Rasca Cielos 20200202

Domingo 2 de febrero de 2020. La Paz, Bolivia. Año 3.
05|20
Busco camisa m s talla S | M Memoria e m
o i de un n s sonido o n
i d o | D Del e l
periodista i d s t a ciudadano u an
o al ¿escritor e
s c
r t r ciudadano?
a an
Historias s t
ias de amor. m r R Rana a n a | C Calistencia a l
i t e
n c
ia
por o la integración t g a ió
n | El aparapita. pi
t a . Elogio o de la eternidad t a | Días de cine

2
www. p a g i n a s i e te. b o DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20

05|20 Domingo 2 de febrero de 2020. Año 3
DISEÑO DE PORTADA:Victoria Delgado Padilla,
estudiante de la carrera de Diseño Gráfico y Comunicación
Visual de la UCB.
La mudanza infinita
Rascacielos y la carrera de Diseño Gráfico y Comunicación
Visual de la Universidad Católica Boliviana se unen
para el diseño de las portadas de esta revista. Coordi -
nadores : Sergio Salazar y Fujiko Urdininea. Estudian -
tes en pasantía: Nathalia Beltrán Vargas, Victoria
Delgado Padilla, Ana Medinaceli Cadena, Leyla Manjón,
Kevin Valle y José Alejandro Zapata Padilla. Coordina -
dor General: Sergio Vega Camacho
E d i to ra : Cecilia Lanza Lobo.
Asistente de edición: Adriana de la Rocha. C o o rd i n a -
d o ra : Claudia Daza. Redes: Melisa Balderrama.
Diseño editorial: Edmundo Morales. D i a gra m a c i ó n :
Edmundo Morales. Fo to gra f í a : Cecilia Fernández,
Víctor Gutiérrez, Freddy Barragán y Agencias.
Publicidad revista Rascacielos: Nadia Diab Linale.
Teléfonos: (591) 2-2611709 - 75244623
D i re c to ra : Isabel Mercado Heredia. S u b d i re c to ra : Mer y
Vaca Villa. Jefe de Redacción: Alcides Flores Moncada.
Jefa de Informaciones: Liliana Carrillo Valenzuela. Jefe
de Redacción digital: Juan Carlos Véliz Morejón.
HAY UNA ESPECIE HUMANA ENVIDIABLE: los
nómadas. Quise decir los viajeros pero aquello no los
describe por completo, porque viajeros podemos ser
todos eventualmente. Los nómadas, en cambio, se mueven por
un impulso mayor, un afán, una curiosidad de alma y entraña
por conocer qué hay más allá de lo evidente en el mundo y en su
gente. Por eso lo suyo no es un viaje, es una mudanza sinfín.
Para muestra, el fotógrafo cochabambino Sergio Ribero a
quien Fadrique Iglesias retrata en las páginas centrales de este
número. Un joven, como muchos de hoy en día, que emprenden
el camino de los exploradores, esos aventureros, descubridores
de otros mundos para sí mismos y, por supuesto, para
nosotros. Qué seríamos sin ellos, sin su mirada, sin sus ojos, sin
sus cámaras fotográficas que no sólo retratan un rostro o un
paisaje sino un modo de vida. Una vida. Mil sensaciones.
Mudanza implica también movimiento, cambio. Por eso
escogimos el camino del explorador de mundos, para conmemorar
el segundo aniversario de Rascacielo s. Porque afianzamos
grandes logros en tan corto tiempo alcanzados, así como
los pasos hacia nuevos aires, nuevos contenidos, nuevas ideas,
con el periodismo narrativo en la proa y las historias de
nuestra gente, ustedes, nuestros lectores.
Gracias por el compromiso compartido, cuya experiencia
está relatada también en algunas páginas de este entrega, y
bienvenidos al tercer año de Rascacielo s.
Cecilia Lanza Lobo
Presidente del Directorio: Raúl Garáfulic L.
Vicepresidente Ejecutivo: Carlos Saravia. D.
Gerenta Comercial: Nadia Diab Linale.
Gerenta de Publicidad: Cecilia Tejerina.
Distribución nacional: Douglas Azurduy.
I m p re s i ó n : Papel Principal S.A.
Compañía Editora Luna Llena S.A.
Nº de Depósito Legal: 4-3-25-10
D i re c c i ó n : Achumani, Calle 9 N°6, La Paz. Te l é fo n o s :
Central: (591) 2-2611700; C o m e rc i a l : (591) 2-2611731
- 2611707 - 2611709.
Suscripciones: (591) 2-2611734.
We b : www.paginasiete.bo - La Paz, Bolivia
Revista Rascacielos
@ rev i sta ra s c a c i e l o s
i s s u u . c o m / rev i sta ra s c a c i e l o s
@ Rev i sta RC i e l o s
DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20
www. p a g i n a s i e te. b o
3

05|20 Domingo 2 de febrero de 2020. Año 3
6
7
8
10
12
16
18
25
28
30
IDENTIKIT / Los nadies, en cada calle,
en cada rincón
TRUEQUE /Busco camisa talla S /
Mar Buendía
AG E N DA LaEscobaEsCultural /
Hay huéspedes que nos esperan /
Claudia Daza
MÚSIC A / Memoria de un sonido /
Marcelo Gonzales
CONFESIONES DE ANIVERSARIO /
Del periodista ciudadano ¿al escritor
ciudadano? / Cecilia Lanza Lobo
HISTORIAS DE AMOR / Rana /
Vladimir Tórrez / Marco Tóxico
FOTOGR AFÍA /La mudanza infinita /
Fadrique Iglesias / Sergio Ribero
CRONIQUITA / Calistenia por la
i n te g ra c i ó n / Fran Cano / Esperanza
Calzado / Lacontra dejaén
DISEÑO Y COMUNICACIÓN
V I S UA L / Universidad Católica
Boliviana
RETR ATO / El aparapita. Elogio de la
e te r n i d a d / Cecilia Lanza Lobo /
Alejandro Azcuy Domínguez
FADRIQUE IGLESIAS es gestor cultural,
cronista y ex atleta olímpico. Interesado
en las ciudades como laboratorio de experimentación,
las redes como espacio
de colaboración y la cultura como instrumento
de desarrollo local.
SERGIO RIBERO es fotógrafo documental
independiente boliviano radicado
en Asia.
FRAN CANO es periodista en el sur de
Jaén, España. Escribe reportajes sobre su
provincia para Lacontradejaén, el medio
que ha cofundado.
MARCELO GONZALES es guitarrista,
guitarrero, cantor y compositor.
ALEJANDRO AZCUY (Cuba) es fotógrafo
autodidacta. A lo largo de su carrera ha
incursionado en casi todos los géneros
fotográficos. Su obra se ha expuesto en
múltiples muestras personales
y colectivas.
FERNANDA GUIZADA DURÁN es artista
plástica de la Academia Nacional de Bellas
Artes Hernando Siles de La Paz. Se
ha especializado en grabado y es diseñadora
gráfica en formación, artista visual
siempre...
32
34
DÍAS DE CINE / Macondo, a
contramano / Isabel Navia
VIÑETA / Pita de quiebre /
Guizada Durán
MAR BUENDÍA no nació aquí, pero es nomás
collita. Fan de la salteña sin aceituna,
las películas de terror, Cerati y
Fr i e n d s , la serie noventera. García
Márquez es su dios.
* Rascacielos abre este espacio a la buena crónica, perfil, historieta, diario de
viajes, testimonio, fotografía, fotoreportaje y otros vicios. Pueden enviar sus
aportes a: rascacielosrevista@gmail.com. Las publicaciones estarán sujetas
al criterio del comité editorial que se comunicará con la autora o autor.
ISABEL NAVIA es comunicadora, aficionada
al cine y a la fotografía. Sueña con
ser mecenas. Exploradora consuetudinaria
de variedades de vino y café.
4
www. p a g i n a s i e te. b o DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20

DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20
www. p a g i n a s i e te. b o
5

L U G A R E S Y P E R S O N A J E S
Los nadies, en cada calle, en cada rincón
¿Cómo es Buenos Aires,
Lima, Puno, Caracas,
Guayaquil; o cómo es
Iquique, Jujuy, Salta, o Valencia,
o Madrid? Alguna idea
tenemos, fácil, mirando fotos,
videos, películas, en fin. Pero si
conocemos las historias de su
gente, esa idea tendrá además
sentido. Otra cosa. Esas ciudades,
con rostros, con historias
concretas, tendrán además
carácter, identidad.
Por eso, retratar a gente
común y corriente, retratar los
rincones, las plazas, las calles de
una ciudad, siempre fue un pretexto
para reconocernos y contruir
un relato común. Si en La
Paz tenemos al campeón de
origami, al lustra con pasamontañas,
o a la guardiana de una
biblioteca, o al constructor de
una casita del árbol en los
Yungas. Y si en Cochabamba
están los dibujantes de la plaza
principal, el fotógrafo del Cristo
o una alquimista, y en Santa
Cruz está el señor del café en su
carrito bajo el árbol gigante, o
un colla migrante. He ahí el
relato que construye su identidad,
y la nuestra como país
diverso y particular. Por eso los
nadies somos todos, en cada
calle y en cada rincón. Desbordemos
los mapas por donde
habitualmente caminamos y
levantemos la mirada de la
pequeña pantalla para mirar lo
que se esconde ante nuestros
ojos. Un rostro, una calle, un
r i n có n .
E nto n ce s …click: una foto, una
historia. Bienvenidas las suyas a
rasacielosrevista @gmail .com
6
www. p a g i n a s i e te. b o DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20

TRUEQUE
Mar Buendía
Busco camisa blanca talla S
Desde El q’epi del trueque, un grupo de Facebook para intercambiar mercancías,
hasta el Trueque teatral, donde se transan saberes y lenguajes.
Capaz sea posible vivir sin dinero.
No soy de hacer ejercicio, pero sí de
leer mucho. Por eso cuando vi que
alguien buscaba una máquina de
abdominales a cambio de un Kindle, no fue
difícil hacer el intercambio. Así entré en el
mundo del trueque.
Soy parte del mal, compro muchas cosas
que no necesito en el momento o cosas que
solo usaré una vez por el simple hecho de que
puedo. Es así, el consumismo es uno de los
grandes males del siglo XXI. El trueque se
comporta entonces como una alternativa que
fomenta y promueve espacios de intercambio
de bienes, para alargar su vida útil, y servicios,
para ampliar las redes de conocimiento.
Hay comunidades enteras que han abandonado
las transacciones financieras para
vivir del trueque. Es el caso del valle del
Cauca en Colombia, que le hace frente a la
globalización de su país. Mientras tanto, en
España, a 50 kilómetros de Madrid, un grupo
de 60 personas decidieron unirse en una
comunidad denominada Valdepiélagos para
vivir de manera ecológica y libre de dinero
frente a la crisis del país. Bolivia está lejos de
esa realidad, pero no deja de tener espacios
que promueven esta práctica.
Aunque suene utópico, los trueques cada
vez cobran más fuerza en nuestro país. A un
click de distancia se encuentra El q’epi del
trueque, un grupo de Facebook con más de 12
mil miembros, sólo en su versión paceña, que
promueve el trueque de productos que
anulan por completo las transacciones financieras.
Anuncios tales como “busco camisa
blanca talla S", "ofrezco productos de limp
i ez a ”aparecen por decenas día a día en la
página. La gente, cada vez más, comprende la
necesidad de desprenderse de cosas materiales
que no utilizamos a menudo para obtener
otras cosas cuya necesidad es inmediata. En
el q’epi se encuentran artículos de limpieza,
comida, ropa, artefactos, semillas, etc., que
son ofrecidos por otros cuyo precio puede o
no ser similar: los objetos se tasan por su
valor de uso, no por su valor monetario. Los
requisitos son simples: los productos deben
estar en buen estado, limpios y listos para
tener una segunda vida útil.
En esta línea también está una corriente
en Cochabamba que busca una vida más
natural con productos cultivados en casa. Es
así que crearon el grupo de trueque de semillas
y plantas, cuyos 8 mil miembros comparten
no solo la materia prima para montar
huertos urbanos, sino también datos y consejos
sobre la producción de hortalizas, especias
y plantas decorativas.
Ahi vemos que los bienes no son lo único
que se puede exponer al trueque. Recientemente,
un grupo de actores decidió compartir
sus conocimientos y aprender de los demás
en sesiones de entrenamiento. Los seis
actores, Alejandra Quiroz, Cintia Cortez, Darío
Torres, Mariela Salaverry, Néstor Vargas y
Samadi Valcarcel compartieron seis días de
entrenamiento teatral libre y gratuito que
d e n o m i n a ro n Trueque teatral. Un espacio
basado en la generosidad y desprendimiento
de los conocimientos para intercambiar
saberes, lenguajes y otros.
Y es que el trueque no nos es tan ajeno.
De los veinte siglos que contamos en el calendario
cristiano, pasamos los siete primeros
intercambiando todo lo necesario para vivir y,
aunque ahora suene lejano, cada vez más
sentimos la necesidad de regresar a esos orígenes.
No solamente se trata de conocer
nuestro impacto en el mundo, sino también
de reconocer que quitándole valor al dinero,
le devolvemos el valor al objeto por su
función. Es así que una camisa blanca puede
ser tan valiosa como un limpiavidrios si
ambos son necesarios en el momento.
Aunque por ahora la idea de vivir en base
a trueque suene lejana, y aunque haya gente
que no logra desprenderse del valor monetario,
se hace imprescindible crear los espacios
que nos permitan retomar esta práctica para
acercarnos a una vida más consciente. Quizá
sea hora de abrir el ropero, la alacena y el
mueble con los platos de porcelana que
nunca usamos y cambiarlos por algo que sí
precisamos ahora.
FOTO PIXABAY
DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20
www. p a g i n a s i e te. b o
7

A G E N D A
LA ESCOBA esCULTURAL
Claudia Daza
Hay huéspedes que nos esperan
A
VECES PENSAMOS que las cosas nos
caen del cielo y que cuando se va al teatro
todo está ordenado por arte de magia.
No nos damos cuenta que detrás hay
todo un movimiento, un grupo de profesionales,
artistas y familias que nos
esperan. Esta semana visitemos cada
uno de los templos del arte pensando en
eso, con agradecimiento. Aquí algunos
hu é s p e d e s.
El que nos espera cada sábado es don
Eduardo Machicado en la casa de las tradicionales
Flav iadas. El sábado 8 de
fe bre ro sacará al ekeko denominado El
Ad obi to junto a sus periodiquitos de
Alasita #14. También preparará los
discos de Haendel, Beethoven, Chopin y
Wagner. Una tarde de apreciación
musical única. Son los huéspedes
mayores de Sopocachi.
También en Sopocachi, el E spacio
Simón I. Patiño nos abre las puertas de
sus aulas para el Taller Teoría literaria
V II a cargo de los poetas Mónica Velásquez
y Fernando van de Wyngard. Aquí
están invitadas todas las personas que
aman reflexionar sobre lo artístico desde
8
SÁBADO
LAS FLAVIADAS /LA PAZ /8 de febrero / de 18:30 a
20:30 / Fundación Flavio Machicado Viscarra / av. Ecuador 2448 / Ingreso grat u i to .
la filosofía y la literatura, la historia y las
tecnologías. Se dialogará especialmente
con Baudelaire, Carpentier, Cano y
Schweblin. El taller comienza este 5 de
fe b re ro . Dos artistas de lujo ahí.
Hablando de compartir conocimiento,
el guitarrista, compositor y arreglista
Ramón Rocha Scardino se va a la
ciudad de Sucre para dictar el Taller de
Arreglos y Composición. El enfoque
principal de este taller está basado en el
aprendizaje directo o intuitivo y en el
rescate del juego, del disfrute, aspectos
esenciales de nuestra conexión con la
verdadera creatividad y que están debajo
de la gruesa capa de conceptos y juicios
de la academia. O sea, diversión garantizada.
El evento tendrá lugar del 5 al 7 de
febrero en el Termitero.
Para los orureños que vivimos en
Cocha, se viene la gran fiesta en homenaje
a nuestra ciudad. Nos adelantamos en
grande con Llajtay manta y los Pe n d e k s
B and. El concierto, encuentro y bailongo
general será el 8 de febrero en el G ra n
Hotel Cochabamba. Cantaremos, bailaremos,
brincaremos como diablo, saltaremos
como chiruchiru. Lindo estará.
www. p a g i n a s i e te. b o DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20
FOTO CRISTINA MACHICADO

M I É RCO L E S
TALLER DE
TEORÍA LITERARIA VII / LA PAZ /
inicia el 5 de febrero / de 18:00 a 19:30 /
Espacio Simón I. Patiño / av. Ecuador
esq. Rosendo Gutiérrez.
LA PAZ
OTROS ANTOJOS
De vuelta a
DOMINGO
The Batles /
2 de febrero / 13:00 / en la calle / Chasquipampa,
c 52.
Nos convocan para disfrutar de las
batallas de gallos y de free style. Canto y
danza, un evento para aumentar y crear
cultura en las calles de la zona sur.
CAMIRI
Fe st i va l
VIERNES
Pa ra p et i / 7 de
febrero / 19:00 / Sucursal del cielo /
Ca m i r i
El Festival Parapeti es un evento sin
fines de lucro que convoca artistas de
todos los rubros: muralistas, pintores,
poetas, músicos, quienes a través del arte
pretenden generar conciencia sobre la
contaminación del patrimonio más
importante de la ciudad: el rio Parapeti.
M O N T E V I D EO
PARA VIAJEROS
MIÉRCOLES
A VIERNES
TALLER DE
ARREGLOS Y
CO M P O S I C I Ó N /SUCRE /del 5 al 7
de febrero / 18:30 / Termitero /
c. Grau 531.
Elección de
VIERNES
Tawaku 2020 /
7 de febrero / 19:00 / Teatro al Aire Libre
Jaime Laredo / PUC Cancha Zapata.
Una cita para festejar la danza, el
inicio del carnaval y el talento de las bailarinas
de diferentes fraternidades carnava
l e ra s .
SANTA CRUZ
Fernando Cabrera y Jorge Fandermole
en concierto /sábado 15 de febrero /
21:00 / Teatro Solis / c. Buenos Aires s/n,
11000 Montevideo.
Se unen por primera vez dos referentes
de la canción iberoamericana en un
concierto en que recrean parte de su
repertorio a dúo, unidos como buenos
obreros de la canción. Ambos han transitado
un camino de 35 años con la música.
LIMA
SÁBADO
LL AJTAYMAN-
TA Y PENDEKS BAND EN CONCIER-
TO /CO CH A B A M B A /8 de febrero /
20:00 / Hotel Cochabamba / plaza
Ubaldo Anze E-415. La Recoleta 250.
DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20
JUEVES
Bronco en
co n c i e r to /
6 de febrero de febrero / 19:00 / Stadium
Real Santa Cruz / av. San Aurelio
Una noche de clásicos con los artistas
mexicanos que prometen repasar canciones
como Adoro, Amigo Bronco, Pastillas de
amnesia y otros. Una gira que se extiende a
las ciudades de Cochabamba y La Paz.
Pedro Guerra en concierto / sábado 22
de febrero / 21:00 / Teatro Federico
García Lorca / av. Gral. Salaverry 1910,
Jesús María 15072.
Pídeme es el nombre de la nueva gira
del cantautor español. Serán conciertos
íntimos e solo 280 personas. Cantará lo
que le pidan pues ha convocado a través
de sus redes para crear el repertorio.
www. p a g i n a s i e te. b o
9

MÚSICA
Marcelo Gonzales
Me m o r i a
AL SER LA FORMA DE LA CIUDAD
DE LA PAZ principalmente vertical,
haciendo que unos lugares inevitablemente
siempre subsistan detrás de
otros, ésta y sus calles nunca van a terminar
de ser exploradas. Casi imposible
proeza será recorrer todos sus
niveles y subniveles sin que alguno al
menos quede ausente de la memoria. Aun así el caminante, el
perseguidor de la línea, tendrá que perseverar para lograr
encontrar y asentarse en ciertos rincones más o menos escondidos,
tesoros en cuanto a la vista, la pincelada fina, como
interpenetrada por una voz cantante, un aire iluminado, más
allá de la basura y el desorden.
Algo similar pasa con el arte, la música. Entre los maullidos
golpeteados y desesperados de los autos y aparatos inteligentes,
aún resuenan, desde adentro de algunas almas o enredadas
en aquel profundo vacío o lo que sea aquello que pareciera
existir un poco más allá, las mohoceñadas, las Místicas de
Villalpando, los punteos de Rafael Arias. En potencia latentes,
pero al mismo tiempo presentes, en actitud de estar. Casi
como deben ser los muertos. Así no suene la pieza su idea flota
como un gusano brillante entre los edificios y las explosiones
molestosas de los partidos. Hay donde asirse entonces. La
memoria de la música y sus eventos recibe, refugia.
Hay momentos y actos musicales que te marcan de por
vida. Uno de los míos, el pasado año, el concierto llamado
Música contemporánea boliviana. 7 de diciembre. Salón de
honor del Teatro Municipal A. S. P. Interpreté con mi dúo de
guitarras una de las cuatro piezas estrenadas.
Es único el sentimiento, el tacto trasladado al estómago y
todo el ser, el que se vive cuando se va a hacer música contemporánea
o clásica. Música que muchas veces no es posible tener
almacenada en la testa y dedos, sino que te montas sobre ella pendiendo
de una partitura. Casi un fetiche se vuelven esas hojas
llenas de anotaciones. Si se pierden uno o dos días antes del concierto
nada raro entrar en pánico casi sin poder disimularlo.
Pero tengo aquí mi partitura, mi guitarra, el posapié, todo en
orden. Nuestra pieza es la última del concierto. Camino lentamente
de un lado al otro. Subo y bajo las graderías que van al
camarín. En la música contemporánea seria se esconden singulares
y bastante poco conocidas maneras de ser de la acción
humana y del arte en sí. Tras ella palpita una profundización en
el sonido que te cambia la percepción de todo lo que te rodea.
Deben darse ciertas condiciones para que en alguna ciudad o
momento histórico puedan surgir nuevos pequeños movimientos
que se destaquen. Colinas o montañas que digan y propongan
algo más, a lo lejos, entre la llanura, su letargo curveado.
Del actual movimiento del que yo puedo hablar, porque lo
10
de un
sonido
Aunque no sue
uene la pieza, su idea
flota, está. Así se expl
plica la potencia
de la música contemporánea
boliviana, iana, cuyo pat
atrimonio es amplio
io.
Aquí las sensa
nsaciones del concierto o del
pasado diciembre en el Teat
atro
Municipal Albe
berto Saa
aavedra Pérez.
Marcelo y Daniel Gonzales interpretan Él viene y él va,
de Guillermo Leonardini. Arriba, Alberto Villalpando.
www. p a g i n a s i e te. b o DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20

DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20
vivo y conozco desde adentro, es del espacio
artístico Casataller, de La Paz. Los compositores
que lo fundaron (Llanque, Palacios, Zuleta,
Bustos), amigos con los que he trabajado harto y
muy de cerca, cuentan, entre uno de sus principales
artefactos muy bien conquistados, con
una disciplina arraigada en lo profundo de sus
huesos. Esa es una de las condiciones imprescindibles
para cualquier obra artística fuerte,
que ponga los pelos de punta. Me tocó oír desde
un recinto contiguo a uno de ellos repetir una
nota en su guitarra eléctrica durante una o dos horas, sacándole
todo el jugo, casi cual un acto espiritual. O vivir con otro
el rigor natural, tensionado, sustentado en el sonido mismo, de
montar obras que parecían irrealizables, batallando por
sonar. La música de tradición escrita te lleva a veces a territorios
no tan alegremente frecuentados del acto musical, que
son como retos explícitos para tu ser más íntimo, alejándote
por momentos, y muy necesariamente, de la idea de la música
sólo como disfrute o entretenimiento.
Fue un concierto memorable. El salón de honor del Municipal
tiene un antiguo empapelado verde, brilla. Algo tenemos
con el verde en Bolivia. Al fondo un retrato de Ballivián. El piso
de madera ahora es más propicio para la música. Se llenó el
concierto. Eran sólo obras nuevas, cosa destacable. Desde
Alberto Villalpando hasta el joven Leonardini. Lenguajes
poco convencionales. Pero se llenó. Ojalá se realicen allí otros
conciertos similares, que nos muestren así de cerca lo que
hacen nuestras hormigas creadoras, en este país, en este
momento. Más allá de las figuritas, de las caras, portes, personas
que se desplazan transportando en sus bolsas arrugadas
sus emociones, dolores. Más allá de la tan mencionada "coyuntura".
Cuando hacemos arte con la acción e intención rectas y
a corazón abierto, no solo para llenar el bolsillo hasta que
explote, lo que hacemos nos supera a nosotros mismos. Acudimos
allí donde radica lo menos tendiente a perecer. Lo que se
mantiene. Riega nuestros oídos y demás sentidos a lo largo de
los siglos, revolviéndonos la cabeza, el alma y las entrañas
atravesadas por el júbilo y el miedo.
Pero hay que saber trabajar hasta con el miedo. En la fuga
del vivir subyace un rumbo, un algoritmo perfecto del
corazón, de la esperanza. Si el mundo se cayera será inteligente
caer en el arte como revelación, como pasadizo a un
mundo paralelo perfectible, inteligible. Tenemos a mano un
patrimonio de música boliviana, pasada y presente. El espacio
Casataller junto a otros espacios similares y junto a otros
artistas del hormiguero seguiremos navegando este río pase lo
que pase, porque para el artista el mundo es inmenso y se le
ofrece desmenuzable, irresistiblemente atractivo.
www. p a g i n a s i e te. b o
11
FOTOS MIGUEL LLANQUE

CONFESIONES de ANIVERSARIO
Cecilia Lanza Lobo
Del periodista ciudadano al
¿escritor ciudadano?
¿Pueden los nadies se r
protagonistas y, más aún,
escribir sobre sí mismos?
Rascacielo s cumple dos
años, contra viento y marea.
HACE TIEMPO
y a q u e e l
mentado desarrollo
de las tecnologías
de la
c o m u n i c ac i ó n
ha puesto en
cuestión el rol
privilegiado del
periodista como
mediador entre
los sucesos y las
audiencias, así
como la restringida
participación del lector común en las páginas de un gran
medio impreso, en tanto escritor. Aunque aquello –la autoridad
del periodista–todavía es objeto de acaloradas discusiones
en las salas de redacción de los diarios del mundo, el éxito
de las múltiples posibilidades de expresión que brinda al ciudadano
común el Internet y sus canales y plataformas es indudable,
a pesar de sus riesgos evidentes respecto por ejemplo
del tratamiento adecuado de la información, la post verdad, o
la elaboración de las conocidas fake news.
Pese a ello, y más allá de la calidad de los contenidos, la
democratización de la comunicación mediante el acceso a la
difusión es evidente. Sin embargo, esto sucede en espacios
más personales como blogs y redes sociales. Y aún en medios
alternativos, la participación del lector/escritor común es
12
todavía escasa. Por eso la apuesta de Rascacielo s en estos dos
años que llevamos en las calles ha sido y es extraordinaria en
un gran medio impreso: abrir sus páginas al “escritor ciudad
ano”. ¿Por qué?
Porque acercarse al lector únicamente como consumidor no
es suficiente. En la gente están las miradas, las voces, las historias
que cuentan los hechos desde una perspectiva distinta
–opuesta–a la voz oficial, y ese carácter testimonial, esa vivencia
única y particular, esas voces diversas son las que constituyen un
aporte riquísimo y valioso. De ahí que el ciudadano sea nuestro
personaje de todos los días y el escritor ciudadano nuestro convocado
permanente. Entre otras cosas porque el ejercicio de la
política, en su sentido más amplio y cotidiano –ese al que ningún
www. p a g i n a s i e te. b o DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20

poder le hace demasiado caso y así les va–está en las calles y en la
gente, y en las narrativas que allí se construyen.
Sin ellas no somos ná.
Las abuelas
Como en estas páginas creemos firmemente que es necesario,
para hombres y mujeres, recuperar la matriz femenina,
nuestra primera invitación a escribir tuvo un personaje entrañable:
las abuelas. Porque urge volver al vientre para recuperar
el sentido amoroso y amorizar el mundo como gesto de resistencia
ante la violencia insostenible. ¡Qué memoria más
fuerte, presente y entrañable es la de nuestras abuelas! La respuesta
de nuestros lectores en sólo cuatro días fue enorme y
las historias, hermosas. Gracias por eso. Ya nos dan ganas de
una segunda parte.
además de la violencia y el luto posteriores. De modo que reunimos
todo en una Olla común,cuyos aportes a esa convocatoria
memoriosa continúan llegando.
Las historias de las abuelas están disponibles en
https://issuu.com/rev istarascacielos/docs/rascacielos_37
Defraudados y en las calles
Crónicas del desazón, crónicas
de un nuevo octubre
Canalizar las emociones a partir de nuestra decepción por
el fraude electoral del 20 de octubre pasado. Interesante
manera de reflexionar sobre la política de los afectos. Eso
hicimos: llamamos a escribir Crónicas de gente defraudada. No
sabíamos lo que se venía inmediatamente después: la crisis
política que derivó en el abrupto cambio de gobierno y el
proceso previo de manifestaciones callejeras y bloqueos,
DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20
Premio Nacional de Crónica
Bartolomé Arzáns de Orsúa y Vela
Esta ha sido nuestra mayor apuesta, desde Página Siete,
por el impulso y desarrollo del periodismo narrativo de
calidad que se resume en la crónica periodística que reune el
rigor de la investigación y la buena letra.
A un año de nuestro nacimiento, en 2019 aunamos esfuerzos
con la Cámara Boliviana del Libro, la Fundación para el
Periodismo y la empresa Viva e hicimos posible la participación
de escritores y periodistas dentro y fuera del país, además
de un jurado nacional e internacional de lujo. Esperamos convocar
a nuestra segunda versión en breve y con el mismo compr
omiso.
Los nadies y los alguienes
Depende desde dónde uno mire la galería, en Rascacielo s
están los nadiesy los alg uiens. Un Identikit de lugares y personajes
(página 6) donde el escritor ciudadano rescata a la ciudad
misma como personaje, y a los ciudadanos comunes y corrientes
que tienen una historia qué contar. Y en el Retrato (página
30 y 31), aquellos personajes que por su obra y aporte destacan
en la vida social y cultural del país; quienes escriben son
también escritores ciudadanos.
He ahí, Rascacielo s.
www. p a g i n a s i e te. b o
13

CONFESIONES de ANIVERSARIO
Cecilia Lanza Lobo
HISTORIAS DE AMOR
Nuestra novela entrañable
Desde que los humanos tenemos memoria, somos
los personajes favoritos de nuestras propias
aventuras y desventuras. Y entre nosotros y el
viejo continente hay mil y un historias de amor.
SI NO nos contáramos
historias
todos
los días, desde
el “bue nos
d í a s , t e
cuento que…”,
no seríamos lo
que somos.
Los seres
hu ma n o s
venimos de la
cultura oral,
del cuento y
del canto. Ya lo dijo Jesús
Manuel
Mar tín–Barbero o Carlos Monsiváis, o el
director de Televisa, o usted: de ahí el
éxito y, es más, la necesidad de la telenovela
en América Latina. Necesitamos
contarnos historias y, más aún, construir
nuestras propia telenovela. Personajes
somos. Y vaya que hay buenas, buenazas y
maravillosas historias.
Esta idea fue apoyada por la Unión
Europea en Bolivia para que pudiéramos
contar historias de amor cuyo lazo fuese
Bolivia y el viejo continente. Diez historias
fueron seleccionadas, diez artistas
prestigiosos fueron invitados a ilustrarlas
y la última va en las páginas siguientes.
El resultado nos provoca editar un
lindo libro ilustrado con estas y otras
pequeñas historias de amor. Que así sea y
vengan más, muchas más.
Apaza es estudiante
de diseño gráfico,
pero se considera
sobre todo ilustrador.
Frank Arbelo es diseñador
gráfico y dibujante.
Cubano de nacimiento,
boliviano postizo.
Abel Bellido Córdova es artista plástico
y caricaturista. Obtuvo tres veces el Premio
Nacional de Periodismo (caricatu-
14
Román Nina Nina es arquitecto,
diseñador gráfico,
historietista, animador 2D y
desarrollador de videojuegos.
www. p a g i n a s i e te. b o DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20

Valentina Vilaseca es estudiante
de Diseño y Comunicación Visual
de la Universidad Católica
Bolivia de La Paz.
Nona Martínez es artista visual,
dedicada a la ilustración,
fotografía y audiovisual.
Marcos Loayza es director
de cine. De vez en
cuando dibuja.
Susana Villegas es artista
y dibujante, autora y
directora de numerosas
producciones gráficas.
Marco Tóxico es
ilustrador, cartelista
e histor
i e t i s ta .
DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20
Val Blacutt es ilustradora
y diseñadora
gráfica orureña.
www. p a g i n a s i e te. b o
15

HISTORIAS DE AMOR
Vlady Torrez
Ilustración de Marco Tóxico
Rana
Los mejores amigos aparecen el momento
menos pensado. Ojo, hay que poner mucha
atención a sus mensajes.
ERA MEDIADOS DEL 2001 y me había
luxado la muñeca izquierda. Siempre fui un
inútil para los deportes. Mi dramático
sobrepeso me impedía ser un jugador
pasable y la única opción era ser arquero. Al
ir creciendo, empezamos a jugar en canchas
reglamentarias con arcos enormes; mis días
de guardameta estaban contados. Un blancazo
en la cara me hizo perder el conocimiento. Mi enorme humanidad
aplastó mi mano izquierda. Adiós sueños futboleros, adiós
muñeca zurda, todo en el mismo día.
Pasaba clases de piano por las tardes. Presionar las teclas
con el yeso era difícil, pero no iba a aplazarme en música. “Ese
yeso no tiene firmas. ¿No tienes amigos o qué?”. Rana era la
chica más alta del curso. Por precaución nadie se metía con
ella. Una patada con esas piernas largas y seguro acababas con
la nariz en la nuca. Me desahogué y le conté todo. Medio
mundo estaba enojado conmigo y al recobrar el sentido
escuché un brutal: “Perdimos por goleada pero el marrano está
vivo, algo es algo ¿no?”. Su risa hizo temblar el curso. Me
enfadé, ¡estaba sufriendo! “Ya, ya, los chicos del curso son unos
inútiles pero de seguro te estiman, esperaron a que despiertes,
yo me hubiera ido, jaja. Mentira, no te enojes. ¡Te lo firmo tu
yeso! ”. Se acercó, tomó mi mano herida. Sentí el calor de sus
dedos morenos y sus ojos... creía que sólo los felinos podían
tener ojos así. “¡¿Qué pasa?! ¿No te gusta?”. Abandoné mi
estupor, mire sus trazos en marcador verde oscuro: “H abr á n
caídas más fuertes. Puedes superarlo, muchachote”. No
entendía qué clase de nombre era Rana. Según ella era árabe y
significaba “la bella”. Pensé en múltiples combinaciones posibles
de nombres árabes: Abraham Lasnalg Asyá, Rana
Amelah, Nalguib Basadar. También pensé en sus ojos, era
imperativo no olvidar esos ojos.
Nos saludábamos durante el recreo o en la entrada del
colegio. Charlábamos después de las clases de música. Éramos
cuatro alumnos, y a veces sólo asistíamos los dos. Me contó que
heredó un piano de su abuelo iraní y sus padres le obligaban a
tocarlo. Yo había recibido un órgano como regalo de navidad. Mi
madre insistió en que aprendiera y, como en el colegio el piano
era el instrumento más parecido, no tenía otra opción.
En unas semanas me quitaron el yeso. Caminábamos juntos
16
www. p a g i n a s i e te. b o DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20

por El Prado de La Paz, inquietándonos por los exámenes y
odiando las clases de piano. Un día me contó que toda su familia
iba a mudarse, que su padre había conseguido un nuevo trabajo
en Stuttgart, Alemania. El 2002 se pintaba como un año terriblemente
solitario. “Nos vamos a escribir”fue lo último que me dijo
antes de bajar por la avenida 6 de Agosto. No volví a verla. Me
mandó un SMS la mañana de su viaje: “Te vas a cuidar y deja de
amargarte por lo del fútbol, sino uno de estos días te van a
enyesar la jeta de tanto recibir pelotazos”.
Mantuvimos contacto por mail. Varios correos al mes,
pocas fotos intercambiadas; las mías en poses tratando de
meter panza, las suyas junto a algún atractivo turístico de la
ciudad. Me contó que todo en Alemania era limpio y moderno,
que los ancianos se sonrojaban de vergüenza cuando hablaba
de Hitler y que estaba inundada de musulmanes. Gente de
Marruecos, Turquía, Irán, Siria y Afganistán estaba en las
calles, en los restaurantes de comida rápida, sentada en las
aceras, por todo lado. “Si me pongo velo puedo pasar por inmig
rante”. Su padre trabajaba como loco y su madre estudiaba
alemán con pobres resultados. Sus mails eran cada vez más
largos. “Aquí hay supermercados exclusivamente para vender
cerveza y la mostaza sabe a todo menos a mostaza. Me dijeron
que aquí la fabrican con su sabor original”. Estaba triste, cada
vez más melancólica. Yo la extrañaba.
Empezó a caérsele el cabello. “Tengo que peinarme diferente
para tapar un hueco en mi cabeza. Es el estrés. Aprendí
rápido el idioma pero no tengo amigos y temo aplazarme en
todo. Mis padres están trabajando o durmiendo exhaustos
para levantarse al día siguiente y seguir trabajando”. Traté de
consolarla. Le conté que aquí bloqueos y manifestaciones nos
mantenían alerta. Imaginábamos que El Mallku sitiaría La Paz
por meses hasta matarnos de hambre. “Ah, una cosa más. A los
alemanes no les importa Bolivia. Podríamos desaparecer del
mapa y seguirían como si nada. Por otro lado, puedo beber
cerveza. Niños, ancianos, todos beben cerveza a toda hora y en
todo lugar. En algunos años saldrá cerveza de las fuentes y la
gente nadará en piscinas espumosas”. Supuse que tal vez no
estaba pasándola tan mal. Quizá su calvicie prematura era una
reacción alérgica a siete mil tipos distintos de cerveza.
A veces no me escribía por semanas. Estaba estudiando
horas extra para ponerse al día en el colegio. “Gracias por estar
a mi lado, te quiero”. Pasó medio año, decenas de mails. Su
habitual sentido del humor fue desapareciendo poco a poco.
“Odio vivir aquí, todo es tan hermoso y la gente tan indiferente.
Podría estar agonizando en la calle y pasarían por
encima de mi cuerpo”. Entonces dejó de escribir. Uno, dos, tres
meses. Ignoraba mis mensajes. Yo revisaba a diario mi correo.
Releí toda nuestra correspondencia tratando de averiguar si
había escrito algo que la hubiera ofendido. A finales del 2003,
cuando me había resignado a no volver a saber de ella, me
encontré con su padre por pura casualidad en plena 6 de
Agosto. “¿Vlady? Es tu nombre ¿verdad? Mi hija hablaba todo
el tiempo de ti, nos mostraba las fotos que le mandabas”. La
habían encontrado en el piso de su cuarto, su espalda apoyada
contra la pared y abrazando sus rodillas. Un frasco vacío de
antidepresivos sobre el velador. “Gracias por escribirle, nunca
pudimos entender cuán triste estaba, no sabemos de dónde
sacó esa cosa. Volvimos hace unos meses, ya nada importa”. En
su rostro, prematuramente envejecido, sus ojos abrumados
por la pena brillaban. Eran hermosos, como los de Rana.
Pasé meses leyendo y releyendo nuestras conversaciones,
¿Por qué no me había dado cuenta? Le había fallado. “Habr án
caídas más fuertes…”. Tan fuertes que resuenan en el tiempo.
Vladimir Tórrez es abogado, politólogo y docente
universitario. Escribe porque le gusta y le ayuda a
pensar que está en lo políticamente incorrecto.
Marco Tóxico se dedica a la ilustración, los carteles y
la historieta. Publicó su trabajo en revistas, libros y
antologías alrededor del mundo. Tiene cinco libros
y varios fanzines, casi todos autoeditados. Tiene el
cráneo trepanado y le gusta el pollo frito.
DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20
Historias de amor es una iniciativa apoyada
por la Unión Europea en Bolivia
www. p a g i n a s i e te. b o
17

FOTO G R A F Í A
Fadrique Iglesias Mendizábal
Fotografías de Sergio Ribero
La M U DA N ZA infin
Devorar el mundo con
una cámara fotográfica
Desde que el fotógrafo cochabambino
Sergio Ribero partió a Nueva Zelanda
y España, el nervio de viajero sin prisa
se le ha disparado. Ahora sólo quiere
palpar el mundo infinito con sus
propios ojos. Y contarnos cómo es.
SERGIO RIBERO lleva cinco años
de mudanza continua, siempre con
mochilas chicas. Tiene una concepción
del tiempo y del espacio atípicas.
No lleva prisa por llegar a los
sitios, donde tampoco permanece
más de dos meses seguidos. No al
menos desde que se fuera a la India
en 2015.
Un tiempo antes, pasó sendas
etapas por Nueva Zelanda y España,
de donde se marchó fascinado, luego
de caminar de arriba a abajo cuatro
años en ambos países. Desde entonces,
el nervio por el viaje sin prisa se le ha disparado y ya no tiene
una casilla donde uno pueda mandarle postales.
La fotografía, oficio que practica compulsivamente desde
hace 12 años, le ayuda a satisfacer muchas de sus necesidades
nómadas. Ribero no es sólo de presionar el gatillo de su Canon.
Es también de conocer a fondo a sus amigos, que es en realidad
como define a los sujetos y objetos de su lente.
Dice Ribero, cochabambino de 37 años, que la fotografía le
permite muchas cosas al mismo tiempo. “Por un lado viajar y
conocer, que es una necesidad personal; me permite proyectar
inquietudes propias respecto de la humanidad, la forma que
tenemos de relacionarnos, y me permite plasmar la nostalgia
que tengo de alguna forma con el pasado y la vida fuera de la
moder nidad”.
18
www. p a g i n a s i e te. b o DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20

ita
TAXI EN CALCUTA, INDIA. 2015 / SERGIO RIBERO
DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20
www. p a g i n a s i e te. b o
19

FOTO G R A F Í A
RETRATO CHENAI, INDIA. 2015
FAMILIA DE MATHURA, INDIA. 2019
Ribero no es anacoreta a tiempo completo, sino que pasa
horas catando cafés, tés y otras yerbas, al tran tran de su
palique pausado, ya sea de espesura filosófica o de alineaciones
futboleras. Tiene activas sus redes sociales y está relacionado
con amigos, pero su prioridad y voluntad no suele estar
en el mercado del arte.
Cuando se le ha contratado para trabajar en organismos
multilaterales como el Banco Interamericano de Desarrollo
–sus fotos fueron portada del informe anual del BID en 2015–
ha tardado mucho más en pasar un cheque con sus honorarios
que en editar la docena de fotos que formaron parte de una
exposición en 2014, también publicada en El País de Madrid.
Por aquellos años ganó también el Human Kind Photo
Contest de Mercy Corps pero no se ha prodigado demasiado
en rastrear laureles sino en escudriñar historias íntimas.
Es cochabambino, desciende por padre y madre de familias
tan artísticas como sui géneris. Por el lado paterno es sobrino
del pintor Gonzalo Ribero, acaso uno de los artistas bolivianos
más disruptivos en los años 70 y 80, y por el lado materno es
sobrino de una pléyade de bohemios entre los que destaca en la
lejanía el poeta orureño Luis Mendizábal Santa Cruz.
Entre sus prioridades, jamás ha estado la de ser millonario
o conseguir un trabajo funcional. Terminó las materias para la
licenciatura en Derecho, por la Universidad Católica Boliviana,
pero jamás se interesó en defender la tesis obligatoria
que le diera acceso al cartón, pues nunca se vio ejerciendo la
ab ogacía.
Entre sus objetivos vitales, cambió tribunales por daguerrotipos
y decidió invertir en su educación en la escuela de cine
La Fábrica, experimento donde se han fraguado varias de las
vocaciones cinematográficas de Cochabamba en los últimos
años. Allí no buscaba diploma ni selfies, sino conversaciones
20 www. p a g i n a s i e te. b o DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20

RETRATO. BANGALORE, INDIA. 2015 FÚTBOL. CALCUTA, INDIA. 2015
memorables, incluso con ganadores del Goya como le pasó con
el realizador español Benito Zambrano.
Aunque no le gusta que los flashes le apunten directamente,
sus primeras publicaciones en Flickr y Facebook llamaron
la atención de varios escritores nacionales que utilizaron
sus fotos como portadas de sus libros, como Rodrigo
Hasbún, Maximiliano Barrientos y Liliana Colanzi.
Entre las inspiraciones que encuentra Ribero hay clásicos
de colección, pero también apuestas nuevas, según qué
aportes le tocan:
“Cartier Bresson con su composición y t i m i ng , Robert Frank
con su intensidad y su sensación onírica, James Natchwey por
la cercanía con el sujeto y, sin duda, Steve Mccurry en los
motivos que eligió y su manejo del color. Fue el autor que me
permitió ver la India y su gente por primera vez. Quedé impresionado
y me motivó muchísimo. Sebastião Salgado, Josef Koudelka,
Vivian Mayer y Jimmy Nelson son otros grandes referentes”,
dice con su voz cadenciosa, nasal, queda.
Ribero no tiene pensado volver a Bolivia en el corto plazo,
pues piensa seguir conociendo un poco más el sureste asiático,
BAÑO RITUAL. PUSHKAR, INDIA. 2016
DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20
www. p a g i n a s i e te. b o
21

FOTO G R A F Í A
PESCADORES. NEGOMBO, SRILANKA. 2020
luego de pulular en 2019 varias semanas por Vietnam, Laos,
Camboya y Nepal, abriendo en aquellas rondas nuevos apetitos:
“Comparando las experiencias fotográficamente, me resulta
más fácil acceder a los sujetos de mis retratos en India, tal vez por
mi condición de extranjero”, dice tímidamente y sigue:
“Siento que hay menos desconfianza y dudas respecto al
porqué de las fotos; en principio sin importar su condición se
muestran más cómodos y con mayor naturalidad, lo que hace
que todo fluya más fácilmente”.
Tras 20 años de aquel primer viaje largo a Nueva Zelanda
sin su familia, Ribero ha descubierto que el mundo es mucho
más grande y se le nota la falta de prisa por el retorno al
terruño. Estos años se ha ganado la vida con retratos,
MUJER NEVARI. KATMANDU, NEPAL. 2016 KHUMBA MELA, PRAYAGRAJ, INDIA. 2019
22 www. p a g i n a s i e te. b o DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20

DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20
www. p a g i n a s i e te. b o 23

FOTO G R A F Í A
NIÑA DE VARKALA, KERALA, INDIA. 2016 PUERTA Y FACHADA, VRINDAVAN, INDIA. 2015
haciendo fotografía de cine y encuadres audiovisuales y vendiendo
carteras y otras artesanías, pero parecería que se alimenta
del aire, del yoga y de tocar djembe, agradecido por lo
que tiene.
“India es bastante segura para caminar con la cámara en
mano y eso te brinda muchas más oportunidades espontáneas;
Bolivia por su parte, en mucho menor espacio, presenta
mayor diversidad. Son distintos escenarios y formas de desarrollar
la imagen”, dice desde las costas del mar Arábigo, en la
ciudad de Goa, a punto de partir a Sri Lanka, donde estará
algunas semanas, hasta decidir nuevo destino, dejando obsoleto
en la memoria al anterior, con el único registro de los
retratos incisivos que deja en su perfil de Facebook y en los
recuerdos de la gente que lo conoce.
ASCETA HINDÚ, VARANASI. 2019
24 www. p a g i n a s i e te. b o DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20

C R O N I Q U I TA
Fran Cano
Fotos Lacontradejaén /
Esperanza Calzado
Calistenia por la integración
A la derecha, arriba y abajo,
Ariel y Miguel Ángel Conde.
A la izquierda, el ecuatoriano
Russel Delgado.
Los bolivianos Ariel y Miguel Ángel Conde y el ecuatoriano
Russel Delgado han creado el Club Deportivo Wolf Society de
calistenia, que aglutina a deportistas extranjeros y de Jaén con
doble finalidad: favorecer la integración y representar a la
provincia desde la práctica.
DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20
www. p a g i n a s i e te. b o 25

C R O N I Q U I TA
LLEGARON ARIEL Y
MIGUEL ÁNGEL Con de
desde La Paz a Jaén hace un
lustro. Al poco tiempo, los
hermanos advirtieron que la
nueva casa se les caía
encima; querían salir fuera,
hacer deporte y formar un
círculo de amigos. Pensaron
en retar los límites de su
cuerpo. Así llegaron a la
calistenia, deporte que
conduce al desarrollo de la
agilidad y fuerza física con el
propio peso y la ayuda de barras. Los hermanos pasaron de
entrenar en La Salobreja (centro polideportivo) a practicar en
lugares abiertos como la Plaza del Obispo García de Castro,
junto a La Alameda. Hubo efecto imán: más chicos y chicas se
unieron a los entrenamientos al aire
libre. Así, y con la ayuda del ecuatoriano
Russel Delgado, nació el Club
Deportivo Wolf Society, oportunidad
para el deporte y, sobre todo, una vía
de integración respaldada por Torre
del Concejo, el colectivo vecinal de
San Juan (centro histórico de Jaén).
“Estamos inscritos como asociación
desde hace casi un mes. Somos en
torno a 30 miembros”, cuenta Ariel
Conde, de 25 años, a este periódico. El
club ha crecido y ha incorporado a
residentes de diferentes naciones:
Bolivia, Ecuador, Cuba, Perú, Colombia,
Georgia, Venezuela y Marruecos.
El proyecto de la asociación deportiva
nació el pasado verano y hasta la tramitación
legal el colectivo de atletas se
ha nutrido gracias a las redes sociales
—@wolfsociety en Instagram;
Society of Wolfs en Youtube— y al
grupo que comparten en WhatsApp.
El arco de edad de los deportistas,
cuenta el promotor, oscila entre menores de 11 o 12 años y
adultos de 30. “Es una manera de que la gente que llegue sola a
Jaén conozca a gente y haga amistades. A nosotros ya nos pasó:
llegas tímido, te agarras a tu zona de confort y no sales”,
cuenta. La calistenia es justo lo contrario: un reto mayúsculo
que se lleva mejor en grupo.
“SOMOS LOS LOBOS,
LA MANADA QUE PROTEGE”
Es miércoles 11 de diciembre, y el club de calistenia tiene
una cita con su rincón favorito: la Plaza del Obispo García de
Castro. El campo de minigolf ha devenido
en el lugar de entrenamiento de
los “lob os”, como se hacen llamar los
a t l e t a s.
—Pero nuestra manada es la
buena –aclara Russell Delgado, de 23
años, uno de los promotores. No para
de sonreír y es uno de los dinamizadores
del grupo. Su hermana, Coral
Delgado (24), cuenta que Rusell
decidió cortarse el pelo por un reto
relacionado con calistenia. David
Carrillo (18) –cuerpo atlético, rubio al
estilo Super Saiyan–es de Torredonjimeno
y lleva medio año con “los
lob os”.
—Estaba apuntado en el gimnasio
y cada vez hacía más súper dominadas. Probé la calistenia y me
acabó gustando más que entrenar en el gimnasio –dice, y
apunta a una idea que une a este tipo de atletas: la mayoría sustituye
el ejercicio en espacio cerrado por la libertad de la calle,
como confirma Rusell Delgado.
Algo así le ocurrió al jiennense José María Campos (16), el
benjamín del grupo. Su hermano lo instó a probar con la calistenia,
y cuando lo hizo, quiso más y más:
—Mola. Haces deporte y te lo pasas bien –ad mite.
Toni Hidalgo (23) ha vuelto hoy con “los lobos”después de
un tiempo, y el cubano Mario Quiñones (24) ha dejado atrás
26 www. p a g i n a s i e te. b o DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20

lares bordea la plaza, impertérrito, y una mujer con el carrito de
bebé se queda mirando los ejercicios del colectivo: suspensiones
en barra; imitar a la rana –con los manos como único apoyo
en el suelo–y cuanto dé la imaginación. La gente ha pasado de
mirarlos con extrañeza a hacerlo con admiración.
Hay diferentes niveles de entrenamiento. Los de grado alfa
visten de rojo, tienen más experiencia y se encargan de cuidar
a los principiantes; los de grado beta son los amarillos, su nivel
es intermedio y reciben protección de los más experimentados,
y los de grado omega, azules, están en plena iniciación. Les
toca dar y pulir cera.
—Un lobo en grupo es más fuerte, porque se apoya en el
resto y cuida de los más jóvenes. Vivimos en sociedad y con
normas. Nuestros valores son el respeto y el compañerismo
–tercia Ariel Conde.
una lesión de codos que sufrió en su país para ponerse aún más
en forma.
—Acá he hecho una familia. Todos somos iguales
–va l o r a .
Hoy se dejan grabar y fotografiar por este diario. El proceso
de preparación es interesante: cargan hasta con un abultado
equipo de música para ponerle ritmo a los ejercicios. Llevan
magnesio en polvo como aliado para los agarres.
Reggaeton, rock, rap, electrónica y más géneros, a gusto de
los atletas, dan alegría al entreno. Un hombre mayor con auricu-
NECESITAN BARRAS EN
LA SEDE DE SAN JUAN
El Club Deportivo Wolf Society cuenta con el apoyo de la
asociación Torre del Concejo. El presidente del colectivo
vecinal, Francisco Jesús Castro, propuso al club entrenar en la
sede de San Juan con una condición: los atletas tienen que
darse de alta como socios y nutrir el movimiento vecinal. En el
ánimo de los deportistas está representar a Jaén desde la calistenia,
y el deseo de Castro es que sean al mismo tiempo actores
sociales que sumen y que reivindiquen mejoras.
La sede aún no ha podido ser estrenada como escenario de
entrenamiento. Faltan barras. Ariel Conde indica que el club
necesita al menos una de dominadas para que los atletas se
acostumbren a ir a la sede. Están a la espera de que el Ayuntamiento
de Jaén acometa las mejoras y acondicione el espacio
mínimamente para la práctica. “Ya lo hemos transmitido”,
comenta Fran Castro, quien alaba el rol social de “los lobos”:
“Mientras hay jóvenes que llenan las plazas para beber
alcohol, ellos incentivan el deporte y la idea de comunidad”,
expresa en conversación con este medio.
El grupo ya celebró su primera competición el pasado mes
de agosto. Participó medio centenar de atletas. La donación
lograda, de 50 euros, fue para el colectivo Huella Jaén. Llegarán
más campeonatos y todos mantendrán el cariz benéfico.
En la Plaza del Obispo García de Castro, “los lobos”echan
la tarde atrás con camisetas de tirantes que lucen su logo y
nombre en el pecho y leyendas motivadoras a la espalda:
“Nunca te rindas. Las grandes cosas cuestan tiempo”.
“Un objetivo sin un plan es sólo un deseo. Mantén tu determ
i n ac i ó n”.
“Si no haces nada, serás siempre igual”.
“Los sueños se cumplen con acciones, no con palabras”.
—Yo quiero devolver con la calistenia a Jaén y a España la
oportunidad que me han brindado –concluye Ariel Conde.
Este texto fue publicado originalmente en el medio
digital lacontradejaen.com
DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20
www. p a g i n a s i e te. b o 27

28 www. p a g i n a s i e te. b o DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20

DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20
www. p a g i n a s i e te. b o 29

R E T R ATO
Cecilia Lanza Lobo
Fotografía de Alejandro Azcuy Domínguez
El aparapita. Elogio de la eternidad
“Ya casi no se ven aparapitas en La Paz”,
sentenciaba hace ya cuatro décadas el
poeta Jaime Sáenz. Y esa sola frase
llegaba con brisa y nostalgia. Aquella
constatación era sin embargo sólo un
punto de partida para decir, una y otra
vez, que en verdad este personaje,
paceño y aymara por excelencia, difícilmente
podría desaparecer porque
nadie como él para habitar, al mismo
tiempo, el campo y la ciudad. Claro que
Saenz llevaba al aparapita a la categoría
de ser omnipresente. De hecho y a
estas alturas -nunca mejor dicho-, para
los paceños el aparapita no sólo es un
personaje sino una deidad urbana.
Observaba el poeta que la falta de aparapitas
afectaba el bolsillo del pueblo
porque el costo de una camioneta para
trasladar un mueble o un colchón, por
ejemplo, no se comparaba con el de un
aparapita. Pero no era que uno no
pudiese echar tal carga sobre la propia
espalda sino que nadie como el aparapita
para hacerlo con destreza, maña y
la fuerza de un ser de otro mundo.
El aparapita era un migrante del campo,
pero uno definitivo, aquel que llegó
para siempre. Tanto así que de tanto
andar la ciudad fue su mejor conocedor,
su habitante por excelencia. Y más
aún, en ese sentido, el aparapita era,
siguiendo la pasión saenzeana, la
ciudad misma, Hoy tampoco se ven
aparapitas en la ciudad. Hoy se habla
más bien del “re s i d e n te”, aquel aymara
que va y viene del campo a la ciudad
donde por lo general habita, pues al
campo va de visita en alguna ocasión
especial. Hoy el aparapita carga la
ciudad ya no sobre sus espaldas sino
en su teléfono celular. Así, como decía
el poeta, el aparapita es ya la ciudad
misma. Y con él todos nosotros.
30 www. p a g i n a s i e te. b o DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20

1
1. Alejandro Loayza Grisi 2. Al fo n so
Gumucio Dagron
3
5
2
3. Anto n i o
Suarez Weise
4. Ce c i l i a
Fe r n á n d ez
4
8
9
6
5. Fre d d y
B arragán
6. Gastón Brito
7
12
7. Javier Mamani 8. Ro b e r to
Lanza Lobo
10
11
El ojo del fotógrafo
9. S andra
Boulanger
1 0. Ví cto r
G u t i é r rez
Ahora que fotografiar es un ejercicio
tan frecuente, tan recurrido en este
mundo cada vez más visual, el
trabajo del fotógrafo adquiere otro valor. Seguramente
las discusiones habituales respecto de
la técnica, del arte, del color y aquellos asuntos,
son a estas alturas irrelevantes. Lo importante
no será siquiera la elección del encuadre o cualquiera
de aquellos elementos que aportan a la
significación de una imagen. Lo importante
será la capacidad de mirar lo que otros no ven
y, encima, mostrarnos.
Esa es la particularidad del ojo del fotógrafo.
Su capacidad de, a través de una
imagen, provocarnos una sensación que de
nos aproxima al personaje retratado. Ese el
valor y estos los fotógrafos que este año colaboraron
con Rascacielos retratando a los personajes
de nuestra tribu, aquellos a quienes
reconocemos en este espacio.
11. Wa l d o
Maluenda
12. Wa ra
Va rg a s
DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20
www. p a g i n a s i e te. b o
31

CARTELER A
#DíasDeCine
Isabel Navia
Macondo, a contramano
EN ESTOS DÍAS en que buena parte de nuestras
distracciones llegan de las deslumbrantes
alfombras rojas de los premios cinematográficos
en el norte del continente, les
propongo remar contra la corriente. Si bien
los Globos de Oro, los Oscar y otras ceremonias
similares resultan fascinantes, hay que
recordar que nos venden un cine ajeno. Digno de admiración,
ciertamente, pero extraño a la vez. La costumbre de añorar lo
lejano no debe quitarnos la capacidad de conocer también lo
que tenemos cerca, es decir, las películas que narran historias
de gente como tú y como yo. Hablo de personas cuyas circunstancias
son muy distintas a las de un guasón, un corredor de
autos en Indiana, unos mafiosos en Chicago, unos estafadores
en Corea o un niño en Alemania. Hoy sugiero buscar y descubrir
un cine del vecindario, con gente que habla castellano y
sufre la violencia de conflictos en su calle, gente que debe convivir
con la pobreza y con el narcotráfico; un cine de personas
que cultivan la tierra, bailan salsa, migran del campo a las ciudades
y celebran la vida con calor latino.
Hoy les invito a descubrir el cine de nuestra vecina Colombia,
una tierra de prodigiosos narradores, cuyas películas
reflejan su realidad, sus sueños y sus vicisitudes, regalándonos
la alegría de descubrir personajes tan sorprendentes como
e x c e p c i o n a l e s.
La Academia Colombiana de Artes y Ciencias Cinematográficas
entrega, desde 2010, los premios Macondo para reconocer
a las mejores películas de su país. A partir de la creación
de este premio, Macondo es, además del lugar garciamarquiano
por excelencia, el símbolo de lo mejor del cine de
Co l o m b i a .
Éstas son las ganadoras del premio Macondo a mejor película
entre 2010 y 2019, aclarando que la ceremonia no se
realizó en dos ocasiones: 2011 y 2014.
1PÁJAROS DE VERANO. Ciro Guerra, Colombia, 2018.
Ambientada en los años 70 y basada en hechos reales,
cuenta el origen del narcotráfico en este país, en una época en
que la juventud norteamericana se sumerge en el consumo de
la marihuana. Visualmente impresionante, la película narra
32 www. p a g i n a s i e te. b o DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20

cómo una familia indígena se involucra en el negocio,
poniendo en grave peligro su vida y su cultura.
2MATAR A JESÚS. Laura Mora, Colombia, 2017. Paula es
una estudiante de Medellín que adora a su padre, un
popular docente de ciencias políticas. Un día, unos sicarios lo
asesinan a sangre fría en presencia de la hija, quien logra ver los
rostros de los asesinos. El dolor de la tragedia y la indolencia de
las autoridades ante el crimen conducirán a Paula a una
encrucijada en la cual tiene el poder de decidir sobre la vida o
la muerte, la venganza o la justicia.
3PARIENT E. Iván D. Gaona, Colombia, 2016. Willington
y René son dos primos que rivalizan por el amor de
Mariana, quien ha decidido casarse con uno de ellos. En tanto
el otro intenta recuperar a su novia, una serie de robos y
violencia acechan el lugar y todos tienen que involucrarse para
no sucumbir.
4LA TIERRA Y LA SOMBRA. Cesar Acevedo, Colombia,
2015. Una familia, perdida en medio de campos de caña,
debe luchar por mantener sus frágiles lazos ante la inminencia
de cambios que romperán muchas cosas en ese lugar, física y
metafóricamente. La tenacidad de una mujer que no acepta
renunciar a la tierra por la que siempre ha trabajado se
confronta con la necesidad de proteger a un hijo enfermo.
5EL ABRAZO DE LA SERPIENTE, Ciro Guerra,
Colombia, 2015. Es la primera película colombiana en ser
nominada al premio Oscar. Su fotografía es realmente notable,
un blanco y negro que registra un potente guión que se
desarrolla en medio de la selva amazónica. La historia se basa
en los diarios de los exploradores Theodor Koch-Grünberg y
Richard Evans Schultes.
6LA PLAYA D.C. Juan Andrés Arango, Colombia, 2012.
Tomás es un joven afrodescendiente que deja su pueblo
en la costa, forzado por la guerra. Ya en Bogotá, debe sobrevivir
mientras busca a su hermano menor. Un relato trágicamente
cotid iano.
7TODOS TUS MUERTOS. Carlos Moreno, Colombia,
2011. Comedia bañada en sátira sobre la violencia y la
política. Un campesino, trabajador y escéptico acerca de las
ofertas electorales, irrumpe el día de los comicios en el pueblo
para denunciar que un montón de cadáveres han aparecido en
su parcela. Mientras su rabia y preocupación crecen, la policía
y el alcalde tratan de evitar que el hecho se sepa pues les
interesa más el avance de las elecciones.
8RETRATOS EN UN MAR DE MENTIRAS. Carlos
Gaviria, Colombia 2010. Una historia de desplazados, de
esas familias que se ven forzadas a dejar sus hogares debido a la
violencia. Jairo trabaja como fotógrafo ambulante y junto con
su prima Marina, que sufre de amnesia y es muda, emprenden
viaje para recuperar sus tierras pues el abuelo acaba de morir
en un derrumbe. En el viaje son secuestrados por los
paramilitares y Marina comienza a recordar la matanza de su
famil ia.
i s a n av i a .co m
DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20
Pa r i e n te
La playa D. C.
www. p a g i n a s i e te. b o
33

V I Ñ E TA
Guizada Durán
Pita de quiebre
34 www. p a g i n a s i e te. b o DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20

DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20
www. p a g i n a s i e te. b o 35

36 www. p a g i n a s i e te. b o DOMINGO 2 DE FEBRERO 05|20