiadossalieron de la pobreza mientras que el 18% cayeron enella (Sen, 2003). Basándose en estos estudios, Krishna(2007: 3) concluye:Por todas estas razones, es útil examinar la pobrezano como a menudo se ha visualizado –es decir,como una masa algo homogénea– sino como lo querealmente es: un grupo fluido de individuos condiferencias internas, inconstante, que se mueven endiferentes direcciones– en el mismo momento en eltiempo.La investigación actual está tratando de identificary distinguir entre pobreza crónica y transitoria,y de elaborar políticas para hacer frente a ambas.Esta interpretación de la naturaleza dinámica dela pobreza pone de manifiesto lo inadecuados queson los intentos de tomar «instantáneas» estáticase incompletas para medir a «los pobres» encualquier momento determinado. También pone derelieve la necesidad de tratar la vulnerabilidad –lasusceptibilidad de quienes están cerca del umbral dela pobreza de convertirse en pobres– y de mitigarel riesgo, sobre todo con vistas a la variedad cadavez mayor de amenazas a las que están expuestaslas personas pobres (Poverty Analysis DiscussionGroup, 2012: 4), incluyendo el cambio climático y ladegradación medioambiental.5.2.4 La pobreza absolutao la exclusión relativaInherente al concepto de crecimiento incluyenteestá la reducción de la pobreza relativa así como dela pobreza extrema. Esto significa tratar la situaciónde los relativamente desfavorecidos con respecto ala norma social. Mientras que la erradicación de laprivación extrema es claramente fundamental parael bienestar humano, las personas también dan unagran importancia a su consumo en relación a losestándares vigentes y a su capacidad de participarplenamente en su sociedad (Chen y Ravallion, 2012).Esto recuerda la importancia que Adam Smith dioa disponer de los medios básicos «para aparecer enpúblico sin vergüenza», es decir, que el contexto socialy la costumbre dan forma al bienestar y a la felicidad.En Europa, donde la pobreza extrema es muchomenor que en los países y las regiones en desarrollo,el concepto de pobreza relativa ha sido ampliamenteadoptado –por debajo de la mitad de la renta mediao mediana es un delimitador común. En los paísesen desarrollo, el concepto de pobreza relativa nose emplea tanto y no hay consenso sobre cómo lospobres consideran la pobreza extrema en relación conel consumo relativo. Chen y Ravallion (2012) aboganpor un concepto de «pobreza débilmente relativa»:las necesidades absolutas son más importantes en losniveles bajos de consumo, pero conforme los paísesse van haciendo más ricos, la gente da más valora su posición relativa en la sociedad. Empleandomedidas delimitadas por debajo por el umbral depobreza extrema y por encima por un umbral depobreza relativa, aplican este concepto a 116 países.Su análisis revela un descenso en la incidencia de lapobreza relativa (del 65% en 1990 al 47% en 2008),pero un aumento en el número de los relativamentepobres (en unos 210 millones de personas), a pesarde los avances en la reducción de la pobreza extremade ingresos (Chen y Ravallion, 2012). Esto implicaque, si las consideraciones relativas se vuelven másimportantes con la disminución de la incidencia dela pobreza extrema, puede ser relevante incluirlas encualquier acuerdo internacional que tenga por objetoluchar contra la privación, ya sea directamente o através de un énfasis más amplio en la desigualdad.70INFORME EUROPEO SOBRE EL DESARROLLO 2013

SOBREELINFORME EUROPEODESARROLLO5.2.5 Un aumento de la desigualdadde ingresosLas tendencias de la desigualdad son determinantesen la persistencia de la pobreza en medio de laabundancia. La desigualdad puede evaluarsemundialmente, entre países y a escala nacional.Si se examinan con atención los modelos de lasdesigualdades existentes, y la forma en que sedividen dentro y entre países, se pueden obtenerideas específicas sobre qué tipos de redistribuciónpodrían ser más efectivos, y en qué se tendría quecentrar un acuerdo internacional para reducir lasdesigualdades.La relación entre el crecimiento, la desigualdadde ingresos y la reducción la pobreza es sencilla: sitodo lo demás es igual, la desigualdad aumenta lapobreza sea cual sea el nivel de crecimiento. En todoel mundo, entre 1981 y 2005, aunque el impactodel crecimiento económico había permitido quecientos de millones de personas salieran de lapobreza, una mayor desigualdad significó que cercade 600 millones de personas que de otra manerapodrían haber salido, no tuvieron esa posibilidad(Hillebrand, 2009:7).Como la economía mundial está más integrada,se ha argumentado que la distribución de losingresos entre la población mundial cada vez esmás considerable debido a los mayores movimientostransfronterizos y la influencia de los estándaresmundiales en las percepciones de la gente sobre susituación y sus aspiraciones (Milanovic, 2012). Unestudio reciente de la desigualdad mundial estimaun coeficiente de Gini de alrededor de 0,7 (donde0 indica la igualdad total, y 1 representa el nivelmáximo de desigualdad): «Este es casi seguramenteel nivel más alto de desigualdad relativa, y sin dudade desigualdad mundial absoluta, que se haya tenidoen la historia mundial 51 ». Refleja una situación en laque un 8% de la población mundial recibe el 50% delos ingresos mundiales.Figura 5.3 Ingresos mundiales distribuidos por percentiles de la población en 2007(o el último disponible) en PPA en dólares internacionales al valor constante de 2005En todo el mundo,entre 1981 y 2005,aunque el impactodel crecimientoeconómico habíapermitido quecientos demillones depersonas salierande la pobreza,una mayordesigualdadsignificó quecerca de 600millones depersonas quede otra manerapodrían habersalido, notuvieron esaposibilidad.Q5Q4Cada banda horizontal representaun quinto igual de la población mundialQ3Q2Q1Personas por debajo de1,25 USD/día (22%)Personas por debajode 2 USD/día (40%)Fuente: Ortiz y Cummins, 201151 Véase la presentación de Branko Milanovic, disponible en: http://www.ub.edu/histeco/pdf/milanovic.pdfPOST-2015: ACCIÓN MUNDIAL PARA UN FUTURO INCLUYENTE Y SOSTENIBLE71

CAPÍTULO CINCOEn los últimosveinte años,el 1% de los másricos del mundoy las clases mediasde las economíasemergenteshan sido losprincipales«ganadores» enla distribuciónde los ingresosmundiales.Las disparidades prevalentes son extremas. Esun motivo de preocupación, pero podría ser unaoportunidad para que la cooperación internacionalse diseñara con vistas a fomentar la redistribución.Como la figura 5.3 deja claro, si los demás factorespermanecen iguales, con la redistribución decantidades pequeñas de dinero de los muy ricos sepodría eliminar eficazmente la pobreza de ingresos 52 .En los últimos veinte años, el 1% de los más ricosdel mundo y las clases medias de las economíasemergentes han sido los principales «ganadores»en la distribución de los ingresos mundiales. Losprincipales «perdedores» han sido el 5% de la partemás baja de la escala de la población mundial, cuyosingresos reales se han mantenido estáticos, y quienesestán entre los percentiles 75º y 90º, cuyas gananciasde ingresos reales se han estancado –incluyendo amuchos de los países en transición y de los paísesde América Latina, y de quienes viven en los paísesricos, cuyos ingresos no han aumentado. El tercioinferior de la distribución de los ingresos mundialesha experimentado ganancias significativas, conexcepción del 5% de la parte más baja, tal como serefleja en el fuerte descenso de la pobreza extrema.Milanovic (2012: 13) describe este cambio como«probablemente la reorganización mundial másprofunda de las posiciones económicas de la gentedesde la Revolución Industrial».Las conclusiones de Milanovic también tienenimplicaciones para la distribución de la desigualdaddentro y entre los países. Señala que, en 1870, ladesigualdad dentro de los países representaba másdel 66% de la desigualdad mundial, mientras quehoy en día la mayor parte de la desigualdad se daentre los países. La evaluación de las tendenciasrecientes en la desigualdad de ingresos mundialparece depender fundamentalmente del periodo detiempo y de los indicadores empleados 53 . El análisisde los ingresos medios sugiere que la desigualdaden general ha cambiado poco en los últimos 50años 54 , mientras que un análisis basado en el PIBsugiere que la desigualdad mundial se ha reducidodebido a que el aumento de la desigualdad en variospaíses no compensa los efectos de la reducción dela desigualdad entre los países (Bourguignon, 2011).Los cambios en los ingresos medios nacionales enlos últimos 40 años no revelan una convergencia entrelos países más ricos y los más pobres (PNUD, 2010).No obstante, cuando los ingresos nacionales mediosson «ponderados» para reflejar sus poblacionesrelativas, las experiencias de China y la India cuentanmás, y hay una mayor convergencia entre los países.Una implicación es que la migración de los paísespobres a los países más ricos podría tener fuertesefectos redistributivos (Milanovic, 2011, 2012), untema que veremos en el capítulo 9.Paralela a la posible bajada reciente de la desigualdadentre los países, cuando se «ponderan» los datos porel tamaño de la población, la desigualdad dentro delos países parece ir en aumento, sobre todo en losPRM (Ortiz y Cummins, 2011). Esta conclusión seve corroborada por numerosos estudios de casos deChina, (Sicular et al., 2006; Shi et al., 2011; Sutherlandy Yao, 2011), la India (Deaton y Drèze, 2002),Bangladesh (Deb et al., 2008), Sudáfrica (Bhorat yKanbur, 2006) y Ghana (Aryeetey y McKay, 2007).A escala regional, hay una mayor diversidad, aunqueen los países de América Latina, donde los nivelesde desigualdad se encuentran entre los más altosdel mundo, la desigualdad ha estado disminuyendodesde principios de la década del 2000, debido a unacombinación de cambio económico estructural yde gasto social redistributivo (Lustig, 2009; Cornia,2012). En Perú, un país de la región con muchadesigualdad, la mayoría de los estudios coincidenen que la desigualdad ha disminuido ligeramentedurante los últimos diez años, aunque algunostrabajos sugieren que podría haber aumentadodurante breves periodos en ese tiempo y entreciertos grupos sociales. La investigación también52 Palma (2011) argumenta que las diferencias en la distribución dentro de los países se deben principalmente a las alianzas políticas forjadas entrela clase media y, o bien los más ricos (10%) o la clase inferior (40%).53 En particular, la desigualdad entre los países y en la población mundial parece ir en aumento o no, en los últimos años, dependiendo en ciertamedida de si se calculan utilizando las tasas de crecimiento nacionales basadas en el PIB, o en los ingresos medios obtenidos a partir de lasencuestas de hogares, disminuidos por la inflación nacional.54 Anand y Segal (2008) llegan a esta conclusión basándose en un metaanálisis de los análisis disponibles sobre este tema. Afirman: «los cambiosmedidos no parecen ser estadísticamente significativos basándonos en los errores estándares estimados en algunos de los estudios» y por lo tanto«no pueden decir si la desigualdad mundial ha aumentado o disminuido en el pasado reciente, basándose en los resultados existentes» (p. 58).72INFORME EUROPEO SOBRE EL DESARROLLO 2013

SOBREELINFORME EUROPEODESARROLLOsugiere que hay grandes diferencias de una parte delpaís a la otra, con las provincias costeras urbanasgeneralmente superando a las provincias de las zonasmontañosas (estudio de casos de Perú).Está claro que existe un potencial considerablede redistribución para mejorar el bienestar de lossectores desfavorecidos, tanto a escala mundial comodentro de cada país en particular. En consonanciacon el énfasis general del presente informe en lapromoción del desarrollo incluyente, los esfuerzospara hacer realidad este potencial deberían ser unelemento clave de un marco post-2015. Un trabajoreciente ha señalado también las formas en quedeterminadas políticas simultáneas pueden lograruna mayor equidad y sostenibilidad (PNUD, 2010).Pero las consideraciones de la economía políticadestacan que lo que es deseable como normativa debecuadrarse con lo que es factible.5.2.6 Resumen: los cambios en la pobrezade ingresos y en su distribuciónEsta sección ha revisado las tendencias en la pobrezade ingresos y otros factores que condicionan laexperiencia de la pobreza. En primer lugar, ha puestode manifiesto que la pobreza extrema de ingresosse ha reducido notablemente y que ha cambiadosu distribución regional. Las estimaciones actualesindican que 1300 millones de personas seguiránsiendo extremadamente pobres en 2015, lo quesugiere que cualquier sucesor de los ODM tendría queseguir centrándose en la erradicación de la pobreza eidentificar qué tipos de acción internacional puedencontribuir mejor a lograr este objetivo.En segundo lugar, aunque los umbrales de lapobreza internacionales proporcionan la mejorlente disponible para ver los niveles de pobreza entrepaíses y las tendencias a lo largo del tiempo, adolecende problemas metodológicos. Además, se excluyena aquellos que viven en la pobreza extrema segúnlos umbrales de pobreza nacionales que están porencima de 1,25 USD PPA al día. En muchas partesdel mundo, quizás se tenga que prescindir de lasimplicidad de los umbrales de la pobreza universalespara registrar y obtener mejoras más significativas.Las posibles soluciones pueden requerir unaarticulación más clara de los umbrales de la pobrezanacionales e internacionales.En tercer lugar, los estudios longitudinalesrevelan que muchas personas entran y salen de lapobreza y que los intentos de medir a «los pobres»sólo proporcionan una «instantánea» estática eincompleta. Por lo tanto, cualquier futuro marcoglobal de desarrollo debería centrarse también en lavulnerabilidad con el fin de captar no sólo a quienessean pobres en un momento dado, sino tambiéna quienes están justo por encima del umbral de lapobreza y en riesgo de caer por debajo (Shepherd2011).En cuarto lugar, al centrarse los estudios en lapobreza relativa aparece un número crecientede personas en riesgo de «exclusión social»; lasconsideraciones relativas se vuelven más importantesconforme va disminuyendo la pobreza extrema,y pueden ser importantes en cualquier acuerdointernacional para hacer frente a la privación, ya seadirectamente o a través de un enfoque más amplioen la desigualdad.Por último, los patrones de desigualdadprevalecientes y las tendencias recientes sugierenposibilidades considerables de redistribución paramejorar la situación de los más pobres, si se puedensuperar las consideraciones políticas y apuntan alpapel de la migración como un medio potencialmenteimportante para lograrlo. Por lo tanto, tratar ladesigualdad debería ser una prioridad clave para unmarco post-2015.5.3 Una interpretación cambiantede la pobreza y el bienestarEste capítulo se ha centrado hasta ahora en losingresos como indicadores de la pobreza. El ingresoes un indicador importante del bienestar, pero esmuy reduccionista e imperfecto, sobre todo porqueconfunde los fines del desarrollo con los medios paralograrlo y supone la existencia de mercados de bienesy servicios. En la práctica, los bajos ingresos nosuelen corresponder con otros marcadores objetivosy subjetivos de la privación. Por estas y otras razones,la interpretación de la pobreza ha evolucionado de suconcepción como un estado definido por los bajosingresos o el consumo a una concepción que incluyeprivaciones en múltiples aspectos del bienestar.Los ODM ya reflejan la interpretaciónmultidimensional de la pobreza al centrarse enlos ingresos, la salud, la nutrición, la educación,la igualdad de género y el medio ambiente. NoLas estimacionesindican que1300 millonesde personasseguirán siendoextremadamentepobres en 2015.Cualquier sucesorde los ODMtendría que seguircentrándose enla erradicación dela pobreza.POST-2015: ACCIÓN MUNDIAL PARA UN FUTURO INCLUYENTE Y SOSTENIBLE73

CAPÍTULO CINCOLos ODM yareflejan lainterpretaciónmultidimensionalde la pobreza alcentrarse en losingresos, la salud,la nutrición, laeducación, laigualdad degénero y el medioambiente.obstante, en los años transcurridos desde suadopción, se ha profundizado en la interpretaciónde la multidimensionalidad y de cómo se traduceen la práctica. En primer lugar, ha habido un debateconsiderable sobre la necesidad de incluir nuevasdimensiones para obtener una imagen más completadel bienestar y sobre cómo medir estas dimensiones.En segundo lugar, un nuevo énfasis en la privaciónexperimentada por los pobres proporciona unaforma de priorizar las múltiples dimensiones queson importantes para el bienestar y arroja luz sobreaspectos tales como la importancia de las relacionesy de ser tratado con dignidad. En tercer lugar, se hanproducido avances en la medición para centrarse enla «distribución conjunta» de la privación (dadoque la gente a menudo se enfrenta a múltiplesdimensiones al mismo tiempo), y para comprenderla distribución de los recursos dentro del hogar.Por último, la investigación ha arrojado nueva luzsobre las desigualdades en múltiples dimensiones ysus correlatos. Estos cuatro factores nuevos tienenimplicaciones para la forma y el contenido decualquier nuevo acuerdo post-2015.5.3.1 Un énfasis cada vez mayoren múltiples dimensionesLa crítica fundamental de Amartya Sen de lasmedidas basadas en el bienestar (Sen, 1992, 1999,2009) proponía que el desarrollo debía centrarse enlas capacidades –en lo que la gente pudiera hacer oser, en lugar de en lo que tuvieran; en los fines deldesarrollo en lugar de en los medios; y tomar encuenta las diferentes capacidades de las personaspara convertir los recursos en resultados. Esta idearespalda el enfoque de desarrollo humano encarnadoen el Informe sobre el Desarrollo Humano (HDR)anual, publicado por primera vez en 1990. Esta visiónmás amplia sugiere que, además de los ingresos, esimportante tener en cuenta otros resultados quetengan un valor tanto intrínseco como instrumental.Las investigaciones realizadas durante los últimosdiez años ha tratado de avanzar en este conceptomultidimensional, centrándose en lo que constituyeel bienestar –entre las iniciativas notables estánMidiendo el Progreso de las Sociedades de laOCDE (2008), la Comisión Stiglitz-Fitoussi-Sensobre la medición del rendimiento económico y elprogreso social (2009), que buscó identificar loslímites del PIB como indicador del rendimientoeconómico y recomendar medidas alternativas queproporcionaran una visión más amplia del bienestarhumano. La Comisión recomendó incluir estándaresde vida materiales y siete otras dimensiones: la salud,la educación, las actividades personales, incluyendoel trabajo, la participación política y la gobernanza, ylas conexiones y las relaciones sociales. De este modo,se hizo eco de un consenso más amplio en cuantoa las dimensiones del bienestar que las personas entodos los países identifican de forma consistente(Alkire 2002, 2007; Chambers, 2004) 55 . Además,recomendaba que cualquier intento de medir lacalidad de vida se basara tanto en criterios objetivoscomo en percepciones subjetivas.Un último punto clave es que este énfasis en losaspectos sociales de la pobreza también destaca lainteracción bidireccional con la sostenibilidad: lospobres tienen más probabilidades de experimentarlos efectos del cambio climático y de la degradaciónmedioambiental en su situación y en sus medios desubsistencia, mientras que estos procesos, a su vez,profundizan la pobreza y aumentan su vulnerabilidad(IED 2012). El énfasis de este informe en el desarrolloincluyente y sostenible destaca que la erradicación dela pobreza existente debe lograrse salvaguardando almismo tiempo las oportunidades de las generacionesfuturas.5.3.2 La incorporación de las experienciasde los pobres de la privaciónAl estudiar las medidas de ingresos, la necesidadmaterial y la privación de capacidades, RobertChambers argumenta que pertenecen a tres«agrupaciones» de pensamiento cada vez másamplias sobre «lo que es la pobreza», pero quesufren una limitación similar al estar basadas enlas percepciones externas de lo que le importa a lagente. Como tales, no tienen en cuenta «las diversasrealidades que parten de la base de quienes no tienenpoder» (Chambers, 2004: 4), y lo que ellos valoran.Chambers sostiene que los ODM siguen una lógica55 Por ejemplo, Alkire y Sumner (2013) sugieren que un índice de pobreza multidimensional (MPI) mundial podría complementar la medida dela pobreza de ingresos de 1,25 USD al día en un marco post-2015, que también podría emplearse para controlar el crecimiento incluyente y/oresaltar la relación entre la pobreza y la sostenibilidad.74INFORME EUROPEO SOBRE EL DESARROLLO 2013

SOBREELINFORME EUROPEODESARROLLOanálogamente abstracta y reduccionista porque«estrechan y estandarizan la visión, dejan de ladomuchas cosas importantes, y no dejan margen paralas múltiples maneras en que se puede permitir quelas personas consigan disfrutar de una vida mejor».Estudios participativos, en particular el proyectodel Banco Mundial, Voces de los pobres (Narayan etal., 2000), arrojan luz sobre las «muchas pobrezas yprivaciones» que las personas pueden experimentar,incluyendo las necesidades materiales, pero yendomás allá, para incluir aspectos tales como la escasezde tiempo, las malas condiciones de trabajo, lasmalas relaciones de género, la inseguridad y la faltade poder (Chambers, 2004).Tales estudios participativos han conseguidoalgo de empuje en la «agenda del bienestar». Porejemplo, se ha argumentado que el desarrollo podríaintegrar las experiencias subjetivas y relacionales delbienestar, junto con los estándares de vida materiales,por lo que deberían centrarse en el bienestar comoun concepto más integral y capaz de empoderar envez de centrarse en aliviar la pobreza (McGregor ySumner, 2009).Existen dudas sobre cómo interpretar lainformación subjetiva –se ha argumentado quelos pobres se pueden haber «acostumbrado» alas privaciones, (por ejemplo, Sen, 1979), lo quehace difícil la comparación de las percepciones.Sin embargo, estos datos dan pistas importantessobre lo que la gente valora. Aspectos tales comoser tratados con dignidad y la importancia de lasrelaciones, la confianza y la cohesión social tiendena pasar a primer plano. También arroja luz sobrehasta qué punto le importan a las personas lasdiferentes dimensiones del bienestar, aunque éstastienden a variar considerablemente dentro de y entrelos países y las culturas. La mayor comprensión delas experiencias de los pobres debería contribuira conformar las medidas que la comunidadinternacional y los Gobiernos nacionales adoptenpara conseguir el cambio, para que las políticasrespondan adecuadamente a las preocupaciones y alas frustraciones de los grupos desfavorecidos.5.3.3 La medición avanza...pero no lo suficienteLa naturaleza multidimensional del bienestar estáen gran medida reflejada en la familia de índicesHDR, que combinan medidas de los estándaresde vida, la salud y la educación. El HDR de 1990propuso por primera vez el Índice de DesarrolloHumano (IDH), y en 1996, el Índice de PobrezaHumana (IPH). Con el tiempo, el IPH ha suscitadolas grandes discrepancias que a menudo han existidoentre la pobreza de ingresos y esta medida másamplia a escala del país, pero también ha reveladouna reducción neta de la pobreza de ingresos en 40de los 44 países entre 1990 y 2004 (Fukuda Parr,2004). El HDR de 2010 adoptó el Índice de PobrezaMultidimensional (MPI), entre otros.Mientras que los compuestos anteriores agregabandatos de cada país a escala nacional, el MPI tambiéncontempla las privaciones graves que tienen laspersonas al mismo tiempo 56 . En otras palabras, nosólo tiene en cuenta las privaciones en las tres áreas,sino también su «distribución conjunta» (que puedeser interpretada como una medida de la intensidadde la pobreza del hogar). La implicación es que espeor tener privaciones en múltiples dimensiones(o indicadores) que en una sola dimensión. Por lotanto, el MPI combina tanto la incidencia comola gravedad de la pobreza multidimensional enuna única medida y permite que los responsablespolíticos se centren en esos hogares.Los resultados de MPI corroboran y profundizanlos resultados de los estudios sobre la pobreza deingresos (por ejemplo, Alkire y Santos, 2010).Según los últimos datos de MPI, alrededor de 1600millones de personas, que representan el 31% de laspersonas que viven en países en desarrollo, estánviviendo en la pobreza extrema –muy por encimade los 1300 millones identificados por la medidade los 1,25 USD al día. Si bien los niveles de MPIestán débilmente correlacionados con la pobrezade ingresos, también hay una amplia variación enalgunos países. Del mismo modo, el MPI identificauna amplia asociación entre la incidencia y laintensidad de la pobreza, pero también señala aSe haargumentadoque el desarrollopodría centrarseen el bienestarcomo un conceptomás integral ycapaz deempoderar en vezde centrarse enaliviar la pobreza.56 Véanse Alkire y Foster (2011), y para una crítica (Ravallion, 2011). Ravallion argumenta que las medidas compuestas están llenas de problemastécnicos, como la necesidad de imponer límites en los indicadores sin una justificación metodológica clara y de «pesar» o valorar dimensionescomparándolas entre sí.POST-2015: ACCIÓN MUNDIAL PARA UN FUTURO INCLUYENTE Y SOSTENIBLE75

CAPÍTULO CINCOHace faltamejorar lamedición,pero tambiénhacerlo con mássensibilidad eincorporar losaspectos de lapobreza queno se puedenmedir.países en los que uno de los aspectos es muchomás pronunciado que el otro. Las medidas de MPItambién señalan la concentración de la pobreza enlos PRM y en determinados países, como la India,donde hay muchos más pobres que en el ASS, aunquela intensidad de la pobreza multidimensional sea demedia mayor en el ASS. Los datos de tendencia dediez países con observaciones durante al menos dosaños en la década del 2000 muestran una reducciónen todos ellos (Alkire et al., 2011).Los esfuerzos por aplicar un amplio enfoquemultidimensional tienden a verse limitados por lafalta de datos. Hay signos de que este enfoque estáempezando a influir en las estadísticas oficiales,aunque de manera lenta y vacilante. Un buenejemplo es la sostenibilidad, donde la contabilidaddel capital natural –que pretende asignar un valor alos recursos naturales utilizados en la producción–avanzó con la reciente adopción de procedimientosde contabilidad por la Comisión Estadística de laONU, pese a las críticas de la «mercantilización» delos recursos comunes.También se han producido avances en otras áreas,aunque la mayor brecha atañe a la dinámica dentrodel hogar. Se ha prestado una atención considerablea las desigualdades en la infancia, pero menos aperiodos posteriores de la vida. Se han observado unpoco las diferencias de género, pero las encuestas dehogares a menudo se centran en el presunto cabeza defamilia, que generalmente se asume que es cualquierhombre que esté presente. Hay que seguir tratandolas desigualdades dentro del hogar a través de lasdimensiones de bienestar; las encuestas que buscanincluir a varios miembros del mismo hogar revelanque eso es posible y que proporciona informaciónútil para las políticas.Al mismo tiempo, es importante ser realistasobre lo que se puede y lo que no se puede medir yreconocer las limitaciones de las cifras de la pobreza.Hace falta mejorar la medición, pero tambiénhacerlo con más sensibilidad e incorporar losaspectos de la pobreza que no se pueden medir. En loque respecta a la medición, las estadísticas oficialessobre los aspectos no monetarios de bienestar sonescasas –en particular, para aspectos complejostales como la calidad de la salud y la educación,la representación y la gobernanza. Las medidassubjetivas pueden proporcionar información útil,pero hay que refinarlas y que prestar más atencióna su interpretación. Más allá de estas cuestionestécnicas (que a menudo se asocian con restriccionespolíticas y/o actitudinales), recientes programas deinvestigación revelan que las estadísticas no puedencaptar muchos aspectos que son importantes parala gente. Naila Kabeer comentó una vez que lasperspectivas estadísticas sobre la toma de decisionesofrecen «ventanas sencillas para ver realidadescomplejas», y esto se aplica de manera más ampliaa los esfuerzos de medición, particularmente envista de la gran cantidad de evidencia sobre la«multiplicidad de significados» que tienen para lagente su experiencia de la privación (Chambers,2004). Tales aspectos aún están separados deldiscurso actual sobre la pobreza y del debate sobre losODM, que por lo tanto se queda «a la zaga de nuestrainterpretación de las realidades sobre el terreno demanera significativa»; por ejemplo, al subestimar«la impotencia, el estigma, la discriminación y elaislamiento...», así como las interconexiones entrelas privaciones y las políticas (Poverty AnalysisDiscussion Group, 2012: 3).Un conjunto de objetivos de desarrollo mundialeses forzosamente reduccionista, y es probable quecualquier sucesor de los ODM cuente con variasmetas cuantificables. De ahí que la mejora de lagama y de la disponibilidad de los datos sea algomuy importante. Sin embargo, los objetivos quesean menos cuantificables, inevitablemente se vana encontrar en una situación de desventaja, por loque la incorporación de un mayor reconocimientodel contexto más amplio en un marco post-2015 esesencial para influir en la forma en que los objetivosse traduzcan en la práctica y en cómo se interpretael avance.5.3.4 Mirar a la desigualdad a travésde una lente multidimensional yenfocada en los gruposAlgunas investigaciones actuales se centran enla desigualdad en múltiples dimensiones y entrelos grupos sociales. Hasta la fecha, existe muypoca literatura que describa la evolución de lasdesigualdades en las dimensiones diferentes a losingresos, aunque parece claro que no hay muchacorrelación entre las dimensiones (Samman, Raniset al., 2011). El índice de desarrollo humano ajustadopor la desigualdad (IHDI) del HDR representa unprimer esfuerzo por calcular la desigualdad en losingresos, la salud y la educación para una ampliamuestra de países. Entre 1990 y 2011, el análisis76INFORME EUROPEO SOBRE EL DESARROLLO 2013

SOBREELINFORME EUROPEODESARROLLOde 66 países reveló que el empeoramiento de ladesigualdad de los ingresos en el ámbito nacionalsocavaba grandes mejoras en las desigualdades enla salud y la educación (PNUD, 2011). En AméricaLatina, hubo una disminución de la desigualdad enla salud y la educación registradas en la década delos ochenta y los noventa (Sahn y Younger, 2006),y en África, una caída en la desigualdad educativa,pero pocos cambios en la salud (Sahn y Younger,2007).Una línea independiente de investigación se hacentrado en la desigualdad entre los grupos sociales,las denominadas «desigualdades horizontales»,que son importantes –sobre todo en su relacióncon los conflictos (Stewart, 2009)– pero másdifíciles de determinar en un nivel agregado.Si bien existen algunos marcadores comunesde las desventajas (por ej., la edad, la casta, ladiscapacidad, el origen étnico, la lengua, la religióny el sexo), los grupos específicos que se encuentranen desventaja y la naturaleza de su desventaja varíansignificativamente entre y dentro de los países. Seha analizado ampliamente la desigualdad de géneroutilizando datos transnacionales. Un estudiosostiene que la desigualdad de género está bajando«en casi todos los ámbitos importantes» y «en lasdiversas tradiciones religiosas y culturales» (Doriusy Firebaugh, 2010). El Índice de Desigualdad deGénero (GII) del HDR, adoptado en 2010, tambiénrevela el descenso de la desigualdad –a pesar de quelas diferencias de género sigan siendo pronunciadas,especialmente en Asia Meridional y en el ASS(PNUD, 2011). Esta persistencia de las disparidadesbasadas en grupos parece estar más extendida.Un análisis de «desigualdades que se cruzan» aescala regional con respecto a los ODM reveló unareducción de las disparidades en algunos grupos yprivaciones, y la persistencia o la ampliación de losdemás. Además, consideró que «en casi todas lassociedades y en casi todas las regiones del mundo,ciertos grupos de personas se enfrentan a la exclusiónsocial sistemática, como resultado de las múltiplesdesigualdades que restringen las oportunidades desu vida» (Kabeer, 2010: 1). Estos factores, junto conel énfasis de los ODM en los avances en promedios,han suscitado las peticiones de que se considereexplícitamente la desigualdad dentro de un marcopost-2015 (Melamed, 2012), y sugieren la necesidadde medir y de controlar el avance entre quienesestán en desventaja a lo largo de estas diferentesdimensiones.5.3.5 Resumen: la pobreza yla desigualdad multidimensionalTomar en serio la multidimensionalidad significarevisar y potencialmente ampliar el espectro de lasdimensiones abordadas por cualquier sucesor de losODM para que trate adecuadamente las problemáticasde inclusión y de sostenibilidad, aunque esto planteedesafíos de medición.Las experiencias de los pobres de la pobrezapueden ayudar a priorizar las dimensiones y adestacar aspectos tales como la importancia de lasrelaciones y de ser tratado con dignidad, principiosque deberían guiar la cooperación futura. El valorpolítico y la importancia de estos conocimientos nodeben subestimarse, ya que indican cómo los sectoresmás pobres y desfavorecidos de la sociedad juzganlos resultados de las políticas de desarrollo en últimainstancia y si las perciben como suficientementeincluyentes.Aunque se hayan producido avances en la medición–no menos importante, los nuevos esfuerzos pormedir las denominadas «dimensiones ausentes»y las medidas compuestas que se centran en laspersonas y los hogares con múltiples privaciones almismo tiempo– siguen quedando déficits evidentes.La sostenibilidad es una preocupación importante.También es necesario trabajar más en las dinámicasdentro del hogar, donde hay evidencia que sugiere quela medida de la pobreza tomando como base cifras percápita del hogar produce en gran medida resultadossesgados.Por último, para comprender lo que funciona eny perfecciona la eficacia de las políticas, hay queprestar más atención a las características de laspersonas que hayan salido de la pobreza con éxito–y el papel de los factores tales como la edad, ladiscapacidad, la etnicidad y el género, que sugieren undeterminado enfoque para la medición y los esfuerzosde seguimiento.5.4 Las implicaciones para unacuerdo post-2015Este capítulo ha descrito los cambios en el panoramamundial de la pobreza desde 1990, año de referenciade los ODM. Se ha centrado en dos tipos principalesde cambio: (a) en la evolución de la pobreza deingresos y su distribución, y (b) en la interpretaciónTomar enserio la multidimensionalidadsignifica revisary potencialmenteampliar elespectro de lasdimensionesabordadas porcualquier sucesorde los ODM paraque trateadecuadamentelas problemáticasde inclusión y desostenibilidad,aunque estoplantee desafíosde medición.POST-2015: ACCIÓN MUNDIAL PARA UN FUTURO INCLUYENTE Y SOSTENIBLE77

CAPÍTULO CINCOHay que prestarmás atención alas característicasde las personasque hayan salidode la pobreza conéxito –y el papelde los factorestales como la edad,la discapacidad,la etnicidad yel género, quesugieren undeterminadoenfoque para lamedición y losesfuerzos deseguimiento.de la pobreza y de cómo podría tratarse. Ambostipos de cambio tienen implicaciones para cualquieracuerdo sobre el desarrollo mundial post-2015.• La acción internacional: La pobreza extrema seha reducido drásticamente en todo el mundo,pero más de 1200 millones de personas siguensiendo pobres. Su distribución está cambiandocon el tiempo, pero determinados grupos de paísesy regiones (Asia, el ASS, PMA y Estados frágiles)presentan problemas específicos. Cualquiersucesor de los ODM debería abordar cómo laacción colectiva mundial puede contribuirmejor a erradicar la pobreza en el contexto de lasdinámicas prevalecientes en el país y en la región.• Los múltiples umbrales de la pobreza: Unaestrategia centrada en la erradicación de lapobreza debería incorporar los umbrales dela pobreza nacionales e internacionales. Ladefinición de la pobreza extrema de 1,25 USD ponede relieve la privación, pero metodológicamenteplantea problemas y tiene una relevancia limitadapara todos los países, excepto para los más pobres.Conforme los países se van desarrollando, lapobreza relativa se está convirtiendo en unapreocupación cada vez más importante. Por lotanto, la desigualdad debería ser un centro deinterés explícito de un marco post-2015.• Las metas y los mecanismos: Pese a la magnitudde las desigualdades, las investigaciones sugierenque, con la voluntad política necesaria, pequeñascantidades de redistribución podrían eliminarla pobreza extrema. Los mecanismos parala reducción de la desigualdad de ingresosincluyen las medidas fiscales, las políticas deprotección social y la migración interna a nivelnacional y, para las desigualdades entre los países,la migración de los países pobres a los países másricos.• La multidimensionalidad: Los avances en esteenfoque han traído nuevas ideas importantessobre la pobreza y su resolución, que proporcionanuna sólida justificación para revisar y ampliarpotencialmente el abanico de las dimensionesincluidas en un acuerdo post-2015.• La vulnerabilidad: Un futuro marco global dedesarrollo debe tener en cuenta la vulnerabilidadcon el fin de apreciar plenamente las dinámicasde la pobreza, en lugar de las medidas estáticasbasadas en un punto fijo en el tiempo. Esto incluiríacentrarse no sólo en quienes son actualmentepobres por sus ingresos, sino también en aquellosque son susceptibles de caer por debajo del umbralde pobreza relevante. La vulnerabilidad estátambién entrelazada con la sostenibilidad.• La sostenibilidad: En un marco post-2015debería incluirse un compromiso explícito conla sostenibilidad, puesto que las personas queviven en la pobreza están más expuestas a losefectos del cambio climático y de la degradaciónmedioambiental, que a su vez agravan la pobreza.Las futuras intervenciones tienen que centrarseen la erradicación de la pobreza ya existentesalvaguardando al mismo tiempo los interesesde las generaciones futuras.• La medición: Es necesario desarrollar aún másla capacidad de medir las dimensiones «ausentes»del bienestar, las formas en que los individuos y loshogares experimentan múltiples privaciones y lasdinámicas dentro del hogar.• Las desigualdades basadas en grupos deberíanser un centro de interés para la medición y elseguimiento de los esfuerzos, ya que quienesexperimentan la pobreza persistente compartenalgunas características comunes –por ej., laedad, la casta, la etnicidad, la discapacidad y elgénero– que a menudo se superponen en formasque hacen que sea más difícil salir de la pobreza.• Las experiencias de los pobres de la privaciónpueden ayudar a priorizar las dimensiones delbienestar y a destacar aspectos tales como laimportancia de las relaciones y de ser tratadocon dignidad. Estos principios deberían guiarla cooperación futura. El conocimiento de laspercepciones de la pobreza que tienen los grupossociales y las personas también puede dar pistassobre cómo van a juzgar el éxito o el fracaso de laspolíticas de desarrollo.78INFORME EUROPEO SOBRE EL DESARROLLO 2013

SOBREELINFORME EUROPEODESARROLLOCualquier sucesor de los ODM tendrá limitaciones.Hay que ser realista sobre lo que se puede y lo que nose puede medir y reconocer las limitaciones de lascifras de la pobreza. El proceso de elaboración de unnuevo marco global de desarrollo debería intentarestablecer una nueva visión internacional conrespecto a lo que son objetivos deseables, y esbozaralgunos parámetros generales para lograr y medirel avance.Conforme lospaíses se vandesarrollando,la pobrezarelativa se estáconvirtiendo enuna preocupacióncada vez másimportante.Por lo tanto,la desigualdaddebería ser uncentro de interésexplícito de unmarco post-2015.Cualquiersucesor de losODM tendrálimitaciones. Hayque ser realistasobre lo que sepuede y lo que nose puede mediry reconocer laslimitaciones delas cifras dela pobreza.POST-2015: ACCIÓN MUNDIAL PARA UN FUTURO INCLUYENTE Y SOSTENIBLE79