T.P. BOLIVIA.

Después de que las tropas virreinales reprimieron los movimientos violentos de los criollas en
1809, estalló una rebelión en Chuquisaca en el Alto Perú, hoy república de Bolivia, pero que en
ese momento formaba parte del Virreinato del Río de la Plata; donde la Audiencia tomó a su
cargo el gobierno. Poco después, el 16 de julio, se extendió la rebelión, a La Paz, donde se
confió a Murillo la presidencia de la llamada Junta Tuitiva, quien además, pidió cabildo abierto,
obteniendo una renuncia del gobernador y del obispo. Fue sofocada por las autoridades
coloniales, pero resurgió de nuevo al poco tiempo debido a los movimientos secesionistas que
llevaron al triunfo de los revolucionarios en el Río de la Plata (1810) y las campañas de Bolívar.
Los virreyes intentaron convertir el Alto Perú en uno de las fortalezas de la causa realista, es
decir, de las fuerzas armadas formadas principalmente por españoles europeos y americanos
empleados para la defensa de la monarquía española, hasta que Bolívar puso fin al dominio
español.
En 1825 fue liberado por Sucre, quién convocó una asamblea constituyente que proclamó la
independencia del país, al que dio el nombre de Bolivia en honor a Bolívar.