■ ■ ■ En primera persona Conoce la historia de Paco Arias Paco Arias comparte su día a día con nosotros desde hace más de un año. Ahora se encuentra en un momento vital muy especial que le ha devuelto la sonrisa y las ganas de vivir. Hoy quiere contarnos su historia, marcada por varios momentos complicados que le han llevado a tomar duras decisiones. Todo empezó en el 2012, teniendo 42 años. Hasta la fecha, siempre había tenido trabajo estable, mi vivienda familiar en Alicante, mis amigos, en fin una vida normal. Ruptura familiar traumática Todo cambió cuando fallece mi padre. A partir de ese momento, vida da un giro de 360°. Yo era hijo único adoptivo y tras la muerte de mi padre, empiezo a vivir un verdadero calvario con su herencia, que pone en lucha a parte de la familia. Consiguieron apartarme. Pérdida de trabajo Es entonces cuando empiezan dos años que no se lo desearía ni a mis peores enemigos. Mi madre cae enferma con trombosis cerebral, tengo que empezar a cuidad de ella y ningún familiar se ofrece a ayudarme. Por ello, tuve que reducir mi jornada laboral, hasta el punto de que la empresa decide prescindir de mí, ya que no puedo continuar trabajando con tan pocas horas. Es en este momento cuando me toca tomar una importante decisión, o vivir en la calle o empezar a borrar este duro pasado. Pérdida de vivienda La enfermedad de mi madre avanza y es ingresada en el hospital. Mis familiares comienzan a realizar varias gestiones a mis espaldas y consiguen apartarme. Una guerra que ya dura 2 años y me que cuesta un infarto. Me dejan fuera de la vivienda familiar, me siento un extraño, como si ellos nunca hubiesen sido mi familia. Es en este momento cuando me toca tomar una importante decisión, o vivir en la calle o empezar a borrar este duro pasado. Tomé el primer autobús con destino a Madrid desde Alicante. Al principio Madrid me pareció una ciudad inmensa, todo era nuevo, no conocía a nadie, llegaba hundido, machacado y con la autoestima por los suelos. Destrozado, entro en el Centro de Acogida Juan Luis Vives y aquí, mi trabajador social Sergio, me habla de RAIS Fundación y de su programa de empleo. A partir de aquí empiezo un camino largo, pero marcado por objetivos, donde me recupero, mi cara vuelve a brillar y la gente ya me ve sonreír, recupero mi autoestima y mi orgullo. Soy más fuerte, he aprendido a trabajar en equipo con los profesionales de RAIS (nunca me cansaré decirlo, al día de hoy amigos/as míos). Me han ayudado a conseguir un trabajo con contrato indefinido a tiempo parcial que puedo complementarlo con otro contrato de interinidad. No tengo uno, sino dos trabajos. Estoy feliz. Madrid me pareció una ciudad inmensa, todo era nuevo, no conocía a nadie, llegaba hundido, machacado y con la autoestima por los suelos. Además, durante todo este tiempo, he aprendido los siguientes valores: compromiso, compañerismo, ambición, iniciativa, autonomía, afán de superación, orgullo de ser como soy. He recuperado la vida que me quisieron robar ■ 8 desdelacalle enmovimiento ● Núm. 8
En primera persona ■ ■ ■ Núm. 8 ● desdelacalle enmovimiento 9