Edición No.11 Junio 2016

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¿Por qué fue la fotografía la
que te inspira para exponer
al mundo lo que tus ojos
ven?
El vivir con una Artista Plástico
me ha dado la oportunidad
de conocer distintas
formas de expresarme, ella
me ha enseñado una vida llena
de color, de luces y sombras,
de óleos y paz; El don
de dibujar y pintar lo heredé
de mi madre, pero a pesar
de que me divierto y paso
un momento agradabale con
lapices y pinturas, nada me
llena y me saca fuera de este
mundo como la fotografia;
ese momento que compartimos
mi camara y yo, es algo
indescriptible, siento que
estamos solas en el mundo
y que nada nos peturba, ni
el dolor, ni el cansancio, ni
el hambre pueden cuando
estamos juntas.
¿Tienes algo que te inspire
en especial para tomar una
fotografía?
Todo. Para mi cualquier
momento, agradable o no,
presentan detalles especiales
que se deben capturar a
través del lente;
ya sea un atardecer de fuego,
una bandada de aves
migratorias, de un día de
hermosos azules o de una
simple pero simpática mirada
de un felino (al que soy
amante), así como también
la basura que se encuentra
en la playa, ese tipo de fotografia
es la que sirve para difundir
y criticar situaciones.
¿Qué crees que se puede
transmitir con una imagen?
De todo, pero en especial
sentimientos y sensaciones;
sin tener que estar presente
una persona o un animal
que a través de su mirada se
puede ver tristeza, felicidad o
juego, también las estructuras
hablan, los cielos expresan
y hasta objetos dicen lo
que les pasó.
¿Recuerdas cuál fue tu primera
fotografia?
Un viaje que realice con un
grupo de alumnas de mi colegio,
debí tener como 12 años
y en ese viaje que realice a la
capital (Caracas Venezuela)
fue allí que capturé mis primeras
fotografias.
¿En tu entorno familiar hay
alguien que haya influido
para que decidieras ser fotógrafa?
Gracias a Dios, tengo
por parte de mi familia materna
un abanico de artistas
que han influido en mi vida,
las artes se encuentran en
casi todos, tengo artistas
plasticos, fotógrafos aficionados,
tallistas, músicos,
entre otros. En primer lugar
a mi abuelo materno Antonio
Ramón Molina, y que a pesar
que las edades nos tendieron
la trampa de la distancia,
no pude disfrutar de sus
consejos como fotógrafo
aficionado, pero heredé de
él su amor por la fotografia;
luego mi tio Saúl Molina a
quien también lo atrapo la
pasión por ella, él obtuvo el
premio en un concurso de
fotografia y su hija Iruani,
que fue la que me tomó las
fotos para esta entrevista,
también posee un gran ojo
artistico. Y por supuesto mi
madre, que me ha inculcado
el amor por las artes a quien
le agradezco todo lo que
soy.