Autobuses No. 140

“Nosotros estábamos conscientes que teníamos
una responsabilidad social muy importante y ese
compromiso sigue siendo el contenido transmitido
en los sistemas de proyección para autobuses”
Los Gramer desde la raíz
Al hacer un recorrido al pasado, Sergio
nos cuenta sus orígenes dentro de una
familia numerosa, que nos llevan del
viejo continente hasta la región noroeste
de la República Mexicana: “Nuestro apellido
proviene de mi abuelo Gramer que
procedía de Alemania, vino y se asentó
en las zonas mineras de Durango. Yo fui
el antepenúltimo de los hijos, tenía hermanos
mayores, hermanos menores y
lo que no se le ocurría a uno se le ocurría
a otro. La verdad, somos una familia
muy unida”.
En su infancia, sus mejores recuerdos
giran en torno a la convivencia familiar
y el fútbol callejero. “Chihuahua era un
lugar muy tranquilo, en donde conocías
a todos los vecinos y teníamos muchos
amigos, que en realidad ni los necesitábamos
con tantos hermanos que éramos.
A veces hacía falta algo de soledad porque
en casa siempre había gente, niños,
adultos, pues éramos un grupo bastante
grande con mucha diversidad y distintos
intereses. Los domingos era de levantarse
a desayunar, ir a misa, salir a comer
con la familia y posteriormente reunirnos
todos para ver televisión o para los juegos
de mesa, siempre en un plan muy
familiar; entre semana si te la pasabas
con los amigos”.
Los valores con los que Sergio cuenta
como empresario, fueron gracias a las
estrictas enseñanzas de dos figuras clave
en su formación, su abuelo y su padre,
quienes le inculcaron desde una edad muy
temprana las bases del trabajo duro que
marcaron su vida laboral. “Mi papá era cuadrado,
me decía: ‘Tienes que andar derecho,
ser honesto, recto’, y yo creo que esos
valores te dan mucho en un futuro. De ahí
obtienes la confianza de la gente que está
en tu entorno, nada te va a ser regalado, tú
tienes que ofrecer algo a cambio, no esperar
a que te lleguen las oportunidades por
sí solas sino ir a buscarlas, porque tú tienes
la capacidad de hacer mejor las cosas cada
día. Mi mamá me transmitió la unión familiar,
el cariño que nos dio y la fe religiosa
que me inculcaba al decir: ‘Dios siempre
te va a dar, agárrate de él ante cualquier
situación’. Creo que de mis padres obtuve
lo mejor de cada uno”.
19