Seis consejos para el swing HOYO 19 Putting Green Actividades ...

1
Bola mal colocada en el bunker de calle. La primera variable es que
se nos ha quedado de tal manera que no tenemos una entrada limpia
con el palo. La bola se nos ha quedado en una zona rastillada por
una máquina que suele alisar los bunkers de calle. Pero algunos bunkers, los
que están cerca de green, por ejemplo, se rastrillan a mano. Los de calle, no.
La bola la tenemos entonces justo en un surco. La estrategia que se requiere,
por tanto, es buscar un ángulo de ataque más directo, más vertical, y esto lo
conseguimos con un efecto de cortar la bola en el impacto. Esto conlleva que
la distancia que haremos sea menor, sobre todo porque cortando la bola la
velocidad del palo disminuye, y hay que optar, por tanto, por jugar un palo con
la cara mas abierta. La segunda variable es que la bola se nos queda cerca del
talud. Si hemos de recurrir a un palo igual a la situación anterior, igual sucede
que la bola no sale lo suficientemente alta y como queremos.
2
Bola bien colocada en la arena. No tememos suciedad detrás de la bola.
Aquí podemos buscar un swing con un ángulo de ataque más normal,
más acostumbrado al que solemos pegar con la bola de calle. Buscamos
un ángulo más neutro contra el suelo, no tan directo. Aquí me gustaría explicar un
pequeño truco y es coger el palo un poco más corto y realizar un swing normal. Sin
intentar estirarnos para no tocar el suelo, que es lo que a veces hacen muchos amateurs
y no consiguen completar un swing fluido a través de la bola. Siendo el bunker
de calle uno de los golpes mas complicados en el golf, el nivel de exigencia es alto,
pero el error mas común es pensar que se tienen que hacer cosas diferentes al swing
normal. La dificultad radica, repito, en valorar el golpe antes de elegir el palo. Saber
cuál es el golpe con más posibilidades de éxito.
Si analizamos bien las características de cómo está la bola, conseguiremos más distancia
y un mejor resultado, siempre que elijamos un palo para no llegar al green, en
lugar de jugar un palo un poco apretado. En este caso pegaríamos detrás de la bola,
o en el talud, y eso acabaría por descentrarnos. Y el resultado: la bola no saldrá del
bunker. Si ya nos cuesta pegar bien los hierros medios con la bola de calle, no debemos
forzar el golpe cuando la situación sea algo mas complicada.
Como resumen:
Si queda mal colocada, el ángulo de ataque es más
directo y vertical y jugaremos un palo con la cara mas
abierta. Si tenemos la bola bien colocada, buscaremos
un ángulo más neutro contra el suelo, no tan directo.
27 27