Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
Corta edad, larga trayectoria
Nacida el 13 de diciembre de 1989 en Pensilvania, Estados Unidos, Taylor Swift es la
hermana mayor del actor Austin Swift. Ambos son hijos de Andrea Gardner y Scott
Kingsley Swift.
Aunque podría decirse que Taylor lleva la influencia de otro apellido: Twain. Y no por
el consagrado escritor, sino por la célebre cantautora de música country Shania Twain,
una gran influencia para Swift.
Y es que Taylor se encaminó hacia la música casi mientras daba sus primeros pasos, y
no solo como intérprete (sobre todo de teatro musical), sino como compositora. Tras
escribir poesías, empezó a hacer lo propio con las letras y comenzó a tocar la guitarra
para crear sus canciones.
Por eso Swift se dedicó a trabajar su faceta musical constantemente, compatibilizándolo
con sus estudios y otros trabajos, porque llegó a ejercer como modelo.
Así, en 2006 sacó su primer disco, que llevaba su nombre y consistía en canciones escritas
por ella. Tras un éxito nada desdeñable que la aupó hasta el número 5 de la lista
de éxitos Billboard 200, todo fue en ascenso.
Sus álbumes posteriores y anteriores a ‘Folklore’, son: ‘Fearless’ (2008), ‘Speak Now’
(2010), ‘Red’ (2012), ‘1989’ (2014), ‘Reputation’ (2017) y ‘Lover’ (2019). Varios de sus
trabajos han alcanzado números uno, recibido varios galardones, y cosechados éxitos
de ventas.
Contundencia en redes sociales
Todo esto lo ha hecho sin dejar de lado su personalidad, que la ha llevado a tener por
internet enfrentamientos con Donald Trump, Kanye West o Scooter Braun, este último
quien fuera manager de, entre otros, Justin Bieber.
Sobre el presidente de Estados Unidos, Swift escribió en Instagram: “siempre votaré al
candidato que defienda los derechos humanos, cualquier forma de discriminación por
orientación sexual o género es incorrecta”. A lo que Trump twitteó: “su música ahora
me gusta un 25 % menos”.
Con Kayne West, todo viene de lejos. Cuando Swift fue galardonada con el premio
MTV Video Music Awards a mejor videoclip con “You Belong To Me”, Kanye West le
arrebató el micrófono durante su intervención para afirmar que Beyoncé (que optaba
al premio con “Single Ladies”) se lo merecía más: “Taylor, estoy realmente feliz por ti
[...] pero el video de Beyoncé es uno de los mejores videos de la historia”.
A ese suceso le siguieron disculpas públicas de West, que después se retractó alegando
que solo las pidió por presión, y varias declaraciones del rapero alegando que Taylor
Swift le debía su fama a ese histórico momento. E incluso Kim Kardashian, esposa de
West, filtró vídeos de una conversación telefónica entre Swift y su marido.
Ya en marzo de 2020, la artista habló al respecto, en una storie de Instagram: “En vez
de contestar a quienes me preguntan por cómo me siento ante el vídeo filtrado….”
comenzaba Swift, hablando después del daño que la manipulación de dicha filtración
hizo a ella y los suyos, para después concluir: “deslizad hacia arriba para conocer lo
que realmente me importa”.
Y si sus seguidores, efectivamente, hacían caso a la recomendación y seguían el enlace,
eran redirigidos al banco de alimentos Feeding America, para ayudar a personas
necesitadas.
En cuanto a Scotter Braun, Taylor ya mostró su malestar cuando este adquirió el sello
Big Machine y, por tanto, se hizo con los derechos de los antiguos trabajos de la
cantautora.
Este año, cuando lanzaron un álbum de sus antiguas actuaciones en vivo, Swift explicó
en Instagram que el lanzamiento no contaba con su consentimiento: “en mi opinión,
solo es un caso más de avaricia sin vergüenza en tiempos del coronavirus. Tan vulgar
como transparente”.
Número uno “folklórico”
En un solo día, ‘Folklore’ cosechó más de
80 millones y medio de reproducciones
en Spotify, arrebatando el récord femenino
de la plataforma a Ariana Grande, y a
Juice Wrld el de mejor estreno en streaming
en 2020.
Consiguió récords similares en Apple
Music y Amazon Music. Y logró lo propio
con la canción “Cardigan”, debutando
también en el número uno de Billboard
Hot 100, convirtiéndose en su sexto single
número uno de la popular lista.
En menos de dos semanas, ‘Folklore’ ha
logrado más de 500 millones de reproducciones
en internet, y ha alcanzado el
número uno en 85 países. Lleva más de
2 millones de copias vendidas y, según la
propia discográfica, 1,3 millones se vendieron
en las 24 primeras horas desde el
lanzamiento. Así, a falta de estadísticas
oficiales, es muy probable que se trate del
álbum más vendido de 2020.
Un éxito que la mantiene en la trayectoria
de los últimos cuatro años porque, desde
2016, sus álbumes han sido siempre los
que cosechaban las tres mejores semanas.
Asimismo, las opiniones de la crítica musical,
que asociaba a Swift a un estilo más
comercial, alaban este último trabajo y
algunos lo consideran un trabajo mucho
más independiente, serio e incluso experimental.
Con todo, el disco se ha visto envuelto en
una polémica… O, más bien, su diseño.
Amira Rasool, fundadora de la marca de
ropa de diseñadores africanos The Folklore
comentó por Twitter que el “merchandising”
del álbum le recordaba al de
su logotipo.
Ante lo que Taylor Swift, además de cambiar
el diseño, se disculpó con un donativo:
“admiro el trabajo que haces y me
siento feliz de contribuir a tu empresa y
apoyar al consejo Black in Fashion con
una donación”, dijo. Un gesto que fue
agradecido por Raasol.
Sobre la razón de este lanzamiento sorpresa,
Swift se explicó en Instagram: “la
mayoría de cosas que tenía planeadas para
este verano no han sucedido… Pero hay
algo que no tenía previsto que sucediera:
mi octavo álbum de estudio, ‘Folklore’”.
35