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La condición humana

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A V E C E S L A G E N T E N O Q U I E R E E S C U C H A R L A V E R D A D P O R Q U E N O

Q U I E R E Q U E S I S I L U S I O N E S S E V E A N D E S T R U I D A S . - N I E T Z S C H E

LA CONDICIÓN

HUMANA

E L S I G N I F I C A D O , S E N T I D O , L O C O R R E C T O Y

L O V A L I O S O D E L A V I D A H U M A N A

A N D R E A M É N D E Z | V I R I D I A N A E U D A V E


Prólogo.

¿Qué significa ser

humano?

Para Aristóteles, ser humano significa

tener acceso al logos, la inteligencia

universal que recibimos por el

pensamiento y expresamos con la

palabra. No somos seres racionales,

somos seres que tienen la capacidad

de recibir información que otros seres

no pueden recibir, y si la reciben no

tienen la capacidad de procesarla en

la manera que lo hacemos nosotros.

De ser así, sus entornos de vida

lucirían muy distinto.

¿Cómo deberíamos

vivir?


Para la mayoría de los filósofos que valoran el potencial del

razonamiento humano (Sócrates, Platón, Aristóteles, Descartes, Kant,

Nietzsche, Heidegger, entre otros, ser humano es una responsabilidad

que debe asumirse para vivir con dignidad y justicia al potencial y la

oportunidad que significa. De alguna manera se percibe en ellos una

crítica hacia la vida humana que no adquiere consciencia de sus

capacidades y no se gobierna a sí misma. Por gobernarse a sí mismo se

entiende:

asumir la responsabilidad de quienes somos, qué hacemos,

qué consideramos importante o valioso, qué creemos y

cómo definimos lo que significa ser.

Es complicado formular una respuesta a la

pregunta ¿Qué significa ser humano? Porque

de la misma manera que Hume argumenta que

no podemos saber si todos los cuervos son

negros, salvo que experimentáramos a todos los

cuervos posibles, de igual forma sería necesario

conocer a todos los humanos posibles para

identificar cuáles son las características

generales que todos comparten.

De otra manera, ¿cómo

podemos saber si lo que

pienso que significa ser

humano es realmente lo que

significa ser yo?


O lo que significa ser humano dentro de una cultura específica o

dentro de un contexto histórico particular. Sin embargo, a pesar

de esta dificultad,

¿Qué pregunta podría ser más importante?

Quizás piensas a primera escucha que definitivamente hay

preguntas más importantes que esta, pero en realidad,

¿Qué podría acercarnos más a un mundo

de equidad, justicia, sentido, respeto, que

la consciencia de nuestras condiciones

ontológicas (o existenciales) en el

mundo?

Es decir, reconocernos como seres vivos,

sintientes y pensantes y asumir la

responsabilidad de nuestras vidas.


¿Cuál es el peso de ser humano?

Tener la capacidad de hacerse

preguntas, de cobrar

consciencia de las

circunstancias

que

experimentamos y las

limitantes que tenemos para

obtener respuestas. Esto

puede agobiarnos y hacernos

sentir el peso de la

incertidumbre.

Slavoj Žižek, un filósofo

contemporáneo de origen

esloveno considera que el

principal papel de la filosofía es

abrir nuestro ojos al hecho de

que la realidad es mucho más

compleja de lo que pensamos y

que tenemos frente a nosotros

una gran tarea:


“I despise the kind of book which

tells you how to live, how to make

yourself happy! Philosophers have

no good news for you at this level! I

believe the first duty of philosophy

is making you understand what deep

shit you are in!” (nd)


Si algo han intentado

hacer gran parte de los

filósofos que hemos

conocido hasta ahora

es

hacernos

conscientes de la

realidad de nuestra

condición que la

cultura y la sociedad

niegan y censuran, o

que la mayoría de

nosotros preferimos no

ver porque no sabemos

cómo enfrentarla.

Sin embargo, es

inevitable y tarde o

temprano nos obligará a

prestarle atención. Žižek

es bastante sombrío, pero

otros filósofos nos

brindan alternativas más

amigables que nos

empiedran y nos

motivan a tomar el

asunto en nuestras

manos y formular

nuestras propias

respuesta a las grandes y

a aveces, abrumadoras

preguntas por el sentido

de la vida.


Hay respuestas grandes como la del Budismo

que considera que ser humano es un

privilegio. No porque represente una

condición superior a otras formas de vida en

el sentido de ser mejor o más valiosa porque

otras formas de vida son menos importantes.

Sino más bien porque dentro de sus

creencias sobre la vida y su sentido (su

antropología) ser humano representa una

oportunidad que ninguna otra forma de ser

en la tierra tiene:

la posibilidad de avanzar en un camino

espiritual que nos acerque cada día más a la

liberación del ciclo continuo de reencarnación

que ellos llaman Samsara.

De acuerdo al Budismo estamos ahora aquí, en un mundo

imperfecto, donde el dolor y el sufrimiento son inevitables, pero

existe otro lugar, otro mundo completamente metafísico (como el

mundo de las ideas de Platón) donde la perfección, la felicidad, la

armonía y el amor son la norma.

¿Porqué estamos aquí y no allá?


Porque debemos aprender a amar a todos

los seres sin excepción y para ello, debemos

liberarnos de todas las perturbaciones

mentales que se convierten en un

obstáculo para hacerlo: la envidia, el odio,

la apatía, el egoísmo, los celos, el juicio.

¿De dónde nace el amor?

De la paciencia

y la buena voluntad.


Definitivamente una respuesta interesante y hasta cierto punto,

positiva, pero no siempre fácil de asumir o comprender, y

fundamentalmente imposible de comprobar.

Así que por ahora, seremos

menos ambiciosos y

tomaremos prestada la

sabiduría de Wisława

Szymborska, una poeta polaca,

ganadora al Nobel de

literatura en 1996, quién en

su poema Bajo una pequeña

estrella escribe con sencillez y

fuerza:

“Que me disculpen las

grandes preguntas

por las pequeñas

respuestas”.

Así pues, este pequeño esfuerzo presenta la mejor respuesta que

en este momento podemos dar.


¿Qué significa ser humano?

Antropología filosófica

Ser humano es pertenecer a una especie

del universo que es capaz de ir más allá

de simplemente estar y pasar por este

mundo mediante un ciclo natural de vida

como los demás animales hasta donde

sabemos, que no dejan o realizan algo

trascendental.

En otras palabras, puede tener una vida en

la que se desarrolle a parte de

simplemente sobrevivir por medio del uso

de sus instintos, dado que puede utilizar

su conciencia para la reflexión de sus

acciones.

De la misma forma, es un ser

capaz de razonar y a partir de

ese razonamiento tomar

decisiones acerca de lo que

quiere para su vida y la forma

de lograrlo; es consciente de sí

mismo y de los demás, y posee

una ética, que se combina con la

moral de la sociedad en la que

vive, que marcan parte del

contexto en el que se

desarrollará y las ideas que se le

inculcarán que debe cuestionar

por el simple hecho de ser

humano.


Se integra a su entorno a su

propia manera, no es simplemente

una parte más del ecosistema que

sigue un ciclo, tiene la

oportunidad de aprovechar este

ecosistema de acuerdo a sus

propósitos y para sus beneficios;

creando e innovando para mejorar

sus circunstancias y vivir con

mayores comodidades.

El ser humano significa tener la obligación de buscar su sentido

de vida cuestionándose lo que le han dicho, pues tiene la

capacidad de razonar, de distinguir lo bueno de lo malo, y debe

encontrar mejores respuestas a las grandes preguntas, es decir, el

ser humano debe filosofar.

Así pues, le da un

valor distinto a

diferentes

aspectos de la

vida y a partir

de ellos decide

cómo va a

vivirla.


Según el filósofo alemán Josef

Pieper:

"filosofar es un acto

que trasciende el

mundo en el que se ha

de funcionar, rendir,

competir. De vez en

cuando conviene

distanciarse de todo

eso: no fijarse

solamente en lo

inmediato y agobiarse

con ello, sino mirar en

otra dirección".


¿Qué le da sentido a la vida humana?

Existencialismo

Lo que le da sentido a la vida humana es, en conjunto,

la creencia de que existe la felicidad y que esta es

capaz de hacernos vivir una vida en completa

plenitud.

Cada quien se pone

propósitos en la vida de

acuerdo a lo que considera

que le dará la tan ansiada

felicidad, realiza planes en

torno a esos propósitos

para poder lograrlos y

enfoca sus acciones, que

posiblemente en el

momento no le dan

felicidad, porque confían

en que todo valdrá la pena

cuando la alcancen.

Sin embargo, luchar por obtener la felicidad no suele ser simple, ya

que ésta nunca está garantizada; habrá quien casi no la busque y

la alcance, quien la busque mucho y la alcance, quien la busque

toda su vida, pero no la pueda encontrar e incluso quien no la

busque y la obtenga.


Es por lo mismo, que la vida

empieza a carecer de sentido

cuando perdemos lo que nos

daba felicidad o se vuelve

algo inalcanzable, ya que el

ser humano entra en una

crisis por haber perdido el

sentido de su vida y a menos

que encuentre pronto uno

nuevo, algo nuevo que le dé

la felicidad o ganas de luchar

por ella; deja de importarle

su vida, cae en una fuerte

depresión y es capaz de hasta

cometer suicidio, porque ya

nada lo sostiene en este

mundo.

Paul Sartre dijo:

"Lo único que sabemos con certeza de la

existencia es que algún día no existimos y

algún día no existiremos de nuevo".

Por lo que hay que

darle un sentido a la

vida por lo que hay

ahora

principalmente, y si

te causa

tranquilidad,

otórgaselo por lo

que vendrá después

de la vida.


La gente está tratando de encontrar quiénes son, y a medida que

van viviendo, tomando decisiones, recolectando experiencias,

sumergiéndose en otras creencias y perspectivas, es como van

moldeando sus caminos a la felicidad.

Y estos son varios, ya que la

vida está compuesta de ínfimas

felicidades, unas más duraderas

que otras, pero que son

otorgadas por diferentes

decisiones responsables que

tomamos. .

Muchas personas se aferran a culturas,

religiones, o personas que les otorgan la

felicidad y un sentimiento de tranquilidad, lo

que le otorga un sentido a su vida y ganas de

levantarse cada mañana. Y cuando alguno de

estos factores desaparece, buscará a otra cosa

a la qué aferrarse para intentar darle un

sentido a su existencia, y somos libres de

elegirlo o de no elegir ninguna dependencia

en absoluto.

No hay ninguna respuesta certera que

nos pueda decir qué le da el sentido a

nuestra vida, pues cada quién busca el

suyo.


¿CÓMO SE DEBE VIVIR?

Ética

La forma más adecuada de vivir, es

buscando alcanzar la felicidad

que le brindará un sentido a todo lo que

realicemos; pero al mismo tiempo que

nos enfocamos en lo anterior, debemos

respetar a las personas con las que

convivimos en nuestra sociedad.

Por su parte, vivir buscando alcanzar la felicidad, con un sentido,

hace que te esfuerces y puedas tolerar muchas de las

adversidades con las que nos encontramos a lo largo de nuestra

vida; todo con base en que tenemos un propósito, que valdrá la

pena y mediante el cual alcanzaremos una gran recompensa

como lo es la felicidad.

De esta forma seremos productivos,

podremos aportar a la sociedad

para que la humanidad siga

avanzando y posiblemente algún

día alcancemos la plenitud. Solo

conocemos el ahora y a pesar de

que podemos confiar o no en una

vida después de la muerte, lo

seguro es lo que estamos viviendo,

por eso debemos aprovecharlo y

buscar vivirlo de forma que nos

haga sentir satisfechos siempre y

cuando no afecte a terceros ni a ti.


Por el otro lado,

respetar a los demás es

necesario para que

podamos concentrarnos

en los planes para ser

felices; debido a que si

no hay respeto entre

habitantes cercanos, las

hostilidades empezarán

a surgir,

lo que significaría vivir en constante conflicto con los demás y

en un estado de alerta por lo que pueda pasar, que no es una

vida plena. De esta forma, en lugar de vivir, te concentrarías en

sobrevivir, lo que no te permitiría estar enfocado en llegar a

experimentar la felicidad; así la vida empezaría a carecer de

sentido y la plenitud mediante la felicidad se convierte en algo

inalcanzable.

Sin embargo, no hay que seguir

estas reglas porque nos dijeron que

hay que seguirlas, sino porque nos

hemos vuelto conscientes de lo que

realmente significan y por qué es

recomendable seguirlas.

Cabe mencionar que, si

bien la religión ha dado

una respuesta a esta

pregunta dando una serie

de pautas que hay que

hacer y qué no hay que

hacer para poder alcanzar

la vida eterna, hay un

punto donde todas

convergen, y eso es el

respeto.


Cuestionar por qué se escogieron esas reglas y si

realmente al obedecerlas te brinda la tan anhelada

satisfacción, y si no la brindan, buscar unas a tu

conveniencia.

Tal como lo plantea Aristóteles:

es

necesario

pensar,

tener un

criterio,

conocernos,

saber

conducirnos,

ser virtuosos, pues un

hombre virtuoso siempre

hará lo correcto.


¿Qué es lo valioso de la vida?

Axiología

Principalmente, en la vida lo más valioso es

la felicidad

porque esta o la búsqueda de esta,

es lo que le da un sentido a nuestra

vida, como se mencionó

previamente; es por ello, que

aquello que brinda esta felicidad

será algo valioso en nuestras vidas,

al ser lo que nos sostiene en este

mundo.

Asimismo, eso que nos la otorga lo podemos considerar valioso

de la misma manera, ya sea las experiencias, las personas con las

que convivimos, o los objetos. Por consiguiente, como cada quien

tiene su propia forma de ser feliz, lo valioso dependerá de la

persona. Hay muchas formas distintas de alcanzar la felicidad; así

que diferentes cosas, personas, plantas o animales nos pueden

ayudar a conseguirla y eso será lo valioso para nosotros, ya que

nos brinda satisfacción.


Por ejemplo, habrá para quien la familia

sea lo más importante y por eso toda su

vida busque formar una familia y estar

cerca de sus otros familiares, porque para

él lo más valioso son estas personas y

ellas le brindan mucha felicidad.

Por el contrario, podemos

encontrar personas para las

que lo valioso es el dinero,

porque les da poder social y

económico con el que pueden

comprar lo que les apetezca y

así son felices.

Otras personas, puede que para ellos

encontrar la verdad de la vida y

existencia sea lo más importante; o

confiar en un ser supremo que los guía y

al que deben obedecer con la promesa de

una buena vida después de la muerte; y

lo valioso para ambos casos es la idea que

tienen.

Todas son formas de ser feliz en la vida y están bien, porque

siguen lo que en realidad los hace plenos y llena su vida; aunque

estas diferentes formas de verla. Por lo general, pueden ser

difíciles de aceptar para los que tienen otra opinión, ya que les

cuesta ser empáticos y aceptar que lo que para ellos es valioso,

no necesariamente lo es para otra persona.

La gente podría vivir con menos conflictos, al aceptar que cada

quien puede encontrar su felicidad en distintos lugares y con

cosas, que pueden tener un valor muy diferente para cada

persona.


Y es de suma importancia respetar lo

que es valioso para cada uno de

nosotros, pues lo valioso de otra persona

puede que no te brinde satisfacción,

entonces ¿para qué ocuparse y

preocuparse por ello? Mejor buscar lo

valioso para tí.

Sin embargo, nada de lo que consideramos valioso sería si no

estuviéramos aquí para otorgarle ese valor, por lo que tiene

sentido pensar que lo más valioso que tenemos en la vida es la

vida misma, y por eso es de suma importancia cuidarla y darle la

importancia que se merece.

Tal como dijo Nietzsche:

"La vida del ser

humano es un

llamado a la

libertad, pero

debemos tener el

valor de

trabajar por

ella".


Conclusión

Conclusión

Si aceptáramos el existencialismo del que habla Nietzsche,

permanecería con nosotros el concepto de lo bueno y lo malo,

pues aunque ya no existe la recompensa de la vida eterna al

comportarse bien en vida, sentiríamos satisfacción ante la

realización de ciertas acciones y culpa ante otras, pues eso es

inherente al ser humano independientemente de su religión.

Y lo que le daría significado a nuestra vida

sería el que cada persona le otorgue de

acuerdo con sus ideales, sus decisiones y lo

que lo haga sentir feliz y pleno en el aquí

y en el ahora, pues se habrá terminado la

idea de que hay algo después de la muerte.

Así, se enfocaría en aprovechar la vida, no

abstenerse de algunas cosas que la hagan

feliz y que la sociedad no se las permita

por las tradiciones, y no se preocuparía

por si vendrá un castigo después de su

vida en la tierra.

Si hoy aceptamos que no hay

razones superiores ni divinas,

que sólo estamos aquí ahora y

algún día no vamos a estarlo,

una alternativa sería caer en el

nihilismo, es decir, tomar la

postura de que nada importa, de

que nada tiene valor o sentido y

por lo tanto caer en el

sinsentido y en la depresión.

Sin embargo, también

hay otro camino. La

segunda posibilidad sólo

será alcanzable por

aquellos que logren ir

más allá de la nada y

sobrevivían la angustia

del saber que no hay

nada más allá.


Si rechazamos la moral impuesta por

la religión o por la sociedad, es decir,

si Dios no puede castigarnos y la

autoridad no puede multarnos o

meternos a la cárcel aun así sigue

importando cómo nos tratemos los

unos a los otros, pues el vivir en

sociedad no termina aunque

rechacemos esa idea. Y es de suma

importancia seguir conviviendo en

armonía con los demás, de otra

manera no existiría un orden, un

autogobierno y se haría una sociedad

anarquista lo que nos llevaría al

desastre. De esta manera, lo que nos

motivaría a hacer el bien sería la

esperanza de seguir teniendo una

sociedad funcional y poder vivir así

tranquilamente, sin el temor de que

alguien más nos pueda hacer daño.

Nietzsche afirma según su filosofía, que

aquel hombre que se atreva a negar a Dios y

en lugar de ser sometido por la nada, logre

crear por sí mismo una respuesta de valor

para la vida. Ese hombre, se habrá liberado

de la dependencia que sentimos de creer en

algo superior a nosotros mismos, él mismo se

convertirá en un super hombre

(Übermensch). Sin embargo, al principio caer

en el nihilismo es inevitable, y lo importante

será salir de él y volver a encontrar el

sentido de la vida.


Por lo tanto, se puede decir que el ser humano por el simple

hecho de serlo está obligado a encontrar el sentido de su vida, lo

valioso que hay en ella y la manera de hacerlo correctamente

por medio de la filosofía.

Cada ser humano hallará algo diferente

pues todos somos diferentes, todos

hacemos filosofía de diferente manera y

por lo tanto no hay una respuesta

universal correcta o incorrecta, pero

cada quien encuentra la que más le

satisfaga y la que mejor le haga creer

que lo que hace es correcto.

Todos los seres humanos estamos rodeados de tradiciones que

nos enseñarán la mejor manera de vivir de acuerdo con ellas, y

serán impuestas por la sociedad. Pero es responsabilidad de cada

uno cuestionar esas formas de vida, por qué se dice que eso es lo

correcto, por qué se han clasificado las acciones en lo que se debe

hacer y lo que no, a quién afecta o no el hecho de seguirlas.

Para así, encontrar

nuestra mejor manera de

vivir, no creer por creer

o seguir por seguir, sino

porque realmente estás

convencido de que ese es

el mejor camino para

encontrar la felicidad.

No está mal creer en lo que la sociedad nos ha inculcado, siempre

y cuando lo hayas cuestionado y aceptado (o negado), según te

convenga. De esa manera encontrarás tu verdad sin que tus

ilusiones se vean destruidas.


LA CONDICIÓN HUMANA

Es un producto editorial que busca dar

respuesta a las grandes preguntas que

corroen a la humanidad. Por ejemplo: ¿Qué

significa ser humano? ¿Qué le da sentido a la

vida humana? ¿Cómo se debe vivir? ¿Qué es

valioso en la vida? También incluye

perspectivas de filósofos como Nietzsche,

Sartre, Aristóteles, y demás que han

intentado responder estas preguntas. Sin

duda, esta editorial es una travesía por las

profundidades del intelecto humano.

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