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ECR 268 DICIEMBRE

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Pensamientos Eticos

BERNARD COSTER

Los valores según el evangelio

El evangelio confirma los mismos valores y

virtudes que la ley, que en realidad son los

principios morales inherentes a la creación

y que conocemos o debemos conocer también

por nuestra conciencia. Son estos valores:

temor del Señor, amor de la vida, libertad,

gratitud y amor, justicia y derecho

etc. Sin embargo, con esta diferencia entre

la ley y el evangelio: la ley nos condena a

causa del pecado, pero el evangelio nos

promete perdón de nuestros pecados a causa

del sacrifico de Cristo. Es esta liberación

de la condenación de la ley que abre un

nuevo espacio para obedecer a Cristo, imitando

su ejemplo que ha dado por su muerte

y por su resurrección. Incluso, trasforma

la ley, convirtiéndola en la ley de la libertad.

Es la misma ley, pero ya no la tememos

como un poder hostil que nos disciplina y

condena, sino la amamos porque sabemos

que es para nuestro bien. Deseamos obedecerla

voluntariamente para agradar a Dios

y hacer bien al prójimo y lamentamos cada

momento en que no la hemos respetado.

El evangelio de Jesucristo

El evangelio en primer lugar es el mensaje

profético predicado por Juan el Bautista,

que - por cierto - corresponde con el uso

pedagógico de la ley. Su contenido es: arrepentíos

porque el Reino de los cielos se ha

acercado. Este mensaje fue transformado

por Jesús y los apóstoles en el evangelio del

Reino de Dios y del Nombre de Jesús (Mateo

4.23; 10.7; Hechos 8.12). Todo el Nuevo

Testamento es el desarrollo de este mensaje,

que podemos resumir en tres palabras:

Arrepentimiento. En el Antiguo Testamento

en primer lugar es el abandono de y la renuncia

a los ídolos y la vuelta al Dios de los

En la Calle Recta

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