Revista nuestra iglesia- Julio

JULIO 2021
Motivación del mes
Una oportunidad única
Realidad teológica pastoral
Convocados a una amistad de pensamiento
Orientación
Asamblea Eclesial para América Latina
y el Caribe
El aporte de los presbíteros en la Asamblea
Eclesial Latinoamericana
Actualidad
Ayuda a la Iglesia que Sufre: solidaridad
en tiempos de pandemia
Virgen del Carmen: Madre y patrona
de Chile
Reflexión
Hacernos cargo de nuestros dolores
para soñar la Iglesia que queremos
iglesiadeconcepcion.cl

EDICIÓN
1
“Una oportunidad única”
2
Convocados a una amistad de
pensamiento
Asamblea Eclesial para
América Latina y el Caribe
El aporte de los presbíteros
en la Asamblea Eclesial
Latinoamericana
3

4
Actualidad
Ayuda a la Iglesia que Sufre:
solidaridad en tiempos de pandemia
Virgen del Carmen: Madre y patrona
de Chile
Hacernos cargo de nuestros
dolores para soñar la
Iglesia que queremos
5
Reflexión
6
Vicaría
La importancia del
acompañamiento espiritual
en tiempos inciertos
Alta participación de colegios
en inducción sobre la Asamblea
Eclesial de América Latina y el Caribe
¿Cómo viven la fe los jóvenes de hoy?
7
Fundación

01
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CONTENIDOS
02
Motivación del mes
Una oportunidad única
Pág 03 y 04
Realidad teológica pastoral
Convocados a una amistad de pensamiento
Pág 05, 06,07, 08, 09 y 10
Orientación
¿Cuál es la novedad para los agentes
pastorales en las actuales circunstancias?
Pueblo de Dios que peregrina en la Arquidiócesis
de la Santísima Concepción
Pág 11,12,13 y 14
Pág 15,16 y 17
Actualidad
Ayuda a la Iglesia que sufre Pág 19,20 , 21 y 22
Virgen del Carmen Pág 23, 24, 25 y 26
Reflexión
Hacernos cargo de nuestros dolores para
soñar la Iglesia que queremos Pág 28, 29, 30, 31 y 32
Vicaría Pastoral de Educación
La importancia del acompañamiento espiritual
en tiempos inciertos Pág 33, 34 y 35
Encuentro diferentes estamentos
Pág 36, 37 y 38
Fundación Educacional
¿Cómo viven la fe los jóvenes de hoy?
Pág 39, 40, 41 y 42
CONSEJO DE REDACCIÓN
Mons. Fernando Chomali,
Pbro. Mauricio Aguayo
Cristóbal Cifuentes
Alejandro Montero
Sandy Cantelmi de Tirado
Sofía Peña
Javiera Barrera
REDACCIÓN
Caupolicán # 491 / Casilla 65-C
Fono: (41) 2626 129 / Chile,
Concepción
DIAGRAMACIÓN Y DISEÑO
Bianca González
NUESTRA IGLESIA EN LA WEB
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Radio 103 AM
Iglesia Concepción
radiochilenaconcepción.cl

03
MOTIVACIÓN DEL MES
Una oportunidad única
El Santo Padre nos ha invitado a participar de una instancia única
por su extensión, profundidad y novedad. Se trata de la Asamblea
Eclesial de América Latina y el Caribe, una reunión del
pueblo de Dios, donde se reza, se habla, se piensa, se escucha y
se dialoga, con el propósito de discernir los tiempos que nos ha
tocado vivir y buscar la voluntad de Dios para ver de qué modo
seguir anunciando el Evangelio.

04
La invitación es a que admiremos lo que
tenemos, pero que también seamos
muy lúcidos para reconocer lo que
hemos de cambiar. La cultura actual
debe ser mejor conocida para ver de qué
manera podemos volver a fecundar la
sociedad con la fuerza del Evangelio.
Para el Papa Francisco esta Asamblea
Eclesial será un momento de escucha, de
diálogo y de encuentro. En esa línea,
creo que tenemos mucho que aprender.
La Asamblea eclesial es una oportunidad
única para conocer otras realidades,
familiarizarnos con los deseos y necesidades
del otro. Es un buen ejercicio espiritual
para reconocer que el todo es más
que las partes, como suele decir el Papa.
La Asamblea es una oportunidad para
dar un paso al frente y mirar con mayor
profundidad lo que nos rodea, ampliar
la mirada de la vida eclesial, y sobre
todo, dejarnos sorprender y asombrar
por el otro.
Los invito a que participen de esta
Asamblea, que busquen información
de forma exhaustiva, y que se sumen a
este proceso que nos invita a la
reflexión y a la fraternidad, a través de
esta instancia eclesial.
Esta asamblea es una nueva oportunidad
que se nos regala para salir de nuestras
realidades. Es el tiempo de mirar
más allá de nuestras parroquias, colegios,
capillas, universidades, movimientos
y acción social.
Mons. Fernando Chomali
Arzobispo de Concepción

05
Realidad teológica pastoral
Convocados a una amistad de pensamiento
Ante la cercanía de la Asamblea Eclesial
de América Latina y el Caribe, a realizarse
en México entre el 21 y 28 de noviembre
de este año, nos atrevemos a proponer
algunas reflexiones, principalmente,
sobre lo que implica esta reunión sinodal,
inspirados en la fe cristiana. Recordamos
que esta Asamblea tendrá un
carácter sinodal y no sólo episcopal, por
lo que en ella podrá participar todo cristiano
en un diálogo que se ha propuesto
como objetivo ser representativo, inclusivo
y participativo.
Recordando la encíclica Caritas in veritate,
del papa emérito Benedicto XVI,
quién, nos invita a reflexionar sobre el
principio de acción que debería mover al
cristiano, la caridad en la verdad (CV6),
sigue la tradición de la Doctrina Social de
la Iglesia, que lo presenta como orientación
para el desarrollo social de acuerdo
a las nuevas exigencias globales, exigencias
en la que todos estamos insertos.
La importancia de esta asamblea no es
sólo comprender las tareas que debe
asumir la Iglesia en lo venidero, de alguna
manera, también es una cooperación al
discernimiento del mismo Dios-Trinidad.
En la Iglesia, Dios y el hombre colaboran,
piensan en conjunto y deliberan entre sí.
La asamblea seguramente nos ayudará a
nosotros para entender, pero también
ayudará a Dios a discernir mejor en cómo
ayudarnos y en cómo aumentar las
ganancias de salvación de su heredad.
Dios necesita del hombre para ayudar al
hombre. Por lo tanto, necesita de nuestro
discernimiento para enriquecer su propio
discernimiento.

06
Necesita de nuestro conocimiento de la
historia para que su gracia pueda entrar
en ella. Afirmar que ayudamos al mismo
Dios no implica ninguna soberbia ni herejía
porque sería indigno para el hombre
no cooperar en su propia salvación.
Además, ¿se pude ser efectivamente
amigo de alguien a quien no podemos
ayudar? Si el mismo Dios quiso ser nuestro
amigo, seguramente, es porque le
agrada y le enriquece nuestro consejo. Al
respecto, el mismo san Pablo decía que
somos co-operarios de Dios (1 Cor 3, 9),
juntos estamos trabajando para el buen
fruto de una misma obra. Cuando no hay
cooperación, no queda más que la sumisión,
pero nosotros no somos esclavos,
sino amigos, socios del mismo emprendimiento
de Dios (Jn 15, 15).
Esto nos permitiría también reafirmar
que no existe verdadero pensamiento, si
no es un pensamiento compuesto y
co-instituido. Sólo pensamos bien cuando
pensamos con otros. Sólo pensando con
otro logro comprender mi propio pensamiento.
No habría lógica sin una originaria dialógica.
Por ello, en esta asamblea no
vamos simplemente a decir lo que sabemos,
vamos, más bien, a aprender en la
conversación con otros. Harold Bloom,
destacando los diálogos de don Quijote
con Sancho, a diferencia de los soliloquios
de Hamlet, resaltaba que ambos
verdaderamente se escuchaban, realmente
aprendían y se enriquecían en
sus conversaciones.
En sus diálogos sucedían cosas, ellos
cambiaban, ya no podían ser los
mismos de antes. En este sentido, componer
con otro el pensamiento es estar
disponible para un acontecimiento
impredecible, estar disponible para que
surja un pensar que realmente cambie
mi vida. Quien entra a un diálogo apertrechado
de ideas ya hechas y rígidas
que no pretende cambiar nunca entró a
diálogo alguno. Lo que él llama diálogo
no es más que una buena ocasión para
escucharse a sí mismo.

07
Por la misma razón, todos los bautizados
pueden prolongar y elaborar el pensamiento
de Cristo, todos son, en estricto rigor, teo-logos,
todos tienen el pensamiento de Cristo en
la medida en que piensan dentro de la amistad
cristiana. Por ello, Evagrio Póntico podía
decir: “Eres teólogo si rezas”. Si rezas -es decir,
si co-instituyes con Cristo el pensamiento
(Logos)-, ya estás pensando como piensa Dios
(Theos) en la Trinidad, ya que Padre, Hijo y
Espíritu Santo co-instituyen permanentemente
su ser constituyendo su pensamiento. Ellos
no son repetidores de verdades absolutas y
antipáticos ‘sabelotodo’, sino que quieren
aprender siempre de lo que piensan en comunión,
ellos nunca se cansan de aprender uno
del otro, por lo mismo, se sorprenden a
menudo.
La sorpresa de Dios es la señal de que conoce
y de que conoce en comunión. Por lo mismo,
al Dios-Trino le agrada escuchar al hombre
porque también aprende de él, de su pensamiento
compuesto con otros. La alegría más
grande de un padre es aprender algo de su
hijo. Esta es la constatación de que su hijo ha
trabajado la herencia de pensamiento que le
ha dejado y que ha sabido hacerla fructificar.
Dios se alegra más de un pensamiento del
hombre que de lo que se sorprende con todas
las constelaciones de estrellas. “Habrá más
gozo en el cielo por un pecador que se arrepiente”
(Lc 15, 7), es decir, por un hijo que no entierra,
sino que trabaja la herencia de pensamiento
de su padre y se convierte, o sea,
cambia su pensamiento (metanoia).
Jesús, por ejemplo, logra enriquecer su
pensamiento y sus planes con la respuesta
de la mujer cananea, hasta el punto que le
responde: “Mujer, ¡qué grande es tu fe!” (Mt
15, 28). Hay que desconfiar de todo aquel
que ya no quiera aprender y enriquecer su
pensamiento, aunque sea un dios. La
asamblea, por lo tanto, es una oportunidad
de pensar entre nosotros tal como
piensa Dios en su Trinidad, es decir, pensar
y conocer al interior de una amistad. La
verdadera sabiduría es la amistad.
Los pensamientos que surjan de esta
asamblea no serán simples consensos, al
menos si entendemos el consenso como
un mero acuerdo intelectual. Cuando
hablamos de pensamiento no hablamos
sólo de ideas o de teorías. El pensamiento
humano es siempre pensamiento de un
cuerpo y el cuerpo es la puesta en carne
de un pensamiento. Tal es su unidad que
podríamos hablar de un pensamiento-cuerpo.
Ahora bien, si este pensamiento
es compuesto con otro, generado en
alianza, nuestro propio cuerpo reflejará
esa comunión ¿No refleja la postura
corporal de confianza de un niño al jugar
el pensamiento que ha compuesto con
sus padres y hermanos? ¿No refleja su
desconfianza extrema el daño que alguien
le ha hecho? En el cuerpo queda memoria
del éxito o fracaso de las alianzas que
hemos hecho con otros.

08
Por estas mismas razones, Cristo no nos
dejó para hacer memoria de él solamente
unas verdades o unos mensajes o unos
valores. Cristo dejó su propio cuerpo-pensamiento,
es decir, se dejó a sí mismo. La fe
cristiana no es en primer lugar unas verdades
que entender, sino una persona a quien
conocer.
Tal como decía Camus: “Si Dios llega a conmoverme
es por su rostro humano”. Para
responder la pregunta sobre qué es la
verdad, primero debemos responder a la
pregunta sobre quién es la verdad. San
Agustín decía: Quid est veritas? Vir qui adest.
“¿Qué es la verdad? Un hombre que ad-viene”.
Cristo no vino sólo para hacerse entender,
sino, sobre todo, para que probáramos
los frutos de su amistad hasta el fin de los
tiempos. Esto se ve reflejado en que ha
dejado su pensamiento-cuerpo en la eucaristía
y en sus testigos reunidos en la Iglesia.

09
El cuerpo de Cristo es el nuevo tabernáculo
del encuentro, la nueva arca de la alianza, el
acontecimiento donde Dios se hace imputable
por sus frutos y es realmente capaz de
cambiar nuestra vida, pues sólo la carne
puede salvar a la carne.
Tertuliano decía: Caro cardo salutis, “la
carne es el eje de la salvación”. Ramón
Neira, el obrero de la novela El compadre
de Carlos Droguett, entiende que Cristo ha
pensado el método correcto para atraer al
hombre. El método correcto no ha sido ni
escribir libros ni ser un superhéroe, sino
estar con nosotros en cuerpo y sangre,
pues “el vino vale más que una buena palabra”,
“sintiendo él mismo (Cristo) una leve
ansia de tomar otro poco de vino azucarado,
se levantó de la mesa y fue a llamar a los
criados” y “por eso cogía una jarra de vino,
diez jarras para reclutar a la gente, porque
el vino es buena amarra”.
El cuerpo de Cristo es ‘buena amarra’, es
‘agarrador’ como el pan y el vino, para
hacernos felices no ha querido saltarse la
felicidad de nuestros sentidos (de nuestro
cuerpo-pensamiento).
Después de Cristo, es decir, de un Dios
que es nuestro amigo y que ha puesto su
tienda entre nosotros, un Dios pura inmaterialidad
ya no nos interesa. Los dioses
absolutos (ab-solutus, ab-sueltos, sin relación,
sin alianza) ya no nos conmueven.
Cabe aquí la pregunta de si no es esta la
razón de que muchas personas se alejen
de la fe cristiana: porque les hemos mostrado
un Dios absoluto, un Dios idea, sin
rostro, un patrón de fundo invisible y desencarnado,
un iluminado viviendo en
unas alturas místicas, un moralista que
sólo sabe dar órdenes y juzgar como un
puritano. El papa Francisco lo ha dicho
con toda claridad en una homilía en santa
Marta el año 2013: “Él es quien nos acompaña
y nos enseña a rezar. Y nuestra oración
debe ser así, trinitaria. Muchas veces:
‘¿Pero usted cree?’: ‘¡Sí! ¡Sí!’; ‘¿En qué cree?’;
‘En Dios’; ‘¿Pero qué es Dios para usted?’;
‘¡Dios, Dios!’.
Pero Dios no existe: ¡no os escandalicéis!
¡Dios así no existe! Existe el Padre, el Hijo y
el Espíritu Santo: son personas, no son una
idea en el aire … ¡Este Dios spray no existe!
¡Existen las personas!”. Por lo mismo, la
asamblea no es sólo la posibilidad de un
momento de charla o la instancia de
hablar algunos temas relevantes, aunque
abstractos, es la posibilidad de repensar el
pensamiento de Cristo para encarnarlo en
nuestra vida y en la historia.

10
Lo más identitario de un hombre es su
manera de establecer alianzas con otros.
Si hemos de conocer a alguien, no hagamos
una simple descripción de sus atributos,
conozcamos las amistades y amores
que ha constituido. Dime con quién andas
y qué frutos lograste con este o aquel y te
diré quién eres. Por lo mismo, esta asamblea
es una buena oportunidad para
re-establecer las alianzas que nos han
co-instituido como cristianos y no sólo una
buena oportunidad para hablar de temas
importantes. Es una buena oportunidad
para re-constituir el edificio de los que han
sido convocados por la amistad trinitaria:
“La Iglesia debe estar edificando para
siempre y siempre derrumbándose, y siempre
siendo restaurada. La Iglesia debe
estar siempre edificando, pues está siempre
derrumbándose por dentro y atacada
por fuera; pues ésa es la ley de la vida”
(T. S. Eliot, Los coros de la Piedra).
La asamblea es la manifestación de una
Iglesia que siempre trabaja sobre su
tradición para actualizarla en el presente.
En este sentido, es siempre precaria,
nunca está hecha de una vez y para
siempre. La asamblea intentará pensar
como Cristo mismo lo ha hecho en la
tierra y en el cielo, es decir, pensar con
su Padre y el Espíritu Santo. Por lo tanto,
podría ser manifestación pública y cívica
de que Cristo existe o, mejor dicho, de
que vive aún entre nosotros. Los cristianos
convocados en asamblea podrían
iniciar a pregustar el paraíso, cual eslabón
entre la primera y segunda venida
de Cristo, y transformarla en el lugar
donde finalmente podamos decir: “¡Qué
dulzura, qué delicia convivir con los hermanos
unidos!” (Sal 132,1).
David Solís Nova
Profesor de Filosofía Facultad
de Estudios Teológicos y
Filosofía UCSC

11
Orientación
El aporte de los presbíteros en la
Asamblea Eclesial Latinoamericana
En estos tiempos de pandemia el Papa
Francisco ha querido motivarnos a
tener una experiencia inédita en la vida
de la Iglesia en América a través de lo
que es la Asamblea Eclesial Latinoamericana.
Se trata de la primera instancia
de este tipo y con la particularidad de
ser en modalidad online debido a la
crisis sanitaria que se vive actualmente.
En momentos tan difíciles para la Iglesia
y el mundo entero, brota una luz de
esperanza que nace desde la voz profética
del Papa Francisco que nos recuerda
que en medio de la tempestad siempre
está el Señor (cf. Mc 4,35-41), lo que
también nos permite admirarnos, de un
modo similar a los apóstoles, del poder
manifestado en la acción misericordiosa
del Señor.

12
En medio de los diversos temporales que
le ha tocado enfrentar a la Iglesia en estos
últimos tiempos con situaciones de abusos
de poder, de conciencia y de orden afectivo-sexual,
nos hemos encontrado con un
proceso de cambios sociales que ha desembocado
en la constitución de una Asamblea
Constituyente a nivel nacional, y junto
con esto, una seguidilla de “olas” que se
han dado con la crisis sanitaria del
Covid-19 a nivel mundial, que más allá de
lo estrictamente sanitario, deja al descubierto
la situación de vulnerabilidad del ser
humano ante diversos factores sociales y
políticos que han acompañado este
tiempo.
En medio de este complejo contexto, descubrimos
que no estamos solos, muchas
“olas” nos han azotado y continuarán
haciéndolo, pero el Señor permanece
sereno a nuestro lado, aunque la escena
que cotidianamente nos corresponda contemplar
sea la de un vía crucis.
Desde esta mirada, la participación de los
presbíteros en la Asamblea Eclesial es fundamental,
ya que por el ministerio recibido
nos corresponde acompañar a la porción
del pueblo de Dios que se nos ha confiado,
en comunión y bajo la guía de nuestros
obispos.
La Asamblea Eclesial comienza con un
tiempo de escucha, lo que significa salir de
nosotros mismos y sentirnos Iglesia, venciendo
la tentación del individualismo pastoral
para abrirnos a una experiencia de
comunión espiritual y de caminar juntos.
Para los sacerdotes es una oportunidad de
redescubrirnos en aquella misión que el
Señor nos ha llamado, tal como lo recuerda
el Documento de Aparecida al decir que
somos “discípulos misioneros de Jesús
Buen Pastor” (DA 191-200), que no se logra
si no teniendo “olor a oveja”, como lo expresa
el Papa Francisco.

13
Tener la experiencia de Asamblea Eclesial en
el ‘Tiempo de Escucha’ es también vencer la
tentación de una Iglesia de pastoral de conservación,
para pasar a una pastoral misionera,
lo que se puede comparar a pasar de una
pastoral de agua estancada, que no fluye ni
genera vida, a una donde corren los ríos de
agua viva. Esto, en definitiva, significa una
conversión pastoral que permite valorar el
sentir del pueblo de Dios manifestado en la
experiencia que tienen las comunidades eclesiales
de base, los movimientos, diversos
grupos pastorales, familias cristianas, y en
general, en cada hijo e hija de Dios que quiere
vivir su vocación bautismal; e incluso, en
aquellos que por caminos misteriosos de
Dios, porque el Espíritu Santo fluye donde
quiere y como quiere, se siente impulsado a
actuar en la Iglesia.
Iglesia en estado de escucha significa estar
dispuestos a correr el riesgo de hacernos permeables,
como dice el Papa, saliendo de nuestros
“cobertizos” (cf. EG 270) y dejándonos
mojar por el baño del Espíritu que se expresa
en cada miembro de la Iglesia, especialmente
de los laicos y laicas que han estado buscando
caminos para expresarse.
Esta pandemia nos ha lanzado a organizarnos
pastoralmente como “Iglesia en salida” por
medio de las redes sociales, lo que no solamente
ha significado ver a los ministros de la
Iglesia utilizar estos medios, sino mucho
antes, saber apreciar la manera en como
muchos laicos y laicas utilizan estos medios
con un genuino deseo de expresar su amor a
Dios.

14
Es algo que nos ha complicado la vida,
como lo advierte el Papa Francisco, pero
“… cuando lo hacemos, la vida siempre se
nos complica maravillosamente y vivimos
la intensa experiencia de ser pueblo, la
experiencia de pertenecer a un pueblo”
(EG 270).
Efectivamente, fueron en primer lugar los
laicos y laicas quienes nos enseñaron a los
sacerdotes a usar las redes sociales y nos
mostraron que era posible seguir viviendo
la fe como comunidad y que no podíamos
quedarnos encerrados, porque necesitaban
en este tiempo tan crítico de pandemia
de quien posee el carisma otorgado
por el sacramento del orden que les permite
recibir los beneficios de quien actúa
en persona de Cristo, que necesitaban
escuchar la Palabra y la homilía, que necesitaban
contemplar al Señor Jesús sacramentado,
necesitaban una palabra de
aliento en el dolor cuando perdían a un
ser querido o cuando estaban enfermos,
que necesitaban una bendición aunque
fuera por Whatsapp.
Por eso tenemos que estar los sacerdotes
en esta asamblea, y especialmente para
escuchar, porque todavía es mucho lo
que podemos aprender de nuestros hermanos,
y también es mucho lo que podemos
dar.
Pbro. Pedro Gómez D.
Vicario General y párroco
Iglesia Ntra. Sra. de Lourdes
de Concepción

15
Asamblea Eclesial para América
Latina y el Caribe
Tomando como base los lineamientos que brotaron de la V conferencia General
del Episcopado Latinoamericano y del Caribe realizada en Aparecida (Brasil)
en el año 2007, la Iglesia nos invita a sumarnos a esta nueva Asamblea Eclesial
que en esta ocasión trae una novedad ya que busca reunir a todo el pueblo de
Dios de esta zona geográfica (laicos(as), religiosos(as), diáconos, sacerdotes,
obispos y cardenales) para que juntos podamos reconocer los “signos de los
tiempos” ayudados por la luz del Espíritu Santo.
No por nada el lema elegido para este encuentro dice: “Todos somos discípulos
misioneros en salida” que recalca, por, sobre todo, el tema de la “sinodalidad”
de la Iglesia, palabra que significa “caminar juntos”. Para ello, han comenzado
procesos de escucha, diálogo y discernimiento en todas las diócesis de nuestro
país en las cuales se abordarán las nuevas necesidades y desafíos culturales y
sociales en los que, como Iglesia, estamos llamados a iluminar con el Evangelio
de Jesucristo.

16
Entre los temas que nos presenta el Documento para el camino hacia la Asamblea Eclesial
de América Latina y el Caribe”se encuentran temas tan relevantes y contingentes
como lo son, por ejemplo:
- LA GRAVE CRISIS SANITARIA Y HUMANITARIA
PROVOCADA POR LA PANDEMIA DEL COVID-19.
- LOS PROFUNDOS DAÑOS QUE HA SUFRIDO NUES-
TRO PLANETA DEBIDO AL CAMBIO CLIMÁTICO QUE
AVANZA ACELERADAMENTE.
- EL GRAN AUMENTO DE LA VIOLENCIA QUE SE PERCIBE
EN NUESTRA SOCIEDAD Y QUE IMPIDE EL DIÁLOGO
PARA LA SOLUCIÓN DE LOS PROBLEMAS.
- LA SITUACIÓN DE LOS MIGRANTES QUE SE VEN OBLI-
GADOS A DEJAR SU PATRIA PARA BUSCAR UN MEJOR
FUTURO PARA SUS FAMILIAS.
- LA SECULARIZACIÓN A NIVEL GLOBAL QUE, POCO A
POCO, HA IDO PROVOCANDO QUE LOS DIVERSOS
ASPECTOS RELIGIOSOS Y DE FE, VAYAN PERDIENDO
IMPORTANCIA PARA LA CULTURA Y PARA LOS HOM-
BRES Y MUJERES DE HOY.
- EL DESAFÍO DE DESARROLLAR CON MAYOR FUERZA
UNA PASTORAL URBANA, YA QUE ES EN LAS CIUDADES
DONDE HOY SE DA MAYORMENTE EL ENCUENTRO CON
LAS DIFERENTES CULTURAS Y MODELOS DE PENSA-
MIENTO QUE CONVIVEN EN NUESTRA ÉPOCA.

17
- LA PLENA PARTICIPACIÓN DE LA MUJER EN
LA SOCIEDAD Y EN LA VIDA DE LA IGLESIA.
- LAS DOLOROSAS SITUACIONES DE ABUSO
QUE HAN ACONTECIDO DENTRO DE ELLA.
- EL CLERICALISMO, QUE SUPONE UN PROBLE-
MA PARA PODER VIVIR COMO VERDADERO
PUEBLO DE DIOS QUE CAMINA UNIDO, ENTRE
OTROS.
La asamblea propiamente tal se realizará entre el 21 y el 28 de noviembre de este año, sin
embargo, como ya mencionamos, los trabajos preparatorios de escucha se están desarrollando
en forma de tres encuentros cuyos títulos respectivos son: “Lo más significativo:
Reflexión comunitaria desde la acción pastoral”, “Lo que ha sido atendido y lo que ha sido
olvidado” y “Dibujando el futuro”. Toda esta etapa concluirá a finales del mes de agosto.
Los animamos a participar e involucrarse en estos trabajos de diálogo, pues cada opinión
merece ser escuchada, acogida y discernida.
Sebastián Uribe y
Santiago Hameau
Seminaristas
Seminario Metropolitano
de Concepción

18

19
Ayuda a la Iglesia que Sufre:
Solidaridad en tiempos de
pandemia
‘Ayuda a la Iglesia que Sufre’
(ACN-Chile) abrió una oficina
en Chile en 1998. Desde
entonces, trabajan sin descanso
para responder a las
solicitudes de oración y
ayuda de miles de cristianos
que sufren y de sacerdotes,
misioneros y religiosas, que
por pobreza o persecución,
ven dificultada su labor de
evangelización y de apoyo a
las comunidades más necesitadas
del país y del mundo.
Debido al contexto actual ACN-Chile se ha
visto en la obligación de repensar sus estrategias,
para así continuar con su importante
labor en tiempos de pandemia. En esa línea,
Magdalena Lira Valdés, directora nacional
de ACN-Chile, se refirió a los desafíos que
han debido sortear: “Sin duda la pandemia
se ha convertido en un gran desafío para
realizar nuestro trabajo. Por un lado, las
necesidades de ayuda han aumentado.
También, la crisis económica que ha traído
la pandemia ha impactado en la capacidad
de las personas para hacer donaciones. Por
eso, nuestro trabajo ha sido más desafiante
que nunca”.

20
Tras lo anterior, añadió:
“Sin embargo, nos ha sorprendido la generosidad
de la gente que, a pesar de estar viviendo
en primera persona las dificultades de la pandemia,
siguen apoyando nuestros proyectos.
Hay una frase que siempre nos repetimos: ‘El
hombre es mucho mejor de lo que pensamos’.
Esto lo hemos visto y vivido durante todo este
tiempo”.
“La parroquia abre sus puertas a todos,
entregando alimentos, baños a las personas
en situación de calle, entre otros. Sus
oficinas y salones parroquiales se dañaron
con el terremoto de 2010 y desde entonces
funcionan en instalaciones provisorios.
Nosotros queremos ayudar a reconstruir
sus dependencias”.
Respecto de las campañas que actualmente
existen para ayudar a la comunidad, Magdalena
comentó que actualmente están apoyando
a la comunidad de la parroquia San
Saturnino, en la comuna de Santiago, donde
las personas se han visto muy afectadas económicamente
producto de la pandemia.

21
“También, apoyamos a comunidades que han
sido víctimas de la violencia que produjo el
estallido social. De manera especial a los fieles
de la parroquia La Asunción, en Santiago, que
fue incendiada. Estamos en un proyecto de
rehabilitación de sus salones parroquiales,
para que la comunidad tenga un lugar donde
reunirse”, declaró.
En ese sentido, la directora nacional de
ACN-Chile se refirió al foco de trabajo que
institución han desarrollado a lo largo del
tiempo: “Uno de nuestros principales focos ha
sido apoyar a los sacerdotes más necesitados
en Chile y el mundo, de manera que puedan
tener lo mínimo para cubrir sus necesidades
básicas. Ellos permanecen con sus comunidades,
pues no sólo ayudan en la evangelización
y labores pastorales. En muchos lugares son
ellos los que llevan comida, artículos de higiene
personal y educación a quienes no los
tienen. Nosotros hemos procurado estar con
ellos, para que puedan seguir llevando esa luz
de esperanza a los más abandonados”.

22
“De la misma forma, nos han llegado
muchas solicitudes de ayuda a religiosas.
En muchos casos, ellas subsistían gracias
a los sueldos que recibían como profesoras,
enfermeras, etc. Al cerrarse las escuelas,
han quedado sin ningún recurso. Y al
igual que los sacerdotes, a pesar de todo,
han seguido desempeñando una labor
social fundamental. Los más necesitados
recurren a ellas buscando ayuda. Por otra
parte, muchas religiosas contemplativas
viven de la venta de hostias y elementos
litúrgicos. Al disminuir las misas, han
dejado de comprarles. Para ACN Chile es
fundamental apoyar a las religiosas para
que puedan continuar con su misión”,
agregó.
Finalmente, respecto de la labor de la
comunidad creyente en tiempos difíciles,
Magdalena destacó que dicho trabajo es
fundamental debido a que no se trata
sólo de entregar ayuda material. “Nosotros
debemos ir más allá: a través de
nuestras acciones debemos demostrar
que todos, sin distinción de ningún tipo,
somos hijos de Dios y por eso, tenemos la
misma dignidad como seres humanos. En
todo lo que hagamos, en nuestras palabras
y actos, debemos intentar que quienes
reciben nuestra ayuda se sientan
como hijos queridos de Dios, que se den
cuenta que no están solos. Estoy convencida
que, como creyentes, debemos
entregar consuelo y también esperanza”.
Si alguien quiere sumarse a estas campañas, lo
puede hacer en la web www.acn-chile.org o a través
de una transferencia a la Cuenta Corriente 11175-9
del Banco Santander, a nombre de Ayuda a la Iglesia
que Sufre, RUT 73.537.400-1, mail: acn@acn-chile.org
, asunto: causa a ayudar.

23
Virgen del Carmen:
Madre y patrona de Chile
La Santísima Virgen del Carmen es invocada
como Reina y Madre de Chile, Patrona y Generala
Jurada de las Fuerzas Armadas y de Orden. Títulos
que son fruto del reconocimiento especial de
la protección de la Madre de Dios a lo largo de la
historia.
"Varios años antes de que Pedro de Valdivia
iniciara la conquista de Chile, según el
actual emplazamiento del territorio
nacional, ya se encontraba activo el
primer templo mariano del país. Se trataba
de una pequeña ermita erigida en el
poblado de La Tirana en honor a Nuestra
Señora del Carmen. La fecha de su establecimiento
es incierta, pero se sabe que
fue fundada por el sacerdote mercedario
Fray Antonio de Rondón".

24
Más tarde, en 1595 los padres Agustinos
llegaron a Chile, específicamente,
a la ciudad de Concepción e introdujeron
la devoción a la Virgen del
Carmen, fundándose ahí la primera
Cofradía del Carmen, en 1648. Este
fervor religioso se extendió rápidamente
en el pueblo, siendo la Carmelita
acogida con especial amor. Esto se
manifestaba cada 16 de julio, día en
que la Iglesia celebraba la Fiesta de
Nuestra Señora del Carmen, y cuya
imagen los padres agustinos sacaban
en procesión por las principales calles
de la ciudad de Concepción.
Dada esta confianza y amor especial del
pueblo chileno por la Virgen del Carmen, es
que comenzó a ser invocada en los escenarios
más importantes, y de manera muy
especial en la lucha por la Independencia
Nacional donde se pidió su maternal intercesión.
Años de historia transcurrieron, en los que la
Virgen estuvo presente siempre en el alma
de todos y también en importantes acontecimientos,
tales como la Batalla de Chacabuco
y Maipú.
Ahora último, a partir de la moción originada
por quince Diputados de la República, se
aprobó el Proyecto de Ley que declara feriado
nacional el 16 de julio, día en que la Iglesia
celebra la Fiesta en memoria de la Virgen
del Carmen.
De esta manera, se hace un público reconocimiento
a la importancia de Nuestra
Señora del Carmen en nuestra Patria, pues
en los campos y ciudades se la sigue invocando
como Madre y Reina.

25
Las crónicas de la campaña hacen frecuente
mención de oficiales y soldados que se encomendaban
a Ella al entrar a los campos de batalla.
Además, no sólo los marinos y militares la
invocaban, sino también los 44 capellanes que
asistieron espiritualmente a las tropas y que en
nombre de la Carmelita motivaron y alentaron a
los soldados a ser valientes y confiados. Se sabe
también que el Capellán Camilo Ortúzar Montt
impuso el escapulario a toda la tripulación de la
Esmeralda y a su capitán Arturo Prat (El Arca de
las Tres Llaves, página 28), quien al momento de
morir en la rada de Iquique lo llevaba puesto.
"El comandante Miguel Grau se lo devolvió después
a su viuda y se conserva actualmente en el
Museo del Carmen de Maipú".
En ese contexto, si la Independencia había
representado un primer momento de devoción
nacional a la Patrona, el segundo gran momento
fue durante la Guerra del Pacífico. Este
hecho puso a dura prueba la energía y el
patriotismo del pueblo chileno, situación en la
que afloró espontáneamente en todos los corazones
la invocación a la Madre de Chile.

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27
Inicio de clases: 19 de agosto 2021
HÍBRIDA
Presencial y virtual con apoyo
de la plataforma ev@postgrado.
En caso de contingencia que no
permita la presencialidad,
las clases se realizarán de manera
remota vía aplicación zoom
y con apoyo del Entorno Virtual
de Aprendizaje (EVA postgrados).
$200.000

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Reflexión
Hacernos cargo de nuestros dolores
para soñar la Iglesia que queremos
Al fin una buena noticia. Después de tanto ver en la televisión
asaltos, portonazos o de escuchar en la radio inundaciones
y accidentes nos llega esta tremenda novedad, llena
de cosas positivas y que tiene la ventaja que podemos ser
actores y protagonistas de ella. Estamos en pleno periodo
de escucha de la Asamblea Eclesial Latinoamericana y del
Caribe y esa es la gran novedad. Más de alguno se preguntará
qué tiene esto de bueno para mí, la iglesia o la sociedad.
Y eso es lo que vamos a comentar en estas líneas.
En 2018 el CELAM (Conferencia del Episcopado Latinoamericano
y del Caribe) concluyó que era el momento de realizar
una nueva Conferencia General, al haberse cumplido los
10 años desde el encuentro de Aparecida, que tuvo lugar en
Brasil entre el 13 y 31 de mayo de 2007.
Con esa idea, los obispos fueron a encontrarse con el Papa
Francisco a Roma. Cabe recordar que el entonces cardenal
Bergoglio fue quien encabezó el equipo de redacción del
documento conclusivo de la V Conferencia General. El documento
de Aparecida es una de las claves de lectura para
interpretar el pontificado de Francisco y para entender el
proceso en que nos encontramos hoy.

29
En Aparecida, al día siguiente de su elección
como redactor, Bergoglio invitó a evitar una
Iglesia autosuficiente y autorreferencial, y
soñó con una Iglesia capaz de llegar a todas
las periferias humanas. Ese tema también
quedó bien presente en el Documento de
Aparecida, donde se destaca la invitación a
una nueva y feliz etapa misionera, como lo
destaca el mismo CELAM.
El documento cumplió el objetivo de presentar
la actividad evangelizadora como una
oferta de vida digna y plena para la gente. De
igual manera se insiste en una misión entusiasta
y generosa, que llegue a las periferias y
que ponga el acento en las verdades centrales
y más bellas del Evangelio. Invita a crecer
como discípulos humildes y disponibles,
amigos de los pobres y enamorados de nuestros
pueblos latinoamericanos. El lenguaje y
los acentos de Bergoglio están por todas
partes, sin que el documento deje de ser una
auténtica obra colectiva con un estilo heterogéneo
y muchas manos detrás.

30
Estas ideas ya presentes en el cardenal Bergoglio
y que se plasman en el Documento
de Aparecida, son de alguna manera, las
mismas ideas y líneas de acción que orientan
el ministerio del ahora Papa Francisco y
que están presentes de diversas maneras
en Evangelii Gaudium y en todas sus exhortaciones
apostólicas, catequesis y documentos
pontificios. De tal manera que se
puede establecer claramente una línea de
continuidad entre el pensamiento del
cardenal Bergoglio y el Papa Francisco.
Con estos antecedentes, no resultó extraño
que el Papa Francisco les dijera a sus hermanos
obispos de América Latina y el
Caribe que Aparecida aún tenía mucho
fruto que aportar y que recomendaba la
realización de una Asamblea Eclesial con
todo el Pueblo de Dios que peregrina en
este continente.

31
Entonces, aquí estamos en el medio de
esta Primera Asamblea Eclesial que ha
sido convocada en medio de la Pandemia
con todos los problemas y desafíos que ella
conlleva y que nos llama “Como discípulos
misioneros, reunidos sinodalmente en la 1ª
Asamblea Eclesial de América Latina y El
Caribe, haremos memoria de lo acontecido
en la V Conferencia General en Aparecida, y
mirando contemplativamente nuestra realidad
con sus desafíos, reavivaremos nuestro
compromiso pastoral para que, en Jesucristo,
nuestros pueblos tengan una vida plena
en y por los nuevos caminos hacia el
2031+2033.”
Así, nuestra Asamblea no es solo de obispos
o de una élite, como también menciona
el Santo Padre: “élites ilustradas de una
ideología o de otra”, sino de todo el Pueblo
de Dios. De ahí su carácter sinodal, que
literalmente significa “caminar juntos”:
laicos, laicas, religiosos y religiosas, diáconos,
seminaristas, sacerdotes, obispos y
todas las personas de buena voluntad que
deseen ser parte de este caminar en
comunidad.
Es un momento privilegiado en la vida de
nuestra iglesia, en el cual el Espíritu Santo
sopla con fuerza y nos invita a ser parte de
este proceso. Es una instancia que yo, ni
en mis mejores sueños, creí que se fuese
a concretar.

32
En el “Documento para el Camino” que es la
base del proceso de escucha- tiempo en
que los puntos de vista de cada uno de
nosotros y nosotras se recogen con el
mismo valor: equivalente a una persona un
voto- se listan y desarrollan los temas que
están pendientes desde Aparecida y desde
allí se nos invita a responder personal o grupalmente
a ellos. El conversar con otros, el
escucharnos, es sentir el soplo de la Ruah
hablando a través de los otros y mostrándonos
como dice el cuestionario los dolores y
esperanzas de esta Iglesia que está invitada
a caminar se manera sinodal, es un ejercicio
que ya tiene valor en sí mismo.
Ha sido y está siendo un tiempo muy desafiante
en que nos llama a sentirnos hermanos
y hermanas con todo este continente, a
compartir nuestros sueños por una Iglesia
que tenga a Cristo en el centro y plenamente
al servicio de los más excluidos profundizando
nuestra vocación de discípulos y
discípulas misioneros o misioneras.
La invitación es a ingresar a la página
www.asambleaeclesial.lat y al compartir
nuestros dolores, sueños y esperanzas y
hacernos hermanos o hermanas con las
personas de buena voluntad que peregrinan
en esta América Morena.
Carmen Gloria Donoso
Presidenta de la Comisión Nacional
de Justicia y Paz de la CECh e integrante
de la Comisión de Animación para Chile
de la Asamblea Eclesial Latinoamericana
y del Caribe.

33
VICARÍA
PARA LA
EDUCACIÓN
La importancia del
acompañamiento espiritual
en tiempos inciertos
La pandemia ha representado un desafío
en diferentes ámbitos. Uno de ellos se
vincula directamente con la forma en la
que se establecen las relaciones interpersonales,
así como también las formas de
encuentro.
La crisis sanitaria ha dado paso a la reestructuración
de rutinas: de la presencialidad
al trabajo remoto. En ese marco, el
rubro de la educación ha actuado de forma
concisa y eficaz, priorizando el bienestar de
toda la comunidad educativa.
Dicho enfoque de trabajo a resignificado la
importancia del acompañamiento espiritual,
entendiendo este último como la
oportunidad de ‘nacer de nuevo del agua y
del Espíritu’ (Jn 3, 3 – 5).
En ese sentido, los Colegios de Iglesia han
diseñado diferentes planes y actividades
para dar realce a esta importante línea de
acción. Bajo esa perspectiva, Leonardo
Torres, encargado Pastoral del Liceo de
San Francisco de Asís de Arauco, se refirió
a la importancia del acompañamiento espiritual
e instancias formativas, destacando
que dicha instancia se traduce en una
oportunidad para que las personas “hagan
lectura de su propia historia como un
relato de salvación en la que Dios se hace
presente de diversas maneras y momentos”.

Tras lo anterior, añadió: “Más aún en
34
estos tiempos de pandemia donde las personas
necesitan momentos e instancias de
compartir la vida, expresar las difíciles
situaciones que han vivido como familia
por la enfermedad o pérdida de algún ser
querido. Dios tiene siempre algo que decirnos
sobre todo en estos tiempos”.
Leonardo Torres
Encargado Pastoral del
Liceo de San Francisco
de Asís de Arauco
Respecto de las actividades que se llevan a
cabo dentro de la comunidad, Leonardo
explicó que todos los lunes se reúnen, a
través del fanpage del colegio, con el fin de
reflexionar y comentar un texto bíblico, por
ejemplo. También, se conformó una comunidad
virtual de oración, donde se reza por las
diversas necesidades de la comunidad educativa,
“donde también hemos sido testigos
del poder de la fe y la oración en los enfermos”.

35
Por otra parte, la encargada Pastoral del
Colegio San Pedro Nolasco, Pía Ainardi,
relató que, en el caso de su comunidad, el
acompañamiento espiritual se ha realizado a
través de las diversas nuevas plataformas,
abordando las temáticas que surgieron a raíz
de la crisis sanitaria.
“Estas actividades nos han permitido
generar lazos de confianza y ha dado paso
a una mejor comunicación entre la comunidad
y el equipo de pastoral, pues existe
una mayor visibilización respecto de las
necesidades de toda la comunidad educativa”,
señaló Pía Ainardi.
En ese sentido, la encargada Pastoral
comentó que la relevancia del acompañamiento
espiritual es cada vez más trascendente
en todas las personas. “Tenemos
que conectarnos con nuestro ser y con lo
que Dios quiere para nosotros en un
mundo que está resultando más incierto
de lo normal. Esto hace que estemos más
propensos a sufrir ansiedad o desconexión
de nosotros mismos. El acompañamiento
espiritual nos permite tener los
Pía Ainardi
Encargada Pastoral del
Colegio San Pedro Nolasco
pies en la tierra y comprender que lo que
estamos viviendo es parte de un proceso y
que no estamos solos”.

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VICARÍA
PARA LA
EDUCACIÓN
Alta participación de
colegios en inducción sobre
la Asamblea Eclesial de
América Latina y el Caribe
Durante la jornada del recién pasado sábado 19 de junio de 2021 se llevó a cabo el
primer encuentro entre facilitadores de la experiencia de la Asamblea Eclesial de
América Latina y el Caribe en la Arquidiócesis de la Santísima Concepción.
La jornada fue organizada por la Vicaría
Pastoral, y contó con la participación de
más de 150 asistentes. El encuentro
tuvo por objetivo dar a conocer, a las
diferentes comunidades y diócesis, los
puntos más relevantes asociados al
Tiempo de Escucha, así como también
internalizar el proceso de inscripción a
través del formulario disponible en
asambleaeclesai.lat
La instancia inició con la bienvenida de
Monseñor Fernando Chomali, Arzobispo
de Concepción, quien agradeció el
esfuerzo realizado por la Vicaría. “Quisiera
pedirles que tengamos claro lo que dice
el Papa Francisco: ‘El todo es más por las
partes’. Esta es una oportunidad para que
salgan de sus parroquias, colegios, capillas,
para mirar con mayor amplitud a
toda la Iglesia. Esta es una gran oportunidad
para salir de nuestras fronteras y
sorprendernos”.

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El encuentro contó con la participación
de Eugenio Hernández, coordinador de
Movimientos, así como también con la
presencia de Carmen Gloria Donoso,
presidenta de la Comisión Nacional de
Justicia y Paz de la Conferencia Episcopal
de Chile (CECh) e integrante de la
Comisión de Animación para Chile de la
Asamblea Eclesial de América Latina y el
Caribe.
En ese marco, la jornada contó con la
participación de los diferentes estamentos
de la Arquidiócesis de la Santísima
Concepción, entre ellos, la Vicaría Pastoral
de Educación, y con ello, cerca de 24
establecimientos representantes de
colegios de Iglesia.
Bajo esa línea, Eric Zapata, encargado
pastoral de los Sagrados Corazones,
relató que se trató de una experiencia
tremendamente enriquecedora “en la
que se logró compartir nuestras vivencias
y anhelos. Más aún en tiempos de
pandemia. Durante el encuentro, y posteriormente
en los grupos de trabajo, se
planteó lo complejo que ha sido evangelizar
de manera digital. También, se
abordó del proceso de salida de la Iglesia;
es decir, lograr evangelizar fuera de
los templos y reencarnar el Evangelio en
el prójimo a través de la fraternidad”.

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Asimismo, Norma Riquelme, encarga pastoral
del colegio San Francisco de Asís de
Lota, destacó la importancia de esta experiencia
única. “El bloque en el que estuvimos
en salas de trabajo, fue muy enriquecedor.
Escuchar las experiencias de los demás
agentes pastorales que pese a las dificultades
continúan con su labor, una labor hermosísima.
Esto, te entusiasma a seguir
trabajando, pues uno se reconoce como
aporte”.
Tras lo anterior, agregó: “Pensar que esta
Asamblea Eclesial, que el Papa Francisco,
que los Obispos, quieren escuchar tu experiencia
para saber qué camino seguir con la
Iglesia es tremendo. Te hace sentir muy
bien, importante. Que tus vivencias, por
muy sencillas que sean, son consideradas:
qué nos gustaría que se hiciera, qué debemos
cambiar. He revisado la página y ver
que mi situación se repite en Perú, en Bolivia.
Sólo queda esperar y ver cómo tu
opinión se toma en cuenta para la redacción
de un documento”.

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FUNDACIÓN DE EDUCACIÓN
¿Cómo viven en la fe los jóvenes de hoy?
Actualmente cuando pensamos en los jóvenes, ya sea en sus gustos, acciones
y movimientos lo primero que viene a nuestra mente son las redes
sociales, modas, música y algunas ideas vanguardistas, pero ¿qué pasa con
la juventud y la espiritualidad?
Con el pasar de las décadas la conexión entre espiritualidad
y grupos juveniles es cada vez más escasa
con respecto a otras generaciones, es por eso que
nace la pregunta acerca de qué significa la fe en los
niños, niñas y jóvenes de hoy.
Para responder esta pregunta conversamos con tres
estudiantes de distintos establecimientos educacionales
del Arzobispado de la Santísima Concepción,
buscando conocer -desde una mirada más cercanacuál
es el motor que impulsa sus acciones hacia una
labor pastoral, sobre todo, en épocas donde las acciones
espirituales comunitarias están ausentes de la
vida de los jóvenes.

40
Ignacia Perez es alumna del Instituto de Humanidades
de Chiguayante y tiene 10 años, actualmente
cursa 4to básico y una de las actividades
que más le gusta es dibujar. Espera ansiosa su
primera comunión desde hace un tiempo y hoy
se encuentra catequesis para concretar esta
meta.
Cuando le preguntamos acerca de cómo se
acercó a la espiritualidad comenta que: Cuando
era más pequeña iba con mi abuelita y mamá a
la iglesia. Lo que más me llamaba la atención
era la hostia, la veía y me daban muchas ganas
de comérmela” dice mientras ríe con el recuerdo.
Confiesa que una de sus estrategias para sentirse
segura es rezar. Cuando está asustada o
tiene miedo habla con dios por las noches para
pedirle apoyo.
“Cuando iba a celebrar mi cumpleaños
estaba muy nerviosa, porque hace mucho
tiempo no veía a mi amigo por la pandemia,
no podía dormir. Ese día recé para
estar más tranquila”.
La espiritualidad en los niños y niñas es
una herramienta que los guía en momentos
difíciles, su primera conexión con Dios
va enlazada con la protección y confianza,
otorgando seguridad en situaciones de
fragilidad donde necesitan a alguien que
los acompañe en los desafíos de la infancia.
Por lo mismo, Ignacia Perez nos comenta
acerca de su conexión emocional con el
padre Pepe, capellán del Instituto de
Humanidades de Chiguayante durante 10
años, el cual fue muy querido por los jóvenes,
ya que acercó la fe desde el juego y la
risa, como recuerda Ignacia al mencionar
su bautizo con el padre. “Cuando pienso en
él me pongo muy contenta”, agregó.
Ignacia Perez
Alumna Instituto Humanidades
de Chiguayante

41
Otro estudiante con el que conversamos
acerca de su relación con la espiritualidad
fue Sebastián Lobos, alumno del
Instituto de Humanidades de Coronel
quien cursa segundo año medio. Sebastián
tuvo su primer acercamiento a la
iglesia similar a Ignacia: junto a su
abuela. “Lo que más me ha gustado hacer
con la pastoral es ayudar a niños con
comida, juegos y compañía, porque ellos
no tienen nada y durante ese momento
disfrutan”.
Sebastián confiesa que la fe no es algo que
esté de forma constante en su día a día, pero
Sebastián Lobos
Alumno del Instituto de
Humanidades de Coronel
le gusta. No así a sus compañeros que no participan
de las actividades pastorales o no comparten
las mismas creencias que él. Durante la
pandemia su participación en actividades
comunitarias se ha reducido en un 100%, ya
que a raíz de la situación sanitaria estas
ayudas se han suspendido con el fin de no
exponer a las personas.

42
Por otra parte, hablamos con Javiera Salazar,
estudiante de 4to medio en el Liceo La
Asunción. Javiera participaba, hasta antes
de la pandemia por Covid-19, en la pastoral
juvenil del liceo y en la pastoral de la
parroquia del mismo lugar. Para ella Dios
está presente en cada acción de su vida y
guía su servicio pastoral.
Ha participado en actividades como cenas
de navidad para gente en situación de
calle, visita a hogares de ancianos y misiones.
“Lo que más me gusta es participar,
todo lo que hace la pastoral me gusta, sobre
todo, lo que está relacionado con el servir.
Cuando ayudo a las personas les digo que
no se queden con mi rostro ni que yo lo hice,
sino que Dios obró en mí para que esto
pasara, él a través de mí permitió esta
ayuda”, comentó.
En su caso quien inspiró su labor pastoral fue
una profesora del liceo que la invitó a ser
parte de este trabajo comunitario desde muy
pequeña.
La crisis de participación pastoral en los jóvenes
es una realidad latente en la iglesia, por lo
mismo estos estudiantes destacan entre ellos
al hacer práctica su fe en distintas actividades,
pero ¿qué pasa con la mayoría?,¿cuál es nuestra
labor pastoral para con la juventud?, ¿qué
método implementaremos para acercar a
ellos la espiritualidad en sus vidas? Como
sociedad debemos pensar una estrategia que
los incluya, cautive y motive a la acción, sobre
todo, en estos tiempos de crisis donde todas
las personas necesitan acompañamiento,
ayuda y cuidados.
Javiera, a diferencia de Ignacia y Sebastián,
no tuvo la motivación principal de participar
en actividades pastorales desde el
hogar, pese a que su familia sea católica,
ellos no participan de la misma forma.
Javiera Salazar
Estudiante del Liceo La Asunción

Iglesia de Concepción-Católicos Chile
Iglesia de Concepción
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