NUMERO 1

De las trampas, la pólvora y las armas, pase a cazar con la cámara y sus lentes. Durante 20 años he dedicado mi tiempo
fotográfico casi al 100 % a la fauna , necesitando años para darme cuenta, que por cada hora de sesión fotográfica,
son necesarias en la mayoría de las ocasiones un mínimo de 20 a 50 horas de observación previa , además de mantener
una estrecha relación de amistad y trabajo con profesionales en esta materia ( Biólogos, Guardas, investigadores,
etc ), de los cuales sin lugar a dudas aprenderemos muchísimo, si es que de verdad pretendemos conseguir fotografías
de calidad y no queremos estar perdiendo el tiempo y pasando calamidades dentro de un hide.
Hace unos cuatro ó cinco años, un poco colapsado de tanto bicho , un poco arto de haber pasado media vida metido
dentro de un metro cuadrado de tela , pasto , rocas, etc. , reflexionando cuanto me había perdido en cada uno de mis
viajes por la península, me planteo la posibilidad de empezar a realizar fotografía de paisaje un poco más en serio de
lo que lo venía haciendo.
Con la lección medio aprendida con la fauna, en el sentido de que una fotografía de calidad no se consigue de la noche
a la mañana, empiezo a dedicar tiempo a buscar localizaciones, encuadres y puntos de vista.
Comienzo un nuevo ciclo fotográfico, una nueva etapa, un nuevo proyecto más complicado del que me podía imaginar.
Con lo relativamente fácil que me resultaba conseguir fotos de bichos , por la dedicación que les había dedicado,
cuantos años me iba a costar ahora solo a educar mi vista? , a ver el encuadre perfecto, cuanto tiempo iba a necesitar
para que en la localización y el encuadre elegido se reunieran todos los requisitos necesarios para que la foto fuera
de ensueño . Cuanto tiempo iba a pasar hasta depurar la técnica y aprender a utilizar el equipo, un equipo que hasta
entonces había utilizado mas bien poco o casi nada, hablo de los filtros, polatas , etc…
He abandonado el silencio de los hides (aunque no he renunciado del todo a ellos), ahora a cambio disfruto mucho
mas del aire de la sierra y de la brisa marina , de la niebla espesa de los bosques humedos, de los espectaculares
atardeceres y amaneceres que nos brinda la naturaleza. Mientras paseo admiro aun mas cualquiere sinuosa forma,
los dibujos de las rocas, las texturas de los troncos, buscando formulas para que los diferentes juegos de colores de
todos esos elementos que veo y observo en el encuadre, se ordenen y se fundan en perfecta armonía.
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